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TRABAJO DE DIALECTOLOGÍA.

FILOLOGÍA HISPÁNICA.

TRABAJO DE
DIALECTOLOGÍA.
1º CUATRIMESTRE.

EL HABLA DE MACAEL (ALMERÍA)


MARÍA DEL CARMEN RUIZ MONTALVO
25/02/2013

MARÍA DEL CARMEN RUIZ MONTALVO. Página 1


TRABAJO DE DIALECTOLOGÍA.

Tabla de contenido
1. MACAEL. ................................................................................................................................ 4
SITUACIÓN COMARCA DEL ALMANZORA .................................................................................. 5
2. ANDALUZ. .............................................................................................................................. 6
2.1 SEVILLA Y EL SESEO-CECEO ................................................................................................. 7
2.2. LA PÉRDIDA DE LA S IMPLOSIVA Y FINAL ..................................................................... 8
2.3. OTROS FENÓMENOS FONÉTICOS .................................................................................. 8
2.4. MORFOLOGÍA ................................................................................................................ 9
2.5. LÉXICO ......................................................................................................................... 10
3. EL MURCIANO..................................................................................................................... 11
3.1. LA VEGA DEL RÍO SEGURA, CON SU DIVISIÓN EN ALTA, MEDIA Y BAJA.................... 11
3.2. LA COSTA ..................................................................................................................... 11
3.3. LA COMARCA DEL ALTIPLANO .................................................................................... 11
3.4. LAS TIERRAS DEL ANTIGUO MARQUESADO DE VILLENA .......................................... 11
3.5. ZONA DEL NOROESTE ................................................................................................. 11
3.6. VALLE DEL GUADALENTÍN .......................................................................................... 12
3.6. SUR DE LA PROVINCIA DE ALBACETE (COMARCA DE HELLÍN) ................................... 12
3.8. RASGOS COMUNES ..................................................................................................... 12
3.8.1. Vocalismo ............................................................................................................ 12
3.8.2. Consonantismo.................................................................................................... 12
3.9. LÉXICO ......................................................................................................................... 12
4. DATOS PERSONALES DEL INFORMANTE. ............................................................................ 13
5. FRAGMENTO. ...................................................................................................................... 13
6. COMENTARIO. ..................................................................................................................... 15
7. COMENTARIO FONOLÓGICO. .............................................................................................. 17
A. ANÁLISIS VOCÁLICO......................................................................................................... 17
a. DIPTONGOS. ................................................................................................................ 17
b. Alargamiento vocal...................................................................................................... 17
B. Análisis consonántico ...................................................................................................... 18
a. Silbantes. ..................................................................................................................... 18
b. Laterales. ..................................................................................................................... 18
c. Intervocálica │d│. ........................................................................................................ 18
d. Relajación de ciertas consonantes. ............................................................................. 18
8. COMENTARIO MORFOSINTÁCTICO. .................................................................................... 18

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No encontramos abundantes rasgos morfológicos que difieran del español, casi todos son
rasgos fonéticos. ......................................................................................................................... 18
9. LÉXICO. ................................................................................................................................ 19
10. COMENTARIO ACENTUAL. ............................................................................................... 19
11. ADJUNCIÓN DE DOCUMENTOS SOBRE LAS DISTINTAS TEORÍAS DEL DIALECTO DEL
VALLE DEL ALMANZORA. ............................................................................................................. 20
12. CONCLUSIÓN. .................................................................................................................. 21
13. BIBLIOGRAFÍA. ................................................................................................................. 22

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1. MACAEL.

Los pueblos que forman parte de la llamada Comarca del Mármol, se caracterizan por
su enclave en la Sierra de los Filabres, un relieve que propicia la aparición de paisajes
montañosos y agrestes, salpicados de espacios de huerta y en donde las canteras de este
preciado material de construcción y decoración adquieren todo su protagonismo.

La localidad de Macael se halla indisolublemente unida al mármol, que la ha hecho


prosperar económicamente. Más que de una forma de vida se podría hablar de una seña
de identidad de los macaelenses. No en vano, se trata del municipio de Almería con
mayor densidad industrial, ya que produce más del 80 por ciento de todo el mármol
español. Los romanos ya lo usaron para la construcción de sus sarcófagos y en los ss.

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XIII y XIV fue esta piedra la que se utilizó para la construcción de la monumental
Alhambra de Granada.

Su variedad cromática y su alta calidad, reconocida en todo el mundo, hicieron que los
grandes arquitectos de todos los tiempos lo demandaran para sus obras. Se encuentra
presente en construcciones de la talla de El Monasterio de El Escorial, la Mezquita de
Córdoba, el Palacio de Medina Azahara o el Palacio Real. Las canteras son de
propiedad pública, abonándose un canon muy reducido por la extracción del mármol.

La población de Laroya, que se extiende a lo largo de una ladera, también debe su


desarrollo al mármol. En esta localidad, el Domigo de Pascua se celebra una de las
tradiciones almerienses más antiguas: “las Cuartetas”. El ‘cuartetero’ se encarga de
recitar las cuartetas compuestas por los vecinos y que narran anécdotas de todo tipo
referidas a la gente casada.

Y pasamos a otra localidad muy interesante. Sus ‘Piedras Labrás’ la han hecho
internacionalmente conocida. Estamos hablando de Chercos, un pequeño pueblo de los
Filabres donde se encuentran yacimientos que datan del II milenio a.C. Uno de los más
famosos es la ‘Piedra de los Moros’, con grabados rupestres que representan escenas de
la vida cotidiana. El lugar se debió usar como altar para el culto al aire libre.

Cóbdar es un bello pueblo blanco de calles casi paralelas que forman un recortado
abanico y que ve cómo sus vegas, ricas en cultivos, se riegan con el agua de cinco
fuentes que manan del cerro marmóreo de Los Calares. Por su parte, el acueducto
romano de Albánchez, junto con los antiguos molinos harineros, son visitas obligadas.

Para cerrar el recorrido a los pueblos del mármol no podemos dejar de hablar de Líjar,
una villa que declaró la guerra a Francia en 1883 ante los insultos recibidos por el rey
Alfonso XII en su visita al país galo. Un siglo tardaron las partes en reconciliarse.
Destacan los petroglifos de la ‘Piedra de la Herradura’.

SITUACIÓN COMARCA DEL ALMANZORA.

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2. ANDALUZ.
El estudio de las hablas andaluzas ha estado tradicionalmente contaminado por tópicos
regionales. Es cierto que Andalucía carece de una total uniformidad lingüística, sin embargo no
se puede dudar de que el andaluz es un dialecto, ya que su caracterización lingüística contiene
una fuerte diferenciación con respecto al castellano.

En Andalucía además se ha verificado un doble proceso al que tampoco son ajenas Canarias e
Hispanoamérica. Se trata, por una parte, de la separación de la norma común que ha sufrido el
conjunto de las hablas regionales, hecho que afecta a todos los hablantes. Y de otra, las clases
más instruidas participan de rasgos profundamente dialectales, lo que es inconcebible en
otras regiones de intensa vida dialectal.

En el caso de Sevilla, esto se cumple del mismo modo, pero su importancia es mucho mayor,
porque Sevilla fue la norma que se imitó cuando empezó la gran expansión del castellano.

Los investigadores han venido señalando desde hace tiempo tres características generales de
las hablas andaluzas.

• Un ritmo entonativo más rápido y variado, frente al del castellano, que resulta
algo más monocorde.

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• Una fuerza espiratoria al articular los sonidos que presenta una distribución
diferente, de forma que ciertos sonidos se realizan de forma más relajada y otros
de forma más tensa.
• Un conjunto de rasgos de pronunciación - compartidos, no lo olvidemos, con
otras zonas- que se dan en Andalucía con mayor densidad, algunos de los cuales
alcanzan una gran concentración y altura social.

2.1 SEVILLA Y EL SESEO-CECEO

La documentación antigua sobre el ceceo y el seseo ha sembrado muchas confusiones


con respecto a estos dos fenómenos. Hoy parece demostrado que cuando antiguamente se
hablaba de ceceo en Sevilla, en realidad se estaba nombrando lo que hoy se conoce como
seseo.

El sistema medieval castellano, con sus dos pares de sibilantes (s fricativa sonora - ss sorda y z
africada sonora - ç sorda), estaba caracterizado por el carácter apical de las primeras y
el predorsal de las segundas. Al perderse la oclusión de ž y ŝ surgió una oposición mínima entre
articulaciones apicales y predorsales que era difícil mantener, por la proximidad tanto
articulatoria como de timbre. El castellano adelantó hasta θ las z y s predorsales,
distinguiéndolas así de las z, s apicales, mientras que el andaluz las atrajo al punto de
articulación de las predorsales, neutralizándolas.

En oposición a este timbre seseante, está el ciceante o ceceante. En este caso los sonidos se
igualan no se igualan en s sino en z.

No todos los andaluces sesean; se hace en algunas áreas como Sevilla capital, parte de
Córdoba, Huelva y Málaga, mientras que en algunas otras zonas, como la provincia de Sevilla,
lo común es el ceceo.

El seseo se considera un rasgo culto y prestigiado, mientras que el ceceo lo evitan las personas
instruidas incluso en aquellas zonas donde es patrimonial.

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2.2. LA PÉRDIDA DE LA S IMPLOSIVA Y FINAL


La -s final absoluta se ha debilitado en muchas lenguas, llegando incluso a desaparecer. Las
hablas meridionales de España presentan un estado de cosas que va desde la aspiración de la s
hasta su total pérdida; no es raro, incluso, que ambos grados se den en la misma localidad, con
variaciones diastáticas.

La -s final seguida de palabras que empiezan por p, t, k tiene fundamentalmente tres


tratamientos: aspiración, reduplicación y pérdida. La aspiración es sorda; la reduplicación
produce como una geminación del sonido consonántico (conservando o no restos de la
aspirada); la pérdida es su total eliminación.

El resto del tratamiento fonético de la -s final depende de la consonante sonora siguiente, y de


los distintos grados de inflexión que pueda producir la aspiración sobre la sonora.

En algunos casos, la pérdida de -s final ha determinado la paridad de singular y plural. Sí hay


una clara discriminación en los casos en que el sustantivo empieza por vocal, producido por
una especie de “liaison”, mientras que hay identidad fonética entre singular y plural en
los sustantivos empezados por consonante.

En Andalucía occidental, cuando la aspiración desaparece, al no existir la abertura vocálica se


produce igualación singular-plural. En Andalucía oriental, las categorías gramaticales singular y
plural se diferencian, respectivamente, por el cierre o abertura de la vocal final, en grados
mucho más extremos que dicho cierre o abertura tienen en español.

También en Andalucía occidental, el cierre o abertura de la vocal final aumentado, produce


una correlación de cerrazón o abertura en todas las vocales de la palabra.

Las hablas meridionales de la península pierden, en general, todas las consonantes finales, por
lo que en muchos casos se ven en la necesidad de evitar la homonimia que concierta
frecuencia se produce.

La -n es la única que subsiste en algunas regiones, y en el resto su pérdida deja una resonancia
nasal. En otras zonas se da un grado más adelantado de esta pérdida, con la desnasalización.

En la declinación verbal, en el oriente en Andalucía se da una perfecta adecuación de timbres


vocálicos para distinguir cada una de las personas, mientras que en Andalucía occidental, para
resolver las homonimias se recurre a los pronombres personales, usados como una especie de
prefijos.

2.3. OTROS FENÓMENOS FONÉTICOS


• La terminación -al da como resultado e, lo que se ha equiparado con la solución -as >
e, aunque las motivaciones son totalmente distintas.
• La distinción entre ll y yeísmo conserva unas pocas salpicaduras en el oriente de Jaén,
Granada y Almería.
• Hay tres tipos de s: la castellana, la coronal plana y la predorsal. La s coronal se usa en
zonas de distinción y de seseo, mientras que la predorsal predomina en zonas en que
el seseo alterna con el ceceo.
• Es muy frecuente una ch fricativa, junto con una gran variedad de ch africada.
• En todo el dominio del andaluz se dan diferentes tipos de aspiración.

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• La neutralización de l/r es muy común, aunque cuando se da al final de palabra tiene


un ámbito más restringido.

