La pintura }'"- tel | prehispanica en México" Mcop Los pueblos prehispanicos se hallaban inmersos en un universo de color: desde las humildes vasijas domésticas, hasta los suntuosos edificios palaciegos y religiosos. También estaban policromados la cerdmica ritual, la escultura en piedra, los relieves en estuco, las figuras de barro y los manuscritos 0 “cédices”. Lo que ahora sdlo vemos en los tonos desvaidos del estuco 0 de la piedra, en su tiempo estuvo brillantemente coloreado. Los muros desnudos de hoy -al igual que las bovedas, frisos, comisas, jambas, dinteles, y demas elementos arquitecténicos-, se vestian de lujosa policromia. El llamado lenguaje de la piedra, no era visible. “ReGWeoLOG(e MEXICANA! YoL IT - 2 le. - A955 ; anfica 13, Mural 3 de Tetitla. Zons arqueolgiea de Teotihuaean, pintura mural se define como la representacion de -nagenes en una superficie arquitectonica bidimen- ional. Porque también estaban pintados jos muros re vvados, los cuales san formase iconos en relieve que ¥ provectan sobre los mures, y cuyo cardeter reaiza- bun efecto de claroscuro; igualmente fueron usados ‘ncia pot los pueblos prehispanicos, pero no deben oa Pinca Mural Prebispanice- Enfonue sc auspciado poral 1dor de! Instat de Tavesigacioes Ee js Dna Murs Prehspans Nasional. ‘tute, Miembro de BC confundirseles con Ja primera. Asi pues, al establecer Ia distin cidn entre pintura mural relieve policromado, habré de que- dar clato que en adelante me atengo exclusivamente a fa pi HISTORIA DE LOS MURALES [A principios de este siglo existian escesas referencias 2 mu Jes precolorbines: en ¥ucatin, las de Stephens (1843); en Te tihuacan, cies (1866), y en Mitla, las de Seler (1888), wnturia, y a la pat de los hallazgos umerosos descubrimientas de rau- les que van dando tna idea cabal de la variedad de estilos v jemas deserrollados por los pintores en los diversos pueblosombre Jaguar. Edificio A. Zona arqueoligica de Cacaxtla, Taxeala, {sitios mesoamericancs. Asi, las pineuras de Oxtotitlén, Jux- co, rial y religioso, bélica o cosmogénico y, con menor fre ‘lahuaca y Cacahuaziziqu noson murales pues cuiencia, le pintura se ap! ie De tal suerte, cabe suponer que la variedad iconograti expresién ol cosmopalita, De este de Ia costa del Golfo en el 1s Superpuestos”, la de Oa- dos de color uni Tulum y Rancho Ina fies y las eseenas se acordé LLapovruea Metab PREHSPASICN {7Pintura rupesreolmees, spin D. Grave, Ototithin, Guerrero, ‘Testimowtos Existen evidencias de pinrura mural en todo el Aleiplsna cen- tral; en los actuales estados de la costa del Pacifico, en Oaxa- ca; en Veracruz ya Jo largo de la costa del Golfo; en San Luis, Potosi -como en parte de la zona huasteca-, y en toda la exten- sign del area maya, tanto mexicana coma centroamericana. La pintura mural més antigua puede fecharse, hoy ia, en el Cli- sico Temprano (250-500 d.C.), y se encuentra en Guatemala Mural de los Bebedores. Zona aequegica de Cholla Puebla. Mis tardis resultan las de Teotihuacan, que daten de los cli- sicos Medio y Tardio (400-750 d.C.). Con el auge de las gran- es ciudades, la comunicacién pictérica se difundio por casi toda Mesoamérica; sobreviven murales del Epiclisico y Pos- clisico (750-1521 d.C.) enel Altiplano, Is regicn huasteca y la zona maya. En este articulo quedan fuers las pinturas rupes- tres; sdlo se hard referencia a aquellas que se realizaron sobre losenlucides que revestian los muros de