Está en la página 1de 81

LAS COMUNIDADES VEGETALES

DEMÉXICO
Las comunidades vegetales de México.
Propuesta para la unificación de la clasificación y
nomenclatura de la vegetación de México

Francisco González Medrano


Primera edición: noviembre de 2003

D.R. © Instituto Nacional de Ecología (INE-SEMARNAT)


Periférico sur 5000, Col. Insurgentes Cuicuilco,
C.P. 04530. México, D.F.
www.ine.gob.mx

COORDINACIÓN EDITORIAL: Raúl Marcó del Pont Lalli con el apoyo


de Gloria Portales Betancourt
DISEÑO DE LA PORTADA: Álvaro Figueroa
FOTO DE LA PORTADA: Claudio Contreras
CORRECCIÓN DE ESTILO: Eduardo Chagoya Medina y Gloria Portales Betancourt

581.10972 González Medrano, Francisco


M437c Las comunidades vegetales de México / Francisco González Medrano. México.
INE-SEMARNAT, 2003.

1. Vegetación-México 2. Vegetación-Ecología vegetal


3. Comunidades vegetales-caracterización 4. Comunidades vegetales-Clasificación-México

ISBN: 968-817-611-7

Impreso y hecho en México


Índice

7 PRÓLOGO. Rodolfo Dirzo

9 INTRODUCCIÓN

11 CAPÍTULO I. ANTECEDENTES

21 CAPÍTULO II. CARACTERIZACIÓN AMBIENTAL DE MÉXICO Y SU CORRELACIÓN


CON LA CLASIFICACIÓN Y LA NOMENCLATURA DE LAS COMUNIDADES VEGETALES

41 CAPITULO III. CLASIFICACIÓN Y NOMENCLATURA DE LA VEGETACIÓN DE MÉXICO

63 CAPITULO IV. PROPUESTA DE UN SISTEMA DE CLASIFICACIÓN Y NOMENCLATURA


DE LAS COMUNIDADES VEGETALES DE MÉXICO

67 CONSIDERACIONES FINALES

69 ANEXOS

75 BIBLIOGRAFÍA
Prólogo

Una de las manifestaciones que mejor denotan o país que, teniendo alguna tradición e infraes-
el desarrollo de la capacidad analítica de Homo tructura científica, no cuente con un historial
sapiens ha sido su tendencia de clasificar las co- de esfuerzos en ese tema. México no es excep-
sas y fenómenos de su entorno. Indudablemen- ción de ello. Sin duda, la vegetación de México
te, tal tendencia ha sido una pieza fundamental, es una de las más complejas y diversos al nivel
conducente a nuestra mejor comprensión, ma- global. Se argumenta que, con excepción de unos
nejo y explotación de nuestro medio natural. pocos, casi la totalidad de los grandes tipos de
En el ámbito de la biología esta tendencia a vegetación de la tierra se encuentran represen-
clasificar se refleja de múltiples formas, entre las tados en el territorio del país. Esto resultaparti-
que destaca, por ejemplo, la clasificación de los cularmente sorprende si se toma en considera-
seres vivos, cuya primera manifestación razo- ción que el área del territorio geopolítico de
nada se remonta al sistema de clasificación y no- México es de apenas unos 2 millones de kiló-
menclatura de plantas y animales elaborado por metros cuadrados. Dada esta sorprendente aglu-
Carlos Lineo, en el siglo XVII. Más allá de las tinación de expresiones de la vegetación en este
especies, los conglomerados de ellas en comu- territorio, no es de extrañarse que diversos in-
nidades naturales se manifiestan de formas tan vestigadores hayan llevado a cabo encomiables
diversas que también han provocado, por mu- intentos de desarrollar sistemas de clasificación
cho tiempo, el interés científico de clasificarlas de las comunidades vegetales del país.
de manera clara e, inclusive, predictiva. Un ejem- Si bien pudiera pensarse que el primer inten-
plo de un sistema de clasificación de la vegeta- to de clasificar la vegetación de México se remonta
ción que aborda un esquema de capacidad pre- a los trabajos de Martens y Oaleotti, hacia 1844,
dictiva es el del ecólogo norteamericano L R. los sistemas más reconocidos y citados son los de
Holdridge, con su famoso triángulo de varia- Miranda y Hernández-X, en su trabajo pionero
bles climáticas, cuya confluencia conduce a uni- sobre los tipos de vegetación de México y su cla-
dades de vegetación observadas y esperadas. sificación de 1963, y el de Rzedowski, en su ejem-
El tema de la clasificación de la vegetación plar compendio de 1978 sobre la vegetación de
ha sido motivo de numerosos compendios en- México (todos ellos citados en este volumen).
focados tanto al nivel local, regional y global. De Estas dos obras de la literatura botánico-ecológi-
esta forma, es difícil pensar en cualquier región ca de México han tenido una influencia de gran

Prólogo 7
envergadura en el conocimiento de la biota na- nantes y nos aporta elementos para diferenciar
cional y de más allá de nuestras fronteras. La gran las unidades de vegetación a distintas escalas. El
resonancia de estas dos obras solo pudo darse, corolario de la obra es poner a consideración
en mi opinión, por el hecho de haber sido enca- del lector una propuesta que conduzca a la uni-
radas por científicos dotados de un profundo co- ficación de la clasificación y nomenclatura de la
nocimiento de la vegetación del país. Sin embar- vegetación de México.
go, el avance en el conocimiento de la flora y ve- En los tiempos actuales cada vez se hace más
getación del territorio de México, así como la evidente la magnitud e importancia del tesoro
disponibilidad de nuevas herramientas analíti- vegetal que puebla nuestro territorio. Hoy reco-
cas, incluyendo los sistemas de información geo- nocemos que nuestras aproximadamente 25,000
gráfica y las imágenes de satélite, hacen necesa- especies de plantas vasculares, aglutinadas en una
rio que se lleve a cabo un nuevo esfuerzo de cla- sorprendente gama de formas de vida y grupos
sificación y nomenclatura de la compleja vege- funcionales, y acomodadas en asociaciones, for-
tación nacional. En mi opinión, nuevamente, el maciones y tipos de vegetación de múltiples ma-
primer esfuerzo de esta «nueva era», solamente nifestaciones (como se ilustra en este libro), cons-
podría encarase por otro científico dotado de una tituyen un recurso de valor incomparable para la
profunda familiarización con el territorio nacio- sociedad entera. Por otra parte, al mismo tiempo
nal y su vegetación. Este desafío lo ha afrontado, reconocemos que cada vez se siente más a flor de
ahora. Francisco González-Medrano, y lo pone piel el impacto antropogénico sobre nuestra co-
a nuestra disposición y escrutinio en el presente bertura vegetal, reflejado en una tasa de defores-
volumen. Este prominente botánico Mexicano tación de aproximadamente 650,000 hectáreas
es reconocido no solo por su excelente conoci- por ano, lo cual implica un riesgo serio de ero-
miento de la vegetación nacional en lo colectivo, sión biológica al nivel de pérdida de poblaciones,
y de las plantas que la componen en lo particu- especies e incluso comunidades vegetales ente-
lar, sino que también es ampliamente admirado ras. En fin, en estos tiempos en que se conjugan
por la contagiante motivación con la que, a lo estas dos percepciones de lo rico y amenazado de
largo de décadas, ha viajado por el territorio, ex- nuestra biota, un esfuerzo analítico como el del
plorando sus rincones botánicos y recolectando presente volumen se significa como una obra de
plantas. (Esto ha sido hecho, además, típicamen- gran valía.
te, compartiendo su conocimiento y enjundia Esta será una obra con la cual podremos con-
con generaciones enteras de estudiantes.) frontar nuestra capacidad para entender, darle
En este volumen, el autor nos ofrece una ex- seguimiento e, idealmente, proteger nuestro in-
celente resena histórica de los estudios de la cla- comparable patrimonio natural.
sificación de la vegetación de México; analiza
las relaciones entre las manifestaciones de la Rodolfo Dirzo
vegetación y sus factores ambientales predomi- INSTITUTO DE ECOLOGÍA, UNAM

8 Rodolfo Dirzo
Introducción

Uno de los problemas que a menudo afrontan km2 con el 8.0%, y SARH (1994) 109 488 km2 o
las personas que trabajan con la vegetación o sea el 5.6%, estas disparidades reflejan en cierta
con las comunidades vegetales de México, es que medida criterios diferentes para clasificar las sel-
hasta la fecha no existe un sistema de clasifica- vas bajas caducifolias y por tanto su distribu-
ción y nomenclatura de las comunidades vege- ción en el territorio nacional.
tales que sea de uso común. En relación con la clasificación y la nomen-
Esto ha traído como consecuencia dificulta- clatura de las comunidades vegetales de Méxi-
des en la aplicación e interpretación de cada co, se han presentado algunos problemas. Entre
usuario, a veces la gente hace su propia inter- otros podemos mencionar:
pretación del sistema que está usando, lo cual le Inconsistencia en la diferenciación y clasifica-
origina confusiones. Frecuentemente se hace ción de las comunidades vegetales.
una mezcla de los diferentes sistemas de clasifi- Inconsistencia en la denominación de las uni-
cación, lo que origina ambigüedades. El uso de dades de la vegetación.
términos y criterios subjetivos es frecuente, di- Categorías insuficientes y a menudo no bien
ficultando la clasificación y la nominación de delimitadas.
las comunidades vegetales. Criterios subjetivos para clasificar y denominar
Así, por ejemplo si queremos conocer la su- las comunidades vegetales.
perficie cubierta por la selva baja caducifolia en Mezcla de diferentes sistemas de clasificación y
nuestro país, al consultar la literatura, obtene- denominación, originando confusión.
mos resultados (porcentajes) totalmente dife- Lo anterior se refleja en la dificultad de ha-
rentes según la fuente consultada. Trejo Vázquez, cer estudios comparativos, cartografiar las co-
(1998: 15), muestra un cuadro en el que señala munidades y cuantificar correctamente las su-
la superficie de la selva baja caducifolia en Méxi- perficies que ocupan en el país; dificultad para
co según las estimaciones de diferentes fuentes, ubicar las áreas de distribución de especies de
en el cual son evidentes las diferencias, por ejem- plantas y animales de interés, y aún más, pro-
plo Flores et al. (1971), consideran 290,455 km2 blemas con la delimitación de las superficies
o sea el 14.9% la superficie; la Secretaria de Pro- ocupadas por las diferentes comunidades de im-
gramación y Presupuesto (1981) 159,800 km2, portancia para la conservación, el manejo, y la
con el 8.2%; Jaramillo Villalobos (1994) 155,871 caracterización de las unidades de vegetación

Las comunidades vegetales de México 9


como hábitat para los animales incluyendo al Con el propósito de indicar la dinámica de la
hombre. vegetación y su sucesión en el tiempo.
Por lo tanto, el tener una clasificación y una Con un criterio económico, las comunidades ve-
nomenclatura adecuadas, para las comunidades getales se clasifican por su uso real o potencial,
vegetales del país poco a poco se ha tornado im- ya sea forestal, agrícola, pecuario, recreativo, etc.
perativo. Clasificar... ¿para qué?, los objetivos son Lo anteriormente expuesto fundamenta am-
varios: pliamente el esfuerzo a desplegar, con la finali-
Para mostrar la similitud y las diferencias de la dad de tener un sistema de nomenclatura y cla-
composición florística y la estructura entre las sificación de las comunidades vegetales de Méxi-
comunidades. co. Un sistema que permita tener un marco de
Para mostrar la complejidad de las comunida- referencia, donde ubicar otro tipo de investiga-
des vegetales o clasificarlas de acuerdo con la ciones, como aquellas de tipo florístico, sineco-
misma. lógico, fitogeográfico u otras. Esto difícilmente
Para mostrar las relaciones de las comunidades va a poder conseguirse si no se cuenta con un
con su hábitat, aunque a veces se enfatizan sistema uniforme, jerárquico, consistente, uní-
más las características del ambiente que las voco, incluyente y hasta donde sea posible cuan-
de la vegetación. titativo, evitando las generalizaciones subjetivas.

10 Introducción
Capítulo I. Antecedentes

1. A NÁLISIS DE LOS SISTEMAS DE CLASIFICACIÓN PROPUESTOS


PARA LA VEGETACIÓN DE M ÉXICO

El conocimiento tan amplio que los pobladores del en los Códices y Manuscritos. Dentro de ellos des-
México antiguo tenían sobre la flora y la fauna, ha taca el Códice Badiano (también conocido como
sido ampliamente reconocido, tal como lo pusie- Códice Barberini), el cual con justicia, debería ser
ron de manifiesto diferentes autores, comenzando llamado Códice de la Cruz, pues fue un herbario,
con el mismo Cortés, el cual, en sus Cartas de Rela- con un texto en náhuatl, hecho por el médico indí-
ción (1519-1526), da a conocer al Viejo Mundo una gena Martín de la Cruz (1552); posteriormente el
nueva naturaleza, plena del conocimiento de plan- indio Xochimilca, Juan Badiano, lo tradujo al latín
tas con aplicación en la alimentación, la construc- con el título de Libellus de medicinalibus indorum
ción, el vestido y la medicina tradicionales y el em- herbis, el manuscrito de este libro esta ilustrado con
pleo de las flores en ceremonias y ritos, la exube- numerosas y por demás atractivas acuarelas que re-
rancia de la vegetación y el esplendor del saber presentan plantas principalmente de interés medi-
médico y botánico autóctono, describe la magnifi- cinal.
cencia de los Jardines Botánicos, diseminados en Bernal Díaz del Castillo en su obra Historia ver-
diferentes partes de Anáhuac, destacando entre dadera de la conquista de la Nueva España (1568),
otros el de Chapultepec, el de Tetzconzinco (Tex- asombrado, describe la gran diversidad de plantas
coco), Oaxtepec, el de Iztapalapa y otros más. y animales que se comercializaban en el gran tian-
Fray Bernardino de Sahagún (1558) en su His- guis o mercado de Tlatelolco.
toria de las Cosas de la Nueva España, destaca como En otro contexto, Francisco Hernández, médico
los aztecas cuidaban de las plantas, usando una de cámara de Felipe II, fue enviado por éste a la Nueva
“cama o cuadro”, y como realizaban el trasplante España entre 1570 y 1577, llamado Protomédico de
de árboles traídos de regiones lejanas y la esmera- las Indias, viajó por la Nueva España estudiando
da construcción de los sistemas de riego. plantas, animales, minerales, sobre todo plantas con
Gran parte del conocimiento que los indígenas potencial como medicinales. Su obra de 12 libros ma-
tenían sobre los aspectos botánicos tanto de la época nuscritos, permaneció inédita hasta 1651, que fue pu-
precortesiana, como de la conquista, se encuentran blicada en Roma, aunque compendiada y arreglada

Las comunidades vegetales de México 11


por otro médico de Felipe II, Nardo Antonio Rechi. no, las cuales sirvieron como base de estudios fito-
A principios de siglo XVII, llegó a México una copia geográficos.
del compendio de los trabajos de Hernández, que Un grupo importante de extranjeros, principal-
Francisco Ximénez tradujo del latín al español y los mente europeos, vinieron a México como coleccio-
utilizó para arreglar su obra Quatro libros de la Na- nistas de plantas, muchos de los cuales se convir-
turaleza, publicada en 1615. En 1985, la UNAM pu- tieron en corresponsales de los principales colec-
blicó el 7° y último tomo de la obra de Francisco Her- cionistas europeos de plantas. Aunque contribuye-
nández. ron al conocimiento florístico y de las regiones na-
Además de los conocimientos sobre las plantas turales del país, poco aportaron al conocimiento
con potencial médico o comestible, el interés de los de las comunidades vegetales de México.
antiguos pobladores se hizo patente en aspectos No fue sino hasta 1842, con los trabajos de Mar-
como la morfología, fisiología, ecología y fitopato- tens y Galeotti; de Galeotti en 1844 y de Richard y
logía de las diferentes plantas. Uno de los temas que Galeotti en 1844, que los estudios se enfocaron a
desarrollaron ampliamente, fue el relativo a la cla- aspectos del ambiente o del hábitat donde se dis-
sificación y la nomenclatura vegetales mediante un tribuyen algunos grupos de plantas, en este caso los
sistema de clasificación basado en características helechos y orquídeas respectivamente, es decir con
morfológicas y del hábitat de las plantas. Así, Del un enfoque ecológico de la distribución de las plan-
Paso y Troncoso (1883-1884), hace certeras obser- tas. Así, estos trabajos pueden considerarse como
vaciones sobre la taxonomía botánica náhuatl. La los primeros esbozos acerca de las diferentes regio-
noción de género y sus especies puede colegirse de nes climáticas de nuestro país y su relación con la
algunos de los nombres en náhuatl, como tollin para topografía y con la latitud. En el trabajo de Mar-
los tules en general, y sus derivados... tepetollin, tule tens y Galeotti, 1842, llamado Mémoire sur le fougé-
del cerro o la montaña; atollin, tule del agua; aitzto- res du Mexique et considerations sur la géographic de
llin, de bordes que cortan como pedernal; etc. Di- cette countrée, dividen climáticamente el territorio
ferenciaban también formas de vida, como: leñosas de México, en:
o arbóreas, cuahuitl; arbustivas, cuacuauhtzin; yer- 1. Región caliente
bas, xihuitl, etc. Y aun el nombre de comunidades 2. Región templada y
vegetales como: bosque, cuauhtla; carrizal acazaca- 3.Región fría.
tla; pinar, ococotla; yerbazal o, pastizal, zacatla, etc. A su vez subdividen la Región Caliente en:
Durante los siglos XVIII y XIX, diferentes botá- A. Subregión caliente de la costa
nicos, naturalistas y colectores, viajaron por el país B. Subregión caliente de las barrancas y de los bos-
dando a conocer parte de la riqueza botánica. Uno ques húmedos.
de ellos fue el Barón Alejandro de Humboldt en 1805, C. Región caliente de las playas del Océano Pacífi-
acompañado por el botánico francés Amado Bon- co.
pland. Durante los diez meses que permanecieron La Región templada la subdividen en:
en la Nueva España, exploraron principalmente las A. De las vertientes oceánicas de la cordillera orien-
partes central y occidental de México; a su regreso a tal.
Europa, estableciendo su residencia en París; las co- B. De las vertientes oceánicas de la cordillera occi-
lecciones botánicas fueron hechas principalmente dental.
por Bonpland y gran parte de ellas estudiadas por C. Región templada de las vertientes centrales y de
Carlos Segismundo Kunth, botánico alemán. El mis- las llanuras, la cual a su vez dividen en subre-
mo Humboldt hizo también importantes observa- gión de las llanuras región de las vertientes.
ciones sobre la vegetación del Continente America- Y la región Fría, la subdividen en:

12 Antecedentes
A. De la vertiente oriental de la cordillera. diversas estaciones donde crecen las especies de
B. De la vertiente occidental de la cordillera. orquídeas mexicanas.
C.Región fría de las llanuras. En 1869 Herrera, publicó en la revista La natu-
De cada una de las regiones y subregiones men- raleza, un artículo, denominado “Apuntes para la
cionan sus límites altitudinales en pies; en algunos Geografía Botánica de México” en donde establece
casos consignan las variaciones de las temperaturas que: “...las regiones climáticas que a continuación
en °C, destacan el sustrato geológico, refiriéndolo se expresan, las hemos tomado de la obra poco co-
como suelo, ej. suelo basáltico, calizo-esquistozo, nocida del Sr. Galeotti, institulada Los Helechos de
gneisico, etc. Para la mayoría de las subregiones que México”.
distinguen dan una lista de las especies de helechos En 1876 Grisebach, publicó la Vegetación del
que ahí se desarrollan y ocasionalmente citan otros Dominio Mexicano, la cual a su vez fue el capítulo
componentes de la flora, ya sea en forma genérica y XV de la obra titulada La Vegetation du Globe, tra-
a veces denominando las especies dominantes. En ducida del alemán. Destaca la acción del relieve so-
realidad los autores son congruentes con el título de bre el clima; un capítulo especial lo dedica a las for-
la segunda parte de su trabajo, pues lo intitulan “No- mas vegetales y otro a las Formaciones Vegetales y
tas sobre la distribución geográfica y geológica de Regiones, mencionando que los bosques húmedos
los helechos de México”, estableciendo las estacio- de clima caliente y las sabanas, son las formaciones
nes botánicas donde crecen los helechos y caracteri- vegetales principales de la América tropical, obvio,
zando sus regiones climáticas. incluyendo México. Se refiere a las partes montaño-
En 1844 Galeotti, presentó ante la Academia de sas de México, como los Andes mexicanos, localiza-
Ciencias de Francia, el trabajo sobre Consideracio- dos entre los 21 y 17 ° de latitud Norte. Consideran-
nes generales sobre la vegetación de México y las di- do la altura sobre el nivel del mar, distingue las re-
versas estaciones en donde crecen las especies de or- giones: Tropical, con región caliente, de la selva de
quídeas mexicanas. Este trabajo es muy similar en encinos (Encinares), la Región de las coníferas y la
su construcción al que antes había publicado con Región alpina. En el capítulo Centros de vegetación
Martens sobre los helechos, pero ahora lo hace con destaca ya, la riqueza florística de México, señalan-
los lugares o estaciones donde crecen las orquídeas; do que según Kotschy (1852), se estiman unas 7, 300
tomando en cuenta variantes térmicas expresadas especies y de éstas Grisebach, 1876, piensa que unas
en grados centígrados, estableciendo zonas o “esta- 5000 son endémicas a México. El capítulo mencio-
ciones orquídicas”. nado sobre la vegetación de México, Grisebach, lo
En la introducción de su trabajo destaca que las fundamenta en escritos de Humboldt, Müller, Lieb-
líneas de vegetación (isofitas) no se corresponden mann, Galeotti, Heller, Bell, Seeman, que si estuvie-
del todo con las isotermas, pues variantes locales de ron en México.
sustrato geológico, orientación, exposición, etc., las En la misma obra La vegetación du Globe, al fi-
pueden diferenciar. Además de la lista de las orquí- nal del capítulo destinado al Dominio mexicano,
deas más conspicuas, consigna otras especies de la Eugéne Fournier agregó una extensa nota en la que
flora nativa. Respecto a las comunidades vegetales, propone una nueva división de las regiones botá-
ocasionalmente se refiere a las estaciones donde cre- nicas de México. Distingue la Región Litoral, en
cen los encinos y los pinos. “donde reina la fiebre amarilla”, la Región o Zona
En 1844 Richard y Galeotti, publicaron Mono- del Bosque Tropical, refiriéndose principalmente a
graphie des Orchidées Mexicaines, en donde dividen la vertiente del Golfo de México, la tercera región
al país en zonas y hacen unas consideraciones ge- es la Región o Zona de las Sabanas. Una cuarta re-
nerales sobre la vegetación de México y sobre las gión, la distingue como Región o Zona Templada,

Las comunidades vegetales de México 13


la cual subdivide en varias subregiones, ya que con- las por las especies de plantas más importantes. Para
sidera que es de las regiones mejor conocidas y me- describir parte de la Geografía y los rasgos de la flo-
jor representadas en los herbarios e invernaderos. ra, del sur de México, Hemsley se basa parcialmen-
Distingue una quinta región o zona de los agaves, te en Richard y Galeotti, 1844, los cuales en su mo-
caracterizada además, por liliáceas arborescentes, nografía sobre las orquídeas mexicanas, dan una
Yucca, Dasylirion, Fourcroya, junto con cactos; in- discusión general de la vegetación de México y los
cluye aquí el Valle de México. Para la parte de San lugares donde las orquídeas crecen. También se basó
Luis Potosí, se basa en las colecciones y datos reca- en el trabajo de Liebmann, 1842 y 1843, quien viajó
bados por Virlet d’ Aoust, (1877) “Observations sur desde la costa de Veracruz hasta el Pico de Orizaba,
le systeme des montagnes d’ Anahuac ou de I’ Ame- haciendo observaciones sobre la distribución de la
rique Centrale”. La sexta y última región que dis- vegetación y dando una lista de las especies de fa-
tingue, es la Región o Zona Superior. Es de hacerse nerógamas más conspicuas.
notar que este autor tampoco visitó México para La obra de Drude en 1890, llamada “Handbuch
sus estudios, parcialmente se basó en Schiede, 1829– der pflanzengeographie” con una versión en fran-
1830 y otros. cés, titulada “Manuel de Geographic botanique”, tie-
En septiembre de 1879, apareció el primer tra- ne una sección especial sobre la distribución mun-
bajo sobre Botánica de la obra monumental titula- dial de familias selectas de plantas, otra en la que
da Biología Centralii Americana y en marzo de 1887, describe la distribución de ciertos tipos de vegeta-
en el apéndice se publicó el trabajo Bosquejo de la ción a nivel mundial y una parte que trata sobre
Geografía y rasgos prominentes de la flora de México México y Centro América, dividiéndola en 6 zonas.
de Hemsley. En 1899, Ramírez, en su libro sobre la Vegeta-
En 1887 Ramírez tradujo de Biología Centrali- ción de México, después de hacer una recopilación
Americana, la parte correspondiente a México es- y análisis de las principales clasificaciones, traduce
crita por Hemsley, que se publica en “La Naturale- los trabajos sobre los helechos de Martens y Galeo-
za”, como “Bosquejo de la exploración botánica de tti, op. cit.; los de Galeotti, op. cit., sobre las orquí-
México”. En 1888, se publica en esta misma revista, deas; y los de Grisebach op. cit., Fournier op. cit., y
el “Bosquejo de la Geografía y rasgos principales de Hemsley op. cit.,. En la parte 7 de su libro, trata so-
la flora de México”. Este trabajo es un análisis fito- bre las Regiones Geográfico Botánicas y la parte 8
geográfico, en el cual divide al país en Norte y Sur es sobre la “Introducción para una flora del Valle
de México, y describe parte del ambiente y la flora de México”. Estos trabajos fueron publicados en
según zonas altitudinales. Basado en el trabajo de Anales del Ministerio de Fomento de la República
Perry, hace una detallada descripción de los rasgos Mexicana en 1898.
del ambiente, la vegetación y la florística de la parte Ramírez op. cit., después del análisis y la crítica
colindante de Estados Unidos y México, principal- que hace a los trabajos de los autores mencionados,
mente de la cuenca Río Bravo, aunque lo extiende a si bien manifiesta su desacuerdo con las generali-
Chihuahua y Sonora. Para el oeste y algunas partes zaciones que para la climatología del país hacían
dentro del norte de México se basa en la obra de los autores, reconoce la importancia de los datos
Seeman, 1852–1857, el cual viajó desde Acapulco, que proporcionan Grisebach op. cit., y Hemsley op.
hacia el noroeste de Durango, Chihuahua y hasta la cit., los cuales pese a que no estuvieron en México,
desembocadura del Río Colorado en el Golfo de Ca- aportaron información y rasgos de la vegetación
lifornia, abarcando toda la región costera hasta Aca- importantes. Se ha señalado antes, que éstos datos
pulco. Describe tanto los ambientes, como algunas fueron tomados de otras fuentes. Finalmente Ra-
comunidades vegetales en general, caracterizándo- mírez, a juzgar por sus escritos, fuertemente influen-

14 Antecedentes
ciados por los trabajos de Martens y Galeotti, pro- mismo lo afirma, la clasificación de las regiones
pone dividir el país desde el punto de vista climáti- y sus subdivisiones es esencialmente climatoló-
co, en tres grandes regiones: gica. Agrega algunos nombres de especies para
La Caliente, la Templada y la Fría; basándose en la las regiones y subregiones, que para él son ca-
temperatura, la humedad de la atmósfera y el racterísticas y que no habían sido mencionadas
suelo, hace las subdivisiones de éstas. Como el antes.

CUADRO 1. REGIONES BOTÁNICO–GEOGRÁFICAS DE LA VEGETACIÓN DE MÉXICO

Región caliente Húmeda, del litoral y de los médanos, muy húmeda, de las tierras bajas y de las vertientes
oceánicas.
Región templada Seca del sur de la Mesa Central.
Seca, de las llanuras del Sur. Muy seca de las llanuras centrales
Muy seca de las llanuras del norte
Húmeda de las barrancas
Región fría Un poco húmeda, de las cimas de las altas montañas.