III. Rasgos no
I. Rasgos más difundidos en caracterizadores (ampliamente
II. Rasgos poco difundidos:
toda Andalucía difundidos en el español
general)

1. Las S andaluzas, seseo, ceceo, 5. Confusión -R/-L implosivas 8. Yeísmo (igualación LL/Y)
distinción: (arcarde, comel) (callado = cayado)
(solisi tar/ zolizitar/ solicitar) 6. La CH aflojada (osho) 9. Pérdida de la -D-, sobre todo
2. Pérdida o aspiración de la -S 7. Aspiración de la H- inicial la de -ado, -ido (cansao, partío)
final (jumo, jierro) 10. Caída de consonantes finales
(do coche/doh cocheh) (comé, ospitá, vírge)
3.Vocales abiertas (trę(s), do(s))
4. Jota aspirada (bajar =
bahá(r))

2.4. MORFOLOGÍA
• Sustitución, en Andalucía occidental, de ‘vosotros’ por ‘ustedes’, lo que provoca un
cierto caos en el uso de formas verbales y pronominales.
• Diversas traslaciones acentuales.
• Persistencia de arcaísmos del tipo ‘vide‘ o ‘truje‘.
• Vulgarismos del tipo ‘andé‘ por ‘anduve‘.

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2.5. LÉXICO
En cuanto al vocabulario, Andalucía es una región de enorme complejidad. Conserva palabras
muy viejas, términos traídos por los reconquistadores, mozarabismos y arabismos, etc.

Ejemplos de palabras antiguas son ‘alhucema‘ por ‘espliego‘, o ‘matalahuga‘ (o ‘matalauva‘)


por ‘anís‘. Muchos dialectalismos árabes están relacionados con el prefijo izn-, como
‘Aznalfarache‘.

El léxico tampoco es uniforme en la región. Existen dos grandes áreas, occidental y oriental,
que pueden dividirse en los siguientes grupos:

• En Andalucía occidental se realizan términos leoneses y portugueses, que pueden


llegar hasta las cercanías de Sevilla.
• Algunos lexicanismos propios de la provincia de Sevilla pueden irradiar hacia Huelva o
Córdoba o Cádiz.
• La costa de Cádiz y el occidente de Málaga forman otra zona común en cuanto al
léxico.
• El Norte de Córdoba también posee un léxico característico.
• Otra zona léxica sería el centro de Andalucía: norte de Málaga, este de Sevilla, sur de
Córdoba, suroeste de Jaén.
• Es característico del Reino de Granada un léxico proveniente de la repoblación que
produjo la sublevación de los moriscos.
• Málaga es un territorio de fragmentación léxica.
• El oriente de la región pertenece al dominio murciano (‘perfolla‘ "hojas de maíz") y
tiene algunos aragonesismos (‘panizo‘ "maíz”, ‘tarquín‘ "cieno").

En general, el vocabulario es mucho más permanente que la fonética; el carácter innovador de


las formas andaluzas se refiere mucho más a ésta que a aquél, que es mucho más conservador.

Plano del Valle del Almanzora

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3. EL MURCIANO
Desde la perspectiva de la dialectología contemporánea, el murciano es un “dialecto de
transición”, lo cual es válido tanto para sus orígenes como para lo que en la actualidad queda
de auténtico. Hoy en día parece más exacto definirlo como español hablado en Murcia que
como dialecto murciano, y por supuesto separarlo de su caricatura burlesca, conocida como
"panocho".

El murciano es el resultado de la mezcla de elementos castellanos, catalanes y aragoneses,


sobre una base latina meridional, fuertemente modificada por el árabe y el mozárabe. Esto le
da carácter de punto de encuentro entre distintas tendencias, a veces muy dispares.

Resultado de todo ello es una fuerte comarcalización interna, según la distinta intensidad de
cada una de las influencias. Así pueden distinguirse siete subzonas dialectales, con algunas
características propias de cada una de ellas.

3.1. LA VEGA DEL RÍO SEGURA, CON SU DIVISIÓN EN ALTA, MEDIA


Y BAJA
• Inestabilidad en las líquidas en posición implosiva.
• Algunas aspiraciones de /f-/.
• Seseo en la Vega Baja, de origen valenciano.
• Doble sistema vocálico de /e/, /a/ y /o/ en la Vega Media.

3.2. LA COSTA
Su rasgo fonético más característico es la influencia andaluza, perceptible en el seseo. Pero en
esta zona confluyen el seseo andaluz y el valenciano, en un mínimo espacio geográfico, de
donde procede la disparidad de opiniones vertidas sobre el habla de Cartagena.

3.3. LA COMARCA DEL ALTIPLANO


Contiene una pequeña franja oriental de habla valenciana modernamente importada, y es el
límite septentrional de las hablas murcianas. Sus condiciones son distintas a las de las
restantes comarcas, incluso en el aspecto léxico.

• Pérdida de la -s/ en posición final.

3.4. LAS TIERRAS DEL ANTIGUO MARQUESADO DE VILLENA


Es un enclave castellano en zona política valenciana.

• Murciano seseante muy parecido al de Orihuela.


• Aspiración de la /x/ castellana.

3.5. ZONA DEL NOROESTE


Mezcla de murcianismos con rasgos castellanos y mozárabes.

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• Habla similar a las de la sierra de Alcaraz.


• Es la comarca en la que menos se pierde la /s/ implosiva.
• Algunos aragonesismos.

3.6. VALLE DEL GUADALENTÍN


• Tiene una fuerte influencia andaluza, aunque el intercambio de rasgos
lingüísticos fonéticos es mutuo.
• Yeísmo.
• Pérdida de /s/ implosiva.
• Aspiraciones de /h/ y /x/.

3.6. SUR DE LA PROVINCIA DE ALBACETE (COMARCA DE HELLÍN)


• Habla muy centro peninsular.

3.8. RASGOS COMUNES

3.8.1. Vocalismo

• Variaciones compartidas con todas las hablas meridionales


• Baja consideración sociolingüística de quienes usan estas variaciones.
• Presencia de vulgarismos muy extendidos por todo el mundo hispánico.

3.8.2. Consonantismo

• Tienen el mismo inventario de fonemas que el español meridional.


• Un rasgo de interés es la posible existencia antigua de una pronunciación bilabial de la
/f/.
• La vinculación fonética de las hablas murcianas con las andaluzas es evidente en tres
puntos:

I. Grado cero de /s/ implosiva.


II. Trueque de /r/ - /l/ en la misma posición.
III. Relajación de sonoras.

3.9. LÉXICO
El léxico propiamente murciano está condicionado por el fin de la vida tradicional, ya que el
vocabulario tradicional exclusivo de las hablas murcianas está muy relacionado con actividades
y objetos que se pierden, como los relativos a la seda, la barraca, la palmera datilera, el riego,
etc. Aún se encuentran ejemplos vivos de las hablas murcianas en los antedichos.

Los arabismos son específicos, en su mayor parte, del mundo de la agricultura. Aparecen
frecuentes catalanismos castellanizados (pésol). Pero la influencia del dialecto aragonés es la
más importante, tras de la castellana, como se aprecian en el sufijo diminutivo -iquio.

La identificación de lo que fue el dialecto murciano, hoy hablas murcianas, con el


llamado “panocho”, ha sido un mal tópico normalmente aceptado.

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4. DATOS PERSONALES DEL INFORMANTE.


EDAD: 41 AÑOS.
ZONA DE RESIDENCIA. MACAEL, ALMERÍA.
SEXO. FEMENINO.
ESTUDIOS REALIZADOS. FP II. ADMINISTRACIÓN Y EMPRESAS.
TRABAJO O PROFESIÓN. ADMINISTRATIVA.

5. FRAGMENTO.
Entrevistador: Cuente algún hecho gracioso o grave que le haya sucedido.

Bueno, gracioso la semana pasada que fui a comprarle a mi hijo el disfraz de carnaval y
entonces, pues, llega y ve unos pompones así de muchos colores. Eso si me lo compro, me lo
compro. Cuando estábamos nosotros, mi hija y yo esperando en la caja, en la cola de la caja pa
pagar y asoma él con sus pompones, y entonces yo veo, se pueden decir palabrotas ¿no? Y yo
le digo, ¿Tú has visto que es esto? Y miro al crio así sorprendida, y dice ah, una picha, era un
pompón de esos de despedía de soltera toda la gente de la fila de la caja riyendose, el hombre
no el chino que estaba cobrando es que no atinaba a los números de lo que se reía, pero es
que nosotras, mi hija decía qué vergüenza mamá, y el crio ahí mirándome diciendo que hago
yo con esto ahora Dios o yo?, lleva eso ahora mismo donde estaba. No podíamos reírnos más,
a mi es que me dolía hasta el estómago de tanto reírme, en el coche, porque allí vamos que
vergüenza, con la picha y los pompones que panzón de reir, él lo cuenta eso como vamos, a
quien tiene confianza se lo cuenta él, y se mea de risa, empieza a contar cuando se lo
encuentra y ve una cosa si con muchos colores uh que chulo esto y cuando llego dice mi madre
esto que es y miro así de una manera, pero si es una picha… uy pues mira, eso es pa verlo
como lo cuenta, te meas de risa con él.

Entrevistador: Cuénteme una situación que haya estado en peligro.

Pos los otros días que salíamos del cementerio parece mentira que con el sitio que era mi
hermanos y mi madre y un coche se despistó y se vino hacia nosotros que estábamos haciendo
el estop la verdad que un susto uh vamos pero destos, el hombre ya esquivó el coche, el
nuestro como pudo y gracias que allí había mucho sitio por donde esquivarlo porque si es un
sitio… no pasa, que gracias como te lo quieras poner.

Entrevistador: ¿Qué opina de la situación política actual?

Qué da asco, porque es que estamos en manos de gente que lo único que piensa es en ellos
que no… en robar... es que no hay nadie que no sea de una ideología de otra que… asco, es la
palabra.

Entrevistador: ¿Qué piensa de la situación económica española?

Pos que está fatal, que fatal más fatal, ya en un grado no se que grado le pondremos, pero que
realmente nos ha llevao el acto de la política, que no han sabio gestionarla bien, que hay
muchos ladrones por tos sitios, y han cultivao llevarnos a donde nos han llevao.

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Entrevistador: ¿Qué solución pondrías?

La primera es, que todos los cargos políticos, todos, sean por el amor al arte, o sea quitarlos
todos, nada de sueldos, nada de nada que si que lo han hecho ahora en los ayuntamientos y to
eso, pero es lo más bajo que hay en esa escalazón, pero y los altos políticos que, qué cobran
veinte mil euros al me, tú crees que van a trabajar, yo no trabajaría vamos si hasta los tendría
fijos, cuatro años por lo menos de legislatura, y luego salen con su paga vitalicia, y con un
montón de derechos, no sé yo, pero lo que se yo, no me relación con ninguno de ellos, yo creo
que la economía está mal, pero parte o gran parte la lleva to eso, to eso, tos esos abusos
durante estos años.

Entrevistador: ¿Crees que la gente de Macael es supersticiosa?

Yo creo que no.

Entrevistador: ¿Y en su familia hay alguna superstición?

Eh, no, en mi familia no, bueno mi madre es un poco superticiosa, supersticiosa, no me sale ni
la palabra, a ve, desto que hoys que si un gato negro, que si la tijera, que si esto lo otro, yo que
se, yo paso de esas cosas, yo pienso que eso también e como comerte un poco el coco.

Entrevistador: ¿Si?

Si porque por ejemplo, los otros días una amiga, me contó lo de tener una aloe vera en la
puerta a la mano izquierda que si se ponía amarilla, es porque la persona que ha entrao venia
de forma negativamente hacia tu casa, venía a traerte malas influencias. Ya estás como
coaccioná, en fin, esta gente, esta mujer a venío a mi casa con mala fe, entonces, tu ya tienes,
si tu no supieras eso, si eres superticiosa, si no eres superticiosa me da lo mismo que se ponga
amarillo, pienso, lo he regao mucho, o no tiene agua o yo que sé, pero ya si tu ya sabes eso ya
eres superticiosa ya está pensando, que e esto, y esta persona, y que le he hecho yo a esta
persona y que no le he hecho, me supongo que la otra superticiones las que son ahora mismo
porque habrá millones, yo que se, por ejemplo, lo der color amarillo, e uno de los colores que
mas me gustan. Bueno mi madre algunas veces cuando me ve y sobre todo en el verano que
llevo jerseys de tono amarillo o algo de eso le da gafe, dice si es que no hay otro color en el
mundo.

