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INSTITUTO TECONOLOGICO NACIONAL

INSTITUTO TECNOLOGICO DE TUXTLA GUTIERREZ

ING. DE LOS MATERIALES NO ME METALICOS

ING. LENIN RUSSEL SUEREZ AGUILAR

ALUMNO
ROMEO MOLINA HERNANDEZ

M3B

NANOMATERIALES
INTRODUCCIÓN
Con el paso del tiempo se ha ido mejorando la manera de hacer materiales y

diseñar su composición, con los avances de la tecnología y la creación de mejores

microscopios Las aplicaciones de los nanomateriales y los nanocompuestos

poliméricos han ayudado al desarrollo de novedosas tecnologías Estos materiales

tienen su principal demanda en los sectores aeroespacial, marino, automotriz y de

energías renovables, por su alta resistencia mecánica, rigidez, conductividad

eléctrica, propiedades anticorrosivas y multifuncionales.


indice
INTRODUCCIÓN ................................................................................................................................... 2
¿Qué son los nanomateriales? ............................................................................................................ 4
¿Qué es la nanotecnología? ................................................................................................................ 5
Historia de la Nanotecnología ............................................................................................................. 7
Propiedades de los nanomateriales… ................................................................................................. 8
Clasificación de los nanomateriales… ................................................................................................. 9
¿Como obtener los nanomatariales? ................................................................................................ 11
Nanomateriales basados en carbono… ............................................................................................. 12
Los fullerenos .................................................................................................................................... 13
variaciones de fullerenos .................................................................................................................. 14
Otros fullerenos................................................................................................................................. 15
NANOTUBOS ................................................................................................................................. 17
grafeno .......................................................................................................................................... 18
3. ¿Cómo se puede medir la exposición a nanomateriales? ......................................................... 24
4. ¿Cuáles son los efectos potenciales de los nanomateriales en la salud? ................................. 24
Conclusión ......................................................................................................................................... 26
¿Qué son los nanomateriales?
Por de finicion los nanomateriales son materiales con propiedades morfológicas
más pequeñas que 1 µm en al menos una dimensión.1 A pesar del hecho de que
no hay consenso sobre el tamaño mínimo o máximo de un nanomaterial, algunos
autores restringen su tamaño de 1 a 100 nm, una definición lógica situaría la
nanoescala entre la microescala (1 µm) y la escala atómica/molecular (alrededor
de 0.2 nm).

Los nanomateriales pueden subdividirse en nanopartículas, nanocapas y


nanocompuestos. El enfoque de los nanomateriales es una aproximación desde
abajo hacia arriba a las estructuras y efectos funcionales de forma que la
construcción de bloques de materiales son diseñados y ensamblados de forma
controlada.
¿Qué es la nanotecnología?
La palabra nanotecnología se una extensivamente para definir las ciencias y
técnicas que se aplican al niver de nanoescala, medidas extremadamente
pequeñas, lo que permiten trabajar y manipular las estructuras moleculares y sus
atomos. Esto quiere decir que que hay la posibilidad de fabricar materiales y
maquinas a partir de reordenamiento de átomos y moléculas.

Está presente en industrias tradicionales y en terrenos muy diversos que incluyen:


industria aeroespacial, construcción de computadoras más rápidas y pequeñas,
desarrollo de nuevos tratamientos médicos, medicamentos y herramientas
biomédicas.

Los conocimientos actuales sobre la nanociencia provienen de avances en los


campos de la química, física, ciencias de la vida, medicina e ingeniería. Existen
diversas áreas en las que la nanotecnología está en proceso de desarrollo o
incluso en fase de aplicación práctica.

En la ciencia de los materiales, las nanopartículas permiten la fabricación de


productos con propiedades mecánicas nuevas, incluso en términos de superficie
de rozamiento, de resistencia al desgaste y de adherencia.

Los componentes más pequeños del chip de un ordenador se miden a nanoescala


Fuente: NanoPrism Technologies, Inc.

En biología y medicina, los nanomateriales se emplean en la mejora del diseño


de fármacos y su administración dirigida. También se trabaja en el desarrollo de
nanomateriales para instrumental y equipos analíticos.