En la sexta subregión que describe, dentro de la salvo algunos trabajos regionales como los de Ro-
Región Templada, la muy seca de las llanuras del virosa para Tabasco (1875–1899); Parry (1862–
Norte, considera que la forman las planicies de Chi- 1882) para el norte y nordeste de México; Seemann
huahua, Norte de Coahuila, Nuevo león y Tamau- (1852–1857), para el noroeste de México, en la
lipas y que colindan con Estados Unidos, hace no- mayor parte de los casos se terminó caracterizan-
tar que “la flora de esta región es la continuación do más al ambiente que las comunidades vegeta-
de la de los estados de Texas, Nuevo México y una les. En todos los casos se privilegió el factor clima
porción del territorio de Arizona”. Los botánicos para diferenciar las estaciones (ambientes, lugares)
americanos de la Comisión de límites, ya habían en donde crecen las plantas, aunque se hicieron
consignado esta identidad de las floras, sin embar- referencias a la topografía, al substrato geológico o
go Ramírez la puntualiza; mucho después, Rzedo- al tipo de suelo para caracterizarlos, no es sino a
wski (1990–1991) se refiere a esta región como partir de trabajos como el de Harshberger en 1911,
Megaméxico 1, resaltando las afinidades florísticas sobre un estudio fitogeográfico de Norte América,
y vegetacionales. en el que proporciona más información sobre la
En 1900, Fournier publica Las zonas botánicas de vegetación y la fitogeografía.
México; en esta obra Alfonso Herrera adiciona algu- Este autor realizó una investigación extensa que
nos nombres comunes de las plantas. En vez de la cubría aspectos de geografía física, clima, fitogeo-
Tierra caliente, Templada y Fría, Fournier (op. cit.), grafía, así como la historia botánica del área. Incluye
destaca cinco zonas: zona litoral, selva tropical, sa- también datos muy generales sobre la flora y algu-
bana, zona templada y zona del Agave, dando una nas comunidades vegetales de México.
lista de las especies más notables y características. En los trabajos de Ochoterena en 1918 y 1919 y
Hasta 1900, los esfuerzos que se hicieron para vuelto a publicar en 1923), se diferencian las Re-
clasificar o enumerar las comunidades vegetales, giones Geográfico Botánicas de México, de una
en una gran proporción quedaron en intentos, pues forma similar a Martens y Galeotti (op. cit.); Ga-

Las comunidades vegetales de México 15


leotti (op. cit.),; Richard y Galeotti (op. cit.), y J. y ambiente en general, las formas dominantes de
Ramírez (op. cit.). plantas y animales.
En 1921 Sanders publicó un trabajo sobre las En 1943 Vivó, publicó: Los límites biogeográficos
Regiones Naturales de México, en el que basándo- en América y la zona cultural mesoamericana. Ano-
se en la fisiografía, el clima y la geología, hace una tando rasgos generales de la vegetación de México,
regionalización ecológica muy amplia del territo- principalmente de las regiones biogeográficas.
rio nacional, basado en Harshberger (1911), pre- Smith y Johnston en 1945, publicaron un tra-
senta un mapa de vegetación de México en escala bajo, A phytogeographic Sketch of Latin America, en
1:17, 500, 000 en donde distingue 7 grandes uni- el que destacan en un mapa las grandes unidades
dades de vegetación; la regionalización climática de vegetación, divididas en cinco grupos:
la fundamenta parcialmente en Ochoterena (1919); 1. Áreas boscosas o selvas.
para otras regiones se refiere a trabajos de botáni- 2. Pastizales, sabanas
cos como Lumholtz (1912) y Nelson (1911). 3. Regiones desérticas y semidesérticas
Shelford, en 1926, publicó un estudio desde el 4. Zonas montañosas
punto de vista conservacionista, en donde Nelson 5. Zona montañosa y litoral, etc.
y Goldman, cubren aspectos generales del clima y En 1946, Goldman y Moore en su trabajo sobre
la biota nativa de México, se describen las zonas de The Biotic Provinces of Mexico, presentan un mapa
vida y se da una lista de plantas por cada zona. de las 18 provincias que reconocen y mencionan las
En 1937 Ochoterena publicó un trabajo sobre especies vegetales dominantes. Por su parte, Leopold
“Esquemas Biotípicos y Sinecias características de en 1950, publicó Vegetation zones of Mexico, después
la geografía botánica de México”, una versión en Macias-Arellano en 1952, publicó una traducción,
inglés algo modificada, se publicó en 1943, como con el nombre “zonas de vegetación en México”. Este
“An outline of the geographic distribution of plants trabajo es uno de los más importantes, realizado so-
in Mexico”. En estos trabajos se nota un avance, pues bre la vegetación de México, aunque sólo se refiere a
diferencia las formas de vida o biotipos de las plan- las unidades de vegetación que mayor superficie ocu-
tas y su agrupamiento en sinecias, es decir las co- pan en el país, es una contribución significativa. Di-
munidades vegetales y su relación con las regiones vide el territorio nacional en: Zona Templada y Zona
geográfico botánicas; desafortunadamente ya no si- Tropical. En la Templada considera, 5 unidades de
guió profundizando en este sentido, pero estima- vegetación: el bosque boreal, el bosque de pino-en-
mos que es hasta esa fecha, uno de los mejores es- cino, el chaparral, el mezquital, el pastizal y desierto.
fuerzos para caracterizar las comunidades vegeta- La vegetación tropical la subdivide en siete uni-
les de México. dades: bosque con nubes, bosque lluvioso, bosque
En 1941 Contreras publicó un “Ensayo de loca- tropical siempre verde, sabana, bosque tropical de-
lización de las Simorfias vegetales dominantes en ciduo, bosque espinoso y matorral árido tropical.
la República Mexicana. Este autor se apoya en el Acompaña el trabajo con un mapa de vegetación
mapa de provincias climatológicas de Thornthwai- escala 1:2, 000,000. Consigna la superficie cubierta
te, utilizando la nomenclatura de Huguet del Vi- por cada zona de vegetación en millas cuadradas y
llar, con modificaciones de Cuatrecasas, hace el in- el porcentaje que ocupan respecto a la superficie
tento de reflejar la distribución de la vegetación de total. Ilustra el trabajo con algunas fotos de la vege-
México con relación al clima. tación.
Dice (1943), en su trabajo The Biotic Provinces of En 1962 Aubreville, publicó su trabajo titula-
North America menciona para cada provincia o zona, do Temas Fitogeográficos (cuadro 1, Anexo 1), en
además de información sobre su localización, clima el que a manera de introducción menciona que

16 Antecedentes
en 1952, el Consejo Científico Africano, tomó la una clave para determinar los Tipos de Vegetación (for-
iniciativa de reunir un grupo de expertos para maciones vegetales), distinguiendo 32 unidades, y un
pedirles la elaboración de un proyecto de nomen- apéndice para las formaciones con plantas muy es-
clatura y clasificación de las principales forma- parcidas o para los lugares casi desprovistos de vege-
ciones vegetales de Africa tropical, para lo que se tación, como Dunas Costeras, Desiertos Áridos Are-
reunieron en una Reserva conocida como Yan- nosos, Páramos por encima de la vegetación arbórea
gambi, en el Congo ex–Belga. Basado en este y Glaciares; completa el trabajo una lista de los tipos
acuerdo y después de un viaje de tres semanas, a de vegetación más importantes de México y climas en
parte de Puebla, Veracruz, La Península de Yuca- que se encuentran (según la clasificación climática de
tán, Chiapas y Oaxaca, Aubreville presenta un Köpen). Las fotografías con que ilustran el trabajo, la
Proyecto de clasificación de las principales for- mayoría son de A. Maya del Instituto de Geografía de
maciones vegetales de México en el marco de una la UNAM y un tercio de las 107, de F. Miranda. Este
clasificación general de las Formaciones Vegeta- trabajo representa un avance muy significativo en el
les Tropicales y Subtropicales. Las formaciones desarrollo de los estudios de vegetación de México,
vegetales las agrupa por las formas de vida do- pues al proponer un sistema de clasificación y nomen-
minantes (con árboles, y a veces con arbustos o clatura de las comunidades vegetales, se favoreció el
con herbáceas, graminoides y subarbustivas) de desarrollo de los estudios de vegetación propiamente
la siguiente manera: dichos y otros relacionados, como los que posterior-
A.- Formaciones forestales (con árboles dominan- mente realizó la COTECOCA, 1990 (Comisión Técnico
tes principalmente). Consultiva para la definición de los Coeficientes de
I. De bajas y medianas altitudes. Agostadero), (cuadro 2, Anexo 1) y la Comisión para
II. De altas altitudes el estudio de las Dioscoreas. En este trabajo se conju-
III. Formaciones edáficas gó la experiencia que sobre la Ecología de la Vegeta-
B.- Formaciones mixtas forestales (con árboles) y ción y la Florística habían desarrollado, los autores cada
gramíneas (o herbáceas o suculentas) uno por su lado. Cabe mencionar entre otros, los tra-
I. Bosques claros. bajos relativos de Hernández-X, acerca de: Estudios
II. Sabanas boscosas. sobre las palmas oleaginosas de México (1947 y 1949):
III. Estepas boscosas su colaboración en los estudios del Area de Rancho
C.- Formaciones gramíneas o herbáceas o de ve- del Cielo en Tamaulipas (1951), zonas fitogeográficas
getales enanos semileñosos. del nordeste de México (1953). Las zonas agrícolas de
I. Sabanas herbosas. México (1954); Los pastizales del noroeste” (1956-1957),
II. Estepas herbáceas o de suculentos o de vegeta- Las zonas agropecuarias de México (1957-1958), Los
les enanos semileñosos. zacates más importantes para la ganadería en México
III. Formaciones edáficas (1958-1959), Los pastizales de Chihuahua (1959) y
Miranda, y Hernández-X publicaron en 1959 Cla- zonas agrostológicas de Chihuahua, etc.
sificación de los Tipos de Vegetación de México, aplica- Por su parte, Miranda, desde su incorporación a
ble a los levantamientos forestales. Trabajo presentado la investigación botánico-ecológica de México, poco
en la segunda Convención Nacional Forestal, publi- a poco fue consolidando un amplio conocimiento
cado en mimeografo bajo el nombre de Apuntes de sobre las comunidades vegetales de México, a través
Geobotánica, en la sección de Bióticos: “Tipos de Ve- del estudio de la flora y la vegetación de diferentes
getación”. Posteriormente este trabajo, profusamen- lugares, como: La vegetación al sur de la meseta de
te ilustrado fue publicado en 1963 en el Boletín de la Anahuac (1941); Observaciones sobre la vegetación de
Sociedad Botánica de México, en el que presentan Tapachula (1942); El suroeste del estado de Puebla

Las comunidades vegetales de México 17


(1942); Sobre la vegetación y la flora de Acatlán, Pue. espinoso, matorral espinoso con espinas termina-
(1943); Rasgos de la vegetación en la cuenca del Río les, matorral alto subinerme, nopaleras, asociacio-
de las Balsas (1947), Observaciones botánicas en la nes de rosetófilos espinosos, etc.) Pastizales y zaca-
región de Tuxtepec (1948), La vegetación de la cuenca tonales, comunidades dominadas por diferentes es-
Alta del Papaloapan (1948), Características de la ve- pecies de gramíneas (zacates), tanto de clima árido
getación en la porción oriental de México (1950), en como semiárido y aun frío; diferencia los pastiza-
colaboración con A. J. Sharp La selva del Ocote al NE les edáficos (halófilos y gipsófilos) incluyendo las
de Ocozocuautla, Chis. (1952), La vegetación de Chia- sabanas. Respecto a los tipos de vegetación en zo-
pas (1952-1953), Un botánico al borde de la selva La- nas con clima cálido y subcálido, varían según este
candona (1953), Vegetación de la vertiente del Pacífi- autor, desde matorrales espinosos hasta selvas altas
co de la Sierra Madre de Chiapas (1953), Estudios acer- siempre verdes. Caracteriza los palmares y las sa-
ca de la vegetación en: Los recursos naturales del su- banas y de otras comunidades vegetales menos co-
reste y su aprovechamiento (1959); Tres estudios bo- nocidas, destaca la necesidad de hacer estudios so-
tánicos en la selva Lacandona, Chiapas, México, jun- bre ellas, como los manglares, las dunas costeras,
to con Arturo Gómez Pompa (1961). los páramos de altura, etc.
Este profundo conocimiento de la flora, la ve- En 1964, Wagner, en su artículo Natural Vege-
getación y los rasgos ecológicos se conjuntaron para tation of Middle America, propone una clasifica-
concretar el trabajo sobre los tipos de vegetación. ción genética–ecológica para distinguir las asocia-
Dicho trabajo presenta una clave para determinar ciones vegetales y sugiere siete grandes unidades
los tipos de vegetación (formaciones vegetales), de vegetación para México y América Central.
distinguiendo 32 unidades y un apéndice para las Scheinvar y Tamayo en 1966, en su trabajo, Dis-
formaciones con plantas muy esparcidas como son: cusión de una carta base para el estudio de las Pro-
Dunas costeras, Desiertos áridos arenosos, Pára- vincias Biogeográficas de México realizaron un es-
mos por encima de la vegetación arbórea y Glacia- tudio cronológico de recopilación bibliográfica so-
res; completa el trabajo una lista de los tipos de ve- bre la división de México en provincias fitogeográ-
getación más importantes de México y climas en ficas y zoogeográficas, como antecedente para la
que se encuentran, según la clasificación climática preparación de una carta biogeográfica de la Re-
de Köppen, justo es reconocer que la información pública Mexicana. Proponen finalmente “Un esbo-
climática de México y su relación con la vegetación, zo de una carta de las provincias biogeográficas de
principalmente la aportó la Maestra Enriqueta México”.
García Amaro (cuadro 3, anexo 1). (Para detalles Desde 1968 la COTECOCA, comenzó a editar las
de los trabajos antes citados I.K. Langman 1964. A Memorias sobre coeficientes de Agostadero de la
selected guide to the literature of the Flowering Plants República Mexicana. Uno de los primeros trabajos
of México. University of Pennsylvania. Library of fue sobre el estado de Coahuila, en el cual agrupan
Congress Catalog Number 64–10897. 1015). los tipos de vegetación siguiendo a Miranda y Her-
Gómez Pompa publicó en 1965 La Vegetación nández-X (1963). Así, para cada estado de la Repú-
de México en el Boletín de la Sociedad Botánica de blica, separan los tipos de vegetación en climáticos
México, se basó fundamentalmente, en el trabajo y edáficos y los subdividen por su potencial forra-
de Miranda y Hernández-X. (op. cit.). Agrupa las jero, en sitios de pastizal; hacen descripciones cli-
comunidades vegetales en tipos de vegetación de máticas, sensu Köppen, descripciones ecológicas de
zonas con clima templado y frío (pinares, encina- los sitios (topografía, geología, suelos), uso de sue-
res, bosque de Abies, bosque caducifolio), zonas con lo, etc. Cada Memoria la acompañan con perfiles
clima árido o semiárido (mezquitales, matorral no diagramáticos de la vegetación y mapas en escala

18 Antecedentes
1:500,000 ó 1:1, 000,000. Así cubrieron práctica- En 1974 González-Quintero publicó Tipo de Ve-
mente toda la República. getación de México en la obra El escenario geográfi-
La CETENAP (Comisión de Estudios del Territorio co. Recursos Naturales. De la serie México: Panora-
Nacional y Planeación, 1970); CETENAL (Comisión de ma Histórico y Cultural II del Instituto Nacional de
Estudios del Territorio Nacional; DETENAL (Dirección Antropología e Historia (cuadro 4, anexo 1). Para
de Estudios del Territorio Nacional), junto con la Di- denominar las comunidades vegetales se vale de tres
rección general de Geografía y la Dirección General términos, uno que refleja la estructura, otro el me-
de Estadística de la Secretaría de Economía confor- dio ambiente y el tercero que se refiere a un carácter
maron la coordinación Nacional de Información peculiar de la fisonomía de los dominantes. Su pro-
Estadística y Geografía la cual dio origen al actual puesta es consistente y novedosa. Basado en Leopold
Instituto Nacional de Estadística Geografía e Infor- (1950) y Sarukhán (1968), presenta un mapa sobre
mática (INEGI). Cabe mencionar que la carta de uso los Tipos de Vegetación de México, sin mencionar la
de suelo escala 1:50, 000, logró cubrir aproximada- escala.
mente el 35% de la superficie del país. Existe cober- En 1978 Rzedowski publicó “Vegetación de
tura Nacional en sus versiones escala (1:250, 000; 1:1, México”, con la parte correspondiente a la vegeta-
000, 000) en dos series. En las guías para la interpre- ción litoral marina a cargo de Laura Huerta M
tación de las cartas de uso del suelo, editados en 1978, (Cuadro 5, Anexo 1). Esta obra hasta la fecha, re-
se describen los “tipos de vegetación y aspectos agrí- presenta el trabajo más extenso e integrado del co-
colas” que se delimitan en la cartografía. Desde 1998 nocimiento que sobre la vegetación de México se
existen publicados los diccionario de datos de Uso tiene. Un capítulo muy importante es aquel rela-
del Suelo y Vegetación y puestos en la página web tivo a la Fitogeografía de México, de la cual pre-
del INEGI en 2001, donde se detallan los aspectos senta un mapa de las provincias florísticas de
referentes a la Vegetación, Natural y a la inducida con México, distinguiendo 2 Reinos y 4 regiones. En
su descripción genérica. cuanto a la vegetación, distingue 10 grandes uni-
Flores Mata, Jiménez López, Madrigal Sánchez, dades de vegetación, aunque cartográficamente
Moncayo Ruiz y Takaki Takaki (1971) (Madrigal sólo representa 9.
Sánchez, y Takaki Takaki, preclaros alumnos de J. Las grandes unidades de vegetación que distin-
Rzedowski), publicaron el “Mapa y descripción de gue (tipos de vegetación) constituyen comunida-
los Tipos de Vegetación de la República Mexicana”, des bióticas estables en función de los factores del
en el que describen los Tipos de vegetación de medio físico donde viven, o sea comunidades clí-
México y los representan en escala 1:2, 000,000. max, al menos en algunas partes del país, aunque
Diferenciaron 25 tipos de vegetación, describiendo acepta que algunas comunidades reconocidas son
su fisonomía y distribución, anotando la superficie francamente secundarias.
que ocupan en el país, presentan una clave para su Adoptando una actitud conservadora, procuró
identificación, con una diagnosis con fotos para la definir de tal manera los tipos de vegetación que se
mayoría y completan el trabajo con un mapa a co- facilitara su cartografía y que las categorías distin-
lor. Aunque algunas comunidades estuvieron repre- guidas, tanto por su distribución, como por su
sentadas sin tener un buen apoyo de trabajo de cam- nombre, pudieran compararse fácilmente con uni-
po, el trabajo en sí, significó un gran esfuerzo y re- dades de vegetación descritas de otras partes del
presenta un avance sustancial en el conocimiento y mundo. Completa su trabajo con un cuadro de
la cartografía de la vegetación del país. Completan equivalencias aproximadas entre los tipos de vege-
el trabajo con una síntesis comparativa de los tipos tación distinguidos por él y los que definen otros
de Vegetación de México. autores.

Las comunidades vegetales de México 19


Finalmente escribe que “La elaboración de una perficies forestales y otras cubiertas a varios niveles
nueva clasificación de la vegetación de México no de agregación.
figura entre los objetivos inmediatos de quien es- Se incluyen datos sobre las formaciones vegeta-
cribe, y en su opinión más vale esperar para hacer- les, la superficie que ocupan en el país y los por-
lo hasta que nuevas y más profundas aportaciones centajes del mismo, así como la superficie total y
permitan abordar el problema al nivel más apro- relativa de los tipos de vegetación y usos de suelo
piado y ofrecer así un cuadro realmente satisfacto- incluidos en el Inventario Forestal Nacional 2000-
rio para todo tipo de usuarios”. Rzedowski, 1978 2001. El trabajo se completa con un mapa de las
(pag. 154). Pese a lo anterior este trabajo es la obra formaciones vegetales escala 1:250, 000.
más completa y documentada sobre la vegetación González-Medrano y Trejo Vázquez presenta-
de México y de obligada consulta para todos aque- ron en el Simposio Nomenclatura de los tipos de
llos interesados en el tema. vegetación de México, dentro del XV Congreso
En 1978, González-Medrano en la Mesa Redon- Mexicano de Botánica, en octubre de 2001 el tra-
da sobre “Nomenclatura y caracterización de los bajo “Problemas y perspectivas para la clasifica-
tipos de vegetación en México”, organizada, por Gó- ción de la vegetación de México”, y finalmente,
mez-Pompa y González-Medrano, en el VII Con- González-Medrano, en 2002, presentó en la Re-
greso Mexicano de Botánica, presentó un trabajo unión de Expertos en Vegetación en América La-
sobre “Análisis Crítico de las Clasificaciones de la tina, en Quito, Ecuador, el trabajo “Una propues-
Vegetación de México” en el que resalta las incon- ta para la unificación (estandarización) de la cla-
sistencias en la nomenclatura y la clasificación de sificación y nomenclatura de la vegetación de
la vegetación. México”.
Balduzzi, y Tomaseli, 1978-1979, en su “Carta fi- De este análisis general del conocimiento que
sionomico-strutturale della vegetazione del Messi- de la vegetación de México y sus unidades, se resal-
co”. Describen los principales tipos de vegetación de tan algunos aspectos:
México, conforme a observaciones personales, re- En muchos de los trabajos, lo que se clasifica y nom-
presentándolos en un mapa a la escala de 1:4 000 bra, son rasgos del ambiente, del clima o del
000. Revisaron la mayor parte de la bibliografía rela- hábitat, más que de la vegetación misma.
cionada con el tema, desde fines del siglo pasado has- Otros trabajos se refieren más bien a aspectos fito-
ta 1978-1979. Diferenciaron 21 tipos principales de geográficos y/o florísticos.
vegetación y 10 subtipos, de acuerdo a sus caracte- Existe confusión en la clasificación y la nomencla-
rísticas fisionómicas y estructurales y con criterios tura de las comunidades vegetales.
bioclimáticos; indican las principales especies que los En la mayoría de los trabajos consultados, existe una
componen así como su distribución. inconsistencia en cuanto a los criterios emplea-
En 2000 Palacio-Prieto, Bocco y González-Me- dos para diferenciar, clasificar y nominar las
drano et. al. publicaron en el Boletín del Instituto unidades de vegetación reconocidas.
de Geografía UNAM, una nota técnica sobre in- Parte de estos problemas está determinado por el
vestigaciones geográficas, relativas a “La condición nivel de conocimiento en campo de las unida-
actual de los recursos forestales en México”; resul- des de vegetación, que generalmente es limita-
tado del Inventario Forestal Nacional 2000-2001. do, ya sea que se trate de tipos de vegetación;
Como productos de esta investigación obtuvieron formaciones; asociaciones; etc. Ya que si no se
121 mapas de la cobertura vegetal y uso del suelo pueden definir en campo las comunidades ve-
escala 1:250, 000; y 121 espaciomapas, ambos en getales difícilmente se pueden delimitar y clasi-
formato digital e impresos, así como datos de su- ficar para fines cartográficos (pag. 19).

20 Antecedentes
Capítulo II. Caracterización ambiental
de México y su correlación con la clasificación
y la nomenclatura de las comunidades
vegetales

1. C ARACTERIZACIÓN AMBIENTAL mismo origen geológico, con paisajes y tipos de rocas


DE M ÉXICO semejantes en la mayor parte de su extensión y con
geoformas similares. Las zonas así diferenciadas se les
La posición latitudinal que el territorio mexicano ha reconoce como provincias fisiográficas. En México se
tenido a lo largo de su evolución, los procesos de oro- han reconocido 15 de estas provincias. Según los Da-
genia y vulcanismo, el intemperismo y otros factores tos básicos de la geografía de México (INEGI 1991) és-
modeladores del paisaje, han hecho que nuestro país tas son:
tenga una gran diversidad de ambientes, lo cual se re-
fleja en la biota que se desarrolla en su territorio. 1. Península de la Baja California
Con el objetivo de hacer una caracterización am- 2. Llanura Sonorense
biental de México que sirva como marco de referen- 3. Sierra Madre Occidental
cia para ubicar a las comunidades vegetales, correlacio- 4. Sierras y Llanuras del Norte
nando su clasificación y nomenclatura con los rasgos 5. Sierra Madre Oriental
ambientales, a continuación se destacarán las provin- 6. Grandes Llanuras de Norteamérica
cias fisiográficas y sus caracteres geológicos, los tipos 7. Llanura Costera del Pacífico
de suelos, la variedad de climas y su correlación con 8. Llanura Costera del Golfo Norte
las comunidades vegetales. 9. Mesa del Centro
10. Sierra Volcánica Transversal o Eje Neovolcánico
A. L A GEOLOGÍA Y LAS PROVINCIAS 11. Península de Yucatán
FISIOGRÁFICAS DE M ÉXICO 12. Sierra Madre del Sur
13. Llanura Costera del Golfo Sur
A SPECTOS GEOLÓGICOS 14. Sierra de Chiapas y Oaxaca
15. Cordillera Centroamericana.
La gran diversidad de formas que presenta el relieve de
México, hace que sea uno de los países del mundo con 1. P ENÍNSULA DE LA B AJA C ALIFORNIA
mayor diversidad topográfica y geológica. Así, la diver-
sidad topográfica influye en las características climáti- Políticamente esta provincia fisiográfica ocupa los es-
cas, el tipo de suelo y la vida silvestre que la sustenta. tados de Baja California y Baja California Sur. En la
Con fines metodológicos, el territorio nacional porción norte destaca la Sierra de San Pedro Mártir,
puede subdividirse agrupando regiones que tengan un con alturas que sobrepasan los 3,000 m (La Encanta-

Las comunidades vegetales de México 21


da, 3,100 msnm). En Baja California Sur descuella la 4. S IERRAS Y L LANURAS DEL N ORTE
cordillera de origen volcánico, conocida como Sierra
de la Giganta. En esta provincia se localizan tres dis- Estas sierras ocupan parte de los estados de Chihu-
continuidades fisiográficas: el Desierto de Sebastián ahua y Coahuila. Esta provincia enclavada en un am-
Vizcaíno, con amplios llanos y médanos que se inte- biente árido y semiárido, se extiende hasta parte de
rrumpen hacia el oeste por la sierra volcánica del mis- los EE.UU. Sus sierras bajas y abruptas quedan sepa-
mo nombre; los Llanos de Magdalena, región con ba- radas entre sí por grandes bajadas y llanuras; son fre-
jos y bolsones, que se inundan durante la época de cuentes las cuencas endorreicas o bolsones, algunos
lluvias y cuya costa arenosa se ve interrumpida por el de ellos salinos, a veces con desarrollo de lagos tem-
desarrollo de lagunas (varias de ellas comunicadas con porales. En esta provincia se localiza una parte de la
el mar) y la Región del Cabo con serranías de granito. cuenca del río Conchos, afluente del Bravo, y en su
centro, el Bolsón de Mapimí. A 50 km al sur de Ciu-
2. L LANURA SONORENSE dad Juárez encontramos uno de los campos de dunas
(de arena) más extensos del país, el de Samalayuca. Al
La mayor parte de esta llanura se localiza en el esta- sur de esta provincia se extiende la Laguna de Mayrán
do de Sonora. Consta de una serie de sierras parale- o Bolsón de Coahuila y más al sur se continúa la anti-
las con una orientación nor-noroeste a sur-sureste, gua región lacustre de los bolsones de Viesca así como
separadas entre sí por grandes bajadas y llanuras ex- una pequeña zona de dunas, la de Bilbao.
tensas, que se van ampliando hacia la costa. Los ríos
Sonoyta y Concepción son intermitentes y se origi- 5. S IERRA M ADRE O RIENTAL
nan dentro de esta provincia. Aunque la mayor par-
te de la cuenca del río Colorado se ubica en los Esta provincia ocupa parte de los estados de Chihua-
EE.UU., forma un gran delta en su desembocadura hua, Coahuila, Nuevo León, San Luis Potosí, Queré-
en el Golfo de California. Al oriente de este río se taro, Tamaulipas, Hidalgo, Puebla y Veracruz. Sus
localiza una extensa zona de dunas, casi desprovis- montañas están constituidas por rocas sedimentarias
tas de vegetación, que llegan hasta la Sierra del Pi- de origen marino, calizas y lutitas, principalmente de
nacate, que con sus cráteres, mesetas de lava y su gran la era mesozoica; los estratos de estas rocas están do-
volcán El Pinacate que alcanza los 1,600 m sobre el blados a manera de grandes pliegues que forman una
nivel del mar, integran una discontinuidad fisiográ- sucesión de crestas alternadas con bajos; las cumbres
fica en esta provincia. oscilan entre los 2,000 y 3,000 m. Al oeste de Ciudad
Victoria existen ventanas erosionables que permiten
3. S IERRA M ADRE O CCIDENTAL observar los afloramientos de rocas más antiguas de
esta provincia: rocas metamórficas como gneises y es-
Ocupa parte de los estados de Sonora, Chihuahua, quistos del Precámbrico y del Paleozoico que consti-
Durango, Sinaloa, Nayarit y Zacatecas. Se inicia en tuyen el basamento de la sierra.
el área fronteriza con Arizona, EE.UU. y termina en
el río Santiago en Nayarit, en donde se conecta con 6. G RANDES L LANURAS DE N ORTEAMÉRICA
el Eje Volcánico Transversal. Constituye un impor-
tante sistema montañoso, de origen ígneo, volcáni- Esta provincia se distribuye en parte de los estados de
co en su mayor parte; la sierra se levanta hasta los Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas. Se extiende hasta
3,000 msnm con una región escarpada orientada al Canadá y se desarrolla en su mayor parte en los EE.UU.
occidente; hacia el oriente la sierra desciende a una Presenta una alternancia de llanuras y lomeríos com-
región con grandes mesetas. Las condiciones geoló- puestos por rocas sedimentarias del Terciario que no
gicas y fisiográficas tan peculiares de esta sierra han han sido plegadas fuertemente, por lo que muestran
propiciado la formación de cañones profundos so- un relieve suave, semejante a una penillanura. En algu-
bre su vertiente occidental, entre los que destaca el nas localidades afloran cuerpos intrusivos (Burgos, Ta-
cañón del Cobre, labrado por el río Urique y sus maulipas). A principios del Terciario hubo un fuerte
afluentes. depósito de sedimentos transportado por los ríos en la
llamada cuenca de Burgos, lo que originó la regresión

22 Caracterización ambiental
marina hacia el oriente, que continua hasta hoy; así, las ras más extensas se localizan en la zona de los Llanos
rocas más antiguas están depositadas al occidente y los de Ojuelos, en tanto que en la zona de los Altos de
depósitos más recientes al oriente. Las rocas más im- Guanajuato, las llanuras son menos extensas y las sie-
portantes son lutitas y areniscas. rras más frecuentes. Se presentan dos discontinuida-
des fisiográficas: la sierra de Guanajuato, con una se-
7. L LANURA COSTERA DEL P ACÍFICO rie de valles paralelos orientados al sudeste y la sierra
Cuatralba, de mesetas de lava escalonadas.
Esta provincia se localiza en parte de los estados de
Sonora, Sinaloa y Nayarit. Es una llanura costera an- 10. S IERRA V OLCÁNICA T RANSVERSAL O
gosta y alargada, cubierta en su mayor parte por ma- E JE N EOVOLCÁNICO
teriales depositados por los ríos, es decir aluviones,
que bajan hasta el mar desde la Sierra Madre Occi- Se distribuye en la porción central del país más o me-
dental. Los ríos forman deltas en sus desembocadu- nos en el paralelo 19° N. En parte de los estados de Na-
ras, como los de los ríos Yaqui, Fuerte y río Grande de yarit, Jalisco, Colima, Michoacán, México, Morelos,
Santiago. Hacia la costa se han desarrollado algunas Puebla, Tlaxcala, Veracruz y el D. F. Esta provincia se
lagunas y albuferas. extiende de oeste a este desde el océano Pacífico hasta
el Golfo de México y se considera como una enorme
8. L LANURA COSTERA DEL G OLFO N ORTE masa de rocas volcánicas, derrames de lava y otras ma-
nifestaciones ígneas de la era Cenozoica. En esta pro-
Se distribuye en parte de los estados de Tamaulipas, vincia se encuentran los grandes volcanes de México,
Veracruz y Nuevo León. Esta provincia se comparte como el Pico de Orizaba (5,610 msnm), Popocatépetl
con los EE.UU.; dentro del territorio mexicano se en- (5,465 msnm), Iztaccíhuatl (5,230 msnm), Nevado de
sancha hacia el norte a lo largo del río Bravo. Presenta Toluca (4,680 msnm), Nevado de Colima (4,240 msnm)
las características de una costa emergida y se ve inte- y volcán de Colima o de Fuego (3,838 msnm).
rrumpida por algunas sierras aisladas como la de Ta- Resultan características de esta provincia las am-
maulipas, de San Carlos y Cruillas, la Serranía del plias cuencas cerradas ocupadas por lagos como los
Burro, etc. Hacia el noroeste hay una alternancia de de Pátzcuaro y Zirahuén, o los depósitos de lagos an-
lomeríos con extensas llanuras. Existen lagunas cos- tiguos, como los de la cuenca endorreica del mal lla-
teras, siendo las mayores: la Laguna Madre, la Laguna mado Valle de México, o bien la presencia de cuencas
de Catemaco y la Laguna de San Andrés. La mayor hundidas como la de Chapala convertida en la actua-
parte de las rocas son sedimentarias, calizas y lutitas lidad en un lago.
cretácicas en las Sierras de San Carlos y de Tamauli-
pas; calizas terciarias y lutitas depositadas al noreste 11. P ENÍNSULA DE Y UCATÁN
de Tamaulipas (cuenca de Burgos) y otras al sudeste
(cuenca de Tampico-Misantla). En esta provincia es Localizada en los estados de Campeche, Yucatán y Quin-
posible encontrar intrusiones de rocas ígneas ácidas e tana Roo, es, en términos estrictamente fisiográficos,
intermedias, rocas de origen volcánico y básicas, del una gran plataforma de rocas calcáreas marinas que ha
Terciario al Cuaternario, distribuidas al norte de Ta- venido emergiendo de los fondos marinos desde hace
maulipas y cerca de Ciudad Mante. millones de años; la parte norte de la península se con-
sidera resultado de un periodo más reciente. Existe una
9. M ESA DEL C ENTRO pequeña cadena de lomeríos bajos que se extiende des-
de Maxcanú hasta Peto (Yucatán), y que se conoce re-
Localizada en parte de los estados de San Luis Potosí, gionalmente como Sierrita de Ticul. En la Península se
Guanajuato, Jalisco, Aguascalientes, Querétaro y Zaca- ha formado una extensa red cavernosa subterránea, por
tecas, entre las sierras Madre Occidental, Madre Orien- la que escurre el agua hacia el norte; es de destacar tam-
tal y al norte del Eje Volcánico Transversal. Las atra- bién la profusión de cenotes (dolinas) y uvalas que
viesa un río importante, el Lerma. Está constituida muestran la red de drenaje subterráneo.
por amplias llanuras interrumpidas por sierras dis- En la parte sur de Campeche existen algunos ríos
persas, la mayoría de naturaleza volcánica. Las llanu- como El Palizada, El Candelaria y El Champotón, y

