Mientras que el proceso de fermentación implica la apertura y el cierre manual de las válvulas,

los operadores utilizan el DCS para controlar el sistema de manejo de granos, los molinos, la
olla, las temperaturas, los agitadores y las bombas. Todo está ligado al sistema PCS 7 ", dice
Ashley. El proceso de destilación comienza cuando el maíz, la cebada malteada y el centeno se
someten a dos diferentes cocciones de puré. Agrega que Four Roses tiene un mayor
porcentaje de centeno en el puré de centeno que cualquier otra destilería, lo que le da al
producto final un final muy picante. El proceso cocina estos granos de cereal, haciendo que
almidones e hidratos de carbono estén disponibles para que la levadura metabolice más
adelante en el proceso. "Estamos golpeando hacia arriba de 212 a 146 ° F para activar ciertas
enzimas que están disponibles en el grano y finalmente hacen que esos almidones estén
disponibles. Los almidones son largas cadenas de carbohidratos o azúcares que la levadura
querrá comer más tarde para producir el alcohol ".

El puré se enfría y se envía a tanques de fermentación de madera de ciprés donde se agrega

una de las cinco cepas de levadura diferentes. "La levadura es un organismo vivo y necesita
cierta temperatura y ambiente", dice Ashley. "Por lo tanto, es fundamental alcanzar la
temperatura y concentración correctas de grano de cereal y agua". Los subproductos de la
fermentación se conocen como vinagre grueso y fino. La destilería coloca el fluido fino, que es
muy ácido, en los tanques de fermentación para ajustar el pH. Durante los próximos cuatro
días, el puré fermentará (convirtiéndose en cerveza de destilería) en un contenido de alcohol
de aproximadamente 8% a 10%. El puré se pasa por una columna donde cae en cascada sobre
los platos. Mientras el puré se desplaza hacia abajo, el vapor inmóvil se filtra a través de las
placas de cobre perforadas y lleva el alcohol vaporizado a la parte superior del alambique. El
vapor sale del alambique y entra en un intercambiador de calor de agua fría. El vapor se
condensa nuevamente en alcohol muy claro y concentrado a aproximadamente 132 grados. El
alcohol entra en un duplicador que aumenta la concentración a aproximadamente 140 grados
al separar y eliminar parte del agua restante. El agua desmineralizada luego se agrega
manualmente al destilado reduciéndola a 120 grados. El destilado se vierte en barriles de roble
carbonizado donde permanecerá durante los próximos cinco a 20 años, dependiendo del
producto final.