Pues yo si que soy un poco supersticiosa, un poco si, porque es que luego te sugestionas, a la
superstición.

Si eso es, es que la superstición, que esa es la manera en que tú te lo tomes, te lo cojas. Lo del
aloe vera…

Sí, yo en mi casa lo del romero en la parte izquierda de la puerta, lo de echa sal cuando te vas a
una casa nueva…

Si hay tormenta y hay muchos rayos y to eso coge un puñao de sal y echarlo a la calle, porque
así. Pero hay que ve, yo to eso lo veo una gran tontería, yo que se, tu crees que un rayo no te
va a caer porque eches un puñao de sa a la puerta.

Pues a lo mejor no, nunca se sabe…

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Bueno, yo me voy a hacer una igeniera de rayos, me voy a hacer.

Entrevistador: ¿Qué lengua hablas?

Po el castellano y más.

Entrevistador: ¿Consideras que en Andalucía se habla bien o mal?

Ma, según que parte de Andalucía, pero mal, como norma general, mal.

Entrevistador: ¿Quiénes hablan mejor en Andalucía de forma más concreta?

Bueno yo creo que en Almería, lo de Almería, bueno Almería según que zona, se habla mejor.
Yo considero que los que hablan mejor, son algunas zonas concretas de Almería. Por ejemplo
esta zona donde nosotros vivimos, se habla dentro de lo que cabe, se habla medio bien, o sea
lo considero mejor que por ejemplo Sevilla, Huerva, Cádiz…

Entrevistador: ¿Cambiarías tu forma de hablar si salieses de Andalucía?

No, si es verdad que me contagiaría, de donde voy, porque tengo esa, porque me pasa eso,
que me voy a Galicia y vengo con acento gallego. Pero no, no la cambiaría.

6. COMENTARIO.
Entrevistador: Cuente algún hecho gracioso o grave que le haya sucedido.

Bueno↑│ gracioso↑│ la semana pasa↓│ que fui a comprarle↑│ a mi hijo el disfraz


de carnaval │y entonces↑│ pues↑│ llega y ve unos pompones así de muchos colores
y to eso↓│ si me lo compro↑│ me lo compro↑││ Cuando↑│ estábamos nosotros│
mi hija y yo│ esperando pa↑│ en la caja↑│en la cola de la caja pa pagar y asoma él
5 con sus pompones│ y entonces yo veo↑│miro│ se pueden decir palabrotas │no↑│ Y
yo le digo↑│ ¿Tú has visto que es esto↑││ Y miro │al crio│ así sorprendía↑││ y
dice│ ah↑, una picha↓│ era un pompón de esos de despedía de soltera││peazo
picha││mira│ toda la gente de la fila de la caja riyendose│ el hombre │no↓│ el chino
que estaba cobrando│ es que no atinaba a los números de lo que se reía││ pero es
10 que nosotras│ mi hija decía qué vergüenza mamá↑││ y el crio ahí │mirándome
│diciendo que hago yo con esto ahora↓│ Dios│ lleva eso ahora mismo donde
estaba↑││ No podíamos reírnos más│ a mi es que me dolía hasta el estómago de
tanto reírme↓││ en el coche│ porque allí↑│ vamos que vergüenza↓│mira│ qué
vergüenza│ con la picha ││y los pompones││ que panzón de reír↓│bueno│ eso él│ lo
15 cuenta eso││ como vamos↑│ a quien tiene confianza ↑se lo cuenta él │que se mea
de risa││ empieza a contar│ cuando se lo encuentra│ y ve una cosa si con muchos
colores│ uh↑│ que chulo esto↑│ y dice y│ cuando llego dice mi madre│ esto que
es↑│ y miro↓│ así de una manera│ pero si es una picha…│ uy pues mira│ eso es
pa↑│ verlo como lo cuenta│ te meas de risa con él│││

Entrevistador: Cuénteme una situación que haya estado en peligro.

20 Bueno│↓ pos los otros días│ que salíamos del cementerio↓││ parece mentira que
con el sitio que era│ con mi hermanos y mi madre↓││ y│ un coche se despistó│ y se
vino hacia nosotros que estábamos haciendo el estop│ la verdad↑│ que un susto│

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uhc vamos pero destos│ el hombre ya esquivó el coche│ el nuestro como pudo y
gracias que allí│ había mucho sitio por donde esquivarlo porque si es un sitio…│ no
25 nos da un buen porrazo│ nos da un porrazo│ porrazo o golpe│ como te lo quieras
poner││

Entrevistador: ¿Qué opina de la situación política actual?

Qué da asco↓│, porque es que↓│ estamos↓│ en↓│ manos de gente↓│ que lo


único que↓│ piensa es en ellos↓│ que no↓││ en robar↓│ que es que da lo mismo
que no sea de una ideología de otra que asco↓││ es la palabra↓││

Entrevistador: ¿¿Qué piensa de la situación económica española?

30 Pos que está fatal↓│ que fatal│ más fatal↓│ ya en un grado no se que grado le
pondremos│ pero│ que realmente│ nos ha llevao el asco de la política│ que no han
sabio gestionarla bien│ que hay muchos ladrones por tos sitios│ y han motivao
llevarnos a donde nos han llevao↓││

Entrevistador: ¿Qué solución pondrías?

35 La primera es↑│ que todos los cargos políticos│ todos↓│ que sean por el amor al
arte│ osea quitarlos todos│ nada de sueldos│ nada de nada│ que si↑│ que lo han
hecho ahora en los ayuntamientos y to eso│ pero es lo más bajo que hay en esa
escalazón│ pero↑│ y los altos políticos que↑│ qué cobran veinte mil euros al me↓│
tu crees que van a trabajar│ yo no trabajaría↓│ vamos si hasta los tendría fijos↓│
40 cuatro años por lo menos de legislatura│ y luego salen con su paga vitalicia↓│ y con
un montón de derechos↓│ no se yo↓│ pero lo que se yo│ no me relación con
ninguno de ellos↓│ según lo que se oye en la tele↓││ yo creo que la economía está
mal↓│ pero↓│ parte o gran parte la lleva to eso↓│ to eso↓│ tos esos abusos
durante estos años↓││

Entrevistador: ¿Crees que la gente de Macael es supersticiosa?

45 Yo creo que no↓││

Entrevistador: ¿Y en su familia hay alguna superstición?

Eh↑│ no↓││ en mi familia no↓│ bueno mi madre es un poco superticiosa│


supersticiosa│ no me sale ni la palabra│ a ve↑││ desto que hoys que si un gato
negro│ que si la tijera│ que si esto lo otro│ yo que se│ yo paso de esas cosas↓││ yo
pienso que eso también e como comerte un poco el coco↓││

Entrevistador: ¿Si?

50 Si porque por ejemplo↓│ los otros días una amiga│ una amiga mía↑│ me contó lo de
tener una aloe vera en la puerta a la mano izquierda│ que si se ponía amarilla│ es
porque la persona que ha entrao venia de forma negativamente hacia tu casa│ venía
a traerte malas influencias↓││ Ya estás como coaccioná↓│ es decir↑│ esta gente↑│
esta mujer│ este hombre↓│ a venío a mi casa con mala fe↓│ entonces│ tu ya tienes│
55 si tu no supieras eso↓│ si eres superticiosa│ si no eres superticiosa↓│ me da lo
mismo que se ponga amarillo│ pienso↓│ lo he regao mucho↓│ o no↓│ tiene agua o

MARÍA DEL CARMEN RUIZ MONTALVO. Página 16


TRABAJO DE DIALECTOLOGÍA.

yo que sé│ pero ya↑│ si tu ya sabes eso↓│ ya eres superticiosa│ ya está pensando│
que e esto↑│ y esta persona↑│ y que le he hecho yo a esta persona↑│y que no le
he hecho↑│, me supongo que la otra superticiones │las que son ahora mismo│
60 porque habrá millones↓│ yo que se↓ por ejemplo↓│ lo der color amarillo↓│ e uno
de los colores que mas me gusta mi↑││ Bueno mi madre↓│ algunas veces │cuando
me ve│ y sobre todo en el verano que llevo jerseys de tono amarillo│ o algo de eso le
da gafe↓│ dice si es que no hay otro color en el mundo↓││
Pues yo si↑│ que soy un poco supersticiosa↓││ un poso si│, porque es que luego te
65 sugestionas│ a la superstición↓││
Si eso es↓│ es que la superstición│ que esa es la manera en que tú te lo tomes│ lo
acojas│ Lo del aloe vera…
Sí↑│ yo en mi casa│ lo del romero en la parte izquierda de la puerta│ lo de echa sal
cuando te vas a una casa nueva││
70 Si hay tormenta│ y hay muchos rayos│ y to eso│ coge un puñao de sal y echarlo a la
calle││ porque así│ Pero hay que ve│ yo to eso lo veo una gran tontería↓│, yo que
sé│ tú crees que un rayo no te va a caer porque eches un puñao de sa a la puerta↑││
Pues a lo mejor no↓│ nunca se sabe↑││
Bueno↑│ yo me voy a hacer una igeniera de rayos↓│ me voy a hacer↓││
75 ¿Qué lengua hablas?
Po el castellano y más↓││

Entrevistador: ¿Consideras que en Andalucía se habla bien o mal?

Ma↓│ según que parte de Andalucía ↓│ pero mal↓│como norma general│ mal↓││

Entrevistador: ¿Quiénes hablan mejor en Andalucía de forma más concreta?

Bueno yo creo que││ en Almería↓││ lo de Almería↑│ bueno Almería según que


zona↓│ se habla mejor↓│ Yo considero que los que↑│ los que mejores hablan son│
80 a zonas concretas de Almería↓││ Por ejemplo ↓│esta zona↓│ donde nosotros
vivimos↓│ se habla dentro de lo que cabe↓│ se habla medio bien↓│ osea↑│ lo
considero mejor que↑│ por ejemplo↓│ Sevilla↓│ Huerva↓│ Cádiz↓││

Entrevistador: ¿Cambiarías tu forma de hablar si salieses de Andalucía?

No↓│ si es verdad que me contagiaría↑│ de donde voy↓│ porque tengo eso porque
me pasa eso↓│ que me voy a Galicia↑│ y vengo con acento gallego↓││ Pero no↓│
85 no la cambiaría↓││

7. COMENTARIO FONOLÓGICO.

A. ANÁLISIS VOCÁLICO.

a. DIPTONGOS.

- Apocope del diptongo │ue│ en │o│, ejemplo, ‘pues‘,‘pos‘. Línea 2.


- Palatalización del diptongo │ie│ en posición intervocálica, │y│. Por ejemplo,
‘riyendose‘, en lugar de ‘riéndose‘. Línea 8.

b. Alargamiento vocal.

MARÍA DEL CARMEN RUIZ MONTALVO. Página 17


TRABAJO DE DIALECTOLOGÍA.

- Alargamiento de la vocal final resultante de la eliminación d │d│ intervocálica en


posición final, el acento se pasa a la última sílaba. ‘Pasada‘, │pasá│ ‘regado‘, │regao│.
- Alargamiento y aspiración de la vocal final resultante de la aspiración de │s│ tanto en
posición intervocálica como en posición final. │má│ resultante de más. ‘Esto‘, │eto│.

B. Análisis consonántico.

a. Silbantes.

- Perdida de │s│ final e intervocálica. Este fenómeno no se produce cuando │s│


antecede a una oclusiva, │k│, por ejemplo, ‘asco‘, se pronuncia de forma regular. En
todos los otros casos tiene a desaparecer produciendo una aspiración, pérdida y
alargamiento de vocal.

b. Laterales.

- Realización de │r│ en lugar de │l│ en posición implosiva, ‘Huelva‘ │huerva│.


- Aspiración de │r│ final.
- Omisión de la │l│ en posición final, sa por sal, línea 74.
- Paso de la │l│ final a │r│. Der por del, línea 62.

c. Intervocálica │d│.

- Pérdida de la d en posición intervocálica incluyendo el alargamiento de vocal: ’venío’


por ‘venido’, junto con la pronunciación de una sola vocal cuando estas son iguales:
‘tos’ por ‘todos’.

d. Relajación de ciertas consonantes.

