DIOS EN MALAS COMPAÑIAS

Nuestro tema esta noche es "Dios en Mala Compañía". Quiero empezar por leerle desde Salmo 20: 1. La
Biblia dice: "El Señor te oye en el día de la angustia; El nombre del Dios de Jacob te defiende ". Hay algo
extraño en ese texto. Tenemos algunos proverbios que son comunes en varias partes del mundo. Uno
de ellos es: "Un hombre es conocido por" - ¿qué? "La compañía que mantiene." Eso es correcto. Aquí
hay otro: "Aves de una pluma" - ¿qué? "Juntas". En otras palabras, generalmente nos asociamos con
parecidos. Un hombre inmundo no disfruta de la compañía de un individuo puro y noble, y viceversa.

En las Escrituras hay advertencias claras contra mantener mala compañía. 2 Tesalonicenses 3:14 es uno
de ellos. La Biblia dice: "Si alguno no obedece nuestra palabra por esta epístola ... no tiene compañía con
él". Otro texto es Romanos 16:17. La Biblia dice: "Marquen a los que causan divisiones y ofensas ... y
evítelos". En otras palabras, no se asocien con mala compañía.

He leído un artículo hace algún tiempo en el nombre de caída. Al parecer, este es el deporte favorito en
Hollywood, California. Así que muchos aspirantes se reúnen allí, con la esperanza de que la rica en el
espectáculo, y en comparación con los que vienen, los que lo hacen son relativamente pocos. Así que si
vas allí, la gente está trabajando como camareras y camareras y chóferes, personas que esperan algún
día para obtener un gran descanso en el mundo del espectáculo. A muchos de ellos les encanta ir a
fiestas y tratar de estrechar la mano con una estrella o un productor, y si pueden hacerlo, entonces lo
hablarán y dejarán esos nombres como si fueran buenos amigos! Nombre cuentagotas. Por lo general
son personas que no han logrado mucho, pero que están tratando de ganar con el prestigio de otro. Y a
veces funciona. Como resultado de la caída del nombre, la gente ha sido admitida en lugares donde de
otra manera no podría ir. Se les ha concedido crédito que de otro modo no podrían tener, simplemente
porque dejaron nombres.

Pero volvamos a nuestro texto de apertura. ¿Podría ser que el gran Dios del cielo caiga en su nombre?
¿Por qué iba a decir, "el Dios de Jacob te defiende?" ¿Es posible que algún nombre pudiera añadir brillo
al nombre del Señor? ¿Y por qué ese nombre? Si Dios va a llamar gota, ¿por qué Jacob? El nombre Jacob
tiene una mala connotación. Jacob significa ladrón, con-hombre, uno que toma por fraude. Me parece
que si Dios va a dejar caer nombres podría decir: "Yo soy el Dios del ángel Gabriel", ese ángel brillante
que estaba en el lugar del Lúcifer caído. Gabriel, que es conocido por su devoción a Dios y su lealtad y
fidelidad. O Dios podría haber dicho, "Yo soy el Dios de Melchizadek", impecable sacerdote de Salem, un
hombre con una impecable reputación. Pero Él no lo hizo. ¿Por qué Dios no dijo: "Yo soy el Dios de
José", un joven de tanta integridad que prefirió ir a la cárcel en vez de hacer el amor con una hermosa
mujer que pasó a ser la esposa de su amo? ¿Por qué Dios no dijo: "Yo soy el Dios de la virgen María",
una virgen tan pura y tan limpia, tan humilde y tan sumisa a los dictados e impulsos santos de Dios que
fue escogida para llevar en su cuerpo al Cristo ¿niño? ¿Por qué dijo: "Yo soy el Dios de Jacob"? Y Dios lo
hizo una y otra vez. ¿Qué tipo de compañía es para que Dios asocie Su nombre? Deberías echar un
vistazo a Jacob.