Productos de consumo tales como cosméticos, protectores solares, fibras,


textiles, tintes y pinturas ya incorporan nanopartículas.

En el campo de la ingeniería electrónica, las nanotecnologías se emplean, por


ejemplo, en el diseño de dispositivos de almacenamiento de datos de menor
tamaño, más rápidos y con un menor consumo de energía.
Historia de la Nanotecnología

Uno de lo pioneros en el campo de la Nanotecnología es el Físico estadounidense


Richard Feynman, que en el año 1959 en un congreso de la sociedad americana
de Física en Calltech, pronunció el discurso “There’s Plenty of Room at the
Bottom” (Hay mucho espacio ahí abajo) en el que describe un proceso que
permitiría manipular átomos y moléculas en forma individual, a través de
instrumentos de gran precisión, de esta forma se podrían diseñar y construir
sistemas en la nanoescala átomo por átomo, en este discurso Feynman también
advierte que las propiedades de estos sistemas nanométricos, serían distintas a
las presentes en la macroescala.

En 1981 el Ingeniero estadounidense Eric Drexler, inspirado en el discurso de


Feynman, publica en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences,
el artículo “Molecular engineering: An approach to the development of general
capabilities for molecular manipulation” en donde describe mas en detalle lo
descrito años anteriores por Feynman. El término “Nanotecnología” fue aplicado
por primera vez por Drexler en el año 1986, en su libro “Motores de la creación : la
próxima era de la Nanotecnología” en la que describe una máquina
nanotecnológica con capacidad de autoreplicarse, en este contexto propuso el
término de “plaga gris” para referirse a lo que sucedería si un nanobot
autoreplicante fuera liberado al ambiente.
Propiedades de los nanomateriales…

Las propiedades del material dependen de la estructura y composición y pueden


ser modificadas o modificadas genéticamente modificando la influencia relativa de
las propiedades interfaciales o interfásicas y las propiedades macroscópicas a
granel a través del tamaño o dimensión característico de los componentes y
dominios. Este enfoque ya había surgido hace siglos con aleaciones de acero y ha
sido tan poderoso que hoy en día muchos materiales de ingeniería son
compuestos con tamaños de dominio micro a nanoescala. Dependiendo del
carácter físico o químico de cada dominio, existe una compleja interrelación entre
la estructura y la composición del material, que puede estar relacionada con las
propiedades de masa y superficie de cada ingrediente y las propiedades
emergentes localizadas en la interfaz. La reactividad química selectiva es bastante
común con los nanocompuestos, lo que da el potencial de desintegración del
material en uno u otro componente. Los procesos complejos gobiernan este
comportamiento, que claramente se relaciona con la liberación de nanopartículas
en el medio ambiente.
Clasificación de los nanomateriales…
La Agencia del Medioambiente de los EE.UU. ha clasificado los
nanomateriales actuales en cuatro tipos:

Basados en carbono

Estos nanomateriales están compuestos mayoritariamente por carbono y suelen


adoptar formas como esferas huecas, elipsoides o tubos. Los nanomateriales de
carbono con forma elipsoidal o esférica se conocen como fullerenos, mientras que
los cilíndricos reciben el nombre de nanotubos. Estas partículas tienen muchas
aplicaciones posibles, incluido el desarrollo de recubrimientos y películas
mejoradas, materiales más ligeros y resistentes y diversas aplicaciones en el
campo de la electrónica.

Basados en metales

Estos nanomateriales incluyen puntos cuánticos, nanopartículas de oro y plata y


óxidos metálicos como el dióxido de titanio.

