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COMPETENCIAS DOCENTES
Así las competencias se enfocan más hacia los procedimientos que se siguen para
desarrollar diferentes actividades, teniendo muy en cuenta el desempeño de los alumnos
desde la lógica procedimental. Los resultados, productos, resúmenes y prácticas se
convierten en evidencias de aprendizaje que involucran los conocimientos, habilidades,
actitudes y valores reflejados durante el desempeño de los estudiantes en situaciones
concretas.
Según sea el nivel que atiendes, delimita los puentes que pueden desencadenar
aprendizajes significativos. Procura que las situaciones que elijas atrapen el interés de los
alumnos, que tengan relación con la temática que tratarás, que permitan el análisis, la
reflexión, y la aprobación de conocimientos, y que, a demás proyecten posibles
aplicaciones en otros contextos.
La educación basada en competencias privilegia el proceso de aprendizaje más que el
de la enseñanza, ya que son los estudiantes los actores principales en las escuelas, al ser
ellos los que deben de buscar la información, seleccionarla, depurarla, vincularla a sus
experiencias y hacer significativo su aprendizaje, para poder aplicar hoy o mañana sus
competencias en diversos contextos.
COMPETENCIAS A DESARROLLAR
BÁSICAS PARA LA VIDA DE ASIGNATURA
Para identificar cuáles son las competencias propias de la asignatura que impartes, te
recomendamos revisar el programa de la materia y preguntarte el para qué último de los
contenidos que se abordan a lo largo del ciclo escolar.
Las competencias básicas son las que los empleadores han considerado como mínimas
necesarias para poder realizar cualquier trabajo de manera formal.
APRENDIZAJE SIGNIFICATIVO Y LA LABOR DOCENTE
Con el fin de garantizar que la mayor parte del grupo aprenda es necesario que los
docentes apliquen técnicas y estrategias didácticas diversas y atractivas.
A fin de que valores las acciones que, como docentes, pones en juego para el logro de
aprendizajes significativos en tus alumnos, te sugerimos contestar la siguiente escala
estimativa:
Por todo lo señalado, podrás concluir que se vuelve todo un reto trabajar por
competencias dentro de una institución educativa. En primer lugar porque implica que los
docentes, a su vez, tengan desarrolladas las competencias básicas y para la vida, en
segundo lugar, porque requiere un trabajo sumamente creativo por parte del maestro, y
finalmente, porque se han de trabajar de forma integrada tanto los contenidos como los
alumnos.
Las principales actividades que tienes como docente son: planeación, impartición y
evaluación.
La revisión de la práctica docente es el primer paso para mejorar y modificar tu labor
docente. Atrévete aprobar distintas formas para favorece el aprendizaje de tus alumnos.
Hazlo paulatinamente y analiza los resultados para comprobar la eficacia de esas acciones.
Por ejemplo para tu siguiente clase planea actividades pensadas en los intereses de los
alumnos, busca recursos atractivos y después valora el resultado de los aprendizajes.
En la enseñanza basada en competencias, las tareas de planeación, impartición y
evaluación cobran un valor incalculable, debido a que van a permitir organizar y guiar el
aprendizaje, así como favorecer las capacidades y habilidades de los estudiantes de una
forma significativa.
Un recurso es todo aquellos nos va a servir para que nuestra clase se lleve a cabo de
acuerdo a lo planeado, así puede ser: instalaciones, patio, salón, laboratorio; equipo
didáctico: retroproyector, cañón, pizarrón; material didáctico: hojas, gises, retratos,
sustancias para experimentos; humanos: maestro, expertos, padres de familia, auxiliares,
etc.
Al revisar el programa de estudios, los docentes empiezan a pensar cómo se podría llevar a
cabo la clase. En ese momento da inicio una primera selección de los recursos que se
requieren y que son indispensables para que el aprendizaje sea significativo.
En relación con la planeación didáctica, es recomendable elaborar un perfil del grupo que
atiendes a fin de conocer mejor a tus alumnos:
como piensan
cuales son sus saberes previos
que esperan de tu materia
qué actividades les atraen más
cuáles son sus intereses
¡Atrévete a probar!
¿Sabías que …?
La selección de actividades depende de la manera en que concibes el aprendizaje.
Quienes creen que los conocimientos se adquieren con base en el reforzamiento de los
mismos, plantean ejercicios para mecanizar los procedimientos o conceptos revisados
durante las clases.
Por otro lado, los profesores que organizan actividades, plantean un conjunto de tareas
que implican reflexión, análisis, confrontación y práctica de los conocimientos en
situaciones diversas que propician aprendizajes significativos.
c) Considera el tiempo aproximado para el desarrollo de los temas y las actividades
previstas. Para ello es necesario seleccionar las técnicas y recursos que utilizarás en el
desarrollo de las sesiones. Esto te ayudará para que cada clase sea diferente y los alumnos
se sientan interesados en la materia que impartes. Así mismo es importante delimitar los
productos que deberán entregar los alumnos durante el ciclo escolar.
