4 LA GUERRA DEL PACÍFICO 5 6 7 PRESENTACIÓN 8 9 LIBRERIA Y EDITORIAL "JUVENTUD" considera que el señor 10 Roberto Querajazu Calvo es el historiador boliviano que más 11 tiempo y esfuerzo ha dedicado al estudio de la Guerra del 12 Pacífico, tanto en archivos y bibliotecas nacionales como de otros 13 países y que, como resultado de esa investigación de varios 14 años, es quien con más autoridad, ecuanimidad y veracidad ha 15 relatado la historia de ese trágico episodio de la vida de nuestra 16 Patria en su libro "GUANO, SALITRE, SANGRE" y en numerosos 17 artículos de prensa. 18 19 LIBRERIA Y EDITORIAL "JUVENTUD", que es responsable de la 20 segunda edición de esa obra, presenta en este volumen la 21 colección completa de artículos que el señor Querejazu Calvo 22 publicó en diarios de La Paz (Presencia Literaria), Cochabamba 23 (Los Tiempos), Santa Cruz (El Mundo) y Sucre (Correo del Sur) 24 el año en que se cumplía el centenario de esa contienda bélica. 25 26 Si el valor de "GUANO, SALITRE, SANGRE" radica en su amplia 27 documentación, exactitud histórica y estricta objetividad, el 28 interés de los artículos contenidos en este volumen está en el 29 hecho de que su autor, con el profundo conocimiento que tiene 30 del tema, presenta su juicio personal sobre cada uno de los 31 aspectos de la Guerra del Pacífico. 32 33 LOS EDITORES 34 PRIMERA PARTE 35 I 36 EL GUANO, MANZANA DE LA DISCORDIA 37 38 39 Tres aves marinas han sido las principales responsables de la 40 inmensa acumulación de guano en la parte central de las costas 41 de Sudamérica: el guanay, en un 85 por ciento, el piquero, en un 42 10 por ciento, y el pelicano, en un 5 por ciento. Dos factores 43 contribuyeron a su multiplicación: la soledad de la región, que 44 les permitió convertirla en un santuario en el que podían vivir sin 45 peligro alguno, y el inagotable festín de anchoveta que la 46 corriente Humboldt hacía flotar en miles y miles de toneladas 47 delante de su hábitat. 48 49 Casi todos los promontorios de los desiertos de Tarapacá y 50 Atacama y los islotes próximos se cubrieron con el excremento 51 expelido por los hartados guanayes, que no tenían escrúpulos en 52 defecar en sus propios nidos y sus alrededores. El guano fue 53 formando capas sobrepuestas, blanqueadas al sol, libres de 54 erosión pluvial por la ausencia de lluvias en la zona, ganando en 55 espesor constantemente, hasta alcanzar en algunos lugares, 56 como las islas Chincha del Perú, una altura hasta de 30 metros. 57 Cada día, mediante un ciclo biológico muy complejo, a la vez 58 que muy simple, toneladas y más toneladas de anchovetas 59 flotantes en la corriente Humboldt, eran engullidas por las 60 grandes bandadas de los voraces guanay y sus dos 61 competidores, y en gran proporción, depositadas como estiércol 62 en los bordes del océano. Se calcula que el proceso tuvo una 63 duración de más de un millón de años, logrando una 64 acumulación de guano realmente fabulosa. 65 66 Durante siglos sólo los indígenas que vivían cerca aprovecharon 67 de las virtudes fertilizantes del producto, utilizándolo para 68 mejorar los cultivos de papa y maíz en sus parcelas de los 69 contrafuertes occidentales de los Andes. Los españoles, durante 70 la época colonial, no le dieron ninguna importancia. La 71 revolución industrial ocurrida en Inglaterra y otros países del 72 Viejo Mundo, que provocó la despoblación de los campos y la 73 concentración de grandes masas humanas en las ciudades, 74 haciendo urgente el incremento de la producción de alimentos 75 con una agricultura más científica e intensiva, dio actualidad a 76 los estudios que décadas antes habían hecho varios hombres de 77 ciencia sobre las muestras de guano que el sabio alemán, 78 Alejandro Humboldt, llevó de Suramérica a Europa en 1804. 79 80 El guano de aves marinas se convirtió en el remedio regenerador 81 de las cansadas tierras británicas, francesas, alemanas y 82 holandesas. Barcos de carga lo buscaron en las orillas de África y 83 Australia, encontrándolo en limitadas proporciones. Su precio 84 alcanzó la cotización de 25 libras esterlinas la tonelada. Los 85 negociantes volcaron los ojos hacia los desérticos litorales de 86 Bolivia y el Perú. 87 88 El establecimiento de un servicio de buques a vapor, hecho por 89 el norteamericano William Wheelwright (que comenzó su fortuna 90 negociando con legumbres y aves en el puerto boliviano de 91 Cobija (falso 1)), con la organización de la " Pacific Steam 92 Navegation Company ", en 1840, que acortó distancia, 93 facilitando la travesía del estrecho de Magallanes, pese a los 94 peligrosos vientos que obligaban a las embarcaciones a vela a 95 dar la vuelta por el cabo de Hornos, facilitó en gran manera la 96 extracción del guano en las costas sudamericanas del Pacífico. 97 98 Los primeros explotadores del guano boliviano actuaron 99 clandestinamente, robando el fertilizante al amparo del 100 aislamiento de las covaderas y la escasa vigilancia que podían 101 ejercitar las autoridades establecidas en Cobija o con su 102 complicidad. Un informe del Cónsul de Francia en ese puerto, a 103 su gobierno, dijo en noviembre de 1841: "Desde el año pasado 104 el guano de este litoral ha adquirido mucha importancia, al igual 105 que el del Perú. El Prefecto, señor Gregorio Beeche, ha hecho 106 muy provechosas concesiones". Entre los favorecidos con las 107 especulaciones de Beeche figuraron el francés Latrille, el inglés 108 Lamb, el peruano Ulloa y el chileno Garday. 109 110 En el Perú el negocio tuvo carácter más formal desde un 111 principio y las arcas fiscales se llenaron con el oro aportado por 112 los concesionarios nacionales y extranjeros. Según el señor 113 Belisario Liosa, profesor de Literatura de la Universidad de 114 Arequipa: "El Perú, libre y joven, dueño del polvo maravilloso 115 que los pájaros de la costa depositaban sin cesar en sus islas del 116 Pacífico, se dio a vivir como un príncipe. Creó empleados para 117 todo y para todos, llegando hasta a aceptar plazas supuestas a 118 fin de darse el placer de pagar honorarios falsos. Convidó a los 119 forasteros para que recogieran primero las migajas y después 120 los más suculentos platos del opíparo banquete. Fue el 121 Alcibíades de América, el Montecristo del mundo". 122 123 Si el desierto de Atacama no hubiera contenido nada más que 124 arena su destino habría sido el de constituir una amplia zona de 125 separación entre Bolivia y Chile, evitando todo roce fronterizo. 126 Posiblemente el contraste entre el boliviano ingenuo, apático e 127 introvertido y el chileno pícaro, vivaz y volcado al mundo 128 exterior, habría cuajado una amistad inalterable. Por culpa del 129 guano se inició la malquerencia. Al gobierno de Santiago se le 130 antojó extender la soberanía chilena sobre parte del desierto de 131 Atacama, a fin de tener acceso a la riqueza que su legítimo 132 dueño no estaba atinando a controlar debidamente. Envió una 133 comisión a estudiar la riqueza de las covaderas bolivianas. El 31 134 de octubre de 1842, el Congreso dictó una ley "declarando 135 propiedad nacional las guaneras de Coquimbo, del desierto de 136 Atacama y de las islas adyacentes". (Su política expansionista 137 actuó también en el extremo opuesto. Se fundó el fuerte Bulnes 138 sobre una de las márgenes del estrecho de Magallanes, 139 iniciándose las desinteligencias con la República Argentina). 140 141 De nada le sirvieron a Bolivia los reclamos que formuló en 142 Santiago contra la citada ley, por medio de su plenipotenciario 143 don Casimiro Olañeta. El canciller Ramón Luis Larrazábal 144 respondió a las argumentaciones y presentación de pruebas 145 sobre el derecho territorial boliviano hasta el río Paposo, con el 146 sofisma de que el Ejecutivo no podía alterar las decisiones del 147 Poder Legislativo. 148 149 En su informe al Congreso de ese año (1843) el señor Larrazábal 150 expresó: "Sin perjuicio de títulos positivos y una antigua 151 posesión, que pudieran dar a Chile señorío sobre todo el 152 desierto, podría dividirse en dos partes iguales, por analogía con 153 lo que sucede cuando un río caudaloso separa dos estados y 154 ninguno puede alegar convenciones expresas o actos posesorios 155 que le confieran dominio de toda su anchura". 156 157 Esto puso muy claras las intenciones chilenas: adueñarse de una 158 mitad del desierto de Atacama, dejando la otra mitad a Bolivia. 159 El informe de la comisión exploradora de 1842 había establecido 160 que la mayor abundancia de guano se encontraba en el área de 161 Mejillones, ubicada en la parte que pertenecería a Chile. 162 163 La idea de una partición salomónica era la prueba más 164 fehaciente de que Chile nunca consideró que la expresión "hasta 165 el despoblado de Atacama", con la que se describía el extremo 166 norte de su territorio en sus constituciones políticas de 1822 y 167 1828, incluía el desierto de ese nombre, como lo iban a afirmar 168 sus publicistas, tan enfáticamente, en años posteriores. De 169 haberse considerado así, jamás sus gobernantes habrían 170 propuesto que una parte quedase en poder de Bolivia. 171 172 (1) William Wheelwright nunca había visitado la costa 173 occcidental de América del Sur. En 1823, estaba al mando 174 del barco Rising Empire propiedad de Guillermo Bartlett, 175 de Newburyport, cuando el navío naufragó cerca de la 176 boca del Río de La Plata. El capitán y la tripulación, a 177 excepción de un hombre, alcanzaron la orilla con 178 seguridad. 179 180 Poco después de su llegada a Buenos Aires, conociendo la 181 condición de indigente del capitán Wheelwright, un 182 caballero de aquella ciudad le ofrece trabajo como 183 sobrecargo de un navío con rumbo a Valparaíso. Aceptó la 184 proposición, y después de un viaje largo y aburrido de 185 cuatro o cinco meses alrededor del Cabo de Hornos, llegó 186 al puerto. 187 188 Deseando informarse con respecto a los negocios y las 189 ventajas comerciales de la costa occidental de 190 Sudamérica, amplió sus viajes a Guayaquil, el puerto de la 191 Gran Colombia (en ese momento se consideraba así), 192 donde decidió permanecer y dedicarse al desarrollo del 193 comercio exterior e interior. En 1825, fue nombrado 194 Cónsul de los Estados Unidos en aquel puerto. Tres años 195 más tarde, dejó su negocio y la condición próspera 196 alcanzada en las manos de un socio, y se fue, por vía del 197 Istmo de Panamá, a su casa en Newburyport, de la cual 198 había estado ausente seis años. 199 200 En 1829 resolvió transferir su residencia a Valparaíso. 201 Compró a su cuñado en Nueva York un pequeño navío, 202 que llamó El Cuatro de Julio y le pidió que se lo enviara 203 hasta la costa occidental de Sudamérica. Tras tomar el 204 mando de este navío, después de su llegada a Valparaíso, 205 fue contratado en un lucrativo negocio, transportando 206 especias y lingotes de metales a lo largo de la costa. 207 En 1835, comenzó su gran tarea de establecer una línea 208 de vapores entre las nacientes repúblicas de Perú y Chile 209 y el Istmo de Panamá. "Esto era una empresa de mucha 210 dificultad. Había prejuicios para vencer, mucho capital 211 necesario y muchas negociaciones necesarias para 212 llevarlo a cabo, todo lo cual requirió de gran habilidad y 213 paciencia". Fue a Inglaterra en 1837, y en 1838 la Pacific 214 Steam Navigation Company fue fundada con un capital de 215 £ 250,000. Dos vapores, cada uno con un registro de 700 216 toneladas, fueron construidos en 1840 y enviados por el 217 estrecho de Magallanes a los puertos de Valparaíso y 218 Callao. 219 220 Wheelwright después giró su atención a la mejora de 221 puertos y a la construcción de muelles y faros para el 222 mejor alojamiento y la protección del comercio. Para 223 facilitar la comunicación entre la costa y la zona minera, 224 construyó el primer ferrocarril sudamericano de Caldera a 225 Copiapó, y después lo amplió en casi cuarenta millas, en 226 el interior, en la dirección de la Cordillera de los Andes. 227 228 II 229 AUTORIZACION DE GUERRA A CHILE 230 231 Chile inició su política expansionista a costa de Bolivia con la ley 232 que su Congreso dictó el 31 de octubre de 1842 declarando 233 "propiedad nacional las guaneras de Coquimbo" (que estaban en 234 territorio chileno), y también las "del desierto de Atacama e islas 235 adyacentes" (ubicadas en territorio boliviano). 236 237 El desafío legislativo fue seguido por abusos de fuerza 238 ejecutados en el curso de los siguientes 15 años. La goleta 239 "Janequeo" se apoderó del islote Angamos y luego de cargar 240 guano de él, lo abandonó. La fragata de guerra "Chile" ocupó la 241 bahía de Mejillones y su tripulación construyó un fortín en la 242 playa, que fue destruido por las autoridades bolivianas. En 1857, 243 la corbeta "Esmeralda" volvió a la misma bahía y estableció 244 dominio chileno hasta el grado 23. 245 246 Las reclamaciones diplomáticas de Bolivia, a cargo de los 247 agentes Joaquín Aguirre, Macedonio Salinas y José María 248 Santiváñez, tuvieron el mismo resultado nugatorio que las de su 249 predecesor Casimiro Olañeta. 250 251 La codicia chilena se centraba principalmente en la península de 252 Mejillones, la más rica en guano de toda la costa boliviana. Dijo 253 una carta de Valparaíso que se encuentra en los Archivos del 254 Ministerio de Relaciones Exteriores de la Gran Bretaña: "El 255 asunto Mejillones está a la orden del día en Chile. Su riqueza 256 tiene deslumbrado a todo el país. La prensa no se ocupa de otra 257 cosa". 258 259 El gobierno de Santiago otorgó un permiso de explotación del 260 fertilizante de la península a su súbdito Matías Torres. La misma 261 covadera había sido alquilada del gobierno boliviano por el 262 brasileño Pedro López Gama. Estaban en conflicto las dos 263 jurisdicciones. López Gama entabló juicio contra su rival en 264 Cobija, obteniendo que se embargara la casa que el chileno tenía 265 en ese puerto. El gobierno de La Moneda despachó dos barcos 266 de guerra para consolidar su dominio en Mejillones y proteger 267 los intereses de Torres. 268 269 Era canciller de Bolivia don Rafael Bustillo. Durante el gobierno 270 de Isidoro Belzu, una década antes, ocupó varias veces el cargo 271 de Ministro de Relaciones Exteriores y también el de Hacienda, 272 demostrando gran capacidad y energía. Consideró que la 273 presencia de buques de guerra chilenos en una bahía boliviana 274 era un ultraje a la soberanía y dignidad del país y debía 275 responderse con altivez y coraje. En nota enviada a su 276 contraparte de Santiago, en fecha 26 de marzo de 1863, 277 protestó por la "flagrante violación del indisputable derecho de 278 Bolivia sobre Mejillones", contra "la más injustificable expoliación 279 del territorio de una república vecina y hermana, consumada a la 280 vista de todo el continente". 281 282 El ministro chileno le respondió que "Chile, íntimamente 283 penetrado de su incuestionable derecho, continuaría poseyendo 284 el desierto y litoral de Atacama hasta el grado 23 y dispondría 285 como dueño de los depósitos de guano que en él se 286 encontraban, rechazando todo acto jurisdiccional de las 287 autoridades bolivianas en esos parajes como injustificable 288 agresión a su territorio". 289 290 Esto era demasiado para Bustillo. Instó al Presidente de la 291 República, General José María de Achá, a convocar un congreso 292 extraordinario en Oruro para que se adoptasen las medidas 293 urgentes que exigía la situación. La asamblea escuchó una 294 amplia exposición del canciller sobre la historia de las relaciones 295 con Chile, con el resultado negativo de las cuatro misiones que 296 habían estado en Santiago y las ocurrencias en Mejillones. 297 Bustillo declaró: "Chile quiere dominar todo el desierto y no 298 acepta transacción de linaje alguno. Bolivia, con la moderación 299 que ha marcado su conducta en estas negociaciones, 300 desatendiéndose de sus primitivos derechos posesorios y de 301 dominio, ha aceptado de buen grado y buena fe la idea de zanjar 302 esta querella por medio de un tratado de límites que importa 303 una verdadera transacción". Explicó que el gobierno había 304 propuesto por medio del Encargado de Negocios Santiváñez que 305 la frontera fuese el grado 24 y medio, es decir, un grado y medio 306 más al sur de lo que Chile pretendía que fuese suyo y tenía bajo 307 el control de su marina. 308 309 Los asambleístas escucharon la lectura de un mensaje del 310 Presidente Achá en el que dijo que si el Gobierno de Chile 311 "desoía las justas demandas que se le hacían y persistía en su 312 acción, fijando por sí solo el límite de su territorio en el grado 313 23, el suelo boliviano quedaría violado, vulnerada la integridad 314 nacional y comprometido el glorioso nombre de la república, 315 perdiéndose una cuantiosa riqueza que a todas luces pertenecía 316 a Bolivia". También rezaba el mensaje: "No puede darse razones 317 más evidentes, ni motivos más justificados para declarar la 318 guerra a nuestro gratuito agresor: Pido a la Asamblea declarar la 319 guerra a Chile si los medios diplomáticos no son suficientes para 320 cortar desavenencias". 321 322 Los representantes de pueblo dictaron las dos leyes que les pidió 323 el gobierno. Por la primera, de fecha 3 de junio de 1863, de 324 carácter secreto, se autorizó al Poder Ejecutivo a buscar la 325 alianza con el Perú, a obtener un empréstito en Europa y a 326 aumentar el ejército al pie que lo requiriesen las circunstancias. 327 La segunda, de dos días después, dijo: "Se autoriza al Poder 328 Ejecutivo para declarar la guerra al Gobierno de la República de 329 Chile, siempre que agotados los medios conciliatorios de la 330 diplomacia no obtuviese la reivindicación del territorio usurpado 331 o una solución pacífica compatible con la dignidad nacional". 332 333 Para buscar una vez más la solución pacífica al problema de los 334 límites, el gobierno del General Achá envió a Santiago al ilustre 335 potosino don Tomás Frías. En previsión de que fracasase en sus 336 gestiones, se destacó a Lima, al señor Juan de la Cruz 337 Benavente, con la misión de gestionar la alianza peruana. Don 338 José Avelino Aramayo viajó a Londres en busca de recursos 339 económicos. 340 341 La posibilidad de expulsar a los barcos de guerra chilenos de las 342 aguas bolivianas dependía de la ayuda naval que se pudiese 343 obtener del Perú. A cambio de ella don Juan de la Cruz 344 Benavente recibió instrucciones de ofrecer una participación en 345 los guanos de Mejillones y cualesquiera otras concesiones que 346 exigiese el gobierno de Lima. 347 348 En su informe al Congreso de 1864, don Rafael Bustillo dio 349 cuenta del resultado: "Las adjuntas comunicaciones reservadas 350 del señor Benavente hacen ver que las sucesivas conferencias 351 solicitadas por él abrieron y prosiguieron la grave negociación, 352 pero que todos sus pasos han sido infructuosos, no habiendo 353 obtenido nada más que la contestación del ministro peruano de 354 que el asunto es grave, que es objeto de estudio y será 355 considerado con seriedad... Lo más que el Perú se compromete a 356 ofrecer es su mediación generosa y perseverante en nuestras 357 diferencias con Chile. Vése, pues, por esto que el Perú está muy 358 distante de prestarse a las miras contenidas en la ley secreta de 359 la Asamblea y que si bien podemos contar siempre con sus 360 nobles simpatías de amistad, éstas no lo arrastrarán jamás a 361 declararse enemigo de Chile y a tomar francamente la defensa 362 de los intereses bolivianos comprometidos en Mejillones". 363 364 Respecto a la búsqueda de recursos económicos el señor Bustillo 365 relató: "El señor Aramayo pactó el 15 de mayo con la compañía 366 "London and Coventry", un empréstito de siete millones y medio 367 de pesos, pero cuando fue propuesto al público apenas se logró, 368 la suscripción de doscientas mil libras". Bolivia quedaba, pues, 369 inerme, sin posibilidades de rechazar por la fuerza lo que Chile 370 imponía con los cañones de su marina en Mejillones. Todo 371 quedaba librado a lo que don Tomás Frías pudiese conseguir en 372 Santiago, por la razón y la elocuencia. 373 374 III 375 LA GUERRA IMPOSIBLE 376 377 La autorización del Congreso boliviano al gobierno del General 378 José María de Achá, de 5 de junio de 1863, para declarar la 379 guerra a Chile, sólo podía ponerse en práctica "siempre que, 380 agotados los medios conciliatorios de la diplomacia", no se 381 obtuviese la reivindicación de la parte del litoral sobre la que 382 Chile, abusivamente, había establecido dominio hasta el grado 383 23, ocupando con naves de su marina la bahía de Mejillones. 384 385 La búsqueda de tales "medios conciliatorios" (como se ha dicho 386 en el artículo anterior), se encomendó a don Tomás Frías. Nada 387 podía ser mejor prueba de las buenas intenciones bolivianas al 388 respecto que la personalidad del ilustre potosino, maneras 389 suaves y distinguidas, jovialidad, espíritu conciliador, 390 razonamientos serenos y respetuosos. Era una de las 391 personalidades de mayor prestigio en la república, merecedor de 392 generales consideraciones. Con él, el General Achá y su canciller, 393 don Rafael Bustillo, enviaban a Santiago un genuino hombre de 394 paz, un honesto portador de ramas de olivo. 395 396 Encontró en la capital del Mapocho un ambiento muy 397 desfavorable para su misión. En la Cámara de Diputados, donde 398 los opositores liberales tenían mayoría contra el gobierno 399 conservador, se aprobó una recomendación para que el Poder 400 Ejecutivo no abriese negociaciones con el enviado boliviano 401 hasta que no se derogase la ley de 5 de junio. En Chile se tenía 402 verdadero temor a una guerra con Bolivia y se consideraba que 403 el objetivo de don Tomás no era otro que ganar tiempo hasta 404 que se consiguiese en Europa tres corbetas, que se decía 405 estaban siendo adquiridas en Francia por medio del Mariscal 406 Andrés de Santa Cruz. Se suponía que una de ellas defendería 407 Mejillones, la otra bloquearía Valparaíso y la tercera cazaría 408 vapores chilenos ocupados en el comercio costero. 409 410 Con estos antecedentes, el Ministro de Relaciones Exteriores, 411 señor Manuel A. Tocornal, se mostró terminante en sus 412 planteamientos ante el señor Frías. En el cambio de notas que se 413 produjo entre ambos, dijo: "Antes de cualquier discusión sobre 414 límites, Bolivia debe derogar la ley que autoriza la declaratoria 415 de guerra a Chile y reparar todos los daños causados al súbdito 416 chileno Matías Torres al apresárselo y embargarle los bienes que 417 tiene en Cobija". 418 Con relación a la ocupación de parte del litoral boliviano, el 419 canciller Tocornal expresó: "Chile no puede abandonar por un 420 instante los derechos de que disfruta desde hace siglos en el 421 territorio del desierto de Atacama. Poseedor de ese territorio y 422 poseedor legítimo, apoyado en títulos antiguos, auténticos e 423 incontestables, tiene el derecho de ejercer en él los actos 424 propios de la soberanía y del imperio". Don Tomás Frías le 425 contestó: "Dígnese decirme si Chile acepta o no suspender la 426 explotación del guano de Mejillones como una mutua y recíproca 427 reparación, bastante para el ejercicio desembarazado de la 428 diplomacia entre las dos repúblicas". 429 430 Tocornal sostuvo en otra comunicación: "Mientras se halle 431 pendiente la cuestión de límites nada puede enervar el ejercicio 432 da los actos propios de la soberanía y del imperio, ni se halla 433 Chile, por consiguiente, en el caso de abstenerse de ejercer, en 434 el territorio que posee, ninguno de tales actos". 435 436 El negociador boliviano se dio cuenta de que sus buenos 437 propósitos no eran reconocidos, no obstante que ofreció que 438 recomendaría al Presidente Achá la derogatoria de la ley de 5 de 439 junio y la atención a los reclamos de Matías Torres. Comprendió 440 que el gobierno de Santiago se mantenía en la más absoluta 441 intransigencia, tanto para hacer desaparecer toda amenaza 442 bélica de parte de Bolivia como para consolidar la ocupación del 443 territorio boliviano hasta el grado 23. 444 445 Su viaje había sido inútil. Escribió al canciller Tocornal: "Me veo 446 reducido a declarar, como declaro, agotadas las gestiones 447 diplomáticas por parte de Bolivia, reproduciendo las protestas 448 contra el apoderamiento de Mejillones y la explotación de sus 449 depósitos de guano y pido al señor Ministro se sirva expedirme 450 un pasaporte para el retorno a mi patria".Tocornal: "El infrascrito 451 tiene el honor de remitir al Ministro Plenipotenciario de Bolivia el 452 pasaporte que Su Señoría se ha servido pedirle, reiterándole, 453 por su parte, el contenido de sus despachos". 