Las comunidades vegetales de México 23


en los límites entre Quintana Roo y Belice, el río Hon- Es de destacar también el lago de Catemaco, enorme
do. En el estado de Quintana Roo, existen dos exten- caldera volcánica.
sas lagunas, la de Bacalar, cerca de los límites con Belice
y la de Chichancanab en Yucatán. 14. S IERRA DE C HIAPAS Y O AXACA
Un rasgo topográfico característico de la Penínsu-
la son las “aguadas”, lagunas de aguas someras ordi- Se extiende por la parte norte de Chiapas y sur de Ta-
nariamente de pequeño tamaño que se forman a par- basco. Incluye las sierras del noroeste y noreste de
tir de cenotes antiguos que, por erosión, pierden la Chiapas, así como la altiplanicie al sur del estado. Di-
verticalidad de sus paredes y su fondo se va rellenan- chas sierras están integradas por rocas calizas simila-
do por el depósito de arcillas poco permeables, que lo res a las de la Sierra Madre Oriental. Al noroeste se
elevan y terminan por colocarlo por encima del nivel localiza el imponente Cañón del Sumidero por don-
de circulación de las aguas subterráneas. En otros ca- de fluye el río Grijalva y al centro-sur de la provincia
sos, el hundimiento de la bóveda de las cavernas no se encuentra la Depresión central de Chiapas, en don-
llega al nivel de circulación de las aguas subterráneas de está la presa de la Angostura.
formándose un tipo de dolina (cenote), cuyo fondo
se va rellenando de suelo rojizo; estos hundimientos 15. C ORDILLERA CENTROAMERICANA
en forma de embudo y sin agua en el fondo reciben el
nombre de “joyas” (hoyas). Ocupa parte de Chiapas y Oaxaca. Aunque abarca
principalmente los países septentrionales de la Amé-
12. S IERRA M ADRE DEL S UR rica Central, esta provincia tiene una importante ex-
tensión en México: es una cadena montañosa for-
Comprende parte de los estados de Jalisco, Colima, mada por un antiguo batolito cuya edad varía del
Michoacán, Guerrero y Oaxaca. Es una sierra muy Paleozoico inferior al medio; con elevaciones de 900
compleja, que presenta montañas formadas por ro- a 2,900 msnm, altura que se alcanza en las inmedia-
cas de diversos tipos, con predominancia de rocas vol- ciones del volcán de Tacaná (4,117 m) formado por
cánicas, metamórficas y sedimentarias. La Sierra Ma- rocas ígneas (extrusivas y andesitas). La porción su-
dre del Sur tiene como basamento rocas cristalinas y perior de las rocas del basamento está cubierta por
metamórficas, calizas plegadas y otros sedimentos así rocas de diferentes edades, que varían desde cuarsi-
como lavas e intrusiones. tas del Paleozoico medio (sur de Tehuantepec) hasta
Al norte de esta sierra se localiza la gran depre- calizas cretácicas (entre La Concordia y Cintalapa,
sión del Balsas y la región de los valles de Oaxaca. Chiapas). Al sureste de Tuxtla Gutiérrez, la porción
Constituye el parteaguas de la vertiente del Golfo y de la Planicie costera de Chiapas está recubierta por
del Pacífico. Al norte queda limitada por el Eje Vol- aluviones recientes y es posible encontrar aflora-
cánico Transversal y al este con el Istmo de mientos aislados de gneis, mármol y esquistos, que
Tehuantepec. han sido intrusionados por rocas graníticas más re-
cientes y cubiertas en parte por rocas volcánicas del
13. L LANURA COSTERA DEL G OLFO S UR terciario superior. Hacia la costa destacan disconti-
nuidades dadas por albuferas (lagunas costeras se-
Abarca las regiones costeras de Veracruz y Tabasco. paradas del mar por una barra).
Localizada en la parte baja de la vertiente de la Sie-
rra Madre Oriental, abundan suelos profundos for- B. E L FACTOR CLIMA
mados por materiales depositados por los ríos, pues
en esta región desembocan algunos de los más cau- G ENERALIDADES
dalosos de México, como el Grijalva, el Usumacinta,
el Coatzacoalcos y el Papaloapan. Al norte de Chia- El clima de México, como el de otras partes del mun-
pas y al oriente de Tabasco se tienen grandes zonas do, está determinado por diferentes factores, como la
inundables con abundancia de pantanos permanen- latitud geográfica, la altitud con respecto al nivel del
tes. La sierra de los Tuxtlas, de origen volcánico, in- mar, la distribución y la proporción de tierras y mares
terrumpe el paisaje de esta provincia sobre la costa. así como por diversas condiciones atmosféricas, como

24 Caracterización ambiental
la temperatura, la precipitación, la presión y la nubo- la Cuenca del Balsas y la Depresión central de
sidad, entre otras. Chiapas, en donde se extiende hasta una altitud de
El Trópico de Cáncer (paralelo 23° 27’) de latitud 1,300 msnm.
norte divide a nuestro país en dos partes casi iguales;
esta línea imaginaria que cruza los estados de Baja Grupos de climas B (secos)
California Sur, Sinaloa, Durango, Zacatecas, San Luis
Potosí y Tamaulipas, deja la mitad sur del territorio Debido a la situación de la República Mexicana en la
nacional dentro de una zona climática tropical y al zona de alta presión y aires descendentes y a la orien-
norte como subtropical (INEGI 1991). tación general de sus amplias sierras en relación con
La presencia de ambas cuencas oceánicas, por su los mares, existen en nuestro país, especialmente en
acción amortiguante marítima, propician invasiones su porción septentrional, amplias regiones con cli-
considerables de masas de aire húmedo que penetran mas áridos Bw o Bs. Los Bw se localizan en la parte
al país procedentes del Golfo de México y del océano norte de la Altiplanicie mexicana, a altitudes meno-
Pacífico, lo que contribuye a la presencia de un clima res a los 1,500 m así como en parte de la Llanura
en gran medida isotermal, y salva al país de los efectos costera del Pacífico, situada al norte del paralelo 25°
de continentalidad, los cuales consisten en enfriamien- norte y en las zonas costeras de la Península de Baja
tos y calentamientos excesivos en invierno y en vera- California, exceptuando el noroeste, en donde el cli-
no, respectivamente. ma es BS.
Lo anterior hace que nuestro país cuente con una Los climas BS se encuentran bordeando a los BW,
uniformidad termal relativa a lo largo del año; por esto en la parte norte de la Altiplanicie así como en los
las diferencias entre las estaciones frías y cálidas del declives de la Sierra Madre Occidental, que se elevan
año no resultan muy extremosas, especialmente en las de la Llanura Costera del Pacífico al norte del paralelo
regiones del centro y sur del país, y sólo en el norte de 23° norte, y en la porción central y noroeste de la pe-
la República estas variaciones en los factores del cli- nínsula de Baja California. Se extienden también en
ma son evidentes, por ejemplo en el Norte de Chihua- las zonas interiores del centro y sur del país, que se
hua (Ciudad Juárez). encuentran menos expuestas a la influencia de los
En México están representados los grupos de cli- vientos húmedos del mar, como sucede en algunas
mas A, B y C de Köppen. El clima E se encuentra sólo porciones de la parte sur de la Altiplanicie, en las par-
en áreas muy reducidas. En un país tropical como el tes más bajas de la cuenca del Balsas, y las cuencas
nuestro, los climas D o boreales, sensu Köppen, no más altas de los ríos Verde, Mixteco, Tlapaneco,
existen (García Amaro 1964). Papaloapan y Tehuantepec.

G RUPOS DE CLIMAS Grupo de climas C (templados lluviosos, con tem-


peratura media del mes más frío entre –3 °C y 18
Grupos de climas A (tropicales lluviosos, con tem- °C y la del mes más caliente mayor de 10 °C).
peratura media del mes más frío mayor de 18 °C)
Existen en México, amplias zonas con clima C que
Los climas A se extienden a lo largo de las vertientes se localizan en las zonas montañosas o llanuras de
de ambos mares. En la costa del Pacífico se distribu- altitud superior a 800-1,000 msnm, en lugares en
yen desde el paralelo 24° norte hacia el sur y abarcan donde la temperatura media de un mes desciende,
desde el nivel del mar hasta una altitud de unos 800 a por lo menos, por debajo de 18 °C. Los límites entre
1,000 m. estos climas y los climas A, B o E, dependen de la
Por el lado del Golfo de México comprenden altitud, de la latitud y de la exposición a los vientos
desde el paralelo 23° latitud norte, hacia el sur a lo húmedos. En aquellas zonas que se encuentran di-
largo de la Llanura Costera, de la base de los decli- rectamente expuestas a la influencia de vientos hú-
ves correspondientes de la Sierra Madre Oriental, y medos, la transición es de climas calientes húmedos
de las montañas del norte de Chiapas. Se encuen- A, a climas C; en cambio, en las zonas menos ex-
tran también en la mayor parte de la Península de puestas a dichos vientos, la transición es de climas
Yucatán así como en algunas zonas interiores como secos B a climas C.

Las comunidades vegetales de México 25


Climas E (fríos, con temperaturas medias del mes los valores medios mensuales, así como entre los máxi-
más caliente menores a 10 °C) mos y mínimos diarios. Las temperaturas máximas
absolutas varían desde los 38 °C a los 49 °C, mientras
Los climas E en México se encuentran reducidos a las que las mínimas absolutas oscilan de 0, 2 ó 3 °C hasta
partes más altas del Eje Volcánico, en donde la tem- los 16 °C.
peratura media del mes más caliente, debido al au- En cuanto a la precipitación el Atlas Nacional de
mento en altitud, desciende por debajo de 10 °C. México (UNAM 1990) indica que las regiones con
menos de 125 mm anuales se localizan en el extremo
L AS REGIONES CLIMÁTICAS DE M ÉXICO noreste del estado de Sonora, sur y noreste de Baja
Y SU VEGETACIÓN California y en el extremo noreste de Baja California
Sur. Las regiones con precipitaciones que van desde
En México a los términos tropical, subtropical y tem- los 125 mm (excluyendo los lugares anteriores) hasta
plado se les ha dado un significado climático más que los 400 mm se encuentran en la Península de Baja
puramente geográfico y así, se han usado para clasifi- California, norte, centro y suroeste del estado de So-
car a la vegetación. Por ejemplo, Leopold (1950) divi- nora, Chihuahua, Coahuila y parte de Nuevo León,
dió al país en región tropical y templada, incluyó en norte y centro de San Luis Potosí. Los sitios con pre-
ella las zonas áridas y semiáridas, y ubicó en las regio- cipitaciones entre 400 a 600 mm anuales se hallan en
nes climáticas las grandes unidades de vegetación que parte de los estados de Sinaloa, Sonora, Chihuahua,
distingue y nombra para México. Durango, Aguascalientes, San Luis Potosí, Querétaro,
La COTECOCA (1994) dividió al país en zonas tropi- Hidalgo, Nuevo León, Tamaulipas y noreste de
cales, diferenciando el trópico húmedo y el trópico Coahuila, así como en pequeñas porciones aisladas
seco, zonas templadas y zonas áridas y semiáridas de los estados de Tlaxcala, Puebla y Oaxaca o en re-
como un marco donde ubicar sus esfuerzos de giones extremas como el desierto de Altar en Sonora,
revegetar y reforestar las áreas sujetas a explotación en donde la precipitación promedio anual es de 50
ganadera en el país. mm y aun algunos sitios con valores muy bajos, como
Ampac, Bataques o Estación Delta en Baja California,
Z ONAS ÁRIDAS Y SEMIÁRIDAS con 30.5 mm; San Felipe, Estación El Mayor, en So-
nora con 40.7 y 40.9 mm, respectivamente (García
Las zonas áridas ocupan en el país una superficie de 1981).
95 millones de hectáreas, lo que equivale al 48.29% Las comunidades vegetales que se desarrollan bajo
del territorio nacional. De este total, la COTECOCA estos climas varían desde pastizales, matorrales e in-
(1994) estima que, alrededor de 39 millones de ha (el clusive, bosques bajos, principalmente espinosos
20% aproximadamente) se clasifican como zonas se- como los mezquitales.
miáridas y el resto, 28%, corresponde a zonas áridas.
Se localizan principalmente en las partes bajas de Z ONAS TROPICALES
Sonora, Baja California, Baja California Sur y en el
centro-norte del país, en porciones de los estados de En 1990, la COTECOCA estimó que las zonas tropicales
Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Zacatecas, San de México ocupan una superficie de 55.7 millones de
Luis Potosí, Durango y Tamaulipas. hectáreas, lo que equivale al 28.3% de la superficie
Una región semiárida se localiza al noreste de Méxi- nacional.
co, en parte de Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas. Las zonas tropicales se localizan en la porción su-
Al centro y sur del país se encuentran algunas áreas reste del país, ocupan la totalidad de la Península de
que tienen condiciones de semiaridez, en parte de los Yucatán, desde donde se extienden por la franja coste-
estados de Querétaro, Hidalgo, Puebla, Oaxaca e, in- ra del Golfo de México hasta el estado de Tamaulipas.
clusive de Guerrero. Por el litoral del Pacífico se distribuyen desde Chiapas
La Comisión Nacional de las Zonas Áridas (CONA- hasta Sonora y Baja California Sur en la región de Los
ZA 1994) indica que en las zonas áridas y semiáridas, Cabos. También en el Altiplano se encuentran zonas
las temperaturas medias anuales varían desde los tropicales en parte de los estados de México, Querétaro,
15 °C hasta los 25 °C, con grandes oscilaciones entre Puebla, Morelos, Guanajuato, Zacatecas y Aguasca-

26 Caracterización ambiental
lientes. La COTECOCA dividió las zonas tropicales en tró- aunque se localiza dentro de la faja tropical de la Tie-
pico húmedo y trópico seco. rra, tiene un clima benigno por encontrarse entre los
1,500 y los 2,500 msnm. Por la gran diversidad de cli-
T RÓPICO HÚMEDO mas que se presentan en las zonas templadas es co-
mún que la precipitación pluvial vaya desde los 500
Las zonas del trópico húmedo cubren una superficie hasta los 2,500 mm anuales, aunque puede descender
de 24 millones de ha, es decir, un 12.2% de la superfi- hasta los 300 mm en el caso de los climas secos y au-
cie del país; comprende las regiones ecológicas ubica- mentar hasta los 3,000 mm en el caso de los climas
das a menos de 1,000 m de altitud con las siguientes semicálidos.
temperaturas: media anual superior a 20 ºC; del mes La temperatura media anual de estas zonas varía
más frío, 17.7 ºC y mínima extrema de 0 ºC, con una desde los 12 ºC hasta los 22 ºC; no obstante, puede
precipitación pluvial generalmente superior a los 1,300 bajar a alrededor de los 6 ºC o alcanzar los 24 ºC. En
mm anuales, distribuida en un período de 200 a 365 los climas secos y templados, las comunidades vege-
días. La vegetación que caracteriza a esta región son tales de encinar, pino–encino, pinar, oyametal, mato-
selvas o bosques perennifolios y subperennifolios. rrales esclerófilos así como los pastizales de altura
(zacatonales) y los pastizales inducidos, se han usado
T RÓPICO SECO para delimitar las zonas templadas. Los límites
altitudinales de estos tipos de vegetación oscilan en-
El trópico seco ocupa una superficie de 31,712,000 tre los 800 m y los 4,000 m.
ha, lo que equivale al 16.1% del territorio nacional. Se
localiza a altitudes variables desde los 100–150 m hasta C. E L FACTOR SUELO
los 1,800–1,900 msnm, con una temperatura media
anual superior a 18 ºC; del mes más frío 16 ºC y míni- G ENERALIDADES
ma extrema de –4 ºC con heladas frecuentes y una
precipitación pluvial de 600 a 1,300 mm al año, dis- La parte exterior de la corteza terrestre en contacto
tribuidas en un período de 115 a 175 días, con una con la atmósfera está constituida por una capa más o
marcada estacionalidad en la precipitación. La vege- menos gruesa de material fragmentario no consoli-
tación que caracteriza a esta zona son los bosques o dado que se conoce con el nombre de “regolita” y que
selvas caducifolias y subcaducifolias, generalmente ba- se apoya en la roca subyacente. El suelo es la parte ex-
jas o medianas. terior de la corteza terrestre en donde las rocas se han
desintegrado por efecto del intemperismo, formando
Z ONAS TEMPLADAS una cubierta en la que vive una microbiota, una flora
y una fauna microbianas que, actuando como un ver-
Las zonas templadas de México ocupan una superfi- dadero laboratorio, transforman materia mineral en
cie de alrededor de 46 millones de ha, lo que equivale alimento de las plantas, para que puedan ser utiliza-
al 23.4% del territorio nacional. Se distribuyen prin- das posteriormente por los animales y los seres hu-
cipalmente en cuatro regiones fisiográficas: la Sierra manos. Es decir, el suelo es el recurso natural que,
Madre Occidental, el Eje Neovolcánico, la Sierra Ma- unido al agua en forma de lluvia o corrientes, permite
dre Oriental y la Sierra Madre del Sur. el establecimiento de las actividades forestales, gana-
Según García (1981), los climas templados se ca- deras y agrícolas. Así, el suelo se interpreta como el
racterizan por tener temperaturas medias anuales en- resultado de la interacción del clima, la roca madre, el
tre 5 ºC y 18 ºC pero con una temperatura media del drenaje, la topografía, los microorganismos y la vege-
mes más frío superior a los -3 ºC y con la temperatura tación a lo largo del tiempo.
media del mes más caliente superior a los 10 ºC. Para Los suelos zonales son los formados bajo influen-
nuestro país es difícil establecer una cifra única de la cias de carácter general que predominan en una pro-
precipitación ya que este dato, junto con el de la tem- vincia climatológica o zona con un mismo clima. Los
peratura, se utilizan para decidir si un lugar tiene o suelos intrazonales son los que resultan del predomi-
no clima templado. Algunos autores, como De Alba nio de las fuerzas locales sobre las características ge-
(1976), señalan que la región templada de México, nerales y que se muestran como excepción dentro del

Las comunidades vegetales de México 27


panorama general de la provincia climática; general- pitaciones pluviales, temperaturas elevadas y condi-
mente su área de distribución es limitada. Un factor ciones de fácil drenaje. Este proceso da lugar a los gran-
local, por ejemplo un drenaje insuficiente, puede in- des grupos de suelos llamados lateríticos.
terferir en el proceso general de intemperización, pro- Los suelos de lateritas son suelos rojos, porosos,
duciendo suelos muy particulares como los salitrosos ricos en hierro, que se endurecen al orearse. Se piensa
en los climas secos y los pantanosos en los húmedos. que existen en la Planicie costera del Pacífico asocia-
Los suelos maduros son aquellos que tienen ca- dos a vegetación de selvas medianas a altas.
racterísticas bien marcadas, desarrolladas por el cli- Los suelos lateríticos se forman en las áreas tropi-
ma y la vegetación, así como por la influencia del de- cales, bajo climas cálidos en los que se alterna la se-
clive y la roca madre. Resultan diferentes a los suelos quía y la humedad. Se desarrollan a partir de rocas
jóvenes, llamados azonales, en los que estas caracte- básicas, un drenaje fácil, procesos que normalmente
rísticas no han tenido el tiempo de desarrollarse y que requieren de mucho tiempo para desarrollarse. Final-
son consecuencia de la erosión, la sedimentación y la mente, se forman los típicos lateríticos, suelos rojos y
acumulación de los productos de las actividades vol- los migajones rojos, localizados en regiones húmedas
cánicas. Encontramos ejemplos de ello en las vegas o de climas calientes, en la Planicie costera del Golfo,
zonas inundables, en las dunas móviles, los aluviones en la región veracruzana hacia los Tuxtlas; al norte de
recientes y en los suelos llamados litosoles o suelos de la Sierra de Juárez, Oaxaca y en pequeñas áreas de la
rocas, y en general en aquellos formados por mate- Planicie costera del Sureste, asociados a vegetación de
riales geológicos aún no consolidados. selvas altas y medianas.
Los suelos minerales proceden de la desintegra- Los suelos de terrarrosa se derivan de calizas que
ción y descomposición de rocas, a diferencia de los tienen semejanza con los migajones rojos de los tró-
orgánicos, que se han producido por la degradación y picos; la caliza, al intemperizarse, tiene un drenaje fá-
acumulación de restos vegetales. cil y una erosión moderada o ligera. Presenta dos ti-
Los suelos primarios son los que tienen su origen pos de suelos: negros, café grisáceos o negro grisáceo
sobre la roca madre, como los litosoles, pero si fueron y los rojos o café rojizo. A los suelos negros calizos y
arrancados de su sitio y transportados lejos de su lu- margosos de los climas tropicales se les conoce como
gar de origen para posteriormente ser intemperizados, rendzinas, comunes en áreas montañosas de Chiapas,
se conocen como suelos secundarios, y constituyen la en la Sierra Madre Oriental, cerca de Xalapa, en
mayoría de los que existen sobre la superficie de nues- Zongolica y en la Sierra de Juárez en Oaxaca. Están
tro planeta. frecuentemente asociados a los bosques caducifolios
Los suelos coluviales son aquellos cuyo material o bosques mesófilos de montaña.
fue arrastrado por gravedad. Los aluviales o de alu- Los suelos de color rojo o café rojizo, que están
vión, son los que su material fue arrastrado por el agua. formados por arcillas saturadas incompletamente
Son eólicos si la fuerza del viento los hizo moverse y con óxidos libres, resultado de un proceso de
glaciares cuando el material rocoso fue transportado laterización, comprenden suelos calizos café y roji-
y depositado por un glaciar. zos de los climas templados y suelos rojos de los tró-
picos, que son conocidos con el nombre de terra-
P ROCESOS EDAFOLÓGICOS rrosa. Han sido estudiados en el noreste de Yucatán,
asociados a las selvas bajas caducifolias o bosques
Los agentes climáticos son predominantes como for- tropicales caducifolios. También se han encontrado
madores de los suelos, así la correlación del trinomio este tipo de suelos en el sur de Tabasco y Campeche
clima–vegetación–suelo ha permitido conocer parte asociados a selvas medianas o a bosques tropicales
de los procesos edafológicos y los grandes grupos de subperennifolios.
suelos a que han dado lugar, así como su correlación Los suelos amarillos lateríticos forman un grupo
con el clima y las condiciones bajo las que se han for- mal definido que puede encontrarse en los trópicos y
mado. Se aceptan como fundamentales siete proce- más frecuentemente en los climas semicálidos y tem-
sos edafológicos, que se describen a continuación: plados. Se consideran suelos de transición entre los
1. Laterización. Es un proceso de intemperización suelos rojos tropicales y los café forestales y que se
intenso producido bajo un clima con grandes preci- asocian con frecuencia a una vegetación de coníferas.

28 Caracterización ambiental
2. Podzolización. Es un proceso de lixiviación com- riores produciendo la concentración de las sales en las
pleta de las sales alcalinas y alcalinotérreas, favorecido capas superficiales del perfil.
por una humedad abundante y fácil drenaje. Los sue- La desecación de lagunas o marismas también pro-
los se acidifican, retienen el sílice pero el humus y los duce elevadas concentraciones de sales, como la ocu-
sesquióxidos de hierro y de aluminio son arrastrados, rrida en las lagunas de Mayrán y Viesca o en el Vaso de
quedando el horizonte superior blanquecino y pobre Texcoco. La salinización da origen a los suelos salitro-
de otros materiales. También se desarrolla un hori- sos, también llamados salonchak, que se caracterizan
zonte inferior de acumulación oscuro, rico en humus por un exceso de cloruros y sulfato de sodio. Los sue-
y sesquióxidos, característico de las regiones bien los ensalitrados tienen un perfil uniforme sin hori-
drenadas de los climas fríos y húmedos. Se asocian zontes, ni estructuras definidas, debido a la floculación
con vegetación de coníferas y bosque de encino o mix- de las arcillas; en la temporada de secas aparecen man-
tos de pino–encino. El proceso de podzolización da chas blanquecinas formadas por las sales concentra-
lugar a tres grupos de suelos: los suelos café forestales, das; al llover o regar, las sales concentradas en la su-
los podzoles y los suelos de pradera. perficie se disuelven y son arrastradas temporalmente
3. Calcificación. Proceso de lixiviación incomple- al subsuelo. La vegetación que sustenta varía de hier-
to, con un horizonte de acumulación de carbonato de bas anuales a perennes halófilas y a pastizales salinos.
calcio en el perfil del suelo. El clima seco o árido bajo 5. Solonización. Es el proceso de transformación de
el cual se desarrolla no permite que la lluvia pueda sales de salitre en carbonato de sodio y, en general, en
arrastrar los carbonatos de calcio hasta debajo del carbonatos que tienen una reacción alcalina concentra-
subsuelo. Generalmente se vinculan con vegetación da. En México, se les conoce regionalmente como álcali
natural de matorral xerófilo y de pastizal. Son suelos negro o tequesquite. Este proceso produce los suelos lla-
de clima con humedad deficiente, donde el suelo no mados tequesquitosos o solonetz, también llamados sue-
se acidifica y los coloides no se dispersan. los alcalinos. La vegetación que sostienen estos suelos son
La capa superficial u horizonte A es bastante rica comunidades de halófitas, como los pastizales.
en materia orgánica. Se les ha dividido en: suelos ne- 6. Solotización. Proceso de degradación del suelo a
gros o chernozem; suelos castaños o chesnut; suelos causa de lixiviaciones reiteradas, que hacen perder el
semidesérticos café grisáceos, también llamados ácido silícico; como resultado de este proceso se for-
sierozem y suelos desérticos grises y rojos. man los suelos alcalinos degradados, éstos se asocian
Las rendzinas son suelos inmaduros cuyo perfil con los suelos salitrosos y los tequesquitosos aun en el
se ha definido por la naturaleza de la roca madre de mismo lugar. También soportan una vegetación halófila.
origen calizo. Dentro de esta denominación se en- 7. Gleización. Este proceso se caracteriza por la
cierra a los suelos calizos grises y blancos de los cli- intemperización basada en oxidaciones y reducciones
mas templados y los negros calizos y margosos de alteradas, con un horizonte coincidente con el nivel
los trópicos. La vegetación natural con la que se aso- del agua del subsuelo; el manto freático es variable y
cia varía según el clima, incluyendo matorrales se mantiene cerca de la superficie. El horizonte modi-
xerófilos, bosques de coníferas y encinos y aun sel- ficado o gleizado se distingue por su color gris azuloso,
vas o bosques tropicales. con grandes manchas y a veces con manchas rojizas
4. Salinización. Es la acumulación de sales solu- como resultado de la presencia de hongos. Este hori-
bles en el perfil del suelo, tanto cloruros y sulfatos de zonte aparece en el fondo de lagunas y pantanos y es
sodio, de potasio, de calcio de magnesio y de algunas el resultado de la capa turbosa de acumulación de la
otras sales. En todo proceso de intemperización estas materia orgánica en el horizonte superior del suelo.
sales, con un buen drenaje, son eliminadas mediante Este proceso puede llevarse a cabo en diferentes cli-
el escurrimiento subterráneo cuando hay lluvia abun- mas (fríos, templados y calientes), siendo necesaria la
dante o por infiltración se concentran en la masa del presencia de un manto freático alto, de nivel variable,
suelo; si el drenaje es deficiente, las sales solubles for- siempre y cuando el drenaje y las aguas no favorezcan
madas en el propio suelo y las transportadas, son par- el depósito de álcalis. Este proceso da origen a tres gru-
cialmente eliminadas o no se eliminan y si el manto pos de suelos: gleizados, turbosos y de tundra. Son más
freático es, además, poco profundo, el proceso de eva- frecuentes en zonas templadas y frías, a veces por en-
poración se presenta muy intenso en las capas supe- cima de la vegetación arbórea. Las comunidades ve-

Las comunidades vegetales de México 29


getales que se forman en estos suelos, son comunida- porte, pero que no ha podido transformar aún los ma-
des de herbáceas acuáticas tanto de plantas superio- teriales. Dentro de estos se diferencian los siguientes
res como de musgos. dos tipos: a) suelos de coluvión, que son detritos ro-
Suelos geológicos o azonales. Cuando los agentes cosos producto del intemperismo, desplazados lade-
del intemperismo, como el clima, la biota o el drena- ra abajo por la fuerza de gravedad; b) aluviones: de-
je, no han sido lo suficientemente activos o no han pósitos sedimentarios, formados por corrientes
dispuesto del tiempo necesario para transformar la fluviales en el cauce y la llanura de inundación de los
composición química de la roca madre, se forman valles fluviales. La vegetación que soportan es muy
estos suelos, que podemos distinguen en tres grupos: variada, según las características del clima.
Litosoles: son resultado de la erosión intensa y la
actividad volcánica; se les localiza en las cimas o en P RINCIPALES TIPOS DE SUELOS DEL TERRITORIO
MEXICANO

La FAO y la UNESCO (1970) han propuesto un siste-


Ecotonía: material ígneo y aluvión. Foto: FGM.

ma mundial de clasificación de los suelos. El INEGI


ha adoptado esta clasificación para caracterizar los
tipos principales de suelos para el territorio nacional,
como son:
Regosol (del griego Rheros: manto, cobija; relativo
a la capa de material suelto que cubre la roca). Son
suelos poco desarrollados, constituidos por material
suelto, muy semejante a la roca de la cual se originó;
dependiendo del tipo de clima sustentan cualquier
tipo de vegetación. Muy abundantes en el país, en te-
rrenos montañosos, sobre todo en el norte.
Litosol (del griego lithos: piedra y solum: suelo, es
las laderas de las montañas, donde no han sido posi- decir, suelo de piedra) son suelos muy delgados, con
bles los procesos de formación de los suelos zonales y espesores menores a los 10 cm. Descansan sobre un
están formados prácticamente por la roca madre poco estrato duro y continuo, como roca madre, tepetate o
alterada. caliche; según el clima soportan selvas bajas o mato-
Regosoles: formados por materiales triturados, no rrales altos. De amplia distribución en el país, gene-
consolidados, transportados por el viento, pueden ser ralmente en topografía plana o levemente ondulada,
de origen piroclástico, resultado de actividades volcá- frecuente en la Península de Yucatán, asociados a
nicas recientes, en las cuales la acción del clima y la rendzinas.
biota no han podido actuar por mucho tiempo. Ejem- Xerosol (del griego xeros: seco, suelo de zona seca
plos de esto son las zonas arenosas de los desiertos, las o árida). Son suelos áridos que contienen materia or-
dunas costeras o bien los suelos de origen volcánico, gánica. La capa superficial es clara y debajo de ella
con materiales fragmentados transportados por el puede haber acumulación de minerales arcillosos y/o
viento, la lava o la acción mecánica de la erupción, sales, como carbonatos y sulfatos. Se hallan restringi-
constituidos por cenizas, arenas y gravas. Se desarro- dos a las zonas áridas y semiáridas del centro y norte
llan en las partes elevadas de los volcanes que han te- del país, a veces asociado a regosoles. Soportan una
nido actividad volcánica reciente, como el Jorullo, el vegetación de matorral y pastizal.
Nevado de Colima, el Paricutín, el Popocatépetl, el Yermosol (del español yermo: desértico, desolado).
Chichonal, entre otros. Soportan comunidades vege- Son suelos de zonas muy secas o desérticas casi sin
tales escasamente desarrolladas con pastos aislados que materia orgánica, semejantes a los xerosoles, de los
forman macollas o plantas herbáceas perennes e in- que difieren sólo en el contenido de materia orgánica
clusive leñosas postradas. en el horizonte superficial. En algunos sitios susten-
Suelos aluviales recientes. El proceso se origina por tan vegetación de matorral o de pastizal y, en algunos
la acción del agua, que se limita a ser medio de trans- casos, vegetación esparcida. Son característicos del De-