Dendrímeros

Estos nanomateriales son polímeros de tamaño nanométrico construidos a partir


de unidades ramificadas. La superficie de un dendrímero tiene numerosos
extremos de cadena, que se pueden adaptar para desempeñar funciones
químicas específicas. Esta propiedad se podría utilizar también para la catálisis.
Además, debido a que los dendrímeros tridimensionales contienen cavidades
interiores en las que se pueden introducir otras moléculas, pueden ser útiles para
la administración de fármacos.
Compuestos

Los compuestos combinan las nanopartículas con otras nanopartículas o con materiales
de mayor tamaño. Las nanopartículas, como arcilla a nanoescala, ya se están añadiendo
a numerosos productos, desde piezas de automóviles a materiales de empaquetado, para
mejorar sus propiedades mecánicas, térmicas, protectoras, etc.
¿Como obtener los nanomatariales?
Top-down (Miniaturización)

Consiste en reducir los componentes y estructuras de


mayor a menor. Este tipo de nanotecnología es la más desarrollada hasta el
momento.

Bottom-up (Autoensamblado)

Consiste en partir de una estructura pequeña (molecula), para crear una estructura
mayor, mediante un proceso de montaje. Permite controlar la materia de la forma
mas precisa. Es el futuro.

Síntesis química
Consiste en la producción de materias primas, como moléculas o partículas, que
pueden usarse directamente en productos en forma desordenada, formando
bloques o niveles más avanzados de ordenamientos. El tipo de nanomaterial más
conocido, empleando esta técnica, son las nanopartículas.

Ensamblaje posicional
Esta es la única técnica, capaz de manipular y posicionar átomos y moléculas, uno
a uno. Aunque contamos con instrumentación capaz de realizar estos procesos, el
ensamblaje posicional es extremadamente laborioso y actualmente no es
apropiado para llevarse a cabo a escala industria
Nanomateriales basados en carbono…

El carbono es el elemento químico más estudiado. Resulta fundamental en


biología y medicina, pero también en la producción de energía y la conservación
del medio. A través de sus compuestos, forma parte de numerosos materiales de
gran importancia en nuestra vida cotidiana.

La síntesis del carbono en las estrellas constituye una etapa básica del ciclo por el
cual se forman muchos otros átomos. Durante largo tiempo se consideró que el
carbono puro, a temperatura y presión ambientes, existía en forma de dos tipos de
materiales: el grafito, que utilizamos en las minas de los lápices, constituido por
láminas apiladas fáciles de separar, y el diamante, de estructura cúbica cristalina.
Se sabe que el grafito es ligeramente más estable que el diamante. No es
frecuente que existan materiales con características muy distintas formados
por el mismo elemento químico. Resulta por ello bastante sorprendente que la
investigación científica durante el último tercio del siglo XX y los años que
llevamos del XXI haya descubierto aún más formas de carbono en la naturaleza.
En los años setenta del siglo pasado se estudiaron los compuestos intercalares de
grafito. Constan de láminas muy finas de grafito, que pueden ser
superconductoras, entre capas de otros materiales. También en los setenta se
estudiaron de forma intensiva polímeros como el poliacetileno, que puede
considerarse una cadena muy larga de átomos de carbono, con algunos enlaces
saturados con hidrógeno.
Los fullerenos
Los fullerenos (a veces escrito fulerenos) son la tercera forma más estable del
carbono, tras el diamante y el grafito. El primer fullereno se descubrió en 1985 y se
han vuelto populares entre los químicos, tanto por su belleza estructural como por
su versatilidad para la síntesis de nuevos compuestos, ya que se presentan en
forma de esferas, elipsoides o cilindros. Los fullerenos esféricos reciben a menudo
el nombre de buckyesferas y los cilíndricos el de buckytubos o nanotubos.
Reciben este nombre de Buckminster Fuller, que empleó con éxito la cúpula
geodésica en la arquitectura.

La purificación del fullereno era un desafío para los químicos hasta hace poco
cuando un equipo de investigadores españoles desarrolló un nuevo proceso de
obtención. Los fullerenos endoédricos han incorporado, entre los átomos de la red,
iones u otras moléculas más pequeñas.

