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INSTITUCION UNIVERSITARIA

POLITECNICO GRANCOLOMBIANO

FACULTA DE CIENCIAS SOCIALES

PROYECTO DE SEMINARIO I

TUTOR:

DEPRESION

PRESENTADO POR:

CARLOS JAVIER ARIZA CHINOME CODIGO: 1221280017

TATINA HOLGUIN MONTOYA CODIGO: 1221180137


YANIRE HERNANDEZ PARDO CODICO: 1221280005
YULY REYES LEON CODIGO: 1221890033

YUDY CAROLINA PACHON MARTINEZ CODIGO: 1221640294

FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES

PSICOLOGÍA

BOGOTA
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LA DEPRESIÓN

Introducción

La presente investigación aborda la problemáticas que existen detrás del trastorno de la


depresión, se evidencia el daño que puede llegar a ocasionar este trastorno.

Para analizar la problemática es necesario conocer las principales causas de la depresión, el


estrés y la ansiedad son algunas de ellas, la depresión es uno de los las enfermedades clínicas
con más impacto mundial ya que afecta a toda la población, en algunas ocasiones esta
enfermedad no se le da la importancia que merece y queda sin diagnosticar o algo mucho más
grave es tratada incorrectamente.

Este trastorno es uno de los más comunes y la población que se ven más afectada son las
mujeres, la depresión tiene distintos síntomas los cuales afectan cambiando la forma de vida
de las personas que lo padecen, viéndose interferidas con las actividades de su vida cotidiana.

Pueden tener grave consecuencias en el entorno personal, laboral y familiar por sus repentinos
cambios de ánimo y aspecto físico, perdiendo la calidad de vida al hacer aparición distintas
enfermedades ligadas a la depresión y al no ser tratada reduce la esperanza de vida de las
personas que lo padecen.
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Justificación

La razón por la cual se realiza esta investigación sobre el trastorno de la depresión es porque
afecta a una gran población y al pasar del tiempo se van incrementado con mayor facilidad, en
el campo de la psicología existen muchas corrientes que en su momento han tomado fuerza y
que a su vez han sido la base de nuevas corrientes alternativas.

En este caso, se quiere evidenciar los motivos por los cuales se da esta afectación entre la
población dando a conocer la importancia que tiene esta problemática sus causas y así lograr
una pronta intervención a esta problemática de salud que nos aqueja, basándose en
investigación realizadas y artículos donde se muestra la mejor manera de intervenir a este
trastorno.
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Objetivo

Mediante la realización de este trabajo investigativo se quiere evidenciar el trastorno de la


depresión sus causas y la forma de prevenir que este trastorno se vuelva más grave cada vez
más, mostrar la importancia que tiene el tratarlo a tiempo con un profesional, basándose en
una serie de artículos donde se muestra una investigación más profunda.

Objetivos específicos

Analizar los niveles del trastorno de la depresión.

Mostrar las causas que generan que este trastorno aparezca.

Encontrar la forma de concientizar a las personas sobre esta problemática.

Descubrir cuáles son los aspectos que no dejan que esta problemática se reduzca.
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Ficha 1

MSc. EM Dois Castellón A. (2012). Actualizaciones en depresión posparto. Revista


Cubana de Obstetricia y Ginecología. vol.38 no.4 oct.-dic. 2012
http://www.bvs.sld.cu/revistas/gin/vol38_4_12/gin16412.htm

Durante el embarazo y puerperio ocurren cambios bioquímicos, psicológicos y sociales que


hacen más vulnerable a la mujer para la aparición de estos trastornos. Dentro de los
vinculados al puerperio se distingue la tristeza y depresión posparto y la psicosis puerperal.

La depresión posparto es el trastorno anímico más prevalente asociado al nacimiento, su


recidiva es 1:3 a 1:4 si la madre no es tratada correctamente y se asocia a severa discapacidad
para desarrollar actividades de la vida diaria. Afecta aproximadamente al 19,2 % de las
puérperas durante los tres primeros meses posparto, con prevalencias que varían entre un 3 %
y 30 % durante el primer año. En la mayoría de los casos remite luego de tres a seis meses.
Sin embargo, una proporción puede seguir un curso crónico. Sus efectos en la relación madre-
hijo(a) no distinguen diferencias culturales o por nivel socioeconómico de la madre y su
impacto en el desarrollo del niño(a) está directamente relacionado con su duración e
intensidad. El deterioro que puede ocasionar en la interacción madre-hijo, se traduce en el
establecimiento de apegos inseguros y alteraciones del desarrollo psicomotor. Algunos
investigadores, dan cuenta que los hijos de madres con DPP tienen más del doble de
posibilidades de desarrollar problemas de conducta a largo plazo y de ser víctimas de
violencia intrafamiliar.3,5,9 Asimismo, asisten a un menor número de controles de salud,
reciben menos inmunizaciones y presentan alteraciones en sus rutinas de cuidados básicos.

La depresión es una enfermedad caracterizada por presentar ánimo deprimido y/o anhedonia,
la mayor parte del día, prácticamente todos los días, durante al menos dos semanas, con
angustia significativa y/o alteración del funcionamiento personal. La depresión posparto
(DPP) se diferencia de cualquier otro cuadro depresivo, porque aparece entre las 4 y 30
semanas del puerperio con síntomas incapacitantes como irritabilidad, rabia, anhedonia,
abulia, confusión, olvido, culpa, incapacidad de afrontamiento y ocasionalmente,
pensamientos suicidas, que pueden exacerbarse por falta de confianza, expectativas irreales
sobre la maternidad y baja autoestima materna. La depresión en cualquier momento de la vida
afecta profundamente la autopercepción y comportamientos de las personas, especialmente en
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las relaciones interpersonales y sociales. Al asociarla a la maternidad sobre todo durante el


primer año de vida, sus consecuencias pudieran extenderse a toda la vida.

Preguntas

1. ¿Cuál es el impacto en la relación madre-hijo(a) y en el desarrollo del


niño(a)?

2. ¿Cuál es la mejor forma de tratar este trastorno?


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Ficha 2

Llanes Torres, H. M, López Sepúlveda, Y, Vázquez Aguilar, J.L, Hernández Pérez, R.