30 Caracterización ambiental
sierto sonorense y la península de Baja California, aso- tropicales son de color rojizo y cambian a amarillento
ciados a regosoles y xerosoles. en las templadas; son muy susceptibles a la erosión.
Cambisol (del latín cambiare: cambiar, suelo que Se les localiza fundamentalmente bajo climas templa-
cambia). Son suelos claros, con desarrollo débil, que dos y tropicales, sobre terrenos de topografía variada.
presentan cambios en su estructura o consistencia de- A veces se les encuentra en zonas semiáridas, abar-
bido al intemperismo. Frecuentemente presentan to- cando pequeñas áreas. Se hallan ampliamente repre-
davía características del material que les dio origen. sentados en el Eje Volcánico Transversal, asociados con
Dependiendo del clima, pueden sustentar una vege- andosoles, vertisoles, cambisoles y rendzinas. Sobre
tación de matorral, pastizal, bosque o selva. Se encuen- ellos se desarrolla una vegetación de bosques, selva o
tran en cualquier tipo climático, excepto en zonas ári- pastizal.
das y semiáridas; en terrenos abruptos, ondulados o Acrisol (del latín acris: agrio, ácido, suelos áci-
planos, en porciones orientales de la Sierra de dos). Muy semejantes a los luvisoles aunque más
Chihuahua y Durango, en las partes montañosas del ácidos en el subsuelo debido a un lavado más in-
Eje Volcánico Transversal. Se asocian a regosoles o tenso y a la rápida formación de minerales arcillo-
feozem. sos. Son también muy susceptibles a la erosión. De-
Vertisol (del latín verto: voltear, suelos que se re- pendiendo del clima permiten el desarrollo de
vuelven y autoabonan, ricos en arcillas expandibles). bosques o de selvas.
Son muy arcillosos, con grietas anchas y profundas Andosol (del japonés en: obscuro y do: tierra. Tie-
cuando están secos; si están húmedos, son pegajosos, rra negra). Son suelos derivados de cenizas volcáni-
su drenaje es deficiente; en seco son muy duros. Se cas, con una capa superficial obscura, aunque el
presentan en casi todos los climas que tienen una subsuelo es más claro; presentan altos contenidos de
marcada estación seca y otra lluviosa, sobre terrenos alófeno (material amorfo), lo cual les permite retener
planos o en depresiones, frecuentes en llanuras mucho el fósforo. Son también muy susceptibles a la
costeras del Golfo de México, asociados con los feozem erosión; de amplia distribución en áreas montañosas
y los solonchaks. de origen volcánico. La vegetación que sustentan va-
Feozem (del griego phaeo: pardo y del ruso zemlja: ría de acuerdo con el tipo climático y puede ser bos-
tierra, o sea, tierra parda). Son suelos obscuros, de con- que o selva. Bajo clima templado se les localiza en el
sistencia suave, ricos en materia orgánica y en nutri- Eje Volcánico Transversal y en climas tropicales, en la
mentos; generalmente el subsuelo presenta acumula- sierra de los Tuxtlas, en Veracruz.
ción de arcilla. Se les encuentra en las regiones Solonchak (del ruso sol: sal, literalmente suelos sali-
templadas y tropicales, son frecuentes en parte del Eje nos). Se caracterizan por presentar acumulación de sales
Volcánico Transversal, asociados con andosoles, solubles en alguna parte del suelo o en todo su espesor,
cambisoles y vertisoles. debido a la fuerte evapotranspiración a que están suje-
Rendzina (nombre polaco que se da a los suelos tos. Son frecuentes en cuencas endorreicas de zonas
profundos y pegajosos que se desarrollan sobre cali- áridas o semiáridas, o en los bolsones del centro norte
zas). Son suelos obscuros, poco profundos (10 cm a del país. La vegetación que soportan está dominada por
50 cm) que sobreyacen directamente al material asociaciones de halófitas y/o de pastizales halófilos. Son
carbonatado, por ejemplo, calizas. Se les localiza en frecuentes también en las llanuras costeras del Golfo
cualquier tipo climático, excepto en zonas frías, gene- de México y del océano Pacífico.
ralmente en relieves montañosos como en la Sierra Gleysol (del ruso gley: pantanoso, cenagoso). Son
Madre Oriental, asociados a litorales. En la Península suelos pantanosos, saturados de humedad la mayor par-
de Yucatán son los suelos predominantes en terrenos te del año, condición que genera colores azulosos, ver-
planos. La vegetación que sustentan varían desde bos- de grisáceos o manchados de diferente coloración, con
ques de pino–encino, encinares, bosques mesófilos de desprendimiento de malos olores. Muy frecuentes en
montaña hasta selvas bajas y medianas. la llanura costera del Golfo Sur, especialmente en
Luvisol (del latín luvi, luo: lavar, suelo lavado). Son Tabasco y el norte de Chiapas. La vegetación que sus-
suelos con un contenido de bases que va de mediano tentan es de manglar, popal, tular, tasistal y pastizales.
a alto. El subsuelo tiene acumulación de arcillas, como Castañosem (del latín castaneo: castaño y del ruso
resultante del lavado y la formación in situ. En zonas semja: tierra, tierra castaña). Son suelos que presen-

Las comunidades vegetales de México 31


tan una capa superior de color pardo o rojizo obscu- mitad del territorio nacional dentro de la zona tropi-
ro, con un buen porcentaje de materia orgánica y de cal y la norte dentro de la subtropical, como ya se
nutrimentos. El subsuelo a menudo tiene acumula- mencionó.
ción de caliche (arena cementada con carbonato de Diferentes factores determinan el tipo de clima que
calcio en disolución) y/o yeso. La vegetación que sos- prevalece en las diversas regiones del país: además de
tiene son pastizales con algunas áreas de matorral. Se la latitud, la altitud con respecto al nivel del mar, la
localizan en el noreste del país en parte de Nuevo León distribución de tierras y mares y la influencia maríti-
y Tamaulipas. ma, la cual propicia invasiones de masas de aire hú-
Planosol (del latín planus: plano, llano). Suelos que medo que penetren al país procedentes del Golfo de
se desarrollan en sitios de topografía plana o en de- México y del Océano Pacífico, el territorio nacional
presiones mal drenadas. Presentan un horizonte su- está sujeto a la influencia de los “nortes”, masas de aire
perficial de color claro o gleysado, sobre un horizonte procedentes de la porción continental de Norte-
lentamente permeable, dentro de una profundidad de américa, que al pasar por el Golfo de México se car-
hasta 125 cm. Se les localiza en el centro del país, en gan de humedad, que depositan en el territorio na-
zonas semiáridas y templadas, sobre terrenos planos cional. Con cierta periodicidad el territorio nacional
o levemente ondulados como en gran parte del esta- se ve también afectado por ciclones.
do de Aguascalientes. Sobre ellos se desarrollan Estos rasgos climáticos se ven modificados local y
pastizales climáticos. regionalmente por la variada fisiografía del país, la al-
Es importante señalar que la información ante- tura de los macizos montañosos y su exposición a los
rior fue tomada de INEGI (1991). vientos. Las profundas depresiones, los amplios valles
y las regiones costeras han propiciado la gran diversi-
D. L AS COMUNIDADES VEGETALES dad climática de nuestro país: climas tropicales hú-
DE M ÉXICO medos, cálidos y secos, secos y fríos o los climas fríos
tan característicos de las partes elevadas de las mon-
La superficie de México, aunque solamente represen- tañas, todo lo cual se conjuga para hacer el territorio
ta 1.5 del área total de la masa continental mundial, mexicano ecológicamente muy diverso. Además, a lo
se estima que cuenta con el 10% de las plantas y ani- largo de la historia geológica se han presentado
males terrestres conocidos. Su flora se calcula entre inmersiones y emersiones marinas en gran parte del
26,000 y 30,000 especies de plantas superiores (fane- territorio, procesos de vulcanismo y largos períodos
rógamas), que lo coloca entre los países florísticamente de intemperismo del material geológico expuesto.
más ricos del mundo, junto a Brasil, Colombia, Chi- En algunos casos las relaciones de las comunida-
na e Indonesia. des vegetales, de las especies y los rasgos del ambiente,
Pero no solamente es muy rico en cuanto a su flo- como la topografía, el sustrato geológico, el clima o el
ra sino por su vegetación; casi todos los biomas exis- tipo de suelo, son evidentes, pero en otras situaciones
tentes en el mundo se hallan en nuestro país, desde la presencia o el tipo de distribución que presentan
los bosques cálido húmedos del trópico, los variados algunas comunidades vegetales o ciertas especies son
matorrales xerófilos y los pastizales amacollados que difíciles de entender si no se toma en cuenta la in-
se desarrollan por encima del límite de la vegetación fluencia de un factor ecológico no relevante hoy en
arbórea. Algunos autores consideran que comunida- día, pero si lo suficientemente importante en otro
des vegetales como los pastizales gipsófilos de la alti- tiempo, como para haber tenido influencia en los pa-
planicie mexicana o los izotales dominados por plan- trones de distribución de los organismos o de las co-
tas del género Yucca y/o Dasilirion, o bien por Nolina, munidades: los factores de tipo histórico que, además
son exclusivos de México. de los mencionados, permiten entender la riqueza y
Obviamente esta gran diversidad de la flora y la diversidad de la biota de un lugar. Entre estos factores
vegetación se refleja en la gran variedad de fauna que de tipo histórico podemos mencionar la deriva conti-
alberga. ¿A qué se debe esta gran diversidad biológi- nental, los procesos de orogenia y vulcanismo, las fluc-
ca? Una de las causas es la posición geográfica del país tuaciones climáticas a que ha estado sujeto el territo-
que hace que la línea conocida como Trópico de Cán- rio nacional durante el terciario y cuaternario, además
cer, en el paralelo 23° 27’ de latitud norte, defina a la de las glaciaciones. Otros factores, como las migra-

32 Caracterización ambiental
ciones de las regiones septentrionales y meridionales significado climático pero poco preciso en lo que se
y su confluencia en nuestro país han jugado un papel refiere a a la comunidad vegetal en sí misma. Algunos
importante en la conformación de la riqueza florística. términos geográficos como alpino, boreal o meridio-
Es de destacar la importancia que el elemento endé- nal se han empleado también para referirse a las co-
mico tiene en la composición de la flora nacional, así munidades vegetales de nuestro país, aunque en al-
como los procesos de migración del elemento mexi- gunos casos en forma errónea. Tal es el caso de la
cano hacia otras regiones. vegetación alpina para referirse a la que se establece
Como hemos visto, las comunidades vegetales que por encima del límite de la vegetación arbórea
se desarrollan en nuestro país son numerosas y en al- (timberline) en las altas montañas. Con el nombre
gunos casos muy variadas. Las plantas superiores han genérico de Alpes se conocen las grandes montañas
desarrollado tres grandes tipos de formas de creci- modernas formadas por plegamientos en Europa. Los
miento cada una con sus variantes. Los árboles, plan- Alpes propiamente dichos abarcan parte de Francia
tas perennes leñosas generalmente de más de 4 m o 5 oriental, la parte adyacente de Alemania, el norte de
m de alto con un tronco bien definido a partir del cual Italia y porciones de Suiza y Austria. Las comunida-
comienzan a ramificarse. Los arbustos, plantas peren- des vegetales que sustentan van desde bosques de
nes leñosas de más de 0.5 m de altura, profusamente Quercus, Castanea y Ostrya, en las partes bajas, en las
ramificados desde la base y las yerbas, plantas de con- partes medias, un piso llamado montano caracteriza-
sistencia herbácea, es decir, sin tejido secundario o leño do por Fagus, al que le sigue otro llamado subalpino,
de altura variable, anuales, bianuales o perennes. La con bosques de coníferas (Abies, Picea y Larix) y un
dominancia de estas formas de vida y su distribución piso llamado alpino de matorral achaparrado de Juni-
en las comunidades proporcionan la fisonomía, la es- perus y Rhododendron, en el cual se mezcla un prado
tructura y la fenología de las mismas. Estos parámetros (pastizal) con Nardus, Carex, Festuca, etc. En general,
se usan para diferenciar y clasificar a la vegetación en las montañas que sobre el piso inferior regional tie-
bosques, matorrales o herbazales y sus variantes. nen bosques planicaducifolios, un piso de bosques de
En algunos casos el desarrollo y la expresión de las coníferas o de vegetación leñosa achaparrada mezcla-
comunidades vegetales se corresponde a grandes uni- da con una pradera, se dice que son de tipo alpino, lo
dades con el grupo o tipo climático pero en otros ca- que evidentemente no se corresponde con la acepción
sos la comunidad vegetal que se ha desarrollado no que tiene dicho término en nuestro país.
corresponde del todo con las características del clima, El término páramos de altura se ha usado tam-
sino que su expresión y desarrollo responde a carac- bién para referirse a la vegetación que se establece por
terísticas del sustrato geológico o del tipo de suelo con encima del límite de la vegetación arbórea. Páramo es
una relativa independencia del factor climático. En el una voz castellana que significa “llanura amesetada”.
primer caso se considera la vegetación como vegeta- En los Andes húmedos, desde Venezuela hasta el nor-
ción zonal, en el segundo correspondería a la vegeta- te de Perú se les llama así a las elevadas altiplanicies
ción azonal. de la cordillera por encima de los bosques. Su vegeta-
ción dominante es xerófila, subarbustiva con plantas
2. C ORRELACIÓN DE LOS RASGOS DEL AMBIENTE DE aciculifolias, escuamifolias o muy tomentosas, y son
M ÉXICO CON LA CLASIFICACIÓN Y NOMENCLATURA DE frecuentes las plantas en forma de cojín, a veces enri-
LAS COMUNIDADES VEGETALES quecidos con formas de vida parecidos a algunos izotes
(Yucca) que no ramifican, los llamados “frailejones”
La clasificación y la nomenclatura de las comunida- (Espeletia grandiflora, Asteraceae) plantas paquicaules
des vegetales de México han estado estrechamente re- con densas rosetas de hojas arregladas en espiral, que
lacionadas con los factores ambientales, los aspectos a menudo sobrepasan los dos metros. Corresponde-
fisiográficos, geológicos, climáticos, edáficos y, en rían a los zacatonales o pastizales amacollados.
muchos casos, con las actividades antropocéntricas, Otros nombres usados, igualmente imprecisos
principalmente la agricultura y la ganadería y en me- porque se refieren al hábitat más que a la vegetación
nor proporción la explotación forestal. son: vegetación de dunas costeras, vegetación de de-
Así, términos como vegetación tropical y subtro- siertos arenosos, vegetación de malpaíses. La misma
pical, templada, árida y semiárida, tienen un claro observación se podría hacer para la vegetación halófila

Las comunidades vegetales de México 33


y gypsófila, en las cuales se hace alusión a la “prefe- 3. Selva baja subperennifolia
rencia” de las plantas por estos hábitat, pero no se men- 4. Selva mediana o alta subcaducifolia (sensu Mi-
ciona la comunidad vegetal, a excepción de cuando se randa y Hernández-X. 1963)
refieren a un pastizal mediano, abierto halófilo o 5. Selva alta o mediana perennifolia
gipsófilo. 6. Selva alta o mediana subperennifolia
La correlación de las características ambientales 7. Selva mediana caducifolia (sensu Flores Mata et
de México con la clasificación y la nomenclatura de al. 1971)
las comunidades vegetales se puede hacer a diferen- 8. Selva alta, mediana y baja perennifolia
tes niveles, dependiendo de las escalas. El clima es el 9. Selva alta, mediana y baja subperennifolia
factor ambiental más importante, por la influencia 10. Selva mediana subcaducifolia
que ejerce sobre las comunidades bióticas, especial- 11. Selva baja subperennifolia
mente la vegetación. Así, diferentes autores han di- 12. Bosque tropical perennifolio
vidido climáticamente el país. Segalen (1964) sugie- 13. Bosque tropical subcaducifolio (sensu Rzedowski
re que el territorio nacional se encuentra localizado 1978)
en la zona intertropical; Mosiño (1969) considera que 14. Bosque mesófilo de montaña.
la porción sur del país es tropical y la norte es
subtropical; Leopold (1950) estima que la zona tem- Las comunidades vegetales que se desarrollan en
plada (en la que incluye las zonas áridas y semiári- el trópico seco son:
das), ocupa el 70% del territorio nacional y el resto
es tropical. 1. Bosque caducifolio (sensu Miranda y Hernández-
Entre otros factores que tienen influencia sobre la X. 1963)
expresión de la vegetación, principalmente a nivel re- 2. Bosque caducifolio (sensu Flores Mata et al. 1971)
gional o local, destacan: el sustrato geológico, el tipo 3. Bosque mesófilo de montaña
de suelo y las altas latitudes, la exposición a los rayos 4. Bosque tropical caducifolio
solares o bien la cantidad de humedad del terreno, etc. 5. Bosque espinoso (sensu Rzedowski 1978).
Por ejemplo, las comunidades cuya distribución ac- 6. Selva baja caducifolia
tual sólo podría explicarse considerando que repre- 7. Selva baja espinosa perennifolia
senten reliquias, es decir, comunidades indicadoras de 8. Selva baja espinosa caducifolia
una pasada condición ambiental. Tal sería el caso de 9. Selva baja espinosa
los encinares que se establecen en los trópicos húme- 10. Matorral subtropical
dos, en altitudes de menos de 300 m, rodeados de sel- 11. Mezquital (según INEGI).
vas bajas, medianas e incluso altas, desde el sudoeste
de Tamaulipas hasta Oaxaca, Chiapas y Tabasco. Este Las zonas templadas y frías
tipo de vegetación ha sido entendida como remanen- Las comunidades que se desarrollan en climas tem-
te de una pasada condición con climas más fríos, que plados comprenden dos grandes grupos: uno repre-
se dieron a bajas latitudes y altitudes durante las últi- sentado por aquéllas que se desarrollan bajo condi-
mas glaciaciones. ciones de aridez y el otro que se desarrolla sin
Podemos agrupar las grandes unidades de vege- problemas de aridez; según esto, las zonas templadas
tación del país en aquellas cuya expresión y distri- y frías sin problemas de aridez agruparían las siguien-
bución están determinadas mayormente por el fac- tes comunidades vegetales:
tor clima. Así tenemos aquéllas con clima tropical y
subtropical (sin heladas), y las templadas y frías (con 1. Bosque caducifolio
heladas). A su vez las zonas tropicales y subtropicales, 2. Bosque de enebros
pueden diferenciarse en trópico húmedo y trópico 3. Bosque de oyamel
seco. En el trópico húmedo se desarrollan las comu- 4. Bosque mixto de pino-encino (sensu Miranda y
nidades vegetales reconocidas como: Hernández-X. 1963).
5. Bosque de cedro y táscate (Cupressus y Juniperus).
1. Selva alta, mediana y baja perennifolia 6. Bosque de pino
2. Selva alta y mediana subperennifolia 7. Bosque caducifolio

34 Caracterización ambiental
8. Bosque de encino (sensu Flores Mata et al. 1971)
9. Bosque de coníferas
10. Bosque de Quercus (encinar)
11. Bosque mesófilo de montaña (según Rzedowski
1978).
12. Bosque de encino-pino (según INEGI).

El otro grupo ecológico de comunidades vegetales


de climas templados corresponde a las que se desa-
rrollan bajo condiciones de aridez, y comprenden:

1. Bosque espinoso
2. Chaparral o matorral esclerófilo
3. Cardonal, tetechera, izotal, nopalera
4. Chaparral
5. Matorral espinoso con espinas laterales

Bosque mesófilo de montaña. Foto: FGM.


6. Matorral espinoso con espinas terminales
7. Matorral alto subinerme
8. Matorral inerme o subinerme parvifolio
9. Matorral crasirrosulifolio
10. Matorral submontano
11. Matorral desértico rosetófilo
12. Matorral desértico micrófilo
13. Matorral xerófilo
14. Matorral submontano
15. Matorral espinoso tamaulipeco
16. Matorral crasicaule (nopalera, cardonal)
17. Matorral desértico micrófilo (inerme, subinerme En zonas templadas y frías, no áridas, en hábitat
y espinoso) terrestres: el matorral de coníferas, el bosque de coní-
18. Matorral sarcocaule y sarcocrasicaule feras gipsófilos y en hábitat acuáticos o hidrófilos: el
19. Mezquital tular, el carrizal, la vegetación en galería y la vegeta-
20. Pastizal ción flotante.
21. Pastizal (según INEGI). En hábitat terrestres en las zonas tropicales: los pal-
22. Pastizal (según Rzedowski 1978). mares, las sabanas, la vegetación de dunas costeras, etc.
23. Vegetación de páramos de altura y en los hábitat acuáticos o hidrófilas: los manglares,
24. Zacatonal (según Miranda y Hernández-X. 1963) los popales, los tasistales, los tintales, los canacoitales,
25. Zacatal las asociaciones de sumergidas y flotantes, entre otras.
26. Zacatonal (según Flores Mata et al. 1971) Según Flores Mata et al. (1971) las comunidades
vegetales determinadas por condiciones del suelo o
Por otra parte, otro gran grupo de comunidades sustrato y bajo un clima templado y frío, con condi-
vegetales es aquél cuya expresión y distribución está ciones de aridez en hábitat terrestres son: el matorral
determinada por las características del suelo o del crasicaule y el pastizal halófilo y gipsófilo. Y en hábitat
sustrato geológico. Por ejemplo, Miranda y Hernán- acuáticos o hidrófilos, el tular y el carrizal.
dez-X. (1963) consideran para zonas templadas, frías En zonas templadas y frías, pero no áridas en
y áridas, en hábitat terrestres la vegetación de desier- hábitats terrestres, el pastizal; en hábitat acuáticos o
tos arenosos, la vegetación de dunas costeras y las aso- hidrófilos, el tular y el carrizal y en zonas tropicales en
ciaciones de halófilas y gipsófilas y, en hábitat acuáti- hábitat terrestres, los palmares y las sabanas y en hábitat
cos el tular, el carrizal, la vegetación en galería, el acuáticos o hidrófilos, los manglares, los tulares y los
manglar, el popal, el tasistal, etc. carrizales.

Las comunidades vegetales de México 35


sodio, el sulfato de calcio, el cloruro de potasio, etc.
Esta vegetación halófila tiene dos variantes, una en la
Vegetación halófila y gipsófila. Foto: FGM. que predominan las yerbas crasas (crasifolias o
crasicaules) perennes e inclusive anuales, con
subfrútices y aun arbustos, y otra en la cual predomi-
nan los pastos o “zacates” (generalmente) de la fami-
lia Graminae o Poaceae. Existen claros ejemplos de
estas comunidades de halófilas en cuencas endorreicas
o en depósitos lacustres. Los pastizales halófilos son
también frecuentes, destacando, por ejemplo, los
“zacahuistales”, dominados por Spartina spartinae, los
“tobosales”, dominados por el “zacate toboso”, Hilaria
mutica. Otra correlación muy estrecha es la que se es-
tablece entre el hábitat que conforman las dunas
Por su parte, Rzedowski (1978) separa las comu- costeras y ciertos grupos de plantas, como el género
nidades determinadas por el suelo o el substrato Uniola, de las gramíneas o especies características de
geológico o la cantidad o calidad del agua en: zonas estos ambientes como Ipomoea pescaprae, Croton
templadas y frías, bajo condiciones de aridez, en punctatus, Scaevola plumieri, Suriana maritima,
hábitat terrestres: halófitas, pastizales halófilos, pal- Philoxerus vermicularis, etc.
mares; en hábitat acuáticos o hidrófilos: tulares, vege- El hábitat tan selectivo de los suelos yesosos es muy
tación flotante. característico. El yeso (sulfato de calcio hidratado) fa-
El INEGI, por su parte, considera las comunidades vorece el desarrollo de una flora y una vegetación muy
vegetales determinadas por las condiciones del suelo peculiares. En el primer caso existen géneros y espe-
o por el sustrato, bajo un clima tropical, en hábitats cies que sólo crecen sobre suelos como los menciona-
terrestres: los palmares, las sabanas, halófitas y vege- dos, es decir, endémicos, como Nerysirenia, Flaveria,
tación de dunas costeras y en hábitat acuáticos o Dicranocarpus o especies restringidas a afloramientos
hidrófilos, el manglar, el popal, el tular, etc. de yeso como Frankenia gypsophila, Dalea filicifolia,
Bajo condiciones de aridez resulta particularmente Bouteloua chasei, Muhlenbergia purpusii, etc. Lo mis-
notoria una correlación muy estrecha entre las comuni- mo sucede con la distribución en el Altiplano zacate-
dades vegetales y algunos factores ambientales, como el cano potosino y en algunas partes aisladas de Coahuila
sustrato geológico. Tal es el caso, por ejemplo, de la casi del pastizal gipsófilo de Bouteloua chasei y Muhlen-
absoluta correspondencia de los matorrales de crasirro- bergia purpusii.
sulifolios espinosos y el sustrato sedimentario (calizas, Otros casos de esta “gipsofilia” lo podemos en-
lutitas), los cuales, salvo contadas excepciones, como el contrar en los alrededores de Ciudad Fernández, en
Valle del Mezquital, Sierra de Pachuca, cerca de Actopan San Luis Potosí, en el camino a Cerritos. Allí pode-
donde el matorral rosetófilo de Agave y Hechtia se desa- mos hallar el mezquital de Prosopis con Maytenus
rrolla sobre basaltos, o en algunas localidades aisladas de phyllanthoides que se establece sobre depósitos de
Chihuahua, Durango y Zacatecas, donde el desarrollo es yeso, o bien una variante de bosque de pino, en la
sobre material ígneo. En la mayor parte de los casos se cual el pinar de Pinus cembroides se desarrolla sobre
distribuye sobre roca sedimentaria, principalmente cali- un conglomerado de rocas ígneas y a su lado, en un
za y lutita, de donde deriva una de sus denominaciones: afloramiento de un depósito de yeso, crece un bos-
matorral rosetófilo calcícola. que de Pinus arizonica var. stormiae, unos cinco ki-
Otra correlación también muy estrecha entre las lómetros al sur de Puerto Pastores, en el municipio
comunidades vegetales y algunos factores del medio de Galeana, Nuevo León. Quizás, uno de los ejem-
no climáticos, lo tenemos con la vegetación halófila y plos más claros de esta correlación entre sustrato
gipsófila. geológico y distribución de la vegetación se pueda
La vegetación halófila es aquélla que se desarrolla observar en la región de San Roberto, Nuevo León, a
sobre suelos salinos o salinizados, con altos conteni- unos 110 km al norte de Matehuala. Al oriente de
dos de sales como el sulfato de sodio, el cloruro de San Roberto, a los lados de la carretera a Iturbide y

36 Caracterización ambiental
Linares, en un área de unos dos o tres kilómetros y a
los lados de la carretera coexisten en el afloramiento
de yeso el pastizal gipsófilo de Bouteloua chasei y

tetcheras con Beaucarnea. Foto: FGM.


Frankenia gypsophila; en el suelo de aluvión se esta-
blece el matorral micrófilo subinerme de Larrea
tridentata y Yucca filifera y sobre los lomeríos cali-
zos se dispone un matorral rosetófilo espinoso con
Agave lecheguilla, Hechtia glomerata y Yucca carne-
rosana. Es posible encontrar una situación similar al
noreste de Concepción del Oro, en el camino a
Saltillo, en la desviación a Gómez Farías.
Otra correlación muy estrecha se da entre los ma-
torrales crasicaules (nopaleras y cardonales) que en el
centro-norte e incluso noroeste del país se desarro- una comunidad de rosetófilos espinosos con Agave
llan sobre material ígneo, tanto intrusivo como y Hechtia. Y en las laderas norte, una comunidad do-
extrusivo. Una excepción es la región de Tehuacán– minada por Nolina y otros arbustos (Ramos y
Cuicatlán, en donde las comunidades de crasicaules González-Medrano 1972).
(tetecheras con Beaucarnea) se desarrollan sobre ma- En los valles de Jaumave y Miquihuana, en
terial sedimentario (calizas y lutitas). Salvo este único Tamaulipas, en las laderas orientadas al sur, más se-
caso, la relación entre los matorrales crasicaules y sus cas, se desarrolla un matorral rosetófilo de Agave,
variantes (por ejemplo, matorral alto espinoso de Dasylirion y Hechtia y en las orientadas al norte, un
mezquite con crasicaules), con el sustrato de origen bosque bajo de pino piñonero de Pinus nelsonii o bien
ígneo, es evidente. un matorral alto subinerme.
A unos 25 km al suroeste de Tula, en el estado de Estas correlaciones sustrato-suelo-vegetación son
Tamaulipas, en la desviación a Los Gasmones, existe evidentes en zonas áridas y semiáridas, pero también
un claro ejemplo de la correlación sustrato geológico– se dan en el trópico. Tal es el caso, por ejemplo, del
suelo con la vegetación. Este sitio se localiza a sota- estado de Tabasco, donde bajo condiciones climáticas
vento de la Sierra Madre Oriental y en los lomeríos similares, pero en cerros calizos con suelos con dre-
calizos de ésta. Allí se desarrolla un matorral rosetófilo naje rápido, se desarrolla una selva alta subcadu-
de Agave lecheguilla con Hechtia glomerata y Dasylirion cifolia, en los sitios más escarpados y hacia el
miquihuanense. Sobre un afloramiento de basalto, un piedemonte, una selva alta subperennifolia; en sue-
matorral alto espinoso con crasicaules de Stenocereus los profundos bien drenados, una selva alta peren-
griseus y Myrtillocactus geometrizans con Prosopis, y nifolia; en suelos mal drenados, inundados en algu-
en el suelo de aluvión se desarrolla un matorral na época del año podemos observar una sabana o
micrófilo subinerme de Larrea tridentata con un palmar; en suelos lateríticos, someros, con un
Flourensia cernua. drenaje superficial muy rápido, se desarrolla un bos-
Otro factor ambiental que se correlaciona con la que perennifolio de Quercus (encinar tropical). La
distribución de la vegetación es la latitud y la orien- selva mediana perennifolia a subperennifolia de
tación de las laderas de los cerros: a latitudes medias Andira galeottiana (macayo), lo hace sobre suelos con
y altas los rayos del sol tienden a ser más oblicuos, el manto freático elevado, a veces casi superficial o
de tal modo que las laderas orientadas al ecuador bien inundables, en alguna época del año. Y los
(en nuestro país las del sur), tienen un tiempo ma- popales, comunidad vegetal dominada por Thalia
yor de iluminación y calentamiento que aquéllas geniculata, crecen sobre suelos parcial o permanen-
orientadas hacia los polos (en el caso al que nos re- temente inundados.
ferimos, las orientadas al norte), lo cual da como re-
sultado que las laderas del lado sur sostienen una
comunidad vegetal más xérica que las orientadas
hacia el norte. Así, en la región de Perote, Veracruz,
sobre las calizas, en las laderas al sur, se desarrolla