Era un ladrón y un con-hombre. Engañó a su papá viejo con respecto a la bendición del derecho de
nacimiento y él engañó a su hermano Esau fuera de lo que era legítimamente suyo. Como primogénito,
Esaú tenía derecho a la primogenitura en su familia, lo que significaba que debía ser sacerdote del
hogar. Debe obtener la mayor parte de los bienes de su padre, y debe ser progenitor del Mesías
prometido. Eso es lo que involucra el derecho de nacimiento. ¡No es de extrañar que fuera tan precioso!
Bueno, Jacob inventó un plan que implicaba a su madre, que engañó y engañó a su anciano padre, robó
esa primogenitura, y cuando Esaú lo averiguó, iba a matar a su hermano tan pronto como él pusiera los
ojos en él. Y Jacob tuvo que huir para salvar su vida. Corrió tan duro y tan largo que finalmente, agotado,
cayó al suelo y, sin tener más que una piedra para una almohada, se fue a dormir.

Mientras dormía, se le apareció una visión. Vio una escalera extendida de la tierra al cielo y ángeles
ascendiendo y descendiendo en esa escalera (Génesis 28: 12-13). Cuando tuvo esa visión, el Señor se le
apareció y le dijo: "La promesa que hice a Abraham e Isaac se cumplirá en tu simiente". El Señor ratificó
la primogenitura con Jacob. Jacob se levantó y agradeció a Dios. Pero tuvo miedo de volver a casa, y bajó
a Mesopotamia. Allí vio a una muchacha hermosa y decidió que quería casarse con ella. Entonces él fue
a ver a su padre, que era un ladrón llamado Labán, y dijo: "Claro, si trabajas para mí durante siete años,
puedes casarte con ella." Después de la boda, se enteró de que Labán lo había engañado. Terminó con la
hermana mayor de Rachel, Leah. ¡Eso debe haber sido una sorpresa! Así que trabajó otros siete años
para Rachel. Pero a pesar de todo esto, el Señor prosperó a Jacob y finalmente decidió que era hora de
ir a casa para heredar la promesa. Mientras viajaba, Jacob envió a algunos de sus hombres para ver
cómo era la tierra, y en poco tiempo regresaron. "Jacob, tenemos malas noticias. Tu hermano Esaú
viene a buscarte. Tiene cientos de hombres armados. Viene como un hombre que va a la guerra.

Ahora, Jacob sabe que no tiene una oportunidad contra Esaú, y su fe es probada, porque Dios le dijo que
heredaría la promesa y sería el padre de muchas naciones. ¿Había cometido un error? Jacob se separó
de su familia. Caminó solo a través del arroyo Jabbok, y allí cayó y comenzó a derramar su corazón a
Dios.

Señoras y señores, hay momentos en que su familia no puede ayudarle. Hay momentos en que tus
amigos no pueden ayudarte. Hay momentos en que sólo Dios puede ayudar. ¿Dirías Amén? Jacob estaba
allí afuera en la oscuridad orando, y de repente alguien se apoderó de Jacob y comenzó a luchar con él.
Se nos dice que bandidos y ladrones eran comunes en esa región, y tal vez Jacob pensó que uno de ellos
lo había pillado. Jacob estaba luchando por su vida. Siguió durante hora tras hora, y él estaba
emparejando la fuerza con quienquiera que fuera. Luchaba, rezaba y lloraba al mismo tiempo. Pero de
repente este visitante lo tocó en el muslo y lo paralizó. Al instante, Jacob reconoció que estaba luchando
con el Señor.

Jacob exclamó: "No te dejaré ir hasta que me bendigas." Ahora, Jacob no se jactó de su fuerza física.
Sabía que estaba en presencia de Dios y tal arrogancia le habría costado la vida. Jacob estaba diciendo,
voy a aferrarme a Dios. Estoy en un tiempo de grandes problemas, pero voy a confiar en Dios. Voy a
creer la Palabra de Dios. Fue entonces cuando el Señor dijo: "¿Cuál es tu nombre?"

Ahora, el Señor sabía su nombre, pero quería que Jacob admitiera lo que era. "Mi nombre es Jacob,
Señor." Todo el mundo había oído hablar de Jacob, el tramposo, el engañador. Mi nombre es Jacob.

