Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
En todos los ejercicios de atención plena se propone una postura sentada con la
espalda recta y relajada. Te puedes sentar en un cojín, en un banco de meditación, en
una silla o en cualquier otra postura sentada que sea cómoda para ti.
Es importante guardar quietud en la práctica. Si la necesidad de moverte es intensa,
entonces hazlo de forma consciente, prestando atención a todas las sensaciones que
se desprenden del movimiento. En todos los ejercicios se propone focalizar la
atención en un objeto determinado. Es probable que a medida que pase el ejercicio te
des cuenta de que la atención se ha dispersado y está focalizada en un pensamiento,
una emoción, una sensación o una circunstancia que es ajena al objeto propuesto en
el ejercicio. En el preciso momento que te des cuenta de que la atención se ha
dispersado la instrucción es siempre simple y clara: vuelve a focalizar la atención en el
objeto propuesto. La dispersión de la atención es algo común. Por lo tanto, cuando te
des cuenta de que la atención se ha dispersado tranquilamente vuelves al objeto de la
práctica.