Propiedades

Los fullerenos no son muy reactivos debido a la estabilidad de los enlaces tipo
grafito, y son también muy poco solubles en la mayoría de disolventes. Entre los
disolventes comunes para los fullerenos se incluyen el tolueno y el disulfuro de
carbono. Las disoluciones de buckminsterfullereno puro tienen un color púrpura
intenso. El fullereno es la única forma alotrópica del carbono que puede ser
disuelta. Los investigadores han podido aumentar su reactividad uniendo grupos
activos a las superficies de los fullerenos. El buckminsterfullereno
no presenta "superaromaticidad", es decir, los electrones de los anillos
hexagonales no pueden deslocalizar en la molécula entera. Se pueden atrapar
otros átomos dentro de los fullerenos; de hecho existen evidencias de ello
gracias al análisis del gas noble conservado en estas condiciones tras el impacto
de un meteorito a finales del periodo Pérmico. En el campo de la nanotecnología,
la resistencia térmica y la superconductividad son algunas de las características
más profundamente estudiadas.
variaciones de fullerenos
Desde el descubrimiento de los fullerenos en 1985, las variaciones estructurales
de los fullerenos han evolucionado mucho más allá de los distintos grupos de ellos
mismos (CXX). Ejemplos de fullerenos incluye:

• Buckyball fullerenos: El miembro más pequeño es el C20. Otros ejemplos


incluyen C26, C36, C50, C70, C72, C76, C80, C82, C84 y C60; este ultimo siendo
el más común del grupo y también conocido como Buckminsterfullerene C60. XX
número arraigado a la letra C constituye el número de atomos de carbono
presente.
•Nanotubos
•Megatubos
•Polimeros
•Nano"Cebollas"
•Vinculados "bola y cadena" dímeros.

•Anillos fullerenos

•Grafeno

Aplicaciones tecnológicas

-Lubricantes
-Superconductores

-Imágenes Médicas

-Catálisis química

-Dispositivos de Grabación
Otros fullerenos
El fullereno C20 es el más pequeño de todos, no tiene hexágonos, sólo 12
pentágonos, mientras que el C70, tiene 12 pentágonos al igual que el
buckminsterfullereno, pero tiene más hexágonos, y su forma en este caso se
asemeja un balón de rugby. Un nanotubo es una sustancia integrada
por fullerenos polimerizados, en los que los átomos de carbono a partir de un
determinado punto enlazan con los átomos de carbono de otro fullereno.

Aplicación actual

Una aplicación actual es el uso del fullereno C60 en la fabricación del aceite
TECHNOS C60 5W40 (En Europa, precio por unidad: €10.56 Impuesto incluido)

Aceite Bardahl Technos C60 con partículas de fullereno C60

La fórmula exclusiva antifricción BARDAHL POLAR PLUS - FULLERENE


proporciona una capa triple de protección: Una película de lubricante, una zona
de moléculas polares más las moléculas fullereno C60 como mecanismo de
protección final.
Y actúa de la manera siguiente:

• La fórmula POLAR PLUS forma una película molecular lubricante que, fijándose
químicamente sobre el metal, crea una barrera de protección permanente
reduciendo drásticamente la fricción sobre las partes del motor.

• La molécula FULLERENE C60 actúa como nanorodamientos, interponiéndose


entre las partes metálicas, reduciendo la fricción y aumentando la potencia del
motor.
• El FULLERENE C60 adicionado a la FORMULA POLAR PLUS asegura
prestaciones netamente superiores respecto a los lubricantes convencionales. Sus
principales propiedades son:

-Lubricante de rendimiento superior para motores diesel y gasolina de ultima


generación equipados con sistemas post tratamiento de los gases, que requieran
lubricante LOW ASH (bajo contenido en cenizas) Gracias a su exclusiva
tecnología, BARDAHL presenta un lubricante FUEL ECONOMY y alta viscosidad
HTHS.

-Este producto garantiza prestaciones excepcionales en términos de protección


anti-fricción y anti-desgaste, una alta fluidez del lubricante incluso en condiciones
de muy baja temperatura así como una excepcional estabilidad de la viscosidad
con variaciones de temperatura.