-Bueno, voy a cambiar tu nombre. Desde ahora, serás llamado Israel, porque has luchado con Dios y
prevalecido. "

Por cierto, quiero decirte que Dios todavía puede cambiar tu nombre. Algunos de ustedes tienen mala
reputación, pero Dios puede cambiar su nombre. Esa es la gloria de Dios como viene a descansar sobre
el alma convertida. Él es capaz de cambiar sus formas tanto que usted consigue una nueva reputación
alrededor de la ciudad. A pesar de que Dios cambió el nombre de Jacob a Israel, y aunque una y otra vez
se refirió a sí mismo como el Dios de Israel, de vez en cuando, sólo para alentar a los perdidos, sólo para
decir algo a gente no buena, se llama a sí mismo El Dios de Jacob. Lo que Él está haciendo es dejar caer
el nombre: usando un nombre que no significa nada para recordarles a ustedes ya mí que Dios mantiene
mala compañía. Dios vendrá en ayuda del peor pecador en este auditorio esta noche. Él puede salvar a
la persona más podrida aquí que viene a Él por fe.

La Biblia está llena de otros ejemplos de otras personas indeseables que el Señor ayudó y salvó por Su
gracia. En Hebreos 11 encontramos el rol de honor de Dios de hombres y mujeres que eran gigantes de
la fe. Comienza con Abel, después con Enoc, luego con Noé, luego con Abraham, luego con Jacob, y
luego de repente llegas al versículo 31 de Hebreos 11. La Biblia dice: "Por la fe Rahab, la ramera, no
pereció con los que creyeron No, cuando ella había recibido a los espías con paz. "Ahora, apenas en caso
de que usted no sepa la palabra, una prostituta es una prostituta, una señora de la calle. Y aquí en el rol
de honor de Dios es el nombre de una prostituta que venció por la fe.

¿Quién era esta mujer Rahab? Ella era una prostituta en Jericó y un día, es posible, bajó a encontrarse
con la caravana que venía del desierto. Conocía a menudo a estos hombres. Tenía en sus prendas
especiales que identificaban su oficio. Tenía en la cadena de oro de su frente, su cara y sus labios muy
pintados, y su pequeño libro negro en la mano. Bajó al pozo donde los viajeros se detuvieron para regar
sus bestias, salvo que esta vez hubo entusiasmo por el pozo. La gente habla de un Dios que liberó a tres
millones de esclavos; Hablando de un Dios que llevó a estos esclavos a las orillas del Mar Rojo, con
montañas al sur y el ejército egipcio acercándose rápidamente, y cómo Dios había abierto un camino en
medio del mar para que pudieran ser liberados. Rahab oyó hablar de un Dios que derribó pan del cielo
cuando Su pueblo tuvo hambre, y mientras escuchaba, la fe brotó en su corazón. Ella corrió a casa y se
lavó la cara. Se quitó la ropa que llevaba puesta. Ella rompió su pequeño libro negro y ella comenzó a
hacer preguntas alrededor de la ciudad: "¿Alguien sabe algo acerca de ese Dios?" La gente pensó que
había perdido la cabeza.

-¿Qué te pasa, Rahab? Has estado haciendo un montón de dinero. ¿Por qué te excitas tanto? No viste a
Dios abrir el Mar Rojo. No viste a Dios agua de lluvia de una roca seca. No viste a Dios llover pan del
cielo. "

Y Rahab respondió: "Es verdad, no lo vi. Lo acabo de oír, y creo.

Cuando los espías del campamento de Israel llegaron a Jericó, Rahab ayudó a ocultarlos y, cuando se
prepararon para irse, dijo: "Escucha, yo creo en tu Dios. Creo que El te va a dar esta tierra. Creo que Él
va a darte la victoria. Te lo pido entonces, porque creo, te pido que me perdones la vida cuando vuelvas.

Los hombres de Dios dijeron: "Está bien. Tú tomas una cuerda roja y la cuelgas en la ventana de tu casa
(Jos 2:18). Y cuando volvamos, vamos a buscar una casa con una cuerda roja en la ventana, y
quienquiera que esté en esa casa vivirá. "

Tan pronto como se fueron, lo primero que Rahab hizo fue conseguir esa cuerda y meterla en su
ventana. Quería asegurarse de que había hecho lo que se le pedía. Colgó el cordón rojo en la ventana.
Rojo, que es el símbolo de la salvación, la sangre de Jesús derramada por nuestros pecados. Cuelgúelo
donde pueda verse. No se avergüence de estar del lado del Señor. ¿Dirías Amén?