(2015). Factores psicosociales que inciden en la depresión del adulto mayor. Revista de
Ciencias Médicas. La Habana. 2015 21(1)
http://revcmhabana.sld.cu/index.php/rcmh/article/view/707

Es imposible negarse a reconocer la imperiosa necesidad de desarrollar la atención al anciano


en sus múltiples y complejas facetas, para lo cual es imprescindible aceptar que la
gerontogeriatria comunitaria es una oportunidad que vinculada a las diferentes especialidades
de la salud, como la psiquiatría, la psicología, la neurología y la medicina interna, favorezca la
interacción oportuna desde que comienza el proceso involutivo. Sean más frecuentes los
trastornos psiquiátricos y que se caracterice esta etapa como de un mayor riesgo por el
incremento de la invalidez y el deterioro progresivo, que asociados a circunstancias sociales o
familiares adversas desencadenen enfermedades como la depresión.

Gutiérrez Rodríguez, José. Refiere en su trabajo que el momento de la jubilación laboral


marca un cambio en las relaciones de la familia. De cómo la familia y los miembros mayores
estructuren su jubilación y su entrada a la vejez, así será el funcionamiento, la armonía y el
respeto dentro de los límites familiares.

Al hombre jubilado le es más difícil reencontrarse en el hogar y en muchas ocasiones


aparecen vivencias de soledad y de pérdida de lugar. La mujer jubilada continúa su rol
doméstico que antes compartía con el laboral- social. Esta lo vivencia como un cambio
transicional más natural.

Sarró - Maluquer, M en sus estudios muestra resultados similares, donde se ha puesto de


relieve una estrecha relación entre síntomas somáticos y la depresión, mostrando la
coexistencia de ambos en estudios transversales, demostrando que los motivos físicos de
consulta pueden preceder a la depresión, plantea además que es importante destacar que la
depresión se asocia a un deterioro significativo en el bienestar y funcionabilidad del Paciente,
independientemente de la severidad de la depresión
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La situación problemática viene dada por el hecho de que en otros estudios realizados se ha
obtenido como conclusión que los factores psicosociales que más inciden en la depresión del
adulto mayor son las manifestaciones de violencia psicológica, necesidad de ser escuchados,
pérdida de roles sociales, el temor a la muerte, adultos solos y la viudez, sin embargo, estas
investigaciones por lo general se limitan a abordar el tratamiento psicológico de la depresión
en la vejez, sin valorar la calidad de supervivencia con posterioridad a ser tratados.

Entre los factores psicosociales de riesgo individuales que, de acuerdo con las investigaciones
científicas más actuales en concepción son esenciales en la ocurrencia de la depresión, se
encuentran: presencia generalizada de necesidad de ser escuchado, pérdida de los roles
sociales, sentimientos de aislamiento social, violencia psicológica, viudez, maltrato,
problemas en la dinámica familiar, antecedentes familiares de depresión, personas sin apoyo
social y familiar y presencia de impulsividad o de ansiedad y hostilidad.

Los factores de riesgo para la depresión deben ser conocidos por los psicólogos, porque puede
que exista la posibilidad de intervenir sobre ellos para mejorar o prevenir cuadros que pueden
tener un impacto pronóstico importante, de modo que la capacidad de intervenir a priori
constituye un tema relevante.

Pregunta

1. ¿La enfermedad en el adulto mayor es un factor que incide en la depresión?

2. ¿El acompañamiento familiar en la edad adulta disminuye el riesgo de padecer


depresión?
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Ficha 3

Álvaro Estramiana, J. L, Garrido Luque, A, Schweiger Gallo, I. (2010). Causas sociales


de la depresión. Revista Internacional de Sociología (RIS )

Vol.68, nº 2, Mayo-Agosto, 333-348, 2010.

http://revintsociologia.revistas.csic.es/index.php/revintsociologia/article/viewFile/328/334

El objetivo de este artículo es analizar y revisar el papel que desempeñan las atribuciones
causales en la génesis de los trastornos depresivos. Más específicamente, se pretende realizar
un análisis crítico del modelo atributivo de la depresión que señala que la atribución de causas
internas, estables y globales ante circunstancias adversas o acontecimientos vitales estresantes
está asociada a la depresión. En dicha crítica se señala la insuficiencia de dicho modelo
cognitivo por no haber tenido en cuenta un análisis de las variables de carácter sociológico
antes señaladas. Todo modelo explicativo de la depresión debe tener en cuenta el papel de
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factores de naturaleza social, como son el estrés y las estrategias de adaptación al mismo,
entre las que incluimos el apoyo social, así como los sentimientos de alienación y autoestima.

En general, los modelos teóricos que enfatizan el papel de los procesos cognitivos en la
génesis de la depresión parten de una concepción de la persona como un ser racional, que
procesa de forma consciente y voluntaria la información procedente del medio, siendo este
procesamiento de la información la base de la construcción de sus creencias. El deterioro
psicológico se explicaría por un fallo en el sistema de procesamiento de la información, que
genera en las personas depresivas un sistema de creencias prototípico, caracterizado por la
inferencia arbitraria y la distorsión de la realidad. Esta forma de entender la etiología del
deterioro psicológico ignora a los determinantes sociales de la depresión al situar su origen en
el interior de la mente de las personas.

Son numerosos los estudios que ponen de manifiesto la relación entre los acontecimientos
vitales estresantes y la depresión (Gotlib y Hammen 1992; Pearlin 1999; Sánchez, Álvaro y
Garrido 2000; Wheaton 1999). Si bien la noción de acontecimientos estresantes nos remite a
situaciones interpersonales o sociales que tienen un impacto negativo en el bienestar
psicológico de las personas, los estudios que abordan el impacto de los efectos de
acontecimientos negativos sobre el individuo han estado vinculados al análisis de aquellas
estrategias que son más relevantes para poder mitigar sus consecuencias negativas. Sin duda,
entre los modelos más estudiados se encuentra el modelo transaccional del estrés de Lazarus y
Folkman (1986)... En este modelo, el efecto de los estresores depende no sólo de la
evaluación que el individuo hace del medio, sino también de los recursos de adaptación de los
que pueda disponer.

