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Uno de los grandes problemas que afrontan la gran mayoría de los agricultores de nuestro país,
es la baja fertilidad de los suelos y por consiguiente, los bajos rendimientos de los cultivos.
Estos bajos niveles de fertilidad en gran medida son resultado de las malas prácticas de manejo
que los agricultores aplican al suelo, como la quema y el sobre pastoreo, principalmente
cuando se siembra en terrenos inclinados, que es donde se produce el mayor lavado o pérdida
de suelo y de nutrientes, bajando así la fertilidad y la capacidad productiva del mismo. Para
mantener fértil y productivo el suelo, es necesario aplicar prácticas de manejo y de
conservación, que además ayuden a mantener la humedad por más tiempo.
Con las técnicas de conservación de suelos se reduce o elimina el arrastre y pérdida del mismo
por acción de la lluvia y el viento, se mantiene o se aumenta su fertilidad y con esto, se
mejoran los rendimientos de los cultivos.
Existen muchas técnicas o prácticas de conservación de suelos que son sencillas, de relativo
bajo costo, de fácil aplicación y de aceptación por los agricultores; entre ellas están:
Cuando se aplican estas prácticas en terrenos inclinados o de laderas es necesario hacer uso
del agronivel o nivel "A", con el cual se trazan las curvas a nivel o a desnivel. Estas curvas sirven
de referencia para realizar otras prácticas de conservación.
MARCO TEORICO
Para detener la erosión causada por las correntadas, necesitamos construir unas obras de
conservación de suelo. No se preocupe que para eso, no se necesite ser ingeniero, ni tener
equipos complicados. Existe un equipo sencillo llamado aparato “A”, por su forma parecida a la
A mayúscula que van a poder construir con herramientas y materiales sencillos. Por muy
sencillo que sea, este aparatito no deja de ser un instrumento de medición, por lo cual al
fabricar y usarlo, hay que respetar ciertas medidas y tener cuidado. También, cada vez que lo
van a volver a utilizar, tienen que chequear si esta todavía ajustado, o sea, que su plomada
marca bien el nivel.
EQUIPOS Y MATERIALES
1 martillo
1 machete
1 cinta métrica
2 palos de 2.10 metros de largo
1 palo de 1.5 metros de largo.
2 metros de pita
2 estacas
3 clavos de 3 pulgadas
1 piedra que pese más menos una libra
1 nivel de gota pequeño
PROCEDIMIENTO
a. El primer paso consiste en cortar o serruchar a la misma medida los 2 palos largos que
van a ser las patas de nuestro aparato “A”. Se acostumbra que su largo sea de 2.10
metros. Después, se colocan las patas una encima de la otra y se clavan exactamente a
los dos metros, es decir que nos van a sobrar 10 centímetros, después del clavo.
b. Marcar el lugar donde irá el travesaño. Para esto se amarra la cuerda al clavo y con ésta
extendida se hace una marca a igual distancia en cada regla.
f. Amarre la plomada (hecha con la botella o la piedra) en la cabeza del clavo de tal
manera que quede debajo del travesaño.
Para comprobar si realmente el nivel “A” queda bien calibrado y listo para trazar curvas a nivel,
coloque el aparato sobre dos estacas, enterrando la estaca que está más alta hasta que la
cabuya roce la marca central. Después, se cambia la posición de las patas, nuevamente la
cabuya debe coincidir con la marca central.
http://www.fhia.org.hn/dowloads/guia_conservacion_de_suelos.pdf
http://aospcafe.mx/wp-content/uploads/2016/12/IMG_0912.jpg