- Relajación de la consonante ch, se aleja de su articulación normal, “chino”, lína8.

8. COMENTARIO MORFOSINTÁCTICO.
No encontramos abundantes rasgos morfológicos que difieran del español, casi todos son
rasgos fonéticos.

- Abundante uso de los conectores que, pues, cuando, o sea, etc.


- Verbo. Vulgarismo en la forma verbal ‘riyéndose’, línea 8.
- Abundante uso de interjecciones como marca expresiva: ‘¡Uh!’, ‘¡Ah!’.
- Uso de ‘to eso’ con valor de ‘etcétera’.
- Empleo frecuente del aumentativo –azo.
- Frecuente reducción silábica o apócope de los conectores y preposiciones, ‘po’ por
‘por’, ‘pa’ de ‘para’, línea 4. ‘Pos’ por ‘pues’, línea 2.
-

MARÍA DEL CARMEN RUIZ MONTALVO. Página 18


TRABAJO DE DIALECTOLOGÍA.

9. LÉXICO.
- Uso de varios vulgarismos como ‘escalazón’ en lugar de ‘escalafón’, línea 38,
‘coaccioná’, línea 55. ‘Peazo’. Línea 8.
- Designación de una persona oriental mediante la palabra ‘chino’, línea 9.
- ‘Crío’, niño pequeño.
- Uso del verbo ‘atinar’. Línea 9.

10. COMENTARIO ACENTUAL.

- Texto rápido, apenas se realizan pausas largas.


- Predominio con entonación ascendente, │↑│.
- Cambio frecuente del acento a la última sílaba cuando se produce el fenómeno de
pérdida de la │d│ intervocálica, reducción de sílaba.

MARÍA DEL CARMEN RUIZ MONTALVO. Página 19


TRABAJO DE DIALECTOLOGÍA.

11. ADJUNCIÓN DE DOCUMENTOS SOBRE LAS DISTINTAS


TEORÍAS DEL DIALECTO DEL VALLE DEL ALMANZORA.
Ver los PDFs anexados al presente trabajo.

MARÍA DEL CARMEN RUIZ MONTALVO. Página 20


AXARQUIA, n° 4, Verano 1999

SECCIÓN DE DIALECTOLOGÍA

EL HABLA DE LA AXARQUÍA ALMERIENSE, PUENTE


ENTRE EL ANDALUZ Y EL MURCIANO

PEDRO PERALES LARIOS

Doctor en Filología Románica

H
asta hace pocos años podía afirmarse, algunas referencias generales al habla de la Cuenca
como ya hizo el periodista y crítico de del Almanzora como frontera entre los dos citados
arte Antonio M. Campoy, de la tierra que dialectos, o como área comprendida dentro del
ahora empieza a conocerse como Axarquía dominio lingüístico del murciano con algunas
almeriense, que es, tal vez, la geografía menos cono- influencias andaluzas, sin apenas profundizar más en
cida de España, palabras que se hacían extensivas a el tema.
todos los campos de la cultura. Esta pertenencia al dominio lingüístico del mur-
Afortunadamente esta situación ha cambiado ciano ha sido ratificada por filólogos de prestigio,
gracias, entre otras cosas, a la fuerza con que entre los que podríamos mencionar a Alvar, quien,
irrumpió en la década de los ochenta un movimiento haciendo un comentario de la lengua utilizada en su
preocupado por los valores regionales. Son muchas obra por el poeta Sotomayor (principal exponente
las muestras de las que podría servirme para probar literario del habla de esta comarca), afirma:
esta preocupación. La revista Axarquía, a quien hay El escritor de Cuevas del Almanzora refleja el habla de
que agradecer ser en la actualidad el principal su pueblo, andaluza sólo por la s coronal que allí se usa,
vehículo difusor de nuestra cultura, me brinda ahora pero murciana por todo: por su léxico, por los rasgos
la oportunidad de dar a conocer a los naturales de fonéticos, por la geografía y por la historia 3.
esta comarca una de esas muestras, unas breves Todos los que de alguna forma le han dedicado
reflexiones sobre nuestra peculiar modalidad tiempo al estudio del murciano o de sus fronteras
lingüística. Con ellas pretendo hacer una exposición lingüísticas, excepto A. Zamora Vicente, coinciden
de las principales causas que dieron lugar a que en con Alvar en considerar la Cuenca del río Al-
los términos municipales de algunos pueblos de manzora dentro del área lingüística del murciano.
nuestra comarca -Mojácar, Garrucha, Turre, Antas, Pero una consideración de tal índole, dada la fle-
Vera, Cuevas del Almanzora y Pulpí- se utilice una xibilidad de las fronteras lingüísticas, requiere bas-
modalidad lingüística de tránsito entre el andaluz y tantes matizaciones.
el murciano, más cercana a este último y con algunas
El mismo Alvar admite que esta zona es
características propias.
fonéticamente andaluza al considerar que el carácter
Hasta 1987 no existía un estudio lingüístico murciano de los textos de Sotomayor es indisputable para
detallado -no lo conozco yo, al menos- de esta un lector, pero no para un oidor. También García
comarca 1, debido probablemente a la consideración, Soriano afirma que las divisorias dialectales no pueden
hasta no hace muchos años, de los dialectos como señalarse por líneas matemáticaS, sino por extensas
cosa espuria, bárbara y superflua, según palabras de zonas. Los contornos de un dialecto se van esfumando
Justo García Soriano 2. Tan sólo en estudios poco a poco en una ancha franja indecisa, que es como
referidos al andaluz o al murciano aparecen
su última irradiación o su penumbra. Por ello habla de
cruces y mutuas influencias con el dialecto andaluz.
A esta dirección es a la que deben apuntar los
estudios sobre el habla de los antes mencionados
pueblos de la Axarquía almeriense, ya que se trata
de una modalidad en la que predominan, evidente-
1
En el momento actual sólo podemos hablar de un estudio
lingüístico detallado y amplio, pero está referido al habla de Cuevas
del Almanzora. Lo realizó Joan Pierson basándose en la obra
literaria del poeta Sotomayor (El habla de la Almería oriental en la
obra del poeta Sotomayor. Instituto de Estudios Almerienses, Almería,
1987). A diferencia de la mayoría de los filólogos, Pierson considera
que el habla objeto de estudio está más próxima al andaluz que al
murciano.
2
GARCÍA SORIANO, Justo: Vocabulario del dialecto murciano. 3
ALVAR, Manuel: Poesía española dialectal. Ediciones Alcalá,
Editora Regional de Murcia, 1980.
Madrid, 1965.
EL HABLA DE LA AXARQUÍA ALMERIENSE, PUENTE ENTRE EL ANDALUZ Y EL MURCIANO

mente, las características del murciano, pero, al ciudad que había constituido de forma destacada una
mismo tiempo, bajo una poderosa influencia del gran ayuda para la reconquista de esta parte del
andaluz y, además, con algunos rasgos peculiares. Reino de Granada: Rendíanse unas en pos de otras al
Todo ello viene a configurarla, más que como ex- afortunado monarca (Fernando V) Vera, Vélez Blanco,
clusivamente murciana con influencias andaluzas, Vélez el Rubio, Mujícar, Cuevas, (...) contribuyendo con
como un habla de tránsito, más próxima, eso sí, al todo esfuerzo Murcia a la empresa de la conquista de
murciano que al andaluz. Granada, para cuyas fronteras (...) marchaba no escaso
Es de interés, antes de escribir algunos de los número de valencianos y alicantinos 4.
rasgos que considero más significativos del habla de A pesar de que después de concluir la conquista
la Axarquía almeriense, hacer una breve detención del Valle del Almanzora (1488-89, tres años antes de
en dos aspectos que me parecen básicos para una la toma de Granada), los vecinos pudieron seguir
más clara exposición. habitando el valle merced a la generosidad de las
Está referido el primero a la tradicional identi- capitulaciones, lo cierto es que de éstas se desprende
ficación que se ha venido haciendo entre murciano y la necesidad de una emigración, facilitada en todo
panocho, claramente diferenciados por Justo Garda momento y que ya se había iniciado cuando dio
Soriano cuando dice: Los escritores civitatenses (...) comienzo la guerra de Granada debido al peligro que
remedaron las costumbres y el habla rústicas, para la población musulmana suponía la llegada de
exagerándolas y viendo sólo en ellas la parte grotesca y los cristianos, quienes eran alentados a instalarse en
ridícula. Así se creó el tipo del panocho, que es un el valle, sobre todo hacia las zonas orientales, que por
huertano grotesco, si no payaso, y el panochismo, estar más próximas a la costa eran consideradas como
lenguaje convencional en el que se desfiguran a veces las puntos estratégicos de defensa. Así, en Vera, que reunía
auténticas palabras dialectales, y hasta se las inventa, en su término setecientos vecinos en él año 1490, había
con el inocente propósito de hacer gracia. ya asentados cien vecinos cristianos en 1493, y en
Mojácar otros sesenta vecinos cristianos 5.
Pero nada más acertado para deslindar murciano
de panocho que las palabras del poeta regional Aunque la repoblación estaba incentivada 6, lo
Vicente Medina: En mi tierra se cultiva un lenguaje cierto es que apenas se llevó a cabo por estos años, y
llamado panocho, lenguaje de soflamas carnavalescas, cuando se hizo fue de forma lenta y esporádica,
que imitando el habla regional, la ridiculizaba con debido fundamentalmente a la ingratitud del terreno
7
acopio de deformaciones y disparates grotescos; me . Se hizo necesario esperar hasta después de la
indignaba por eso este panocho. Tal indignación expulsión definitiva de los mariscos en 1570-71, tras
engendró mi ansia de reivindicar el lenguaje de mi la sublevación, para que se llevara a cabo un trasvase
tierra, que no era, ni es, otra cosa que un castellano casi total de la población, del que se derivaron
claro, flexible, musical, matizado con algunos múltiples consecuencias. Entre ellas hay que citar la
provincialismos de carácter árabe, catalán y aragonés. llegada de un gran contingente de hablantes
En toda la región murciana y en parte de la de Albacete, procedentes del área geográfica dominada por el
Alicante y Almería, tierras linderas, se habla, tanto por dialecto murciano.
la gente fina como por la gente del pueblo, tal como yo Considera Ferre Bueno que antes de la expulsión
hablo en mis «Aires Murcianos». de los mariscos habitaban en el Valle del Almanzora
Como es fácil suponer, estas palabras de Vicente unas dieciséis mil personas aproximadamente,
Medina han servido de apoyo y son una prueba más
para quienes consideran el habla de la cuenca del
Almanzora y, por tanto, de los pueblos antes 4
AMADOR DE LOS RÍOS, Rodrigo: Murcia y Albacete.
mencionados de la Axarquía almeriense, incluida Ediciones El Albir, Barcelona, 1981.
dentro del dialecto de Murcia. 5
FERRE BUENO, Emilio: El valle del Almanzora. Estudio
El segundo aspecto, y parte esencial del presente geográfico. Excma. Diputación Provincial, Almería, 1979.
6
trabajo, en que considero de interés que nos La corriente repobladora provocada por la Corona fue ayudada por
medio de franquezas que favorecían a los nuevos pobladores cristianos, con
detengamos, lo constituye el análisis de las princi- la intención de que los lugares estratégicos fueran repoblados por cristiano
pales causas que han motivado que el habla objeto viejos, como sucedió con las franquezas concedidas a Vera y Mojácar en
de estudio haya de considerarse más próxima al 1494, que favorecían a los nuevos pobladores. E. FERRE BUENO: Op.
cit..
murciano que al andaluz. 7
A pesar de todas las facilidades, las características de la zona
Históricamente esta tierra constituyó, dentro de hacían que la repoblación no fuera muy tentadora, por lo que, a
un área geográfica más amplia, una comarca del demás de hacerse lentamente, muchos repobladores permanecieron
Reino de Granada limítrofe con el de Murcia, poco tiempo en su nueva tierra.
PEDRO PERALES LARIOS

entre las que había que contar algunos


cristianos viejos. Con el traslado masivo de
población que se produjo en todo el Reino de
Granada tras la sublevación de 1570-71, de los
dieciséis mil habitantes antes citados, trece mil
fueron expulsados del Valle, lo cual supuso un
vacío que se intentó compensar con cristianos
viejos.
Estos datos, que a primera vista no parecen
guardar estrecha relación con el hecho que nos
ocupa, son de suma importancia al permitirnos
comprobar, como afirma Ferre Bueno, que los
repobladores cristianos que vinieron al Valle
del Almanzora (...) procedían
fundamentalmente de las provincias vecinas de
Murcia y Albacete en un porcentaje que suma-
ba el 45,5 por ciento del total de nuevos pobla-
dores.
A esto hay que añadir el hecho de que esta
comarca ofrece mejores vías de acceso y
comunicación con la provincia de Murcia que
con el resto de Andalucía, por lo que no sería
de extrañar que los porcentajes que transcribo a
continuación, que reflejan una mayoría de
repobladores murcianos, pudieran ser algo
flexibles en beneficio de estos últimos y en
perjuicio de los de procedencia andaluza.
En tantos por ciento, la totalidad de
repobladores que nos da Ferre Bueno es la
siguiente:

Reino de Murcia ................... 45,5%


Reino de Valencia ................... 8,8%
Casti11a la Nueva ................. 25,9% 2. Matrimonio cuevano de la década de 1870, fotografiado por
José Rodrigo, en la que el varón porta la faja y la mujer el
Andalucía …………………… 13,5% delantal, elementos tradicionales de la indumentaria del
Almanzora en la poesía de Sotomayor
Otras regiones ......................... 6,3% (Archivo Municipal de Lorca).