mamposteria, Nomer- cionaré las técnicas empleadas per los pintores prehispanicos,ya que en este mismo nlimero puede encontearse un articulo ue resume las Investigaciones sobre ef tema llevadas a cabo snl proyecto “La gintura mural prehispanica en México” DESTINO DE LAS PINTURAS MERALES Contamos con numerosos testimonies acerca de que muchas de las edificaciones prehispainicas estuvieron pintadas; cate afadie que etan constnucciones de -y para- las clases en el po- er: templos sobre pirdmides; los llamados “edificios palacie- os"; cdmaras, cecintos y conjuntas,a los cuales tambien sé les han adjudicado funciones administrativas y seculares. Carece~ ‘mos de pruebas 2a cuanto a los muros de las viviendas de ta mayoria de la poblacién. No tenemos, por ahora, fundamento suficiente para suponer que las estructuras domésticas det pue~ blo estuvieran pintadas con imagenes y escenas. Es posible, come dicen las fuentes, que se las viera encaladas de blanco, ‘como se miran, hoy en dia, en las poblaciones rurales. Por ilo, ie Jaaedirigiendose aun tenplo, Mural 3 del Cuaeto 13 de Teta, Zona arqueolixica de Teotihuacan, J pintura mural prehispanica, tal y como ahora la conacemos, estuvo en .cciones de mamposteria dedicadas a las operaciones civiles y rligiosas de las clases oudientes; éia 23, la razén de su permanencia. EL LENGVAJE DE LA PINTURA MURAL Rasge comiin a codas los murales de Mesoamerica es el uso de colores planos; sin embargo, la concentracién o disminucién del pigmento puede producir efectos ilusorios de volumen, y las tineas de contorno hacen resaltar las figuras; tales lineas pro ducen el efecto de marco en la imagen, Otro elemento compar- tido es la ausencia de perspectiva con punto de fuga; a veces, las imagenes muestran distintos tamafios y proporciones, y los, ‘planos se traslapan para dar impresién de superposicisn y pro Fundidad, También la saturacién de los colores tiende al mismo propésito; asimismo, a sensacion de lejania se consigue por el abatimiento de los planos:el inferior es lo mas cereano, yet su- s LA muvTURA stuRAL IREMEPAMES /9perio, lo mas distante, Exist un insite intento de escorae en ia celeore imagen yacente de la eseena de La Vietoria, en el Cuarto 2, de le Esteuetre 1, de Bonampak La pinture es un medio de comms fn; he shi una de sus eualidades fandamentales:-Las imagenes wans- riten ideas, costumres y credo de un . dmbito geogréfico y cultural determi nados. Revela la capactcad super de nomine para ceary mundo bidimenstonal, aguelo que !o circunda, to que piensa, logue imagi-§ na El pintorfabrica imagenes, 3p2 rico de dicha imagen 8, colores, Lineas, eRHUTaS, QUE SC Deane els Earocur [Guano mura von una de las razones distin afincan ~sin repetirla- en su realidad. ponampal, Chiapas. Replica ene Museo Nacional a8 entre seres sobrenaturales y seres Esta puede se religiosa, cosmogeni- de niroploia. comunes ala natualeza esque en ios ca, historica, et ra, pero en todo primeros predomina la mezcla de dis- casosiempre resultasimbsliea, yaque tints rasgos y en los segundos, sla sta representade en el plana. La ver- ra relacion con i realidad visual dad, en la pintura tradicional, consiste De tal modo, es posible aplicar un on atenerse ala superficie; sin embar- crterio central de clasficacionestilis 0, por diversas nimbos y en diferen- tia y cultural. Hay pinruras que reve- tes tiempos, le propia pintura ha “vior lan una fercea voluntad por