E l estrés puede ser definido como el conjunto de demandas sociales y presiones del medio
que sobrepasan la capacidad del individuo para ajustarse a las mismas. Dichos
Constreñimientos estructurales limitan la capacidad de acción y suponen una amenaza al
equilibrio psicológico (Wheaton 1999).

Preguntas

1. ¿Las situaciones de estrés son una de las principales causas de depresión en las
personas?
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2. ¿Las personas que ocupan mayor estatus social tienen menor probabilidad de sufrir
depresión?

MAPA CONCEPTUAL
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Ficha 4

Ezquiaga Terrazas, E, García López, A., Díaz de Neira, M., García Barquero, M.J.
(2011). "Depresión". Imprecisión diagnóstica y terapéutica. Importantes Consecuencias
en la práctica clínica. Revista de la Asociación Española de Neuropsiquiatría. vol.31 no.3
2011 http://dx.doi.org/10.4321/S0211-
57352011000300005 http://scielo.isciii.es/pdf/neuropsiq/v31n3/original3.pdf

Los trastornos depresivos constituyen un grupo enormemente heterogéneo de cuadros


clínicos, cuya severidad se distribuye en un continuum que abarca, desde cuadros de dudosa o
inconsistente significación clínica y próximos a las reacciones emocionales no patológicas,
hasta cuadros severos con gran afectación funcional y riesgo vital. El episodio depresivo y la
depresión mayor son categorías heterogéneas e imprecisas y el término depresión, aunque
ampliamente utilizado en medios profesionales y extra profesionales, es todavía más
ambiguo. Se subrayan algunas características clínicas que diferencian los trastornos
depresivos con significación clínica del resto.

Frente a la heterogeneidad clínica de los trastornos depresivos existe una llamativa


uniformidad en el abordaje terapéutico, basado en la administración indiscriminada de
fármacos antidepresivos para cualquier cuadro del amplio espectro de trastornos depresivos.
Sería necesario desarrollar protocolos de actuación, con abordajes específicos, biológicos,
psicoterapéuticos y psicosociales en función de los datos de eficacia de cada tipo de abordaje
y de cada paciente específico, restringiendo los tratamientos farmacológicos a los cuadros en
que han mostrado eficacia.

Uno de los problemas metodológicos más frecuentes con el que nos encontramos en las
publicaciones en las que se ofrecen cifras de prevalencia, es que se utiliza el término
"depresión" para designar los "casos positivos" que resultan de aplicar instrumentos
epidemiológicos de despistaje, sin corroborar posteriormente dichos resultados con otro tipo
de instrumentos diagnósticos. Este problema se obviaría si se respetara la estructura estándar
que debería tener todo estudio epidemiológico diagnóstico que utiliza instrumentos de
screening y que requeriría dos fases: la primera de despistaje, con instrumentos de detección
más sencillos de utilizar, en una muestra aleatorizada de la población a estudio, y la segunda
para establecer los diagnósticos con instrumentos diagnósticos más complejos y costosos.
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Por otra parte, resulta frecuente el intercambio de términos como depresión o síntomas
depresivos en una misma publicación, como si fueran términos correspondientes a entidades
similares.

También se ha comprobado que parte de la variabilidad en las tasas estimadas podría ser
explicada por las diferencias que dependen de los criterios diagnósticos aplicados. Así, se han
constatado prevalencias superiores aplicando criterios DSM-III-R) (8) y con instrumentos
basados en dichos criterios, como el CIDI (8), que con otros criterios diagnósticos.

Otra cuestión importante es que la adecuada aplicación de criterios diagnósticos requeriría


tener en cuenta en los estudios epidemiológicos un criterio fundamental, escasamente
considerado en los instrumentos habituales para detectar "depresión": la afectación funcional
significativa que el síndrome depresivo debe implicar. Para ello, se subraya cada vez más la
conveniencia de incorporar escalas de discapacidad, tanto en la clínica habitual como en los
estudios de investigación, a las habituales escalas de despistaje (20, 21).

Pregunta 1

¿Qué detectan los cuestionarios de despistaje de depresión?

¿Existe el trastorno ansioso-depresivo? ¿Dónde están los trastornos


adaptativos?
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MAPA CONCEPTUAL

Articulo 5
Autores: Vivien Hunot, Theresa HM Moore, Deborah M Caldwell, Toshi A Furukawa,
Philippa Davies, Hannah Jones, Mina Honyashiki, Peiyao Chen, Glyn Lewis y
Rachel Churchill.(18 octubre de 2013) Terapias cognitivas y conductuales de “tercera
generación”versus otras terapias psicológicas para la depresión. Cochrane Common
Mental Disorders Group

http://www.cochrane.org/es/CD008696/terapias-conductuales-versus-otras-terapias-
psicologicas-para-la-depresion
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Terapias cognitivas y conductuales de “tercera generación” versus otras terapias


psicológicas para la depresión.

La depresión mayor es un trastorno muy frecuente, en el que los pacientes constantemente


experimentan un estado de ánimo decaído y pérdida de interés en las actividades placenteras,
acompañados de una variedad de síntomas que incluyen pérdida de peso, insomnio, fatiga,
pérdida de energía, culpa inapropiada, concentración deficiente y pensamientos mórbidos
relacionados con la muerte. Las terapias psicológicas son una alternativa importante y popular
a los antidepresivos en el tratamiento de la depresión. Durante el siglo pasado se desarrollaron
muchos enfoques diferentes de la terapia psicológica, incluida la terapia conductual, la
cognitivo-conductual (TCC), la TCC de "tercera generación", las terapias psicodinámicas,
humanísticas e integradoras.