454 455 ¿El fracaso de la misión Frías significaba que no le quedaba a 456 Bolivia otra alternativa que intentar recuperar por las armas lo 457 que se le negaba por la vía diplomática? ¿Pero cómo hacerlo 458 contra una nación marítima sin poseer un solo barco de guerra, 459 cuando las tres corbetas que se decía estaban siendo compradas 460 en Europa no eran ninguna realidad y cuando el Perú se 461 mostraba completamente reacio a una alianza? 462 463 La guerra era un imposible. Don Rafael Bustillo explicó a la 464 Asamblea Ordinaria de 1864: "El ministerio de mi cargo no se 465 propone declarar la guerra a Chile, tampoco os propone 466 retroceder da manera alguna de la actitud que ha asumido 467 Bolivia en este asunto. Lo primero es consecuencia indeclinable 468 de nuestra impotencia marítima y de la dificultad de encontrar 469 un campo de batalla terrestre en el que podamos batir a nuestro 470 adversario; lo segundo es también exigencia indeclinable de 471 nuestro honor y dignidad y sobre todo de la conciencia íntima de 472 nuestro derecho. No importa que no podamos reivindicarlo 473 acudiendo al último recurso de las naciones. Situación es ésta en 474 que a menudo se encuentran los pueblos débiles, sin que por 475 eso comprometan en un ápice la santidad e incolumidad de sus 476 derechos". 477 478 Refiriéndose a la autorización de guerra a Chile del Congreso del 479 año anterior, el canciller boliviano añadió: "Ese grito de Guerra 480 lanzado con tanto entusiasmo por acuella augusta corporación 481 ha sido el desahogo más noble en que Bolivia ha prorrumpido 482 después de tantos y tan ultrajantes agravios inferidos por 483 Chile... A ese grito de guerra se debe la actitud enérgica y digna 484 que por primera vez hemos asumido con respecto al usurpador y 485 la importancia que ha tenido la cuestión y el interés que por 486 todas partes ha despertado... No condenemos, pues ese arito de 487 guerra y sintamos solamente que circunstancias de actualidad 488 no nos hayan permitido llevarlo a cabo cual cumplía a nuestro 489 derecho y valentía". 490 491 Empero, si la guerra en las costas del Pacífico Sur, en 1864, fue 492 un imposible por acción de Bolivia, debido a su impotencia naval, 493 la guerra llegó a esas costas ese año por voluntad de otra 494 nación, de la nación que fuera expulsada de Sudamérica 40 años 495 antes: España. 496 497 498 IV 499 CHILE EN MUY GRAVE PELIGRO 500 501 El 10 de agosto de 1862 zarpó de Cádiz, con rumbo a 502 Sudamérica, una división naval española compuesta de dos 503 fragatas y una goleta. En el río de La Plata debía incorporarse a 504 ella otra nave estacionada allí. Llevaba a bordo un grupo de 505 profesores de Geología, Zoología, Botánica, Antropología y 506 Etnografía. La encabezaba el Almirante Luis Hernández Pinzón, 507 directo descendiente de uno de los hermanos Pinzón que 508 acompañó a Cristóbal Colón en el descubrimiento del Nuevo 509 Mundo. 510 511 La escuadra no sólo llevaba una misión científica. El almirante 512 tenía instrucciones de proteger los intereses de los súbditos 513 españoles residentes en Sudamérica, "de manera enérgica, para 514 que no quedase duda de que debían llegar a su término los 515 abusos que contra ellos se cometían, sobre todo en el Perú, el 516 país que se mostraba más hostil con España". En los puertos, los 517 navíos debían hacer "ostentación de su fuerza para impresionar 518 por la firmeza y la energía de su política". La Madre Patria 519 buscaba, pues, con el pretexto de hacer estudios al servicio de la 520 Ciencia, restablecer su prestigio y autoridad moral en un 521 continente en el que durante tres siglos fuera absoluta dueña y 522 señora, y del que fuera expulsada ignominiosamente 38 años 523 antes. 524 525 Hernández Pinzón, sus oficiales y los profesores, en un recorrido 526 de más de 20 meses, fueron recibidos con grandes 527 demostraciones de aprecio en Río de Janeiro, Montevideo, 528 Buenos Aires, Valparaíso, Santiago, Callao, Lima y puertos del 529 Ecuador, Colombia, Centro América y California. 530 531 Mientras estaban en aguas de este último lugar ocurrió en el 532 Perú el incidente de la Hacienda Talambo. Inmigrantes vascos, 533 contratados como agricultores, entraron en conflicto al querer 534 sembrar hortalizas en tierras que el dueño tenía destinadas al 535 cultivo de la caña de azúcar. Su alzamiento fue reprimido por la 536 fuerza con el resultado de varios muertos y heridos. 537 538 El Gobierno de España, que no había reconocido aún la 539 independencia del Perú, encomendó a don Eusebio de Salazar y 540 Mazarredo, que viajaba como Ministro Plenipotenciario a Bolivia, 541 que antes de subir al altiplano entrase a Lima y demandase 542 explicaciones e indemnizaciones por los daños inferidos a los 543 trabajadores de Talambo. La cancillería de Torre Tagle no quiso 544 aceptar las credenciales que don Eusebio presentó como 545 "Comisionado Extraordinario Especial en el Perú". Adujo que 546 enviar un agente con semejante título era denigrante para la 547 dignidad de una nación independiente y soberana. 548 El señor Salazar y Mazarredo mandó aviso a Hernández Pinzón 549 del desaire que se le hacía. El almirante bajó con sus naves de 550 aguas del Pacífico Norte y plantó la bandera hispana en una de 551 las islas Chincha al tronar de 21 cañonazos, declarando que 552 ocupaba las tres a título de "reivindicación" de suelo español. 553 554 Al mismo tiempo, exigió que el gobierno de Lima le entregase 555 tres millones de pesos oro como indemnización a los vascos y 556 pago de los gastos ocurridos por su escuadra. Amenazó con que 557 si no se satisfacían sus exigencias bombardearía el Callao. 558 559 Adueñarse de las islas Chincha, que contenían los más ricos 560 depósitos de guano del mundo, era quitar al fisco peruano la 561 fuente de sus más saneados e importantes recursos. 562 La amenaza de bombardeo del Callao hizo claudicar al gobierno 563 del General José Antonio Pezet, que aceptó las exigencias 564 españolas en enero de 1865. 565 566 La "reivindicación" ibera de territorios americanos (que poco 567 después fue desautorizada por el gobierno de Madrid aunque 568 manteniendo la exigencia económica de Hernández Pinzón), 569 causó gran alarma en todo el continente. La reacción más altiva 570 provino de Chile. Hubo manifestaciones anti españolas en varias 571 ciudades y se quemó la enseña punzó y oro. Una circular 572 diplomática de la cancillería a cargo de don Manuel A. Tocornal 573 expresó: "El gobierno de Chile se halla en el imprescindible 574 deber de rechazar de la manera más pública y solemne los 575 principios que sirven de base a la declaración (de reivindicación 576 de las tres islas Chincha)... Protesta contra su ocupación por las 577 fuerzas navales de su Majestad Católica y no reconoce, ni 578 reconocerá como legítimo dueño de ellas a otra potencia que a la 579 República del Perú". 580 581 Luis Hernández Pinzón fue reemplazado por el Almirante José 582 Manuel Pareja, que venía desempeñando las funciones de 583 Ministro de Marina. Ocupó su puesto con instrucciones de 584 castigar la insolencia chilena exigiendo satisfacciones por los 585 insultos inferidos a España en las manifestaciones públicas y un 586 homenaje de 21 cañonazos a su bandera en señal de 587 desagravio. Chile respondió rotundamente que no debía 588 satisfacción alguna. España le declaró la guerra. (2) 589 590 La marina chilena no contaba entonces sino con una corbeta 591 armada con 18 cañones y otro barco con 4. Las corbetas pedidas 592 a Europa, a raíz de la amenaza de guerra de Bolivia, seguían en 593 construcción. La escuadra española en el Pacífico, que había 594 sido reforzada con más buques, disponía de 207 bocas de fuego. 595 596 La amenaza española se sumaba a la que existía del lado de 597 Bolivia desde dos años antes, cuando el Congreso autorizó al 598 Poder Ejecutivo a recuperar por las armas lo que no se pudiese 599 obtener por la vía diplomática. Era lógico suponer que se uniese 600 a España para expulsar a los chilenos de la parte de su litoral 601 que tenían ocupado indebidamente hasta el grado 23 y para 602 hacer efectiva su soberanía hasta el río Paposo, de acuerdo con 603 los derechos reclamados infructuosamente por los agentes 604 plenipotenciarios que llegaron sucesivamente a Santiago desde 605 1842. Por lo demás, a la sazón Bolivia se hallaba gobernada por 606 un militar atrabiliario, Mariano Melgarejo, del que podía 607 esperarse todo lo peor. 608 609 Chile se encontró enfrentado con la más peligrosa situación de 610 toda su historia republicana. 611 612 (2) La guerra se inició con un conflicto diplomático entre 613 Perú y España suscitado por el Incidente de Talambo. Al 614 tiempo que una escuadra científica y diplomática española 615 recorría las costas americanas se produjo una pelea entre 616 los colonos españoles de una hacienda y unos peones 617 peruanos que acabó con dos muertos y varios heridos. Las 618 noticias que llegaron a la flota y, posteriormente, a 619 España eran confusas y exageradas, por lo que el 620 Gobierno español solicitó explicaciones. La falta de 621 entendimiento entre el Gobierno peruano y el enviado 622 español, unido a la información errónea proporcionada 623 por éste a la Escuadra, llevó a la ocupación española de 624 las peruanas islas Chincha en 1864. 625 Mientras el conflicto entre España y Perú parecía volver a 626 surgir, en Chile la opinión pública chilena se exaltó y 627 comenzaron actos hostiles contra los españoles 628 residentes. Su Gobierno decide entonces negar todo 629 apoyo logístico a las unidades navales españolas en 630 puertos chilenos. 631 El almirante Pareja, nombrado Ministro Plenipotenciario 632 de España en Chile, presionó al Gobierno de este país para 633 que levantara las restricciones impuestas a su Escuadra. 634 En Madrid, tras dos años de gobiernos moderados, 635 regresó al poder el general O’Donnell, cuyo gabinete 636 envió instrucciones precisas al general Pareja: 637 reparaciones y saludo a la bandera. Si se negaran, ruptura 638 de relaciones y ultimátum. Si aún así Santiago persistiera 639 en su actitud, bloqueo de los puertos. Finalmente, si Chile 640 continuara sin atender las exigencias españolas, hostilizar 641 Valparaíso o Lota. Pareja dio cuatro días de plazo al 642 gobierno chileno. 643 Ante la negativa chilena, el Comandante General de la 644 Escuadra del Pacífico declaró toda la costa chilena en 645 estado de bloqueo el 24 de septiembre. Aunque, debido a 646 los pocos buques españoles, éste se redujo a Coquimbo y 647 Caldera. En respuesta a la decisión de Pareja, Chile 648 declaró la guerra a España el día siguiente. 649 650 651 V 652 GENEROSIDAD BOLIVIANA A FAVOR DE CHILE 653 654 Chile al verse comprometido con un ultimátum de España, que 655 tenía una poderosa escuadra en las proximidades de sus costas 656 comandadas por un almirante, Juan Manuel Pareja, que odiaba 657 al país en el que su padre había muerto en 1813, al hacer 658 campaña contra los criollos insurgentes en su rol de gobernador 659 de la colonia; con Bolivia que mantenía vigente la autorización 660 de guerra a Chile dictada por el Congreso de 1863, las relaciones 661 diplomáticas suspendidas desde el fracaso de la misión de don 662 Tomás Frías y gobernada por un soldadote brutal, Mariano 663 Melgarejo; pidió auxilio a otros países de la América del Sur. Dos 664 de sus más eminentes hombres públicos, don Domingo Santa 665 María y don Victorino Lastarria, fueron enviados a buscar la 666 alianza de Perú, Ecuador, Argentina y Uruguay. 667 668 El señor Santa María nada pudo obtener en Lima del gobierno 669 del General Juan Antonio Pezet y, al ser derrocado éste, por 670 rendirse a las exigencias españolas, tampoco del vicepresidente, 671 General Pedro Díaz Canseco. Tomó contacto con los opositores al 672 régimen y tuvo la suerte de verlos triunfar en un golpe de 673 Estado que puso en el mando de la nación al Coronel Mariano 674 Ignacio Prado, gran amigo de Chile, que no titubeó en firmar un 675 tratado de alianza y puso los 4 barcos de la marina peruana a 676 las órdenes del comandante de la marina chilena (2). 677 678 El historiador chileno Benjamín Vicuña Mackenna se preguntó: 679 ¿Cuál habría sido la posición de nuestra patria si el resultado de 680 la batalla que se iba a dar en las puertas de Lima (por los 681 partidarios de Prado) hubiera sido adverso? ¿Qué habríamos 682 hecho ante la presencia de la escuadra de Pareja cerrando 683 nuestros puertos con sus cañones, con el Perú, no ya 684 independiente, sino armado contra nosotros, haciendo causa 685 común con los enemigos de América, y teniendo a la vez sobre 686 nuestra cabeza la espada de Melgarejo, autorizado en esta época 687 a hacernos la guerra, y a más de esto llevando todavía sobre 688 nuestro único flanco no amagado la amenaza del desdén o de la 689 complicidad de las naciones del Plata?". 690 691 El Ecuador se mostró temeroso de alinearse contra la Madre 692 Patria, pero acabó cediendo ante la fuerte presión y promesas 693 que le llegaron desde Santiago y Lima. Entró en la liga anti 694 española. 695 696 El señor Lastarria nada pudo conseguir en Buenos Aires y 697 Montevideo. La Argentina y el Uruguay, junto con el Brasil, 698 estaban atareados preparando el cuadrillazo que ese año iban a 699 iniciar contra el minúsculo Paraguay para castigar los desplantes 700 del dictador Francisco Solano López. No quisieron embrollarse en 701 otro conflicto internacional. 702 703 Con los puertos de Chile, Perú y Ecuador cerrados a sus naves, 704 el Almirante Pareja contaba todavía con el boliviano de Cobija 705 para avituallarse en víveres, agua y combustible. Tenía en él a 706 súbditos españoles que le ayudaban como los señores José María 707 Artola y Manuel Barrau, importantes comerciantes de la zona. 708 Con Cobija a disposición de la escuadra enemiga, Valparaíso y 709 los otros puertos chilenos seguían en grave peligro. 710 711 Ocurrió entonces lo que Chile menos esperaba. El General 712 Mariano Melgarejo, después de haber batallado año y medio 713 contra los enemigos que se alzaban en contra de su régimen en 714 diferentes ciudades y de haber vencido a los del sur en el 715 combate de la Cantería y a los del norte en el de las Letanías, se 716 sintió, por fin, dueño absoluto de la república y pudo prestar 717 atención a lo que sucedía en los países vecinos. Los adulones 718 que le hacían la corte lo comparaban con Napoleón y Bolívar. Se 719 sintió el campeón de la solidaridad americana. Vio a Chile 720 inerme, amenazado por una poderosa nación europea y decidió 721 que Bolivia fuese en su auxilio, entrando en la alianza. 722 723 Como no existiese Legación boliviana en Santiago, ni 724 chilena en La Paz, hizo que su Secretario General, Mariano 725 Donato Muñoz, enviase las instrucciones del caso a su 726 ministro en Lima. La nota de30 de enero de 1866 dijo 727 entre otra cosas: "Por lo que hace al pueblo chileno y a su 728 gobierno, Bolivia comprende que en ocasión tan grave y 729 solemne mengua sería para ella y para el nombre 730 americano si no olvidara las motivos que 731 desgraciadamente la han puesto en interdicción 732 diplomática y que por fortuna son demasiado secundarios 733 para que debieran recordarse siquiera al frente de una 734 cuestión continental que debe absorber, como en efecto 735 absorbe, toda la atención de América y de sus gobiernos. 736 Es por ello que Bolivia se hace un deber de anticiparse al 737 de Chile ofreciéndole ponerse a su lado y concurrir con 738 todos sus recursos a salvar sus instituciones y asegurar 739 su independencia. Animado el Gobierno de Bolivia de tan 740 amistosos y fraternales sentimientos de verdadero 741 americanismo, ha acordado dirigirse a los excelentísimos 742 gobiernos del Perú y Chile, por el digno órgano de Vuestra 743 Señoría, a falta de Legación de Bolivia en Chile, 744 ofreciéndoles su más eficaz colaboración y en la escala 745 que le sea posible". Lo que don Mariano Donato Muñoz 746 consideraba "motivos demasiado secundarios", eran nada menos 747 que la ocupación chilena por la fuerza del litoral boliviano hasta 748 el grado 23 y la explotación abusiva de la riqueza guanera de la 749 península de Mejillones. 750 751 Melgarejo dictó dos decretos el 10 de enero de 1866. Por el 752 primero dispuso: "No debiendo diferirse la manifestación de 753 sentimientos hacia el gobierno y pueblo de Chile, constitúyese 754 en esta misma fecha una Legación Extraordinaria en Santiago, 755 encomendada al caballero don Juan Muñoz Cabrera". 756 757 Por el otro declaró abrogada la ley de 5 de junio de 1863 por la 758 que el Poder Ejecutivo fue autorizado a declarar la guerra al 759 Gobierno de Chile. 760 761 Al conocerse estos hechos se echaron a vuelo las campanas de 762 las iglesias de Lima y Santiago en señal de gran regocijo. Con 763 Bolivia alineada al lado de Chile, Perú y Ecuador, la escuadra 764 española no tenía un sólo puerto amigo en toda la costa del 765 Pacífico Sur y no tenía más remedio que abandonar sus aguas. 766 767 El Ministro de Relaciones Exteriores de Chile, señor Álvaro 768 Covarrubias, en su informe al Congreso de 1866, dijo: "El 769 Gobierno de Bolivia, apenas desembarazado de las 770 complicaciones internas, nos prestó la misma adhesión que el 771 Perú y el Ecuador, espontáneamente. Esta iniciativa fue de tanto 772 mayor precio cuanto que, como sabe el Congreso, nuestras 773 relaciones con aquella república estaban interrumpidas por 774 consecuencia de la cuestión de límites". 775 776 777 778 779 VI 780 PARTICION SALOMONICA DEL GUANO 781 782 ¿Cómo retribuyó el gobierno de Santiago la cándida generosidad 783 con la que el Presidente Mariano Melgarejo, olvidando la 784 flagrante iniquidad de que Chile estuviese ocupando territorio 785 boliviano hasta el grado 23 y explotando sin derecho la riqueza 786 guanera de Mejillones, puso a Bolivia codo a codo con Chile 787 frente a la grave contingencia que significaba para este segundo 788 país la actitud bélica asumida por una poderosa escuadra naval 789 de España? 790 791 Envió a La Paz al político Aniceto Vergara Albano con el rango de 792 Ministro Plenipotenciario y al intelectual Carlos Walker Martínez 793 como su secretario, con la misión de agradecer al Gobierno de 794 Bolivia, formalizar su ingreso a la alianza chileno-perú- 795 ecuatoriana y expresar el deseo de liquidar amigablemente el 796 problema limítrofe del desierto de Atacama para que las 797 relaciones entre los dos países fuesen en adelante sólo armonía, 798 comprensión y fraternidad. 799 800 El General Melgarejo recibió a los dos diplomáticos con muestras 801 de especial complacencia. Ambos se dieron mañas para 802 granjearse la íntima amistad del tirano borracho, compartiendo 803 de sus francachelas, adulándolo como a un personaje superior, 804 rindiendo pleitesía a su amante Juana Sánchez Campos. 805 806 A los pocos días de su llegada, el 22 de enero de 1866, el señor 807 Vergara Albano suscribió un acta con el Secretario General de 808 Gobierno, señor Mariano Donato Muñoz, por medio de la cual 809 Bolivia se adhirió a la alianza contra España. De acuerdo con sus 810 instrucciones, antes de concertar dicho acto, propuso que, si así 811 lo quería Bolivia, se podía arreglar primero el problema de los 812 límites. Muñoz tuvo entonces la providencial oportunidad de 813 liquidar la vieja cuestión reivindicando el derecho territorial 814 boliviano hasta el río Paposo. Pero no era más que un abogadillo 815 mediocre, que se encaramó en el poder prendido a la espada del 816 soldadote presidente y se mantenía en él a fuerza de 817 genuflexiones. No supo darse cuenta de que la oportunidad que 818 se le brindaba era única y fugaz. No quiso desentonar con las 819 zalamerías de esos días e ilusionado con que la intimidad de 820 chilenos y bolivianos perduraría por siempre declaró que eso 821 "podía quedar para después". 822 823 Al ver que también Cobija se cerraba a sus naves, el almirante 824 español, Juan Manuel Pareja, no tenía otra alternativa que ir a 825 buscar combustible, agua y víveres en puertos del Atlántico. Mas 826 ¿cómo abandonar el Pacífico sin desmedro de la honra ibérica? 827 ¿No se tomaría su viaje como una huida frente a la insolencia 828 chilena? 829 En un encuentro fortuito entre la goleta española "Covadonga" y 830 la goleta chilena "Esmeralda", esta segunda se alzó con la 831 victoria tomando presa a su rival. A la noticia de esta tragedia y 832 creyendo que había ocurrido cosa igual con otra de sus naves, la 833 "Vencedora", el Almirante Pareja no pudo suportar la vergüenza. 834 Se encerró en su camarote de la nave capitana "Villa de Madrid" 835 y se dio un pistoletazo en la sien derecha. Dejó un mensaje a su 836 sobrino y secretario rogándole que no se arrojase su cadáver al 837 mar en aguas chilenas. Era bastante que su padre estuviese 838 enterrado en suelo del odiado país. 839 840 Pareja fue reemplazado por el Almirante Casto Méndez Núñez. 841 Buscó a la escuadra chileno-peruana en su escondite de la isla 842 de Chiloé (donde esperaba reforzarse con los blindados 843 "Huáscar" e "Independencia", mandados construir por el 844 gobierno de Lima en Inglaterra y que estaban próximos a salir 845 del astillero). La bombardeó desde 1.500 metros de distancia, 846 temeroso de acercarse más por los arrecifes de una zona que no 847 conocía. Durante dos horas hubo un furioso diálogo de cañones 848 con daños insignificantes en uno y otro campo. Uno y otro 849 combatiente se consideraron ganadores del combate de Abtao. 850 851 Como esto no fuera suficiente para desfogar la belicosidad de los 852 marinos españoles, se trasladaron frente a Valparaíso y 853 anunciaron otro bombardeo. Un almirante americano que se 854 encontraba en la bahía con su nave quiso interponerse. Méndez 855 Núñez le previno: "Si os interponéis os echo a pique". El Sábado 856 de Gloria (31 de marzo de 1866), en nombre de Su Majestad 857 Católica, dio la orden de abrir fuego. Los valparaísinos, 858 refugiados en los montes aledaños, vieron cómo, desde las 9 de 859 la mañana hasta el medio día, 2.600 bombas y granadas caían 860 sobre su bello puerto destrozando la Estación del Ferrocarril, la 861 Bolsa, la Aduana, otros edificios públicos y muchos particulares. 862 Todavía quedaba furia en el corazón de los súbditos de la Madre 863 Patria. Subieron con sus naves hasta el Callao. Llegó orden de 864 Madrid de abandonar el Pacífico, pues las tripulaciones sufrían de 865 escorbuto y el estado general de la escuadra era lamentable. 866 Méndez Núñez simuló no haber recibido tal directiva. En acciones 867 sucesivas acercó sus navíos a la poderosa fortaleza del puerto 868 peruano y cambió cañonazos con ella, causando y sufriendo 869 numerosas bajas y averías. Entre las bajas peruanas hubo un 870 Ministro de Estado, que murió, y entre las españolas el propio 871 almirante, que cayó herido. La historia del Perú considera el 872 combate del 2 de mayo (1866) una de sus grandes victorias. La 873 historia de España lo califica como la mayor hazaña de su 874 marina en el siglo 19. 875 876 Méndez Núñez había dicho que su patria "prefería honra sin 877 barcos, que barcos sin honra". Obedeció recién la orden de 878 Madrid. Abandonó las costas del Pacífico con sus navíos cargados 879 de honra y se fue a buscar alivio para heridas y averías en Río 880 de Janeiro. Desde allí mantuvo el estado de guerra todo el año 881 1866, mas no pudo evitar que los blindados "Huáscar" e 882 "Independencia" cruzasen el Atlántico y se incorporasen a la 883 flota aliada. Finalmente, retornó a su país. 884 885 Mientras ocurrían los sucesos de Chiloé, Valparaíso y Callao, 886 Vergara Albano y Walker Martínez estrecharon sus intimidades 887 con Melgarejo y campearon su simpatía chilena por los salones 888 de La Paz. Con el alejamiento de aguas del Pacífico de los 889 cañones españoles se desintegró tácitamente la alianza de Chile, 890 Perú, Ecuador y Bolivia. Renacieron los intereses antagónicos de 891 los cuatro países. Renació la codicia chilena por el guano de 892 Mejillones. La buena voluntad con la que llegó a la república 893 altiplánica don Aniceto Vergara Albano para liquidar el conflicto 894 de soberanía en Atacama de acuerdo a los planteamientos 895 bolivianos, se trocó en actitud d3 regateo a favor de las 896 ambiciones de sus compatriotas. 897 898 Se complicó el asunto con la aparición en La Paz del Barón 899 Arnous de la Rivière, que como representante del capitalista 900 francés Lucian Armand (miembro de la Cámara de Diputados y 901 dueño de un astillero en Burdeos), hizo proposiciones de compra 902 de la riqueza guanera boliviana. Vergara Albano vio con 903 desasosiego las actividades de un individuo que estaba abriendo 904 los ojos sobre el valor de las covaderas. Trató de desacreditarlo. 905 Sembró dudas sobre su título nobiliario y respecto a la existencia 906 del capital que decía representar. El aristócrata galo, en vez de 907 resentirse, buscó la amistad de su gratuito detractor. Le hizo 908 comprender que unidos conseguirían más del gobierno boliviano 909 que haciéndose competencia. El ministro chileno reconoció las 910 ventajas de tal proposición y aceptó el compadraje. 