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en el surgimiento de
las empresas recuperadas
por los trabajadores en
la República Argentina
Diego Bentosela1
Resumen
Revista Idelcoop,
No 224, El papel de los Resumo
sindicatos en el surgi-
miento de las empresas
recuperadas por los O papel dos sindicatos nas origens das empresas recuperadas pelos tra-
trabajadores en la Re- balhadores na República Argentina.
pública Argentina
ISSN 0327-1919. P.
100-119 / Sección: 1
Estudiante de grado de la Licenciatura en Ciencias Antropológicas, Facultad
Reflexiones y Debates de Filosofía y Letras, Universidad de Buenos Aires.Universidad de Buenos Aires.
Correo electrónico: diegobentosela@gmail.com.
Diego Bentosela
Abstract
REFLEXIONES
Y DEBATES 101
El papel de los sindicatos en el surgimiento de las empresas recuperadas por los trabajadores en la República Argentina
REFLEXIONES
Y DEBATES 103
El papel de los sindicatos en el surgimiento de las empresas recuperadas por los trabajadores en la República Argentina
nual_ sindicatos_en_argentina.html, última fecha de acce- trabajadores y de sus familias; y tomar la ini-
so: 16 de marzo de 2018. ciativa en la lucha por la recuperación de los
REFLEXIONES
Y DEBATES 105
El papel de los sindicatos en el surgimiento de las empresas recuperadas por los trabajadores en la República Argentina
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El papel de los sindicatos en el surgimiento de las empresas recuperadas por los trabajadores en la República Argentina
yo se basó en asesoramiento legal; un 4% Por otro lado, según Palomino,23 los sindi-
reflejó un apoyo parcial, a través de comida catos no se comportaron uniformemente.
y logística durante el conflicto y el manteni- Hubo algunos que alentaron y hasta pro-
miento de la red de seguridad social, y por tagonizaron este tipo de experiencias al
último, un 5% señaló que obtuvieron apoyo ofrecer una respuesta rápida y concreta de
sindical al comienzo del proceso pero que acompañamiento a los trabajadores, pero
luego desapareció, al encaminarse la reso- hubo otros, la mayoría, que se debatieron
lución del conflicto por fuera de los ámbitos entre la ambigüedad y el abandono a sus
de actuación gremial tradicionales. Si ahora afiliados. Partamos de la última de las opcio-
sumamos todas estas variantes, se llega a un nes, es decir, del caso en donde los sindicatos
44% de algún tipo de apoyo, mientras que, permanecieron al margen de los procesos
por otro lado, aparece un contundente 42% de recuperación, y cuestionaron incluso las
que afirma que el sindicato no jugó ningún acciones desarrolladas por los trabajadores.
rol en el conflicto y abandonó a su suerte a Para que esto resulte comprensible, no de-
los trabajadores, y un 8% habla de un apoyo bemos olvidar que el fundamento originario
directo a la patronal.21 del sindicalismo en la Argentina y también
en el mundo es el de defender las fuentes
En el relevamiento del 2014, se verificó en de trabajo ante el capital. Sin embargo, en
cuanto a la relación actual de las ERT con el caso de que un trabajador fuese despedi-
sus sindicatos, que en un 54% de los casos do o perdiese su condición de asalariado, el
el vínculo se mantuvo, frente a un 45% que accionar sindical también implica que el gre-
se encontró en el relevamiento de 2010. El mio le permita continuar participando de las
cambio más notable entre un relevamiento y reuniones gremiales y, fundamentalmente,
otro se observa en el tipo de relación, es de- le posibilite mantener su obra social y la de
cir, entre los trabajadores de las ERT y los sin- su familia. Es decir, se le mantiene la cober-
dicatos. En el 2014, se vio que en un 47% de tura y se lo impulsa a una reubicación en el
los casos, los trabajadores seguían afiliados mercado laboral. Hasta que esto suceda, por
al sindicato con plenos derechos, y que en lo general no se abandona al trabajador. La
un 33% basaban su relación principalmente posibilidad de la autogestión surgió, muchas
en el uso de la obra social. En el relevamiento veces, de los propios delegados gremiales
anterior, los porcentajes eran de 36% y 49%, de base frente al inminente cierre de la em-
respectivamente, por lo que el tipo de rela- presa, y por eso las representaciones de los
ción principal prácticamente se invirtió. En asalariados y de los obreros de las empresas
cuanto al rol de los sindicatos durante el con- recuperadas no difieren sustancialmente.24
flicto, podemos agrupar los datos según tres
actitudes diferentes: apoyo: 64%; indiferen- En consecuencia y según Arias,25 se pueden
cia: 22% y oposición: 14%.22 Estos datos dan identificar en la historia de los nacimientos
cuenta de que los trabajadores observan de las ERT dos posibles estrategias de los
que con el tiempo se consolida la relación sindicatos al enfrentar la constitución de una
entre las ERT y los sindicatos, y que, según su ERT: un sindicato no implicado, descripto en
perspectiva, hubo apoyo en más de la mitad la mayoría de las situaciones y que da cuenta
de las empresas. de la ausencia del sindicato en el momento
23
Palomino (2005).