Esta revisión se centró en los enfoques de la TCC de tercera generación, un grupo de terapias
psicológicas dirigidas al proceso de los pensamientos (en lugar de a su contenido, como en la
TCC) para ayudar a los pacientes a ser conscientes de sus pensamientos y aceptarlos de una
manera no crítica. El objetivo de la revisión fue determinar si la TCC de tercera generación
fue más efectiva y aceptable que otros enfoques de la terapia psicológica para los pacientes
con depresión aguda. La revisión incluyó tres estudios con 144 pacientes. Los estudios
examinaron dos formas diferentes de TCC de tercera generación, que consistían en terapia de
aceptación y compromiso (TAC) (dos estudios) y de activación conductual (AC) prolongada
(un estudio). Los tres estudios compararon estos enfoques de la TCC de tercera generación
con TCC. Los resultados indicaron que los enfoques de la TCC de tercera generación y de la
TCC fueron igualmente efectivos para el tratamiento de la depresión. Sin embargo, la calidad
de las pruebas fue muy baja debido al escaso número de estudios de calidad deficiente que se
incluyeron en la revisión; por lo tanto, no es posible concluir si los enfoques de la TCC de
tercera generación podrían ser más efectivos y aceptables que otras terapias psicológicas a
corto plazo o durante un período de tiempo más prolongado. Debido a la popularidad cada vez
mayor de los enfoques de la TCC de tercera generación en la práctica clínica, se le debe dar
prioridad a la realización de estudios adicionales para establecer si los enfoques de la TCC de
tercera generación son más útiles que otras terapias psicológicas para el tratamiento de los
pacientes con depresión aguda.

Pruebas de muy baja calidad indican que los enfoques de la TCC de tercera generación y de la
TCC son igualmente efectivos y aceptables en el tratamiento de la depresión aguda. Las
pruebas son limitadas en cuanto a la cantidad, la calidad y la variedad de estudios disponibles,
lo que impide la posibilidad de establecer conclusiones sobre la equivalencia a corto o más
largo plazo. La popularidad cada vez mayor de los enfoques de la TCC de tercera generación
en la práctica clínica destaca la importancia de completar estudios adicionales para comparar
diversos enfoques de la TCC de tercera generación con otros enfoques de la terapia
psicológica con el objetivo de informar a los médicos y a los elaboradores de políticas sobre
las formas más efectivas de terapia psicológica para el tratamiento de la depresión.

Estrategia de búsqueda:

Se hicieron búsquedas en el registro especializado del Grupo Cochrane de Depresión,


Ansiedad y Neurosis (Cochrane Depression, Anxiety and Neurosis Group) (CCDANCTR
hasta el 01/01/12), que incluye ensayos controlados aleatorios relevantes de The Cochrane
Library (todos los años), EMBASE (1974-), MEDLINE (1950-) y PsycINFO (1967-).
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También se hicieron búsquedas de estudios adicionales, publicados y no publicados en


CINAHL (mayo de 2010), en PSYNDEX (junio de 2010) y en listas de referencias de los
estudios incluidos y revisiones relevantes. Se realizó una búsqueda actualizada en
CCDANCTR restringida a los términos de búsqueda relevantes a la TCC de tercera
generación en marzo de 2013 (CCDANCTR hasta el 01/02/13).

Criterios de selección:

Ensayos controlados aleatorios que compararon diversas TCC de tercera generación con otras
terapias psicológicas para la depresión aguda en adultos.

Obtención y análisis de los datos:

Dos revisores de forma independiente identificaron los estudios, evaluaron la calidad de los
ensayos y extrajeron los datos. Cuando fue necesario se estableció contacto con los autores
del estudio para obtener información adicional. La calidad de las pruebas se calificó mediante
los métodos GRADE.

Resultados principales:

En la revisión se incluyeron tres estudios con 144 participantes elegibles. Dos de los estudios
(56 participantes) compararon una versión previa de la terapia de aceptación y compromiso
(TAC) con la TCC y un estudio (88 participantes elegibles) comparó la activación conductual
prolongada con la TCC. No se identificaron otros estudios de la TCC de tercera generación.
Los dos estudios de la TAC se evaluaron como con riesgo alto de sesgo de realización y
fidelidad de los investigadores. Los resultados posteriores al tratamiento, que se basaron en
las tasas de abandonos, no mostraron pruebas de diferencias entre la TCC de tercera
generación y otras terapias psicológicas para los resultados primarios de eficacia (cociente de
riesgos [CR] de respuesta clínica 1,14; intervalo de confianza [IC] del 95%: 0,79 a 1,64; muy
baja calidad) y aceptabilidad. Los resultados a los dos meses de seguimiento no mostraron
pruebas de diferencias entre la TCC de tercera generación y otras terapias psicológicas para la
respuesta clínica (dos estudios, 56 participantes, CR 0,22; IC del 95%: 0,04 a 1,15). Hubo
heterogeneidad estadística moderada en los análisis de aceptabilidad (I2 = 41%).

Resumen

Las Terapias cognitivas y conductuales de "tercera generación" representan una nueva

generación de terapias psicológicas que se utilizan cada vez más en el tratamiento de los

problemas psicológicos. Sin embargo, aún no se conoce la efectividad ni la aceptabilidad de

los enfoques de la terapia cognitiva y conductual (TCC) de tercera generación como un

tratamiento para la depresión en comparación con otras terapias psicológicas.


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Las denominadas terapias cognitivas y conductuales de "tercera generación" representan una nueva

generación de terapias psicológicas que se utilizan cada vez más en el tratamiento de los trastornos

psicológicos. Sin embargo, todavía son inciertas la efectividad y la aceptabilidad de las terapias

cognitivas y conductuales de tercera generación (TCC) como tratamiento para la depresión aguda.

Mapa conceptual

TERAPIAS TERCERA GENERACION

TERAPIAS

CONDUCTUALES COGNITIVO

DEPRESION

CONCIENTES DE NO
PENSAMIENTOS Y
ANTIDEPRESIVOS
ACETARLOS

NUEVA GENERACION ALTERNATIVAS

PREGUNTAS:

1. ¿Que otras terapias son compatibles para la depresión?

2. ¿Cuáles son los diferentes efectos de TCC de tercera generación?