Como es obvio, estas cifras son un apoyo más, levantinas y murciana que a la misma Andalucía,
entre otros que más adelante podremos ir viendo, incluso más que a la de Almería del sur, con lo cual
para quienes sostengan que los pueblos de la cuenca la relación con hablantes de habla murciana se hace
baja del río Almanzora pertenecen al dominio aún más estrecha.
lingüístico del murciano. También es interesante destacar que si bien la
Ciñéndonos estrictamente a los pueblos de la actividad minera alcanzó su época de mayor es-
Axarquía almeriense mencionados, también sirve de plendor en la segunda mitad del siglo XIX, venía ya
apoyo a esta tesis la identidad climática existente desarrollándose desde la época prerromana. Esta
entre la parte oriental y meridional de la provincia de actividad fue otro de los factores que influyeron a
Almería con la parte de la provincia de Murcia que que esta comarca tendiera más hacia la provincia de
linda con ella. Si a la circunstancia de que el clima Murcia debido a las continuas migraciones de
es factor decisivo en la lengua le sumamos que es trabajadores entre las explotaciones mineras de
factor condicionante de la agricultura, es fácil Cuevas del Almanzora y Cartagena-La Unión.
adivinar que esta comarca, en el sector agrario, está A todos los factores anteriormente citados que
más ligada a las provincias demuestran una mayor afinidad de la cuenca del
EL HABLA DE LA AXARQUÍA ALMERIENSE, PUEN'TE ENTRE EL ANDALUZ Y EL MURCIANO

Bajo Almanzora con Murcia que con Anda-


lucía hay que sumar la peculiar disposición de
los habitantes, perfectamente reflejada en las
siguientes palabras del historiador E. García
Asensio referidas a Huércal-Overa, trascritas
por Ferre Bueno y que pueden hacerse
extensivas a casi toda la comarca: Y es tan
fundado lo que decimos que nuestro contacto y
comunicación con Lorca y Murcia es frecuente,
expansivo y fácil, que lo efectuamos siempre con
gusto y placer, no sólo por las razones consignadas,
sino además por su gran rapidez y comodidad (...)
mientras que la ida a Almería es puramente de
carácter necesario y obligatorio.
Detengámonos ahora en una descripción,
no exhaustiva ni detallada, de algunos de los
más importantes rasgos que configuran el ha-
bla de la cuenca del Bajo al-manzora, todos
ellos constatados personalmente.
En el plano fonético debemos resaltar que
la riqueza de timbre vocálico del andaluz
oriental se ve incrementada en esta comarca
desde ocho vocales -número en que coinciden
los filólogos para el andaluz oriental- hasta
diez. Ello es debido a que la pérdida de la -s
final de palabra hace que no sólo se abra la
última vocal que la precede, sino que esta
abertura afecta, aunque en distinto grado, al
resto de las vocales de la palabra, incluso a la -
i y a la -u.
Por otra parte, en una misma vocal pueden
percibirse diferentes grados de abertura según la
consonante que la vaya trabando. De esta forma, por
ejemplo, la é tónica trabada por -s presenta un timbre
3. Carretero cuevano. Hacia 1875.
más abierto que si fuera trabada por cualquier otra (Foto de José Rodrigo. Archivo Municipal de Lorca).
consonante que en esta zona no se pronuncie; así, un
hablante del Bajo Almanzora distingue perfec-
tamente tres timbres diferentes de é en las palabras alargamiento de las vocales tónicas. Tal fenómeno es
tres, pared Y café. rápidamente percibido por todas aquellas personas
Como puede verse, la riqueza del timbre vocálico que no están familiarizadas con esta modalidad
del andaluz la encontramos en el habla de la cuenca lingüística, a quienes les es difícil evitar, en algún
baja del Almanzora con características peculiares, al momento, la imitación de este peculiar «tonillo».
tiempo que esta comarca sirve de puente al citado Tampoco puede afirmarse, como algunos filó-
rasgo fonológico del andaluz para introducido en la logos han hecho refiriéndose al habla de toda la
región de habla murciana, en la que paulatinamente Andalucía Oriental, que en la cuenca del Bajo Al-
va desapareciendo según nos vamos adentrando. manzora en la actualidad se pronuncien respecti-
Es importante destacar un fenómeno caracte- vamente como -u y como -i las vocales finales -o y -
rístico del habla de esta parte de la Axarquía alme- e. Es probable que este fenómeno se produjera, si
riense que los filólogos no constatan como algo bien no en todos los ámbitos sociales, a finales del
propio del murciano ni del andaluz. Se trata de una siglo pasado y principios del actual, pues leyendo la
especial entonación consistente en el excesivo poesía de Sotomayor comprobamos que lo refleja en
algunas -aunque escasas- ocasiones, pero sólo
cuando hablan los campesinos, y no siempre.
En lo concerniente al sistema consonántico, al
igual que en el murciano y el habla de gran parte de fenómeno muy difícil de percibir por el oído del
la provincia de Almería -a excepción de algunos natural de esta región, pero objeto de broma por
pequeños núcleos que demuestran su anterior quienes son conscientes del mismo (tengo mucho
existencia-, la aspiración de la h- procedente de la f- samigos, por tengo muchos amigos).
inicial latina no se produce. En el plano morfológico es frecuente encontrar,
A pesar de la afirmación de Manuel Alvar de que al igual que en el andaluz y el murciano, cambios de
el habla de Cuevas del Almanzora -lo que podemos género o vacilaciones, pudiendo hallar utilizados
hacer extensivo a los términos municipales de los como masculinos sustantivos femeninos y viceversa:
otros pueblos mencionados- es sólo andaluza por la s el chinche por la chinche, la tracoma por el tracoma, o
coronal, lo cierto es que la mayoría de los filólogos las vacilaciones el mar/la mar, el calor/el calor, el sudor/la
consultados coinciden en que la parte de la provincia sudor, etc.
de Almería próxima a la provincia de Murcia es zona Indudablemente el aspecto donde el murcianismo
de s apical cóncava, si bien algunos especifican el es más evidente en el habla de la Axarquía
grado de concavidad al no ser ésta uniforme. almeriense y que nos obliga a afiliada dentro del
Considero que se trata de s apical, por lo que no nos dialecto de la región de Murcia es el léxico, en donde
sirve este rasgo para definir como andaluza el habla podemos encontrar vocablos procedentes, además
objeto de estudio; no obstante, posee algunas otras del murciano, del aragonés y del catalán, llegados a
características que sí comparte con el andaluz, pero nuestra modalidad lingüística, en unos casos, por
que también se encuentran en el murciano, como medio de los repobladores de origen aragonés y
son, por ejemplo, el yeísmo (en Sotomayor catalán, y, en otros, a través del murciano, que,
encontramos algún caso de rima consonante entre y y previamente, los había adoptado.
ll), la confusión de r/l implosivas (sordao por soldado, En este sentido, puede apreciarse también cómo
alredeol por alrededor...), pérdida de consonantes el habla del Bajo Almanzora, además de poseer
(duando por dudando, «y m'ha hecho qu'el panizo/ lo rasgos léxicos procedentes del andaluz y del
eposite en la central») e, incluso, de sílabas completas murciano, más de este último, posee vocablos
(ca, por casa y por cada, y pa por para...). considerados propios. Ello fue lo que movió al poeta
El rasgo que se considera más importante del Sotomayor a incluir en su tercer libro de poemas
consonantismo andaluz y que también se encuentra (Alma Campesina, 1930) la siguiente relación de voces
en parte del territorio murciano -la aspiración de la -s que él consideraba autóctonas de esta comarca:
final- adquiere en esta zona un tratamiento muy
peculiar que, a mi juicio, merecería un estudio
Anda, denda: por desde.
especial, pues no siempre se aspira.
Atrojes: por trojes.
Cuando esta -s final se pronuncia, la abertura que
en los casos de aspiración se advierte en las vocales Azofre, zofre: por azufre.
sigue realizándose como si en realidad esta -s se Bordoño: caño grueso de agua u otro líquido.
hubiera aspirado. Por otra parte, cuando se trata de Ca: por cada y por casa.
final absoluta, su aspiración, en caso de que se Cieca: por acequia.
efectúe, es diferente según el sexo, de modo que es
más frecuente su pronunciación por parte de la mujer Ciquear: acción de apalear la mazorca del maíz para
que del hombre y, según la clase social y cultural, es separar el grano del husillo.
a veces considerada como índice de afectación en el Climen: por temperatura.
hombre y, aunque raramente, también de Corvilla: por hoz.
afeminamiento.
Cudio: por cuido.
El hecho de que la abertura en las vocales siga
Cutio, estar de cutio: por estar de asiento en alguna
produciéndose incluso cuando no se aspira la -s final
es probablemente debido a que su pronunciación sólo parte.
se realiza cuando la palabra de que forma parte no es Cutiperio: por gravamen (sobre todo de tránsito).
final absoluta y va seguida de otra palabra que Chamá: por enfermedad larga con fiebre.
empieza por vocal o h- muda. En este caso no es raro
Chambao: por sombraje.
encontrar la -s final pronunciada, pero no como final
de la palabra a la que pertenece, sino como inicial de Chapar: por chafar.
la palabra siguiente, Chiclear: cantar con voz aguda.
Chiclo, chizclo: voz fuerte atiplada.
EL HABLA DE LA AXARQUÍA ALMERIENSE, PUENTE ENTRE EL ANDALUZ Y EL MURCIANO

Dasta: por hasta. siguiente forma: Al inspirado poeta andaluz José M.