Cuando Josué y sus ejércitos vinieron en batalla contra Jericó, fue el Señor quien hizo que las paredes se
derrumbaran. Pero había una casa en la pared que estaba parada: había un cordón rojo colgado en la
ventana. Dios honró la fe de una mujer que había sido una prostituta, y la salvó por Su gracia.
Déjame decirte algo aún más asombroso. Cuando usted se vuelve a Mateo 1 y lee la genealogía terrenal
de Jesús, continúa con todos estos begats. Entonces en Mateo 1: 5 la Biblia dice: "Salmón engendró a
Booz de Rahab." Espera un minuto. ¿Qué está haciendo allí, en el árbol genealógico del Señor? Yo les
digo, amigos, cuando el Señor se apodera de ustedes, Él cambia sus caminos. ¿Amén? Esta mujer de
baja reputación se puso de acuerdo por la gracia de Dios, y se hizo tan deseable y tan digna que un
hombre decidió que quería casarse con ella, y tuvieron un bebé llamado Boaz, que cuando era mayor vio
a Ruth Recogiendo en los campos y se casó con ella, y tuvieron un hijo llamado Obed, que tenía un hijo
llamado Jesse, cuyo hijo menor era David. Y Jesucristo es de la raíz y descendencia de David. Sí, Dios
mantiene mala compañía. En el árbol genealógico de Jesucristo es una prostituta que venció por la
sangre del Cordero.

Me gusta eso. Eso me da esperanzas esta noche. Hay momentos en que usted hace un lío tan podrido de
su vida que su propia madre o padre no quiere ser molestado con usted. La gente de tu vecindario ni
siquiera quiere mirarte cuando pasan. Bueno, quiero decirte esta noche, cuando tu vida es un desastre
que ni siquiera puedes mantener la cabeza en buena compañía, cuando nadie quiere molestarse
contigo, hay un Dios en el cielo, y Él llegará abajo Y decir, Cuando nadie más te quiere, te llevaré. Te
llevaré. "Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar" (Mateo 11:28).

Sólo otra historia de aliento de la Palabra de Dios. La Biblia me habla de una mujer atrapada en
adulterio. Si lees la Versión King James, dice que ella fue "atrapada en el acto". La ley de Moisés dijo que
ella debería ser apedreada hasta la muerte - ¡de inmediato! Y por cierto, la ley de Moisés dijo que el
hombre también debía ser apedreado hasta la muerte, pero en el tiempo de Cristo los hombres, que
corrió todo, habían ajustado la ley que sólo la mujer murió y el hombre que estaba Capturado con ella
podría ayudar a piedra.

Así que la atraparon y como la gente de hoy, crearon una gran escena. De alguna manera, les hizo
parecer un poco más santo para frotar a alguien más en la tierra. Arrastran a esa mujer fuera de la casa
y por las calles ocupadas, y rápidamente una multitud se reúne. Todo el mundo está recogiendo rocas y
caminando por detrás. La mujer atrapada en el adulterio ni siquiera tiene el valor de mirar hacia arriba.
Mientras la sacan de la ciudad, algunos de los líderes religiosos tienen una idea. "Este hombre Jesús ha
estado interfiriendo con nuestra autoridad. Vamos a llevarla a El. Si Él dice que la piedra, entonces la
gente le dará la espalda. ¡Si Él le dice que la deje ir, entonces está contradiciendo la ley de Moisés, y
también lo apedrearemos! "Parecía un plan perfecto.