911 912 Vergara Albano y De la Rivière propusieron entonces a las 913 autoridades bolivianas que se les encomendara buscar juntos 914 una fórmula por medio de la cual la riqueza guanera de 915 Mejillones, en vez de ser motivo de discordia entre dos 916 repúblicas vecinas y hermanas, hiciese la felicidad y fortuna de 917 las dos. Melgarejo y Muñoz aceptaron, entusiasmados con el 918 anuncio de que su paupérrima administración iba a ser pronto 919 tonificada con importantes ingresos provenientes de un territorio 920 que Chile tenía ocupado y de que, además, Monsieur Lucian 921 Armand podrían hacerles importantes préstamos. 922 923 Los compadres se pusieron rápidamente de acuerdo. Todo el 924 guano sería comprado por Armand y el resultado pecuniario de 925 las operaciones se lo dividiría entre los gobiernos de Bolivia y 926 Chile. Aprobada la idea por Melgarejo, el barón viajó a Santiago 927 con el fin de conseguir la anuencia chilena. Llevó una carta del 928 señor Vergara Albano al canciller Álvaro Covarrubias que decía: 929 "La Paz, 16 de mayo de 1866. Por lo que toca ala formalidad del 930 contrato, Melgarejo encarga a su ministro Muñoz Cabrera que se 931 someta en todo a lo que se acuerde allí, que se vea con usted y 932 que firme el documento. Sobre las cantidades que Bolivia debe 933 recibir recomiendo a usted que sea Chile tan generoso como 934 pueda, porque debemos gratitud a este gobierno, que se 935 encuentra muy apurado de fondos. Esa generosidad nos será 936 bien compensada en la cuestión de límites". 937 938 El Gobierno de Chile siguió el consejo de su agente diplomático 939 en La Paz. Se mostró "generoso". Consintió en recibir sólo una 940 mitad de la riqueza de la que había tomado posesión sin derecho 941 alguno y en que la otra mitad fuese a manos de quien era 942 legítimo dueño de su totalidad. 943 944 VII 945 PARTICION SALOMÓNICA DEL TERRITORIO 946 947 La partición salomónica del guano del litoral boliviano, a la que 948 se llegó como resultado del contubernio del ministro chileno, 949 Aniceto Vergara Albano, y el negociante francés, Barón Arnous 950 de la Rivière (como representante de su compatriota Lucien 951 Armand), aceptada con beneplácito por los gobiernos de Bolivia 952 y Chile por considerar la solución más adecuada a la 953 controversia que sustentaban desde 24 años antes sobre la 954 propiedad de las covaderas, marcó la pauta para encontrar la 955 fórmula de una amistosa liquidación de su problema territorial. 956 957 La iniciativa al respecto partió del negociador boliviano, el 958 abogado Mariano Donato Muñoz, Secretario General del gobierno 959 de Mariano Melgarejo y, como tal, encargado del manejo de las 960 relaciones exteriores. El 3 de junio de 1866, le propuso al 961 diplomático chileno el deslinde de soberanías en el desierto de 962 Atacama de la misma manera que se había deslindado la 963 cuestión de los guanos: dividiendo lo disputado por mitad. El 964 paralelo del grado 24 de latitud sur sería la línea de separación 965 entre las dos repúblicas. La dificultad radicaba en que en la parte 966 chilena, al sur del paralelo 24, no había nada más que arena 967 inservible. En' cambio, al norte, en la parte boliviana, entre los 968 paralelos 24 y 23, los cateadores chilenos y de otras 969 nacionalidades venían descubriendo salitre, plata y otros 970 minerales. ¿Cómo hacer equitativo el deslinde? Don Donato tuvo 971 una idea feliz. El Gobierno de Bolivia cedería al de Chile la mitad 972 de todo lo que recibiera como renta fiscal por impuestos 973 cobrados a los explotadores de esos productos, como lo había 974 hecho con la riqueza del guano. El Gobierno de Chile, por su 975 parte, se comprometía a ceder al de Bolivia el 50 por ciento de 976 lo que eventualmente pudiera percibir por la explotación de los 977 recursos que llegaran a descubrirse en el área que pasaba a su 978 soberanía. Chile podría nombrar interventores en el puerto de 979 Mejillones (que Bolivia se comprometía a habilitar) para 980 controlar el monto de su participación. Bolivia podría hacer lo 981 mismo en puertos chilenos si algún día se exportaba algo del 982 territorio comprendido entre los grados 24 y 25. 983 984 En otras palabras, el señor Muñoz propuso que entre los grados 985 23 y 25, el guano y todo ingreso fiscal por explotación de otros 986 recursos, se dividiría por igual entre los gobiernos de las dos 987 repúblicas. Pero, como toda riqueza en covaderas, salitre y 988 minerales quedaba en la parte boliviana (grado 23 y 24) y nada 989 se había descubierto, ni se descubrió después, en la parte 990 chilena (grado 24 y 25), lo que en realidad ofreció fue partir 991 solamente bienes bolivianos. 992 993 La largueza del señor Muñoz al hacer semejante proposición 994 estaba en consonancia con los principios enunciados por el 995 gobierno de Melgarejo en sentido de que las fronteras de Bolivia 996 eran "meras líneas matemáticas" y todo americano, con sólo 997 pisar suelo boliviano, adquiría los mismos derechos que los 998 nacidos en él, con la sola excepción de los de elegibilidad para 999 los tres cargos públicos más altos: Presidente de la República, 1000 Presidente de la Corte Suprema y Presidente del Congreso. 1001 1002 Era de suponerse que el gobierno de Santiago quedaría más que 1003 satisfecho con las "bases" presentadas por el inefable don 1004 Mariano Donato Muñoz. Pero no fue así. Dándose cuenta de cuán 1005 inexperta y romántica era la administración del caudillo tarateño, 1006 trató de sacar aún mayores ventajas. El canciller Álvaro 1007 Covarrubias instruyó a su ministro Vergara Albano que procurase 1008 el traslado de la negociación de La Paz a Santiago y que 1009 Melgarejo remitiese a su agente diplomático en la capital 1010 chilena, señor Juan Ramón Muñoz Cabrera, "facultades tan latas 1011 y liberales como fuese posible, tanto para modificar las bases en 1012 su parte esencial, como para los diversos pormenores". Le avisó 1013 que se tenía interés en incluir en el acuerdo una cláusula que 1014 eximiese de todo derecho a los productos que Chile introdujese 1015 por el puerto de Mejillones. Otro interés era conseguir la 1016 liberación del pago de impuestos a favor de los chilenos que 1017 explotaban riquezas en el litoral boliviano. 1018 1019 Melgarejo que se sentía honradísimo por haber sido obsequiado 1020 con el título de "General de División del Ejército Chileno" (como 1021 también lo fueron los mandatarios del Perú y Ecuador, en señal 1022 de reconocimiento por haberse puesto al lado de Chile en la 1023 guerra contra España), no negaba nada a Vergara Albano. Envió 1024 plenos poderes a don Juan Ramón Muñoz y éste, el 10 de agosto 1025 de 1866, firmó con el Ministro Covarrubias el tratado de límites. 1026 1027 El pacto estableció: 1) que el paralelo 24 de latitud meridional 1028 constituía la línea divisoria de las soberanías de Bolivia y Chile; 1029 2) que los guanos de Mejillones y los que se descubriesen en el 1030 futuro entre los grados 23 y 25 se dividiría por partes iguales 1031 entre las dos repúblicas; 3) que se dividirían en igual proporción, 1032 los derechos de exportación que se cobrase por los minerales 1033 extraídos de la misma zona; 4) que Chile controlaría con 1034 interventores los ingresos recaudados en la aduana boliviana de 1035 Mejillones para cobrar su parte; 5) que Bolivia haría lo mismo si 1036 se establecía alguna aduana en la costa chilena del grado 24 al 1037 25; 6) que quedaban libres de pagar derechos de exportación 1038 los productos del territorio comprendido entre los grados 23 y 1039 25, que se sacasen por Mejillones; 7) que se liberaba del pago 1040 de todo derecho de importación a los productos naturales de 1041 Chile que se introdujesen por el mismo puerto. 1042 1043 Los dos señores Muñoz, cuya escasa habilidad negociadora es 1044 visible en el tratado, pero cuyo patriotismo no puede ponerse en 1045 duda, actuaron con la principal mira de que Chile se retirase de 1046 Mejillones. Para conseguirlo, estuvieron dispuestos a pagar 1047 cualquier precio. 1048 1049 Historiadores bolivianos han afirmado que el tratado de límites 1050 de 1866 provocó una inmediata y general protesta en todo el 1051 país. Eso no es evidente. La impresión general fue de alivio, al 1052 saberse que se había recuperado una importante porción del 1053 litoral que muchos daban por definitivamente perdida. Por eso es 1054 que don Donato y don Juan Ramón disputaron entre sí su 1055 paternidad. Melgarejo cortó la competencia declarando en una 1056 carta al señor Muñoz Cabrera: "Todo o su mayor parte es obra 1057 del señor Vergara Albano". El muy bruto añadió en un discurso: 1058 "Cuando el arreglo de límites, le dije al señor Vergara Albano 1059 que si quería para Chile todo el territorio cuestionado así lo 1060 pactase y él ha sido más generoso que nosotros". 1061 1062 En la Asamblea Nacional de 1868 el tratado recibió aprobación 1063 unánime. Don Mariano Baptista Caserta dijo de él en 1874: "La 1064 justicia no ha de negarse a nadie. El tratado del 66 en cuanto a 1065 límites no se presta a los extremos de una reprobación iracunda. 1066 Teniendo en cuenta los antecedentes, partió, en transacción 1067 bastante equitativa, nuestra cuestión territorial. Chile se 1068 mantenía pertinaz en el grado 23, detentando nuestras riquezas 1069 actuales y arrebatándonos las expectativas de otras mayores. 1070 Por el tratado nos restituyó esos territorios. Nos devolvió 1071 Mejillones, sobre cuya reivindicación se volvían principalmente 1072 los deseos y los esfuerzos del patriotismo". 1073 1074 1075 VIII 1076 COMPLICACIONES DEL TRATADO DE 1866 1077 1078 El tratado de límites de 10 de agosto de 1866 decía en su 1079 preámbulo que estaba destinado a "consolidar la buena 1080 inteligencia y vínculos de alianza íntima" entre Bolivia y Chile. El 1081 Presidente Mariano Melgarejo creía haber encontrado en Chile al 1082 mejor amigo de Bolivia y él, personalmente, sentía por el vecino 1083 del sudoeste, su pueblo y sus gobernantes el mismo afecto 1084 cordial y sincero que le inspiraban sus representantes en La Paz, 1085 don Aniceto Vergara Albano y don Carlos Walker Martínez. 1086 1087 Estaba profundamente agradecido al gobierno de Santiago y a 1088 sus dos agentes diplomáticos por permitirle aprovechar de una 1089 mitad de los rendimientos pecuniarios del guano de Mejillones. 1090 Expresó que al compartir ambos países del estiércol de aves de 1091 esa península estaban "a partirse de un mismo pan", como dos 1092 buenos hermanos. 1093 1094 Las larguezas de Melgarejo con los bienes de Bolivia (al Brasil le 1095 cedió 100.000 kilómetros cuadrados de territorio por el tratado 1096 de límites de 1867), atrajeron a otros capitalistas, además de 1097 Lucian Armand y su representante el Barón Arnous de la Rivière. 1098 Don José Avelino Aramayo llegó de Londres a la sede del 1099 gobierno al mismo tiempo que el francés, representando a 1100 firmas británicas qua también querían el guano boliviano y 1101 ofrecían un peso más por tonelada. 1102 1103 Melgarejo prefirió a los que venían de la patria de su ídolo 1104 Napoleón y no a los súbditos de la Reina Victoria, que orgullosa 1105 y altiva, tenía a Bolivia "borrada" de toda consideración desde 1106 1852, sin enviar a ella ningún representante diplomático o 1107 consular. 1108 1109 Muy pronto surgieron las desilusiones. El Barón de la Rivière no 1110 cumplía su oferta de hacer importantes adelantos sobre la 1111 explotación del guano y préstamos a la administración. Don 1112 Mariano Donato Muñoz, en su condición de Secretario General de 1113 la misma, fue a buscarlo hasta Cobija. El galo no quiso recibirlo. 1114 Durante dos días pretextó estar muy enfermo. Al tercero no 1115 pudo evitar la entrevista. Hizo nuevas promesas de dinero y de 1116 construcción de un ferrocarril de Cobija a Calama. 1117 1118 De la Rivière era hábil como parlanchín, pero no como 1119 empresario. Conducía a tropezones la extracción de fertilizantes 1120 de Mejillones. Los peones que tenían que hacer la penosísima 1121 tarea de cavar la dura y pestilente materia y cargarla en los 1122 buques que la conducían a Europa no recibían sus emolumentos 1123 con puntualidad Trescientos de ellos marcharon hasta Cobija en 1124 son de protesta. No todo era culpa del barón. La raíz del mal 1125 estaba en que su mandante, Lucian Armand, había perdido casi 1126 todo su dinero en otros negocios y no podía hacerle giros. 1127 1128 Arnous de la Rivière, que tenía tan convencido al Gobierno de 1129 Chile como al de Bolivia de la solvencia de Armand, se prestó 1130 dinero del primero para hacer algunas entregas al segundo y 1131 pagar a los trabajadores. Empero, no le fue posible seguir 1132 engañando indefinidamente tanto en Santiago como en La Paz. 1133 Cuando la quiebra de Armand se hizo noticia internacional, los 1134 dos gobiernos rescindieron su contrato. El entabló juicio 1135 demandando daños y perjuicios, pero la Corte Suprema de 1136 Justicia de Chile falló en su contra con carácter inapelable. 1137 1138 De inmediato hizo aparición un substituto de más amplio vuelo y 1139 habilidades. Un norteamericano que tenía una gran capacidad 1140 para hacer fortuna y luego derrocharla, para pasar de la miseria 1141 ala opulencia y viceversa con asombrosa sangre fría. Era el 1142 futuro constructor de la mayoría de los ferrocarriles peruanos, el 1143 futuro gran potentado de las costas del Pacífico. Se llamaba 1144 Enrique Meiggs. En el momento en que lo encontramos pasaba 1145 de los 50 años y después de haber sido millonario en su patria y 1146 haber escapado de ella por deudas se estaba ganando 1147 modestamente la vida como contratista del carguío del guano de 1148 Mejillones dentro del contrato de Armand. 1149 1150 Al fracasar el negocio de los franceses, Meiggs vio que se le 1151 presentaba una oportunidad providencial de enriquecerse 1152 nuevamente. Movilizó a La Paz a un senador chileno, distinguido, 1153 inteligente, con tanto o más don de gentes que Vergara Albano y 1154 Walker Martínez, don Lorenzo Claro. 1155 1156 Transcurría el año 1868 y el gobierno de Melgarejo se 1157 encontraba en más apuros de dinero que nunca a raíz de los 1158 problemas que se suscitó a sí mismo por haber puesto en 1159 circulación moneda feble que nadie quería aceptar. Era urgente 1160 reemplazarla por circulante de buena ley, a fin de salvar el 1161 crédito del país, dentro como en las repúblicas vecinas en las 1162 que la moneda boliviana había tenido siempre gran acogida por 1163 el valor intrínseco de su contenido de plata. 1164 1165 Meiggs, por medio de Claro, ofreció un préstamo de cuatro 1166 millones de pesos que se garantizarían con la parte boliviana del 1167 guano de Mejillones y todos los minerales que existían en el 1168 litoral. Como Meiggs quería exportar también la parte chilena de 1169 los guanos, el gobierno de Melgarejo no tuvo el menor 1170 inconveniente en nombrarlo su Agente Financiero en Santiago, a 1171 fin de facilitarle sus gestiones al respecto. Triunfó en toda la 1172 línea. Contrató la explotación del guano boliviano a seis pesos la 1173 tonelada y del chileno a diez. La diferencia fue resultado de la 1174 incapacidad negociadora de uno de los gobiernos y de la 1175 habilidad del otro. 1176 1177 Para contentar por de pronto a Melgarejo, Meiggs le hizo entrega 1178 de un millón de pesos a cuenta de los cuatro prometidos. No 1179 llegó a darle más. Fue deuda que con el correr del tiempo, 1180 debido a los intereses acumulados del ocho por ciento anual, 1181 llegó a 1.800.000. Bolivia no pudo liquidarla sino en 1887, y esto 1182 gracias a fondos facilitados de su peculio personal por el 1183 millonario Presidente de la República de ese entonces, señor 1184 Gregorio Pacheco. 1185 1186 Con Meiggs, la explotación de las covaderas no tuvo tropiezos 1187 financieros y la "partición del pan" pudo seguir haciéndose de 1188 conformidad con las estipulaciones del tratado de 1866. Las 1189 dificultades en las relaciones boliviano-chilenas renacieron como 1190 efecto de lo establecido en dicho pacto respecto a los minerales. 1191 El tratado del 66 fue en verdad un pacto muy sui génesis. 1192 Deslindó territorios y soberanías, separándolos con el paralelo 1193 del grado 24, pero creó áreas de posible conflicto al determinar 1194 que cada país tenía derecho a una mitad de la riqueza existente 1195 en la parte aledaña del otro, en una extensión de un grado 1196 geográfico. 1197 1198 Y el conflicto surgió casi de inmediato. Cuando el gobierno de 1199 Melgarejo comenzó a habilitar la hermosa bahía de Mejillones 1200 como puerto dictando la resolución respectiva y ordenando la 1201 construcción de un muelle, aduana, capitanía y otros edificios 1202 públicos, sucedió que lo primero en aparecer edificado fue la 1203 casa y oficina destinada a los funcionarios chilenos que iban a 1204 controlar la parte de su nación en los derechos de explotación de 1205 minerales. El control de los empleados chilenos se hizo 1206 incómodo y opresivo. Bolivia, inclusive por boca de don Mariano 1207 Donato Muñoz, se quejó de que "Chile quería imponer su 1208 voluntad a Bolivia y no la de jaba disponer de lo suyo". Por su 1209 parte, Chile reclamó porque Bolivia no le pagaba puntualmente 1210 su porción en los derechos cobrado: a los minerales que se 1211 exportaban. Exigió que se le permitiese establecer otra oficina 1212 de control en Antofagasta, por donde los mineros estaban 1213 sacando su producto de contrabando. 1214 1215 El tratado del 66, que todos creyeron que había instaurado e 1216 reinado de la armonía y la solidaridad entre las dos repúblicas, 1217 apartando lo del guano, resultó más bien fuente de malos 1218 entendidos susceptibilidades y mutuos reproches. 1219 La idea de su modificación o substitución por otro más 1220 conveniente fue ganando terreno en Bolivia. Esto se hizo más 1221 urgente con el descubrimiento de la fabulosa riqueza argentífera 1222 de Caracoles que Chile afirmaba que estaba en la zona de su 1223 coparticipación y Bolivia sostenía que estaba fuera, es decir, al 1224 norte del grado 23, el territorio de su exclusiva propiedad en 1225 suelo y bienes. 1226 1227 1228 1229 IX 1230 CARACOLES, NUEVO POTOSI 1231 1232 Grande desgracia fue para Bolivia la existencia de riquezas en el 1233 desierto de Atacama, que atrajeron la codicia de su vecino del 1234 sudoeste. Si no hubiera contenido nada más que arena 1235 inservible habría separado con su enorme soledad las soberanías 1236 de Bolivia y Chile, evitando todo roce fronterizo entre ellas. 1237 1238 El guano despertó la codicia chilena, pero no fue, como algunos 1239 creen, uno de los factores inmediatos que provocaron el 1240 enfrentamiento bélico de las dos repúblicas. Fue, sí, el iniciador 1241 de los problemas de vecindad, mas el Tratado de 10 de agosto 1242 de 1866 los solucionó al dividir por mitad el estiércol de las aves 1243 marinas existente en la península de Mejillones y sus 1244 alrededores. Así se explotó hasta su agotamiento por medio de 1245 contratistas sin que se suscitase ningún problema mayor que la 1246 quiebra de Lucien Armand, que fue substituido con ventaja por 1247 Enrique Meiggs. Se cumplió el deseo del dadivoso General 1248 Mariano Melgarejo, de que fuese un pan que se partían 1249 fraternalmente las dos naciones. 1250 1251 Empero, al lado de la codicia del gobierno de Santiago, que se 1252 podría llamar codicia oficial, existía la codicia personal de 1253 muchos ciudadanos chilenos por otras riquezas que los 1254 bolivianos tenían descuidadas en su litoral y que para ellos 1255 podían representar un trampolín para saltar de la pobreza a la 1256 fortuna. Era comentario general entre ellos que en un punto de 1257 la gran vastedad de Atacama existía una montaña de plata, un 1258 nuevo Potosí. Alguien había pasado una vez por el lugar y vio 1259 vetas argentíferas a flor de tierra. Dio la noticia, pero no había 1260 sabido orientarse bien y no pudo explicar ni su ubicación 1261 aproximada. 1262 1263 Fue con vistas a esa nueva riqueza que, al concertarse el tratado 1264 del 66, cuyos principales objetivos eran separar las soberanías 1265 de Bolivia y Chile por medio del paralelo del grado 24 y partir 1266 salomónicamente el guano de Mejillones, el gobierno de La 1267 Moneda, como algo incidental, logró introducir la estipulación de 1268 que también debían partirse por igual los derechos de 1269 exportación de los minerales que se explotasen entre los grados 1270 23 y 25. Los negociadores bolivianos, don Mariano Donato 1271 Muñoz y don Juan Ramón Muñoz Cabrera, la aceptaron sin darle 1272 mayor importancia. Ignoraban que la montaña de plata, según 1273 todos los indicios, podría estar ubicada en la parte boliviana de 1274 la zona de la mancomunidad y que muchos cateadores, en su 1275 mayor parte chilenos, la estaban buscando afanosamente. 1276 1277 Entre los que organizaron las exploraciones figuraron los 1278 franceses Latrille, el español Artola, el argentino Elizalde y otros. 1279 Quien con más empeño tomó el asunto fue el Barón Arnous de la 1280 Rivière (antes del fracaso de su empresa guanera), pues tenía 1281 opción a explotar todas las riquezas del litoral boliviano. Se 1282 asoció para el efecto con el chileno José Díaz Gana. Uno de los 1283 grupos enviados por éste, encabezado por el cateador Simón 1284 Saavedra, encontró, al fin, el ansiado lugar, en 1867, a 63 1285 leguas al sudeste de Cobija y a unas 18 leguas al sur de Calama. 1286 ¡Consistía en una serie de colinas que mostraban afloraciones 1287 argentíferas! Se le dio el nombre de Caracoles por la gran 1288 cantidad de conchas del molusco marino del mismo nombre que 1289 se veían esparcidas por doquier. 1290 1291 La noticia del hallazgo causó sensación, particularmente en 1292 Valparaíso y Santiago. Coincidió con la quiebra de Armand, la 1293 rescisión de su contrato y la desaparición del Barón de la Rivière 1294 del escenario atacameño. La plata de Caracoles quedaba a 1295 merced de quienes pudieran obtener concesión de estacas de las 1296 autoridades bolivianas de Cobija, sirvientes de la generosa 1297 administración de Melgarejo. 1298 1299 La fiebre de la plata sacudió a los chilenos corno décadas los 1300 había sacudido la fiebre del oro, cuando se descubrió la 1301 existencia de este metal en California y cientos de ellos, 1302 impulsados por un espíritu de empresa o el simple amor a la 1303 aventura, se fueron en su busca hasta los Estados Unidos de 1304 Norte América. Ahora el otro metal quedaba muy cerca, en el 1305 territorio aledaño al de su patria. En embarcaciones de todo tipo 1306 hicieron el viaje de pocos días de los puertos chilenos al 1307 boliviano de Cobija y de aquí se internaron en el desierto en 1308 mulas, asnos, carretas o a pie, rumbo a El Dorado caracolino. 1309 1310 Los caminantes fueron jalonando el trayecto con los cadáveres 1311 de aquellos de entre ellos que sucumbían de hambre o de sed. 1312 Carretones con víveres o agua eran asaltados muriendo otros en 1313 las refriegas. En los primeros cuatro años se hicieron alrededor 1314 de 14.000 peticiones. Caracoles se convirtió en un alborotado 1315 campamento minero en el que más de 10.000 seres humanos de 1316 los dos sexos, en su gran mayoría chilenos, vivían en casas 1317 rápidamente levantadas o en casuchas, tiendas de campaña o 1318 cuevas, compitiendo entre sí como empresarios, cateadores, 1319 peones, artesanos, arrieros, comerciantes, aguateros, 1320 prostitutas, especuladores, etc., etc., etc. Imperaban las leyes 1321 del fusil, el revólver y el puñal. 1322 1323 El gobierno boliviano designó un subprefecto y un juez, dándoles 1324 unos 20 gendarmes para que procurasen mantener el imperio 1325 del orden y la legalidad. 1326 1327 El agua se la traía de Calama, Chiuchiu o Limón Verde. Los 1328 víveres, herramientas, pólvora y forraje llegaban desde Chile. 1329 1330 La producción de plata, que tenía un promedio de 50 marcos por 1331 cajón, llegó a 80.000 marcos de metal por mes, o sea, superior 1332 en un 50 por ciento al total de la producción en los demás 1333 centros mineros de Bolivia, incluyendo la famosa mina de 1334 Huanchaca. 1335 1336 La terminación del régimen de Melgarejo significó un cambio 1337 fundamental en la vida de Bolivia. El derrocamiento del tirano, 1338 beodo y generoso, romántico y brutal, fue posible al fin, después 1339 de seis años, por una combinación de varios factores. Su 1340 decaimiento físico desde que meses antes sufriera una caída de 1341 su caballo y quedase parcialmente impedido en sus movimientos 1342 y desmoralizado. La tozudez de su principal enemigo, el Coronel 1343 Agustín Morales, que pudo complotar desde el Perú con la 1344 anuencia del gobierno de Lima, colaborado por el astuto político 1345 Casimiro Corral. La traición del Coronel Hilarión Daza, que 1346 vendió su lealtad por 10.000 pesos y se puso en su contra con el 1347 aguerrido batallón Colorados. 