21
Ídem. 24
Dávolos y Perelman (2003).
22
Programa Facultad Abierta (2014). 25
Arias (2008).
En este caso, y en ausencia de los sindicatos, Una cooperativa es una asociación autóno-
las ERT fueron apoyadas por organizaciones ma de personas que se han unido volunta-
que nuclean a las empresas recuperadas, tales riamente para hacer frente a sus necesidades
como el Movimiento Nacional de Empresas y aspiraciones económicas, sociales y cultu-
Recuperadas (MNER), la Federación Argentina rales comunes por medio de una empresa
de Cooperativas de Trabajadores Autoges- de propiedad conjunta y democráticamente
tionados (FACTA), la Federación ACTRA y la controlada.
Asociación Nacional de Trabajadores Auto-
gestionados (ANTA). Estos movimientos res- Para seguir profundizando, podemos citar a
pondieron a los pedidos de estos colectivos, Drimer y Kaplan quienes definen a una coo-
difundieron la experiencia de recuperación de perativa de trabajo como a aquellas que:
diversos puestos de trabajo y representaron
apoyo político, económico y jurídico para au- agrupan a trabajadores manuales o intelec-
togestionar las unidades productivas.26 tuales (obreros, técnicos, profesionales, etc.)
y se proponen fundamentalmente el ejer-
En el mismo sentido, uno de los temas en cicio en común de sus tareas productivas,
donde los sindicatos hacen mayor hincapié oficios o profesiones, con el objeto de pro-
para negar el apoyo se encuentra en el he- porcionarles fuentes de ocupación estables
cho de la conformación de la cooperativa y convenientes.28
de trabajo. Es sabido que se trata de la única
forma legal que se admite en Argentina para Con estas definiciones podemos ahora inten-
el desarrollo de prácticas colectivas. Es más, tar separar una cooperativa per se de una ERT.
una de las razones de este rechazo radica en Para tal fin nos basaremos en Slutzky, Di Lore-
que muchas de las cooperativas existentes to y Rofman29 quienes señalan tres coyuntu-
son falsas y creadas a partir de maniobras ras que, en nuestro país y en los últimos años,
empresariales para precarizar a los trabaja- propiciaron una multiplicación de estas enti-
dores, ya que encubren rebajas de salarios dades. En primer lugar, la oleada de privati-
y quita de aportes patronales a las cargas zaciones, durante el período 1990-1993, en
sociales.27 Además, también es cierto que un la cual muchos trabajadores y trabajadoras
trabajador autogestionado y miembro de la del sector público se vieron arrojados al des-
cooperativa, en algún punto, es “dueño” de la empleo. El segundo momento corresponde
misma y esto lo apartaría de la cobertura sin- a los años posteriores a la crisis del tequila,
26
Ruggeri, op. cit. 28
Drimer y Kaplan (1981), 178.
27
Antivero y Elena (2014). 29
Slutzky, Di Loreto y Rofman (2003).