Articulo 6

Shinohara K, Honyashiki M, Imai H, Hunot V, Caldwell DM, Davies P, Moore THM,


Furukawa TA y Churchill R. (16 octubre 2013)Behavioural therapies versus other
psychological therapies for depression. Cochrane Database of Systematic Reviews 2013,
Issue 10. Art. No.: CD008696. DOI: 10.1002/14651858.CD008696.pub2

Terapias conductuales versus otras terapias psicológicas para la depresión


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La depresión mayor es una de las enfermedades mentales más frecuentes, caracterizada por el
decaimiento anímico persistente y la pérdida del interés en las actividades placenteras,
acompañados de una variedad de síntomas que incluyen pérdida de peso, insomnio, fatiga,
pérdida de energía, culpa inapropiada, concentración deficiente y pensamientos mórbidos
relacionados con la muerte. Aunque los antidepresivos todavía son la base del tratamiento
para la depresión en los contextos de asistencia sanitaria, las terapias psicológicas son
intervenciones alternativas o adicionales importantes para los trastornos depresivos.
Actualmente está disponible una variedad de terapias psicológicas (como las terapias
cognitivo-conductuales, las terapias conductuales, las terapias psicodinámicas, las terapias
humanísticas y las terapias integradoras). Es muy importante saber si un tipo de terapia
psicológica es más efectivo que otro y conocer qué terapia psicológica es el tratamiento más
eficaz para la depresión. Esta revisión se centró en una de estas terapias (terapias conductuales
[TC]) debido a que son relativamente sencillas de administrar y recientemente se ha renovado
el interés en las mismas. Habitualmente las terapias conductuales se basan completamente en
principios operantes y de respuesta, orientados a cambiar el estado de ánimo depresivo del
paciente mediante el cambio en los patrones de conducta. Aunque se han desarrollado varios
modelos de TC, los siguientes enfoques se categorizaron como terapias conductuales en esta
revisión: terapia conductual (basada en el modelo de Lewinsohn, que se centra en el aumento
de las actividades agradables), activación conductual (originada a partir del componente
conductual de la terapia cognitivo-conductual y basada en el trabajo de Jacobson en 1996),
entrenamiento de las aptitudes sociales / entrenamiento de la confianza en uno mismo y
terapia de relajación.

En esta revisión se evaluó la eficacia y la aceptabilidad de las terapias conductuales


comparadas con todas las otras terapias psicológicas en el tratamiento de la depresión en fase
aguda (ni la depresión a largo plazo ni la resistente al tratamiento) en adultos. En esta revisión
se incluyeron 25 ensayos controlados aleatorios. La calidad de las pruebas de la revisión es
baja debido a aspectos relacionados con el diseño de los estudios encontrados y la falta de
precisión en los resultados. Aunque se encontró que las terapias conductuales y todas las otras
terapias psicológicas son igualmente efectivas y aceptables, se necesitan más estudios de
investigación para confirmar este resultado.

Antecedentes:

Las terapias conductuales representan una de varias categorías de terapias psicológicas que
actualmente se utilizan en el tratamiento de la depresión. Sin embargo, aún no se conoce la
efectividad ni la aceptabilidad de las terapias conductuales para la depresión en comparación
con otras terapias psicológicas.

Estrategia de búsqueda:

Se hicieron búsquedas en el registro especializado del Grupo Cochrane de Depresión,


Ansiedad y Neurosis (Cochrane Depression, Anxiety and Neurosis Group, CCDANCTR) el
31/07/2013, que incluye ensayos controlados aleatorios relevantes de The Cochrane Library
(todos los años), EMBASE (1974-), MEDLINE (1950-) y PsycINFO (1967-). También se
hicieron búsquedas de estudios adicionales, publicados y no publicados en CINAHL (mayo
de 2010), en PSYNDEX (junio de 2010) y en las listas de referencias de los estudios incluidos
y revisiones relevantes.
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Criterios de selección:

Ensayos controlados aleatorios que compararon terapias conductuales con otras terapias
psicológicas para la depresión aguda en adultos.

Obtención y análisis de los datos:

Dos o más revisores de forma independiente identificaron los estudios, evaluaron la calidad
de los ensayos y extrajeron los datos. Se estableció contacto con los autores de los estudios
para obtener información adicional.

Resultados principales:

Veinticinco ensayos con 955 participantes compararon terapias conductuales con una o más
de otras cinco categorías importantes de terapias psicológicas (terapia cognitivo-conductual,
cognitivo-conductual de tercera generación, psicodinámica, humanística e integradora). La
mayoría de los estudios tuvo un tamaño de la muestra pequeño y se evaluó de riesgo incierto
o alto de sesgo. En comparación con todas las otras terapias psicológicas juntas, las terapias
conductuales no mostraron diferencias significativas en la tasa de respuesta (18 estudios, 690
participantes, cociente de riesgos [CR] 0,97; intervalo de confianza [IC] del 95%: 0,86 a 1,09)
ni en la aceptabilidad (15 estudios, 495 participantes, CR de la tasa total de abandonos 1,02;
IC del 95%: 0,65 a 1,61). De manera similar, en comparación con cada una de las otras clases
de terapias psicológicas, pruebas de baja calidad mostraron una mejor respuesta a las terapias
cognitivo-conductuales que a las terapias conductuales (15 estudios, 544 participantes, CR
0,93; IC del 95%: 0,83 a 1,05) y pruebas de baja calidad indicaron una mejor respuesta a las
terapias conductuales sobre las terapias psicodinámicas (dos estudios, 110 participantes, CR
1,24; IC del 95%: 0,84 a 1,82).

Cuando se compararon con las terapias integradoras y las terapias humanísticas se incluyó
solamente un estudio en cada comparación y el análisis no mostró diferencias significativas
entre las terapias conductuales y las terapias integradoras o humanísticas.