Álvarez de Sotomayor, a quien debe no poco este libro.
Denda, anda: por desde.
Afectuosamente. A. A. V.
Dino, dar dino: por dar gusto, dar placer.
Todo ello nos hace pensar que el hecho de que estas
Ensilarse: por hablar demasiado. También por voces sean recogidas por Alcalá Venceslada no da carta
encanarse. de naturaleza andaluza al habla de nuestra Axarquía,
Eslapizarse: por escurrirse, huirse. sino que más bien sirven para demostrar que el andaluz
se nutre de voces de muy distinta procedencia
Estelaje: por enseres de labranza o de casa.
geográfica, siendo una de ellas la de la comarca
Fraile: prominencia que forma el aire en las andaluza lindante con la provincia de Murcia.
corrientes del río. Si tenemos en cuenta, además, que Justo García
Fuera: por hubiera. Se emplean indistintamente. Soriano no se sirve, al menos no lo manifiesta, de la
Manque: por aunque. obra de Sotomayor a la hora de elaborar su Vocabulario
del dialecto murciano y que son sólo siete las voces que
Mu: por muy.
no aparecen en la relación de treinta y tres que ofrece el
Pos: por pues. poeta en su libro Alma campesina, comprobamos que las
Rescullar, resfalar: por resbalar. coincidencias se producen en un porcentaje muy
Robina: por ruina. elevado, sumando así un argumento más para nuestra
Ruina: planta trepadora muy feraz. tesis de que, en el plano léxico, estamos más cerca del
murciano que del andaluz.
Vide, vido: por vi, vio.
Una vez expuestas a grandes rasgos las principales
Yeta: Yema de la semilla germinada que sale a flor causas que han originado una determinada modalidad
de tierra. de habla en varios pueblos de la Axarquía almeriense, y
Todas estas voces, excepto mu y pos, aparecen descritos también unos pocos de los principales
incluidas en Vocabulario andaluz, de Antonio Alcalá fenómenos lingüísticos que en ella se producen,
Venceslada. En cambio, no sucede lo mismo con podemos volver a repetir como conclusión que las
Vocabulario del dialecto murciano, de Justo García fronteras lingüísticas son poco rígidas, por lo que
Soriano, quien no recoge nueve (ciquear, climen, chamá, considerar el habla objeto de estudio como andaluza o
chambao, chiclear, dino, estelaje, ruina y yeta). Ello podría murciana es arriesgado si no se hace añadiendo las
llevamos a la conclusión, contraria a lo que aquí oportunas matizaciones.
venimos exponiendo, de que, desde el punto de vista Como habrá podido desprenderse de lo expuesto
léxico, el habla de la Axarquía almeriense es andaluza. hasta aquí, consideramos que se trata de una modalidad
Pero hagamos una última y breve detención. de habla cuyos rasgos internos son en su mayoría
Es casi seguro que Antonio Alcalá Venceslada murcianos, pero que han sufrido la paulatina influencia
recoge todas estas voces de la obra de Sotomayor, de los elementos externos 8 procedentes del andaluz, los
citándolo en dieciséis ocasiones y en quince sin hacerlo. cuales han terminado por asimilarse a los primeros sin
Pero sucede que, siendo la obra del lexicólogo posterior robarles la primacía, y unos y otros conjuntamente la
a Alma campesina, definiciones de algunas palabras que han configurado como una peculiar manifestación del
no especifica como tomadas del poeta cuevano, son dialecto murciano en la parte más oriental de Andalucía
idénticas a las que éste da, por lo que podemos deducir o, si se prefiere, en la parte más sur-occidental del
que están tomadas de la obra del poeta. El mismo dominio lingüístico del dialecto de Murcia.
Alcalá Venceslada reconoce la gran deuda contraída
con Sotomayor cuando le dedica un ejemplar de la
primera edición de su Vocabulario andaluz de la

8
Sigo la terminología utilizada por Manuel ALVAR en
Estructuralismo, geografía lingüística y dialectología actual. Gredos,
Madrid, 1983.
EL HABLA DEL BAJO ALMANZORA
¿ANDALUZ O MURCIANO?
PEDRO PERALES LARIOS
(publicada en Revista MURGETANA, LXVI, Murcia, 1984)

INTRODUCCION

Estoy en completo acuerdo con el prologuista a la «Obra Completa» de


Sotomayor -Antonio Manuel Campoy- cuando afirma, refiriéndose a la tierra del poeta,
que «...es, tal vez, la geografía menos conocida de España», palabras que hago
extensivas, además, a la historia, lengua, costumbres y, en general, a todos los campos
de la cultura.

Si bien actualmente ha comenzado a tomar fuerza un movimiento preocupado


por los valores regionales, lo cierto es que fueron esas palabras las que me impulsaron a
realizar un estudio, que ahora expongo, sobre la situación lingüística de la región que
denomino con los términos de Bajo Almanzora.

Debido a que frecuentemente aparecerá a lo largo de la exposición tal


denominación, debe aclarar previamente que con ella me voy a referir al área geográfica
que comprende los términos municipales de Mojácar, Garrucha, Antas, Vera, Cuevas
del Almanzora y Pulpí, área que carece de un estudio lingüístico detallado -no lo
conozco yo al menos-, debido probablemente a la consideración, hasta no hace muchos
años, de los dialectos como «cosa espuria, bárbara y superflua...», según palabras de
Justo García Soriano, quien añade: «Solía pensarse que los dialectos se producían por
degeneración o parcial corrupción de la forma culta y literaria de los idiomas
nacionales»1.

Tan sólo en estudios referidos al andaluz o al murciano aparecen algunas


referencias al habla de la Cuenca del Almanzora, en general, como frontera entre los dos
citados dialectos o como área comprendida dentro del dominio lingüística del murciano
con algunas influencias andaluzas, sin apenas profundizar más en el tema. Es normal oír
esta afirmación sin que se expongan las causas que la demuestren.

En el presente estudio he pretendido precisamente esto, realizar una exposición


de las causas que considero más significativas para que podamos explicarnos el por qué
de la utilización de una modalidad lingüística que podemos considerar bastante próxima
al murciano, en una zona que geográfica y administrativamente pertenece a otra región,
la cual, a su vez, cuenta con su propio dialecto: el andaluz.

EXPOSICIÓN

Si estas líneas se limitaran sólo a la descripción de los principales fenómenos


lingüísticos del habla del Bajo Almanzora, cualquiera que conozca a grandes rasgos las
principales características del andaluz y del murciano no tendría excesiva dificultad en
concluir que esta región pertenece, con algunas excepciones fundamentalmente de tipo
fonético, al dominio lingüístico del dialecto murciano.

1
JUSTO GARCIA SORIANO: «Vocabulario del dialecto murciano». Editora Regional de Murcia, 1980.

1
Así lo han afirmado filólogos de prestigio, entre los que podríamos mencionar a
Alvar, quien, haciendo un comentario a la lengua utilizada en su obra por Sotomayor
(principal exponente literario del habla de esta zona), afirma: «El escritor de Cuevas del
Almanzora refleja el habla de su pueblo; andaluza sólo por la “s” coronal que allí se
usa, pero murciana por todo: por su léxico, por los rasgos fonéticos, por la geografía y
por la historia»2.

Sin llegar a tal afirmación, todos los que de alguna forma le han dedicado tiempo
al estudio del murciano o de sus fronteras lingüísticas coinciden con Alvar3 en
considerar la Cuenca del río Almanzora dentro del área lingüística del murciano4. No
obstante, una consideración de tal índole afirmativa, dada la flexibilidad de las fronteras
lingüísticas, requiere bastantes matizaciones.

El mismo Alvar5 admite que esta zona es fonéticamente andaluza al considerar


que «el carácter murciano de los textos de Sotomayor es indisputable para un lector,
pero no para un oidor». También García Soriano afirma que «las divisorias dialectales
no pueden señalarse por líneas matemáticas, sino por extensas zonas. Los contornos de
un dialecto se van esfumando poco a poco en una ancha faja indecisa, que es como su
última irradiación o su penumbra». Por ello habla de «cruces y mutuas influencias con
el dialecto andaluz»6.

A esta dirección es a la que deben apuntar los estudios sobre el habla del Bajo
Almanzora, ya que se trata de una modalidad en la que predominan, evidentemente, las
características del murciano, pero, al mismo tiempo, ampliamente influenciada por el
andaluz y, además, con algunos rasgos peculiares. Todo ello viene a configurarla, más
que como exclusivamente murciana con influencias andaluzas, como un habla de
tránsito, más próxima, eso sí, al murciano que al andaluz.

La anterior conclusión he podido extraerla después de haber establecido


comparaciones entre rasgos que personalmente he constatado «in situ» y opiniones
bastante autorizadas que, como anteriormente he apuntado, consideran esta modalidad
de habla más propiamente como murciana.

Es de interés, antes de describir algunos de los rasgos que considero más


significativos del habla de la zona estudiada, que me detenga de nuevo en dos aspectos
que me parecen básicos para una más clara exposición del tema.

Está referido el primero a la tradicional identificación que se ha venido haciendo


entre murciano y panocho, para lo que cito textualmente 1as palabras de Justo García

2
MANUEL ALVAR: «Poesía española díalectal». Ediciones Alcalá, Madrid, 1965.
3
Entre otros podemos citar: J. GARCÍA SORIANO: obra citada. T. NAVARRO TOMÁS Y A. M.
ESPINOSA (hijo); L. RODRÍGUEZ CASTELLANO: «La frontera del andaluz», R. F. E., tomo XX,
cuaderno 3º; etc.
4
De toda la bibliografía consultada, A. ZAMORA VICENTE («Dialectología española». Gredos, Madrid,
1970), es el único que no incluye dentro del dominio lingüístico del murciano la parte de la provincia de
Almería considerada por todos los demás como lingüísticamente murciana. Para Z. VICENTE hoy «se
denomina murciano el habla de la provincia de Murcia, parte de la de Alicante (Villena, Sax, Salinas,
Elda, Aspe) y la aún más castellanizada provincia de Albacete».
5
MANUEL ALVAR: O. c.
6
J. GARCÍA SORIANO: O. c

2
Soriano, con las que establece una clara distinción entre las dos citadas modalidades:
«Los escritores civitatenses [...] remedaron las costumbres y el habla rústicas,
exagerándolas y viendo sólo en ellas la partes grotesca y ridícula. Así se creó el tipo
del panocho, que es un huertano grotesco, si no payaso, y el panochismo, lenguaje
convencional en el que se desfiguran a veces las auténticas palabras dialectales, y
hasta se las inventa, con el inocente propósito de hacer gracia»7.

Pero nada más acertado para deslindar murciano de «panocho» que las
siguientes palabras del poeta regional Vicente Medina, transcritas por el profesor
Muñoz Cortés en el «Libro de la Huerta»: «En mi tierra se cultiva un lenguaje llamado
panocho, lenguaje de soflamas carnavalescas, que imitando el habla regional, las
ridiculizaba con acopio de deformaciones y disparates grotescos, me indignaba por eso
este panocho. Tal indignación engendró mi ansia de reivindicar el lenguaje de mi
tierra, que no era, ni es, otra cosa que un castellano claro, flexible, musical, matizado
con algunos provincialismos de carácter árabe, catalán y aragonés. En toda la región
murciana y en parte de la de Albacete, Alicante y Almería, tierras linderas, se habla,
tanto por la gente fina como por la gente del pueblo, tal como yo hablo en mis “Aires
murcianos”»8.

Como es fácil suponer, las anteriores palabras de Vicente Medina han servido de
apoyo y son un testimonio más para aquellos que consideran el habla del Bajo
Almanzora incluida dentro del dialecto murciano.

CAUSAS QUE HAN INFLUIDO EN ESTA MODALIDAD DE LENGUA

El segundo aspecto, y al mismo tiempo parte esencial de este trabajo, en el que


he considerado de interés detenerme, es el análisis de las causas que han motivado que
el habla de la cuenca del Bajo Almanzora haya de considerarse más próxima al
murciano que al andaluz.

Desde el punto de vista histórico, toda la zona objeto de estudio constituyó,


dentro de un área geográfica más amplia, parte del Reino de Murcia, ciudad que había
constituido de forma destacada una gran ayuda para la Reconquista de esta parte del
Reino de Granada: «Rendíanse unas en pos de otras al afortunado monarca / Fernando
V / Vera, Vélez el Blanco, Vélez el Rubio, Mujicar, Cuevas, / … / contribuyendo con
todo esfuerzo Murcia a ]a empresa de la conquista de Granada, para cuyas fronteras / …
/ marchaba no escaso número de valencianos y alicantinos»9.

A pesar de que después de concluir la conquista del Valle de Almanzora (1488-


89, tres años antes de la toma de Granada) los vecinos pudieron seguir habitando el
Valle merced a la generosidad de las capitulaciones, lo cierto es que de éstas se
desprende la necesidad de una emigración, facilitada en todo momento y que ya se
había iniciado cuando dio comienzo la Guerra de Granada debido al peligro que para la
población musulmana suponía la invasión de los cristianos, quienes eran alentados a
instalarse en el Valle, «sobre todo hacia las zonas orientales, que por estar más
próximas a la costa eran consideradas como puntos estratégicos de defensa. Así, en

7
J. GARCÍA SORIANO: O.c.
8
La cita de VICENTE MEDINA la he copiado del prólogo realizado por JOSE MUÑOZ GARRIGÓS al
libro de GARCÍA SORIANO «Vocabulario del dialecto murciano».
9
RODRIGO AMADOR DE LOS RÍOS: «Murcia y Albacete». Ediciones El Albir, Barcelona, 1981.

3
Vera, que reunía en su término setecientos vecinos en el año 1490, había ya asentados
cien vecinos cristianos en 1493, y en Mojácar otros sesenta vecinos cristianos»10.