Las comunidades vegetales de México 37


3. E VALUACIÓN DEL USO DE LA INFORMACIÓN nica de París en 1900 y que hoy se acepta universal-
FLORÍSTICA PARA LA DIFERENCIACIÓN Y NOMINA - mente.
CIÓN DE UNIDADES DE VEGETACIÓN La Comisión de nomenclatura del Congreso de
A NIVEL SUBREGIONAL O LOCAL Bruselas (1910) la definió así: “Una colectividad ve-
getal de composición florística determinada, unidad
En un país como México, con tanta variabilidad am- de condiciones estacionales y unidad fisiognómica: es
biental y con tal biodiversidad, en donde los apoyos la unidad fundamental de la Sinecología”. Huguet del
financieros para estudiar nuestra fauna y flora silves- Villar ha dado una definición pura de la Asociación
tres son escasos, es explicable que el conocimiento bio- como: “Una cohabitación botánica individualizada
lógico del país en su conjunto, y en especial el florísti- por su composición florística”. Por su parte, en el Con-
co, sean un tanto limitados. Diferentes autores han greso Internacional de Botánica de Amsterdam (1935)
estimado hasta hoy, en unas 30,000 las especies de se acordó que en lo sucesivo el término Asociación sólo
plantas que se distribuyen a lo largo y ancho del terri- se emplearía para unidades definidas por la posesión
torio nacional. de especies características y diferenciales, en el senti-
Es cierto que algunas áreas se conocen relativamen- do de la escuela de Zurich, Montpellier, o por lo me-
te bien, pues existen trabajos de tipo florístico regio- nos para unidades del mismo orden de importancia.
nal. Tal es el caso de la parte árida de Sonora y Baja En México, la Comisión de estudios sobre la ecolo-
California, la Cuenca de México, la región del Bajío, gía de dioscoreas de la Secretaría de Agricultura y
la parte del Desierto chihuahuense. Para otras regio- Ganadería (1964), utilizó ampliamente la idea de Aso-
nes o estados existen floras en proceso, como la de ciación para diferenciar unidades de vegetación a ni-
Nueva Galicia, que abarca una zona importante del vel regional. Su concepto de Asociación se definió
occidente del país, la de Veracruz, la de Guerrero, la como: “una comunidad vegetal con composición
de la región de Tehuacán–Cuicatlán, las de Chiapas y florística semejante, especialmente en su estrato do-
Oaxaca. Estos esfuerzos, además de proporcionar los minante, y que ocupa una extensión geográfica con
“listados” (listas florísticas) de regiones y estados del características ecológicas similares”. Este concepto
país, han contribuido poco a poco al conocimiento aunque es más o menos artificial, tuvo como objetivo
de parte de este aspecto de nuestro entorno natural. establecer unidades que permitieran estudiar el todo
Sin embargo, existen áreas, algunas de ellas consi- por medio de sus partes, es decir, tuvo un carácter
derables, que por las dificultades para acceder a ellas meramente utilitario.
su conocimiento florístico se ha visto restringido . Tal Rivas-Martínez et al. (1999), consideran la Aso-
es el caso, por ejemplo, de las partes montañosas de ciación como la unidad básica y fundamental de la
Guerrero, Sinaloa, Nayarit, Durango, Michoacán, fitosociología. Es una comunidad vegetal-tipo (plant
Coahuila, entre otras. Por lo tanto, el uso de la infor- community–type) con rasgos florísticos, biogeográ-
mación florística para la diferenciación y denomina- ficos, ecológicos, sucesionales, históricos y antro-
ción de unidades de vegetación a nivel subregional o pogénicos particulares. Tiene su propio territorio
local es un tanto limitada. Sin embargo algunas uni- ecológico y geográfico, además una combinación
dades de vegetación se han podido diferenciar y nom- estadísticamente confiable de especies característi-
brar con base en su composición florística, en la ma- cas y diferenciables y de bioindicadores diagnósti-
yor parte de los casos a nivel “asociaciones” y en menor cos. Las asociaciones las determinan a partir del es-
proporción a nivel “consociaciones”. tudio comparativo de censos (relevés), en los cuales
la composición florística es registrada y cuantifica-
A. A SOCIACIONES da. Asociaciones con una composición florística si-
milar, etapa o estado dinámico, estructura, hábitat o
Asociación, del latín, associatio, de ad, a y el verbal de distribución vicariante y que pueden ser conjuntadas
socio, reunir. En sentido geobotánico, esta voz fue em- en tipos o unidades de “rango” mayor (alianzas, ór-
pleada inicialmente por Humboldt (1805) con refe- denes, clases, etc.).
rencia a la composición florística (es decir, sistemáti-
ca de la colectividad vegetal), significado con el que
fue consagrada por Flahault en el Congreso de Botá-

38 Caracterización ambiental
B. C ONSOCIACIONES go realizado por Bravo (1937) quien, siguiendo los
lineamientos marcados por Cuatrecasas y Huguet del
En México otro concepto que se ha utilizado para di- Villar, las formas de vida (hierba, arbusto, subarbusto)
ferenciar unidades de vegetación a nivel regional con y la composición florística, se toman en cuenta para
base en la composición florística es la Consociación, definir las sinecias o comunidades vegetales, sensu lato.
sirve para referirse a una comunidad vegetal domina- La composición florística, pero principalmente los do-
da por una especie en el estrato con la forma de vida minantes por estratos, los utiliza esta autora para de-
dominante. Eejmplos de consociaciones serían las si- finir las Asocietas (Asociaciones) de la vegetación es-
guientes: el bosque de planifolios, dominado por Abies tudiada.
religiosa; el bosque de aciculifolios, dominado por Pi- Otro trabajo llevado a cabo con lineamientos si-
nus hartwegii; el pastizal mediano dominado por milares para definir subunidades de la vegetación
Bouteloua gracilis; el pastizal halófilo dominado por usando la composición florística, es el de Rzedowski
Spartina spartinae, etc. (1954), quien, después de dividir la vegetación del pe-
dregal de San Ángel en dos tipos fisonómicos o “for-
C. F ORMACIÓNES maciones”, el Fruticetum y el Arboretum, dentro de
ellos distingue Asociaciones siguiendo las ideas de
Del latín formatio, onis, de forma; en este caso, bioló- Huguet del Villar (1929) y diferenciando dentro del
gica. En el campo geobotánico el término Formación Fruticetum, la Asociación: Senecietum praecocis (de
lo introdujo Grisebach en 1838 con un sentido clara- Senecio praecox) y Quercetum rugosae fruticosum
mente fisonómico, como transformación más espe- (Quercus rugosa). Del Arboretum: Quercetum cen-
cializada del de forma. Hacia 1850, Kerner inició la tralis (Quercus centralis), Pinetum hartwegii (Pinus
confusión empleando la voz Formation para designar hartwegii), Pinetum teocote (Pinus teocote) y Abietum
lo que hoy llamaríamos “Asociación colectiva”. Pese a religiosae (Abies religiosa), entre otras.
ambigüedades, en el Congreso de Bruselas (1910) la A un nivel más amplio la información florística se
Comisión de Nomenclatura, propuso definir la For- ha usado para definir unidades de vegetación a nivel
mación como: “la expresión actual de determinadas regional, desde un punto de vista fitogeográfico. Tal
condiciones de vida”, añadiendo textualmente: “se es el caso del estudio sobre la fitogeografía de la Pe-
compone de Asociaciones, que se diferencian en su nínsula de Baja California, México, realizado por Pei-
composición florística, pero coinciden en primer tér- nado, Alcaraz, Delgadillo y Aguado (1994). En este tra-
mino en las condiciones estacionales y en segundo bajo hacen una propuesta de división fitogeográfica
lugar en sus formas biológicas”. de la Península de Baja California, usando la compo-
sición florística para definir grandes unidades
D. T IPOS DE VEGETACIÓN fitogeográficas como reinos: Holártico y Neotropical,
hasta sectores fitogeográficos: Diegano, Juarezense,
Son unidades fitogeográficas muy amplias, de tipo eco- San Felipense, Sanlucano, etc.
lógico-fisonómico. Por ejemplo, el bosque, el prado, Finalmente, el trabajo de Rivas Martínez (1997)
el matorral, etc. En sentido muy amplio se ha usado hace una Sinopsis syntaxonómica de las comunida-
como sinónimo de formación vegetal, lo cual ha crea- des vegetales naturales potenciales de Norteamérica,
do a veces confusiones y ambigüedades. incluyendo México y Mesoamérica. Existe una pro-
En México, quizá el antecedente más remoto acerca puesta más amplia hecha por Rivas Martínez et al.
del uso de la composición florística para diferenciar (1999) para la vegetación forestal templada boreal y
unidades de vegetación a nivel subregional o local, sea occidental de Norteamérica, que incluye parte de
el trabajo geobotánico del Valle del Mezquital, Hidal- nuestro país.

Las comunidades vegetales de México 39


40 Caracterización ambiental
Capítulo III. Clasificación y nomenclatura
de la vegetación de México

1. E LEMENTOS PARA DIFERENCIAR UNIDADES y cuando se haga mención de su condición de vegeta-


DE VEGETACIÓN A DIFERENTES ESCALAS , SU ción secundaria.
REPRESENTACIÓN ESPACIAL Y SU CARACTERI - Las unidades reconocidas incluyen tanto la vege-
ZACIÓN EN SISTEMAS DE INFORMACIÓN tación zonal como la azonal, es decir, aquéllas que es-
GEOGRÁFICA O CON IMÁGENES DE SATÉLITE tán respondiendo a la influencia un tanto más directa
del clima y aquéllas en que la influencia sobre la co-
En un sistema jerárquico de clasificación resulta evi- munidad está dada por características diferentes al
dente la necesidad que se tiene de resaltar los niveles clima como cantidad y calidad de agua, sustrato
de integración de la vegetación. En un país como geológico o variantes edáficas.
México, con tanta variación fisiográfica, climática y La posición geográfica de nuestro país favorece que
biótica, las características más útiles para hacer una gran parte del mismo se localice dentro de la región
comparación y/o una clasificación de la vegetación tropical y el resto dentro de la región templada. Los
son la fisonomía y la estructura de la misma. La fe- términos tropical y templado en la mayoría de las cla-
nología contribuye de manera importante a diferen- sificaciones propuestas han sido considerados
ciar las comunidades, sin embargo estos atributos de automáticamente con una connotación climática. Por
la vegetación a menudo no son claramente identifi- ejemplo, clima tropical seco o húmedo y el término
cables en relación con los factores ambientales. Por templado se ha usado para referirse al clima fresco o
lo cual la incorporación de características geográfi- frío, independientemente de su posición geográfica.
cas (templado y tropical), de montaña, o climáticas En la clasificación propuesta en esta obra nos ba-
fueron consideradas en el esquema de clasificación samos en Rivas Martínez (1997), quien presenta un
propuesto en este trabajo. cuadro para diferenciar las zonas y cinturones (fajas)
Las unidades se definen fisonómica y estructural- climáticas de la Tierra.
mente y todas indican condiciones ambientales. Des-
pués de la asignación de cada unidad reconocida se Z ONAS Y CINTURONES LATITUDINALES
anotan las abreviaturas del o de los climas en donde DE LA T IERRA
preferentemente crecen.
El dinamismo de la vegetación y sus cambios como En el planeta Tierra se tienen tres amplias zonas latitu-
consecuencia de las actividades antropogénicas y sus dinales: la tropical, la templada y la frígida, según Rivas
etapas sucesionales resultantes fueron consideradas en Martínez (1997: 12). La primera abarca desde los 0° a
la medida en que la clasificación propuesta puede los 30° N y S. La templada, desde los 30° a los 51° N y S,
emplearse tanto para comunidades primarias (poco y la frígida o fría, va desde los 51° a 90° (N y S).
o escasamente modificadas por actividades antrópi- Estas zonas a su vez se subdividen en cinturones o
cas), como para aquellas etapas sucesionales, siempre fajas latitudinales:

Las comunidades vegetales de México 41


Zona tropical 2. La escala de comunidades es importante porque
Cinturones o fajas: es a este nivel donde los seres humanos pueden
Ecuatorial: de 10° N a 10° S. tener un mejor sentido de la naturaleza y de la
Eutropical de 10° a 23° N y S variación de la cobertura vegetal de la Tierra.
Subtropical: de 23° a 30° N y S. 3. En esta escala se centra la actividad humana y se
llevan a cabo los cambios de la cobertura vegetal;
Zona templada por otro lado, es aquí en donde pueden aplicarse
Cinturones o fajas: las prácticas y políticas de manejo y conservación
Subtemplada o templada baja de 30° a 35° N y S. del ambiente.
Eutemplada de 35° a 45° N y S.
Templada Superior 45° a 51° N y S A. N IVELES DE INTEGRACIÓN

Zona frígida o fría La unidad mayor que se usó para clasificar las comu-
Cinturones o fajas: nidades vegetales de México fue el bioma, definido
Boreal 51° a 66° N por la fisonomía de las comunidades, la cual está dada
Antiboreal 51° a 66° S por las formas de vida o biotipos dominantes.
Artica 66° a 90° N Con el afán de simplificar la propuesta de clasifi-
Antartica 66° a 90° S cación se usó una sola palabra para designar esta uni-
dad, tal como se muestra a continuación:
Escalas de estudio. Los ecosistemas pueden Bosques. Comunidad dominada por árboles, plan-
definirse en un rango de escalas que van desde un gru- tas leñosas con un tronco bien definido, generalmen-
po de individuos y su ambiente hasta el nivel de toda te de más de cuatro m de alto. El bosque denso está
la biosfera. El concepto de “engranaje de sistemas” es formado por árboles de más de cinco m de altura, cu-
importante en este sentido. Todos los niveles de los yas copas se tocan. El bosque claro (comunidad de
ecosistemas pueden ser vistos como subsistemas de la árboles abierta, formada por árboles de por lo menos
biosfera (Rowe 1961). cinco m de altura, la mayoría de las copas no se tocan
Cada subsistema ocupa un área progresivamente entre ellas pero cubren cuando menos el 40% de la
más pequeña en el espacio. Como la vegetación es el superficie. Puede existir una sinusia o simorfia de her-
rasgo externo más obvio, consitituye la base sobre la báceas (conjunto de plantas que en una comunidad
cual los ecosistemas son definidos y clasificados, si- tienen la misma forma de vida o biotipo). Geográ-
guiendo de esta forma hasta que las unidades de ve- ficamente se diferenciaron en bosques tropicales y
getación más y más pequeñas puedan ser reconoci- bosques templados.
das, desde la biosfera, las formaciones vegetales hasta Matorrales. Comunidad dominada por plantas le-
las plantas individuales y su ambiente. ñosas de 0.5 a cinco o más metros de altura con los
Muchos de los trabajos pioneros tanto en ecología tallos ramificados desde la base. En el matorral abier-
vegetal como en biogeografía se concentraron en los to los arbustos no se tocan entre sí y presentan fre-
biomas del mundo y las formaciones vegetales, que cuentemente un estrato con gramíneas o graminoides.
representan las subdivisiones mayores de la biosfera. En el matorral denso los arbustos están entrelazados
Como resultado inevitable de ello, buena parte de es- por sus copas. Se hizo una separación en arborescentes,
tos estudios fueron extremadamente generalistas. plantas leñosas escasamente ramificadas de altura va-
En el siglo XX los estudios se enfocaron a una es- riable.
cala inferior, la comunidad vegetal: Herbazales. Comunidades dominadas por plantas
herbáceas. Hay dos formas principales de crecimien-
1. Porque es la escala a la cual las poblaciones e in- to herbáceo: graminoides (gramíneas o plantas con
dividuos de las especies de plantas pueden ser apariencia de gramínea) y “forbias” (término que casi
identificados y agrupados para caracterizar la ve- no se usa en México, del inglés forb, castellanizado a
getación de un área dada. Puede ir desde unos forbia por el sistema UNESCO), para referirse a plan-
cuantos metros cuadrados hasta muchos kilóme- tas herbáceas, no gramíneas ni graminoides, ejemplos
tros cuadrados. tréboles, girasoles, helechos, etc. (algunos autores su-

42 Clasificación y nomenclatura
gieren que las “forbias” tengan además importancia . Formaciones de pantano.
forrajera). Incluye las gramíneas (Poaceae) y grami- . Formaciones de ciénaga o pantano estacional.
noides (Cyperaceae, Juncaceae y formas afines), así . Diferencia claramente una formación óptima, en
como diferentes herbáceas hidrófilas, tanto arraiga- un hábitat ideal favorable, corresponde al bosque
das como flotantes. pluvial (bosque tropical perennifolio).
La cobertura en formaciones herbáceas es difícil
de caracterizar. A veces tiene una cobertura densa, Con estos conceptos en México podemos hacer
continua. Si tienen densidades bajas la formación se agrupaciones de series de formaciones. Dentro de los
denomina abierta; la forma de crecimiento de las diferentes biomas reconocidos, por ejemplo, en la re-
gramíneas y graminoides es importante para la fiso- gión tropical con la vegetación zonal y con un clima
nomía y la estructura. Pueden diferenciarse entre for- húmedo puede definirse la serie de formaciones de
mas cespitosas (que forman un césped o tapete) y clima húmedo de la siguiente manera:
amacolladas (macolla: conjunto de vástagos nacidos
de la base de un mismo pie, sobre todo tratándose de . Bosques alto perennifolio
gramíneas o graminoides). . Bosque alto subperennifolio
Los tipos de vegetación mayormente herbáceos . Bosque mediano subperennifolio.
comprenden a menudo una sinusia o simorfia de plan- . Otro ejemplo lo tendríamos con los matorrales
tas leñosas que le comunican un carácter especial. Son xerófilos de la región árida o semiárida.
ejemplos de ello en el trópico las sabanas arboladas y
en la zona templada el pastizal con matorral. Y para el clima seco:
Son ejemplos de vegetación herbácea:
. Matorral submontano
. Vegetación graminoide alta de más de dos m de . Matorral crasicaule
alto. . Matorral rosetófilo espinoso
. Vegetación graminoide de altura intermedia con . Matorral desértico
los dominantes de 50 cm a dos m. . Matorral micrófilo, etc.
. Vegetación graminoide baja (cespitosa o amaco-
llada). El siguiente nivel lo constituye la formación. Este
. Vegetación hidromórfica de agua dulce arraiga- correspondería a los tipos de vegetación, sensu lato, y
da o flotante. está definido por la fisonomía, la estructura y la
fenología, por ejemplo: bosque alto perennifolio, bos-
El otro nivel de integración fueron las series de for- que mediano aciculifolio. Los valores de bajo, media-
maciones, es decir, el agrupamiento de las formacio- no y alto, de las formas de vida siguen la propuesta de
nes vegetales (tipos de vegetación), ecológicamente Miranda y Hernández-X. (1963).
relacionadas entre sí por algún gradiente ambiental. Dentro de estos pueden diferenciarse los otros ni-
Por ejemplo, por un gradiente climático–altitudinal veles por su composición florística: asociaciones y
en un área montañosa; en un gradiente de disponibi- consociaciones, que no se clasificaron por lo que que-
lidad de humedad, es decir, a lo largo de un gradiente da abierta al usuario potencial la posibilidad de ha-
de aridez o un gradiente de humedad en el sustrato cerlo, si es que la información florística y sinecológica
que condiciona el desarrollo de la vegetación acuáti- se encuentra disponible. Dentro de la formación bos-
ca, flotante, sumergida y palustre, etc. Así, Beard (1944, que alto perennifolio serían ejemplos de asociacio-
1955, 1978) agrupa a las formaciones vegetales clímax nes, la asociación de Dialium guianense “guapaque”
y las diferencia en formaciones climáticas (zonales) y y Manilkara zapota “chicozapote”, presente en
formaciones edáficas (azonales). Las principales se- Chiapas a orillas del río Usumacinta. Otro caso se-
ries las denomina: ría en la región templada con vegetación zonal en
clima seco:
. Formaciones estacionales.
. Formaciones secas perennifolias. . Formación: bosque bajo abierto de aciculi–
. Formaciones montano (de montaña). escuamifolios.

Las comunidades vegetales de México 43


. Asociación: bosque bajo de Pinus cembroides distancia mapa 1
“pino piñonero” y Juniperus flaccida “táscate”. distancia real X

O bien en la región templada con vegetación zonal en Siendo X el coeficiente por el que hay que multi-
clima seco y templado tendríamos: plicar la longitud medida en el mapa para obtener la
longitud real. Cuando la escala es grande, el coeficiente
. Formación: matorral rosetófilo espinoso. es pequeño. Por ejemplo:
. Asociación: matorral rosetófilo de Agave leche-
guilla “lechuguilla” y Hechtia glomerata “guapilla”. 1
25,000
El nivel de organización de las consociaciones, junto
con la asociación, corresponde a una de las unidades más y a la inversa por ejemplo:
detalladas de clasificación de la vegetación. Se refiere a
aquella comunidad en la que el estrato dominante está 1
constituido por una sola especie. Por ejemplo: 1,000,000

. Región tropical En función de ello se habla de mapas a gran esca-


. Vegetación azonal la, a escala media y pequeña. Las escalas menores o
. Formación: bosque bajo de durifolios (encinar) pequeñas identifican grandes unidades de vegetación
. Consociación: bosque bajo de Quercus oleoides a nivel de bioma y/o series de formaciones, estrecha-
“encino tesmol”, en la planicie costera del Golfo mente relacionadas con los rasgos climáticos y fisio-
de México. gráficos. En ocasiones pueden estar relacionados con
el sustrato geológico. Su representación puede hacer-
Eejemplo: se a escalas 1:1,000,000; 1:2,000,000 o más.
. Región tropical El siguiente nivel de integración de la vegetación,
. Vegetación zonal la formación (en sentido amplio, equivalente a tipo
. Clima húmedo de vegetación), se puede representar en escalas me-
. Formación: bosque aciculifolio de montaña. dias 1:500,000; 1:250,000, como lo ha hecho la
. Consociación: bosque aciculifolio de montaña de COTECOCA (1:500,000) y el INEGI (1:250,000).
Pinus hartwegii. Finalmente las asociaciones y consociaciones se
pueden representar a gran escala 1:50,000 o mayores,
Otro ejemplo: aunque en la carta de INEGI 1:50,000 se refieren a ti-
. Región templada pos de vegetación (formaciones), algunas consocia-
. Vegetación azonal ciones como los izotales de Yucca filifera o los pinares
. Clima seco (semicálido) de Pinus hartwegii o los bosques de Abies religiosa,
. Bioma: Herbazal pueden diferenciarse y cartografiarse a esta escala.
. Serie de formaciones: pastizales edáficos.
. Formación: pastizal alto amacollado (halófilo). B. L IMITES Y POSIBILIDADES EN LA
. Consociación: pastizal alto amacollado halófilo CLASIFICACIÓN DE LA VEGETACIÓN
de Spartina spartinae “zacahuiste”, en las costas
del Golfo de México (Tamaulipas y Veracruz). Se pueden presentar combinaciones parecidas de es-
pecies, bajo condiciones equivalentes de hábitat. La
El arreglo jerárquico de la clasificación propuesta composición florística y las proporciones de las espe-
permite identificar los atributos que explican las va- cies pueden variar inclusive en censos muy próximos
riantes de la vegetación a diferentes escalas. y en hábitat que parecen similares.
Vale mencionar aquí que la escala, en cartografía, Se estima que en algunas regiones pueden presen-
es la relación que existe entre las dimensiones de lo tarse condiciones del ambiente y presiones de tipo
representado en un mapa y las naturales. Se expresa biótico similares sobre grandes áreas; donde estas com-
mediante una relación numérica: binaciones se repiten, la vegetación, es decir, la comu-

44 Clasificación y nomenclatura
nidad vegetal, también se repite de una manera simi- ficable que cualquier otro factor o conjunto de
lar a fragmentos dentro de un mosaico. Sin embargo, factores.
existe una superficie, a menudo considerable, de 5. Debido a que los patrones de vegetación y la co-
ecotonos entre las comunidades contiguas. ocurrencia de las especies vegetales son fácilmente
En algunas regiones existen gradientes ambienta- medibles, éstas han recibido más atención que
les de tipo climático, principalmente temperatura, otros componentes, como la fauna.
como respuesta a variantes topográficas y altitudinales, 6. La vegetación es un componente crítico del flujo
en donde la distribución de la vegetación se ajusta a de energía del ecosistema y, además, provee al
estas variaciones. Sin embargo, en la naturaleza exis- hábitat para numerosos organismos en una co-
ten discontinuidades muy marcadas en los hábitat, a munidad ecológica.
las cuales las comunidades responden también con 7. Adicionalmente, la vegetación a veces es usada para
diferencias, por ejemplo, en las zonas de contacto de inferir patrones de suelo y clima del ambiente.
sustratos geológicos contrastantes.
Las asociaciones de especies cambian más o me- Por estas razones, una clasificación de comunida-
nos continuamente, si se muestrea una comunidad des ecológicas terrestres basadas en la vegetación pue-
ampliamente distribuida. Sin embargo, las combina- de servir para describir las numerosas facetas (aun-
ciones de especies recurrentes están, obviamente, que no todas) de los patrones biológicos y ecológicos
correlacionadas con su hábitat. Pero tales combina- a lo largo del paisaje.
ciones son mudables y su variabilidad es ilimitada en Los sistemas de clasificación multifactorial se han
principio, lo cual dificulta contar con una clasifica- escogido porque integran un gran número de facto-
ción sistemática de la vegetación. res ecológicos, tanto bióticos como abióticos, para
Así, una clasificación de comunidades ecológicas identificar las unidades ecológicas. Estos sistemas a ve-
terrestres basadas en la vegetación puede servir para ces crean un conjunto regionalizado de unidades
describir numerosos aspectos biológicos y ecológicos ecológicas que son usados como una guía de manejo,
a lo largo del paisaje. especialmente para predecir cómo los sistemas
Otros aspectos relacionados con la clasificación, ecológicos podrían responder a diferentes escenarios
tanto de los sistemas ecológicos como de las comuni- de manejo y disturbio en una variedad de escalas. Al-
dades vegetales son: gunos ejemplos de clasificaciones multifactoriales son:

1. Las clasificaciones de los sistemas ecológicos pue- 1. La Clasificación de comunidades naturales. Sis-
den basarse en una variedad de factores, como tema práctico que permite que localmente algu-
vegetación, suelos, formas de relieve, etc. y son nos rasgos característicos sean usados para iden-
usados conjuntamente o de manera individual. tificar los tipos de comunidad, como la fisonomía
2. Los sistemas de clasificación basados en un solo de la vegetación, la composición florística, la hu-
factor, como la vegetación, son más fáciles de de- medad del suelo, el sustrato, el pH, la posición
sarrollar puesto que se requiere menos informa- topográfica. Ha sido empleado en numerosas par-
ción, sus características son menos complejas y tes de los EE.UU. para fines de conservación e
pueden ser confeccionadas para propósitos espe- inventarios. La falta de uniformidad conlleva a
cíficos. una aplicación limitada (White y Madany 1978).
3. Los sistemas de clasificación multifactoriales son, 2. The Wetland Classification System (El Sistema de
a veces, más amplios y hechos para una variedad clasificación de humedales) (Cowardin 1979). En
de necesidades mucho más general. Son, a veces, este sistema los niveles jerárquicos están defini-
más complejos y requieren una gran cantidad de dos por los tipos de cuerpos de agua (marinos,
información y análisis. ribereños, palustres, etc.), origen del sustrato, re-
4. La vegetación se escoge a veces como base para gímenes de inundación y formas de vida de la
un sistema de un solo factor a fin de clasificar los vegetación. La unidad más baja en la clasificación
sistemas ecológicos terrestres, porque general- es el Tipo de dominancia (Dominance Type), el
mente integra los procesos ecológicos que ope- cual es nombrado por las formas animales o ve-
ran en un sitio o paisaje de una forma más cuanti- getales dominantes. Se puede mapear usando fo-

Las comunidades vegetales de México 45


tos aéreas. Sin embargo, no todos los rasgos del nidades están sucesionalmente dirigidas hacia pun-
sistema pueden observarse con ellas ya que algu- tos finales o etapas finales estables (comunidades
nos rasgos, como las inundaciones, son muy di- climax).
námicos y no pueden distinguirse de una mane- Esto desató un debate profundo, pero actualmen-
ra consistente. te existe consenso en torno a que el concepto de
3. Clasificación ecológica de las unidades terrestres Continuum ofrece una visión más realista de los pa-
del servicio forestal de los EE.UU. (Bailey 1976, trones de vegetación. Hay también un reconocimien-
1989b). La clasificación usa una combinación de to de que las especies que se encuentran en ciertas
clima, fisiografía, relieve, suelos y vegetación po- áreas están estructuradas en cierto grado por
tencial natural para definir unidades que expre- interacciones con otras y con su medio ambiente, de
sen un potencial ecológico compartido, indepen- tal modo que ciertas combinaciones de especies pue-
dientemente del uso del suelo y la vegetación. Las den repetirse.
unidades ecológicas se clasifican como escalas Otros estudios indican que la distribución de las
espaciales múltiples en un arreglo jerárquico, con especies puede deberse a una variedad de factores,
“variables manejables” identificadas a cada esca- además de las respuestas a gradientes ambientales, que
la para: incluyen interacciones de las especies, disturbios e his-
a. Integrar el manejo y planeación de los recursos. torias pasadas.
b. Comparar diferencias en composición, estruc- Un punto de vista intermedio ha sido usado am-
tura, interacciones y productividad de los elemen- pliamente para guiar la clasificación de la vegetación.
tos biológicos entre las unidades (Albert 1955). Este es el “concepto de unidad sistemática”, tipificada
4. Land Cover and Land use Classifications (Clasifi- en el enfoque Braun-Blanquetiano. Según Kimmins
caciones basadas en la cobertura terrestre y el uso (1997) este enfoque “reconoce la realidad de las dis-
del suelo). Tal es el caso de aquéllas desarrolladas tribuciones continuas de las especies, pero enfatiza las
a partir de imágenes de satélite orientadas pri- interacciones de las especies que llevan a discontinui-
meramente para manejo de la Tierra o planifica- dades relativas, entre conjuntos de especies”.
ción de recursos (Witmer 1978). Así, aunque hay una variación continua en la com-
Se enfatizan los rasgos más conspicuos de la su- posición florística (de especies) a lo largo de gradientes
perficie terrestre que pueden ser fácilmente ambientales, en algunos lugares el nivel de cambio en
mapeados, incluyendo la vegetación y otros as- la composición es bajo (dentro de un tipo de vegeta-
pectos culturales o naturales. Puesto que la clasi- ción); mientras que en otros, el nivel de cambio en la
ficación de las unidades a mapear dependen de la composición (florística o de especies) es alto, por
tecnología, esto puede llevar a inconsistencias. ejemplo en áreas de transición entre tipos de vegeta-
ción. Las comunidades vegetales naturales son agru-
C. E L PROBLEMA DEL C ONTINUUM Y LA pamientos discretos de especies vegetales. La clasifi-
CLASIFICACIÓN DE LA VEGETACIÓN cación parte del supuesto que es razonable separar un
continuum de variación en la composición florística
El concepto del Continuum (McIntosh 1967, Whi- de la vegetación y la estructura en una serie de clases
ttaker, Cottam y McIntosh 1973, Austin 1985) se basa algo arbitrarias. La uniformidad florística y fisonómica
en la hipótesis individualista de la distribución de ha sido aceptada ampliamente como un criterio útil
las especies que establece que las especies tienen res- para definir estas clases.
puestas independientes y distintas al ambiente, por Considerando el concepto de Continuum de la ve-
lo tanto, los conjuntos o agrupamientos de las espe- getación en la clasificación según Mueller-Dombois y
cies tienden a cambiar más o menos gradualmente a Ellenberg (1974), pueden establecerse algunos rasgos
través de gradientes ambientales y geográficos, sin de las comunidades:
límites de separación definidos.
En contraste, el concepto de unidad de comuni- 1. Combinaciones similares de especies se repiten
dad considera que las comunidades son “todos inte- de “stand a stand” (de lugar a lugar).
grados”, combinaciones repetibles de especies que se 2. Dos “stands” (o unidades de muestreo) no son
presentan conjuntamente y en donde todas las comu- exactamente iguales. Ni en tiempo, ni en espacio.