Resumen

Las terapias y los modelos conductuales en el tema de la Depresión encontramos barios

síntomas conductuales como son pasividad, evitación, huida del contacto con otras personas y

lentitud y agitación. Los síntomas en si los dividimos en motivacionales, síntomas fisiológicos

vegetativos. Los síntomas cognitivos son dificultad en concentrarse, problemas de

concentración y memoria, alteraciones cognitivas en la forma de distorsiones y contenido

(triada cognitiva).
20

Se debe de tener en cuenta que los factores predisposiciones como genéticos, biológicos,

traumas infantiles, causas disfuncionales, también factores desencadenantes como las

perdidas reales o percibidas

Mapa conceptual

DEPRESION

TRATAMIENTO

SINTOMAS
MENOS RECONOCIDAS

MAS RECONOCIDAS DECAIMIENTO


TERAPIAS PSICOLOGICAS

ASISTENCIA SANITARIA PERDIDA DE APETENCIA


las terapias cognitivo-
conductuales, las
PERDIDA DE INTERES terapias conductuales,
ANTIDEPRESIVOS
ACTIVIADES PLACENTERAS las terapias
psicodinámicas, las
terapias humanísticas y
las terapias integradoras

Preguntas

1. Las terapias psicodinámicas sirven en tratamientos de tercera generación?

2. Por qué es más común públicamente el tratamiento por fármacos que terapias
psicológicas?

3. Son los mismos tratamientos para todo tipo de Depresión?


21

Articulo 7

Churchill R, Moore THM, Furukawa TA, Caldwell DM, Davies P, Jones H, Shinohara
K, Imai H, Lewis G y Hunot V. (18 octubre 2013)'Third wave' cognitive and behavioural
therapies versus treatment as usual for depression. Cochrane Database of Systematic
Reviews 2013, Issue 10. Art. No.: CD008705. DOI: 10.1002/14651858.CD008705.pub2

Terapias cognitivas y conductuales de "tercera generación" versus tratamiento habitual


para la depresión

La depresión mayor es un trastorno muy frecuente en el que los pacientes presentan


constantemente ánimo decaído y pérdida de interés en las actividades placenteras,
acompañados de diversos síntomas que incluyen pérdida de peso, insomnio, fatiga, pérdida de
energía, culpa indebida, concentración deficiente y pensamientos mórbidos relacionados con
la muerte. Las terapias psicológicas son una alternativa importante y popular a los
antidepresivos para el tratamiento de la depresión. Durante el siglo pasado se desarrollaron
muchos enfoques diferentes de terapia psicológica, incluida la terapia conductual, la
cognitivo-conductual (TCC), la TCC de "tercera generación", las terapias psicodinámicas,
humanísticas e integradoras.

Esta revisión se centró en los enfoques de TCC de tercera generación, un grupo de terapias
psicológicas dirigidas al proceso de los pensamientos (en lugar de a su contenido, como en la
TCC) para ayudar a los pacientes a ser conscientes de sus pensamientos y aceptarlos de una
manera no crítica. El objetivo de la revisión fue determinar si las TCC de tercera generación
fueron efectivas y aceptables para los pacientes en la fase aguda de la depresión. La revisión
incluyó cuatro estudios con un total de 224 pacientes. Los estudios examinaron tres formas
diferentes de TCC de tercera generación que incluyeron la activación conductual prolongada
(dos estudios), el tratamiento de aceptación y compromiso (un estudio) y otra forma de TCC
de tercera generación llamada entrenamiento competitivo de la memoria (un estudio). Tres de
los estudios compararon las TCC de tercera generación con condiciones control habituales. El
cuarto estudio comparó el tratamiento de aceptación y compromiso con la condición placebo
psicológico. Los resultados indicaron que las TCC de tercera generación fueron efectivas a
corto plazo para tratar la depresión. Sin embargo, la calidad de las pruebas fue muy baja
debido al escaso número de estudios / participantes incluidos en la revisión, junto con los
diferentes grupos de clientes, intervenciones y condiciones control utilizados, así como la
preferencia posible de los investigadores hacia los tratamientos activos, lo que no permite
establecer conclusiones confiables. También es notable que ninguno de los estudios consideró
el efecto a largo plazo de las TCC de tercera generación. Debido a la popularidad cada vez
mayor de los enfoques de TCC de tercera generación en la práctica clínica, se le debe dar
prioridad a la realización de estudios adicionales para establecer si estos enfoques son más
útiles que otras terapias psicológicas para el tratamiento de los pacientes con depresión aguda.

Antecedentes:

Las denominadas terapias cognitivas y conductuales de "tercera generación" representan una


nueva generación de terapias psicológicas que se utilizan cada vez más en el tratamiento de
los trastornos psicológicos. Sin embargo, todavía son inciertas la efectividad y la
aceptabilidad de las terapias cognitivas y conductuales de tercera generación (TCC) como
tratamiento para la depresión aguda.
22

Estrategia de búsqueda:

Se hicieron búsquedas en el registro especializado del Grupo Cochrane de Depresión,


Ansiedad y Neurosis (Cochrane Depression, Anxiety and Neurosis Group) (CCDANCTR
hasta el 01/01/12), que incluye ensayos controlados aleatorios relevantes de The Cochrane
Library (todos los años), EMBASE (1974-), MEDLINE (1950-) y PsycINFO (1967-).
También se hicieron búsquedas de estudios adicionales, publicados y no publicados en
CINAHL (mayo de 2010), en PSYNDEX (junio de 2010) y en las listas de referencias de los
estudios incluidos y revisiones relevantes. Se realizó una búsqueda actualizada en
CCDANCTR restringida a términos de búsqueda relevantes para las TCC de tercera
generación en marzo de 2013 (CCDANCTR hasta el 01/02/13).

Criterios de selección:

Ensayos controlados aleatorios que compararon las TCC de tercera generación con
tratamientos control para la depresión aguda en adultos.

Obtención y análisis de los datos:

Dos revisores de forma independiente identificaron los estudios, evaluaron la calidad de los
ensayos y extrajeron los datos. Cuando fue necesario se estableció contacto con los autores de
los estudios para obtener información adicional. La calidad de las pruebas se calificó
mediante el método GRADE.

Resultados principales:

En la revisión se incluyeron cuatro estudios pequeños (224 participantes). Se proporcionó


poca información acerca del proceso de asignación de los participantes a los grupos. Ninguno
de los estudios utilizó evaluadores de resultado independientes y las pruebas indicaron que los
investigadores prefirieron los tratamientos activos. Los cuatro estudios examinaron varios
enfoques de TCC de tercera generación (activación conductual prolongada, aceptación y
compromiso con el tratamiento y entrenamiento competitivo de la memoria) y condiciones
control. Ninguno de los estudios realizó evaluaciones de seguimiento. Los resultados
mostraron una diferencia significativa en las tasas de respuesta clínica a favor de las TCC de
tercera generación en comparación con el tratamiento habitual (tres estudios, 170
participantes, cociente de riesgos [CR] 0,51; intervalo de confianza [IC] del 95%: 0,27 a 0,95;
muy baja calidad). No se encontraron diferencias significativas en la aceptabilidad del
tratamiento según las tasas de abandonos entre las TCC de tercera generación y el tratamiento
habitual (cuatro estudios, 224 participantes, CR 1,01; IC del 95%: 0,08 a 12,30; muy baja
calidad). Ambos análisis mostraron heterogeneidad estadística significativa.