Aunque la repoblación estaba incentivada11, lo cierto es que apenas se llevó a


cabo en estos años, y cuando se hizo fue de forma lenta y esporádica, debido
fundamentalmente a la ingratitud del terreno12. Se hizo necesario esperar hasta después
de la expulsión definitiva de los moriscos en 1570-71, tras la sublevación, para que se
llevara a cabo un trasvase casi total de la población, del que se derivaron múltiples
consecuencias. Entre éstas hay que citar la llegada de un gran contingente de hablantes
procedentes del área geográfica dominada por el dialecto murciano.

Considera Ferre Bueno que antes de la expulsión de los moriscos habitaban en el


Valle del Almanzora unas dieciséis mil personas aproximadamente, entre las que había
que contar algunos cristianos viejos. Con el traslado masivo de población que se
produjo en todo el Reino de Granada tras la sublevación de 1570-71, de los dieciséis mil
habitantes antes citados, trece mil fueron expulsados del Valle, lo cual supuso un vacío
que se intentó compensar con cristianos viejos.

Estos datos, que a primera vista no parecen guardar estrecha relación con el
hecho que nos ocupa, son de suma importancia al permitimos comprobar que «los
repobladores cristianos que vinieron al Valle del Almanzora […] procedían
fundamentalmente de las provincias vecinas de Murcia y Albacete en un porcentaje que
sumaba el 45,5 por ciento del total de nuevos pobladores... »13.

A esto hay que añadir el hecho de que esta zona ofrece mejores vías de acceso y
comunicación con la provincia de Murcia que con el resto de Andalucía, por lo que no
es de extrañar que los porcentajes que transcribo a continuación, que reflejan una
mayoría de repobladores murcianos, pudieran ser algo flexibles en beneficio de estos
últimos y en perjuicio de repobladores de procedencia andaluza.

En tantos por ciento, la totalidad de repobladores que nos da Ferre Bueno14 es la


siguiente:

Reino de Murcia 45,5 %


Reino de Valencia 8,8 %
Castilla la Nueva 25,9 %
Andalucía 13,5 %
Otras regiones 6,3 %

10
EMILIO FERRE BUENO: «El valle del Almanzora. Estudio geográfico», Excma. Diputación
Provincial, 1979.
11
«La corriente repobladora provocada por la corona fue ayudada por medio de franquezas que
favorecían a los nuevos pobladores cristianos, con la intención de que los lugares estratégicos fueran
repoblados por cristianos viejos, como sucedió con las franquezas concedidas a Vera y Mojácar en 1494,
que favorecían a los nuevos pobladores». E. FERRE BUENO: O. c.
12
A pesar de todas las facilidades, las características de la zona hacían que la repoblación no fuera muy
tentadora, por lo que, además de hacerse lentamente, muchos repobladores permanecieron poco tiempo en
su nueva tierra.
13
E. FERRE BUENO: o. c.
14
E. FERRE BUENO: o. c.

4
Como es obvio, las anteriores cifras son un apoyo más, entre otros que más
adelante podrán irse viendo, para los que sostienen que la Cuenca baja del Río
Almanzora pertenece al dominio lingüístico del murciano.

Ciñéndonos más a la zona objeto de estudio, también sirve de apoyo a la anterior


postura la identidad climática de la parte oriental y meridional de la provincia de
Almería con la provincia de Murcia15. Si a la circunstancia de que el clima es factor
decisivo en la lengua le sumamos que es factor condicionante de la agricultura, es fácil
adivinar que esta región en el sector agrario está más ligada a las provincias levantinas v
murciana que a Andalucía, incluso más que a la de Almería del Sur, con lo cual la
relación con hablantes de habla murciana se hace aún más estrecha.

También es interesante destacar que si bien la actividad minera alcanzó su época


de mayor esplendor en la segunda mitad del siglo XIX, venía ya desarrollándose desde
la época prerromana. Esta actividad fue otro de los factores que influyeron a que esta
zona tendiera más hacia la provincia de Murcia debido a las continuas migraciones de
mineros entre las explotaciones mineras de Cuevas del Almanzora y Cartagena-La
Unión.

A todos los factores anteriormente citados que demuestran una mayor afinidad
de la Cuenca del Bajo Almanzora con Murcia que con Andalucía hay que sumar la
peculiar disposición de los habitantes. Para ello cito copio algunas palabras de E. García
Asensio referidas a Huércal-Overa, transcritas por E. Ferre Bueno y que, según este
último, pueden hacerse extensivas a casi toda la comarca: «y es tan fundado lo que
decimos que nuestro contacto y comunicación con Lorca y Murcia es frecuente,
expansivo y fácil, que lo efectuamos siempre con gusto y placer, no sólo por las razones
consignadas, sino además por su gran rapidez y comodidad […] mientras que la ida a
Almería es puramente de carácter necesario y obligatorio»16.

ALGUNOS RASGOS DEL HABLA DEL BAJO ALMANZORA

Una vez expuestas las que yo considero principales causas, creo también
necesaria hacer una descripción, no exhaustiva ni detallada, de algunos de los más
importantes rasgos que configuran el habla de la Cuenca del Bajo Almanzora, todos
ellos constatados personalmente.

En el plano fonético hay que resaltar que la riqueza de timbre vocálico del
andaluz oriental se ve incrementada en esta zona desde ocho vocales -número en que
coinciden los filólogos para el andaluz oriental- hasta diez. Ello es debido a que la
pérdida de la -s final de palabra hace que no sólo se abra la última vocal que la precede,
sino que esta abertura afecta, aunque en distinto grado, al resto de las vocales de la
palabra, incluso a la i- y a la u-.

Por otra parte, en una misma vocal pueden percibirse diferentes grados de
abertura según la consonante que la vaya trabando. De esta forma, la é tónica trabada

15
«... La importancia de las circunstancias climáticas en el Sureste es tal, que VILÁ VALENTÍ ha
definido este espacio como una región climática […] La región climática a que nos referimos […]
comprende buena parte de las provincias de Alicante y Murcia, un reducido sector de Albacete v las
tierras orientales y meridionales de Almería». E. FERRE BUENO: O. c.
16
E. FERRE BUENO: o. c.

5
por -s presenta un timbre más abierto que la trabada por cualquier otra consonante que
en esta zona no se pronuncie; así, un hablante del Bajo Almanzora distingue
perfectamente tres timbres diferentes de é en las palabras «tres», «pared» y «café».

Como puede verse, la riqueza del timbre vocálico del andaluz la encontramos en
el habla de la Cuenca del Bajo Almanzora con características peculiares, y al mismo
tiempo esta zona sirve de puente a este rasgo fonológico andaluz, introduciéndolo en la
zona de habla murciana en la que paulatinamente va desapareciendo según nos vamos
adentrando.

Es importante destacar un fenómeno peculiar del habla de esta región que los
filólogos no constatan como algo propio del murciano ni del andaluz. Se trata de una
entonación consistente en el excesivo alargamiento de las vocales tónicas. Este
fenómeno es rápidamente percibido por todas aquellas personas no familiarizadas con el
habla de esta zona, a las cuales les es difícil evitar, en algún momento, la imitación de
este peculiar «tonillo».

Tampoco puede afirmarse, como algunos filólogos han hecho refiriéndose al


habla de toda la Andalucía Oriental, que en la Cuenca del Bajo Almanzora en la
actualidad se pronuncien respectivamente como -u y como -i las vocales finales -o y -e.

Es probable que este fenómeno se produjera, si bien no en todos los niveles


sociales, pues leyendo la poesía de Sotomayor comprobamos que si esto se produce es
sólo cuando habla el campesino, y no siempre.

En lo concerniente al sistema consonántico, en el habla de la Cuenca del Bajo


Almanzora, al igual que en el murciano y en el habla del resto de la provincia de
Almería -a excepción de algunos pequeños islotes que demuestran su anterior
existencia-, la aspiración de la -h inicial procedente de f- inicial latina no existe.

A pesar de la afirmación de Alvar de que el habla de Cuevas del Almanzora es


sólo andaluza por la s coronal, lo cierto es que la mayoría de los filólogos coinciden que
la parte de la provincia de Almería próxima a la provincia de Murcia es zona de s apical
cóncava, si bien algunos especificaban el grado de concavidad.

Personalmente considero que se trata de una s apical, por lo que este rasgo no
nos sirve para definir como andaluza el habla objeto de estudio, existiendo, por otra
parte, algunas características que sí comparte con el andaluz, pero que también se dan
en el murciano. Sirvan en este caso de ejemplo el yeísmo, la confusión de r/1
implosivas, pérdida de consonantes e, incluso, de sílabas completas.

El rasgo que se considera más importante del consonantismo andaluz, y que


también se encuentra en parte del territorio murciano -la aspiración de la -s final-
adquiere en esta zona un tratamiento muy peculiar que, a mi juicio, merecería un estudio
especial, pues no siempre se aspira.

En los casos en que esta -s final se pronuncia, la abertura que en los casos de
aspiración se advierte en las vocales, sigue realizándose como si, en realidad, esta -s se
hubiera aspirado. Por otra parte, cuando se trata de final absoluta, su pronunciación, en
caso de que se efectúe, es diferente según el sexo, de modo que es más frecuente su

6
pronunciación por parte de la mujer que del hombre y, según la clase social, es a veces
considerada como índice de afectación en el hombre, raramente de afeminamiento.

El hecho de que la abertura en las vocales siga produciéndose incluso cuando no


se aspira la -s final es probablemente debido a que su pronunciación sólo se realiza
cuando la palabra de que forma parte no es final absoluta y va seguida de otra palabra
que empieza por vocal o h- muda. En este caso no es raro encontrar la -s final
pronunciada, pero no como final de la palabra a la que pertenece, sino como inicial de la
palabra Siguiente, fenómeno muy difícil de percibir por el oído del natural de esta
región.

En el plano morfológico es frecuente encontrar, al igual que en el andaluz y en el


murciano, cambios de género o vacilaciones, pudiendo hallar utilizados como
masculinos sustantivos femeninos y viceversa: «el chinche» (por la chinche), «la
tracoma» (por el tracoma), o las vacilaciones «el mar/la mar», «el calor/la calor», «el
sudor/la sudor», etc.

Indudablemente el aspecto donde el murcianismo en el habla de la Cuenca del


Bajo Almanzora es más evidente y que, en este sentido, nos obliga a afiliarla dentro del
murciano, es el léxico.

En él podemos encontrar vocablos procedentes, además del murciano, del


aragonés y del catalán, llegados éstos al habla estudiada unos por medio de los
repobladores de origen aragonés y catalán y otros a través del murciano, que,
previamente, los había adoptado.

En este mismo sentido, puede apreciarse también cómo el habla del Bajo
Almanzora, además de poseer rasgos léxicos procedentes del andaluz y del murciano,
más de este último, posee vocablos considerados propios y que no se hallan incluidos en
el «Vocabulario del dialecto murciano» de J. García Soriano, el cual me ha servido de
guía para confeccionar la relación de vocablos de origen catalán, aragonés y murciano
que más adelante transcribo y que espero sirva de buena base para demostrar la estrecha
relación del habla estudiada con el murciano.

No quiero dejar en el aire la afirmación de que podemos encontrar vocablos


propios del habla de esta región. Por ello, antes de transcribir la citada relación de
García Soriano, quiero mostrar algunas de las voces recogidas por el poeta Sotomayor,
quien al comienzo de su libro de poemas «Alma campesina» incluyó una relación de
vocablos que él consideraba propios de esta región, pero que en mayoría podemos
encontrar en la citada obra de García Soriano.

Como muestra de las recogidas por Sotomayor y no incluidas en el


«Vocabulario del dialecto murciano» sirvan las siguientes:

− Ciquear: acción de apalear la mazorca de maíz para separar el grano del husillo.
− Climen: temperatura.
− Chamá: enfermedad larga con fiebre.
− Chambao: sombraje.
− Chiclear: cantar con voz aguda.
− Dino, dar dino: dar gusto, dar placer.

7
− Estelaje: enseres de labranza o de casa.
− Ruina: planta trepadora muy feraz.
− Yeta: yema de la semilla germinada17.

