DANDO FORMA CON DOS DEDOS

Y se dejan hacer
cuando les puede la gravedad.

Siquiera lo pensaran,
harían por temblar el labio
y sudarían como cuando niñas.

Es por la fuerza que ejerce la tierra hacia su centro.

Su valor es 9,81 metros por segundo
variables con los años
que tiran de ti en dirección contraria al cielo.

Es natural.
Le sale de una forma natural.
Guarda el sí para el día
en que ninguno quiera un sí.

Por eso ahora se dejan hacer,

cuando les ha vencido la gravedad.

Y ahora me saldréis con machista y malhechor.

Y yo replicaré sin razón compartida:

Cuando el machismo es realidad,
no te enojes.
Cuando tus síes dejen de servir
y repitan tercero de primaria los noes que perseguimos,
no te enojes.
Cuando seas tan guarra
que pierdas el paso en, de otros, sueños y guarradas,
no te enojes.

No te enojes.
Como no me enojé yo
el día en que te respetó la gravedad y no
me dejaste hacer, dando así forma y sentido
al placer que ahora te esquiva y te hace
tan poco deseable como fácil y mayor.