1348 Melgarejo, vencido en las barricadas de La Paz en el cruento 1349 enfrentamiento del 15 de enero de 1871, no tuvo más 1350 alternativa que huir al Perú, acompañado por Quintín Quevedo y 1351 otros cuatro amigos. 1352 1353 Al Coronel Agustín Morales, ascendido poco después a General y 1354 nombrado Jefe Supremo de la Nación, y a su factótum, el 1355 abogado Casimiro Corral, les tocó atender la nueva situación 1356 creada en las relaciones con Chile a raíz del auge de Caracoles y 1357 la demanda del gobierno de Santiago de participar en una mitad 1358 de su rendimiento fiscal de acuerdo con las estipulaciones del 1359 tratado de 1866 sobre impuestos a los minerales. 1360 1361 1362 1363 1364 SEGUNDA PARTE 1365 1366 X 1367 MORALES Y BUSTILLO 1368 1369 ¿La ubicación de Caracoles era al sur del grado 23, es decir, 1370 dentro de la zona en la cual Bolivia y Chile habían acordado 1371 dividirse los rendimientos fiscales de los minerales explotados en 1372 ella? ¿O estaba al norte y por lo tanto ningún derecho tenía Chile 1373 a participar en los impuestos de exportación de la plata? 1374 1375 Cuando se firmó el tratado de 10 de agosto de 1866, una 1376 comisión de dos ingenieros, el señor Pissis como representante 1377 de Chile, y el señor Mujía, como delegado de Bolivia, hicieron la 1378 demarcación de los paralelos de los grados 23, 24 y 25. 1379 1380 Los yacimientos argentíferos de Caracoles no se encontraban en 1381 una sola colina, en una sola montaña como se creyó en un 1382 principio. Además de la principal, a cuya vera se formó la 1383 población de ese nombre y donde se trabajaban las minas más 1384 importantes, entre ellas la del chileno José Díaz Gana, que se 1385 bautizó con el nombre de "La Descubridora" y resultó la más 1386 rica, se fueron hallando otras colinas con afloraciones de metal 1387 en una faja angosta que se prolongaba varios kilómetros hacia el 1388 sur. En ellas se fueron instalando campamentos que se 1389 denominaron Caracoles Segundo, Caracoles Tercero y Caracoles 1390 Cuarto. 1391 1392 El gobierno de Santiago, confiando en que toda la plata estaba 1393 dentro de la zona de mancomunidad de derechos, exigió el 1394 estricto cumplimiento del tratado del 66. El gobierno de La Paz 1395 sostuvo que la mensura de los citados paralelos había sido 1396 defectuosa por falta de idoneidad del ingeniero Mujía y que debía 1397 verificarse una nueva. 1398 1399 Chile destacó a La Paz al señor Floridor Rojas con el rango de 1400 Encargado de Negocios y la misión de insistir en la reclamación 1401 de su país. (El señor Aniceto Vergara Albano perdió su puesto 1402 años antes por haber sido introductor en Chile del mal 1403 aventurado Barón Arnous de La Rivière. Fue reemplazado por el 1404 distinguido intelectual Ramón Sotomayor Valdez, que también 1405 volvió a Santiago después de un período de funciones de poco 1406 más de tres años y que relató sus impresiones sobre lo que fue 1407 la administración del General Melgarejo en un libro que tituló "La 1408 Legación de Chile en Bolivia desde septiembre de 1867 hasta 1409 principios de 1871 "). 1410 1411 El señor Rojas era hombre altanero, "mediocre, con humos de 1412 poeta y sin antecedente alguno". En su primera entrevista con el 1413 Ministro Casimiro Corral le espetó la amenaza de que "en caso 1414 de que Bolivia no aceptase de buen grado la mensura de los 1415 grados 23, 24 y 25 hecho por Pissis y Mujía, sobrevendría un 1416 conflicto de serias consecuencias y que lo notificaba para que 1417 escogiese un medio para que Chile no asuma una actitud que 1418 Bolivia tendría que lamentar". Don Casimiro le contestó: "Amigo 1419 Rojas, usted toma muy a pecho la cuestión. Me parece que si el 1420 circunspecto gobierno de su país escuchara sus palabras las 1421 desaprobaría. Por tan poco no podemos agriarnos ni 1422 comprometer los intereses de dos naciones hermanas y amigas". 1423 1424 ¿Quiénes eran los dos hombres que tenían en sus manos el 1425 destino de Bolivia y debían encarar las nuevas exigencias del 1426 vecino del sudoeste? 1427 1428 Agustín Morales tenía a la sazón 63 años. Nació en La Paz. 1429 Ingresó a la carrera militar a los 16 años para escapar de una 1430 pobreza extrema y de una condición social muy humilde en la 1431 que tuvo que hacer hasta de sirviente y de vendedor de velas en 1432 las puertas de los templos. Llamó la atención por su valor en la 1433 batalla de Yungay. Fue sumamente veleidoso en sus lealtades 1434 políticas, pasando de obsecuente servidor a enemigo acérrimo 1435 de los presidentes Belzu, Linares, Achá y Melgarejo. Mientras 1436 estuvo fuera de la profesión castrense se dedicó al comercio con 1437 mucha suerte y habilidad, alcanzando una posición económica 1438 holgada. De entre los caudillos bolivianos ha sido, 1439 probablemente, el de cultura más rudimentaria, aunque 1440 balanceada con la experiencia en los negocios humanos que 1441 adquirió a través de una vida de muy variada circunstancia. 1442 1443 Casimiro Corral, brazo derecho de Morales durante todo su 1444 gobierno, nació a su vez en La Paz, en 1830, en un hogar 1445 mestizo, también muy humilde. Más tarde, por razones de 1446 conveniencia política, afirmaba ser de 'origen indígena. 1447 Inteligente y astuto, pasó por la escuela, el colegio y la 1448 universidad con rara habilidad, graduándose de abogado. Se 1449 inició en política como partidario de Linares. Fue opositor de 1450 Achá y Melgarejo, sufriendo los consiguientes apresamientos y 1451 destierros. 1452 1453 Morales, aclamado como un héroe nacional por su victoria sobre 1454 Melgarejo, olvidó antiguos rencores y decidió gobernar con la 1455 colaboración de los mejores hombres de la república. Para 1456 atender la nueva cuestión con Chile pensó en quien era 1457 considerado el más experto e ilustrado en la problemática de las 1458 relaciones con ese país: don Rafael Bustillo. 1459 1460 Era urgente llevar las discusiones a Santiago, a fin de evitar que 1461 los exabruptos del señor Floridor Rojas en La Paz empeorasen la 1462 situación. 1463 1464 Morales y Bustillo podían considerarse enemigos desde los 1465 agitados tiempos de Isidoro Belzu, cuando el segundo era el 1466 principal colaborador del caudillo populachero, tomando a su 1467 cargo simultánea, sucesiva o alternativamente, los ministerios 1468 de Gobierno, Hacienda y Relaciones Exteriores y el primero quiso 1469 ultimar a Belzu mientras yacía muy mal herido en el Prado de 1470 Sucre (debido a un intento de asesinato de dos estudiantes), 1471 disparándole otro tiro a quemarropa y tratando de hacerlo 1472 pisotear con los cascos de su caballo. 1473 1474 El ilustre potosino se encontraba radicado en Sucre. Había vivido 1475 apartado de la vida pública durante los seis años del régimen 1476 melgarejista, dedicado al estudio y el descanso, cambiando de 1477 residencia, según las estaciones, entre su casa de la capital y 1478 una chacra que poseía a orillas del río Cachimayo, a 20 1479 kilómetros de distancia, llamada "Ñucchu". El Prefecto del 1480 Departamento le transmitió la invitación del Jefe del Estado. El 1481 gobierno deseaba que fuese a Santiago de Chile como Ministro 1482 Plenipotenciario con la misión de procurar que las relaciones con 1483 esa nación se mantuviesen en un clima de entendimiento y 1484 cordialidad, evitando que Caracoles se convirtiese en lo que 1485 había sido Mejillones antes del tratado de 1866. 1486 1487 Para don Rafael Bustillo, entonces de 58 años de edad, nada era 1488 tan satisfactorio a su moral, intelecto y sentimientos que servir a 1489 su patria. Lo había hecho con dedicación total como Ensayador 1490 de la Casa de la Moneda de Potosí, como ministro múltiple del 1491 Presidente Belzu y como canciller del Presidente Achá. La 1492 inactividad era para él un remordimiento de conciencia. Escribió 1493 de inmediato al Presidente Morales: "Acepto agradecido la 1494 misión con que Vuestra Excelencia me honra y la acepto con 1495 enorme gratitud por la espontaneidad con la que Vuestra 1496 Excelencia me ha señalado su estimación". 1497 1498 Ambos personajes se encontraron en Potosí, en circunstancias 1499 en que el flamante jefe de la nación viajaba a Sucre desde La 1500 Paz recibiendo en ciudades y pueblos del trayecto las 1501 aclamaciones y el agradecimiento de los ciudadanos por haberlos 1502 libertado de una tiranía y el aún más flamante plenipotenciario 1503 se dirigía a la sede de sus funciones. 1504 1505 Morales, tomando en cuenta la fama que tenía Bustillo de 1506 hombre de mucha energía y de reacciones violentas, le 1507 recomendó que en sus tratos con los gobernantes del país vecino 1508 se mantuviese en calma "porque Chile sólo esperaba una 1509 coyuntura para suscitar enojos y querellas e iniciar un conflicto 1510 que le diese pretexto para apoderarse de todo el litoral 1511 boliviano". Bustillo contestó que no convenía a Bolivia que su rol 1512 fuese demasiado pasivo, pues "así se eternizarían las cuestiones 1513 y la riqueza de Caracoles serviría, como hasta ese momento, 1514 únicamente para enriquecer a especuladores chilenos". 1515 1516 1517 XI 1518 DON RAFAEL BUSTILLO EN CHILE 1519 1520 En el viaje de Arica a Valparaíso, don Rafael Bustillo bajó a tierra 1521 en Cobija con la esperanza de encontrar las instrucciones que, 1522 de acuerdo con el ofrecimiento del Presidente Agustín Morales, 1523 debía enviarle allí el Ministro Casimiro Corral. No las encontró. 1524 Las reclamó por carta diciendo que por los estudios que había 1525 hecho lo que convenía en las circunstancias del momento era 1526 obtener de Chile la modificación del tratado de 1866, de manera 1527 que esta república no tenga derecho a participar en el producto 1528 fiscal de los minerales bolivianos y el paralelo 24 quede como 1529 línea de separación de soberanía, territorios e intereses 1530 económicos, esto último con excepción del guano, que tendría 1531 que seguir dividiéndose. Como compensación a Chile por su 1532 renuncia a los minerales se le podría ofrecer una mayor 1533 participación en el fertilizante. 1534 1535 El señor Bustillo llegó a Santiago en agosto de 1871. No era 1536 precisamente la persona que muchos chilenos gustaron de ver 1537 en su capital como representante diplomático. Se recordaba muy 1538 bien que 8 años antes, en su condición de Ministro de Relaciones 1539 Exteriores del Presidente José María de Achá, obtuvo del 1540 Congreso autorización para que el Ejecutivo declarase la guerra 1541 a Chile si no se obtenía la desocupación de Mejillones por la vía 1542 pacífica. Don Aniceto Vergara Albano y don Nicomedes Ossa 1543 hicieron propaganda en su contra. 1544 1545 Otro factor, si no de dificultades, pero sí de vergüenzas, fue para 1546 él la presencia en Santiago del General Mariano Melgarejo, 1547 empobrecido y más beodo que antes, sirviendo de hazmerreír 1548 hasta a los mozos de hoteles y cantinas. Estaba tan rebajado en 1549 su dignidad que pretendía cobrar sueldos como General de 1550 División del ejército chileno. Quien fuera tan adulado y ensalzado 1551 por Vergara Albano y Walker Martínez en nombre de su gobierno 1552 mientras tuvo a su arbitrio la suerte de Bolivia, resultó objeto de 1553 escarnio y desprecio ahora que no era más que un infeliz 1554 proscrito de su patria. Volvió a Lima para reclamar a los 1555 miembros de la familia de su amante, Juana Sánchez, parte del 1556 dinero que habían acumulado usufructuando del poder a su lado. 1557 Fue muerto a balazos por quien era a la vez su yerno y su 1558 cuñado, Juan Aurelio Sánchez. 1559 1560 Don Rafael presentó sus credenciales de plenipotenciario al 1561 Presidente José Joaquín Pérez, que se encontraba en las 1562 postrimerías de su mandato. En su discurso le dijo que tenía la 1563 intención de "traducir fielmente los sentimientos de paz, unión y 1564 fraternidad que el pueblo y el gobierno de Bolivia abrigaban por 1565 el hermoso Chile". 1566 1567 No pudo oficiar gestiones oficiales hasta que el nuevo 1568 mandatario, señor Federico Errázuriz, tomase posesión de su 1569 cargo. En su primera entrevista con él, el 11 de octubre (1871), 1570 le planteó el objetivo de su misión. El tratado de 1866 había 1571 creado una mutua e incómoda servidumbre entre Bolivia y Chile. 1572 ¿No sería posible suprimir los derechos recíprocos de un país 1573 sobre los minerales del otro en el territorio aledaño? Bolivia 1574 estaba dispuesta a indemnizar a Chile por los perjuicios que le 1575 ocasionase la modificación del pacto. 1576 1577 Don Federico escuchó cortésmente la larga exposición del 1578 diplomático y al final sólo expresó: "¿Nada más?" ¿Significaba 1579 esto alarma por lo excesivo de las pretensiones bolivianas o 1580 sorpresa por su exigüidad? Don Rafael prefirió creer en lo 1581 segundo y salió del Palacio de La Moneda muy optimista sobre el 1582 buen éxito que tendrían sus gestiones. 1583 1584 Durante los dos meses siguientes no pudo adelantar un sola 1585 paso. Se discutía en el Congreso el pedido del Poder Ejecutivo de 1586 que el Ministerio de Relaciones Exteriores fuese independiente 1587 del de Gobierno y Justicia. Sólo cuando así quedó resuelto pudo 1588 tener su primera conversación con el recién nombrado canciller, 1589 señor Adolfo Ibáñez. Reiteró ante él lo que había dicho al 1590 Presidente Errázuriz. 1591 1592 El señor Ibáñez declaró que debía discutirse la manera en que el 1593 tratado del 66 se cumpliese más estrictamente. El señor Bustillo 1594 arguyó que previamente tenía que definirse la exacta ubicación 1595 de Caracoles. El gobierno boliviano creía de buena fe que se 1596 encontraba, si no en su extensión total, por lo menos en su 1597 parte principal, al norte del paralelo 23, en territorio 1598 exclusivamente boliviano. 1599 1600 Don Rafael, en cumplimiento de las instrucciones que había 1601 recibido, sostuvo que para determinar la posición geográfica del 1602 distrito argentífero no sólo debía tomarse en cuenta la latitud, 1603 sino también la longitud, es decir, no únicamente los paralelos 1604 sino también los meridianos. Don Casimiro Corral le había dicho 1605 que sostuviera que el límite oriental de Chile en Atacama no 1606 podía pasar del meridiano 72. De esta manera, Caracoles 1607 quedaría al este del suelo chileno, aunque estuviera al sur del 1608 paralelo 23. 1609 1610 Don Adolfo Ibáñez, reaccionó airadamente: ¡Qué meridianos ni 1611 qué meridianos! No hay necesidad de meridianos. Los límites 1612 orientales de Chile en todo tiempo, ahora y siempre, han sido las 1613 cumbres más altas de los Andes. Esta es la verdadera y única 1614 inteligencia del tratado". 1615 1616 La discusión se tornó agria. El canciller chileno era un resentido 1617 social que disimulaba su complejo de inferioridad con actitudes 1618 bruscas y altaneras. Era un digno jefe de su agente en La Paz, el 1619 señor Floridor Rojas. 1620 1621 Desde su informe al Congreso de 1863, don Rafael Bustillo ha 1622 sido considerado por muchos como la personificación de la 1623 intransigencia que conviene a Bolivia en sus relaciones con Chile. 1624 Quienes lo clasifican de ese modo no hacen justicia a la 1625 ecuanimidad de su carácter y a la irreprochable honestidad que 1626 siempre tuvo su proceder tanto en cuestiones públicas como 1627 privadas. Llamará la atención saber me en cuanto a la re- 1628 mensura de los arados 23, 24 y 25 y al paralelo 72, aunque los 1629 planteó por obediencia a un mandato de su superior jerárquico, 1630 no volvió a insistir, y más bien se puso de parte del país vecino 1631 en su correspondencia a La Paz. 1632 1633 Dijo en unas de sus notas: "¿Son valederas las demarcaciones 1634 de los paralelos 23, 24 y 25 efectuadas por Pissis y Mujía? Juzgo 1635 que sí. Al poner en duda su legitimidad y exactitud Bolivia no 1636 procede con mucha lealtad. No tienen consistencia alguna 1637 nuestros argumentos para imponer como límite oriental de Chile 1638 el meridiano 72. 1639 1640 En las bases que el señor Mariano Donato Muñoz presentó al 1641 señor Albano para el tratado del 66, se dice al respecto: "La 1642 longitud fijada al territorio de Chile comprende desde el Litoral 1643 hasta la cordillera de los Andes". Tal declaración en un 1644 documento oficial, que figura en la memoria de ese ministro a la 1645 Asamblea de 1868, expresa claramente cuál es la inteligencia 1646 que el Gobierno de Bolivia dio, en el momento de celebrarse el 1647 pacto, al artículo primero, y hace que nuestra pretensión, a 1648 todas luces, sea insostenible. 1649 1650 Debemos tener la magnanimidad de dar a Chile razón cuando la 1651 tenga, así como defenderla con firmeza cuando esté de nuestra 1652 parte, haciendo de este modo que la justicia impere en las 1653 relaciones entre los dos pueblos, sin más diplomacia que la de la 1654 veracidad y la honradez". 1655 1656 1657 XII 1658 ¿VENDERÍA BOLIVIA SU LITORAL? 1659 1660 En la etapa inicial de las conversaciones sostenidas entre el 1661 Ministro de Relaciones Exteriores de Chile, señor Adolfo Ibáñez, 1662 y el Ministro Plenipotenciario de Bolivia, don Rafael Bustillo, el 1663 primero llegó a aceptar la modificación del tratado de 1866, pero 1664 a condición de que Bolivia cediese a Chile el total del guano de 1665 Mejillones. 1666 1667 Declaró que su país renunciaría al rendimiento fiscal de los 1668 minerales existentes entre los grados 23 y 24 a condición de que 1669 se le diese el goce total del fertilizante. "Cesión por cesión —dijo 1670 —. Es la única manera en la que podemos zanjar nuestras 1671 querellas". Aseguró que tanto el Presidente Errázuriz como todos 1672 sus colegas en el gabinete estaban de acuerdo con esa 1673 proposición. 1674 1675 Don Rafael Bustillo supuso que el Gobierno de Santiago había 1676 hecho cubicar la riqueza de las covaderas de la península y que 1677 si proponía tal cambio era porque le iba a resultar un negocio de 1678 gran conveniencia. Contestó: "Bolivia podría comprar a tan caro 1679 precio la paz con Chile si hubiera mediado una guerra y la suerte 1680 de las armas le hubiera sido adversa. No hay entre, nosotros ni 1681 vencedor ni vencido, sólo dos naciones amigas y hermanas que 1682 tratan de arreglar de común acuerdo sus dificultades e intereses, 1683 de un modo equitativo y fraternal. Cesión absoluta de las 1684 guaneras de valores tan ingentes y saneados, ¡imposible! ". 1685 1686 Al retirarse a su domicilio, don Rafael recapacitó. Las guaneras 1687 eran un bien extinguible. A cambio de una mitad de ellas, que 1688 era la parte que le correspondía a Bolivia, se podría asegurar 1689 para siempre la tranquila y exclusiva posesión del litoral a partir 1690 del grado 24, donde estaban Caracoles y los puertos de 1691 Antofagasta, Mejillones, Cobija y Tocopilla. No habría en los dos 1692 primeros, la odiosa presencia de interventores extranjeros 1693 fiscalizando los ingresos d las aduanas por exportación de 1694 minerales. Los chilenos que habían obtenido concesiones 1695 tendrían que seguir explotando las minas d Caracoles, pero el 1696 gobierno boliviano podría cobrarles los impuestos que 1697 considerase necesario y recibir todo su rendimiento. 1698 1699 Escribió al Presidente Morales pidiendo autorización para acertar 1700 la proposición de Ibáñez: "Esto de tener nuestro territorio libre, 1701 saneado, sin más soberanía ni dominio que el de nuestro país, 1702 sin más dueños que los bolivianos; esto de ver conjurado todo 1703 peligro que hasta ahora nos ha estado amargando y causando 1704 pesadillas, temiendo que estos malditos aventureros, 1705 transformados en filibusteros, se antojen el día menos pensado 1706 suscitarnos una camorra y adueñarse de ese territorio. Yo no 1707 vacilo en subordinar todos lo guanos del mundo a tener el 1708 territorio libre de gabelas y tributos para un poder extraño... 1709 Chile codicia la propiedad boliviana qu1 le es fronteriza, ya sea 1710 en guanos o en territorio, o más bien ambos Con este 1711 conocimiento, muy imprudentes seríamos si no aprovechásemos 1712 de la actual coyuntura para llegar a un arreglo solemne que 1713 ponga coto a esa codicia y ya que no podemos salvar las dos 1714 cosas, sacrifiquemos la una a fin de lograr la completa seguridad 1715 de la otra. Con la cesión de la parte que nos corresponde en las 1716 guaneras, o sea, la mitad... alejamos todo evento de guerra con 1717 Chi le... Se podrá decir que en caso de conflicto armado el Perú 1718 no: salvará, haciendo causa común con nosotros contra Chile. 1719 Temo que nuestras esperanzas sean vanas a este respecto. El 1720 Perú no se ocupa de equilibrios continentales, ni de predominio 1721 en estos mares porque no tiene ni sistema, ni miras ciertas en 1722 su política exterior como las tiene Chile... Debemos contar con 1723 sólo nuestros esfuerzos y no veo que sea prudente provocar una 1724 lucha con Chile, que muy probablemente no se resolvería a 1725 nuestro favor". 1726 1727 Eran reflexiones que emanaban de un cerebro que tenía una 1728 apreciación zahorí de la realidad. Eran palabras que tenían el 1729 valor de una profecía... Pero eran reflexiones y palabras dirigidas 1730 por un estadista a quien estaba muy lejos de la misma 1731 condición. El Presidente Agustín Morales, que se mostraba tan 1732 decidido y autoritario en cuestiones de política interna, 1733 desconfiaba de la astucia chilena y demostraba timidez respecto 1734 a este país. Recomendó a su plenipotenciario "calma y más 1735 calma". "Mesura —le dijo en una de su comunicaciones—, nada 1736 más que con eso los hemos de vencer. Que nos juzguen de 1737 tontos y no de precipitados... ". En otra le explicó: "Yo he 1738 tomado el asunto tan seriamente que estoy mudo y con una 1739 reserva que toca a miedo y que lo tengo es verdad. Ya veremos 1740 la opinión de los ministros y según eso resolveremos... Ahora 1741 están embebidos en las ovaciones que de día en día reciben". 1742 1743 Al gobierno de Santiago le llegaron los informes del capitán del 1744 buque Esmeralda que había ido a calcular la cantidad de guano 1745 existente en la península de Mejillones. No era tan grande como 1746 se había supuesto. En vista de eso y aprovechando de la 1747 indecisión del gobierno de La Paz su planteamiento de "cesión 1748 por cesión", cambió. El canciller Ibáñez, "con estudiada 1749 ligereza", le dijo al señor Bustillo: "Yo me había olvidado 1750 manifestarle a Su Señoría que también podríamos hacer la 1751 recíproca, es decir, comprarles el territorio. Con eso tendrían 1752 ustedes con qué pagar sus deudas". 1753 1754 El representante boliviano respondió con una rotunda negativa. 1755 Manifestó que "semejante cosa jamás sería de la aceptación del 1756 gobierno, ni de la nación". 1757 1758 Estaba equivocado. Al saber del nuevo planteamiento chileno, el 1759 Ministro Casimiro Corral, explicando que lo hacía en nombre del 1760 Presidente de la República, le escribió autorizándole para que, 1761 "en caso de que el Gobierno de Chile reitere su oferta, reciba las 1762 bases de las proposiciones y todo lo demás relacionado con tan 1763 grave asunto". Por su parte, el mismo general Morales le dijo en 1764 una carta: "Conviene que usted exija por escrito o mejor dicho 1765 en protocolo la nueva proposición... Después el gobierno, 1766 haciendo un maduro estudio de ambas proposiciones, verá la 1767 que más conviene a los intereses del país". 1768 1769 No era la primera vez que Chile pretendía comprar la parte del 1770 litoral boliviano que contenía riquezas. Lo hizo inicialmente por 1771 medio de don Aniceto Vergara Albano, a quien el Presidente 1772 Mariano Melgarejo respondió que "no estaba en venta ni un sólo 1773 palmo". 1774 1775 En 1863, cuando don Tomás Frías llevó su misión 1776 contemporizadora a Santiago, mientras esperaba que le 1777 recibiesen sus cartas credenciales de plenipotenciario, tuvo 1778 charlas informales con el canciller Manuel A. Tocornal y en ellas 1779 ambos tantearon las mutuas intenciones de uno y otro gobierno. 1780 Tocornal propuso la compra de lo que Chile decía que era 1781 legítimamente suyo y estaba ocupando hasta el grado 23. Don 1782 Tomás, pensando seguramente que Bolivia no podría recuperar 1783 nunca la posesión de la península de Mejillones, inquirió por vía 1784 informativa, si Chile pagaría tres millones de pesos. Don Manuel 1785 A. Tocornal respondió que su país no daría más de cien mil. 1786 1787 Nada resultó de este intercambio personal de ideas. Don Tomás 1788 Frías, una vez iniciada su misión oficialmente, como se ha dicho 1789 en un artículo precedente, no llegó a discutir ninguna clase d 1790 arreglo porque el gobierno de La Moneda se negó a ello hasta 1791 que el gobierno boliviano anulase la autorización que recibió del 1792 Congreso para declarar la guerra a Chile si fallaban los medios 1793 diplomáticos para conseguir la desocupación de Mejillones. 