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El papel de los sindicatos en el surgimiento de las empresas recuperadas por los trabajadores en la República Argentina
que ocasionó el cierre de numerosas indus- Adabor y Zanón, una pequeña muestra
trias. Por último, ya en los primeros años de de presencia sindical en el origen de
este siglo, las cooperativas que se formaron
luego del quiebre o abandono de las empre- las ERT
sas por parte de los dueños. Como veremos, hubo sindicatos que, al con-
trario de la gran mayoría, fueron pioneros
En los dos primeros momentos señalados con respecto al reconocimiento de los tra-
por los autores, nos encontramos con traba- bajadores autogestionados como parte de
jadores y trabajadoras que deciden realizar su colectivo de representación. Tales son los
emprendimientos autogestivos, y para ello casos de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM),
conforman cooperativas de trabajo. Por el Seccional Quilmes, y la Federación Gráfica
contrario, en el tercer período, la conforma- Bonaerense. En este último caso, ellos han
ción de esta supone un momento previo de cambiado su postura inicial con respecto a
conflicto entre los dueños anteriores y los las ERT, ya que en un primer momento no
trabajadores y las trabajadoras, que preten- brindaron su apoyo a estas experiencias,
den recuperar la unidad productiva y lograr pero en la actualidad se convirtieron en pro-
la expropiación de esta o de las maquina- motores de las empresas recuperadas.30
rias. Es decir, en el caso de las fábricas recu-
peradas, la conformación de la cooperativa Otro de ellos es la fábrica de Cerámicos neu-
es subsidiaria de la recuperación. En con- quina Zanón, cuyos trabajadores y trabajado-
secuencia, el análisis de la vinculación de ras fueron testigos de una acción sindical en
las estructuras sindicales con experiencias un doble sentido, es decir, a favor y en contra
cooperativas no necesariamente se ajusta a de ellos y de ellas. El 43% de las ERT manifes-
aquel que podría hacerse con relación a las tó que el cuerpo de delgados cumplió un rol
empresas recuperadas, ya que su conforma- activo durante la recuperación,31 es decir que
ción no da cuenta de un espíritu cooperati- en el momento de la formación de las ERT
vista o solidario, ni tampoco se asientan en no existió un apoyo orgánico de los sindica-
presupuestos de la economía social o “alter- tos, sino que en una gran cantidad de casos
nativa”. Por el contrario, son respuestas de (43%) fue llevado adelante por los delegados
resistencia colectiva a un particular momen- de las comisiones internas que contaban con
to de la relación, siempre conflictiva, entre el cierta experiencia organizativa. En estas si-
capital y el trabajo. Sin duda, es indispensa- tuaciones, los delegados impulsaron la toma
ble tener presentes las configuraciones que en reclamo de las prestaciones adeudadas
se trazan en cada uno de los casos para des- que luego, frente a la falta de respuesta por
plazar, de alguna manera, la estrategia sin- parte de la patronal, desemboca en la puesta
dical de tomar como “dueño” al trabajador en producción por parte de los trabajadores
de una empresa recuperada. Por lo tanto, y de las trabajadoras de la unidad productiva.
puede decirse que el comportamiento sin- La experiencia política y el acceso a la infor-
dical frente a una situación novedosa, como mación que tienen los delegados gremiales,
lo fueron en su momento las ERT, es de tal quienes parten de su propia experiencia
perplejidad que dificulta dar respuesta a es- sindical, se han transformado en una herra-
tas demandas. mienta fundamental para guiar al resto de
30
Antivero y Elena, op. cit.
31
Programa Facultad Abierta (2010).
sus compañeros y compañeras en los pro- Por otro lado, la seccional UOM de Quilmes
cesos de recuperación de empresas, una había mantenido, desde el inicio de la con-
vez agotadas todas las instancias gremiales. ducción gremial en 1984 (es decir, la corrien-
A continuación, analizaremos el caso de la te Felipe Vallese cuyo máximo referente era
Unión Obrera Metalúrgica (UOM), Seccional Francisco “Barba” Gutiérrez, muy diferente en
Quilmes, y el de Zanón. cuanto a la política y a la orientación con res-
pecto a la conducción general del sindicato),
El primero de ellos que veremos es el de la una actitud combativa contra el dueño de
empresa Adabor, cuyos trabajadores y tra- Adabor por los incumplimientos laborales
bajadoras siderúrgicos estaban afiliados a con los trabajadores y las trabajadoras. Más
la UOM, uno de los principales sindicatos ar- tarde, en el gobierno de Menem, se produ-
gentinos, con una gran cantidad de afiliados. jo el quiebre de Adabor, en parte impulsado
Sin embargo, en el caso de esta empresa, el por deudas contraídas al no poder comprar
apoyo sindical estuvo dado solo por la Sec- materias primas a precios diferenciales, si-
cional Quilmes, quienes llevaron adelante y tuación que fue generada por el grupo Te-
mantuvieron, desde mediados de la déca- chin que presionó al Estado para que esto
da del 80, una estrategia que los llevó a ser sucediera. Luego, aprovechó la quiebra para
protagonistas en la recuperación de esta comprarle a Banade el crédito del laminador.
