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EL DIFÍCIL EQUILIBRIO ENTRE LA CRIANZA Y LA EDUCACIÓN SUPERIOR

UNIVERSIDADES Y ORGANISMOS DE FINANCIACIÓN DEBERÍAN APOYAR MEJOR A LOS PADRES EN LOS CICLOS SUPERIORES.
JANICE ALLEN | 11 junio de 2014

El apoyo a los padres canadienses en los ciclos superiores de estudio varía según la universidad y la
agencia financiera. Aunque algunas instituciones ofrecen un apoyo considerable, estos padres son
propensos a tener que superar dificultades sin precedentes para continuar sus estudios. La evolución del
perfil de egreso del estudiante canadiense exige que nos tomemos más en serio el papel de la familia en el
plan de estudios.

El reto vinculado al logro del equilibrio entre la familia y el trabajo no es nuevo pero ha recibido una
atención especial en el contexto universitario. Las dificultades que enfrentan los profesores jóvenes,
especialmente las mujeres, para cumplir con las exigencias de la vida académica, sumado al cumplimiento
de sus responsabilidades familiares, es lo que provoca el debate. Esta discusión incluso incluye a
investigadores postdoctorales, particularmente a la luz del reciente debate sobre su estado (con el fin de
determinar si son empleados de la universidad o no).

Los estudiantes graduados, a pesar de que no son empleados de la universidad, son esenciales para la
comunidad de investigación y tienen que superar los mismos obstáculos que los profesores e
investigadores postdoctorales a medida que trabajan para establecer su reputación en el mundo
académico. También es de destacar que el promedio de edad de los estudiantes graduados, que es
aproximadamente entre 27 y 39 años (para los estudiantes recién admitidos en la Universidad de Alberta y
Universidad de British Columbia) concuerda con la edad media de las mujeres canadienses que dan a luz
(que promedia entre 28 y 30 años).

Aunque algunos aspectos de la estructura de ayuda para que los padres se gradúen cambia relativamente
poco de una universidad canadiense a otra, muchas características varían. La mayoría de las escuelas
ofrecen un permiso parental por hasta 12 meses durante los cuales los estudiantes no tienen que llevar a
cabo investigaciones o la docencia. Muchas escuelas también retrasan el momento de la graduación en
función de la duración del permiso parental.

Sin embargo, el apoyo financiero difiere considerablemente de una institución a otra. Algunos, como la
Universidad de Waterloo y la Universidad de Alberta, proporcionan beneficios de entre 55 y 95 por ciento
de los derechos de asignacion o beca ordinaria durante la licencia. Wilfrid Laurier University ofrece algún
apoyo financiero, pero sólo para los estudiantes de doctorado. La mayoría de las instituciones, incluyendo
la Universidad de Toronto, la Universidad McGill y la Universidad de Calgary, no proporcionan una licencia
parental remunerada para los estudiantes graduados que ellos apoyan. La Universidad de Alberta también
ofrece cuidado infantil subsidiado para aquellos que lo necesitan.

Los estudiantes que reciben el apoyo de los tres organismos de subvención de Canadá tienen derecho a un
permiso parental remunerado que varía las condiciones según los casos. Los titulares de una beca de los
Institutos de Investigación de Salud de Canadá pueden solicitar seis meses de vacaciones pagadas,
mientras que los que reciben una beca del Consejo de Investigación de Ciencias Naturales e Ingeniería de
Canadá reciben sólo cuatro meses de ayuda. Los titulares del Consejo de Investigación de Ciencias
Humanas no reciben ningún beneficio de la licencia parental. Los estudiantes que poseen una beca de los
tres organismos que tienen derecho a los beneficios del seguro de empleo (que son por lo general mucho
más bajos que los beneficios relacionados con su beca) no reciben ningún beneficio adicional durante la
licencia.

Es importante tener en cuenta que la mayoría de los estudiantes graduados no son elegibles para los
beneficios del seguro de empleo mientras dura su licencia parental, ya que su beca no está sujeta a
impuestos y no tienen que pagar las primas al seguro de empleo (y que no se les permite hacer tampoco).

Yo tuve dos hijos durante mis estudios (en curso) en la Universidad de Dalhousie. En el nacimiento de mi
primer hijo, mis beneficios fueron pagados por la universidad, y yo no era elegible para la ayuda financiera
de la universidad o en el seguro de empleo. Solamente pude tomar dos semanas de descanso antes de
regresar a la Universidad, sobre todo porque no podía permitirme prolongar mi licencia sin sueldo.
Durante mi segundo embarazo, que era titular de una beca del Consejo de Investigación de Canadá en el
estudio de las ciencias naturales y de ingeniería, ahí si pude disfrutar de cuatro meses de vacaciones
pagadas. Este apoyo me ha ayudado mucho: sin carga financiera, pude dedicarme a los primeros meses de
la vida de mi hijo y luego pude retomar mis estudios con un interés renovado.

Recientemente, la discusión ha puesto de relieve una serie de factores motivacionales que empujan a los
estudiantes a acceder a los ciclos superiores, la necesidad de diversificar las experiencias en programas de
postgrado y la cuestión de la valoración de carreras postdoctorales fuera del campus. La decisión de formar
una familia en el curso de los estudios superiores es otro aspecto de esta discusión porque pone de relieve
la brecha entre las expectativas de la apuesta por la investigación y el deseo de las estudiantes de lograr un
equilibrio, un hecho comprobado entre las mujeres cuyos embarazos recuerda, sin duda, que ellas han
decidido no centrar su vida solamente en la investigación.

La falta de uniformidad en las formas de apoyo que se ofrecen a los padres/madres estudiantes
canadienses muestra una falta de respeto en relación a la importancia de apoyarlos en sus estudios. El
hecho de formar una familia no debe ser un obstáculo para el éxito académico tanto si uno es un docente
como investigador postdoctoral o estudiante de grado.

Janice Allen es una estudiante doctoral en el Departamento de Ciencias de la Tierra de la Universidad de


Dalhousie.

http://www.affairesuniversitaires.ca/opinion/a-mon-avis/le-difficile-equilibre-entre-la-parentalite-et-les-
etudes-superieures/

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