46 Clasificación y nomenclatura
3. Los agrupamientos de especies cambian más o me- cia del hombre, bajo las condiciones edáficas y
nos continuamente, si uno muestrea comunida- climáticas presentes (incluyendo aquellas creadas por
des ampliamente distribuidas geográficamente. el hombre).”
4. Se puede añadir que la similitud depende de la
escala de análisis temporal y espacial y requiere En una clasificación basada en la vegetación exis-
de algunos acuerdos en las definiciones de la uni- tente, cada una de las etapas serales puede ser clasifi-
dad de muestreo. Sin negar la idea de un Conti- cada separadamente, dependiendo de sus caracterís-
nuum, la realidad muestra que algunas comuni- ticas florísticas y fisonómicas y el grado de persistencia.
dades vegetales tienen límites muy marcados y no Por razones prácticas, la persistencia se juzga en
responden a una distribución gradual en un am- períodos de tiempos medidos en décadas, sensu
biente cambiante. Mueller-Dombois y Ellenberg(1974). La propuesta
presentada considera sólo la vegetación actual y no la
D. V EGETACIÓN NATURAL CONTRA potencial, aunque con información indirecta (uso de
VEGETACIÓN CULTURAL información antigua y especies remanentes) puede
servir para caracterizar la vegetación de un ambiente
La vegetación puede cambiar de natural a cultivada. hoy, muy diferente.
Los extremos entre una y otra son fáciles de recono-
cer, pero a veces existe toda una gradación, debido al F. C ARACTERÍSTICAS FISONÓMICAS CONTRA
tipo e intensidad de los disturbios, lo cual se refleja en FLORÍSTICAS
una gran variación tanto entre la composición florís-
tica como en la estructura de la vegetación a lo largo Muchos sistemas de clasificación de la vegetación, ya
del paisaje. Los límites entre una y otra pueden ser sea que estén basados en la vegetación natural poten-
difíciles de establecer y a menudo son arbitrarios, es- cial o en la existente, pueden dividirse en aquellos que
pecialmente en etapas serales de varios años. se basan predominantemente en caracteres fisonómi-
Cuando la conservación de las especies nativas y cos o en caracteres florísticos así como en una combi-
los procesos ecológicos son el interés principal, la de- nación de ambos.
finición de “natural” ha enfatizado a las comunidades Los sistemas fisonómicos han sido usados para
donde las especies nativas predominan. escalas gruesas o burdas y los caracteres florísticos se
han usado tanto para escalas finas como para escalas
E. V EGETACIÓN REAL ( EXISTENTE ) CONTRA más amplias.
VEGETACIÓN POTENCIAL La fisonomía puede referirse, en un sentido am-
plio, tanto a la estructura, (altura y espaciamiento), a
Los sistemas de clasificación de la vegetación pueden las formas de crecimiento (morfología gruesa y for-
basarse en la vegetación existente o en la potencial. ma o aspecto del crecimiento) de las especies predo-
Las clasificaciones basadas sobre la primera categori- minantes y a los caracteres foliares (estacionalidad,
zan unidades con poca referencia a un futuro poten- forma, fenología, duración, talla y textura) de las plan-
cial. Estas clases de vegetación se derivan de la expre- tas dominantes o componentes. Estos rasgos propor-
sión de la composición florística y la variación estruc- cionan una forma rápida y eficiente de caracterizar la
tural. Tales tipos o clases pueden ser usados para hi- vegetación.
potetizar o interpretar procesos basados en el conoci- Los rasgos fisonómicos pueden reconocerse fácil-
miento ecológico o en modelos. mente en el campo e inclusive pueden usarse con un
En contraste, las clasificaciones que enfatizan la escaso conocimiento de la flora; especialmente en los
vegetación natural potencial se basan o están proyec- trópicos, donde la complejidad florística de la vegeta-
tadas (hipotetizadas) en el desarrollo de etapas fina- ción dificulta una caracterización más adecuada
les o maduras de la vegetación. En palabras de Tüxen (Fosberg 1961, Beard 1973).
(1956 En: Muller- Dombois and Ellenberg 1974): [La Los sistemas fisonómicos proporcionan generali-
vegetación natural potencial sería] “la estructura de zaciones de la vegetación en escalas geográficas am-
la vegetación que se establecería si todas las secuen- plias y proveen información general acerca de las ca-
cias sucesionales fuesen completadas sin la interferen- racterísticas del ambiente, especialmente el clima, al

Las comunidades vegetales de México 47


cual la fisonomía particular puede ser una adaptación como los helechos arborescentes. Frecuentemente se
(Holdrige 1947, Whittaker 1975, Howard y Michell intercalan tanto en bosques, matorrales e incluso en
1985, Walter 1985). herbazales, principalmente pastizales.
La unidad básica de cualquier clasificación Dado el carácter tan particular de estas formas de
fisonómica es la formación: “Un tipo de comunidad crecimiento, diferentes autores han considerado algu-
definida por la dominancia de una forma de creci- nas de sus características para clasificar a las comuni-
miento del estrato superior o dominante de la comu- dades vegetales.
nidad, o por una combinación de formas de creci- La dominancia de las formas de vida en las comu-
miento dominantes.” (Whittaker 1962) nidades vegetales le dan su fisonomía, estructura y
En la práctica, las formaciones a veces son defi- fenología. Estos parámetros se han usado para dife-
nidas por combinaciones variadas de formas de cre- renciar y clasificar la vegetación.
cimiento dominantes y características del medio am-
biente, convencionalmente aceptadas, por ejemplo G. S ISTEMAS FLORÍSTICOS
“matorral desértico siempre verde”, “bosque deciduo
aluvial”, “bosque tropical siempre verde”. Para definir los tipos de vegetación estos sistemas uti-
Un ejemplo de un sistema de clasificación fisonó- lizan la composición florística de los grupos de es-
mico a nivel mundial es el diseñado por la UNESCO pecies más que los patrones fisonómicos de las espe-
(Brockman–Jerosh y Rübel 1930, Rübel 1930, Fosberg cies dominantes. Patrones de sucesión, disturbio,
1961 más el panel convocado ex profeso: ver Mueller– historia (incluyendo paleoecología) y comunidades
Dombois y Ellenberg 1974). Esta clasificación se ela- vegetales pueden determinarse mejor con la com-
boró para proveer la preparación de mapas a escala posición florística que con la fisonomía, la estructu-
1:1,000,000 o más. Es un sistema jerárquico de fiso- ra y la fenología.
nomía y estructura y algunos factores geográficos y
ambientales fueron usados para caracterizar los tipos H. S ISTEMAS FISONÓMICO ESTRUCTURALES
de vegetación.
Otros conceptos útiles para tener una clasificación Dansereau (1957) define la estructura de la vegeta-
y una nomenclatura de las comunidades vegetales son ción como “la organización en el espacio de los indi-
los siguientes: viduos que forman un stand (y por extensión un tipo
FORMAS DE VIDA O FORMAS DE CRECIMIENTO. Las plan- de vegetación o una asociación vegetal)” y plantea que
tas superiores desarrollan tres grandes tipos de for- los “elementos primarios de la estructura son las for-
mas de vida o de crecimiento: mas de crecimiento, la estratificación y la cobertura”.
Los árboles: plantas perennes, leñosas, generalmen- Esta definición aún sigue siendo válida. Sin embargo,
te de más de cuatro m de alto, con un tronco bien el término estructura de la vegetación se usa con dife-
definido a partir del cual comienzan a ramificarse. rentes significados. En el sentido más general es usa-
Cuando son dominantes forman los bosques. do en todas las investigaciones biológicas como el con-
Los arbustos o matas: plantas perennes, leñosas, cepto complementario de función; función relativa a
generalmente de más de 0.5 m de altura y ramificadas los procesos fisiológicos y estructura de la anatomía y
desde la base. Cuando son dominantes forman los morfología de los objetos bajo estudio.
matorrales. En ecología de la vegetación uno puede hablar de
Las hierbas: plantas de consistencia herbácea, es estructura de la vegetación al menos en cinco niveles:
decir, sin tejido secundario o leño; de altura variable,
anuales, bianuales o perennes. Cuando son dominan- 1. Fisonomía de la vegetación.
tes forman los herbazales (incluyendo los pastizales). 2. Estructura de la biomasa.
A veces se designa con el nombre de arborescentes 3. Estructura de las formas de vida.
a aquellas plantas que alcanzan la altura de los árbo- 4. Estructura florística.
les pero sin presentar un eje o tronco bien definido 5. Estructura del “stand” (relevé).
aunque tampoco tan ramificado como los arbustos.
A veces se emplea el término para referirse a plantas Fosberg (1961) hace una clara distinción entre la
que han alcanzado el aspecto o la altura de un árbol fisonomía y la estructura, y define a la fisonomía de la

48 Clasificación y nomenclatura
vegetación como la apariencia externa. La fisonomía clima, se les denominan “zonas de vegetación”, y se
en este sentido es el resultado en parte de la estructu- refieren a unidades mayores de vegetación que se co-
ra de la biomasa, fenómeno funcional y las caracterís- rresponden con las diferentes zonas climáticas (con
ticas gruesas de la composición, tales como lo luju- una relativa independencia del suelo y el sustrato geo-
rioso o la xeromorfia relativa de la comunidad. lógico).
La vegetación azonal está fuertemente influenciada
I. E L CONCEPTO DE COMUNIDAD VEGETAL en su presencia y distribución por las características
del suelo y/o del sustrato geológico, como en el caso
La comunidad vegetal puede definirse como la colec- de los pastizales halófilos y los pastizales gipsófilos.
ción de especies vegetales que crecen en una locali-
dad determinada y que muestran una asociación o K. C LASIFICACIÓN FISONÓMICA - ECOLÓGICA DE LAS
afinidad definida una con otra. Así una comunidad FORMACIONES VEGETALES DEL MUNDO
vegetal puede ser el césped o prado de un sitio, un
matorral espinoso, un bosque de pinos, etc. Existe to- Esta propuesta se deriva de un grupo de trabajo sobre
davía un gran debate acerca de la existencia o no de la clasificación y mapeo de vegetación convocado por la
comunidad vegetal. Sin embargo, una gran mayoría UNESCO y cuyos antecedentes se remontan a 1964,
está de acuerdo en la existencia de las comunidades 1965, 1966. La versión final fue revisada por Ellen-
vegetales que se repiten en el espacio. El punto de vis- berg y Mueller-Dombois en 1967, con la participa-
ta más realista es probablemente la teoría de la “co- ción entre otros de Gaussen, Budowski, Ellenberg,
munidad única” y la idea de que la vegetación de una Fränzle, Germain, Küchler, Lebrun, D-Poore y Socha-
región particular está distribuida a manera de un ra. Esta clasificación fisonómica fue desarrollada como
mosaico. Estas ideas se derivan de trabajos como el de base para mapear la vegetación del mundo en una es-
Whittaker (1953) y otros, quienes lo describen como cala 1:1,000,000 o más pequeña. Pensando que po-
“patrón o modelo climax”, argumentando que en cual- dría hacerse una comparación global de hábitat eco-
quier región, pueden presentarse condiciones muy lógicos indicados por combinaciones iguales de for-
similares en términos de factores ambientales y pre- mas de vida de plantas o formas de vida vegetales.
siones bióticas sobre grandes áreas. Donde estas com- En este contexto, las formaciones vegetales y otras
binaciones se repiten, la vegetación también lo hace divisiones fueron concebidas como combinaciones de
de una manera similar a los fragmentos dentro de un formas de vida vegetales, es decir, como unidades
mosaico. Sin embargo, casi siempre existe una buena fisonómicas. Para nombrarlas se han introducido tér-
proporción de áreas que constituyen ecotonos entre minos ecológicos y hasta donde fue posible, las defi-
las comunidades distinguidas. niciones se basaron en criterios fisonómicos. Como
Un concepto útil en el estudio de la vegetación y Unidades de vegetación, se distinguen:
en su clasificación es el de gradiente, entendido como Clases de formaciones. Por ejemplo: bosques cerra-
“el grado de variación de una magnitud en relación dos; bosques abiertos (woodlands); matorrales (scrub,
con la unidad... la medida de la variación de un ele- shrublands o thickets); matorrales enanos y comuni-
mento meteorológico en función de la distancia y di- dades relacionadas; comunidades herbáceas terrestres;
rección”. Por extensión puede hablarse de un gradiente formaciones de plantas acuáticas; áreas desérticas y
ambiental en el cual se presenta una variación de los áreas cubiertas escasamente por vegetación.
factores ecológicos en función de la distancia, la ele- Subclases de formaciones. Ejemplos: bosques prin-
vación, la dirección o el sustrato geológico; otros cipalmente siempre verdes o perennifolios; bosques
gradientes pueden referirse a variaciones edáficas. tropicales y subtropicales estacionales siempre verdes;
bosques tropicales y subtropicales semideciduos, etc.
J. V EGETACIÓN ZONAL Y VEGETACIÓN AZONAL Grupos de formaciones. Bosques umbrófilos tropi-
cales (también llamados tropical rain forests o bosques
La vegetación zonal se desarrolla en sitios en donde la lluviosos tropicales).
influencia del clima sobre la vegetación se ve poco al- Formaciones. Bosques umbrófilos tropicales de tie-
terada por las condiciones del relieve y el suelo. A rras bajas; bosques umbrófilos tropicales submon-
menudo a estas comunidades, determinadas por el tanos.

Las comunidades vegetales de México 49


Subformaciones: 1) de latifoliadas o 2) aciculifolios sucesión o el grado de disturbio. Tenemos como ejem-
o esclerófilos y Subdivisiones posteriores. plos: Pithecellobium ebano, Ehretia anacua, Condalia
hookeri, Forest; Acer rubrum, Liquidambar styraciflua,
L. S ISTEMA N ACIONAL DE CLASIFICACIÓN DE LA Populus heterophylla Forest; Pseudotsuga menziesii,
VEGETACIÓN EN LOS EE.UU. ( NVCS ) Festuca idahoensis Woodland, etc.
Burk, Parker, Sims y González–Rebeles (1998) pro-
El proyecto National GAP Analysis Project of the Biolo- pusieron la aplicación del enfoque metodológico del
gical Resources Division of the U.S. Geological Service, GAP Analysis para el estudio geográfico de las tierras
tiene como objetivos: proveer de información espa- adyacentes al sur del río Bravo en México. En este es-
cial explícita para la conservación de la diversidad bio- tudio, González–Medrano (1999) hizo una Adapta-
lógica; contribuir en el ámbito estatal, regional y na- ción del Sistema Nacional de Clasificación de la Vege-
cional al conocimiento y estado de conservación de tación (NVCS 1993) de los EE.UU. usado en los GAP
las especies nativas de vertebrados y la cobertura te- Analysis para la clasificación de la vegetación de la faja
rrestre natural de Estados Unidos de Norteamérica. fronteriza del mencionado río. En este trabajo las uni-
Con esta información facilita las actividades inheren- dades se definieron usando rasgos de la comunidad
tes al manejo y conservación de la tierra. que fueran más importantes u obvios para su carac-
Los GAP Analysis han sido usados en diferentes es- terización o para distinguir una comunidad de otras.
tados de la Unión Americana para diferentes fines, Estos rasgos incluyeron la composición florística (a
como evaluar comunidades vegetales en riesgo, co- nivel de especie), regímenes climáticos y geográficos,
nocer la distribución de especies vegetales, el mapeo factores ambientales importantes (tales como posición
de la vegetación, etc. En estructura jerárquica, de los de la comunidad vegetal en el paisaje, tipo de roca o
siete niveles usados en el NVCS, los cinco superiores, tipo de suelo) así como la fisonomía y la cobertura.
están basados en la fisonomía, mientras que los dos En marzo del año 2002, en Quito, Ecuador, se lle-
inferiores, la Alianza y la Asociación, están basados en vó a cabo una reunión de expertos en vegetación y su
la florística. La clasificación jerárquica parte de la pro- clasificación en América Latina. Uno de los aspectos
puesta de la UNESCO (1973). coincidentes en las expectativas de los participantes
Las clases florísticas con este sistema son: Alliance fue... “definir la forma de ensamblar en un sistema de
(Alianza) y Association (Asociación). clasificación, los niveles de clasificación florística más
La Alianza es un grupo de asociaciones de plantas detallados (fito–sociológicos)”. Sin embargo, hay muy
o asociaciones vegetales fisonómicamente uniformes, pocas áreas dentro de América Latina, y en especial
que comparten una o más especies diagnósticas (do- de México, que hayan sido estudiadas a nivel fitosocio-
minantes, indicadoras o “carácter”) la cual o las cua- lógico. No existe el mismo nivel de información para
les, como regla, se encuentran en un estrato superior toda la región, las metodologías usadas para este tipo
de la vegetación. El nivel de Alianza considera los ti- de trabajos no han sido uniformes y, en algunos ca-
pos de vegetación existentes (no sólo los “climax” o sos, aunque se cuenta con información florística ge-
potenciales). Ejemplos de ello son: Pithecellobium neral de las comunidades vegetales, obtenida a través
ebano “Forest Alliance”, Acer rubrum, Liquidambar de métodos fitosociológicos, puede suceder que sólo
styraciflua “Forest Alliance”; Pseudotsuga menziesii se tengan listas (listados) de la composición florística
Woodland Alliance”, Schizachyrium scoparium Wood- de la comunidad estudiada, las cuales pueden ser úti-
ed Herbaceous Alliance”, Asplenium montanum, Spar- les; sin embargo, si la finalidad es lograr una diferen-
sely Vegetated Alliance. ciación y nominación de unidades de vegetación a
La Asociación es el nivel más fino del sistema de nivel subregional o local con base en la composición
clasificación. Se considera como una asociación ve- florística, este enfoque resulta limitado.
getal individual o un complejo repetido de asociacio- Para resumir: en nuestro país la información
nes vegetales. Estas asociaciones tienen una composi- florística obtenida del estudio de las comunidades ve-
ción florística definida, una fisonomía uniforme y getales se ha enfocado, por un lado, a definir unidades
representan condiciones de hábitat uniformes. fitogeográficas por medio de métodos fitosociológicos
El concepto de Asociación vegetal se aplica a la y por otro, esta información se ha usado para estable-
vegetación existente, sin considerar su status, con la cer unidades sinecológicas, es decir, definir sinecias

50 Clasificación y nomenclatura
(colectividades vegetales y su medio), formaciones o consideran que una comunidad climax es aquélla que
tipos de vegetación, y a su vez, subdividirlas un tanto no muestra evidencias de reemplazo y que ha alcan-
arbitrariamente en unidades subordinadas, como aso- zado una etapa de equilibrio dinámico con los facto-
ciaciones, o más puntualmente como consociaciones. res del ambiente principalmente el clima.
Sin embargo, como ya se señaló, el diferente grado en En otro contexto, y en menor escala, la composi-
el conocimiento florístico de las comunidades vege- ción florística de los elementos subordinados también
tales de nuestro país dificulta en gran medida el clasi- tiene interés para completar la información anterior.
ficar unidades de vegetación basadas en la composi-
ción florística. 2. C LASIFICACIÓN Y NOMENCLATURA DE LA
Las consideraciones anteriores se hicieron pensan- VEGETACIÓN DE M ÉXICO
do en las comunidades vegetales, que poca o ninguna
(¿?) perturbación o disturbio han tenido como resul- La superficie del territorio nacional representa sólo
tado de actividades antropogénicas, es decir, la vege- un 15% del área total de la masa continental mun-
tación primaria. No obstante, una porción bastante dial; sin embargo, alberga casi el 10% de las plantas y
considerable de la vegetación que puebla el territorio animales terrestres conocidos. Se ha estimado que en
nacional está constituida por comunidades vegetales nuestro país hay entre 23,000 y 30,000 especies de
originadas a partir de la destrucción de la vegetación plantas superiores, lo cual colocaría a México con Bra-
primaria, las cuales pueden encontrarse en fases de sil, Colombia, Indonesia, China y Ecuador, en el gru-
recuperación, con una tendencia a restaurar la condi- po de países florísticamente más ricos. Pero México
ción original, o bien denotando claramente una eta- no sólo es rico en lo que respecta a flora sino también
pa sucesional secundaria, con un aspecto y una com- lo es en su vegetación, es decir, en las diferentes co-
posición florística muy diferentes a la original. Se munidades vegetales que pueblan su territorio. Prác-
estima que la vegetación secundaria ocupa alrededor ticamente todos los biomas existentes en el mundo se
del 45% del territorio nacional. localizan en el territorio nacional.
Dependiendo de la vegetación original, de su edad, La flora de una región determinada está constitui-
del ambiente bajo el cual se ha desarrollado y de otros da por el conjunto de taxa o taxones (especies, géne-
factores, se pueden diferenciar comunidades vegeta- ros, familias), esto es, su composición florística; por
les que corresponden a etapas sucesionales secunda- su parte, la vegetación está conformada por el agrupa-
rias, en las que predominan formas de vida arbóreas, miento de las formas de vida que tienen las especies
arbustivas y herbáceas. La composición florística para constituir las comunidades vegetales.
(principalmente las dominantes) de las diferentes eta- La ecología de la vegetación se refiere no solamen-
pas sucesionales, son elementos importan-tísimos te a la identificación de las comunidades vegetales (la
para entender la evolución, las tendencias sucesionales vegetación en si de un área), sino también pretende
y el dinamismo de la vegetación. determinar cómo están relacionadas estas comunida-
Vegetación climax. Etapa final de equilibrio diná- des entre sí y con los factores ambientales. El término
mico en la sucesión vegetal. Indica una etapa de ma- ecología de la vegetación es equivalente a la sociolo-
yor madurez en la sucesión. Es de entenderse que al- gía botánica de las escuelas europeas de ecología y a la
gunas series o sucesiones de la vegetación no van más sinecología (ecología de comunidades vegetales o
allá de cierto grado no muy elevado en su madurez, ecología vegetal) de los autores anglo-americanos.
como en el caso de la vegetación de las dunas o de las En sentido estricto, la sinecología se entiende como
praderas o pastizales. Algunos autores consideran que aquella parte de la ecología que “estudia las relaciones
esta etapa de equilibrio dinámico se logra principal- entre las colectividades vegetales o sinecias y su me-
mente con el factor clima y hablan de un climax dio”. En este sentido fue aceptado por la Ponencia de
climático, aunque no en el sentido clementsiano del nomenclatura del Congreso Internacional de Botáni-
término. Otros, por el contrario, consideran que la eta- ca de Bruselas.
pa de madurez y equilibrio dinámico de la comuni- Es importante mencionar que existen diferentes
dad vegetal se alcanza dentro del marco impuesto por criterios para clasificar a las comunidades vegetales.
el sustrato geológico o por el tipo de suelo y hablan Mueller-Dombois y Ellenberg (1974) mencionan los
entonces de un climax edáfico. Finalmente, algunos límites y posibilidades en la clasificación de la vegeta-

Las comunidades vegetales de México 51


ción en relación con la distribución de las plantas y su I. Propiedades de la vegetación misma.
clasificación. Destacan que todos aquellos que han lle- A.- Criterios fisonómicos y estructurales.
vado a cabo un gran número de muestreos de vegeta- 1.- Formas de vida o de crecimiento.
ción han coincidido en que: a) Formas de vida dominantes.
b) Combinaciones de formas de vida.
1. Condiciones similares de especies se repiten bajo 2.- Estratificación vertical.
condiciones parecidas de hábitat, aun en locali- 3.- Periodicidad.
dades geográficamente separadas. B.- Criterios florísticos.
2. Que dos muestreos de vegetación (relevé, stand, 1.- Una sola especie de planta (en casos espe-
estación, plot, parcela) no son exactamente igua- ciales 2 ó 3 especies).
les y que aunque estuviesen muy cercanos y en a) La especie dominante (en términos de altu-
hábitat equivalentes, muestran ciertas diferencias ra, o cobertura o una combinación de ambas).
uno del otro. b) Las especies más frecuentes (o las especies
3. Que la asociación de especies cambia más o me- más numerosas).
nos continuamente si se muestrea una comuni- 2. Ciertos grupos de especies de plantas.
dad grande o ampliamente distribuida. En con- a) Grupos de plantas estadísticamente derivados.
secuencia, las combinaciones de especies que se 1) Especies constantes (siempre presentes).
repiten están correlacionadas, obviamente, con su 2) Especies diferenciales (o segregadas).
ambiente. De cualquier modo, estas combinacio- 3) Especies clave (indicadoras o diagnóstico).
nes de especies son variables aunque este aspecto b) Grupos de plantas derivadas sin usar esta-
resulta en principio ilimitado, puesto que la co- dísticas de la vegetación.
munidad vegetal carece de un carácter organís- 1) Especies del mismo significado ecológico.
mico (de organismo). 2) Especies de la misma distribución geográfica.
3) Especies del mismo significado dinámico.
Estas tres generalizaciones definen las posibilida- c) Criterios de relación numérica (coeficientes
des y los límites de una clasificación sistemática de las de comunidad).
comunidades vegetales. Es posible, sin duda, ordenar 1) Entre especies diferentes.
las numerosas y altamente variables comunidades ve- 2) Entre comunidades diferentes.
getales en un sistema amplio y comprensivo. Sin em- II. Propiedades externas de la vegetación.
bargo, esto puede lograrse si uno abstrae propiedades A.- La supuesta etapa final en el desarrollo de
particulares de las comunidades individuales. Pero tal la vegetación (climax).
arreglo ordenado sólo es aplicable a un área geográfi- 1.- Definida por combinaciones de formas de
camente limitada, de significado regional y no puede vida.
ser extrapolado a un área mayor sin un estudio adi- 2.- Definidas por criterios florísticos.
cional. B.- El hábitat o el medio ambiente.
A diferencia de las poblaciones de plantas y anima- 1.- Ciertos factores del sitio.
les que tienen interrelaciones genéticas, las interrela- a) Clima.
ciones de las comunidades vegetales en una clase de b) Relaciones con el agua.
vegetación consisten de ciertas similitudes en combi- c) Suelos.
nación de plantas y sus causas de desarrollo. Una clase d) Influencias antropogénicas (prácticas de
de vegetación o tipo de comunidad es solamente el re- manejo).
sultado de obtener ciertas similitudes de un número 2.- Combinación de factores del sitio
de comunidades concretas. C.- Localización geográfica de comunidades.
III. Propiedades que combinan tanto la vegetación
A. C RITERIOS Y SISTEMAS DE CLASIFICACIÓN DE LA como el ambiente.
VEGETACIÓN A.- Por un análisis independiente de la vege-
tación (en el sentido I) y un análisis inde-
Las comunidades vegetales pueden clasificarse toman- pendiente de los componentes ambientales
do en cuenta diferentes criterios: y su subsecuente correlación (por ejemplo, a

52 Clasificación y nomenclatura
través de la sobreposición de unidades 3. U NIDADES DEL PAISAJE
mapeables).
B.- Por análisis combinado de vegetación y me- Debido a las numerosas facetas o características de las
dio ambiente, haciendo énfasis sobre las comunidades y sus interacciones funcionales con el
interdependencias en un sentido funcional ambiente, es natural considerar que, tanto las carac-
(Mueller-Dombois y Ellenberg 1974). terísticas de las comunidades como las del ambiente
deben tomarse en cuenta conjuntamente en su clasi-
Por otra parte, Whittaker (1978), en un trabajo ficación. Las unidades del paisaje se han considerado
muy bien documentado distingue grandes enfoques en dos niveles:
en la clasificación de las comunidades vegetales. Paisajes. Se consideran todas las características para
definir las unidades geográficas o unidades del paisa-
1. U NIDADES FISONÓMICAS je: clima, sustrato geológico, topografía, flora, fauna,
tipos de comunidades naturales y la influencia del
Las primeras clasificaciones de la vegetación estuvie- hombre sobre el ambiente. Usando los paisajes como
ron basadas en su fisonomía y su estructura. La pri- un todo se tratan como unidades o se agrupan en cla-
mera estaba definida por los tipos estructurales de las ses, considerando sus principales características, re-
plantas o formas de crecimiento (por ejemplo, gra- sultan así los “tipos de paisaje”.
míneas o árboles latifoliados y caducifolios) que do- Micropaisajes. Partes homogéneas más pequeñas
minan o son más conspicuos en las comunidades. Es de la superficie terrestre pueden ser tratadas como
decir, las formas de vida o formas de crecimiento de ecosistemas, considerando conjuntamente a la co-
las plantas dominantes. munidad y su medio ambiente y ser así clasificados
Una comunidad tipo sobre un continente dado, defi- como tipos de micropaisajes. En Rusia la unidad lo-
nida por la dominancia de las formas de crecimiento cal de paisaje se ha designado como una biogeo-
(y los grandes rasgos del ambiente) es una formación. cenosis, este concepto ha tenido una influencia ex-
Un agrupamiento de formaciones similares que se pre- tensa sobre la clasificación de los bosques y tipos de
sentan en climas similares de los diferentes continentes biogeocenosis y otros aspectos de la ecología.
es una formación-tipo. Estos conceptos han sido la base
de extensas investigaciones en biogeografía. Los ecólo- 4. Á REAS BIÓTICAS
gos interesados tanto en plantas como en animales a
veces han usado como unidades correspondientes al En algunos enfoques las áreas geográficas de las espe-
bioma y al “bioma-tipo”. cies se enfatizan como base para dividir la superficie de
la tierra en unidades bióticas. Entre las especies se dis-
2. U NIDADES AMBIENTALES tinguen los aspectos de formas de crecimiento y tipos
de respuesta ecológica. Estos tipos de respuesta ecoló-
Las unidades fisonómicas clasifican a la vegetación por gica se prefieren a las formas de vida tradicionales.
su estructura como una expresión del medio ambien- El espectro de formas de crecimiento contribuye a
te. Es posible tomar este enfoque y clasificar los am- la caracterización de la biocenosis-tipo y permite su
bientes por sí mismos, guiados por la idea de que las comparación con otras biocenosis. Las grandes
unidades ambientales también podrían ser caracteri- biocenosis de clima y suelo normales en una faja de
zadas por diferencias en la estructura. Algunos siste- vegetación se denominan fitocenosis regionales.
mas de clasificación de climas (Köppen o Thornthwai- Aunque la definición de las fajas o cinturones de
te) pretenden definir unidades climáticas que podrían vegetación son en principio florísticos, corresponden,
corresponder a grandes formaciones-tipo. por lo general, a tipos de vegetación regionales que
Algunos especialistas han tratado de definir zonas pueden reconocerse por su fisonomía y dominancia.
altitudinales basándose principalmente en el clima. En los Estados Unidos de América, Dice (1943)
Holdridge (1947) realiza una clasificación de las zo- reconoció como provincias bióticas a las unidades
nas climáticas empleando tanto la temperatura como geográficas caracterizadas por el clima, la fisiografía,
las condiciones de humedad y pretende asignar las for- los suelos y las comunidades bióticas mayores que se
maciones-tipo del mundo a éstas. desarrollan en función de éstas. Las provincias bióticas