empresa, como un medio para sostener las La estrategia comercial con respecto a la fá-
fuentes laborales. La mencionada estrategia brica no era hacerla retomar la producción,
se desarrolló para tratar de paliar los efectos sino únicamente quedarse con el laminador
perversos que se fueron manifestando con para sacarlo del país.
las crisis de los distintos sectores de la indus-
tria nacional. Según Wyczykier,32 se puede Los dirigentes gremiales de la UOM Quilmes
contar la historia que culminó con la Coope- se dieron cuenta de que, casi como una úni-
rativa de Trabajo Adabor: en los años 70, esta ca alternativa, el sostenimiento de la fuente
empresa, Propulsora (propiedad del grupo de trabajo se conseguiría a través de la lu-
Techin) y Somisa eran las únicas tres empre- cha por la constitución de una asociación de
sas que existían en el país en la elaboración trabajadores que en forma autogestionada
de acero plano. La más pequeña era Adabor, pudiera hacerse cargo de esta empresa. Allí
que había conseguido producir estos mate- empezaron las negociaciones con Techin por
riales por haber ingresado al Plan Siderúrgi- un lado, y con el dueño de Adabor por otro,
co Nacional, y que con un crédito del Banade con el que llegaron a un acuerdo. Él les ce-
logró comprar un laminador de marca japo- dió parte de sus acciones a los trabajadores
nesa, con tecnología muy moderna, mucho y a las trabajadoras de la fábrica, y un míni-
más que la que tenía Propulsora, y así poder mo porcentaje a la UOM, para que pudieran
realizar el ciclo productivo completo con la presentarse a discutir en el proceso de quie-
materia prima y agregar la elaboración de bra. De esta forma, este empresario podría
acero inoxidable (elaboración que no se ha- obtener algo de dinero correspondiente a
cía en el país). Adabor comenzó así a ganarle la parte de sus acciones, si la resolución del
mercado a Propulsora, lo que dio origen a conflicto resultaba favorable. Ello permitió
una “guerra comercial”.33 que los trabajadores y las trabajadoras de
Adabor, la UOM y Techin se pudieran sentar
32
Wyczykier (2005). a discutir como socios y socias de la empresa
33
Ídem. quebrada.
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El papel de los sindicatos en el surgimiento de las empresas recuperadas por los trabajadores en la República Argentina
sus núcleos directivos. De manera que hablar Sin embargo, y esto debe quedar claro, no
de la génesis del control obrero en Zanón a todos los obreros coincidían con la idea de
partir del año 2002 implica reconocer todo tomar la fábrica y producir, sino que solo se
un proceso de movilización y politización pensaba en las necesidades económicas y
previas a todo lo detallado.37 en salir del atolladero en el que el conflicto
los colocaba. Los trabajadores y trabajado-
En cuanto a cómo se fueron dando los suce- ras estaban sin recursos, hostigados judicial-
sos, podemos decir que el despido de los tra- mente, descolocados por la actitud patronal
bajadores y de las trabajadoras se produjo un –que había presentado, a inicios de 2002, un
mes después de que la justicia neuquina sen- plan de reactivación que solo contempla-
tenciara al empresario Luis Zanón por lock ba a 62 obreros y obreras– y amedrentados
out patronal ofensivo, junto con otra larga por el sector sindical tradicional (llamado los
serie de atropellos tanto a las condiciones la- “montistas”, que no eran sino ex empleados
borales de los obreros y de las obreras como y empleadas de la empresa de cerámica que
a las normas establecidas por la justicia para aceptaron el despido y no realizaron el juicio
buscar una solución al conflicto. Además, a la empresa, por lo que cobraron el seguro
junto a la lucha que mantuvieron los traba- de desempleo). Así, se encolumnaron detrás
jadores y las trabajadoras de Zanón, se pudo de las órdenes del anterior secretario general
verificar la presencia en apoyo a lo sucedido, del SOECN, Oscar Montes, y protagonizaron
de diversos sectores de la comunidad neu- varios intentos de “copar” la fábrica por mé-
quina y un arco de militantes sociales (gre- todos violentos con la ayuda de barrabravas
mios estatales de educación y salud, orga- de Cipolletti, un conocido club de fútbol de
nizaciones sociales y partidos de izquierda) las cercanías. Con todos estos antecedentes,
que contribuyeron a resignificar y enmarcar a principios de marzo de 2002, los obreros y
el conflicto. Posteriormente, desde octubre las obreras largaron una línea de producción
de 2001 y durante los siguientes cinco me- y presentaron, a mediados de abril, lo que fue
ses, la situación se volvió indefinida, y osciló el primer producto creado por ellos: el mo-
entre tomas temporarias de la fábrica, la des- delo “obrero”. Es necesario aclarar que estos