1794 1795 Ahora que Mejillones estaba confirmado como territorio 1796 legítimamente boliviano por el tratado de límites de 1866, don 1797 Rafael Bustillo se horrorizó al leer la correspondencia de General 1798 Morales y su Ministro Corral que se ha mencionado. Contestó 1799 diciendo que El sólo intentar la venta sería "injurioso para la 1800 república, deshonra para el gobierno y no de pequeñas 1801 responsabilidades para el negociador". 1802 1803 Expresó en carta al primero: "El territorio, señor presidente, es 1804 la primera y la más sagrada de las propiedades nacionales 1805 porque encierra en sí todas las demás. Cuanto más débiles son 1806 las naciones, más lo estiman... Bolivia, señor, es una nación 1807 pobre, pero muy pundonorosa y créame Vuestra Excelencia que 1808 ella nos concerniría en masa si siquiera supiese que habíamos 1809 iniciado una negociación encaminada a mutilar su territorio, a 1810 arrebatarle su litoral, a empequeñecerla hasta el extremo, a 1811 disminuir su población, a menguar su importancia política, a 1812 degradarla poniéndola a los pies de Chile". 1813 1814 1815 XIII 1816 BUSTILLO VERSUS IBAÑEZ 1817 1818 No obstante las cartas del Presidente Agustín Morales y de su 1819 Ministro Casimiro Corral a don Rafael Bustillo encargándole que 1820 recibiera oficialmente las dos proposiciones chilenas —la primera 1821 de cambio del guano boliviano de Mejillones por la renuncia de 1822 Chile a su participación en los minerales y la segunda de compra 1823 por parte de Chile del litoral boliviano— y que las reciba por 1824 escrito y si posible consignadas en un protocolo, para que el 1825 gobierno haga "un maduro estudio de ambas y vea la que más 1826 conviene a los intereses del país", los dos personajes, en su 1827 correspondencia subsiguiente, muy cándidos a la vez que muy 1828 desfachatados, negaron rotundamente que hubieran alimentado 1829 la idea de negociar parte del suelo patrio. 1830 1831 El General Morales le dijo a don Rafael, en misiva de 30 de abril 1832 de 1872, que le extrañaba profundamente que pudiera "haber 1833 creído o siquiera pensado que el gobierno quería enajenar una 1834 sola pulgada del territorio". Le explicó que lo que él había 1835 instruido, y lo repetía, era que exigiese toda proposición por 1836 escrito, a fin de que así quedase constancia, dada por el mismo 1837 Chile, de que no era dueño de Atacama, pues nadie quiere 1838 comprar lo que legítimamente le pertenece. 1839 1840 Por su parte, don Casimiro Corral le dijo que él nunca fue 1841 partidario de la venta, sino de una simulación de venta, con 1842 objeto de ganar tiempo, pues el gobierno estaba tratando de 1843 conseguir en Europa elementos marítimos y terrestres para 1844 fortalecer su posición frente a Chile". 1845 1846 Respondió el señor Bustillo: "He leído con satisfacción que e 1847 Gobierno de Bolivia no cometerá la infamia de vender un solo 1848 palmo de nuestro territorio. Perfectamente, ¿pero si fuese 1849 infame ven der el territorio, sería honroso aparentar una 1850 venta?... ¿Para qué fomentar ilusiones y esperanzas de Chile 1851 cuando no se tiene el ánimo de satisfacerlas? No es bueno jugar 1852 con fuego... ¿Con qué objeto queremos fortificarnos con 1853 elementos marítimos y terrestres? Esto quiere decir que 1854 debemos prepararnos para una guerra. ¿Pero con quién la 1855 tendríamos? He expresado repetidas veces que Chile quiere y ha 1856 querido arreglar sinceramente sus cuestiones con Bolivia. Para 1857 ello se ha prestado a lo que parecía imposible: a la revisión del 1858 tratado de 1866. Lo ha hecho, es verdad, mostrándose exigente 1859 y altanero, pero de esto a declararnos la guerra hay un abismo. 1860 1861 Después se ha prestado a diversos arbitrios, siempre con el 1862 mismo fin... Debemos arribar cuanto antes a una solución 1863 necesaria, dando cumplimiento al tratado con abnegación y 1864 lealtad y continuando bajo la benéfica sombra de la paz y las 1865 buenas relaciones con Chile... Este gobierno urge por la 1866 adopción pronta de algún ajuste y a mí me parece que de 1867 nuestra parte deberíamos también apresurarnos y concluirlo. 1868 Creo que hoy nos hallamos en la mejor coyuntura y si 1869 esperamos, poniendo en juego moratorias, no consultamos bien 1870 lo que nos conviene... Mientras tanto, la prosperidad y audacia 1871 creciente de este pueblo nos ha de ahogar y abrumar si hoy no 1872 le ponemos atajo oportuno con un pacto que sirva para 1873 salvaguardar nuestros derechos. Lejos de ganar tiempo debemos 1874 anticiparnos a acontecimientos cuya corriente puede sernos fatal 1875 en lo sucesivo". 1876 1877 Don Rafael presentía con admirable lucidez que si no se frenaba 1878 a Chile donde estaba en ese momento, ya sea con el tratado del 1879 66, fielmente cumplido, o con otro substitutivo, las relaciones 1880 entre ambas repúblicas iban hacia una colisión que tendría 1881 resultados muy graves para Bolivia. 1882 1883 Con ese temor, y descartadas las ofertas de Chile de "cesión por 1884 cesión" (guano boliviano por renuncia chilena a los minerales) y 1885 de compra chilena de la costa boliviana, el señor Bustillo 1886 apresuró las negociaciones con el canciller Ibáñez para llegar a 1887 un acuerdo que diese forma más expeditiva al cumplimiento del 1888 tratado de 1866. Se convino entre ellos que mientras se 1889 definiese la exacta ubicación de Caracoles mediante una re- 1890 mensura de los paralelos 23 y 25 (que Chile acabó aceptando), 1891 los derechos cobrados por la exportación de los minerales se 1892 depositarían en un banco. Bustillo insistió en que esto se hiciese 1893 en la agencia que el Banco Nacional de Bolivia había abierto 1894 recientemente en Valparaíso. Ibáñez reclamó que fuese en un 1895 banco chileno. 1896 1897 El canciller Adolfo Ibáñez estaba muy contento de poder llegar a 1898 un entendimiento. Tenía en prensa la memoria que iba a 1899 presentar al Congreso dando cuenta de su manejo de la política 1900 exterior de Chile y quería presentar la definición de los 1901 problemas con Bolivia como su mejor triunfo, a fin de hacer 1902 méritos para seguir en sus puestos. 1903 1904 La mañana en la que debían reunirse los dos negociadores para 1905 ultimar detalles, le llegaron a don Rafael Bustillo instrucciones 1906 del Ministro Corral en sentido de que dejase en suspenso todas 1907 sus gestiones porque el gobierno estaba tratando los mismos 1908 asuntos en La Paz con el nuevo representante de Chile 1909 acreditado en esa ciudad, señor Santiago Lindsay. 1910 1911 Don Rafael se apresuró en ir al despacho del señor Ibáñez para 1912 darle aviso de la nueva situación planteada. Antes de que 1913 pudiese hablar, el ministro chileno le leyó el proyecto de 1914 protocolo que había redactado para su firma. El diplomático 1915 boliviano se dio cuenta de que el documento incluía puntos a los 1916 que él todavía no dio su consentimiento (como el de que el 1917 depósito de las rentas fiscales de los minerales se haga en un 1918 banco chileno), y otras que ni siquiera habían sido discutidas 1919 (derecho de Chile de cobrar esos réditos con carácter 1920 retroactivo). Expresó su sorpresa al respecto y dijo además que 1921 toda nueva discusión entre ellos sobre tales problemas era 1922 inconducente en virtud de las órdenes que le habían llegado de 1923 La Paz una hora antes. Leyó la parte pertinente de las notas del 1924 señor Corral. 1925 1926 El Ministro Adolfo Ibáñez montó en cólera. Trató a don Rafael 1927 Bustillo con altanería y torpeza. Le dijo que no volvería a hablar 1928 con él de esos asuntos ni ningún otro. 1929 Don Rafael dominó la reacción natural que le produjo el ex 1930 abrupto de su interlocutor y prefirió alejarse de él saliendo 1931 precipitadamente de su oficina. Después de reflexionar una hora 1932 y no queriendo que su rompimiento personal con Ibáñez pudiese 1933 llevar las relaciones de Bolivia con Chile a un peligroso 1934 empeoramiento, pidió audiencia con el Presidente Federico 1935 Errázuriz y le narró con detalle todo lo ocurrido. Le explicó que 1936 no era la primera vez que su ministro incurría con él en 1937 desmanes y groserías, que él soportó con resignación y silencio 1938 porque sabía el alto precio que tenían las buenas y cordiales 1939 relaciones entre las dos naciones. Pero que ahora la ofensa 1940 había sido tan grave cuanto injusta y hasta ridícula al querer el 1941 señor Ibáñez despojarlo por su sola voluntad del carácter de 1942 representante plenipotenciario de Bolivia en Chile. 1943 1944 El Jefe del Estado chileno lamentó vivamente lo sucedido. 1945 Reconoció que era una completa sinrazón pretender que un 1946 agente diplomático se apartase de las instrucciones de su 1947 gobierno, que tenían que ser la suprema regla de su conducta. 1948 Prometió reprender al señor Ibáñez y pidió al señor Bustillo que 1949 en deferencia a su persona disimulase lo ocurrido en la confianza 1950 de que él lo remediaría todo. 1951 1952 1953 XIV 1954 AYUDA CHILENA PARA UN RETORNO DEL MELGAREJISMO 1955 1956 Don Rafael Bustillo, en su condición de Ministro Plenipotenciario 1957 de Bolivia en Santiago, resolvió no volver a tratar con el Ministro 1958 de Relaciones Exteriores de Chile, señor Adolfo Ibáñez, hasta 1959 que éste le diese las explicaciones y satisfacciones que le debía 1960 por la torpeza con que lo trató en su entrevista del 3 de junio 1961 (1872). 1962 1963 El representante diplomático de la República Argentina quiso 1964 mediar entre ambos, pero el señor Bustillo le pidió que no lo 1965 hielera. Esperaba que Ibáñez actuase de motu proprio u 1966 obedeciendo a la intervención que le ofreció el Presidente 1967 Errázuriz. Mientras tanto, él esperaría silencioso y tranquilo, 1968 "cual correspondía a su dignidad". Salió con su gusto. El señor 1969 Ibáñez le dirigió una carta personal de tono muy amable, que él 1970 respondió en términos similares. 1971 1972 Quintín Quevedo, Mariano Donato Muñoz, Juan L. Muñoz, Severo 1973 Melgarejo (hijo de Mariano Melgarejo) y otros connotados 1974 usufructuarios de las granjerías del poder en el régimen 1975 derrotado en las barricadas de La Paz en enero de 1871, no se 1976 resignaron a perderlo todo y vivir en el ostracismo. 1977 1978 Complotaron su retorno al mando de la república bajo la égida 1979 de un nuevo líder, el General Quintín Quevedo. Como el gobierno 1980 de Lima, a instancias del de La Paz, se dispusiese a internarlos 1981 en regiones alejadas del Perú, se trasladaron a Valparaíso y allí 1982 instalaron el cuartel general de sus actividades subversivas. 1983 Personajes chilenos como don Nicomedes Ossa, les brindaron 1984 ayuda financiera a cambio de la promesa de que cuando el 1985 melgarejismo volviese a dominar en Bolivia ellos obtendrían 1986 ventajosos contratos para explotar sus riquezas. El gobierno de 1987 Santiago se hizo el de la vista gorda al respecto, especulando 1988 con la perspectiva de que si se encendía una guerra civil en el 1989 altiplano, los chilenos asentados por miles en el litoral 1990 atacameño, podrían levantar bandera de secesión de ese 1991 territorio de la soberanía boliviana y la de su incorporación a la 1992 chilena. 1993 1994 El gobierno del General Agustín Morales recibía frecuentes avisos 1995 sobre los trajines de Quevedo y sus secuaces y recomendaba a 1996 don Rafael Bustillo que los hiciese vigilar constantemente. 1997 Ayudaba en esta labor la misión diplomática del Perú en 1998 Santiago, a cargo de don Ignacio Novoa, y su cónsul en 1999 Valparaíso, señor Adolfo Salmón. Al gobierno de Lima le hacía 2000 muy poca gracia la idea de que el melgarejismo volviese a ser su 2001 vecino del este y menos aún la de que Chile pudiese llegar a ser 2002 su colindante por el sur. 2003 2004 Don Rafael Bustillo logró frustrar una expedición de los 2005 quevedistas cuando estaban listos a partir con rumbo a 2006 Antofagasta, embarcándose en el vaporcito "Tomé", en 2007 noviembre de 1871. Los 114 pasajeros fueron desembarcados 2008 en Valparaíso y se les decomisó armas y munición. 2009 2010 Con esta experiencia, los revolucionarios bolivianos y sus 2011 cómplices chilenos siguieron complotando, pero con mucho 2012 mayor sigilo. Los elementos de que se valía don Rafael Bustillo 2013 para vigilarlos eran el Secretario de su Legación, señor Gabriel 2014 René Moreno, a quien mandó dos veces a Valparaíso con ese 2015 objeto; el médico Julio Rodríguez, Cónsul en Caldera, a quien 2016 pidió fuese a Valparaíso con igual propósito y el señor Tomás 2017 Manuel Alcalde, destacado al mismo puerto por el Prefecto de 2018 Cobija. 2019 2020 El 31 de julio (1872), uno de los quevedistas, Juan Antonio 2021 Michel, desertó de las filas del complot y dio aviso a Rodríguez y 2022 Alcalde de que en pocas horas más iba a zarpar el vapor 2023 "Paquete de los Vilos" transportando a los revolucionarios con 2024 rumbo a Antofagasta. Alcalde y Rodríguez, acompañados de 2025 Michel, buscaron de inmediato al Intendente del Puerto, señor 2026 Francisco Echaurren Huidobro, y le pidieron que impidiese la 2027 salida del buque. Al mismo tiempo, dieron aviso telegráfico a la 2028 Legación boliviana en Santiago. Don Rafael Bustillo buscó al 2029 canciller Adolfo Ibáñez y le pidió que impartiese órdenes 2030 urgentes para detener a los expedicionarios. 2031 2032 Pese a estas gestiones, debido a la mal disimulada complicidad 2033 del Intendente Echaurren (cuñado del Presidente Federico 2034 Errázuriz), el "Paquete de los Vilos" partió la madrugada del 1° 2035 de agosto con el General Quintín Quevedo y su gente. Tres días 2036 antes había salido el buque de vela "María Luisa" transportando 2037 armas y munición. El 6 de agosto, los revolucionarios 2038 desembarcaron en Antofagasta sin encontrar ninguna 2039 resistencia. Quevedo lanzó un manifiesto llamando a todo el 2040 país, y particularmente al ejército, a plegarse a su acción para 2041 derrocar al régimen del Presidente Morales. 2042 2043 Juan L. Muñoz, uno de los principales colaboradores de Quevedo, 2044 relató años más tarde en una carta: "Reunido en Chile el número 2045 competente, llegó la oportunidad de embarcarnos. En esta 2046 circunstancia, el General Quevedo fue llamado a Santiago con 2047 mucha urgencia por don Nicomedes Ossa, amigo suyo, que le 2048 servía de intermediario con el Presidente de Chile, señor 2049 Errázuriz. Regresó al día siguiente, desesperado, resuelto e 2050 suspender la expedición. Vivíamos en el mismo hotel. 2051 Mereciendo su confianza y consideraciones supe que el 2052 Presidente Errázuriz le había propuesto, como condición de su 2053 apoyo, la cesión del litoral boliviano a Chile, a cambio de ayuda 2054 chilena para adquirir para Bolivia el litoral peruano de Arica e 2055 Iquique, lo que el General Quevedo había rechazado... Horas 2056 después, llegó a Valparaíso el señor Ossa. Tuvieron una larga 2057 conferencia. Supe por el general que el señor Errázuriz había 2058 retirado su proposición, pero envió con el señor Ossa una 2059 comunicación al Intendente de Valparaíso, en la que le ordenaba 2060 que prestase al General Quevedo el apoyo más decidido". 2061 2062 Don Rafael Bustillo, que viajó a Valparaíso y permaneció en el 2063 puerto varios días tomando datos sobre la complicidad chilena 2064 en la expedición filibustera, volvió a Santiago y considerando 2065 que a esa fecha se había desencadenado en su patria una 2066 cruenta guerra civil, dirigió una nota al canciller Ibáñez dando 2067 rienda suelta a la justificada cólera que embargaba su espíritu. 2068 Le dijo en ella: "Las consecuencias desastrosas (de la 2069 expedición) se desencadenan a esta hora en Bolivia, cuando 2070 después de seis años de luto y supremas angustias, se 2071 apresuraba el actual gobierno a estampar en el país el sello de 2072 su regeneración y engrandecimiento. Los que en el festín de su 2073 prosperidad no han temido insultar a la Providencia, empujando 2074 sin misericordia el mal hacia la hermana convaleciente y 2075 desheredada, conseguirán, sin duda alguna, remover en mala 2076 hora antiguos y ya amortiguados remordimientos. Pero no lo 2077 dude el Excelentísimo Gobierno de Chile, el pueblo boliviano 2078 conflagrado sabrá allí atajar la obra de ruina y escarmentar a los 2079 instrumentos de esa obra". 2080 2081 El señor Ibáñez le contestó pidiendo que le diese "pronta y 2082 categórica explicación sobre sus vagas y genéricas 2083 insinuaciones". 2084 2085 Don Rafael, como primera intención, decidió no satisfacer la 2086 exigencia del canciller, pero luego comenzó a preparar una 2087 extensa y documentada comunicación sobre la complicidad 2088 chilena en la aventura revolucionaria. Al octavo día, cuando 2089 todavía no había terminado su trabajo, le llegó otra misiva de 2090 Ibáñez dándole un plazco perentorio de 24 horas para dar las 2091 explicaciones solicitadas. La devolvió de inmediato, declarando 2092 en una nota de acompañamiento que "su dignidad personal y la 2093 del gobierno y nación que representaba, no le permitían tener en 2094 sus manos por un solo instante un documento que a todas luces 2095 tenía el propósito de ultrajarlo". 2096 2097 Contrarreplicó el señor Ibáñez cortando toda relación con don 2098 Rafael Bustillo al hacerle saber, en nombre del Presidente de la 2099 República, que desde esa fecha no serían admitidas en el 2100 Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile ninguna clase de 2101 comunicaciones que llevasen su firma y que estaba pidiendo al 2102 gobierno de LE Paz su retiro de Santiago, como "justo y 2103 merecido desagravio por las ofensas que había hecho al 2104 gobierno y al país que le brindaron cordial hospitalidad". 2105 2106 2107 XV 2108 MUTIS DE BUSTILLO, DE CHILE Y DE LA VIDA 2109 2110 Dolió profundamente a don Rafael Bustillo el hecho de que el 2111 Presidente Agustín Morales y su Ministro Casimiro Corral le 2112 ordenasen suspender las gestiones que con tanto empeño venía 2113 realizando en Santiago para llegar a un entendimiento definitivo 2114 con Chile sobre el conflicto de intereses en la frontera de 2115 Atacama, por creer ellos que llegarían a un mejor resultado en 2116 sus tratos con el nuevo ministro chileno acreditado en La Paz, 2117 señor Santiago Lindsay. 2118 2119 Como se ha dicho en un artículo anterior, el señor Lindsay fue 2120 enviado a Bolivia, en reemplazo del incompetente señor Floridor 2121 Rojas, cuando el gobierno de La Moneda propuso la compra del 2122 litoral boliviano, el señor Bustillo se mostró absolutamente 2123 opuesto a tal idea y llegaron a Santiago noticias de que el 2124 General Morales y su factótum Corral alimentaban intenciones 2125 favorables a tal clase de negociación. 2126 2127 Lindsay fue recibido en La Paz con un protocolo excepcional. 2128 Bustillo recibió instrucciones de Morales de hacer conocer esto 2129 por la prensa santiaguina. Le escribió al presidente: "He 2130 obedecido la orden, debo decir lealmente a Vuestra Excelencia 2131 que ha sido con sentimiento y pena, pues los honores que se le 2132 han tributado al señor Lindsay fueron exagerados y salieron 2133 enteramente de todo ceremonial conocido. La gran regla, la 2134 verdadera regla, en estos casos, es la de la reciprocidad, es 2135 decir, tratar a los otros como los otros nos tratan a nosotros... El 2136 señor Lindsay no pasa de ser un hombre muy común". 2137 2138 Don Rafael Bustillo, al sentirse descartado como negociador, 2139 también le dijo al Presidente Morales en otra carta: "Parece, 2140 señor, que atenta la situación de mi Legación y en vista de 2141 hallarse y abiertas las conversaciones con el señor Lindsay, que 2142 pueden arribar a un término satisfactorio, o que por lo menos no 2143 encontrarán de seguro el obstáculo que yo he encontrado en la 2144 altanería grosera del canciller Ibáñez, ya será tiempo de que 2145 Vuestra Excelencia s sirva permitirme mi regreso a la familia y al 2146 país. He trabajado ca empeño y afán en el cumplimiento de mis 2147 deberes, pero no he sido afortunado en los resultados, no 2148 habiendo alcanzado a cosecha hasta hoy nada más que 2149 disgustos y amarguras. Además, este horrible clima me mortifica 2150 y anhelo recobrar ya el sosiego y solaz d que disfrutaba en mi 2151 modesta chacra, de donde pudo sacarme sólo por algún tiempo 2152 la voz de Vuestra Excelencia". En otra misiva añadió: "No me 2153 quejo de Vuestra Excelencia ni del señor Corral y como boliviano 2154 y patriota jamás denegaré mis servicios a Vuestra Excelencia 2155 cuando en algo pudiera ser útil a mi país sin menoscabo de mi 2156 honra". 2157 2158 Al producirse su segundo entredicho con el señor Adolfo Ibáñez, 2159 a raíz de la colaboración chilena a la expedición filibustera de 2160 General Quintín Quevedo sobre el litoral boliviano, con vistas a 2161 in ciar un levantamiento general contra el régimen del 2162 Presidente Morales, don Rafael reiteró su deseo de dejar su 2163 puesto en Santiago. Rebasó el cáliz de amargura que bebía 2164 desde su llegada a Chile la intriga de un tal Wenceslao Allende, 2165 que escribió a La Paz, acusándolo de ser cómplice de dicha 2166 intentona revolucionaria. "¡Ah, señor presidente! —le dijo a 2167 Morales en una nueva comunicación— si yo me hubiera limitado 2168 a pasar a la cancillería chilena notas de quedo bien, como paños 2169 de agua tibia, habría estado en Santiago honrado y preconizado 2170 como un excelente ministro, garantía de la paz entre Bolivia y 2171 Chile. Pero seguí otros consejos, los del honor, la probidad y el 2172 patriotismo y me tiene Vuestra Excelencia de objeto de todos los 2173 odios, de piedra de todos los escándalos y hasta acusado d una 2174 negra y estúpida traición, asociado con el farsante baladrón 2175 Quevedo a quien no conozco, y con el miserable Muñoz, a quien 2176 toda la vida he despreciado. ¡Oh, esto es inaudito y hasta mi 2177 flema habitual se subleva y maldigo la vida pública! ¡Ante la 2178 calumnia, ni los años, ni los servicios, ni puros y nobles 2179 antecedentes pueden cosa alguna!". 2180 2181 Don Rafael Bustillo deseó que el gobierno de La Paz rompiese 2182 relaciones con el de Santiago, tomando como un ultraje a toda la 2183 nación, la actitud asumida por el canciller Ibáñez en contra suya. 2184 Pero Morales y Corral prefirieron que todo quedase como un 2185 simple incidente personal entre ambos, a fin de que no se 2186 perjudicasen las tratativas con el señor Lindsay que se iba 2187 desarrollando tan expeditamente. 2188 2189 El señor Bustillo volvió a Bolivia en octubre de 1872, después de 2190 haber trabajado un año en Santiago. A su paso por La Paz el 2191 gobierno le demostró "gélida indiferencia". 2192 Buscó refugio en Nucchu, su "modesta chacra", próxima a Sucre. 2193 Allí lo sorprendió la noticia del fallecimiento del Presidente 2194 Agustín Morales, ocurrido el 27 de noviembre, en un drama que 2195 añadía una página más de sangre al historial del Palacio de 2196 Gobierno de La Paz... Habiendo perdido el control de sus nervios 2197 al ser abandonado por su Ministro Corral y temiendo que estaba 2198 por estallar un golpe de Estado en su contra, Morales injurió de 2199 palabra y obra a algunos de los áulicos que le eran más íntimos 2200 y uno de ellos, que a la vez era su sobrino, el Coronel Federico 2201 Lafaye, descargó sobre él, a quemarropa, todos los proyectiles 2202 de su pequeño revólver. 2203 2204 El señor Bustillo, como toda la ciudadanía, temió que siguiese un 2205 período de caos, y que la primera magistratura de la nación 2206 fuese sangrientamente disputada por caudillos militares. Fue 2207 grata sorpresa para todos que precisamente uno de ellos, el 2208 Coronel Hilarión Daza, que la víspera había servido de 2209 instrumento de Morales para una alcaldada contra el Congreso, 2210 se pusiese al servicio de la legalidad y el civilismo y que con el 2211 Batallón Colorados garantizase la paz pública, convirtiéndose en 2212 el factor principal para que la silla presidencial fuese ocupada 2213 provisionalmente por el respetado patricio potosino don Tomás 2214 Frías. El señor Frías invitó a su amigo y coterráneo Bustillo a 2215 ocupar el puesto de Presidente del Tribunal Nacional de Cuentas 2216 con asiento en Sucre. 