-Tecnología LOW ASH por su bajo contenido de cenizas sulfatadas, fósforo y


sulfuro.
-Idóneo para aplicaciones deportivas, gracias a la FORMULA BARDAHL POLAR
PLUS – FULLERENE, que incrementa el rendimiento del motor preservándolo del
desgaste y la corrosión. TECHNOS C60 garantiza una mayor longevidad y una
máxima protección a todos los órganos mecánicos del motor.
NANOTUBOS

En química, se denominan nanotubos a estructuras tubulares cuyo diámetro es del


orden del nanómetro (nm). Existen nanotubos de muchos materiales, tales como
silicio o nitruro de boro. Pero generalmente el término se aplica a los nanotubos de
carbono o CNTs (Carbon Nanotubes),

Los nanotubos de carbono son una forma alotrópica del carbono, como el
diamante, el grafito o los fullerenos. Su estructura puede considerarse procedente
de una lámina de grafito enrollada sobre sí misma. Dependiendo del grado de
enrollamiento y la manera como se conforma la lámina original, el resultado puede
llevar a nanotubos de distinto diámetro y geometría interna. Los nanotubos
conformados como si las esquinas de un folio se uniesen por sus extremos
formando un canuto, se denominan nanotubos monocapa, o SWNTs (Single-
Walled Nanotubes) Existen también nanotubos cuya estructura se asemeja a la de
una serie de tubos concéntricos, incluidos unos dentro de otros a modo de
"muñecas matriuska" y lógicamente de grosores crecientes desde el centro a la
periferia. Estos últimos son los nanotubos multicapa o MWNTs (Multi-walled
Nanotubes). Se conocen derivados en los que el tubo está cerrado por
media esfera de fullereno, y otros que no están cerrados.
grafeno

Hace unos cinco años, el grafeno pasó de ser uno de los muchos materiales
desconocidos por el gran público que los científicos estudian en los laboratorios a
convertirse en el material “maravilla” que ha ocupado y ocupa páginas de la
prensa más seria, tanto general como económica, e incluso el preciado tiempo de
los informativos televisivos y radiofónicos de máxima audiencia. Sirva como
ejemplo la noticia difundida por todos los medios hace unas semanas durante la
presentación por parte de la empresa Grabat de una batería de altas prestaciones
basada en este material. El grafeno, convertido en la nueva piedra filosofal, al
modo alquimista, parece ser la base de los futuros avances tecnológicos en
campos como las telecomunicaciones o la medicina. El futuro parece estar
asociado al grafeno. Pero ¿qué hay de realidad en esta sentencia? ¿Va a
protagonizar, como muchos avanzan, la tercera revolución industrial?

Una buena manera de describir el grafeno es acudir al experimento, llevado a


cabo para lograr su aislamiento, diseñado por Geim y Novoselov, galardonados
con el Premio Nobel de Física en el año 2010. Fijemos nuestra atención en la
punta de un lapicero que está hecha de grafito. El grafito a nivel estructural está
conformado por láminas de carbono en las que éste se dispone de forma
hexagonal. Cada una de estas láminas es lo que conocemos como grafeno.
Apliquemos a la punta del lapicero cinta adhesiva y, de forma indefinida, más cinta
adhesiva sobre los restos de grafito que quedó adherido a la primera y a las
sucesivas cintas adhesivas. En cada paso, las láminas se van desprendiendo una
de otra hasta lograr, al final del proceso, separar láminas aisladas de un átomo de
carbono de espesor (grafeno) que presentan unas propiedades únicas:
prácticamente transparente, más duro que el diamante, más fuerte y flexible que el
acero, mejor conductor eléctrico a temperatura ambiente que cualquier otro
material conocido, excelente conductor térmico, inerte químicamente, etc. Pero no
solo el grafeno como tal es un material destacable; su forma oxidada, el óxido de
grafeno y, especialmente, el óxido de grafeno reducido, presentan propiedades
que les permiten ser usados en múltiples aplicaciones.
Consecuentemente, un gran número de laboratorios de todo el mundo se han
apoyado en estas propiedades para explorar las posibilidades tecnológicas de las
distintas formas que adquiere este material. Algunas menos familiares como las
que aporta a la espintrónica o la fotónica; otras más comunes y más reconocibles
que están incidiendo en campos como el de la desalinazación de agua; las
baterías (mayor capacidad y velocidad de carga); las energías renovables (solar y
eólicas) y nuclear (adsorción de residuos radiactivos); los composites para la
industria automovilística, aeronáutica, naval y ferroviaria (mejorando en los tres
casos la resistencia mecánica del material final, lo que incide en la reducción final
del peso de vehículo y el desgaste de elementos externos en ambientes abrasivos
como los del desierto); la construcción (composites formulados con yeso, cemento
y hormigón y detección de roturas internas de estructuras); la industria textil
(tejidos inteligentes y curtido de pieles); los sensores; la medicina (odontología,
reparación de huesos, regeneración de nervios y tratamiento de cánceres por
liberación inteligente de medicamentos); las pinturas (de base inorgánica y
orgánica); la industria militar (blindaje y protección personal); la impresión 3D; la
electrónica y las telecomunicaciones; el deporte (ropa y elementos como las
raquetas de tenis y pádel), etc. Un aspecto a tener en cuenta y que resulta muy
destacable para la discusión posterior es que la mayoría de los estudios realizados
con composites han demostrado que es necesaria la presencia de apenas un
0.1% en peso de grafeno en el producto final para que éste adquiera las
propiedades deseadas.