esperación de los obreros y de las obreras, el trabajadores y trabajadoras, guiados ideológi-
hostigamiento que implicaba la situación ju- camente por sus líderes Raúl Godoy (secreta-
dicial y la presión que comenzaba a manifes- rio general) y Mariano Pedrero (abogado del
tarse en las sucesivas amenazas de desalo- SOECN), orientados desde los presupuestos
jo. Esta situación hizo que los obreros y las teórico-prácticos del trotskismo, se habían
obreras cerraran filas sobre el acampe en los ganado una indiscutible aceptación en las
alrededores de la fábrica, para estar juntos filas obreras, e impusieron como una de las
ante un posible ataque que los desplazaría características más salientes el rechazo al for-
del predio, pero también por las sospechas mato cooperativo. Para ellos, la gestión obre-
de un posible vaciamiento del interior del es- ra “autónoma” no estaría garantizada en una
tablecimiento. Recién en enero del año 2002, cooperativa al no contemplar la organización
los obreros y las obreras ingresaron en la fá- y el funcionamiento de una democracia ple-
brica y realizaron el intento de encender los na según la entienden los ceramistas y en la
hornos y comenzar a producir. que se asienta el control obrero practicado
por ellos. En vistas de esto, solo tomaron el
nombre de “cooperativa” por una cuestión
37
Ídem. legal, como ya hemos explicado anterior-
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El papel de los sindicatos en el surgimiento de las empresas recuperadas por los trabajadores en la República Argentina
mente. Esta actitud política de los dirigentes Si bien en las ERT disminuyeron
sindicales, que se materializó en la lucha y en
la puesta en producción de la empresa ges-
drásticamente la cantidad de accidentes
tionada por los trabajadores y por las trabaja- de trabajo con respecto a la misma
doras, contrastó con el hecho de que muchos empresa administrada por el capitalista,
obreros y obreras no se detuvieron a pensar
el contenido político de lo que estaban ha- esta sería otra de las cuestiones
ciendo, sino que solo querían recuperar, por en las que la intervención del sindicato
algún medio, las fuentes de trabajo perdidas
y así salir del atolladero en el que estaban
sería beneficiosa.
metidos. También era cierto para ellos y ellas
la ruptura definitiva con la forma de produc-
ción anterior y que institucionalizaron con la asuntos en los cuales la intervención de los
fecha en que comenzó el control obrero en sindicatos facilitaría enormemente el desa-
la fábrica, es decir, el 1º de octubre de 2001.38 rrollo de las empresas recuperadas, tenien-
do en cuenta que este se efectúa dentro de
Posibles puntos de intervención de una economía de mercado capitalista, que
los sindicatos en las ERT marca las reglas del juego. Para esto, una de
las cosas que podrían hacer es dictar cursos
La finalidad de este apartado es describir cuá- de capacitación sobre los distintos factores
les podrían ser los aportes y las contribuciones estratégicos que se necesitan conocer para
de los sindicatos en el desarrollo y el funciona- hacer funcionar con éxito una empresa.40 En
miento de las ERT. Según la información brin- tal sentido, las ERT deben funcionar como
dada por el Tercer Relevamiento de Empresas cooperativas, y para este fin deben organi-
Recuperadas en Argentina realizado por el Pro- zarse y conocer cada una de las secciones
grama Facultad Abierta (2010) según el cual la fabriles que hacían producir la fábrica. Para
relación que se establece entre la ERT y el sin- esto el sindicato es ideal, en primera medi-
dicato se expresa principalmente a través de la da porque va a ser del gremio, y debido a
preservación de la obra social. Mientras que ello sabe de qué se está hablando, y puede
este vínculo está representado en el 49% de conseguir a profesionales, ex trabajadores y
las ERT, en el 36% de los casos además con- afiliados, ex gerentes, etc., que capaciten a
servan plenos derechos sindicales. Esto últi- los que emprenden el camino de las ERT. Por
mo es importante porque está dando cuenta lo tanto, esta podría tener una buena recu-
de que los sindicatos reconocen a los miem- peración y llevar adelante tareas de recom-
bros de las ERT, su pertenencia al gremio y su posición económica, financiera, comercial
condición de trabajadores, y asumen que ser y productiva, como también restablecer las
socios de una cooperativa no los convierte en relaciones de confianza con los proveedores
empresarios.39 y los clientes, recomponer la facturación y
los balances, mantener y calibrar máquinas
Sin embargo, esto no es lo único en lo que e instrumentos de producción, y todo esto al
los sindicatos pueden ayudar a las ERT, sino haber sido capacitados por gente idónea en
que podemos encontrar una larga lista de el tema, proporcionada por los sindicatos.41
38
Ídem. 40
Fajn y Rebón (2005).