2217 2218 Don Adolfo Ballivián, elegido Presidente Constitucional de la 2219 República en los comicios generales convocados por Frías, llamó 2220 al señor Bustillo a integrar su gabinete haciéndose cargo de la 2221 cartera de Hacienda. Don Rafael, siempre dispuesto al servicio 2222 público e íntimamente satisfecho de ser llamado a trabajar con 2223 un grupo tan selecto como el formado por el noble Ballivián y 2224 sus ilustres ministros Mariano Baptista y Daniel Calvo, se 2225 apresuró a viajar a La Paz. 2226 2227 El 6 de agosto de 1873 fue un día de frío glacial en la sede de 2228 gobierno. Don Rafael Bustillo sintió que el frac que por obligación 2229 protocolar estaba usando en el Te Deum con que celebraba la 2230 efeméride cívica de la nación, no le servía de suficiente 2231 protección. A atardecer asistió al banquete oficial ofrecido por el 2232 Presidente Ballivián aquejado de un fuerte resfrío, que se 2233 complicó con fiebre gástrica cuando no le fue posible digerir los 2234 alimentos servidos en el ágape. Tuvo que guardar cama los días 2235 siguientes, con su salud deteriorándose con otras 2236 complicaciones. El 21 de agosto, pocas horas después de haber 2237 hecho un testamento a favor de su hija natural reconocida, Celsa 2238 Bustillo Assín, de su hija legítima, Amelia Bustillo Erné (que más 2239 tarde fue madre de José e Ignacio Prudencio Bustillo), el ínclito 2240 varón expiró, a los 59 años de edad. 2241 2242 Su hermano Domingo Bustillo, Deán del Coro Metropolitano de la 2243 Catedral de Sucre, en un discurso fúnebre, al usar expresiones 2244 tales como "el miasma destructor de la enfermedad" y de 2245 "victimado lejos de sus lares y las simpatías de su pueblo", dejó 2246 la impresión de que lanzaba la acusación de que había sido 2247 envenenado. E Ministro de Justicia, don Daniel Calvo, ordenó 2248 una inmediata investigación judicial en la que se comprobó que 2249 en su muerte no intervino ninguna mano criminal. 2250 2251 Enorme desgracia fue para Bolivia que don Rafael Bustillo 2252 desapareciese tan temprano. Su gran talento, consejos e 2253 influencia hubieran podido ser de incalculable valor para la patria 2254 que él tanto amó y sirvió en las horas aciagas que se le 2255 aproximaban y en la que su destino iba a estar a merced de la 2256 improvisación y la ineptitud. 2257 2258 2259 XVI 2260 NUEVA BUSQUEDADE UNA ALIANZA CON EL PERU 2261 2262 La iniciativa para soslayar la actuación de don Rafael Bustillo en 2263 Chile partió del gobierno de La Moneda, cuando el representante 2264 de Bolivia se mostró tan firme opositor a la proposición chilena 2265 de compra del litoral boliviano y se mandó a La Paz al señor 2266 Santiago Lindsay. El Presidente Agustín Morales y su ministro 2267 Casimiro Corral secundaron tal iniciativa al aceptar el traslado de 2268 las negociaciones de Santiago a La Paz y descartaron a don 2269 Rafael sin ningún escrúpulo. 2270 2271 El señor Lindsay, cuando fue elegido Ministro de Chile en Bolivia 2272 después de que cuatro personajes habían rechazado el puesto, 2273 no era más que Jefe del Departamento de Estadística del 2274 gobierno. Como su viaje se consideró de mucha urgencia y no 2275 existían fondos disponibles en el presupuesto del Ministerio de 2276 Relaciones Exteriores, se recurrió a los de la partida de Gastos 2277 Extraordinarios. 2278 2279 A su arribo a La Paz fue recibido con honores excepcionales. 2280 Seguramente que Morales y Corral creyeron que con ellos se 2281 ganaban las simpatías del diplomático y conseguirían de él lo 2282 que don Rafael Bustillo no estaba pudiendo obtener del altanero 2283 canciller Ibáñez. ¿Lo consiguieron? 2284 2285 El señor Lindsay inició su gestión proponiendo que la mensura 2286 del paralelo del grado 23 hecha por los comisionados Pissis y 2287 Mujía se prolongase hasta las cumbres más altas de la cordillera 2288 de los Andes. Pidió luego que Bolivia arrendase a Chile su litoral 2289 entre los grados 23 y 24, donde se encontraba la riqueza 2290 guanera de Mejillones y la argentífera de Caracoles. Como esto 2291 no fuese aceptado por Corral, planteó, finalmente, la compra por 2292 Chile de ese territorio. Corral le contestó: "El gobierno no se 2293 halla autorizado por el Congreso para una operación de esa 2294 naturaleza. Además, para vender hay que saber lo que se vende 2295 y vendríamos a parar a la cuestión inicial, a la fijación de cuál es 2296 el límite oriental de Chile". 2297 2298 En poco tiempo, Lindsay, demostrando habilidad para 2299 aprovecharse de la impericia diplomática de Corral, consiguió 2300 que el gobierno de Bolivia aceptase que el límite oriental de 2301 Chile en el litoral atacameño que obtuvo en el tratado de límites 2302 de 1866 fuese la línea de las cumbres más altas de la cordillera 2303 de los Andes. En E protocolo que firmó con el señor Corral en 2304 fecha 5 de diciembre d 1872 se reconoció así y también que 2305 Chile tenía derecho a una mitad en los derechos de exportación 2306 "tanto de los metales propiamente dichos, como del salitre, 2307 bórax, los sulfatos y demás substancias inorgánicas que forman 2308 el reino mineral". 2309 2310 El salitre aparecía así, por primera vez, en un documento público 2311 firmado entre Bolivia y Chile. El gobierno de Santiago mostró 2312 con el Protocolo Corral-Lindsay que, además de la mitad del 2313 guano de Mejillones y una mitad en los derechos de exportación 2314 de lo minerales, quería también participación fiscal en el 2315 producto que sus súbditos y trabajadores de otras 2316 nacionalidades estaban comenzando a explotar en el litoral 2317 boliviano. Su codicia, que comenzó con el estiércol de las aves 2318 marinas y se extendió luego a la plata, que ría ahora abarcar al 2319 nitrato de sodio y demás substancias inorgánicas. Y el salitre iba 2320 a ser el factor determinante de una guerra fratricida. 2321 2322 El Protocolo Corral - Lindsay fue aprobado sobre tablas por 2323 Congreso chileno. En Bolivia, se levantó en su contra una 2324 inmediata oposición. La legislatura de 1873 relegó su 2325 consideración a la de 1874 y ésta acabó rechazándola. 2326 2327 Aunque el General Quintín Quevedo al desembarcar en 2328 Antofagasta fracasó en su intento de levantar a las poblaciones 2329 del litoral y del interior de Bolivia contre el régimen de 2330 Presidente Morales aproximarse desde Cobija fuerzas 2331 comandadas por el Prefecto Hilarión Fernández y buscó refugio 2332 con su gente en la corbeta Esmeralda, anclada en la bahía de 2333 ese puerto, el hecho de que para su expedición filibustera 2334 hubiese contado con la ayuda de capitalistas chilenos y una 2335 tácita complicidad del gobierno de La Moneda, alarmó 2336 justamente a las autoridades de La Paz y Lima. Aumentó la 2337 alarma cuando Chile rehusó devolver las armas que Quevedo y 2338 sus hombres habían rendido en la nave chilena. Esto hizo 2339 suponer que intención era armar con ellas una nueva expedición. 2340 2341 El General Agustín Morales y su canciller Casimiro Corral eran 2342 muy amigos del Perú. Fue gracias a la ayuda del gobierno de ese 2343 país para su acción revolucionaria contra Melgarejo que les fue 2344 posible obtener el triunfo de enero de 1871 y encaramarse en el 2345 poder. Pensaron que la mejor garantía contra los evidentes 2346 propósitos expansionistas de Chile era una alianza con el vecino 2347 del oeste. Recabaron la necesaria autorización del Congreso, 2348 pero aún antes de que este cuerpo se pronunciase, el señor 2349 Corral, en fecha 31 de octubre de 1873, envió ya al ministro 2350 boliviano en Lima, señor Juan de la Cruz Benavente, 2351 instrucciones para iniciar la respectiva negociación. 2352 2353 El Congreso boliviano, una semana después, el 8 de noviembre, 2354 dictó una ley que decía: "El Poder Ejecutivo celebrará un tratado 2355 de alianza defensiva con el Gobierno del Perú contra toda 2356 agresión extraña y se le autoriza a poner en ejecución, en caso 2357 necesario, los pactos que se justifiquen y a declarar la guerra si 2358 el peligro fuese inminente". 2359 2360 Se repetía, pues, una situación similar a la de diez años antes, 2361 cuando don Rafael Bustillo, como Ministro de Relaciones 2362 Exteriores del Presidente Achá obtuvo del congreso reunido en 2363 Oruro una ley secreta que autorizaba a buscar la alianza con el 2364 Perú, y otra pública que autorizaba a declarar la guerra a Chile si 2365 no se conseguía la desocupación de Mejillones por medios 2366 diplomáticos. 2367 2368 Don Juan de la Cruz Benavente, que en 1863 iniciaba una larga 2369 misión diplomática en la capital del Rímac, no tuvo ninguna 2370 suerte en sus gestiones. Se ha explicado en el Capítulo II que el 2371 Gobierno del Perú, en ese entonces, no consideró conveniente 2372 complicar su posición internacional aliándose con una nación que 2373 tenía tan delicada situación fronteriza con Chile. ¿Lo haría en 2374 1873 cuando las relaciones boliviano - chilenas no eran tan 2375 graves, pero mostraban una creciente amenaza tanto para 2376 Bolivia como para el Perú? 2377 2378 En 1863 el Perú podía considerarse suficientemente fuerte para 2379 defenderse de cualquier peligro sin necesidad de la ayuda de 2380 Bolivia. En 1873 su condición era diferente. Chile tenía en 2381 construcción, en Inglaterra, dos blindados modernos y poderosos 2382 con los cuales iba a adquirir superioridad naval en el Pacífico Sur. 2383 2384 Y ése no era el único peligro. Se conocían en Lima las 2385 proposiciones que Chile venía haciendo a Bolivia desde la época 2386 de Melgarejo, repetidas recientemente al General Quintín 2387 Quevedo, para una alianza chileno - boliviana que tendría por 2388 objetivo arrebatar al Perú la parte sur de su territorio y hacer 2389 una rectificación de fronteras por medio de la cual Chile se 2390 quedaría con Atacama y Tarapacá y Bolivia con Arica, Tacna y 2391 Moquegua. 2392 2393 2394 XVII 2395 LA ALIANZA SECRETA DE BOLIVIA Y EL PERU 2396 2397 En 1873, don Juan de la Cruz Benavente tenía 10 años de 2398 antigüedad en el puesto de Ministro Plenipotenciario de Bolivia 2399 en Lima. Era decano del Cuerpo Diplomático y ocupaba una 2400 destacada posición en los círculos gubernamentales y sociales. 2401 Contrariamente a lo que le sucedió una década antes, le fue fácil 2402 cumplir el mandato recibido de La Paz de convencer al Gobierno 2403 del Perú sobre la conveniencia de una alianza defensiva boliviano 2404 - peruana contra los propósitos expansionistas de Chile. 2405 2406 Concretó el pacto a los tres meses de recibidas las primeras 2407 instrucciones del canciller boliviano Casimiro Corral, el 6 de 2408 febrero de dicho año. El documento que firmó con el Ministro de 2409 Relaciones Exteriores, señor José de la Riva Agüero, dispuso que 2410 Bolivia y el Perú se unieran y ligaban garantizándose 2411 mutuamente su integridad territorial, obligándose a combatir 2412 juntos toda agresión exterior. Como producto de la desconfianza 2413 que siempre ha existido en las relaciones entre las dos 2414 repúblicas, se estableció que cada una de ellas retenía el 2415 derecho de calificar si la ofensa recibida por la otra, de un 2416 tercero, la obligaba o no a cumplir con el tratado. El Congreso 2417 peruano aprobó la alianza el 22 de abril y la Asamblea Boliviana 2418 el 2 de junio de ese mismo año de 1873. 2419 2420 Los móviles que indujeron al pacto a uno y otro contratante 2421 fueron muy diferentes. Bolivia buscó con él la ayuda de una 2422 nación vecina con la que tenía afinidades históricas, raciales, 2423 geográficas y geopolíticas, contra un peligro que se hacía cada 2424 vez más amenazante y tuvo su más reciente expresión en la 2425 expedición filibustera del General Quintín Quevedo. 2426 2427 Las razones del Perú las confesó el señor Riva Agüero en su 2428 correspondencia con sus agentes diplomáticos en La Paz, 2429 Santiago y Buenos Aires. La cancillería de Torre Tagle sabía de 2430 las proposiciones que Chile venía haciendo a Bolivia desde la 2431 época de Melgarejo, de unirse para una guerra al Perú, a fin de 2432 arrebatarle la parte sur de su territorio y hacer una rectificación 2433 de fronteras por medio de la cual Chile se quedase con Atacama 2434 y Bolivia con Arica, Tacna y Moquegua. Sabía también que la 2435 complicidad del gobierno de La Moneda en la reciente aventura 2436 revolucionaria de Quevedo tuvo la misma intención. Riva 2437 Agüero, en las notas a sus compatriotas mencionó el temor de 2438 que "el victimario (Chile), se uniese con la víctima (Bolivia)". A 2439 su ministro en Buenos Aires le dijo concretamente: "Los únicos 2440 temores que por muchos años podemos tener son los que 2441 inspira el manifiesto deseo de Chile de ensancharse a expensas 2442 de Bolivia, absorbiendo el territorio de Atacama. Nuestros 2443 intereses no nos permitirían consentir en ello, no sólo por tener 2444 a Chile tan cerca de Tarapacá, sino porque privada Bolivia de su 2445 litoral, en un porvenir no muy lejano vendría a aliarse con Chile 2446 para tomar del Perú el puerto de Arica. De consiguiente, el 2447 motivo de guerra que puede haber con Chile no es otro que el de 2448 oponerse a la ocupación del territorio boliviano". A su ministro 2449 en La Paz, le expresó: "Ese temor me ha preocupado hace 2450 tiempo y es el que me ha guiado en las negociaciones hasta 2451 llegar al tratado de febrero". 2452 2453 El tratado se convirtió en un instrumento muy importante de la 2454 política internacional del Perú. Su gobierno, de acuerdo con el de 2455 Bolivia, decidió buscar la adhesión de la República Argentina, 2456 nación a la que también se le habían presentado problemas (en 2457 la Patagonia y el estrecho de Magallanes), debido a las 2458 tendencias expansionistas de Chile. 2459 2460 El señor de la Riva Agüero encomendó las negociaciones del 2461 caso al Señor Manuel Irigoyen, quien viajó a Buenos Aires como 2462 Ministro Plenipotenciario de su país. En vista de que Bolivia no 2463 tenía representación diplomática en la capital argentina en ese 2464 tiempo, se resolvió que Irigoyen actuaría también por cuenta del 2465 gobierno de La Paz. 2466 2467 Planteó el objetivo principal de su misión al canciller Carlos 2468 Tejedor en la primera entrevista que tuvo con él, al día siguiente 2469 de presentar sus credenciales al Presidente Domingo F. 2470 Sarmiento. La reacción que recibió fue favorable, aunque el jefe 2471 de la diplomacia argentina opinó que el tratado le parecía más 2472 ofensivo que defensivo, y que el artículo tercero, al disponer que 2473 la ejecución de la alianza sería opcional y no obligatoria, le 2474 quitaba mucho de su eficacia. 2475 2476 Después de que en el gabinete se levantaron algunas 2477 objeciones, como la posibilidad de que la alianza argentino- 2478 boliviano-peruana fuese contrarrestada por una brasileño-chilena 2479 y de que mejor sería descartar a Bolivia porque la Argentina 2480 tenía aún problemas limítrofes pendientes con esa república, el 2481 gobierno del señor Sarmiento decidió aceptar la invitación de los 2482 dos pactantes iniciales. Pasado el asunto a la Cámara de 2483 Diputados, obtuvo 48 votos a favor y 18 en contra. Estaba 2484 terminando sus labores de 1873. El Senado consideró que 2485 necesitaba más tiempo para decidirse en un asunto tan grave. 2486 2487 El derrocamiento de don Domingo F. Sarmiento, en octubre de 2488 1874, y la elevación al mando supremo de la república del señor 2489 Nicolás Avellaneda, interrumpió la continuación de las 2490 negociaciones. Por su parte, los nuevos gobiernos del Perú y 2491 Bolivia perdieron su interés en la alianza y el documento que la 2492 estableció fue encarpetado en los archivos de las respectivas 2493 cancillerías. El Tratado de Límites firmado entre Bolivia y Chile el 2494 6 de agosto de 1874, por don Mariano Baptista y don Carlos 2495 Walker Martínez, respectivamente, hizo creer a todos que se 2496 había establecido una paz definitiva en las costas de Atacama. 2497 2498 La Argentina expresó su deseo de reanudar los trámites de su 2499 adhesión a la alianza en 1875 y también en 1877, al empeorar 2500 sus relaciones con Chile en uno y otro año. Empero, la cancillería 2501 de Torre Tagle se hizo de los oídos sordos. En las instrucciones a 2502 su ministro Irigoyen le dijo en 1875: "La Argentina cree que 2503 adhiriéndose a nuestro tratado arribará a una solución favorable 2504 en sus cuestiones con Chile... Es indispensable que proceda 2505 usted con la mayor cautela y tino... En caso de que encuentre un 2506 pretexto natural para suspender este asunto, hágalo... pero es 2507 preciso que sea un pretexto muy bueno, que no choque ni 2508 parezca violento". 2509 2510 Es lógico suponer que si la Argentina hubiese llegado a concretar 2511 su adhesión a la alianza boliviano - peruana, no habría tenido 2512 lugar la Guerra del Pacífico o que si Chile se atrevía a desafiar a 2513 las tres naciones su expansión habría quedado frenada en los 2514 límites que tenía su soberanía antes de ese conflicto. 2515 2516 La alianza limitada a Bolivia y Perú, destinada a salvaguardar la 2517 integridad territorial de los dos contratantes, tuvo el efecto 2518 contrario. Sirvió para que Chile, además de su codicia por los 2519 ricos territorios de Atacama y Tarapacá, se sintiese impulsado a 2520 hacer la guerra a ambas naciones para destrozar el pacto de 2521 febrero de 1873, como destrozó la Confederación Perú - 2522 Boliviana, 40 años antes, ambos actos en cumplimiento de la 2523 imperativa política internacional establecida por Diego Portales y 2524 de paso apropiarse del extremo sur de uno de los aliados y de 2525 todo el litoral del otro. 2526 2527 2528 XVIII 2529 LA MISION WALKER MARTINEZ EN BOLIVIA 2530 2531 Tres sucesivos gobiernos bolivianos participaron en la gestación 2532 y perfeccionamiento del Tratado de Alianza Defensiva suscrita 2533 con el Perú. Lo inició el gobierno del Presidente Agustín Morales, 2534 que tenía por Canciller a Casimiro Corral. Se firmó y aprobó 2535 durante el gobierno provisional de don Tomás Frías, en el que 2536 continuó como Ministro de Relaciones Exteriores el señor Corral. 2537 Se ratificó y se canjearon las ratificaciones en el gobierno 2538 constitucional de don Adolfo Ballivián, cuyo secretario de Estado 2539 en el despacho de negocios internacionales era don Mariano 2540 Baptista Caserta. 2541 2542 Una alianza que tenía un claro y definitivo carácter defensivo 2543 debió hacerse público para que sirviese de prevención al 2544 presunto enemigo de las dos partes contratantes. Empero, se le 2545 dio carácter secreto seguramente hasta que se consiguiese la 2546 adhesión de la República Argentina. Sin embargo, no se le quitó 2547 esa condición cuando la incorporación del gobierno de Buenos 2548 Aires no llegó a concretarse. 2549 2550 Pese al secreto, el gobierno chileno supo de su existencia, a poco 2551 de su firma, por una infidencia del Brasil. El Perú por 2552 consideración a un país poderoso y vecino con el 'que quería 2553 mantener relaciones libres de toda susceptibilidad, le dio aviso 2554 confidencial del pacto suscrito con Bolivia. La cancillería de 2555 ltamaraty transmitió el dato a la de La Moneda. También el 2556 Ministro del Brasil en Buenos Aires, Barón de Cotepige, comunicó 2557 a su colega chileno, Guillermo Blest Gana, que se había pedido la 2558 adhesión argentina y que el asunto se estaba discutiendo en el 2559 Senado. Blest Gana comprobó la veracidad de tal información 2560 pagando una deuda de 20.000 pesos de uno de los senadores a 2561 un banco e incitándolo, por ese medio, a la venalidad. 2562 2563 Las autoridades chilenas quedaron muy nerviosas con las 2564 noticias de la alianza. Portales había dejado establecido como 2565 uno de los fundamentos de la estrategia internacional de Chile el 2566 de evitar la existencia de cualquier vinculación político - militar 2567 entre Bolivia y el Perú. 2568 2569 Los intereses chilenos en las riquezas del litoral boliviano, 2570 nacidos con el guano de Mejillones (del que consiguieron una 2571 mitad gracias al tratado de 1866), incrementados con la plata de 2572 Caracoles (explotada en su mayor parte por mineros de su 2573 nación), habían aumentado en los últimos años con un tercer 2574 producto, el salitre, en cuya explotación sus industriales se 2575 llevaban la parte del león. 2576 2577 El señor Adolfo Ibáñez, que seguía como Ministro de Relaciones 2578 Exteriores de Chile, para contrarrestar la alianza con el Perú, 2579 evitar que este país influyese sobre el de Bolivia con su política 2580 de estatización de la riqueza salitrera de Tarapacá y conseguir 2581 que sus compatriotas siguiesen extrayendo la plata y el nitrato 2582 de sodio de Atacama sin mayores impuestos, destacó a La Paz a 2583 don Carlos Walker Martínez, como Ministro Plenipotenciario, en 2584 sucesión del señor Santiago Lindsay. 2585 2586 Walker Martínez conocía bien Bolivia y sus hombres. Había sido 2587 secretario de la Legación Vergara Albano años antes, cuando 2588 resultó más hábil que su jefe en conquistar las simpatías del 2589 General Mariano Melgarejo y hasta obtuvo de él el título de 2590 edecán, con el grado de mayor de ejército, para la campaña 2591 bélica contra el Perú a la que se quería empujar al tirano beodo. 2592 Encontró que el gobierno de don Adolfo Ballivián era el reverso 2593 de la medalla de lo que fue el de Melgarejo. Lo que fuera 2594 ignorancia, concupiscencia, improvisación y rudeza era ahora 2595 cultura, austeridad, sentido de responsabilidad y buenas 2596 maneras. 2597 2598 Congenió con el canciller don Mariano Baptista y entabló con él 2599 una cordial amistad. Dijo de él más tarde en un libro: "Es un 2600 orador notabilísimo. Su honradez es inmaculada. Su cultura 2601 profunda". 2602 2603 Las conferencias Baptista-Walker Martínez se iniciaron en La Paz 2604 el 6 de junio de 1873. El diplomático chileno planteó el estricto 2605 cumplimiento del tratado de 1866. Se venía ejecutando en 2606 cuanto a la partición de los guanos de Mejillones, pero no 2607 respecto a la división de los derechos fiscales cobrados por la 2608 exportación de minerales. Baptista sugirió la conveniencia de 2609 anular ese pacto y llegar a la concertación de uno nuevo en el 2610 que se suprimiesen las "medias" y la intervención fiscal chilena 2611 en territorio boliviano. Declaró que el gobierno de Bolivia 2612 respetaba las obligaciones que había contraído pero pensaba que 2613 sería mejor llegar a un acuerdo que "consultase más 2614 avisadamente los mutuos y verdaderos intereses de ambas 2615 repúblicas y eliminase todo motivo de desacuerdo, de roce, de 2616 excitación popular y de inmixtión de gestiones fiscales". 2617 2618 Después de varias entrevistas, los dos negociadores llegaron a 2619 ciertos acuerdos básicos. Walker Martínez, con el visto bueno de 2620 su jefe Adolfo Ibáñez, declaró estar dispuesto a la concertación 2621 de un tratado nuevo, siempre que su país conservase en él los 2622 derechos adquiridos en el anterior y, si cedía en algunos, tendría 2623 que ser a cambio de adecuadas compensaciones. 2624 2625 Se interrumpieron las conversaciones a raíz de la decisión del 2626 Presidente Ballivián de viajar a Sucre para que el Congreso de 2627 ese año se instalase en su sede constitucional, la Capital de la 2628 República. Walker Martínez prefirió no seguir al gobierno 2629 recorriendo "300 leguas a lomo de mula por caminos 2630 endiablados". Se quedó en La Paz confiado en que el Jefe del 2631 Estado y sus ministros retornarían a la conclusión de las labores 2632 legislativas. Mas, como las instrucciones que tenía eran las de 2633 apresurar todo lo posible un arreglo con Bolivia, continuó 2634 negociando con el canciller Baptista por medio de 2635 correspondencia. 2636 2637 El 5 de septiembre (1873), le escribió: "Mi señor y amigo: Tenga 2638 la bondad de pensar sobre esta nueva combinación que voy a 2639 proponerle... El objeto que usted y yo perseguimos es cortar de 2640 una vez y para siempre la odiosa cadena de dificultades que 2641 existe entre Bolivia y Chile. Nuestro proyecto de arreglo, en su 2642 base sexta, dispone que Bolivia, previa liquidación, pagará a 2643 Chile la cantidad que adeuda por derechos correspondientes a 2644 antes de que firmemos el nuevo tratado". "Esto dejaría siempre 2645 pendiente algo... Creo que mi gobierno aceptaría mejor un 2646 partido que diera completamente fin a todo, sin dejar causa de 2647 reclamos y disgustos mutuos. Me parece, además que sería un 2648 paso de excelente política para el gobierno de Bolivia resolver 2649 definitivamente esta cuestión... Si usted y yo tuviéramos la 2650 felicidad de llegar a ese término, habríamos hecho un verdadero 2651 bien a nuestros países y cumplido con un deber de buenos 2652 ciudadanos. La propuesta que le hago es la siguiente: Yo dejo de 2653 lado el artículo sexto aludido a trueque de que usted acepte la 2654 liberación de derechos de exportación de minerales que los 2655 chilenos explotan en el litoral boliviano. De esta suerte habría 2656 una compensación mutua. Si usted cree que le conviene esta 2657 propuesta hemos concluido y lo único que restaría es poner 2658 nuestras firmas al pie del tratado. Para mí este arreglo que le 2659 propongo tiene la inmensa ventaja de dar un corte definitivo a 2660 todo. Ya no habrá para qué ocuparse más de la cuestión de 2661 límites, ni de la intervención de un país en el territorio del otro. 2662 No habrá más que paz, buena armonía y fraternidad entre dos 2663 repúblicas amigas y hermanas". 