No es sorprendente que la Unión Europea aprobara y pusiera en marcha en 2013


el programa Graphene Flagship. Dotado con un presupuesto de más de 1.000
millones de euros, su propósito es aunar el conocimiento de los investigadores
europeos y allanar el camino para la irrupción del grafeno, en un plazo de diez
años, en la industria y sociedad europeas como modo de generar riqueza y
empleo y devolver el protagonismo tecnológico a Europa. Aparte de estas
iniciativas globales, diversos países europeos están impulsando de forma
particular la investigación y aplicación de este material. Una de las consecuencias
del programa Graphene Flagship es el establecimiento de la hoja de ruta del
grafeno y sus aplicaciones más allá de 2023. Según los datos mostrados en la
misma, el grafeno no sólo afectaría a la tecnología futura y a la calidad de vida de
la humanidad sino que podría liderar una nueva revolución industrial y ser el
material que defina el siglo XXI.

Hasta ahora se han enumerado las expectativas del grafeno. Sin embargo, ¿qué
representa el grafeno a día de hoy?, ¿qué se puede esperar del grafeno en el
medio plazo? y ¿liderará la industria de los países europeos, y por extensión la
española, la producción de este material y sus aplicaciones?

Vayamos por partes. Los distintos estudios e iniciativas para desarrollar procesos
de producción simples y reproducibles y aplicaciones concretas no han pasado
prácticamente de la escala de laboratorio. Actualmente, un gramo de grafeno
cuesta unos 100 euros. Esta situación junto con la falta de estandarización de los
productos que cada compañía fabrica ha impedido que el mercado del grafeno
haya despegado. Se espera que para el año 2020 su valor alcance los 110
millones de euros, lo que no parece justificar el esfuerzo económico mundial que
se está empleando para desarrollar una economía basada en el uso del grafeno.
En este sentido, Andrea Ferrari, uno de los líderes de la iniciativa Graphene
Flagship, declaraba en 2014 que harían falta 15 años para ver un desarrollo
comercial completo de productos que incorporen este nanomaterial. Hasta la
fecha, pocos productos comerciales que incorporen grafeno pueden ser
encontrados en el escaparate de una tienda. La marca HEAD lo ha introducido en
sus raquetas y la española Graphenstone en sus pinturas. En ambos casos, el
material se incorpora a una matriz polimérica o a una pintura en unas cantidades
los suficientemente pequeñas como para que, a pesar del coste del material, el
aumento del precio del producto final se vea compensado por las excepcionales
propiedades que el grafeno le aporta.