39
Programa Facultad Abierta (2010). 41
Ídem.
Si bien en las ERT disminuyeron drástica- desarrollo, contactarse con otros sectores
mente la cantidad de accidentes de trabajo productivos, con la finalidad de aumentar la
con respecto a la misma empresa adminis- producción y garantizar un crecimiento. Para
trada por el capitalista,42 esta sería otra de esto, el sindicato podría usar las respectivas
las cuestiones en las que la intervención del cámaras empresariales de su gremio, cono-
sindicato sería beneficiosa. Nos referimos a cidas por ellos, ya que son con las que ne-
que la organización gremial tendría la capa- gocian cada año las paritarias, para hacer un
cidad para establecer mecanismos que acer- puente y establecer un vínculo productivo,
quen especialistas en seguridad a las ERT, incluso hasta para conseguir trabajo a façón
que gratuitamente elaboren informes sobre a alguna ERT que los necesite.45
estos temas y sobre la seguridad, la higiene,
el manejo de sustancias peligrosas, etc., para Por último, existe un punto central en la con-
mejorar las condiciones de trabajo y de vida formación y conservación de una ERT en el
de la gente que realiza tareas en las áreas que el sindicalismo podría ayudar al poner
respectivas.43 su representatividad institucional para la
consecución de la ley de quiebra que les ase-
Juan Pablo Terra44 advierte que, en el caso gure a los trabajadores y a las trabajadoras
particular de las ERT, la crisis que las origina el soporte legal que necesitan para producir.
hace presumir difícil su viabilidad, por lo tan- Rebón46 afirma que la lucha por obtener una
to, otro de los puntos con que los sindicatos cobertura legal es un eje central para el éxito
podrían trabajar para favorecer las ERT es en del proceso, su no obtención implica riesgo
el caso de las mediaciones con organismos de desalojo y dificulta el funcionamiento
que son de difícil acceso para las empresas productivo.
recuperadas. Por ejemplo, mediar con el Es-
tado para conseguir créditos blandos para En definitiva, existen distintas opciones a tra-
compras de maquinarias, o con los bancos vés de las cuales los sindicatos podrían ayu-
internacionales que apoyan el desarrollo, dar a los trabajadores y a las trabajadoras de
con los municipios para buscar algún tipo de las ERT. Sin dudas, hay muchos más aspectos
descuento impositivo, o con todos los men- que los mencionados, teniendo en cuenta
cionados que pudieran servir de plataforma que un escenario negativo para un sindicato
para vender los productos que las ERT fabri- es el de un gremio paralizado por la falta de
can. Es decir, sin creer que esta tarea es cosa producción.
fácil, ni mucho menos, está claro que la fuer-
za que todo un sindicato puede ejercer, o los Palabras finales
resortes que puede accionar, es mucho más
grande que cualquier esfuerzo y entusiasmo Al tomar en consideración los puntos más
que pueda tener un puñado de trabajadores salientes de este trabajo, nos encontramos
autogestionados. con que las políticas neoliberales ejecutadas
durante la década del 90 por el gobierno de
También, es conocido que muchos empren- Menem y la posterior crisis económica del
dimientos autogestivos necesitan, para su año 2001 fueron una especie de impulsores,
resortes que motivaron el surgimiento de las
42
Ruggeri, op. cit.
43
Fajn y Rebón, op. cit.; Ruggeri, op. cit. 45
Ruggeri, op. cit.