2664 2665 2666 XIX 2667 EL TRATADO DE LÍMITES DE 1874 2668 2669 Don Mariano Baptista Caserta, como ministro de Relaciones 2670 Exteriores del Presidente Adolfo Ballivián, no tuvo fe en que el 2671 tratado de alianza suscrito con el Perú representase una garantía 2672 para la integridad territorial de Bolivia. Era un convencido de la 2673 necesidad de llegar a un acuerdo claro y definitivo con Chile que 2674 sustituyese al de 1866 y delimitase claramente la soberanía de 2675 una y otra república en el desierto de Atacama. 2676 2677 Cuando recibió en Sucre la proposición que el ministro chileno 2678 Carlos Walker Martínez le envió desde La Paz, relativa a que 2679 Chile renunciaría a la mitad de los réditos sobre minerales a 2680 cambio de que Bolivia se comprometiese a no cobrar más 2681 impuestos a los chilenos que explotaban riquezas en el litoral 2682 boliviano, pidió a su amigo que viajase a la Capital de la 2683 República en vista de que el gobierno se veía obligado a 2684 permanecer indefinidamente en ella, debido al precario estado 2685 de salud del primer mandatario, y porque sería mucho más fácil 2686 que se entendiesen reanudando sus entrevistas personales. 2687 2688 Sin conocer las ideas que venían cambiando el canciller y el 2689 representante del gobierno de La Moneda, el Congreso inició el 2690 estudio de tres proyectos de ley destinados a aumentar los 2691 impuestos: uno de 25 por ciento a las mercaderías importadas 2692 por Mejillones y Antofagasta, otro de 6 por ciento sobre la 2693 extracción de minerales y un tercero de 2 por ciento a toda 2694 empresa que operase en Bolivia. 2695 2696 Walker Martínez protestó ante Baptista por correspondencia 2697 "Para nada se toma en cuenta en dichos proyectos a la parte que 2698 Chile le corresponde tomar... ¿No se han fijado los proyectista 2699 que el litoral comprendido entre los grados 23 y 25 se halla bajo 2700 un situación especialísima nacida del tratado del 66?". En otra 2701 misiva añadió: "¿Qué ventaja saca Bolivia en hacer más 2702 embarazosa la situación en que se encuentran sus relaciones con 2703 Chile? ¿Qué sacaría Chile en romper sus relaciones con 2704 Bolivia?... A mi juicio solo ruina y desprestigio. Es la peor política 2705 que podemos aceptar y de aislar a un país del otro. La unión es 2706 lo que más nos conviene. Bolivia necesita paz y riqueza para 2707 llenar sus compromisos y cura sus hondas heridas. Chile 2708 necesita también paz para seguir adelante en la senda del 2709 progreso que con tan buen éxito ha comenzado recorrer. 2710 Hagamos, pues, usted y yo, lo que nos ordenan el patriotismo y 2711 los mutuos intereses de nuestros países". 2712 2713 Refiriéndose a la decisión de la asamblea boliviana de aprobar el 2714 impuesto del 6 por ciento sobre extracción de minerales, Walker 2715 Martínez también expresó: "Todo el mundo se ha alarmado en 2716 Chile. Se han elevado representaciones al gobierno firmadas por 2717 lo más importante del comercio de Santiago. La prensa ha 2718 puesto el grito al cielo. Se ha hablado de manifestaciones 2719 populares para exigir que el gobierno tome una actitud enérgica 2720 a fin de proteger los intereses chilenos en Caracoles. En fin, se 2721 ha interpelado al Ministro de Relaciones Exteriores en la Cámara 2722 de Diputados. Yo siento en el alma esto, ahora que estamos en 2723 medio camino de nuestros definitivos arreglos. Espero que usted 2724 tome el peso a la situación y que la contestación oficial que me 2725 dé convierta en humo ese castillo de miedos que se han 2726 levantado a nuestro alrededor... ¡cuánto siento la ausencia del 2727 gobierno de La Paz! ...Todas estas cuestiones las hubiéramos 2728 salvado entre nosotros con franqueza y lealtad en un momento". 2729 2730 Don Adolfo Ballivián falleció en Sucre, víctima de un cáncer al 2731 estómago. Don Tomás Frías fue encargado otra vez del mando 2732 provisional. Conservó como canciller al señor Baptista, convocó a 2733 elecciones y decidió que el gobierno continuase en la Capital de 2734 la República. 2735 2736 El señor Walker Martínez, obedeciendo órdenes que le llegaren 2737 de Santiago, hizo el largo viaje a mula de La Paz a Sucre y 2738 reanudó sus conferencias con el señor Baptista. Hubo rápidos 2739 entendimientos. El 6 de agosto (1874) los dos personajes 2740 suscribieron un nuevo tratado de límites que dejaba sin efecto el 2741 de 1866 y establecía lo siguiente: Primero, que el paralelo del 2742 grado 24, desde el océano hasta el divortium aquarum de los 2743 Andes, tal como fue fijado por los Comisionados Pissis y Mujía, 2744 quedaba como línea de separación del territorio y la soberanía 2745 de Bolivia y Chile. Segundo, que si surgían dudas sobre la exacta 2746 ubicación de Caracoles se la determinaría por medio de una 2747 comisión mixta de peritos. Tercero, que los guanos existentes 2748 entre los grados 23 y 24 seguirían partiéndoselos por mitad las 2749 dos repúblicas. Cuarto, que los impuestos sobre exportación de 2750 minerales no serían aumentados por Bolivia durante un período 2751 de 25 años. Quinto, que las personas, industrias y capitales 2752 chilenos que operaban en el litoral boliviano no pagarían 2753 mayores impuestos que los que se encontraban vigentes a la 2754 fecha, durante el mismo lapso de 25 años. 2755 2756 El documento suscitó una inmediata reacción en contra por los 2757 políticos enemigos del gobierno, tales como Casimiro Corral, 2758 Quintín Quevedo, Nataniel Aguirre, Juan Francisco Velarde y 2759 Enrique Borda. El canciller Baptista concurrió repetidas veces a 2760 las sesiones de las cámaras legislativas para defender su obra. A 2761 partir del 20 de octubre el asunto se trató en debates públicos. 2762 El pueblo se banderizó a favor y en contra del tratado, lo mismo 2763 que los órganos de prensa. 2764 2765 El señor Baptista dijo en sus discursos: "A los negociadores 2766 alguien nos ha pedido que manifestemos los largos protocolos 2767 que contienen los sudores del pugilato diplomático. Los agentes 2768 no hemos querido ser hábiles. Queriéndolo, no habríamos podido 2769 serlo. La frase velada., la astuta petición del máximo para 2770 felicitarse con el mínimo, la zancadilla, no eran armas que 2771 manejábamos: ni servirnos de ellas lo hemos considerado digno 2772 de nuestros países y de nuestros gobiernos. Sólo hemos 2773 pensado que éramos dos americanos, hilos de dos patrias 2774 hermanas en el pensamiento de Dios, a pesar de todos los 2775 logogrifos de las cancillerías. Nuestra América es fecunda. Hay 2776 vida en su seno para mil generaciones. Hay campo en sus 2777 desiertos para mil nacionalidades... Tócame honrar el espíritu y 2778 procedimiento del señor Walker Martínez. Ha hecho acto de 2779 patriotismo chileno. Yo he creído hacer acto de patriotismo 2780 boliviano. Ambos pensamos que hemos concluido una obra de 2781 justicia". 2782 2783 Los opositores continuaron valiéndose de todos los medios a su 2784 alcance para destruir al gobierno y al tratado. Se llegó a decir 2785 que Baptista había recibido "cuantiosas sumas de dinero de Chile 2786 a cambio de su firma". "De todas partes llegaban a Sucre 2787 papeluchos insultantes contra Chile y los gobernantes de Bolivia. 2788 Se mencionaban territorios cedidos, concesiones exorbitantes. 2789 Se hacía manifestaciones públicas. La prensa adicta al Ejecutivo 2790 publicó artículos mesurados, tratando de calmar los ánimos, 2791 arguyendo que los verdaderos intereses de Bolivia estaban en 2792 una sólida amista con Chile". 2793 2794 Los esfuerzos del Presidente Frías, su canciller, los otros 2795 ministros y miembros del Parlamento que les eran adictos fueron 2796 ganando terreno y acallando las críticas y protestas. El señor 2797 Walker Martínez, corno un recurso más para ganar la aprobación 2798 legislativa declaró que Chile condonaba lo que Bolivia le 2799 adeudaba por incumplimiento del tratado de 1866, relativo a la 2800 entrega de una mita de los derechos percibidos por exportación 2801 de minerales. Ese ges to acabó venciendo las últimas 2802 resistencias. El tratado de 6 d agosto de 1874, fue aprobado por 2803 el Congreso. 2804 2805 Todos creyeron que sellaba una sólida amistad entre Bolivia 2806 Chile, que ponía un sello de paz definitivo en el desierto de 2807 Atacama. 2808 2809 2810 2811 TERCERA PARTE 2812 2813 XX 2814 EL SALITRE EN ESCENA 2815 2816 ¿Hubo una fatalidad en la concatenación de los hechos que 2817 condujeron a la Guerra del Pacífico? Estudiando su historia se 2818 tiene la impresión de que el destino colocó en medio de dos 2819 naciones hermanas riquezas que su legítima dueña no sabía 2820 explotar y despertaban la codicia de la vecina. 2821 2822 Riquezas que fueron apareciendo una después de la otra como 2823 destinadas a provocar el enfrentamiento bélico. 2824 Cuando el guano, luego de iniciar la malquerencia, no logró su 2825 siniestro objetivo al ser dividido por mitades, fraternalmente; y 2826 cuando la plata, que también suscitó agrias discusiones, acabó 2827 siendo objeto de un amistoso arreglo, apareció el salitre. ¿Iba a 2828 ser el provocador del fratricidio? 2829 2830 Es creencia generalizada que los incas utilizaron el nitrato de 2831 sodio de Tarapacá como fertilizante de sus cultivos, junto con el 2832 guano, aunque en menor proporción. En el período colonial, los 2833 españoles sólo le dieron importancia convertido en nitrato de 2834 potasa, con destino a la fabricación de pólvora. Científicos 2835 europeos, como hicieron con el guano, descubrieron su gran' 2836 poder fertilizante a partir de 1830 y su uso se generalizó en 2837 Inglaterra, Alemania, Francia, Holanda y los Estados Unidos en 2838 cantidades cada vez mayores. En 1830, su exportación de 2839 Tarapacá fue de 18.000 quintales. En 1854, pasó de 700.000. 2840 2841 El enriquecimiento de los dueños de "paradas" y "oficinas" en la 2842 pampa de Tamarugal del Perú impulsó a muchos cateadores a 2843 buscarlo en el desierto aledaño de Atacama, perteneciente a 2844 Bolivia. 2845 2846 Los franceses Domingo y Máximo Latrille lo encontraron, pero no 2847 pudieron obtener una concesión del gobierno. Lo mismo les 2848 ocurrió a los argentinos Pavez y Bello. La suerte les tocó a los 2849 chilenos José Santos Ossa y Francisco Puelma. Aprovechando de 2850 la presencia en Santiago, en agosto de 1866, del Secretario 2851 General del gobierno de Melgarejo, Mariano Donato Muñoz, 2852 obtuvieron de él la "posesión y goce de los terrenos en que 2853 descubriesen depósitos de salitre y bórax, en una extensión 2854 continua de no más de cinco legue cuadradas", más cuatro 2855 leguas en la quebrada de San Mateo para cultivo de legumbres. 2856 Una primera expedición encabezada por el propio José Santos 2857 Ossa en busca del lugar más apropiado para asentar la 2858 concesión no encontró salitre. Al año siguiente, otro grupo 2859 dirigido por el hijo de aquel, Alfredo Santos Ossa, descubrió el 2860 Salar del Carmen. Ossa y Puelma, asociados a Manuel Antonio 2861 de Lama, fundaron la "Sociedad Exploradora del Desierto de 2862 Atacama" con miras a e traer nitrato de sodio del mencionado 2863 lugar y seguir buscando otras riquezas en el litoral boliviano. Por 2864 medio del abogado Manuel José Tovar, cuyo hermano era Oficial 2865 Mayor del Ministerio de Gobierno y con una entrega de 10.000 2866 pesos a la paupérrima administración de Melgarejo, la sociedad 2867 consiguió la ampliación de lo obtenido antes con un permiso 2868 para "explotación, elaboración y libre exportación" de todo el 2869 salitre existente en el Departamento de Cobija durante un lapso 2870 de 15 años. 2871 La enormidad de esa concesión atrajo a otros interesados Chile, 2872 como a los ingleses de la firma "Gibbs y Cía." y al banquero 2873 Agustín Edwards Ossandón. Desapareció la "Sociedad Explorado 2874 del Desierto" al ser reemplazada por la firma "Melbourne Clark 2875 Cía.". Melbourne Clark era uno de los ejecutivos de la casa Gibbs 2876 y su nombre sirvió para encubrir a la nueva empresa en la que k 2877 socios eran los originales Ossa y Puelma acompañados de 2878 Edward Guillermo Gibbs, el propio Clark y algunos más. 2879 2880 La flamante compañía sentó sus reales en la caleta de la 2881 Chimba, el punto con facilidades de embarque y desembarque 2882 más próximo al "Salar del Carmen". Desde el año anterior 2883 (1868), la caleta tenía el nombre de Antofagasta y la categoría 2884 de puerto, en virtud de disposiciones dictadas por Melgarejo. 2885 2886 "Melbourne Clark y Cía.", como dueña de la concesión que 2887 autorizaba explotar todo el salitre que existiese en el litoral 2888 boliviano, destacó cateadores por todas partes y llegó al 2889 descubrimiento de los ricos terrenos salitrosos de "Las Salinas", 2890 ubicados a unas decenas de kilómetros más adentro del "Salar 2891 del Carmen", en dirección a Caracoles. 2892 2893 La caída de Melgarejo, en enero de 1871, y la incierta situación 2894 en que quedaban los actos de su administración, obligaron a 2895 "Melbourne Clark y Compañía" a enviar a La Paz al abogado 2896 chileno Domingo Arteaga Alemparte, con la misión de obtener 2897 que el nuevo gobierno revalidase su concesión. La 2898 administración del Presidente Agustín Morales, en fecha 13 de 2899 abril de 1872, dictó una resolución suprema que dijo: "Habiendo 2900 Melbourne Clark y Compañía implantado en el desierto de 2901 Atacama una nueva industria que ha dado importancia a las 2902 riquezas ocultas, se le concede una superficie que teniendo por 2903 base el paralelo 24, que es la línea divisoria entre Bolivia y Chile, 2904 forme un paralelogramo con una altura de 15 leguas, a 5 2905 kilómetros al norte y 25 de latitud sur, partiendo desde la orilla 2906 del mar. Se les concede privilegio exclusivo para explotar, 2907 elaborar y exportar salitre de esa superficie por 15 años. Pueden 2908 construir todos los ferrocarriles que quieran en ese terreno". 2909 2910 Explotar los dos campos salitrosos del "Salar del Carmen" y "Las 2911 Salinas" requería más capital del que disponía "Melbourne Clark 2912 y Cía.". Esta entidad, que tenía carácter limitado, desapareció y 2913 mediante la emisión de acciones, por un valor de 2.500.000 2914 pesos, se organizó en su reemplazo una sociedad anónima con 2915 el nombre de "Compañía de Salitres y Ferrocarril de 2916 Antofagasta". Los subscriptores principales de los títulos fueron 2917 Guillermo Gibbs, Agustín Edwards y Francisco Puelma, José 2918 Santos Ossa sólo pudo adquirir un número más limitado, al igual 2919 que otros capitalistas chilenos y algunos ingleses. 2920 2921 Al medirse en el terreno el paralelogramo conseguido por 2922 Arteaga se constató que una parte de "Las Salinas" quedaba 2923 fuera. Para subsanar esta situación, el directorio de la compañía 2924 destacó a La Paz al señor Belisario Peró con el mandato de 2925 ofrecer al Gobierno de Bolivia una participación de un diez por 2926 ciento de sus utilidades. 2927 2928 El nuevo Presidente de la República, señor Adolfo Ballivián, 2929 consideró que no era digno para un gobierno hacerse socio de 2930 una empresa extranjera y prefirió que se atendiese el pedido de 2931 ampliación de los terrenos concedidos a la compañía contra pago 2932 de nada más que el impuesto legal establecido para esta clase 2933 de concesiones: 40 bolivianos anuales por estaca, o sea, por 2934 cada milla cuadrada. 2935 2936 El diario "El Comercio" de La Paz, comentó al respecto: "Ha sido 2937 deplorable que no se hubiera apercibido bastante el gobierno de 2938 que el ofrecimiento de la compañía era del todo espontáneo. Se 2939 llevó una exageración extremada el sentimiento del decoro 2940 nacional, privando al país de un ingreso saneado que hoy sería 2941 de unos 100.000 bolivianos al año... En las deliberaciones pudo 2942 caber algo de desconfianza, de reserva mental, frente a una 2943 proposición que parecí tan halagadora. Sea lo que fuese, la 2944 oferta de participación fue desechada y se dio preferencia a 2945 cobrar a la compañía la insignifican te patente de 40 bolivianos 2946 por estaca, que en el mejor de los caso: no puede producir más 2947 de 2.000 bolivianos anuales". 2948 2949 Don Belisario Peró, en su informe al señor Agustín Edwards 2950 presidente del directorio de la compañía, le expresó: "Rechazada 2951 mi oferta al gobierno de participación del 10 por ciento y 2952 también rechazada la otra combinación de conformarme al 2953 decreto de 13 de abril con tal que se concedieran algunas 2954 estacas adicionales fuera de dicha zona, me fue preciso 2955 presentar el negocio bajo otra faz. El resultado obtenido me dejó 2956 completamente satisfecho y no dude que igual sucederá con 2957 usted y los otros miembros del directorio Efectivamente, lo único 2958 que tiene interés para la compañía de esa inmensa zona de 2959 1.125 millas cuadradas, que a todos espanta por su magnitud, 2960 son las salitreras del Salar del Carmen y de Las Palmas... Pues 2961 bien, en el arreglo efectuado, no sólo conserva la compañía la 2962 posesión de esas salitreras... sino que se adjudican a 2963 continuación de Las Salinas, sin más gravamen que una patente 2964 módica, 50 estacas de salitre de 1.600 metros de longitud por 2965 otros tan tos de latitud, o lo que es lo mismo, una superficie 2966 explotable de 50 millas cuadradas. Total: muchas leguas, 2967 cuadradas capaces de da alimento a una activa explotación por 2968 algunas decenas de años... " 2969 2970 2971 XXI 2972 LA DUEÑA PUTATIVA DE ANTOFAGASTA 2973 2974 Lo que pidió concretamente el abogado argentino (muy 2975 vinculado en las altas esferas de la sociedad y el gobierno 2976 bolivianos), Belisario Peró, como representante de la "Compañía 2977 de Salitres y Ferrocarril de Antofagasta", fue lo siguiente: 2978 "Derecho de explotar libremente los depósitos de salitre del 2979 Salar del Carmen y de 50 estacas de Las Salinas, por el término 2980 de 15 años, computables desde el 1° de enero de 1874, y 2981 exportar el producto por el puerto de Antofagasta, libre de todo 2982 impuesto por exportación y de cualquier otro gravamen 2983 municipal y fiscal y, además, derecho de construir un ferrocarril 2984 desde Antofagasta hasta Las Salinas". 2985 2986 El Presidente de la República, señor Adolfo Ballivián, y sus 2987 ministros Mariano Baptista, Daniel Calvo, Mariano Ballivián y 2988 Pantaleón Dalence, en respuesta a tal petitorio, firmaron una 2989 resolución suprema en fecha 27 de noviembre de 1873, que 2990 decía: "Artículo único. — Se aceptan, por vía de transacción y en 2991 uso de la autorización que la ley de 22 de noviembre de 1872 2992 confiere al Poder Ejecutivo, las bases contenidas en la anterior 2993 proposición". 2994 2995 La ley de 22 de noviembre de 1872 fue dictada para salvar los 2996 derechos de quienes habían obtenido concesiones durante el 2997 gobierno de Mariano Melgarejo y quedaron en situación 2998 indefinida cuando a la caída del tirano el Poder Legislativo anuló 2999 todos los actos de su administración. Rezaba así: "Se autoriza al 3000 Ejecutivo para transar sobre indemnización y otros reclamos 3001 pendientes en la actualidad y para acordar con las partes 3002 interesadas la forma más conveniente en que habrán de llenarse 3003 sus obligaciones respectivas; defiriéndose estos asuntos, sólo en 3004 caso de no avenimiento, a la decisión de la Corte Suprema, con 3005 cargo de dar cuenta a la próxima legislatura". 3006 3007 Asegurada la posesión de los campos salitrosos, la empresa, que 3008 ya cuando era "Melbourne Clark y Compañía" llegó a Antofagasta 3009 con técnicos ingleses proporcionados por la casa Gibbs y con 3010 empleados, mecánicos, carpinteros, albañiles y peones chilenos, 3011 asentó sus reales y amplió sus actividades como si fuera la 3012 legítima dueña del puerto. 3013 Una máquina purificadora de agua que convertía el agua de mar 3014 en agua potable solucionó el problema de la carencia de este 3015 indispensable elemento. Se habilitó un muelle privado. A su lado 3016 se levantaron depósitos para el nitrato de sodio listo para la 3017 exportación. Se construyeron nueve casas para oficinas y 3018 domicilio de los empleados principales. Se pidió a Inglaterra 3019 maquinarias, locomotoras de ferrocarril y carros de carga y 3020 pasajeros. La línea férrea llegó al Salar del Carmen en 1873 y a 3021 Las Salinas en 1876. 3022 En el Salar del Carmen se instaló una planta beneficiadora de 3023 caliche para una producción de 600 quintales de nitrato por día. 3024 En Las Salinas se organizó un campamento para 700 empleados 3025 y obreros encargados de extraer el caliche de la zona y 3026 despacharlo por tren a la principal planta beneficiadora montada 3027 en la propia Antofagasta. El ferrocarril disminuyó los costos de 3028 producción de un peso y setenta centavos a 1.10. Esto permitió 3029 que la compañía tuviese una utilidad líquida de 90 centavos por 3030 unidad en una producción total de 3.000 quintales diarios. 3031 De las actividades de la compañía dependían, casi totalmente, la 3032 vida del puerto, la de sus dos mil trabajadores y la de los 3033 familiares y dependientes de éstos. El total, de alrededor de 3034 6.000 personas, constituía el 90 por ciento de la población. En el 3035 distrito minero de Caracoles, situado un poco más adentro de 3036 punta de rieles del ferrocarril a Las Salinas, la proporción de la 3037 población chilena era igualmente abrumadora. 3038 3039 La soberanía boliviana estaba muy débilmente representada en 3040 uno y otro lugar. Los pocos bolivianos destacados por el gobierno 3041 (prefecto, subprefecto, jefe de puerto, jueces, fiscales y no más 3042 de 60 gendarmes para los dos puntos), y los aún más pocos que 3043 fueron a ganarse la vida en esa frontera de su patria por su 3044 propia iniciativa, vivían en un ambiente que les era hostil. En un 3045 principio los chilenos y los otros extranjeros aceptaron a los 3046 bolivianos como amables dueños del territorio que en nada 3047 impedían sus actividades. Pero cuando los gobiernos que 3048 sucedieron al de Melgarejo trataron de tomar medidas para dejar 3049 constancia de que aquel suelo era boliviano, surgieron 3050 dificultades. Los inmigrantes tomaron esas medidas como 3051 interferencia a su amplia libertad de acción. 3052 3053 Los chilenos fueron convenciéndose a sí mismos de que si aquel 3054 desierto producía algo, si daba oportunidades de trabajo y 3055 generaba riquezas, era gracias a su esfuerzo, que todo aquello 3056 les pertenecía moral y materialmente y debía pertenecerles 3057 política y administrativamente. Lo pensaban así no sólo los 3058 chilenos que trabajaban en Atacama, sino también los 3059 influyentes capitalistas que desde Santiago y Valparaíso 3060 usufructuaban del guano, la plata y el salitre. El representante 3061 diplomático inglés, en la capital del Mapocho, en nota a su 3062 gobierno, comentó en enero de 1877: "Se están haciendo 3063 esfuerzos para inducir a Chile a adueñarse de Antofagasta y la 3064 costa adyacente. Hace tiempo que se sospecha que Chile está 3065 dirigiendo ojos codiciosos a ese puerto de Bolivia y los residentes 3066 chilenos allí son de opinión que la impopularidad del Presidente 3067 Hilarión Daza y de su gobierno, la penuria económica del Tesoro 3068 y el deplorable estado general de todo el país, ofrecen la 3069 oportunidad de proceder a la anexión". 3070 3071 Los roces de nacionales y extranjeros se producían 3072 principalmente entre las autoridades subalternas bolivianas y la 3073 población chilena de Caracoles. Era muy difícil para aquellas 3074 mantener el orden en un campamento minero donde se 3075 producían frecuentes riñas, robos y crímenes. Los jueces no 3076 siempre poseían la ecuanimidad requerida para su delicada 3077 investidura y dictaban sentencias que los reos consideraban 3078 excesivas, haciendo intervenir al cónsul de su país en su 3079 defensa. 3080 3081 Algunos chilenos pensaron que en vez de estar sometidos a la 3082 justicia boliviana, sería mejor que los conflictos de toda clase 3083 entre gentes de su nacionalidad se resolviesen con intervención 3084 de amigos y por acuerdo de partes, agrupándose todos en una 3085 asociación dentro de la cual adquirirían tal compromiso. La 3086 entidad serviría además a sus miembros en cuestiones de 3087 beneficencia, ayudando a los menesterosos y a las viudas y 3088 huérfanos. Se formó así la sociedad "Patria", en 1876. 