En este sentido, existe el temor de que ocurra como con los nanotubos de
carbono. Las expectativas fueron tan altas y la demanda tan baja que muchas de
las empresas que invirtieron en la producción de este material quebraron. La
sociedad europea no puede permitirse una inversión tan elevada como la
efectuada para el Graphene Flagship sin que se llegue a resultados que impacten
sobre el tejido productivo continental. En este sentido, la Unión Europea está
tratando de corregir estas deficiencias estructurales a través del programa
Horizonte2020 mejorando el vínculo entre la investigación básica y el crecimiento
económico, lo que debería redundar en una mayor creación de empleo y riqueza.
No hay que olvidar tampoco que es necesario que se impulsen también medidas,
desde las propias instituciones europeas y nacionales, que provoquen un cambio
de actitud de los investigadores europeos. Muchos de ellos están más
interesados en divulgar, con el mayor impacto posible entre sus colegas, el
resultado de sus investigaciones que en la transferencia tecnológica de las
mismas. Es muy descorazonador oír comentarios de empresarios de otras zonas
del mundo como el siguiente: “Europa genera conocimiento; nosotros generamos
negocio con ese conocimiento”. Más lo es aún que los propios investigadores
europeos se enorgullezcan de que Europa lidere la investigación en temas
científicos punteros (como el del grafeno) pero no parezca importarles que otras
regiones del mundo lideren la industrialización de las aplicaciones que se generan
en los laboratorios, como si esta actividad fuera menor. Sin crecimiento económico
resulta difícil financiar una investigación de excelencia.

En cualquier caso, hay que mirar el futuro con una cierta esperanza siempre que
se definan políticas claras de actuación (a modo de los planes quinquenales
chinos) y se aprovechen las potencialidades que cada país tiene. Así, sin entrar en
debates de mayor calado sobre si el grafeno protagonizará o no la siguiente
revolución industrial, este material podrá ser una parte importante del desarrollo
tecnológico futuro si se dan las siguientes circunstancias que se enumeran a
continuación.

En primer lugar, hay que lograr la simplificación de los procesos de producción de


grafeno y sus derivados, de manera controlada y reproducible, con costes, en
algunos casos, cien veces inferiores a los actuales.
En segundo lugar, cualquier desarrollo que parta del laboratorio se ha de hacer
con productos (grafeno) comerciales. Esta es la única garantía de que la
aplicación que se plantee comercializar tenga visos de ser trasladada a escala
industrial.

En tercer lugar, hay que superar el escepticismo de las potenciales compañías


que podrían introducir estos nanomateriales en sus productos y procesos. Este
escepticismo viene generado en muchos casos por el desconocimiento, por parte
de las compañías, de las propiedades reales de estos nanomateriales y las
mejoras que los mismos podrían introducir en sus líneas de productos. Esta
situación mejoraría si existiera una mejor interacción entre, por una parte, las
compañías interesadas, y, por la otra, las empresas que los producen y los
investigadores que los manipulan a escala de laboratorio. Esta sencilla interacción
podría dar lugar, con el pertinente apoyo institucional, a transferencias
tecnológicas desde el sector académico al privado mejorando la tasa de retorno de
la inversión dedicada a la I+D.

En cuarto lugar, tras conseguir superar la reticencia inicial de las compañías a


introducir estos nanomateriales en sus productos, queda otra dificultad, que a
veces lastra de forma definitiva la introducción de estos materiales, y es el rechazo
de éstas a modificar procesos que llevan años funcionando sin problemas
técnicos. La experiencia del autor de este artículo es que ha de establecerse la
confianza suficiente entre la empresa y el experto que la asesora como para que
éste pueda conocer con un cierto detalle el proceso de fabricación. Más de un
fabricante se ha sorprendido cuando las sugerencias propuestas para la
incorporación de estos nanomateriales en su proceso no solo no aconsejaban
modificar su procesos sino que requerían de aparatos existentes en el proceso
que se usaban de forma colateral y que, con la incorporación del grafeno o sus
derivados, adquirían una nueva importancia.

Me gustaría finalizar mi artículo hablando del potencial del grafeno para la


industria española. En España existe un gran número de empresas,
esencialmente pequeñas y medianas, con una gran capacidad de innovación pero
con una falta importante de especialistas de I+D en sus plantillas. Tras la crisis,
muchas de ellas se han convencido de que el único camino para sobrevivir y
crecer es mejorar sus productos y procesos aunque carezcan de recursos para
realizar grandes inversiones. Entre ellas, sin embargo, hay una gran confusión
respecto al grafeno, ya que la mayoría de las noticias relativas a sus potenciales
usos se centran en aplicaciones de carácter electrónico cuya industria no es
actualmente la más importante en nuestro país.