represen- tentado” sucaracterbidimensional. En tarlo imaginado, lo sobrenatral esto distinas épocas de la pintura univer- es lo que ocure en la pintura mural sal 32 ha reourtido, mediante el enga- teotihuacana -con las inevitables en- Ao visual, a una sapuesta realidad vir- cepciones a la regia. tras, = expre- cual, Estono ocurioenlapintura mural san mediante cinones naturales prehispanice, a eval muestra -en su Bonampaic y Cacastla reproducen rmayoriay condiversosrecursos~ ima fen sus formas io que se reconoce genes planas, sustentadas en os con- visualmente septos que los hombres tenian de si Hay ademas otras razones, de ca- rismos, deta naturaiezay del cosmos sete formal, para distinguirel estilo cn los murales prebispénicos, por ejemplo: la proporsion de fas ime nes representadas, en relacion con les de la naturaleza; ¢l espacio pictérico donde estin colocadss, y su relacion 's dos métodos de percibir la realidad ~aun- sdomine uno sabre el otro Por lo anterior. puedo decir que si bien hay formas naturales Chumanas, animales v vegetales) en los murales siones, “hibridizadas”. es dec binadas de manera tal que la imagen represemada no reproduce un ser vivo de naturaleza terrenal, A esto hay que 1 que no pocas veces se afiad formas imaginarias, que refverzan el ‘TEMAS, FORMAS, RECURSOS, CONVENCION Los murales muestran, en su diversi- dad tematica, congruencia con el es- Detalle det mural dela Tumba 104. Zona con otras imsigenes; recuérdese las fi- pacio al que enmarcaban, Existe una arquevlgiea de Monte Abin, Oasaea, ‘guras humanas pequefitas y cabez0- tematica funeraria en Oaxaca (las tom- nas de Tepantitla; las de Monte Alban, jas 104 y 105 de Monte Albin}; con- ceptual en Teotihuacan; narrative en ea maya (acompatiada de inscrip- ciones como en Bonampak y en Mul- hie}; eseénico-idustrativa en la costa , (el Golfo (LasHigueras),ymitico-his térica en el Altipiano mexi soparticularmente en Cacente), Estos £ calificativosnoson exclusives; os x izo mas bien como una suere de cl sifieacion de los emas que de un espacio amorfo y_sobrengtural las egiones o sitios més imporcantes el caso de Tulum y Teotihuacan- Cabe sefalar que en le gran mayo- © puede mostrar disefios para dar ria de estos hugares existe -de modo afortunado- esa combin- otacién naturalista de espacio terrenal, tal como se ie y Bonampak que tienen tres cabezas por cuerpo y ‘ocupan gran paste de la superficie pic- toriea; y las mas esbeltas, de cuatro a cinco eabezas -o algo miis- por euer- po, en Bonampak y Cacaxta, Otroelementoa consideraresel uso el tono aplicado a Jas imagenes puede, 010, ser simbdli- co, y el colorido del fondo de tae naa veces es liso, como par 10 (pien-AREA/PERIODO PRECLASICO 6 ot ‘asecun Cesta (cases Terprave 20.5060) rent sone PB A ‘ura conor Eee | Ta. vere (Gaeca 906 110056)Soran Tenn San uss Pa Ponte Tamora, 90-128020) | pocuacn ae, 1385-15210, Suche Sars (aio ob 9e00)Las diosa verdes i Es conveniente considerar, ademas de las particularidades ‘¥8 sefaladas, orres raspos comunes a la pinturs mesoamerica- ‘a fa division espacial en regisiros que procuran la secuencia: Ja batalla, como en los taludes de Cacaxila; las escenas, ah Sauy fragmentadas, de Las Higueras; y las notablemente de- sradadas de El Tamuin. Se conservan, también, registros, en superposiciones horizontales, que dan una lecture ordenada de los asuntos representados ~como en Bonampak y Tulum, Se ha dicho que los