Resumen

La depresión, una características es la inacción, la falta de actividad, que a su vez lleva a que

el estado de ánimo y los pensamientos empeoren a esto le añade culpa a la tristeza y lo cual a

su vez dificulta la acción.


23

Con estos síntomas de la Depresión, un tratamiento posible podría dirigirse a la activación, es

decir, utilizar principios de esfuerzo y aprendizaje para que constantemente la persona

deprimida realice actividades que le resulten placenteras, importantes, o que le brinden una

sensación de dominio sobre su vida, y de esa manera se rompe el circuito de “tristeza-

inacción-tristeza-inacción”. Es así precisamente la propuesta que hace Activación Conductual.

Preguntas

1. Que efectos de la atención placebo tiene las terapias de tercera generación?

2. que efectos de tercera generación tienen la depresión aguda

3. Cuáles son las terapias de tercera generación más utilizadas en tratamiento de


depresión.

Mapa Conceptual

DEPRESION

síntomas que incluyen


TRATAMIENTOS PARA LA pérdida de peso,
DEPRESION insomnio, fatiga,
SIGLO PASADO
ENFOQUES pérdida de energía,
culpa indebida,
TERAPIAS DE TERCERA concentración deficiente
la terapia conductual, la GENERACION y pensamientos
cognitivo-conductual mórbidos relacionados
(TCC), la TCC de con la muerte
"tercera generación", las
terapias psicodinámicas,
humanísticas e
integradoras.

COGNITIVAS CONDUCTUALES
24

Artículo 8

López Espuela, Jiménez Gracia, Blanco Gazapo, Gavilán Iglesias, Portilla


Cuenca, & Pedrera Zamorano, (2011). Depresión Post-ictus: Factores Que
Afectan Al Estado De Ánimo.

Revista Científica de la Sociedad Española de Enfermería Neurológica. Fecha


de Publicación: Vol. 34. Núm. 01. Julio - Diciembre 2011

La DPI es el trastorno afectivo más frecuente y más infra-diagnosticado tras un


ictus, con un gran impacto en la calidad de vida, la recuperación funcional, la
supervivencia y la función cognitiva de los supervivientes de un ictus. En la
práctica diaria también se observa que muchos pacientes con un buen grado de
independencia funcional presentan síntomas depresivos.

La incidencia de depresión en sujetos que han presentado un ictus oscila entre el 20


y el 63 %, y es notablemente superior a la observada en otros grupos de pacientes:
del 9 % en individuos sanos mayores de 60 años y del 10-30 % en pacientes
ingresados por enfermedad orgánica.

Varias hipótesis intentan explicar el origen de la DPI. Una de ellas la considera una
reacción psicológica del paciente ante la incapacidad de enfrentarse efectivamente a
su limitación funcional motora o a su discapacidad y ante el apoyo social percibido.
Se trataría de una teoría "dosis-efecto", según la cual cuanto mayor fuese la
limitación funcional física (dosis), mayor sería la gravedad (efecto) de los síntomas
depresivos18.

En cambio, la hipótesis biológica tendría una base neuroanatómica y supone que la


DPI es consecuencia de un trastorno de la función neuronal, provocado por una
alteración en los circuitos frontosubcorticales, ganglios basales y sistema límbico,
con una hiporregulación serotoninérgica y monoaminérgica en general.

Algunos estudios afirman que parece haber un mecanismo dinámico de la DPI: en


la fase aguda del ictus, la depresión puede determinarse biológicamente por la
disminución de los

neurotransmisores, mientras que en la fase crónica podría ser que tuviera un


carácter reactivo con influencia de factores psicosociales.

Preguntas

1. ¿Aumenta la depresión la tasa de mortalidad en el mundo?

2. ¿Cómo impacta el ictus la calidad de vida de una persona?


25

Mapa conceptual

Artículo 9

Autor: Rivadeneira, Dahab, & Minic, (2013): El Modelo Cognitivo De La


Depresión

Revista de Terapia Cognitivo Conductual

El modelo propuesto por Aaron Beck no sólo es un sistema explicativo de la


Depresión y cuadros relacionados sino que también incluye un programa de
tratamiento fuertemente sistematizado.

Beck propone un modelo estructural para explicar el funcionamiento psicológico


tanto normal como patológico. En primer lugar, postula la existencia de una suerte
de filtro o plantilla mental con la cual la persona abordaría las diferentes
situaciones; los denomina esquemas, los cuales serían en última instancia los
responsables de la regularidad en las interpretaciones cotidianas.
26

En el entorno de la Terapia Cognitiva, la noción de esquema debe ser entendida


como un conjunto de significados idiosincrásicos con los cuales el sujeto va dando
sentido a las diferentes situaciones vitales.

En lo que hace a la Depresión, el esquema central propuesto por Aaron Beck se


denomina tríada cognitiva. Con ella, se refiere a una visión negativa de sí mismo,
del entorno y del futuro. La persona que padece depresión, aplica un sesgo negativo
sobre sí mismo, viéndose como una persona despreciable, desvalorizada. Resalta
sus aspectos negativos y no percibe nada bueno de sí.

Por otro lado, también remarca los aspectos negativos de su entorno, su medio
ambiente, incluyendo las personas que lo rodean. Finalmente, es pesimista, es
decir, cree que en el futuro su vida no cambiará, seguirá padeciendo desgracias y
sufrimiento. Esta última arista de la tríada cognitiva, la visión negativa del futuro,
se conoce como desesperanza y se encuentra fuertemente relacionada con el riesgo
de suicidio.