Aunque en un futuro no se descarta el que haya empresas nacionales que


impulsen desarrollos en este campo, el tejido productivo español que está más
preparado o debería estar más receptivo a la introducción de estos nanomateriales
en sus productos debería ser el de los materiales y composites (plásticos, resinas,
adhesivos, cerámicos, metálicos, etc.). Piénsese que la incorporación de estos
nanomateriales puede ser muy sencilla e inmediata; no requiere en la mayoría de
los casos cambios del proceso que cada empresa opera sino de pequeñas
modificaciones de sus parámetros; que la cantidad de grafeno o sus derivados que
se incorpora no suele exceder el 0.25% en peso, lo que no lastrará excesivamente
el precio del producto final dada la bajada del precio del grafeno que se espera en
un futuro inmediato y las claras mejoras que su introducción pueden introducir
(reducciones significativas del peso de estructuras constructivas y de automóviles,
aviones o barcos, por poner un ejemplo); y que la ventaja competitiva de las
empresas españolas en estos campos con respecto a otras foráneas supondría un
espaldarazo definitivo para mantener su existencia y ganar mercados fuera de
nuestro país.
3. ¿Cómo se puede medir la exposición a nanomateriales?
Los métodos de medición que se deben utilizar dependen del tipo de exposición.
Los métodos más fiables son aquellos para las partículas en el aire. El contacto
con sólidos y líquidos puede ser un factor a tener en cuenta, especialmente en los
productos de consumidor.

Las técnicas actuales para evaluar la exposición a nanopartículas son aptas para
el control personal o de espacios, para un uso continuado o puntual, y para la
caracterización básica de muestras. Sin embargo, los datos de las exposiciones
aéreas son escasos y son pocos los estudios llevados a cabo fuera del lugar de
trabajo, si es que los hay.

Las estimaciones de exposición de alimentos y productos de consumo también


son difíciles. La información de la presencia de nanomateriales fabricados la
facilitan las fábricas. También es limitada la información proporcionada sobre el
uso del producto.

4. ¿Cuáles son los efectos potenciales de los nanomateriales en la salud?


Hay evidencias experimentales de la existencia de una variedad de posibles
interacciones entre nanopartículas fabricadas con sistemas biológicos así como de
efectos en la salud. En sistemas experimentales de laboratorio pueden propiciar la
formación de cúmulos proteínicos fibrosos que pueden ser similares a los que
aparecen en algunas enfermedades, incluidas enfermedades cerebrales. Las
partículas aéreas pueden provocar efectos en los pulmones, pero también en el
corazón y en la circulación sanguínea, similares a los ya conocidos provocados
por partículas de polución aérea. Existen algunas evidencias de que las
nanopartículas podrían provocar daños genéticos, ya sea directamente o por
inflamación.
Todos estos efectos dependerán de la suerte que corran las nanopartículas en el
cuerpo. Tan solo pequeñas dosis de estas nanopartículas escapan de los
pulmones o del intestino, pero una exposición prolongada puede implicar que un
gran número de ellas se distribuyan por el cuerpo. La mayoría permanecen
retenidas en el hígado o el bazo, pero algunas parece que llegan a todos los
tejidos y órganos. También es posible que penetren en el cerebro a través de las
membranas nasales.
Conclusión

Cuando se manipula la materia a la escala tan minúscula de átomos y moléculas,


demuestra fenómenos y propiedades totalmente nuevas. Por lo tanto, científicos
utilizan la nanotecnología para crear materiales, aparatos y sistemas novedosos y
poco costosos con propiedades únicas Sus extraordinarias propiedades aseguran
una revolución en los modos en que los materiales y productos van a ser
obtenidos, siendo la investigación a nanoescala de interés para industrias
tales como: productoras de cerámicas, metalurgía, láminas delgadas, electrónica,
materiales magnéticos, dispositivos ópticos, catalizadores, almacenamiento de
energía y biomedicina.Con el paso del tiempo los nanomateriales tomaran mas
auge en la industria…siendo el futuro de para la producción de materiales.

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