iconos figuradas de frente son los que Henen mayor jerarquia (;social, religiosa?); éstos se encuen. tran, de hecho, estéticas y vigorosamente convencion: igh pt ili MT an Imigenes dispues estos horizontles,seguin F, vos, Tulum, Quintana ct Meat, 5 de jade. Tetitia. Zona arqueoldgica de Teothuacan aperecen en murales de distintas regiones de Mesoamérica: en Teorihuacan, en Monte lbén y en la zona maya. Un rasgo les ¢ particular, se trata de imagenes aiteradas en su apatiencia na. tural: as “diosas verdes” di nt Teotifuacan; la “dei- Sad, en la Tumba 104 de Monte Albin, y Jos “masearones ce- lestes”, en fo alto de las bévedas de los cuartos 1 y 3 de Bonampak, revelan efista convencidn, Distintas maneras de expresién que muestran diferentes modos pictérices y cuiturales: todos estén engranados eo una suerte de voluntad total que se manifiesta en la creatividad de Detale del Mura defo Saale Tou orieate. Zona arquevhigica ‘Ge Cacaxts, Tasca,te de fuego. Detlte de a banqueta de Ocotluo. nde Ocoteluleo, Tlaxcala eTORICOS 0 ¢s que cada zegién y cada sitio, expresan una iad deestilo, Asi, dentro de cierias patrones co- ‘ura mural prehispanica, encuentra que tay mo + de cepresentacidn. La pintura mural teotihua~ confundirse con la de Oaxaca, ni con le de cho menos, con la de la region maya. Se fa di- tibas -tajo este término incluyo a los pintores~ smucciones de un artesano mayormente avanz’- sstro del taller, quien estaba familiarizado en las ‘s mensajes que se querian ransmitiz. Sin duda, ajaban -por su entrenamiento en una cofradia o 2sanal- en “el gusto de los tiempos”, pero cada en sus obras uria huella caracteristice. La fac. a més alld de las imposiciones reglamentaias. lado, noes facil caer en leccuras emo ia, un inconfundible cello de este. “los cuales la faceura i 1 contamos con ciertos nombres de pintors que se muestra en la cimara de Bonampak. La readora supera el apremio del pratotipo. rte, un conjunto de custidades formales y te figuraban lo que podria nombrarse “ia pintura aricana” una especie de lenguaje genérico com- prensible sélo para tos mas versadas; pero también paricularidad -regional, les pictériees. Quiero istia la fe sitio y aun individual- de los esti- acer éafasis en este punto; 283 paricu. ea, mediante un vocabulario pe- eada uno de ies pueblos de Mesoaméri Si bien todas cada un: 2 de la manera que le resulta mis conve~ dual El ade una comuni municacion cimera de un pueblo, Sin embargo, al estilo es manifestacicn dinimica: por ello, se be bia en distintas ¢pocas de la historia del ane de los estitos tem pranes, medios, 0 tardic: con a pintura ral prehispinica Las pinturas muraies que engalanaban las suntuosas editi= caciones del México Antiguo que ahora conocemos, han sido encontradas -la gran mayoria~ en este siglo. Muchas, muchi= simas mds, estén en espera de su hallazgo. Cuando esto ccurra, habrdn de contribuir 2 una mejor comprensién de los pueblos ‘que nos han dado fama y orgullo universal. 23 Pintor mixteco. Cédice Vindoborenss folio 48 v Paraleer mis dining) W. 3. Norton sod Co, Naw York and London, Feast, Bear dela, Meera, £1 Colegio Nacional, 1990, Refleonesenlorto as semelanztsyUifeenciss ena prt 0, Mera, 1S Mize, Attar, The moral suiting of Teotiuacde, Dambamon Oaks, Ts efor Hacvaed Universi, 1973 ‘nthe edge of th 8, Mare pining et Tancih-Talum. Qua (ae Roo, Meso, Dumbarton Oaks, Tstes for Haracd Univer, 1582 [Larosa tna pnaasnssica 115 u