Ahora bien, el Modelo de la Terapia Cognitiva de la Depresión propone que los


esquemas se manifestarán en la consciencia del individuo a través de
interpretaciones puntuales y precisas de las situaciones que atraviesa. Tales
interpretaciones se denominan pensamientos automáticos y consisten en mensajes
específicos, cortos y fugaces; adoptan típicamente la forma de frases breves tales
como “soy un inútil”, “mi vida

es un fracaso”, “perdí en todo”, “¿para qué vivir así?”. Tal es el bombardeo de


verbalizaciones negativas que el depresivo tiene en su consciencia que,
naturalmente, la emoción predominante de su estado de ánimo no puede ser otra
más que la tristeza.

En el modelo de la Terapia Cognitiva, este es el lugar de los errores o distorsiones


cognitivas. Con tal expresión, Beck se refiere a un conjunto de formas patológicas
de transformación de la información, los cuales conducen a aumentar el estado de
ánimo depresivo.

En una de sus obras fundacionales, Terapia Cognitiva y Desórdenes Emocionales,


Beck postula el concepto de “dominio personal”, al cual define como el conjunto
de objetos tangibles o intangibles a los cuales una persona asigna un significado
especial y juzga de particular relevancia para él.

Particularmente, los afectos depresivos surgen como consecuencia de la percepción


de daño y pérdida en el dominio personal, vale decir, de una sustracción irreparable
del dominio personal. Ahora bien, el punto crítico de la conceptualización radica en
que quien padece una depresión, percibe pérdidas y daños donde no los hay.
27

Si bien el tratamiento con Terapia Cognitiva para la Depresión contempla un


conjunto amplio de aspectos, su eje gira alrededor del cambio en los elementos
postulados por la teoría y mencionados arriba, vale decir, los esquemas,
distorsiones y pensamientos automáticos. Por ello, el elemento nuclear y más
distintivo del tratamiento es la denominada “Discusión Cognitiva”.

Hoy, la Terapia Cognitiva se destaca como uno de los abordajes más difundidos
para la Depresión, mérito legítimamente adquirido a través de años de sustento
empírico a su eficacia. No obstante ello, casi nunca se aplica de manera pura. Por el
contrario, sus procedimientos se han integrado en el modelo de abordaje que hoy
conocemos como Cognitivo Conductual.

MAPA CONCEPTUAL
28

Articulo 10

Autor: Navas Orozco & Vargas Baldares, (2012)

Revista Cupula 2012: Abordaje De La Depresión: Intervención En Crisis

Enfoques Psicológicos Para El Abordaje De Situaciones En Crisis De Pacientes


Deprimidos.

1. Psicoterapia de apoyo: Se caracteriza en contener la ansiedad del paciente,


ofreciendo un espacio de escucha y empatía para orientarlo acerca de cómo afrontar
los eventos precipitantes de la crisis. El estilo es dialogado. Resulta básico crear
una atmósfera favorable para una buena relación médico-enfermo, donde este
último se siente con la confianza suficiente para hablar libremente y sentirse
escuchado. Se pueden ofrecer explicaciones así como el intento de clarificar el
problema e identificar posibles conflictos asociados. Se investigan posibles
soluciones y se ofrecen sugerencias o consejos para tranquilizar o ayudar en las
decisiones al paciente, tanto en aspectos personales, familiares o profesionales. El
riesgo derivado de ello, y que se intenta evitar, sería generar una relación de
dependencia extrema entre el paciente y el terapeuta.

2. Psicoterapia interpersonal: Se dirige a identificar los síntomas depresivos y los


factores precipitantes. Aborda las relaciones interpersonales actuales y se centra en
el contexto social inmediato del paciente. Su racionalidad supone una causalidad
biopsicosocial y una limitación en la capacidad de adaptación o manejo del estrés
psicosocial o interersonal. El terapeuta ocupa un rol activo, de apoyo, esperanzador
y no-neutral.

3. Psicoterapia cognitivo - conductual: Se realiza para identificar las creencias y las


actitudes distorsionadas acerca del evento precipitante y de sí mismo. Buscar el

origen de los síntomas en el entorno del paciente y la forma en que se ha enfrentado


a estos. Está dirigida a la modificación de comportamientos y pensamientos. Está
orientada hacia el presente, se investiga el funcionamiento actual. El énfasis de este
tipo de terapia está puesto más en el “qué tengo que hacer para cambiar· que en el
“por qué”. La relación terapeuta-paciente es de colaboración, se comprometen a
trabajar con un objetivo común. Tiende a fomentar la independencia del paciente,
se enfatiza el aprendizaje, la modificación de conducta, las tareas de autoayuda y el
entrenamiento de habilidades intercesión. Está centrada en los síntomas y su
resolución. Pone énfasis en el cambio y en la resolución de problemas.

4. Psicoterapia dinámica: Nace el psicoanálisis. Se realiza una entrevista centrada


en la empatía y la escucha atenta. Se indaga sobre los posibles conflictos pasados
que estarían interfiriendo en el individuo como factores precipitantes. El objetivo es
29

la autonomía del individuo. Este tipo de psicoterapia considera que el cambio se


produce a través de un vínculo con el terapeuta, en el desarrollo y análisis de la
transferencia.

MAPA CONCEPTUAL

Articulos de Texto

TATIANA COLOCA LO TUYO AQUÍ AGREGA TUS MAPAS Y TUS RESUMENES


Y ACUERDATE EN GUIARTE EN LAS REFERENCIAS DE ESTOS 10 ARTICULOS
PARA QUE PONGAS LO MISMO EN TUS TRES ARTICULOS.

LAS REFERENCIAS DE TODO LAS UNES EN LA BIBLIOGRAFIA QUE TIENES


ABAJO
30

BIBLIOGRAFÍA

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interpersonal integration. Londres: Wiley.

Gutiérrez Rodríguez J. Delirium en centros residenciales para personas mayores. Estudio de la


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31

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López Espuela, F., Jiménez Gracia, M., Blanco Gazapo, M., Gavilán Iglesias, T., Portilla Cuenca, J., &
Pedrera Zamorano, J. (Julio-Diciembre de 2011). Depresión postictus: factores que afectan al estado
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