44
Terra (1986). 46
Rebón (2004a).
REFLEXIONES
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El papel de los sindicatos en el surgimiento de las empresas recuperadas por los trabajadores en la República Argentina
ERT como una de las principales alternativas presa con pensamientos de izquierda ganó
para los trabajadores y las trabajadoras con las elecciones del Sindicato de Ceramistas,
el afán de conservar sus fuentes laborales. para luego, y desde ese lugar, fomentar el
Sin duda, una lucha difícil que algunos y al- control obrero de la empresa.
gunas se animaron a afrontar y una que la
mayoría debió hacer sin la asistencia de los En algún punto, la excusa esgrimida por los
respectivos sindicatos. sindicatos que no apoyaron a las recuperadas
quedó invalidada. Nos referimos al hecho de
También hay que decir que, si bien puede ha- la conformación de una cooperativa de tra-
ber existido alguna de estas entidades gre- bajo, y lo que esto implica, es decir, que los
miales, que se haya manifestado en contra de trabajadores y las trabajadoras ya no sean
los trabajadores y de las trabajadoras que in- más asalariados y regidos por un convenio
tentaban recuperar una empresa, al obstacu- laboral determinado, sino que se les pueda
lizarles la tarea, la gran mayoría de ellos y de considerar socios y socias de la cooperativa y,
ellas no ayudó en la conformación de las ERT por tanto, de la empresa. Sin embargo, hemos
por la sencilla razón de que las estructuras or- explicado que, en nuestro país, no existe nin-
gánicas del sindicalismo se habían mostrado guna otra alternativa legal para un empren-
rígidas e inapropiadas, sin capacidad de reac- dimiento colectivo como una ERT, sino es por
ción ante este nuevo fenómeno social, políti- medio de la conformación de una coopera-
co, económico, jurídico y cultural como son tiva de trabajo, aunque esto se haya llevado
las empresas recuperadas y autogestionadas a cabo por una necesidad, la de conservar el
por sus trabajadores y trabajadoras. trabajo y los ingresos que le dieran al trabaja-
dor o a la trabajadora y a su familia, la posibi-
Sin embargo, nos queda la inquietud de sa- lidad de una vida digna. De ninguna manera
ber cómo sería el presente de estas empre- la constitución de la cooperativa respondió a
sas, no solo en el momento de conformación, una motivación ideológica basada en algún
sino también durante su funcionamiento y presupuesto marxista, situación que confron-
desarrollo como tal, si la mayoría de los sindi- ta con la sindical tradicional de nuestro país.
catos hubiera apoyado estos emprendimien- Por lo tanto, la cooperativa es una salida a una
tos, tal como ocurrió en los casos de Adabor situación crítica y no se trata de la voluntad
y Fasinpat, en los que quedó demostrado de ser “dueño” o “dueña” por parte de los tra-
que no han surgido asociados con los gru- bajadores y de las trabajadoras.
pos sindicales tradicionales, sino mediante
facciones que ostentaban un pensamiento Es sabido también que ciertos sectores del
y un accionar muy distinto al de las cúpulas sindicalismo argentino, fundamentalmente
sindicales. El primero, con una conducción los vinculados a la CTA, han realizado una au-
inspirada en el peronismo y liderada por tocrítica al asumir como un error el hecho de
Facundo Gutiérrez, quien se diferenció no- no haber ejercido un control más adecuado
tablemente de la Secretaría General de la a ciertas empresas en situaciones críticas o a
UOM, ya que impulsó a los trabajadores y a punto de cerrar, con intentos de vaciamien-
las trabajadoras a recuperar y a autogestio- to, como así también la falta de apoyo a los
nar la empresa quebrada económicamente. trabajadores y a las trabajadoras en la con-
El segundo caso, el de la ex Zanón, tiene su formación de las ERT. En esta misma línea,
particularidad ya que el camino comenzó algunos sectores de los sindicatos debido
cuando una facción de delegados de la em- a la proliferación de empresas recuperadas,
comenzaron a ver que la lucha cooperativa sus ganancias. Y si hace un tiempo atrás las
es una continuidad de la lucha sindical, a tal estructuras laborales en las fábricas estaban
punto que hoy, ante una crisis, muchos sin- regidas por el fordismo y el taylorismo, esto
dicatos, cuando se agota la instancia de ne- cambió en una nueva estructura: el toyotis-