Las comunidades vegetales de México 53


son, en esencia, unidades del paisaje, en cuya defini- mas secos y en las costas marinas y litorales de cuer-
ción se enfatizan las comunidades características. Su pos de agua.
uso principal ha sido como unidades biogeográficas
o faunísticas apropiados para la interpretación de dis- 6. D OMINANCIA DE ESPECIES
tribuciones de especies y la diferenciación evolutiva
de especies y subespecies. Es natural clasificar así a las comunidades terrestres
porque la dominancia, después de la fisonomía, está
5. Z ONAS Y SERIES dada por la(s) especie(s) dominante(s). La clasifica-
ción por tipos de dominancia tiene un cierto número
Algunos enfoques en la clasificación se basan en la di- de limitaciones pero, a veces, es conveniente y ade-
visión de gradientes de vegetación en segmentos o zo- cuado para los propósitos de un estudio determina-
nas (zonas de vegetación). Así, diferentes autores re- do. Varios autores han usado el término asociación
conocieron zonas altitudinales en las montañas de los para tipos de dominancia, pero sería más convenien-
EE.UU. y han intentado relacionar las zonas con la tem- te usarlo sólo para las unidades florísticamente con-
peratura en fajas o cinturones transcontinentales. En cebidas (por ejemplo, el criterio de la escuela de Braun-
muchas áreas las zonas se definieron por las especies Blanquet).
de plantas dominantes, pero estas áreas fueron tam-
bién unidades bióticas al establecerse la distribución 7. D INÁMICA DE LA VEGETACIÓN
de especies animales.
En este sentido Beard (1944-1955) relacionó las Una secuencia de sucesiones es una “serie ecológica”
formaciones de América tropical unas con otras, en el tiempo; la sucesión en diferentes hábitat tiende
como series de formaciones, es decir, secuencias de a converger hacia comunidades clímax, que son más
formaciones vegetales a lo largo de gradientes am- similares entre sí que las primeras etapas de las suce-
bientales. Otros autores trabajaron con unidades de siones. En consecuencia, como una base para su clasi-
vegetación más pequeñas a lo largo de gradientes am- ficación, es posible agrupar las diversas comunidades
bientales y consideraron a estas secuencias como “se- sucesionales de un área alrededor de un tipo de clí-
ries ecológicas”. max hacia el cual tienden.
Todos estos enfoques tienen en común una com- Esta combinación de interrelaciones sucesionales
binación de la clasificación (dividen los gradientes de con la definición de las comunidades clímax tipo,
la comunidad en unidades, segmentos o zonas) y la como formaciones o como tipos de dominancia ha
ordenación (relacionando estas unidades con otras a sido aplicada en la ecología de países de habla inglesa.
lo largo de ejes ambientales). Clements (1916), Shelford (1931) y otros consideran
En muchos casos las unidades son tipos de domi- la existencia de una sola comunidad clímax climática
nancia, pero en otros tratamientos estas unidades se para un área dada, hacia la cual convergen todas las
han definido por el clima, o como formaciones, aso- sucesiones.
ciaciones o sociaciones. Las comunidades climax fueron concebidas como
Las series ecológicas pueden ser usadas en algunas formaciones y las subdivisiones geográficas de las for-
circunstancias en las cuales se pueden reconocer las maciones se reconocieron como asociaciones. Los ti-
relaciones de los tipos de comunidad con los pos sucesionales o en desarrollo fueron reconocidos
gradientes ambientales. como sucesiones.
El uso de “zonas” implica que un gradiente am-
biental tiene un efecto tan grande en la comunidad 8. U NIDADES DE ESTRATOS
que otras variables del entorno natural pueden su-
bordinarse a él, y que la vegetación podría expresarlo. Es posible clasificar fracciones de comunidades vege-
Entonces, las comunidades son tratadas como fajas o tales, y en particular usar unidades diferentes de cla-
zonas en relación con ese gradiente complejo. Zonas sificación para los distintos estratos o para formas de
como tipos de dominancia parecen estar más clara- vida.
mente definidas en comunidades de ambientes más Así, el estrato con árboles, arbustos, yerbas y
severos, tales como las de macizos montañosos en cli- talofitas, de una comunidad dada puede, en este caso,

54 Clasificación y nomenclatura
pertenecer a diferentes unidades y es posible que no bución está centrada en o limitada en buena medida
exista una correspondencia simple entre estas unida- a una comunidad tipo determinada.
des cuando se observan en una amplia gama de am- La unidad básica es la asociación. Las asociaciones
bientes. Este enfoque sinusial de la vegetación tiene se agrupan en alianzas, éstas en órdenes, las cuales, a
una larga historia (sinusia, synusia, conjunto de plan- su vez, lo hacen en clases, para producir una jerarquía
tas que en una comunidad tiene la misma forma de formal de clasificación de la comunidad. Una comu-
vida y pertenecen al mismo estrato; serían equivalen- nidad tipo o unidad de cualquier nivel puede deno-
tes a las simorfias de Huget del Villar). A estas unida- minarse un Syntaxon. Las unidades mayores se pue-
des de clasificación se les llama “uniones”. den definir por la especie-carácter (o especie-clave).
Es posible clasificar también a las comunidades por Por su parte, las asociaciones pueden dividirse en
combinaciones de uniones (o de especies dominan- subasociaciones y éstas últimas en variantes y facies
tes de los estratos). Según este enfoque las comunida- como unidades de niveles más bajos.
des vegetales, una combinación de uniones A, B y C, y
la otra unión A, D y C, pertenecen a diferentes comu- 12. S ITIOS DE PASTIZAL
nidades tipo. La clasificación de la vegetación por com-
binaciones de estratos dominantes fue desarrollada En México la Comisión técnico consultiva para la de-
por la escuela de Upsala. finición regional de los coeficientes de agostadero
(COTECOCA) divide los tipos de vegetación o tipos ve-
9. T IPOS DE SITIOS FORESTALES getativos en “sitios de pastizal”. Los considera “áreas
de terreno que tienen tal combinación de factores edá-
Los tipos de sitios forestales pueden definirse por la ficos, topográficos, climatológicos y vegetativos que
composición del sotobosque y usados para indicar el la hacen diferente en potencial forrajero a las áreas
medio ambiente y su potencial para el crecimiento de adyacentes”. Para cada estado de la República dicha
los árboles del dosel superior. Estos sitios tipo de bos- comisión ha diferenciado y cartografiado tanto los ti-
que se agruparon en clases por condiciones de hume- pos de vegetación como los sitios de pastizal, algunos
dad y se arreglaron en series ecológicas en relación a 1:500,000 y otros a 1:1,000,000.
con los gradientes ambientales mayores.
B. L A C LASIFICACIÓN DE LA VEGETACIÓN DE
10. C LASIFICACIONES NUMÉRICAS M ÉXICO

Se basan directamente en mediciones de similitud re- Los antecedentes sobre la vegetación de la cubierta ve-
lativa, ya sea de la distribución de especies o la com- getal se remontan a los trabajos de Martens y Galeotti
posición de las muestras. Por ejemplo, Goodall (1953) (1842) y Richard y Galeotti (1844). Hacia 1899 Ra-
usó la ausencia de correlación entre especies como un mírez establece la diferencia de las regiones geográfi-
criterio para la homogeneidad de las unidades de ve- co botánicas de México, ya esbozadas en el trabajo de
getación de niveles bajos. La vegetación con este en- Martens y Galeotti (op. cit.), aunque dicha obra re-
foque se concibe como un patrón multidimensional sultó más bien una clasificación climática del país en
o red de trabajo de variación, en el cual el nodum donde distingue lo que Ramírez llama regiones geo-
(nodo) es un punto de referencia abstracto. gráfico-botánicas.
Los trabajos más antiguos en los que se comienza
11. U NIDADES FLORÍSTICAS a abordar el problema de la clasificación de la vegeta-
ción de México son los de Ochoterena (1918 y 1923)
Finalmente, es posible basar la clasificación de la ve- y en especial el de 1937 sobre los esquemas biotípicos
getación en la composición florística de las comuni- y sinecias característicos de las regiones geográfico bo-
dades, sin menoscabo de las técnicas numéricas. Las tánicas de México. En él ubica para cada una de sus
muestras de vegetación (relevés, muestreos) se agru- regiones geográficas las formas de vida y las sinecias o
pan en comunidades tipo por similitud en la compo- comunidades vegetales que las conforman, comple-
sición florística, especialmente por la representación tándolo con fotos, descripciones y listas breves de las
de las especies carácter (o especies clave), cuya distri- especies más características. Por su parte, el trabajo

Las comunidades vegetales de México 55


de Leopold (1950) sobre zonas de vegetación de Méxi- trechamente vinculadas con una característica parti-
co es una una propuesta formal de clasificación de las cular del sustrato, por ejemplo, las comunidades de
comunidades vegetales, más elaborada que las ante- acuáticas y subacuáticas, algunos palmares, zacatales
riores, con un mapa de la vegetación, en donde pro- o comunidades de halófitas.
porciona una estimación de la superficie que cada tipo Como hemos visto, al clasificar las comunidades
de vegetación ocupa en el territorio mexicano. vegetales se toma en cuenta la composición florística,
Sin embargo, no fue sino hasta la aparición del tra- las formas de vida de las plantas, la fisonomía y la es-
bajo de Miranda y Hernández-X (1963) cuando se pre- tructura de la comunidad, así como algunos rasgos
senta una propuesta más formal, más acabada, de la del ambiente o la distribución geográfica de las plan-
clasificación y la nomenclatura de los tipos de vegeta- tas. Un enfoque por demás útil toma en cuenta la fi-
ción de México. Trabajos posteriores (Gómez Pompa sonomía, la estructura y la fenología de las comuni-
1965, Pennington y Sarukhán 1968, Flores Mata et al. dades vegetales.
1971), siguieron básicamente las ideas propuestas de Fosberg (1961) establece una clara distinción en-
Miranda y Hernández-X. Cabría hacer una excepción tre fisonomía y estructura y define a la fisonomía como
a esta generalización en la obra de Aubreville (1962) y la apariencia externa de la vegetación. La estructura
en la de González Quintero (1968). expresa la distribución de las plantas en el espacio, en
Con la aparición del estudio de Rzedowski (1978) sentido vertical, lo que da la estratificación o la dife-
sobre la vegetación de México, se integra una gran renciación de la comunidad en estratos y la cobertu-
cantidad de información acerca de las comunidades ra, que es la distribución de las formas de vida en sen-
vegetales de nuestro país, así como parte de sus ca- tido horizontal; ambos parámetros estratificación y
racteres ecológicos, su distribución, y sus rasgos cobertura son conceptos cuantitativos.
fitogeográficos, entre otros. Sin embargo, en relación La fenología es un concepto cualitativo que deno-
con la clasificación y con la nomenclatura de las co- ta la apariencia, el aspecto de la comunidad y se con-
munidades vegetales del territorio nacional, el pro- sidera una expresión de la respuesta que tienen las
pio autor escribió... “la elaboración de una nueva cla- plantas ante algunas características del ambiente como
sificación de la vegetación de México no figura entre la precipitación y la temperatura o el tipo de suelo
sus objetivos inmediatos, y en su opinión más vale donde se desarrollan, y que se manifiesta en la pérdi-
esperar para hacerlo hasta que nuevas y más pro- da del follaje, los tiempos de floración, la exfoliación
fundas aportaciones permitan abordar el problema de los tallos, el desarrollo de tejidos crasos, la
a nivel más apropiado y ofrecer así un cuadro real- esclerofilia, etc. Su distribución en el espacio en senti-
mente satisfactorio para todo tipo de usuarios.” do vertical da lugar a la estratificación o la diferencia-
(Rzedowski 1978: 154) ción de la comunidad en estratos y la distribución en
Este autor reconoce diez tipos principales de ve- sentido horizontal proporciona otro parámetro cuan-
getación y acepta que el sistema que propone adolece titativo, la cobertura.
del defecto común a casi todas las clasificaciones de la El enfoque fisonómico, estructural y fenológico
vegetación que se han usado en México, y que consis- para clasificar a las comunidades vegetales destaca las
te en la heterogeneidad de los criterios básicos em- características de las formas de vida o biotipos: árbo-
pleados para definir las unidades, pues los hay les, arbustos, hierbas, graminoides, etc. Se parte de la
fisonómicos, de naturaleza florística y también otros idea que las formas de vida de las plantas son el resul-
definidos por el medio. tado de la interacción que se establece entre la infor-
Así, la ausencia de un principio básico que sirvie- mación genética de los individuos y las características
ra de base para la clasificación, ha contribuido (y lo selectivas del ambiente, de tal manera que las formas
sigue haciendo) a la proliferación de categorías, nom- de vida expresan el entorno natural en el cual se han
bres y sistemas nuevos. Acepta que algunas de las uni- desarrollado. Por lo tanto, las comunidades vegetales
dades de vegetación reconocidas no pueden catalo- naturales, conformadas por las formas de vida que las
garse como clímax climáticos, es decir, comunidades constituyen, tienden, igualmente, a reflejar las condi-
bióticas estables en función de los factores del medio ciones del hábitat bajo el cual han evolucionado. Este
físico en que viven, principalmente el clima. Así, la carácter indicador de la vegetación es extraordinaria-
existencia de algunas unidades de vegetación están es- mente útil.

56 Clasificación y nomenclatura
Con el enfoque fisonómico estructural para la cla- consociato en la nomenclatura de sociabilidad de H.
sificación se hace uso de una serie de términos y con- del Villar, y que indica el dominio de una sola especie
ceptos que es conveniente aclarar. Así, la fisonomía en en la asociación.
geobotánica es el carácter de la formación dado por la Formación: término introducido por Grisebach en
forma biológica de sus componentes. La forma bioló- 1838, con un sentido claramente fisonómico. La Co-
gica (sinónimo, biotipo) resulta la categoría donde se misión de nomenclatura propuso definirla como “la
incluyen los vegetales (independientemente de su po- expresión actual de determinadas condiciones de vida”,
sición sistemática) que concuerdan fundamentalmen- añadiendo que “se compone de asociaciones que se
te en su estructura morfológico–biológica y de un modo diferencian en su composición florística pero coinci-
especial en los caracteres relacionados con la adapta- den en primer término en las condiciones estacionales
ción al ambiente ecológico. Por ejemplo: árbol, arbus- y en segundo lugar en sus formas biológicas.
to, hierba, etc., corresponden a formas biológicas. Actualmente hay una tendencia clara a establecer
El biotipo es el conjunto de fenotipos que corres- una diferencia neta entre formación y asociación, con-
ponden al mismo genotipo. Es sinónimo de forma bio- servando estas palabras sus valores etimológicos e his-
lógica y de tipo biológico. Por su parte, la fenología es tóricos.
la forma contracta de fenomenología: estudio de los Por su parte, H. del Villar definió la formación
fenómenos biológicos acomodados a cierto ritmo pe- como: “Una cohabitación botánica individualizada
riódico, como la brotación, la florescencia, la madura- por la forma biológica que en ella domina”. Equivale,
ción de los frutos, etc. Como es natural, estos fenóme- por lo tanto, a la sinecia o fitocenosis (desde el punto
nos se relacionan con el clima de la localidad en que de vista biotípico). Así, la formación puede expresar-
ocurren y viceversa; de la fenología se pueden sacar se en términos comunes como bosque, prado, estepa,
consecuencias relativas al clima y especialmente al sabana, espinar, chaparral, etc., o más técnicamente:
microclima, cuando ni uno ni otro se conocen debida- bosque perennifolio esclerófilo.
mente. Por su etimología, es el estudio de los fenóme- Mueller–Dombois y Ellenberg (1974) consideran
nos que se suceden en el desarrollo de una especie o de las formaciones, como aquellas comunidades vegeta-
una sinecia. les dominadas por una forma de vida particular (ár-
La fenología de una sinecia depende no sólo de la bol, arbusto, subfrutice) y que se desarrollan en hábitat
naturaleza de sus componentes y del dinamismo del similares.
medio, sino también de la influencia recíproca entre Tipo de vegetación: es una unidad fitogeográfica
sus componentes: así, en un bosque caducifolio, el muy amplia de tipo ecológico y fisonómico; por ejem-
periodo áfilo ofrecerá un medio favorable para las plo el bosque, el prado, etc.
plantas heliófilas. Bioma (biomes): es el término originalmente pro-
Sinecología: es el término geobotánico que, en sen- puesto por Clements (1916) con el significado de co-
tido amplio, es sinónimo de fitosociología y en un sen- munidad biótica, integrada por plantas y animales. Pos-
tido estricto es la parte de la ecología que “estudia las teriormente, Shelford (1935), Carpenter (1939) y otros
relaciones entre las colectividades vegetales o sinecias han precisado su sentido y le han dado una extensión
y su medio”, tal como ha sido aceptado desde 1910 en coincidente con la de formación clímax. Según estos
el Congreso Internacional de Bruselas. autores, el bioma se caracteriza por la uniformidad
Sociación (del latín sociatio, onis, asociación). Algu- fisonómica de la clímax vegetal y por los animales influ-
nos geobotánicos norteamericanos dan este nombre a yentes; posee una constitución biótica característica.
las “sociedades” de carácter periódico, es decir, a los gru- Asociación: Se le atribuye a Humboldt (1805) el
pos de “subdominantes” que sólo tienen un papel im- empleo de este término por vez primera para hacer
portante en la vegetación durante una época del año. referencia a la composición florística (es decir, siste-
La sucesión. Se considera como una serie de cam- mática de la colectividad vegetal). Con esta significa-
bios florísticamente distinguibles en las comunidades ción fue propuesta por Flahault en el Congreso de Bo-
vegetales a lo largo del tiempo (Moravec 1992). tánica de París en 1900.
Consociación: concepto utilizado por los geobo- La Comisión de nomenclatura del Congreso de
tánicos norteamericanos, y que sirve para caracteri- Bruselas 1910 la definió como: “una colectividad ve-
zar la dominancia de una especie; equivalente a getal de composición florística determinada, unidad

Las comunidades vegetales de México 57


de condiciones estacionales y unidad fisonómica: es (formaciones) ecológicamente relacionadas en un
la unidad fundamental de la sinecología”. gradiente ambiental, por ejemplo, las formaciones que
Por su parte, en el Congreso Internacional de se desarrollan en una región montañosa. La gran uni-
Amsterdam (1935) se acordó que en lo sucesivo, el dad de vegetación que Rzedowski (1978) define como
término asociación sólo se emplearía para unidades matorral xerófilo, correspondería a una serie de for-
definidas por la posesión de especies características y maciones, pues el concepto que maneja agrupa a to-
diferenciales en el sentido de la escuela Zurich– dos los matorrales xerófilos como tipos de vegetación
Montpellier, o por lo menos, para unidades del mis- o formaciones xerófilas de México.
mo orden de importancia. Los geobotánicos norte- Concretamente, hay un agrupamiento a tres ni-
americanos emplean el término para designar veles:
subdivisiones de primer orden de la formación climax.
Flahault y Shroter (1910, citados por Moravec . Un agrupamiento florístico: La asociación (o la
1992), consideran la asociación como una comuni- consociación);
dad vegetal tipo, de composición florística definida y . Un agrupamiento fisonómico, la formación y
condiciones de fisonomía y hábitat uniformes. Por su . Un agrupamiento de hábitat o ecológico, las se-
parte Braun Blanquet (1921, citado por Moravec ries de formaciones. Por ejemplo: la asociación
1992) consideró a la asociación como: una comuni- Larrea–Flourensia; la formación matorral inerme
dad vegetal caracterizada por rasgos florísticos y so- parvifolio; la serie de formaciones matorrales
ciológicos (organizacionales) definidos y que mues- xerófilos y el bioma matorrales, entre otros.
tran una cierta independencia por la presencia de
especies características (exclusivas, selectivas y prefe- En México el término tipo de vegetación se ha usa-
renciales). do extensamente debido a la influencia que Miranda
Otros autores como Beard (1978) consideran que y Hernández–X. (1963) y Rzedowski (1978) ejercie-
las asociaciones clímax, es decir, las comunidades ve- ron en el desarrollo de la ecología de la vegetación de
getales aparentemente maduras, estables e integradas, nuestro país. Aunque Miranda y Hernández X. (op.
pueden agruparse de acuerdo con su estructura y fiso- cit.), en su trabajo sobre tipos de vegetación de Méxi-
nomía en formaciones. Por lo tanto, la formación es co hacen mención de las formaciones vegetales, no
un grupo fisonómico y es independiente de su flora. insisten en que sean equivalentes a los tipos de vege-
Beard (1955) introduce el concepto de series de tación, por lo que el término tipo de Vegetación ha
formaciones para referirse a comunidades vegetales persistido en nuestro ambiente botánico.

58 Clasificación y nomenclatura
Bosque tropical mediano subcaducifolio (Am Aw) Bosque tropical alto perennifolio.
Foto: Claudio Contreras Foto: Claudio Contreras Herbazal flotante. Foto: Claudio Contreras EJEMPLOS DE COMUNIDADES VEGETALES DE DIFERENTES REGIONES DE MÉXICO

Bosque tropical mediano subperennifolio (AF, Aw).


Matorral alto crasicaule espinoso (BSh, BW)
Foto: Claudio Contreras
Foto: Claudio Contreras

Las comunidades vegetales de México 59


Bosque templado mediano de aciculifolios (Cwa, Cwb)
Matorrales medianos rupícolas. Foto: Claudio Contreras Foto: Claudio Contreras

60 Clasificación y nomenclatura
EJEMPLOS DE COMUNIDADES VEGETALES DE DIFERENTES REGIONES DE MÉXICO

Bosque templado alto de linearifolios (Cwb) Matorral alto crasicaule espinoso (BSh, BW)
Foto: Claudio Contreras Foto: Claudio Contreras
Bosque tropical bajo caducifolio (Aw, Cwa) Matorrales bajos a medianos arenícolas
Foto: Claudio Contreras (psamófilos). Foto: Claudio Contreras EJEMPLOS DE COMUNIDADES VEGETALES DE DIFERENTES REGIONES DE MÉXICO

Herbazal halófito sumergido. Foto: Claudio Contreras

Bosque tropical bajo caducifolio (Aw, Cwa)

Las comunidades vegetales de México 61


Foto: Claudio Contreras
62 Clasificación y nomenclatura
Capítulo IV. Propuesta de un sistema de
clasificación y nomenclatura de las
comunidades vegetales de México

1. C RITERIOS PARA UNA PROPUESTA DE d) Caducifolia (mas de 75% de las especies caduci-
CLASIFICACIÓN Y NOMENCLATURA DE LA folias).
VEGETACIÓN DE M ÉXICO 3. Tamaño de las formas de vida
a) Alto
Para describir y denominar la fisonomía, la estructu- Arbol: 30 m o más
ra y la fenología de las comunidades vegetales en la Matorral: 2 a 4 m
nueva propuesta, tomamos en consideración las ca- b) Mediano
racterísticas de las formas de vida y de la vegetación Arbol: 15 a 30 m
propuestas en parte por Dansereau (1957) y Miranda Matorral: 1 a 2 m
y Hernández X. (I963): Hérbacea 0.5 a 2 m
c) Bajo
1. Forma de vida Arbol: 4 a 15 m
a) Arbol Matorral: 1 m
b) Arbusto ( o mata) Hérbacea: menor de 0.5 m
c) Hierba 5. Textura y consistencia de hojas y tallos.
d) Liana o trepadora a) Pergaminosa
b)Suave
2. Función (las formas de vida y/o las comunidades c) Membranosa
pueden ser perennifolias o caducifolias. Sólo las comu- e) Esclerófila, coriácea o durifolia
nidades vegetales pueden ser subperennifolias o f) Tallo carnoso o crasicaule
subcaducifolias, dependiendo del porcentaje de elemen- g) Hoja carnosa o crasifolia
tos de la comunidad que pierdan o conserven el follaje). h)Inerme
i) Espinosa
a) Siempre verde o perennifolia ( más del 75 hasta 6. Cobertura
el 100% de las especies dominantes pierden el a) Muy compacta (mayor de 200 %)
follaje). b)Compacta o continua (de 100 a 200 %)
b) Subperennifolia (25 a 50% de las especies c) Abierta o discontinua (de 50 a 90 %)
caducifolias). d)Dispersa (de 5 a 50 %)
c) Subcaducifolia (50 a 75% de las especies cadu- Muy dispersa o desierta (menos de 5 %).
cifolias).

Las comunidades vegetales de México 63


PROPUESTA DE CLASIFICACION DE LA VEGETACION DE MEXICO

Biomas
Series de formaciones
Vegetación zonal Formaciones
Asociaciones
Consociaciones
ZONA TROPICAL: TRÓPICO SECO
Y TRÓPICO HÚMEDO
Biomas
Vegetación azonal Series de formaciones
Formaciones
Asociaciones
Consociaciones

Biomas
Series de formaciones
Vegetación zonal Formaciones
Asociaciones
Consociaciones
ZONA TEMPLADA
Biomas
Series de formaciones
Vegetación azonal Formaciones
Asociaciones
Consociaciones

Biomas
Series de formaciones
Vegetación zonal Formaciones
Asociaciones
Consociaciones
ZONA ÁRIDA Y SEMIÁRIDA
Biomas
Series de formaciones
Vegetación azonal Formaciones
Asociaciones
Consociaciones

64 Propuesta de un sistema de clasificación


1. ZONA TROPICAL: TRÓPICO HÚMEDO Y Series de formaciones: pastizales edáficos
TRÓPICO SECO Formaciones vegetales (tipos de vegetación):
Pastizales halófilos amacollados
A. Ve g e tac ión zzonal
tación onal Pastizales halófilos cespitosos
Bioma: Bosques tropicales Pastizales inundables con o sin árboles esparcidos
Series de formaciones: bosques tropicales húme-
dos (incluye comunidades arbóreas sucesionales). II. ZONA TEMPLADA
Formaciones vegetales (tipos de vegetación):
Bosque tropical alto perennifolio (Af, Am). A. Ve g e tac ión zzonal
tación onal
Bosque tropical alto subperennifolio (Am, Aw). Bioma: Bosques templados
Bosque tropical mediano subperennifolio (Af, Series de formaciones (incluye comunidades
Aw). arboreas sucesionales).
Bosque tropical mediano subcaducifolio (Am, Formaciones vegetales (tipos de vegetación).
Aw). Bosque templado alto de linearifolios (Cwb)
Series de formaciones: bosques tropicales secos Bosque templado mediano de aciculifolios
(incluye comunidades arbóreas sucesionales). (Cwa, Cwb).
Formaciones vegetales (tipos de vegetación): Bosque templado mediano de aciculidurifolio
Bosque tropical mediano caducifolio (Aw, (Cf, Cw, Cwa).
BSh). Bosque templado mediano de duriaciculifolio
Bosque tropical bajo perennifolio (Am, Aw). (Cwa, Cwb).
Bosque tropical bajo subperennifolio (Am, Bosque templado mediano de durifolios (Cf,
Aw). Cwa, Cwb).
Bosque tropical bajo subcaducifolio (Aw, BSh, Bosque templado bajo de escuamifolios (BSk,
BW). Cwa, Cwb).
Bosque tropical bajo caducifolio (Aw, Cwa). Bosque templado mediano caducifolio (Cfb,
Bosque tropical mediano caducifolio (Aw, BSh) Cwb).
Bosque templado bajo de escuamiaciculifolios
B. Ve g e tac ión az
tación onal
azonal (BSk, Cwa, Cwb).
Bioma: Bosques tropicales Bosque templado bajo de duriescuamifolios
Serie de formaciones: bosques tropicales azonales ((BSk, Cwa, Cwb).
húmedos (incluye comunidades arbóreas sucesio- Bioma: Herbazal templado
nales). Serie de formaciones: Pastizales de montaña
Formaciones vegetales (tipos de vegetación): Formacion vegetal (tipo de vegetación).
Bosque bajo hidrófilo pinnado palmatifoliado Pastizal amacollado de montaña (Cwc).
Bosque bajo a mediano perennifolio halófilo Pastizal amacollado de montaña con arbustos
Bosque mediano a alto perennifolio ripario esparcidos (Cwc).
Bosque bajo perennifolio hidrófilo
Series de formaciones: bosques tropicales secos B. Ve g e tac ión az
tación onal
azonal
(incluye comunidades arbóreas sucesionales). Bioma: Bosques templados
Formaciones vegetales (tipos de vegetación): Serie de formaciones (incluye comunidades
Bosque mediano perennifolio de durifolios arboreas sucesionales).
Bioma: herbazal Formación vegetal (tipo de vegetación).
Series de formaciones: vegetación hidrófila dul- Bosque templado mediano aciculifolio gipsófilo.
ceacuícola. Bosque templado mediano linearifolio ripario.
Formaciones vegetales (tipos de vegetación): Bioma: Herbazal templado
Herbazal angustifolio inundado Serie de formaciones: Pastizales templados
Herbazal latifoliado inundado edáficos
Herbazal flotante Formacion vegetal (tipo de vegetación).
Herbazal ripario Pastizal hidrófilo con arbustos escuamifolios.

Las comunidades vegetales de México 65


III. ZONAS ARIDAS Y SEMIARIDAS Ve g e tac ión az
tación onal
azonal
Bioma: Matorrales
Ve g e tac ión zzonal
tación onal Serie de formaciones: Matorrales edáficos
Bioma: Matorrales Formaciones vegetales (tipos de vegetación)
Series de formaciones: matorrales xerófilos (in- Matorrales medianos halófilos.
cluye matorrales secundarios sucesionales). Matorrales medianos gipsófilos.
Formaciones vegetales (tipos de vegetación) Matorrales bajos a mediano arenícolas (psamó-
Matorral mediano esclerófilo perennifolio filos)
(Bsk, Cwa) Matorrales medianos hidrohalófilos.
Matorral alto espinoso (BSh, BSk) Matorrales medianos hidrófilos (riparios)
Matorral alto subinerme (BSh, BSk) Bioma: Herbazales
Matorral alto inerme (BSh, BSk Series de formaciones: pastizales edáficos
Matorral alto crasicaule espinoso (BSh, BW) Formaciones vegetales (tipos de vegetación)
Matorral alto rosetófilo espinoso (BSh, BSk, Pastizal cespitoso gipsófilo
BW) Pastizal cespitoso halófilo
Matorral bajo rosetófilo espinoso (BSh, BSk, Pastizal amacollado halófilo
BW) Pastizal amacollado arenícola (psamófilo)
Bioma: Herbazal Bioma: Herbazales
Series de formaciones: pastizales xerófilos (incluye Series de formaciones: herbasales hidrófilos
pastizales secundarios sucesionales). Formaciones vegetales (tipos de vegetación)
Formaciones vegetales (tipos de vegetación) Vegetación hidrófila dulceacuícola
Pastizal cespitoso (BSK, BSK’, Cx’ ) Herbazal inundable angustifolio
Pastizal cespitoso, con arbustos (BSK, Cx’). Herbazal inundable latifoliado
Pastizal amacollado (Cwc). Herbazal flotante
Herbazal ripario
Asociaciones y consociaciones por definir para
cada formacion vegetal reconocida.

Explicación de los símbolos climáticos*

Af. Cálido con lluvias todo el año


Am. Cálido con época seca corta
Aw. Cálido con época seca larga } Lluvias principalmente en verano

Bsh. Seco y cálido o subcálido


BSk. Seco y templado
BSk’. Seco y frío

BW. Muy seco


Cfa. Subcálido con lluvias casi todo el año
Cfb. Templado con lluvias casi todo el año } Lluvias principalmente en verano
Cwa. Subcálido con época seca larga
Cwb. Templado con época seca larga
CwC. Frío subhúmedo
Cs. Templado con lluvias en invierno
Cx’. Templado con lluvias irregulares a lo largo del año
ETH. Muy frío de la parte alta de las montañas muy elevadas
* Los climas templados y fríos de los zona tropical se distinguen de los climas correspondientes de las zonas templadas y
frías por su escassa oscilación térmica anual. Los tipos de vegetación de México según el sistema de Miranda y Hernández
X. (1963).