ALGUNOS VOCABLOS LLEGADOS DESDE O A TRAVÉS DEL MURCIANO

Transcribo a continuación tan sólo algunas de las voces del libro de Garcia
Soriano que también sirven de muestra a la gran cantidad de vocao]os de origen
aragonés, catalán y murciano incluidos por el citado autor y que pueden encontrarse en
el habla de esta región:

− Abancalear: disponer en forma de bancal el terreno de cultivo.


− Abejarugo: abejaruco.
− Abercoquero: albaricoquero.
− Abocar: verter, vacíar el contenido de un receptáculo cualquiera. Aínas:
fácilmente, pronto.
− Alatón: almeza.
− Alatonero: almez.
− Alcancil: alcachofa.
− Aldaba: barreta de metal para asegurar puertas y ventanas.
− Almajara: semíllero.
− Almazara: molino de aceite.
− Amagar: agachar, humillar. Se dice «Amagar la cabeza».
− Angelote: pez marino de la especie de los selacios.
− Ahorre: en orre, a granel.
− Apañijo: compostura mal hecha.
− Apargate: alpargata.
− Apechusques: enseres de caza, pesca, etc.
− Apestillarse: apoyarse, afianzarse.
− Aporrear: lastímar, hacer daño.
− Arcazaba: tallo o caña seca del maíz o del haba.
− Arrear: andar de prisa, caminar. Arrejuntar: juntar, unir.
− Asnear: tontear, chocarrear.
− Atascarse: aferrarse, terquear.
− Avellana: cacahué.

− Babero: delantal de niño.


− Bajoca: judía verde.
− Baladre: adelfa.
− Bamba: especie de bollo muy esponjoso.
− Bancal: porción de tierra cercada.
− Bardiza: vallado de cañas.
− Bardomero: broza y suciedad que traen los ríos sobre su corriente en las
avenidas.
− Barranquiza: barranquera, barranco angosto.
17
J. MARTINEZ ALVAREZ DE SOTOMAYOR: «Obra Completa» (Poesia y teatro). Libreria Mary
Reyes, Cuevas del Almanzora, 1973.

8
− Bidón: cubo, pozal.
− Binza: simiente del tomate o del pimiento.
− Blanco: embutido de carne cocida de cerdo, huevo y especias semejante a la
butifarra.
− Boria: niebla.
− Borneo: paseo, ronda.
− Bozo: bozal.
− Bubo: bu, coco, fantasma para asustar a los niños.
− Bufar: soplar.
− Burrucho: asnillo, buche.

− Cabañuelas: pronóstico del año por el estado del tiempo en el mes de agosto.
− Cagarrache: mamarracho, adefesio.
− Caguetilla: diarrea que padecen las aves y el ganado cabrío.
− Canalera: chorro de agua de lluvia que cae por los canales de los tejados.
− Cansinar: extenuar por excesivo cansancio.
− Capaza: esportilla, capacho, ordinariamente tejido con palma.
− Capuana: golpe dado con la peonza.
− Caparucho: capirote, capirucho.
− Capuzón: chapuzón.
− Ceporro: persona muy torpe.
− Cieca: acequia.
− Clisarse: adormecerse, adormilarse.
− Cochinera: pocilga, cochiquera.
− Colaña: madero para sostén de la techumbre.
− Cornazo: cornada.
− Cornijal: ángulo de un bancal o de una heredad.
− Corvilla: hoz.
− Chamba: mantecado helado entre dos hojuelas de barquillo.
− Charrar: charlar, hablar mucho y sin sustancia.
− Chavo: aféresis de ochavo.
− Chepado: jorobado.
− Chino, na: cerdo.
− Chismorrear: chismear.
− Chuchurrido: consumido desmirriado.
− Chusmarrar: chamuscar.

− Descapullar: abrirse las flores.


− Desipela: erisipela.
− Desperfollar: deshojar las mazorcas.
− Dormijoso: dormilón.

− Embolicar: envolver, enredar, liar.


− Emperchar: arremeter contra alguna persona o cosa.
− Encangrenar: gangrenar.
− Enfollonar: emborrachar.
− Enfurrunchar: enfadar.

9
− ¡Equilicuá!: interj. ¡Así es! ¡Exacto!
− Escalabrar: descalabrar.
− Esclafar: quebrantar, estrellar.
− Escupinajo: escupitajo.
− Escurrizo: nudo escurridizo, lazada.
− Eslapizarse: deslizarse, desprenderse.
− Esperfollar: véase desperfollar.
− Espetón: pez marino.
− Espulsador: sacudidor, zorros.
− Estufido: bufido, sofión.
− Esturrear: desparramar, derramar.

− Florear: escoger lo mejor de una cosa.


− Follonero: latoso, pelmazo.
− Fulero, ra: chapucero, fullero.

− Gavilanejo: halcón.
− Gayá: cayada.
− Gemecar: gimotear.
− Gramante: hilo bramante.
− Guita: hilo que se hace con la fibra e la pita.
− Guiscar: aguijar, guizcar.
− Guisque: aguijón.

− Habichuela: alubia o semilla seca de la judía.


− Helor: frío intenso y penetrante.
− Horno: tahona, casa en que se cuece pan y se vende.
− Jalar: comer, jamar.
− Jamanza: zurra, paliza.
− Jarapa: colcha. Cortina o telón.
− Jetazo: bofetada, golpe dado en la jeta con la mano.
− Jinjol: azofaifa, fruto del jinjolero o azofaifo.
− Judío: caracol pequeño de color claro.

− Láguena: piedra pizarrosa.


− Lameculos: adulador.
− Lanzá: lazada.
− Legón: azadón.
− Llampío: relámpago, resplandor grande.
− Llantera: llanto prolongado y vehemente.

− Macoca: breva muy madura y seca.


− Macheo: acto de fecundar las palmeras.
− Mamparra: peca nocturna con luz para atraer a los peces.
− Manchurrón: mancha grande.
− Marranear: emporcar, ensuciar.
− Marranera: pocilga.
− Matalahuva: anís.

10
− Melón de agua: sandía.
− Michirón: haba cocida o torrada.
− Milhojas: cierto pastel de hojaldre.
− Mocho: manejo de ramas o palmas de la escoba.
− Moñigada: bosta, excremento de caballerías y ganado bovino.
− Moñigo: boñigo.
− Mujereta: hombre afeminado.

− Naide: metátesis de nadie.


− Nispolero: el árbol que produce la «níspola».
− Nulo, la: nublado, nubloso.
− Nuncla: nuca.

− Olisquear: oliscar.

− Pandorga: zambomba.
− Panizal: terreno plantado de panizo.
− Panocha: mazorca.
− Parada: compuerta para detener en las acequias el agua.
− Parador: corral con cuadra y cobertizo para el carro.
− Paralís: parálisis.
− Parvada: gran cantidad o muchedumbre.
− Pedriza: muro de piedra seca.
− Pelecha: época en que los animales mudan el pelo o la pluma.
− Peñazo: pedrada.
− Perder: deshonrar, desflorar.
− Pereta: variedad de pera de tamaño muy pequeño.
− Perfolla: la hoja que cubre el fruto del maíz.
− Perigallo: escalera de tijera.
− Pernil: jamón.
− Perola: perol, cazuela.
− Perullo, lla: rústico, patán.
− Pesaombre: pesadumbre, disgusto.
− Picola: pico, piqueta.
− Picha: perro y voz para llamarlo y ahuyentarlo.
− Pinchoso: espinoso.
− Pisotada: pisada grande y ruidosa.
− Porche: soportal, cobertizo, atrio.
− Portillo: abertura en las acequias y regaderas para tomar el agua del riego.
− Puncha: espina.
− Purgón: tormento, suplicio, purgatorio.

− Rabisco: arisco, descarado, revoltoso.


− Rascamoño: fruto del abrojo, del cardillo y otras plantas semejantes, a modo de
una bolita espinosa.
− Rasposo: lo que es áspero al tacto. raspante.
− Regomello: empacho, cortedad.
− Renta: renta anual que paga el labrador al propietario.

11
− Repiscar: pellizcar, repizcar.
− Rescullón: resbalón.
− Rompe: tapa de las cajas de cerillas que utilizan los muchachos para jugar.
− Roncear: rondar.
− Rular: rodar, dar vueltas por el suelo o por una pendiente.
− Runrunear: murmurar.

− Saltador: despeñadero de agua.


− Sisca: cisca, jisca, carrizo.
− Sumidor: sumidero.

− Tabarrote: hombre robusto, alto y desgarbado.


− Tabilla: fruto muy tierno de las leguminosas.
− Tápena: alcaparra.
− Tragón: dragón, especie de cometa con que juegan los muchachos.
− Trasmanar: trasminar, rezumar.
− Tuera: coloquíntida.
− Tufada: tufarada.
− Tutuvía: totovía, cogujada.

− Varilla: mandíbula, quijada.


− Varraco: verraco, cerdo padre.
− Vinagrillo: planta silvestre, cuyos tallos y hojas segregan un jugo ácido.

− Zafa: jofaina, palangana.


− Zamarrazo: golpe fuerte.
− Zurrir: sonar.

CONCLUSIÓN

Una vez expuestas a grandes rasgos algunas de las principales causas que han
originado una determinada modalidad de habla en la Cuenca del Bajo Almanzora, y
descritos también algunos de los principales fenómenos lingüísticos que en ella se
producen, vuelvo a repetir, como conclusión, que las fronteras lingüísticas son poco
rígidas, por lo que considerar el habla del Bajo Almanzora como andaluza o murciana
es arriesgado si no se hace añadiendo las oportunas matizaciones.

Como habrá podido desprenderse de lo expuesto hasta aquí, se trata de una


modalidad de habla cuyos rasgos internos son en su mayoría murcianos, pero que han
sufrido la paulatina influencia de los elementos externos18 procedentes del andaluz que
han terminado por asimilarse a los primeros sin robarle la primacía, y unos y otros
conjuntamente la han configurado como una peculiar manifestación del dialecto
murciano en la parte más oriental de Andalucía o, si se prefiere, en la parte más sur-
occidental del dominio lingüística del dialecto de Murcia.

18
Sigo la terminología utilizada por MANUEL ALVAR en «Estructuralismo, ;;eogra¬fía lingUística y
dialectología actual». Gredos, Madrid, 1983.

12
TRABAJO DE DIALECTOLOGÍA.

12. CONCLUSIÓN.
En mi opinión, el habla de la COMARCA DEL ALMANZORA se corresponde con el dialecto
andaluz, tanto en el plano fonético como en el morfológico. Es el andaluz el que influye en el
dialecto Murciano. Ambas zonas comparten ciertos rasgos: Omisión de la /d/ intervocálica,
apertura de las vocales procedentes de la omisión de la marca de plural, escasa pronunciación
de la s en posición implosiva dentro de la sílaba.

Sin embargo, los hablantes de esta zona se identifican más con el dialecto murciano. Pero,
según mi parecer, esta identificación es sólo una cuestión de prestigio, es decir, consideran al
andaluz como un dialecto de segunda y prefieren identificarse con el dialecto murciano. Pero
según los rasgos analizados en el fragmento de texto sólo hallamos marcas dialectales
pertenecientes al andaluz, si está presente la distinción de las silbantes, fenómeno muy
extendido en la parte occidental de Andalucía. Como explico en el apartado 1.2 y se ve
perfectamente en el mapa adjuntado.

La encuestada se refiere a su dialecto de una forma negativa, considera que habla mal, opinión
asentada sobre una cuestión de prestigio, una afirmación negativa frente a su forma de
pronunciar. Aunque si comete varios vulgarismos en la entrevista, el resto se podría identificar
con un andaluz cualquiera de las provincias de Granada, Jaén y Almería.

MARÍA DEL CARMEN RUIZ MONTALVO. Página 21


TRABAJO DE DIALECTOLOGÍA.

13. BIBLIOGRAFÍA.
1. TRATADO DE FONOLOGÍA Y FONÉTICAS ESPAÑOLAS. ANTONIO QUILIS.
2. MANUAL DE DIALECTOLOGÍA HISPÁNICA. EL ESPAÑOL DE ESPAÑA. MANUEL ALVAR.
3. http://grupo.us.es/ehandalucia/que_es_el_andaluz/06_las_palabras.html

MARÍA DEL CARMEN RUIZ MONTALVO. Página 22


TRABAJO DE DIALECTOLOGÍA.

Canteras de mármol en Macael

MARÍA DEL CARMEN RUIZ MONTALVO. Página 23

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