gociación, pasan a la conquista de la fuente mo, que marca una flexibilidad en los con-
de trabajo, y se plantean armar una coopera- ceptos de producción, y que implica nuevos
tiva.47 Cabe entonces preguntarse si los sin- paradigmas ante los cuales el sindicalismo
dicatos mismos pueden asumir, de manera debe responder.50 Por lo tanto, si el capitalis-
consciente y prioritaria, la representación mo ha cambiado, y dejó de lado viejas formas
de los intereses de aquella parte de los asa- y adoptó nuevas estructuras que le aseguran
lariados que resultan excluidos temporal o un rédito superior –que se han asimilado a
permanentemente del mercado de trabajo. otros cambios que se han dado en el mundo,
Esto podría suceder, entre otras vías, me- como los tecnológicos–, pues bien, tanto ha
diante la colaboración con formas de orga- de cambiar el sindicalismo, más aún cuando
nización fuera del mercado de trabajo, como todos los cambios anteriormente menciona-
la formación de cooperativas que posibiliten dos repercuten directamente en la sociedad,
que la gente continúe trabajando.48 Esto sin y por consecuencia en los trabajadores y en
duda supone un desafío para el movimiento las trabajadoras, sin olvidar que el sindicalis-
sindical, ya que es necesario que los sindica- mo sigue siendo uno de los mecanismos de
tos comiencen a dar el debate y no teman a oposición al capitalismo.
estas expresiones de la acción colectiva. En
tal sentido, vienen al caso las palabras de un Tampoco hay que olvidar, que la “explosión”
luchador sindical como Luis Inácio Lula Da de las ERT a principios de siglo en la Argentina
Silva: “No vamos a tener miedo de nuevo. también es un fenómeno nuevo, que implica
Cooperativa, trabajo de calidad, economía fuentes de trabajo para mucha gente y que
solidaria, nada de esto es antagónico al mo- en un futuro puede serlo para mucha más.
vimiento sindical, nada de esto sustituye las Estas empresas recuperadas son una muestra
entidades sindicales. Al contrario, comple- cabal de un cambio significativo con respecto
menta la actividad sindical”.49 a algunas cuestiones del régimen capitalista
como las libertades personales, o como las
Lo cierto es que el mundo que conocemos condiciones que mejoran la dignidad del tra-
es aquel complejo, dinámico, cuya realidad bajador y de la trabajadora, como también los
se construye históricamente. El sindicalismo tiempos y los ritmos de la jornada de trabajo.
debe interpretar los cambios que se produ- Situaciones que le hacen sentir que él o ella es
cen en la sociedad, motivados por esta diná- parte de la empresa, que él o ella es parte de
mica a la que hacemos mención, y en la que los que deciden lo que ocurre, que el produc-
se debe actuar en consecuencia. Esta regla to terminado tiene su sello.51
tampoco escapa al capitalismo, ya que los
sistemas laborales antiguamente utilizados Desde esta posición, lo cierto es que fueron
en las fábricas cambiaron conforme el capita- pocos los casos de apoyo a las ERT por par-
lismo seguía, y sigue, tratando de maximizar te de los sindicatos, aunque según el Cuarto
Relevamiento de Empresas Recuperadas en
47
Martí, op. cit.
48
Heinze et al., op. cit. 50
Harispe (2009).
49
Da Silva (2000), 12. 51
Ruggeri, op. cit.
REFLEXIONES
Y DEBATES 117
El papel de los sindicatos en el surgimiento de las empresas recuperadas por los trabajadores en la República Argentina
Argentina realizado en el año 2014 se veri- ción, y que es probable que, así como en la
fica una tendencia que indica que poco a década del 90, surjan en nuestro país nuevas
poco los sindicatos se han ido acercando a empresas recuperadas, como consecuencia
las ERT y a sus trabajadores y trabajadoras, de la abrupta pérdida de puestos de trabajo.
sin que aún sea una relación provechosa Si esto sucediera, si volviera a existir la nece-
para estos. Por último, insistimos en que el sidad de formar empresas recuperadas por
sindicalismo debe tener en cuenta que los los trabajadores y las trabajadoras dispues-
tiempos cambian, que se han instaurado tos a luchar, esta vez sería deseable que los
nuevas políticas económicas de ajuste según sindicatos caminaran en esa lucha junto a los
recetas neoliberales que afectan a la produc- trabajadores autogestionados.
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