Finalmente, llegan al lugar donde Jesús está enseñando. La multitud se separa, y la mafia arrastra a esta
pobre mujer al centro y la golpea a los pies de Jesús. Déjeme hacer una pausa para decir esto: Cuando
usted ha hecho un lío de su vida, ese es el mejor lugar en la tierra para ser - a los pies de Jesús. ¿Dirías
Amén? La echan en un montón arrugado a los pies de Jesús. Pero el Señor ni siquiera la mira. En lugar de
eso, Él los mira y dice: "Que el que está sin pecado eche la primera piedra". Mientras ellos están
pensando en eso, Él se agacha y con Sus ojos en ellos, Él comienza a escribir en la arena. La Biblia no nos
dice exactamente lo que escribió, pero sin duda Él escribió sus pecados. Había mentirosos allí listos para
apedrear a alguien, y escribió en la arena, MENTIROSOS. Y esos mentirosos lo miraron, y le miraron. Y
dejaron caer sus piedras y se alejaron. Entonces, Jesús escribió EXTORCIONISTAS, y ellos lo miraron, y
dejaron caer sus rocas y se fueron. Entonces escribió ADULTERERS, y un montón de rocas cayeron.
Siguió escribiendo hasta que todos los hipócritas habían dejado caer sus piedras y se alejaron.
Finalmente, cuando todos se fueron, y fue sólo Jesús y este pecador, Él le habló. "Mujer, ¿dónde están
tus acusadores?"

Aquella mujer oyó ahora un tono de voz diferente. Ella oyó la voz de Dios y la voz de Dios es una voz de
misericordia y compasión y compasión y perdón. Cuando lo oyó, encontró coraje para levantar la cabeza
y mirar a través de los ojos enrojecidos. Cuando miró a su alrededor, no vio nada más que un montón de
rocas, y la Roca de las Edades. Entonces ella miró a Jesús, y dijo, "¿Ningún hombre, Señor?" Ahora, eso
era más una pregunta que una declaración. En otras palabras, Señor, escuché lo que dijiste, y sé por qué
se fueron. Se fueron porque no eran dignos de apedrearme. Pero eres digno. Tú, Señor, eres puro y
santo y tú eres el Hijo de Dios. Nunca has pecado. Tienes derecho a tomar estas piedras y matarme.
¿Vas a hacerlo?

Y Jesús, que guarda mala compañía, dijo: "Ni yo os condeno." Tampoco yo os condeno. Note que Jesús
no dijo: "Ni yo condeno el adulterio". Él no dijo: "Yo tampoco condeno el pecado". Él dijo: "Yo no te
condeno." Esa señora nunca volvió a ser la misma. Había oído la voz de Dios hablando de perdón y paz
en su corazón. Y señoras y señores, esa señora fue la última en dejar la cruz y la primera en llegar a la
tumba vacía. Ella era la que llevaba la palabra a los discípulos de que Cristo había resucitado de entre los
muertos.

Ah sí, amigos míos, hay esperanza para ustedes. Hay esperanza para mí. Jesús se inclinó hasta el fondo.
Nuestro Dios guarda mala compañía. No importa lo que haya hecho, no importa lo que esté haciendo,
hay ayuda cercana a través de Jesucristo nuestro Señor. Él salvará al extremo a los que vienen a Él por
fe. La Biblia tiene esta palabra de esperanza en Juan 3:16. Díganlo conmigo: "Porque de tal manera amó
Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas
tenga vida eterna". Jesús pagó con su vida para salvar a los pecadores. Se inclinó todo el camino hasta el
fondo para llegar a usted ya mí. Dios guarda mala compañía. El pecador más triste aquí esta noche
puede ser salvado e ir al cielo si quiere, y si tienes buen sentido, deberías desearlo. ¿Qué estás diciendo?

Si quieres decir esta noche, Jesús, he oído Tu Palabra. Creo que hay esperanza para mí. Sálvame,
límpiame mis pecados, y dame la victoria en mi vida, y ayúdame a hacer Tu voluntad. Si ese es el deseo
de su corazón, quiero que todos ustedes se pongan de pie conmigo ahora mientras oramos. Hazlo
ahora.

Oh bendito Señor, aquí estamos de nuevo. Conoces nuestro pasado. Conoces nuestro presente. Pero te
damos gracias porque nos aceptas tal como somos cuando venimos a ti por la fe. Llévanos Señor, lava
nuestros pecados y haznos totalmente Tuyos, y salvaos en Tu reino. Lo pedimos en el nombre de Jesús.
Amén.