1) Planear una sesión para conocer las actitudes y conocimientos que tienen tus
alumnos para integrarlos entre sí y contigo.
Escucha a todos tus alumnos.
Hazles notar que las expectativas grupales implican compromisos que deberán
cumplir todo el grupo.
Llama a todos por su nombre.
¡Atrévete a probar!
En la siguiente clase, pide a tus alumnos que hagan propuestas para trabajar el tema que
tienes considerado para la siguiente sesión. Las propuestas deberán incluir actividades por
realizar, material requerido, productos esperados y distribución de responsabilidades u
organización del grupo. Pongan en práctica la propuesta y valores las ventajas y las
desventajas, así como su pertenencia.
3) Iniciar las sesiones con actividades que permitan que tanto tú como tus alumnos
reconozcan sus saberes previos. De esta forma conocerás sus intereses y podrás
planear de acuerdo a ello.
4) Procura que las situaciones planteadas impliquen problematizaciones, situaciones o
simulaciones de hechos reales que no sólo posibiliten poner en práctica los
conocimientos, sino que impliquen también las experiencias y actitudes de tus
alumnos.
5) Organiza actividades grupales e individuales, el primero es el medio ideal para que
los alumnos comenten y confronten sus ideas, opiniones y dudas, así como favorece
la cooperación, solidaridad y responsabilidad.
A fin de cumplir con la socialización o trabajo en equipo, pueden hacer asambleas,
organizar foros de discusión, etc.
6) Procura que las relaciones interpersonales entre los alumnos y entre ellos y tú, se
den en un marco de respeto, tolerancia, empatía y convivencia solidaria. Recuerda
que los valores y las actitudes son aspectos importantes de las competencias.
7) Prever actividades para utilizar las tecnologías de información y comunicación, los
alumnos mostrarán mayor interés en ellas.
8) Promover que la búsqueda de la información no sólo sea textual, pide que la
analicen y que expresen su opinión, con ello fortalecerás la criticidad de los
alumnos.
9) Organiza momentos grupales para que comenten tanto la información como la
experiencia adquirida. Y por último escucha los sentimientos de los niños, observa
sus actitudes en todo momento.
Existen tres momentos fundamentales para levantar información de los alumnos antes,
durante y al final del proceso de aprendizaje: diagnóstica, formativa y final. Estos tres
momentos también son indispensables para el desarrollo de competencias.
No hagas supuestos de lo que deben saber, es mejor conocer la realidad de tus alumnos.
Con esto evitarás “sorpresas”, faltantes y fallas.
Al inicio de cada sesión, dedica un espacio para recordar lo que vieron en sesiones
anteriores, en relación tanto con los contenidos como de las actividades realizadas.
¡Atrévete aprobar!
En la próxima clase, pide a tus alumnos que describan brevemente, lo sucedido en la clase
anterior, propón actividades como las siguientes:
la actividad que más les gustó
el contenido que les gustó más.
La forma en que se organizó el grupo.
Las tareas que parecieron difíciles.
Evaluación formativa.
Acompaña el proceso de aprendizaje.
Al concluir temas o unidades de aprendizaje, elabora instrumentos para la
evaluación del aprendizaje, con base en los propósitos del curso y los contenidos de
cada materia.
Analiza los desaciertos que cometan los alumnos, pues pueden representar una
oportunidad más para favorecer el aprendizaje.
Comenta los avances y los resultados de los instrumentos de evaluación para
establecer medidas que te permitan fortalecer los conocimientos y disminuir las
debilidades.
LA evaluación es un quehacer tuyo, pero también de los alumnos. Promueve espacios para
que ellos se autoevalúen. Apóyalos para que sean ellos quienes descubran sus fallas y
propongan soluciones.
Al revisar tu propia práctica, tendrás elementos para mejorarla. Detecta tus debilidades y
tus fortalezas, piensa en los niños sobresalientes y detecta qué elementos de tu quehacer
docente les permitieron tener éxito, también toma en cuenta a los que les costó trabajo
comprender los contenidos y piensa en las acciones que hubieran podido ayudar a su
aprendizaje. Finalmente plantea algunas acciones que podrías poner en práctica para
mejorar tu desempeño.
Elabora instrumentos con los que se evalúe la capacidad para integrar los conocimientos,
habilidades y actitudes de los estudiantes, es decir, pruebas de desempeño.
Dichas pruebas son situaciones en las que se conjuntan las habilidades, conocimientos y
actitudes de los alumnos, para demostrar el desarrollo de competencias, algunos ejemplos
son:
Plantear o solucionar problemas matemáticos.
Realizar experimentos.
Escribir ensayos sobre temas específicos.
Consultar información y utilizarla para elaborar textos específicos.