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Abrahan David Gutierrez Alvarez1, Álvaro Andrés Pérez Luna2, Andrés José Quintero Arrieta3,
Delly Carolina Mejía Vega4, Gabriel Omar Ruiz Negrete5, Gabriela Pérez ortiz6, German Eduardo
Tamara Yeneris7, Kelly Ruíz Córdoba8, Yuliana Velásquez De Hoyos9.
RESUMEN
INTRODUCCION
La palabra mangle proviene de los indígenas guaraníes y significa árbol retorcido, estos pueden
vivir en el agua y la tierra y tienen adaptaciones en sus raíces hojas y troncos con las que pueden
crecer en terrenos inestables y sin oxígeno e inundados con aguas de mar. Estos ecosistemas
ofrecen una gran cantidad de servicios, ayudan a formar a suelos, son sitios de crianza, refugio,
anidación y alimentación de muchas especies, enriquecen las aguas costeras, protegen la línea de
costa, sustenta la pesquería y funcionan como pulmones al medio ambiente produciendo oxígeno
y eliminando el CO2, uno de los gases que genera el efecto invernadero y aumenta la temperatura
del planeta.
En Colombia los manglares comprenden una superficie aproximada de 371.081ha de los cuales
88.244ha están el litoral Caribe y 282.835 están en el litoral pacifico. En el Caribe Colombiano
las mayores extensiones de se encuentran en la Ciénaga Grande de Santa Marta (Magdalena),
canal del dique, la bahía de Barbacoas, la desembocadura del rio Sinú (Córdoba) y en el
archipiélago de nuestra Señora del Rosario y San Bernardo (Bolívar). [1]
Los bosques de mangle del departamento de Córdoba son los terceros en extensión para la región
Caribe de Colombia y entienden los sectores de la antigua y nueva desembocadura del río Sinú en
los municipios de San Antero y San Bernardo del Viento. El área del presente en la Bahía de
Cispatá cuenta las siguientes especies que son: Rhizophora Mangle (mangle rojo), Avicennia
germinans (mangle negro), Laguncularia racemosa (mangle blanco), Pelliciera rizophorae
(mangle piñuelo) y Conocarpus erectus (mangle Zaragoza). [2]
AREA DE ESTUDIO
Fig 1: Mapa de la bahía de cispatá y sus zonas limitantes. Fuente: CVS-IVEMAR 2010
MATERIALES Y METODOS
• Hilo plástico
• Cinta métrica
• Lápiz mina negra
• Lapicero negro
• Hojas En Blanco
• Tabla Acrílica
• Guía De Practica
Una vez llegado a las respectivas estaciones se logró realizar un muestreo de los diferentes
espacios; asimismo, mediante observación directa se detectó el número de especies dentro del
perímetro establecido a la hora de ejercer la investigación.
De la experiencia, se pudo denotar un total de154 especies de Mangles, entre ellas se logró
identificar que:
En gran cantidad habían 114 Mangle Rojo (Rhizophora mangle); 20 Mangle Blanco (Laguncularia
racemosa); 15 Mangle piñuelo (Pelliciera rizophorae) y en menor cantidad con 5 Mangle negro
(Avicennia Germinans), mas, sin embargo, no se logró identificar el Mangle Zaragoza o gris
(Conocarpus erectus) con un total de 0.
114
100
80
60
Cantidad
40
20
20
0 5 15
0
Mangle Mangle Mangle Mangle Mangle
Saragoza o Negro Piñuelo Blanco Rojo
Gris
A partir de los conceptos teóricos vistos en la práctica del laboratorio de Botánica, se logró
identificar las características principales de los tipos de mangle que se pueden ubicar en la bahía
de Cispatá, de esta forma se procedió a agruparlos a través de la actividad de terreno anteriormente
expuesta, de esta manera se logró evidenciar que el bosque de manglar ubicado en esta zona del
departamento de Córdoba es un ecosistema técnicamente nuevo, esto se puede afirmar debido a
las siguiente característica:
Cabe resaltar dentro del margen teórico la importancia de los manglares, resaltando lo visto en la
práctica, se sugiere la importancia en el control de daños ambientales de tales magnitudes cómo
inundaciones o alto oleaje, etc. Alejando a la población aledaña de estos fenómenos naturales.
Otro punto importante a través de la discusión de los resultados obtenidos mediante la observación
y mediación del medio en el cual se realizó la práctica fue comprender la forma evolutiva de los
manglares y sus diferentes modificaciones, la capacidad de los seres vivos por adaptarse permite
entender la complejidad de cada sistema, desde las glándulas salinas en las hojas, hasta los
neumatóforos provenientes de las raíces para obtener mayor oxigeno sin dejar de lado
modificaciones en sus raíces y tallos para distintos procesos propios de la actividad energética de
cada planta.
CONCLUSIONES
Lo más interesante de toda esta práctica es comprender cómo hay ecosistemas que se forman
aprovechando las condiciones de muchos lugares y es esto lo que los hace diferentes e interesantes.
Sabemos que no todas las plantas ni mucho menos los animales son capaces de vivir en ciertos
lugares muy salinos, por lo que la adaptación de especies a estos ecosistemas aprovechando el
intercambio entre agua salada y agua dulce los hace valiosos tanto para la botánica, como la
zoología y otras ramas de estudio que buscan interactuar directamente con estas especies para
explicar cómo ha sido su adaptación y de qué manera se pueden extraer beneficios de estos lugares.
La experiencia durante esta práctica nos pareció muy interesante, en ella logramos afianzar
conocimientos y observar qué tan variable son los ecosistemas, cada ecosistema presenta su
particularidad y sus propias características, la invitación después de todo lo que recorrimos es
cuidar todos nuestros entornos, proteger nuestra naturaleza y hacer un perfecto uso porque no
sabemos cuándo vamos a necesitar de ella y eso que hoy en día malgastamos en un futuro nos hará
falta.
AGRADECIMIENTOS
• [1] Mejía Quiñones, L.M., Molina Jiménez, M.P., Sanjuan Muñoz, A., Grijalba Bendeck, M.,
Niño Martínez, L.M. 2014. Bosque de manglar, un ecosistema que debemos cuidar. Universidad
Jorge Tadeo Lozano, Instituto Colombiano de Desarrollo Rural. Cartagena D. T. 27p.
• [2] Corporación Autónoma Regional de Los Valles del Sinú y del San Jorge – CVS e Instituto de
Investigaciones Marinas y Costeras - INVEMAR. 2010. Plan integral de manejo del Distrito de
Manejo Integrado (DMI) bahía de Cispatá - La Balsa - Tinajones y sectores aledaños del delta
estuarino del río Sinú, departamento de Córdoba. Editores: Rojas, G. X y P. Sierra-Correa. Serie
de Publicaciones Especiales No. 18 de INVEMAR. Santa Marta. 141 p.
• [3] Arias, Diaz, Newmark, Garay, Gonzalez, & Solano. (s. f.). Formulación Del Plan De Manejo
Integrado De La Unidad Ambiental Costera, Estuarina Del Rio Sinú Y Golfo Del Morrosquillo,
Caribe Colombiano.