66 Propuesta de un sistema de clasificación


Consideraciones finales

Ante todos estos problemas, enfoques y perspectivas La propuesta permite que las unidades de clasifica-
en relación con la clasificación de la vegetación, con- ción de la vegetación se puedan representar cartográfi-
sidero que una clasificación basada en rasgos fisonó- camente en diferentes escalas. Las características
micos estructurales y fenológicos proporciona los ele- florísticas se pueden usar para ayudarnos a definir co-
mentos más adecuados para diferenciar y clasificar las munidades vegetales, tanto en escalas mayores, como
comunidades vegetales que pueblan el territorio na- menores. Es de recalcar que no se sigue un sistema je-
cional. Los rasgos ecológicos como características del rárquico basado en la florística, como en la escuela de
suelo, diferencias en sustrato geológico, modificacio- Braun–Blanquet, Rivas-Martínez o Zurich-Montpellier.
nes relacionadas con cambios en el uso del suelo de- La propuesta resalta las diferencias entre vegeta-
bidos a actividades humanas pueden ayudar a definir ción zonal y azonal, y aunque no se tiene una catego-
con más precisión las unidades de vegetación. ría para condiciones intermedias de la expresión de la
A niveles muy locales, la composición florística, es vegetación a lo largo de un gradiente (ecotonos), es-
indudablemente un factor extraordinariamente útil tos pueden clasificarse y denominarse haciendo hin-
para diferenciar las unidades menores de clasificación capié en su condición de ecotonía.
de la vegetación. La insistencia de destacar los conceptos de zonas
La propuesta está básicamente orientada hacia la áridas, semiáridas, tropical y templadas, espero que
vegetación primaria, es decir aquellas comunidades que permitan aclarar la confusión que hasta la fecha se ha
poca o ninguna influencia antropógena han tenido. Sin presentado.
embargo las comunidades vegetales secundarias e in- Hasta donde fue posible, los aspectos nomencla-
ducidas pueden agruparse en el esquema propuesto. turales trataron de ajustarse al sistema de clasificación
Aunque la hipótesis del Continuum, no se descar- de las formaciones vegetales del mundo de la UNESCO
ta totalmente en esta propuesta, si se toman en consi- y en las descripciones de las unidades reconocidas se
deración los cambios en la fisonomía, la estructura y revisaron los nombres de los conjuntos de vegetación
la composición florística de la vegetación azonal y son reconocidos.
objeto de diferenciación y clasificación.
Asimismo, la propuesta se basa en la vegetación
real (existente), pero puede ser usada para la vegeta-
ción potencial.

Las comunidades vegetales de México 67


MT Consideraciones finales
Anexos

CUADRO 1. PROYECTO DE CLASIFICACIÓN DE LAS PRINCIPALES FORMACIONES VEGETALES DE MÉXICO EN EL MARCO DE UNA CLASIFICACIÓN
GENERAL DE LAS FORMACIONES VEGETALES TROPICALES Y SUBTROPICALES

A - FORMACIONES FORESTALES

I. FORMACIONES FORESTALES DE BAJAS Y MEDIANAS


ALTITUDES (HASTA ALREDEDOR DE 1,200 M)

Casos particulares

Bosque denso húmedo perenifolios Bosque sobre lavas (San Martín)


Bosque sobre arenas de Dialium guianense y Terminalia amazonica
Bosque de la vertiente atlántica de las Sierras orientales (Veracruz, Tabasco,
Chiapas)

Bosque denso seco deciduo o semi-deciduo (o Bosque yucateco de Achras zapota sobre calizas (Campeche, Quintana Roo).
subdeciduo)

Bosque denso seco bajo deciduo y matorral deci- Bosque yucateco de llanura sobre calizas (Yucatán)
duos) Matorrales y bosques bajos sobre pendientes de la vertiente pacifica de la
Sierra Madre del Sur y de la Sierra de Chiapas (Oaxaca, Chiapas)
Matorrales y bosques bajos de la depresión de Chiapas)

II. FORMACIONES FORESTALES DE ALTAS ALTITUDES


(ALREDEDOR DE 1 200 A 3 800 M)

Bosque montañoso denso frondoso deciduo o Bosque de liquidambar (vertiente atlántica de las Sierra orientales)
semi - deciduo (Veracruz, Chiapas)

Bosque montañoso denso frondoso perenifolio Bosque de encinos (encinares)


y matorrales perenifolio de las pendientes.

(Continúa)

Las comunidades vegetales de México 69


CUADRO 1. PROYECTO DE CLASIFICACIÓN DE LAS PRINCIPALES FORMACIONES VEGETALES DE MEXICO EN EL MARCO DE UNA CLASIFICACIÓN
GENERAL DE LAS FORMACIONES VEGETALES TROPICALES Y SUBTROPICALES

Bosque montañoso de coniferas Bosque de pinos (pinares), abetos, enebros, etc.

III. FORMACIONES FORESTALES EDÁFICAS

Manglar
Bosque periódicamente inundado
Matorrales periódicamente inundados Matorrales de Haematoxylon campechianun (tintal de Yucatán)

Palmerales pantanoso y palmerales periódica-


mente inundados

Bosques pantanosos
Galerías forestales Galerías de Taxodium mucronatum (Chiapas)

B - FORMACIONES MIXTAS, FORESTALES Y GRAMINEAS (O HERBACEAS, O SUCULENTAS)

I. Bosques claros

II. Sabanas boscosas

Sabanas arbustivas Veracruz, Campeche


Sabanas de arbustos espinosos Llanuras litorales de Chiapas y de Oaxaca.
Depresión intrior de Chiapas.

III. Estepas boscosas


Estepas arbustivas Veracruz, Campeche
Sabana de arbustos espinosos Llanuras litorales de Chiapas y Oaxaca.
Depresión interior de Chiapas.

Estepas arbustivas de suculentos (cactus, agaves) (Oaxaca, Puebla).

C.- FORMACIONES GRAMINEAS, O HERBACEAS O DE VEGETALES ENANOS SEMI-LEÑOSOS

I. Sabanas herbosas (¿Límite de los estados de Tabasco y de Chiapas?).

II. Estepas herbáceas o de suculentos o de vege- Estepas de bromeliáceas (Hechtia) y de agaves (Puebla).
tales enanos semi-leñosos

III. Formaciones edáficas Estepas de Muhlenbergia macroura (Zacatonales).

Praderas pantanosas De Phragnites communis


De Typha angustifolia.
De Heliconia, etc.

Fuente: Aubreville (1962).

70 Anexos
CUADRO 2. TIPOS DE VEGETACIÓN DE ACUERDO CON COTECOCA

1. Selva alta perennifolia 39. Matorral mediano espinoso


2. Selva alta subperennifolia 40. Matorral mediano crasicaulescente espinoso
3. Selva alta caducifolia 41. Matorral bajo esclerófilo
4. Selva mediana perennifolia 42. Matorral bajo subespinoso
5. Selva mediana subperennifolia 43. Matorral bajo espinoso
6. Selva mediana subcaducifolia 44. Matorral bajo crasifolio
7. Selva mediana subcaducifolia espinosa 45. Matorral crasicaule
8. Selva mediana caducifolia 46. Matorral crasicaulescente
9. Selva mediana caducifolia espinosa 47. Matorral arbocrasicaulescente
10. Selva baja perennifolia 48. Matorral arborescente
11. Selva baja subperennifolia 49. Matorral arbofrutescente
12. Selva baja subperennifolia subespeinosa 50. Matorral mediano parvifolio crasicaulescente
13. Selva baja subperennifolia espinosa 51. Matorral crasirosulifolio espinoso
14. Selva baja subcaducifolia 52. Matorral sarcocaulescente
15. Selva baja subcaducifolia subespinosa 53. Matorral sarcocrasicaulescente subinerme
16. Selva baja subcaducifolia espinosa 54. Matorral oliocilindrocaule afilo
17. Selva baja caducifolia
18. Selva baja caducifolia espinosa 55. Vagetación de dunas

19. Bosque caducifolio 56. Pastizal mediano abierto


20. Bosque caducifolio espinoso 57. Pastizal mediano arborescente
21. Bosque esclerófilo perennifolio 58. Pastizal mediano arbofrutescente
22. Bosque esclerófilo subcaducifolio 59. Pastizal amacollado abierto
23. Bosque esclerófilo caducifolio 60. Pastizal amacollado arborescente
24. Bosque esclero-aciculifolio 61. Pastizal amacollado arbofrutescente
25. Bosque aciculi-esclerófilo 62. Pasizal halófito abierto
26. Bosque aciculifolio 63. Pastizal halófito arbofrutescente
27. Bosque aciculi-escuamifolio 64. Pastizal inducido
28. Bosque aciculi-linearifolio
29. Bosque linearifolio 65. Tundra alpina
30. Bosque escuamifolio
66. Vegetación hidrófita
31. Izotal 67. Vegetación halófita

32. Matorral alto esclerófilo 68. Sabana


33. Matorral alto subinerme
34. Matorral alto espinoso 69. Palmar
35. Matorral mediano esclerófilo
36. Matorral mediano parvifolio 70. Manglar
37. Matorral mediano subinerme
38. Matorral mediano subespinoso 71. Mar, laguna, ríos, presas, arroyos

Fuente: COTECOCA (1994).

Las comunidades vegetales de México 71


CUADRO 3. LISTA DE LOS TIPOS MAS IMPORTANTES DE VEGETACIÓN DE MÉXICO Y CLIMAS (SEGÚN KÖPPEN) EN LOS QUE SE ENCUENTRAN

Tipo de vegetación Clima

1. Selva alta perennifolia Af, Am


2. Selva mediana o baja perennifolia Af, Am, Cfa, Cfb
3. Selva alta o mediana subperenifolia Am, Aw
4. Selva alta o mediana subcaducifollia Am, Aw
5. Selva baja subperennifolia Am, Aw
6. Palmares Am, Aw
7. Sabana Am, Aw
8. Manglar Am, Aw, BSh
9. Popal Af, Am, Aw
10. Selva baja caducifolia Aw, Cwa
11. Selva baja espinosa perennifolia Aw, BSH, BW, Cx’
12. Selva baja espinosa caducifolia BSh, BW
13. Matorral espinoso con espinas laterales AW, BSk, Cwa
14. Cardonales, tetecheras, etc. BSh, BW
15. Izotales BSh, Bsk, BW
16. Nopaleras BSk, BSk’
17. Matorral espinoso con espinas terminales BSh, BSk, BW
18. Matorral inerme o subinerme parvifolio BSh, BSk, BW
19. Crasi-rosulifolios espinosos BSh, BSk, BW
20. Tulares, carrizales, etc Af, Am, Aw, Cwa, Cwb
21. Pastizales BSk, BSk’
22. Zacatonales Cwc
23. Agrupaciones e halofitos Am, Aw, BS, BW, Cx’, Cs
24. Chaparral Cs (BSk’, Cwa)
25. Bosque de enebros BSk, BSk’, Cwa, Cwb
26. Pinares Cf, Cwa, Cwb, Cwc
27. Encinares Am, Aw, Cf, Cwa, Cwb
28. Bosque caducifolio Cfb
29. Bosque de abetos u oyameles Cwb
30. Vegetación de dunas costeras Am, Aw, BS, BW, Cx’, Cs
31. Vegetación de desiertos áridos arenosos BW
32. Vegetación de páramos de altura. ETH

72 Anexos
CUADRO 4. TIPOS DE VEGETACIÓN

1. Pradera alpina cespiticaule b) Bosque templado enterifolio


a) Pradera alpina cespiticaule c) Bosque templado subesclerófilo
b) Pradera alpina rosetófila
c) Matorral alpino escuamifolio 7. Bosque tropical perennifolio
a) Bosque tropical perennifolio
2. Bosque alpino aciculifolio b) Bosque tropical subperennifolio
a) Bosque alpino aciculifolio i) Matorral tropical compositifolio
c) Pradera tropical dispersiarbórea
3. Bosque alpino planiaciculifolio d) Bosque tropical esclerófilo
a) Bosque alpino planiaciculifolio e) Bosque tropical flabelifolio
b) Bosque alpino escuamifolio f) Bosque tropical pinnatifolio

4. Bosque templado acicuifolio 8. Bosque subtropical caducifolio


a) Bosque templado microacuifolio a) Bosque subtropical subcaducifolio
b) Bosque templado mesoaciculifolio i) Bosque subtropical pinnatifolio
c) Bosque templado macroaciculifolio ii) Bosque tropical furcroradicular
iii) Matorral subtropical decumbente
5. Bosque templado esclerófilo b) Bosque subtropical caducifolio
a) Bosque templado microesclerófilo
b) Bosque templado mesoesclerófilo 9. Matorral desértico espinoso
c) Bosque templado macroesclerófilo a) Matorral desértico micrófilo
i) Bosque templado dentifolio b) matorral desértico crasicaule
d) Bosque templado escuamifolio c) matorral desértico rosetófilo
e) Matorral templado esclerófilo d) Matorral desértico microcaducifolio
f) Pradera templada cespiticaule e) Pradera desértica cespiticaule
i) Pradera templada microcespiticaule
ii) Pradera templada mesocespiticaule 10. Vegetación acuática
iii) Pradera templada dispersiarbórea a) Bosque ripario pendulifolio
b) Pradera acuática latifoliada
6. Bosque templado caducifolio
a) Bosque templado palmatifolio 11. Pradera marina cespiticaule

Fuente: Quintero (1974).

Las comunidades vegetales de México 73


CUADRO 5. COMPARACIÓN ENTRE LOS TIPOS DE VEGETACIÓN DE ACUERDO A DIFERENTES AUTORES

RZEDOWSKI (1988) MIRANDA Y HERNÁNDEZ X. (1963) RZEDOWSKI (1966) FLORES ET AL. (1971)

Bosque tropical Selva alta perennifolia, selva alta Bosque tropical Selva alta perennifolia, selva
perennifolio o mediana subperennifolia perennifolio mediana subperinnifolia (en
parte)

Bosque tropical Selva alta o mediana subcaduci- Selva mediana subcaducifo-


subcaducifolio folia lia, selva mediana subperen-
nifolia (en parte)

Bosque tropical Selva baja caducifolia Bosque tropical deciduo Selva baja caducifolia
caducifolio (en parte)

Bosque espinoso Selva baja subperennifolia (en Bosque espinoso, mezqui- Selva baja caducifolia (en par-
parte), selva baja espinosa pe- tal extradesértico te), selva baja subperennifo-
rennifolia, selva baja espinosa lia, mezquital (en parte)
caducifolia

Pastizal Pastizalez, zacatonales, vegeta- Zacatal Pastizal, zacatonal, sabana


ción de páramos de altura, sa-
banas

Matorral xerófilo Matorral espinoso con espinas Matorral desértico micró- Mesquital (en parte), chapa-
laterales, cardonales, tetecheras, filo, matorral desértico ro- rral, matorral submontano,
etc., izotales, nopaleras, matorral setófilo, matorral crasicau- matorral crasicaule, matorral
espinoso con espinas terminales, le, matorral submontano, desértico rosetófilo, matorral
matorral inerme parvifolio, ma- encinar arbustivo desértico micrófilo
gueyales, lechuguillales, guapilla-
les, etc; chaparrales, vegetación de
desiertos áridos arenosos

Bosque de Quercus Encinares Encinar y pinar (en partes) Bosque de encino

Bosque de coniferas Pinares, bosque de abetos u oya- Encinar y pinar (en parte) Bosque de pino, bosque
meles. de oyamel

Bosque mesófilo de Selva mediana o baja perenifolia, Bosque decidfuo templado Bosque caducifolio
montaña bosque caducifolio (en parte)
Manglar, popal
Vegetación acuática y Manglar, popal, tulares, carriza-
subacuática les, etc., bosque caducifolio (en
parte)

Fuente: Rzedowski (1988).

74 Anexos
Bibliografía

ALBERT, D. A. 1995. Regional landscape ecosystems of Mi- ——— 1973. The Physiognomic approach. En: R. H.
chigan, Minessota and Wisconsin: a working map and Whittaker (ed.) Handbook of vegetation science. Parte II
classification. U. S. Forest Service General Technical Ordination and classification and classification of com-
Report NC-178. North Central Forest Experimental Sta- munities. W Junk the Hague, Netherlands. Pp. 35–386.
tion, St. Paul, Minessota. ——— 1955. The classification of Tropical American vege-
AUBREVILLE, A. 1965. Principes d’une systematique des for- tation-types. Ecology 36: 89-100.
mations vegetales tropicales. Adansonia 5(2): 153-196. ——— 1944. Climax vegetation in Tropical America. Eco-
——— 1963. Classification des formes biologiques des logy 25(2): 127-158.
plantes vasculaires en milieu Tropical. Adansonia 3(2): BRAVO, H. 1937. Observaciones florísticas y geobotánicas en
221-226. el Valle del Mezquital, Hidalgo. An. Inst. Biol. Mex. VIII.
——— 1962. Temas fitogeográficos: 1. Clasificación fisonó- No. 1. 1-82.
mica y florística de las formaciones vegetales tropica- BRIZUELA, B. F. 1978. Descripción y cartografía de la Vegeta-
les; 2. Clasificación ecológica de las formaciones vege- ción de la Cuenca del río Alfajayuca, Edo. de Hidalgo.
tales tropicales; 3. Clasificación de las principales for- Tesis Esc. Nal. Cienc. Biol. I.P.N. México.
maciones vegetales de México. Ed.. Inst. Mex. Rec. Nat. BURK, PARKER, SIMS Y GONZÁLEZ REBELES 1998. Enfoque meto-
Renov. A. C. México, D. F. 66 p. dológico del GAP Analysis, para el análisis geográfico
——— 1957. Accord a Yangambi sur la nomenclature des de las tierras adyacentes al Sur del Río Bravo en México.
types africains de vegetation. Bois et Forest des Tropi- Inédito.
ques 5:23–27. CLEMENTS, F. E. 1928. Plant succession and indicators. H. W.
AUSTIN, M. P. 1985. Continuum concept, ordination me- Wilson, New York. 453 pp.
thods and niche theory. Annual Review of Ecology and CONTRIBUCIONES AL ESTUDIO ECOLÓGICO DE LAS ZONAS CÁLIDO–
Systematics 16:39-6. HÚMEDAS DE MÉXICO 1964. Comisión de estudios sobre la
AUSTIN, M. P. Y T. M. SMITH 1989. A new model for the con- ecología de Dioscoreas, Inst. Nal. Investig. Forest. Se-
tinuum concept. Vegetatio 83: 35-47. cretaría de Agricultura y Ganadería. 207 pp.
BAILEY, R. G. 1989. Explanatory supplement to the ecore- COTECOCA (Comisión Técnico Consultiva para la definición
gions map of the Continents. Environmental Conserva- de los Coeficientes de Agostadero) 1994. Revegetación
tion 15(4): 307-309. y reforestación de las áreas ganaderas en las zonas ári-
———1976. Ecoregions of the United States (map) U.S. das y semiáridas de México. 48 pp.
Forest, Intermountain Region, Ogden, Utah. Escala COTTAM, G. Y R. P. MCINTOSH 1966. Vegetational continuum.
1:7,500,000. Science 152: 546–547.
B EARD , J. S. 1978. The Physiognomic approach. En: COWARDIN, L. M., V. CARTER, F. C. GOLET Y E. T. LA ROE 1979.
Whittaker R. H. (editor). Classification of plant com- Classification of wetlands and deepwater habitats of the
munities. Junk bv Publishers the Hague, Boston. Pp. United States. U. S. Fish and Wild life Service Washing-
35–60. ton, D. C.

Las comunidades vegetales de México 75


DANSEREAU, P. 1957. Biogeography an ecological perspective. GRISEBACH, A. 1872. La végétation du Globe. 2 vols. París.
The Ronald Press. New York. 394 pP. HEMSLEY, W. 1887. Bosquejo de la exploración botánica de
———1951. Description and a recording of vegetation México. Naturaleza II. 1: 1-15.
upon a structural basis. Ecology 32(2): 172-229. HERRERA, A. 1869. Apuntes para la geografía botánica de
DEL PASO Y TRONCOSO, F. 1883-1884. Estudios sobre la histo- México. Naturaleza 1:81-86.
ria de la medicina en México. An. Mus. Nac. Méx. 3: 137- HIRIART, V. P. Y GONZÁLEZ-MEDRANO, F. 1983. Vegetación y Fi-
235. togeografía de la barranca de Tolantongo, Hidalgo, Méxi-
DÍAZ DEL CASTILLO, B. (original 1568). Historia verdadera de co. An. Inst.Biol. Univ. Nal. Autón. México. Ser. Botánica
la conquista de la Nueva España. Madrid. Varias edicio- (No. Unico): 29–96.
nes. HOLDRIGE, L. R. 1947. Determination of world Plant For-
DICE, I. R. 1943. The Biotic Provinces of North America. Ann mations from simple climatic data. Science 105(2727):
Arbor. Michigan 78 p. map. bibl. 367–368.
DRUDE, C. 1890 Handbuch der pflanzengeographie. Stuttgart. HOWARD, J. A. Y C. W. MITCHELL 1985. Phytogeomorphology.
582 pp. John Wiley and Sons. New York.
ELLENBERG, H. Y D. MUELLER–DOMBOIS 1967. Tentative phy- HUGUET DEL VILLAR, E. 1929. Geobotánica. Ed. Labor, Barce-
siognomic: ecological classification of plant formations of lona.
the Earth. Ber. Geobot. Inst. ETH, Stiftg. Rübel, Zürich, HUMBOLDT, A. VON. 1805-1834. Voyage de Humboldt et Bon-
37: 21–55. Reimpreso en 1969 como: UNESCO report pland. París, 23 vols.
SC/WS/269 in slighted modified form, entitted, “A fra- INEGI. 1991. Datos básicos de la Geografía de México. 142
mework for a classification of world vegetation”. París pp. Cartas de uso de suelo y vegetación. Escala 1:1, 000,
26 p finalized publication 1973: International classifi- 000; 1: 250, 000. Varias fechas.
cation and mapping of vegetation. Ecology and Conser- KIMMINS, J. P. 1997. Forest Ecology: A foundation for sustaina-
vation. Series n° 6, 93 pp. and chart with map simbols. ble management. SDegunda edición. Prentice Hall, New
FAO y UNESCO 1968. Definitions of soil units for the soil map Jersey.
of the World. World soil resources, Office land and water KÖEPPEN, W. 1948. Climatología. Fondo de Cultura Econó-
development. División FAO. Roma. mica. México. 478 pp.
FLORES MATA, JIMENEZ LÓPEZ L., MADRIGAL SÁNCHEZ X., MON- KÜCHLER A. W. 1949. A physiognomy classification of vege-
CAYO RUIZ, F. Y TAKAKI, T. F. 1971. Mapa y descripción de tation. Annals Association of American Geographers 39(3):
los tipos de vegetación de la República Mexicana. SRH. 201–210.
Dirección de Agrología. 59 pp. 1 mapa. ——— 1947. A geographic system of vegetation. Geogra-
FOSBERG, F. R. 1961. A classification of vegetation for general phical Review 37(2): 233–240.
purposes. Trop. Ecol. 2:1 – 28. LANGMAN I. K. 1964. A selected guide to the literature of the
GARCÍA, E. 1973. Modificaciones al sistema de clasificación cli- Flowering Plants of México. University of Pennsylvania.
mática de Köeppen. Inst. de Geografía. Univ. Nal. Aut. LEOPOLD, S. A. 1950. Vegetation zones of Mexico. Ecology 31:
de México. 2ª ed. 146 pp. 507–518.
GOLDAMN, E. Y R. MOORE 1945. The biotic provinces of Méxi- LIEBMANN, F. 1842-1843. Reise i Mejico (also as México)”.
co. Jour. Mamad. 26(4):347-360. Dansk Ugeskr. II, 1:186-188.
GONZÁLEZ MEDRANO, F. 1999. Adaptación del Sistema Nacio- MARTENS, M. Y H. GALEOTTI 1842. Mémoire sur les fougéres
nal de Clasificación de la Vegetación (NVCS; 1993) de du Mexique et considerations sur la géographie de cette
EE.UU. usado en los GAP Analysis. Para la clasificación countrée. (Mém. Acad. Sci. Bruxelles 15:1-99).
de la vegetación de la faja fronteriza del Río Bravo en MATOS, F. Y MONTOYA, J. M. 1968. Resultado del analisis com-
México. Inédito. parativo de tres sistemas fisonómicos, estructurales para
GONZÁLEZ QUINTERO, L. 1968; Tipos de vegetación del Valle del la descripción de la vegetación. Turrialba 18(2): 171–
Mezquital, Hidalgo. Depto. de Prehistoria. Paleoecolo- 178.
gía. INAH. México. 2:1-53. ——— 1967. El sistema Dansereau para la descripción es-
GOODALL, D. W. 1970. Statistical plant ecology. Ann. Rev. Ecol. tructural de la vegetación. Turrialba 17(4): 436–446.
Syst. 1: 99–124. MCINTOSH, R. P. 1967. The continuum concept of vegeta-
GOODALL, D. W. 1953. Objetive methods for the classifica- tion. Botanical Review 33: 130–187.
tion of vegetation. I the use of positive interspecific co- MERRIAM, C. H. 1898. Life zones and crop zones of the United
rrelation. Aust J. Bot. 1: 39–63. States. Bull. Bur. Biol. Surv. U. S. Depart. Agric 10: 1-79.
GOODIA, S. LANDAAE, K. METZLER, K. D. PATTERSON, M. PYNE, M. MIRANDA, F. 1955. Formas de vida vegetales y el problema de
REID Y L. SNEDDON 1988. International Classification of eco- la delimitación de las zonas áridas de México. En: Mesas
logical communities: terrestrial vegetation of the United Sta- Redondas sobre problemas de las zonas áridas de México.
tes. Volumen I The National Vegetation Classification Sys- Inst. Mex. Rec. Nat. Renovables, México. Pp. 85–109.
tem: development, status and applications. The Nature MIRANDA F. G., HERNÁNDEZ-X. 1963. Los tipos de vegetación
Conservancy, Arlington, Virginia. 126 pp. de México y su clasificación. Bol. Soc. Bot. Mex. 29–179.

76 Bibliografía
MONTOYA MAQUIN, J. M. 1966. El acuerdo de Yangambi SANDERS, E. M. 1921. The natural regions of México. Geog.
(1956), como base para una nomenclatura de tipos de Rev. 11: 212-226.
vegetación en el Trópico Americano. Turrialba 16(2): SEEMANN, B. 1852-1857. The botany of the voyage of. H.M.S.
169–180. Herald. Londres. 483. pp.
MONTOYA, J. M. Y MATOS, F. 1967. El sistema Kuchler. Un en- SEGALEN, P. 1964. Suelos de la zona intertropical. Serie Apun-
foque fisonómico estructural para la descripción de la tes, No. 4. Col. Postgr. Chapingo, México.
vegetación. Turrialba 17(2):197 – 207. SHELFORD, V. E. 1931. Some concepts of Bioecology. Ecology
MORAVEC, J. 1992. ¿Is the Zurich–Montpellier approach still 12:455 – 467.
unknown in vegetation science of the English – spea- ——— 1926. Naturalist’s guide to the Americas. Baltimore,
king countries? Journal of Vegetation Science 3: 277 – 278. 761 p.
MOSIÑO, A. P. 1969. Factores determinantes del clima de la SHELFORD, V. E. Y S. OLSON 1935. Sere, climax and influent
República Mexicana. Depto. de Prehistoria. 19. INAH, animals with special reference to the transcontinental
México. coniferous forest of North America. Ecology 16: 375–
MUELLER–DOMBOIS D. Y H. ELLENBERG 1974. Aims and methods 402.
of vegetation ecology. John Wiley and Sons, New York. SHIMWELL, D. W. 1971. The description and classification of
OCHOTERENA, I. 1937. Esquemas biotípicos y Sinecias carac- vegetation. University of Washington Press. Seattle, Was-
terísticas de las regiones geográfico-botánicas de Méxi- hington.
co. An. Inst. Biol.. Mex. 8:463-597. TAMAYO L. J. 1962. Geografía General de México. Tema: Eda-
——— 1918. Las regiones geográfico-botánicas de Méxi- fología. Tomo III. Inst. Mex. Inv. Económicas, Trillas,
co. Bol. Soc. Mex. Geog. Est. V (8):221-231. México. Pp. 7–38.
PEINADO, ALCARAZ FRANCISCO, DELGADILLO JOSÉ Y AGUADO IN- VIVÓ, J. 1943. Los límites bio-geográficos en América y la
MACULADA 1994. Fitogeografía de la península de Baja zona cultural Mesoamericana. Rev. Geogra. 3 (7/9):109-
California, México. Anales Jardín Botánico de Madrid 131.
51(2) 255 – 277. WAGNER, P. L. 1964. Natural Vegetation of Middle Ameri-
QUINTERO, L. 1974. Los tipos de vegetación de México. En: ca”, En: Hanbook of middle American Indians. Univer-
El escenario geográfico. Instituto Nacional de Antropo- sity of Texas Press. Austin. vol. 1 pp. 216–264.
logía e Historia. Pp. 109-218. WALTER, H. 1985. Vegetation of the Earth and ecological sys-
RAMÍREZ, J. 1899. La vegetación de México. México. 271 pp. tems of the geobiosphere. Third edition. Springer – Ver-
RAMOS, A., C. H. Y GONZÁLEZ-MEDRANO 1972. La vegetación lag, New York. USA.
de la zona árida veracruzana. An. Inst. Biol. Mex. Ser. WALTER, H. 1977. Zonas de vegetación y clima. Breve expo-
Bot. 43:77 –79. sición desde el punto de vista causal y global. Ed. Ome-
RIVAS-MARTÍNEZ, S. 1977. Syntaxonomical Synopsis of the ga, S. A. Barcelona, España, 245 p.
potential natural plant communities of north America WHITE, J. Y M. MADANY 1978. Natural areas inventory techni-
I. Itinera Geobot. 10: 5–148. cal report. Volumen I: Survey methods and results. Illi-
RIVAS-MARTÍNEZ, S., DANIEL SÁNCHEZ–MATA Y MANUEL COSTA nois Natural Areas Inventory. Urbana, Illinois.
1999, North American Boreal and Western Temperate WHITMER, R. E. 1978. U.S. Geological survey land–use and
Forest Vegetation. (Syntaxonomical Synopsis of the po- land–cover classification. Journal of Forestry 76: 661–
tential natural plant communities of North America, II) 668.
Itinera Geobotánica 12. WHITTAKER, R. H. (ED.) 1978. Classification of plant commu-
RICHARD, A. Y H. GALEOTTI 1844. Monographie des Orchidées nities. W. Junk The Hague. The Netherlands 408 p.
Mexicaines. Compt. Rend. Acad. Sci. Paris 18: 497-513). ——— 1975. Communities and Ecosystems. Segunda edi-
RICHARDS, P. W., TANSLEY A. G. Y WATT A. S. 1940. The recor- ción. Mac Millan, New York.
ding of structure, life forms and flora of tropical forest ——— 1962. Classification of Natural Communities. Bo-
communities as a basis for their classification. Journal tanical Review 28(1): 1–160.
of Ecology 28: 224–239. ——— 1956. Vegetation of the Great Smoky Mountains.
ROWE, J. S. 1961. The level of integration concept and ecolo- Ecological monographs 26: 1–80.
gy. Ecology 42:420 –427. ——— 1953. A consideration of climax theory: the climax
RZEDOWSKI, J. 1978. Vegetación de México. Limusa, México. as a population and pattern. Ecological monographs 23:
——— 1954. Vegetación del pedregal de San Angel, D. F., 41 – 78.
México. An. Esc. Nal. Cien. Biol. VIII. 1-129. XIMÉNEZ, F. 1888. Quatro libros de la naturaleza y virtudes de
RZEDOWSKI, J. Y F MEDELLÍN LEAL 1958. El límite sur de distri- las plantas que están recevidas en el uso de la medezina en
bución geográfica de Larrea tridentata. Acta Científica Nueva España, México. Escuela de Artes. Editado por
Potosina 2: 133–147. Nicolás León.
SAHAGÚN, B. 1975. Historia General de las cosas de la Nueva
España. México, 1829-1830. 3 vols. Editados por Carlos
María Bustamante.

Las comunidades vegetales de México 77


78 Bibliografía
Las comunidades vegetales de México 79
Las comunidades vegetales de México.
Propuesta para la unificación de la clasificación y
nomenclatura de la vegetación de México
de Francisco González Medrano
se terminó de imprimir en la
Ciudad de México durante
el mes de noviembre
de 2003 en los talleres
gráficos de la empresa
Frega S.A.

Se tiraron 1,000 ejemplares

80 Bibliografía

También podría gustarte