3089 3090 La revista "La Verdad", publicación mensual de la masonería de 3091 Chile, en su número 4, de 15 de agosto de 1918, relató de este 3092 modo su fundación: "Una obra masónica y patriótica. La suerte 3093 de los trabajadores chilenos en el litoral boliviano era por demás 3094 ingrata. En 1876 reunió Juan Agustín Palazuelos, en su casa, a 3095 muchos prestigiosos vecinos de Caracoles, con los que trató de 3096 la situación lamentable creada a los peones, operarios y 3097 empresarios chilenos por la hostilidad de las autoridades 3098 bolivianas subalternas de aquella localidad... Se acordó la 3099 formación de una sociedad de socorros mutuos con el nombre de 3100 "Patria". El primer directorio lo integraron Enrique Villegas 3101 (Cónsul de Chile), Juan Agustín Palazuelos Benjamín Navarrete, 3102 Luis Lichtenstein, José María Walker y Francisco N. de Oliveira. El 3103 señor Palazuelos, independientemente de los demás miembros, 3104 alimentaba la idea de renovar un movimiento revolucionario que 3105 había abortado poco antes y que ahora tenderle a la anexión de 3106 Atacama a la soberanía chilena. Reveló su plan e algunos 3107 amigos... La sociedad se convirtió en un centro muy poderoso". 3108 3109 3110 XXII 3111 EL IMPUESTO DE LOS TRES CENTAVOS 3112 3113 En agosto de 1872, el señor Manuel Pardo fue elegido Presidente 3114 de la República del Perú. Era el primer civil que asumía tal 3115 función en la agitada historia republicana del país. 3116 3117 Su más firme propósito fue poner coto a la orgía financiera que 3118 venía viviendo su patria durante las últimas décadas, con 3119 despilfarro de los ingentes ingresos fiscales que generaban el 3120 guano y el salitre, y que la estaba conduciendo a una inminente 3121 bancarrota. 3122 3123 Los únicos beneficiarios del desorden eran los especuladores, 3124 algunos peruanos y sobre todo dos extranjeros: el judío francés 3125 Augusto Dreyfuss y el norteamericano Enrique Meiggs. Los 3126 millones que obtenía Dreyfuss en Europa en préstamos con 3127 garantía del guano, pasaban a manos de Meiggs, y se convertían 3128 en kilómetros y más kilómetros de ferrocarriles, necesarios e 3129 innecesarios y en grandes utilidades para el judío, el yanqui y 3130 sus compadres. 3131 3132 Entre los males que sufría la nación estaba el del absurdo 3133 económico de que el guano, que era negocio estatal, 3134 confrontaba en los mercados internacionales la competencia del 3135 salitre, que estaba en manos de empresarios privados. Don 3136 Manuel Pardo quiso cambiar esta situación por medio de 3137 impuestos a la industria del nitrato de sodio. Fracasó por una 3138 cerrada resistencia de los dueños de "paradas" y "oficinas" de 3139 Tarapacá Se decidió entonces por el sistema del estanco, es 3140 decir, convirtiendo al Estado en el rescatador de toda la 3141 producción del nitrato y en su único vendedor en el extranjero. 3142 Esta medida también se frustró por la misma causa. Como 3143 recurso final, determinó la nacionalización de todos los 3144 yacimientos y establecimientos productores del fertilizante. A fin 3145 de compensar a los dueños con justas indemnizaciones buscó un 3146 empréstito en Londres. No lo pudo obtener por el desprestigio 3147 que sufría el crédito peruano. 3148 3149 Hizo entregar entonces, a los dueños, certificados de compre 3150 que contenían la promesa de que serían redimidos por el 3151 gobierno con intereses, conforme se fuesen arbitrando los 3152 fondos necesarios Los interesados, al verse obligados a canjear 3153 la que era fuente de su enriquecimiento por un simple pedazo de 3154 papel que no les merecía ninguna fe, se sintieron estafados. 3155 Había entre ellos varios chilenos, siendo los principales los 3156 miembros de la familia Edwards. 3157 3158 Es en la progresiva fiscalización de la industria del salitre del 3159 Perú a partir de 1872 que se encuentra la explicación de por qué 3160 el señor Belisario Perú en La Paz, al gestionar la confirmación del 3161 otorgamiento de los campos de caliche del Salar del Carmen y 3162 Las Salinas, a favor de la "Compañía de Salitres y Ferrocarril de 3163 Antofagasta", obtuvo el compromiso del gobierno de que no se 3164 impondrían impuestos a la compañía, aparte del pago de la 3165 patente de 40 bolivianos anuales por 50 hectáreas. 3166 3167 Es en el mismo antecedente peruano que se encuentra la 3168 explicación de por qué el ministro chileno Carlos Walker 3169 Martínez, al discutir con el canciller boliviano Mariano Baptista el 3170 Tratado de Límites de 1874, puso su mayor empeño en que se 3171 incluyese una cláusula que liberaba a sus compatriotas que 3172 trabajaban en Atacama del cobro de mayores tasas impositivas 3173 que las muy livianas que se encontraban vigentes en la fecha de 3174 suscripción del pacto. 3175 3176 Los Edwards, los otros chilenos y los ingleses que fueron socios 3177 de empresas en Tarapacá y ahora eran accionistas de la 3178 "Compañía de Salitres y Ferrocarril de Antofagasta", se 3179 aseguraron de que no les ocurriese en Bolivia lo que les había 3180 sucedido en el Perú. 3181 3182 El 4 de mayo de 1875, la Junta Municipal de Antofagasta, 3183 atingida por necesidades locales, pidió al gobierno que se le 3184 permitiese cobrar un impuesto mínimo a la compañía de salitres. 3185 En el memorial enviado a La Paz se explicó que la declinación de 3186 la actividad minera en Caracoles (por agotamiento de las vetas 3187 argentíferas) venía repercutiendo de una manera muy 3188 desfavorable en los ingresos del municipio antofagastino y que lo 3189 que se percibía por censos, licencias para casas de diversión y 3190 multas estaban lejos de balancear su presupuesto, impidiéndole 3191 atender a requerimientos tan imperiosos como los de arreglo de 3192 las escuelas, las calles y el alumbrado público. Añadía el 3193 documento que la empresa salitrera, que poseía una mitad de 3194 los terrenos de los que el municipio podría obtener alguna renta, 3195 tenía el privilegio de no abonar tributo alguno, pero que su 3196 situación financiera no sería afectada mayormente si se le 3197 cobraba una contribución de tres centavos por cada quintal de 3198 nitrato que exportase. Ese impuesto sería suficiente para 3199 equilibrar el presupuesto municipal y no sería sino una justa 3200 compensación a los daños que la citada empresa causaba en 3201 Antofagasta con el tráfico de sus trenes por las principales 3202 calles. 3203 3204 El asunto pasó a conocimiento del Consejo Municipal de Cobija, 3205 al cual estaba subordinada la Junta Municipal de Antofagasta. En 3206 defensa del privilegio de la empresa actuó el abogado boliviano 3207 Hilarión Fernández, ex-prefecto del Departamento. Invocó la 3208 vigencia de la transacción obtenida por Perú en 1873 y la del 3209 Tratado de Límites de 1874. 3210 3211 El Consejo, en un informe elevado a La Paz, expresó que a su 3212 juicio existía contradicción entre la solicitud de la Junta Municipal 3213 por un lado, y la transacción y el acuerdo de límites, por el otro. 3214 3215 El Consejo de Estado, presidido por don Serapio Reyes Ortiz, 3216 consideró correcto el criterio expuesto por la autoridad municipal 3217 de Cobija y por Decreto de 27 de agosto (1875), determinó que 3218 el impuesto de los tres centavos sería "ilegal e improcedente". 3219 3220 La Junta Municipal de Antofagasta tuvo que resignarse a su 3221 pobreza y a dejar sin reparación escuelas, calles y alumbrado. 3222 3223 Diez y nueve meses más tarde, el 8 de mayo de 1877, 3224 Antofagasta, como los otros tres puertos bolivianos y los del 3225 norte de Chile y el sur del Perú, sufrieron la devastadora 3226 tragedia de un terremoto y entrada de mar. Respecto a 3227 Antofagasta, cuenta el señor Isaac Arce en un libro: "A las 8 y 3228 30 de la noche todos los edificios de madera comenzaron a 3229 crujir. Las gentes se lanzaron a las calles. Hubo toque de 3230 campanas. Comenzaron algunos incendios. Se oyeron gritos: "¡El 3231 mar se sale, el mar se sale!". La multitud escapó a los cerros. 3232 Surgió un ruido formidable. El mar volvía con una enorme ola del 3233 lado norte. El cerro Moreno le sirvió de valla parcial. Los 3234 temblores siguieron toda la noche. La gente pernoctó al aire 3235 libre. Retornó a sus hogares al día siguiente. (Más de 1.000 3236 quedaron sin techo, agua, ni víveres). El vapor chileno, Blanco 3237 Encalada, que se encontraba en el puerto no sufrió daños. 3238 Ofreció auxilios. El Prefecto, don Narciso de la Riva, aceptó que 3239 30 marinos chilenos armados desembarcaran para guardar el 3240 orden. El mar llegó hasta el centro de la Plaza Colón, donde 3241 quedaron varadas algunas embarcaciones. En las calles se veían 3242 bultos de mercaderías fardos de pasto, sacos de cebada. El 3243 edificio de la aduana fue arrancado de cuajo y quedó atravesado 3244 en la calle Bolívar También otros edificios fueron movidos de su 3245 sitio por la presión del mar. La oficina de correos fue 3246 completamente destrozada... Llegó en la mañana un "propio" 3247 con la noticia de que el pueblo de Mejillones había desaparecido. 3248 Cuando arribó el vapor del norte se supo de los desastres en ese 3249 puerto y en Cobija, Pabellón de Pica, Iquique y Arica. En Cobija 3250 la mayor parte de los edificios sea derrumbaron. 3251 3252 El mar lo arrasó todo. La familia Arricruz, de 14 personas, 3253 desapareció íntegra". 3254 3255 3256 XXIII 3257 EL IMPUESTO PARA EL ALUMBRADO 3258 3259 En 1878, la Junta Municipal de Antofagasta, presidida por el 3260 súbdito chileno Hernán Puelma (desde 1871 los extranjeros con 3261 residencia de un año en el litoral y con una situación económica 3262 desahogada podían integrar los municipios), determinó que 3263 todos los propietarios de inmuebles en el puerto contribuyesen al 3264 mejoramiento del alumbrado público. Para tal efecto se 3265 dividieron los edificios en cuatro categorías. Los dueños de los 3266 de primera categoría debían abonar dos bolivianos mensuales, 3267 los de la segunda categoría un boliviano, los de la tercera, 3268 ochenta centavos y los de la cuarta, veinte centavos. 3269 La "Compañía de Salitres y Ferrocarril de Antofagasta", 3270 propietaria de varios inmuebles, adoptó la misma posición de 3271 tres años antes, cuando se negó a pagar un impuesto de tres 3272 centavos por cada quintal de salitre exportado. La transacción de 3273 1873 y el tratado de 1874 la eximían de toda clase de 3274 contribuciones. Ayudaba voluntariamente al municipio con 1.600 3275 bolivianos anuales, pero no quiso prestarse a pagos obligatorios 3276 pensando que, si cedía una vez, sentaría un precedente funesto 3277 que podría acabar por dejar sin efecto la gran conquista de Peró 3278 y Walker Martínez. 3279 3280 Varias cobranzas para el alumbrado fueron contestadas con la 3281 misma rotunda negativa. El 22 de octubre la Junta "ordenó" y 3282 "mandó" que el Comisario Municipal trabase embargo en los 3283 bienes de la empresa que fuesen suficientes para cubrir los 150 3284 bolivianos acumulados por el impuesto del alumbrado "más 3285 costos e intereses legales". Si el gerente persistía en su 3286 oposición, debía ser apresado y conducido a la cárcel. 3287 3288 Pedro Astorga, el comisario municipal, se constituyó en casa del 3289 señor Jorge Hicks, y le exigió una vez más la cancelación de lo 3290 adeudado. El aludido expresó que no abonaría ni un solo centavo 3291 Astorga lo hizo conducir preso con los celadores que lo 3292 acompañaban y trabó embargo de su vivienda, nombrando como 3293 depositario de la misma al Vicecónsul británico, señor Hugo Ross 3294 Steavenson. 3295 3296 Hicks, al enterarse que tendría que permanecer encerrado 3297 mientras se vendiese su casa y se cobrase el impuesto, "no le 3298 vio ninguna gracia a su situación". Aceptó dar una suma como 3299 depósito provisional hasta que el asunto se definiese por la vía 3300 legal. Lo hizo sentando formal protesta ante un notario con 3301 ayuda de sus abogados. Fue puesto en libertad. 3302 Al día siguiente, Steavenson se negó a entregar la cantidad que 3303 había recibido en depósito, alegando que sólo podía hacerlo si 3304 mediaba una sentencia judicial. Astorga y sus guardias 3305 recibieron una orden de buscar nuevamente a Hicks, y ponerlo 3306 otra vez entre rejas Prevenido por sus amigos, buscó asilo en el 3307 Consulado de Chile Empleados y obreros de la compañía de 3308 salitres se congregaron desafiantes en la Plaza Colón, donde 3309 estaba el consulado, dispuestos a proteger a su gerente si acaso 3310 las autoridades bolivianas se atrevían a sacarlo de allí. 3311 3312 El Cónsul, señor Simón Reyes, pasó una nota al Prefecto, 3313 Coronel Severino Zapata, informándole que el señor Hicks se 3314 hallaba alojado en su casa, bajo su protección. El prefecto, 3315 primero, se limitó a acusar recibo, pero luego, mejor 3316 aconsejado, contestó e forma extensa declarando que no podía 3317 reconocer al consulado e derecho de extraterritorialidad que 3318 pretendía asumir en amparo d Hicks, puesto que, según el 3319 Derecho Internacional, sólo gozaban d ese privilegio las misiones 3320 diplomáticas. Replicó Reyes manifestando que "nunca había 3321 pasado por su mente substraer al señor Hicks de la acción de los 3322 tribunales bolivianos", como que estaba permitiendo que se 3323 cumplan con él diligencias judiciales. Terminaba la .comunicación 3324 llamando la atención del prefecto hacia el origen de la cuestión 3325 suscitada entre la Municipalidad y el señor Hicks, que entrañaba, 3326 nada menos, que el desconocimiento del artículo 49 del Tratado 3327 de Límites de 1874. 3328 3329 Se encontraba casualmente en esos días en Antofagasta el 3330 Ministro de Hacienda de Bolivia, señor Eulogio Doria Medina. 3331 Había viajado al litoral con intención de tomar algunas medidas 3332 que mejorasen la situación económica. A un reclamo del Cónsul 3333 chileno sobre el cobro del impuesto del alumbrado a la compañía 3334 de salitres, el secretario de Estado respondió que la 3335 Municipalidad estaba en su derecho al establecer las 3336 contribuciones que creyese convenientes, sin que ello significase 3337 violación del pacto que regulaba las relaciones chileno- 3338 bolivianas. 3339 3340 Jorge Hicks, se vio obligado a pagar los 200 bolivianos que se le 3341 demandaban (150 por impuesto del alumbrado e intereses y 3342 costos de la cobranza). Entregó la suma delante del Cónsul 3343 Reyes y formulando por escrito otra formal protesta. 3344 3345 Volvió a su puesto de gerente y reanudó sus actividades 3346 normales, odiando de muerte, a todos los bolivianos, y sobre 3347 todo a sus autoridades. Consiguió que el Vicecónsul Steavenson 3348 hiciera saber de los abusos de que había sido víctima al 3349 comandante del vapor inglés "Pelican", que tenia su estación de 3350 vigilancia en las aguas del Pacífico Sur. El Capitán Hays ancló su 3351 buque frente al puerto, descendió a tierra y, acompañado del 3352 señor Steavenson, visitó al prefecto. Le pidió explicaciones y 3353 disculpas por los atropellos inferidos a un súbdito de su Majestad 3354 la Reina Victoria. El Coronel Zapata contestó que ningún 3355 atropello se había cometido con el señor Hicks y que, por lo 3356 tanto, no cabía ninguna clase de satisfacciones. El marino 3357 levantó la voz y el militar levantó la suya aún más. Cambiadas 3358 duras expresiones en ese tono, el Capitán Hays abandonó la 3359 prefectura, volvió a su barco y se perdió con él en el horizonte. 3360 3361 El señor Hicks, quedó muy orgulloso de haber sido objeto de una 3362 intervención de la armada de su país. En carta al señor Santiago 3363 C. Hayne, gerente de la firma "Anthony Gibbs" de Londres, le 3364 dijo: 3365 "Con esto los bolivianos verán que no pueden aprisionar a un 3366 británico. También los chilenos comprenderán que tener un 3367 gerente inglés aquí les representa una garantía adicional para 3368 sus intereses. Claro que el viejo salvaje del Prefecto no le 3369 importó nada la llegada del "Pelican", de la que ni siquiera dio 3370 parte a su gobierno, como no le importaba nada la ley, la 3371 diplomacia o la etiqueta. Pero el buque hizo acto de presencia 3372 cuando los bolivianos se estaban sintiendo un poco "gallitos" con 3373 los chilenos y ahora creen que hay una alianza formal entre 3374 Inglaterra y Chile a raíz de las dificultades de la compañía". 3375 3376 3377 XXIV 3378 EL IMPUESTO DE LOS DIEZ CENTAVOS 3379 3380 A los siete meses de la caída del gobierno de Mariano Melgarejo, 3381 la Asamblea Nacional, por leyes de 9 y 14 de agosto de 1871, 3382 anuló todos los actos de su administración. Al año siguiente, por 3383 un principio de equidad, los legisladores, por ley de 22 de 3384 noviembre de 1872, facultaron al Poder Ejecutivo a transar con 3385 aquellas personas o entidades que hubieran sido perjudicadas y 3386 tenían reclamaciones pendientes "difiriéndose estos asuntos, 3387 sólo en caso de no avenimiento" a la decisión de la Corte 3388 Suprema "con cargo de dar cuenta a la próxima legislatura". 3389 3390 Fue apoyándose en esta disposición que don Belisario Peró 3391 consiguió para la "Compañía de Salitres y Ferrocarril de 3392 Antofagasta" la transacción de 27 de noviembre de 1873, que le 3393 reconoció el derecho de explotar y exportar el salitre del Salar 3394 del Carmen y el de Las Salinas libre de toda contribución 3395 municipal o fiscal, salvo patente anual de 40 bolivianos por 50 3396 hectáreas extras que recibió en el segundo de esos yacimientos. 3397 3398 Ahora bien, mientras la empresa consideraba que esa 3399 transacción, por haber sido refrendada por el Poder Ejecutivo en 3400 pleno, es decir, por el Presidente de la República y sus cuatro 3401 Secretarios de Estado, era de carácter definitivo, varios juristas 3402 en Bolivia sostenían que no tenía validez hasta que no fuese 3403 ratificada por el Poder Legislativo, en vista de que involucraba 3404 bienes de la nación. 3405 3406 La Asamblea Nacional del año 1784 tomó conocimiento del 3407 asunto. La Comisión de Hacienda redactó un proyecto de ley 3408 aprobando la transacción, pero estableciendo que la liberación 3409 de impuestos no incluía los de carácter municipal. Debido a las 3410 recargadas labores de esa asamblea, particularmente por las 3411 muchas sesiones que tuvo que dedicar al estudio del Tratado de 3412 Límites preparado por el canciller boliviano Mariano Baptista y el 3413 ministro chileno Carlos Walker Martínez, se postergó la 3414 consideración del proyecto hasta la legislatura siguiente. 3415 3416 Esta no pudo tener lugar sino a fines de 1877, debido a que el 3417 golpe de Estado del General Hilarión Daza contra el Presidente 3418 Tomás Frías alteró la vida institucional de la república impidiendo 3419 que los representantes del pueblo se reuniesen los años 1875 y 3420 1876. 3421 3422 En la sesión de la Asamblea de 19 de diciembre de 1877, el 3423 joven Franklin Alvarado, diputado por Antofagasta y Mejillones, 3424 propuso la contratación de un empréstito para atender a la 3425 reparación de los grandes daños sufridos por esos dos puertos 3426 en el maremoto de mayo de ese mismo año. El Ministro de 3427 Hacienda, señor Manuel Ignacio Salvatierra, se opuso 3428 terminantemente a tal idea, recordando el desprestigio y daño 3429 financiero que había sufrido el país con los préstamos obtenidos 3430 durante los períodos de los presidentes Melgarejo y Morales 3431 (Banco Garantizador de Valores de Chile y La Chambre, 3432 respectivamente). 3433 3434 El diputado Francisco Buitrago, ex-prefecto del Departamento del 3435 Litoral, propuso entonces que para recaudar fondos para el 3436 objetivo perseguido por Alvarado se cobrase a la "Compañía de 3437 Salitres y Ferrocarril de Antofagasta", un impuesto de "unos diez 3438 centavos" por cada quintal de salitre que exportase y otra 3439 contribución por las maquinarias y bienes que importaba para 3440 sus propias necesidades y la de sus trabajadores. Calculó que 3441 con uno y otro árbitro se podría obtener unos 50.000 a 60.000 3442 bolivianos anuales. 3443 3444 El diputado Abdón Senén Ondarza apoyó la moción de su colega 3445 Buitrago y presentó un proyecto de ley creando el impuesto. 3446 Surgieron opiniones a favor y en contra. Reza una carta de la 3447 época: "El asunto del impuesto a nuestras exportaciones era la 3448 ambición del Legislativo y se lo discutía en todas partes. 3449 Ondarza y Buitrago eran los espíritus motores. El tratado con 3450 Chile de 1874, era el gran obstáculo, pero algunos decían que no 3451 sería afectado por romper o alterar por mutuo acuerdo entre el 3452 gobierno y una empresa privada... Alvarado propuso que 3453 igualmente se alterase el arreglo con Meiggs (sobre salitreras del 3454 Toco) e inmediatamente se levantó un grupo contra él. A su 3455 debido tiempo llegaron dos agentes de Meiggs, desde Lima, 3456 Mariano Donato Muñoz y un alemán... 3457 3458 Se supone que algún dinero se repartió... y se consiguió 29 3459 firmas para retirar la moción de votar esa cuestión... ". 3460 El proyecto de ley sobre el impuesto de 10 centavos pasó a la 3461 Comisión de Hacienda. Esta demoró varias semanas en formar 3462 juicio. Finalmente, emitió un informe favorable. La Asamblea le 3463 dio su visto bueno. El Poder Legislativo promulgó la ley el 10 de 3464 febrero de 1878. Su texto fue el siguiente: "Artículo Único.— Se 3465 aprueba la transacción celebrada por el Ejecutivo el 27 de 3466 noviembre de 1873 con el apoderado de la "Compañía de 3467 Salitres y Ferrocarril de Antofagasta", a condición de hacer 3468 efectivo, como mínimo, un impuesto de diez centavos por quintal 3469 de salitre exportado". 3470 3471 La compañía supo de la ley mediante aviso telegráfico que el 3472 Prefecto, señor Narciso de la Riva, envió al gerente señor Jorge 3473 Hicks, que se encontraba en Las Salinas. Al día siguiente se 3474 publicó por bando, leyéndose su texto en las cuatro esquinas de 3475 la plaza. Hicks volvió inmediatamente al puerto y pidió a De la 3476 Riva que no lo notificase todavía con ella de manera oficial, a fin 3477 de darle tiempo de informar al directorio de Valparaíso. De la 3478 Riva consintió en ello. Hicks dijo al prefecto que estaba seguro 3479 de que sus mandantes jamás consentirían en pagar ese tributo y 3480 que antes que hacerlo, preferirían despedir a todo el personal de 3481 empleados y obreros, paralizando operaciones y creando el 3482 consiguiente conflicto social. 3483 3484 El directorio de la compañía atribuyó la ley a inspiración 3485 peruana. Creyó que se iniciaba en Bolivia lo que había ocurrido 3486 en Tarapacá, que el impuesto de los diez centavos, que tenía el 3487 calificativo de "mínimo" según el texto de la misma ley, sería 3488 seguido por otros mayores y nuevas medidas de fiscalización 3489 que acabarían por arrebatar a los chilenos de Atacama su 3490 negocio de salitre como les había ocurrido en el Perú. Aunque la 3491 suma que representaba el impuesto era pequeña y no podía 3492 dañar mayormente los intereses de los accionistas, resolvió 3493 oponerse resueltamente al cumplimiento de la ley y obtener su 3494 revocación. 3495 3496 Pudo elegir para ello la vía judicial llegando hasta los estrados de 3497 la Corte Suprema de Sucre, pero temeroso de que no obtendría 3498 de ese modo su objetivo final y de que más bien el mencionado 3499 tribunal pudiese confirmar lo resuelto por los otros dos poderes 3500 del Estado, prefirió recurrir al gobierno de su propio país. Para 3501 tal efecto la empresa se valió de la influencia que miembros de 3502 su directorio, como Don Francisco Puelma, tenían sobre algunos 3503 ministros y de que la mayoría de éstos: el de Relaciones 3504 Exteriores (Alejandro Fierro), el de Guerra (Cornelio Saavedra) y 3505 el de Hacienda (Julio Zegers), eran accionistas de la empresa, 3506 así como otros importantes personajes del Partido Nacional 3507 gobernante, como don Antonio Varas y don Rafael Sotomayor. 3508 Don Agustín Edwards Ossandón murió en febrero de ese año de 3509 1878. 3510 3511 El manejo de los intereses de la familia y de su gran número de 3512 acciones en la compañía salitrera de Antofagasta, pasaron a 3513 manos de su hijo Agustín Edwards Ross que por su juventud no 3514 tenía aun la influencia personal que tuvo su progenitor. 3515 3516 3517 XXV 3518 RIELES EN VEZ DE IMPUESTOS 3519 3520 El gobierno de Chile, al aceptar los requerimientos de la 3521 "Compañía de Salitres y Ferrocarril de Antofagasta" para 3522 intervenir en contra del impuesto de los 10 centavos, convirtió 3523 un asunto que pertenecía al régimen administrativo interno de 3524 Bolivia en una cuestión internacional. 3525 3526 El Ministro de Relaciones Exteriores, señor Alejandro Fierro, 3527 antes de enviar las instrucciones pertinentes a su agente 3528 diplomático en La Paz, se deshizo de las acciones que poseía en 3529 la empresa. De esa manera pretendía evitar que se le acusase 3530 de actuar movido por intereses personales. Pero el subterfugio 3531 fue de poca validez, pues los otros miembros del gabinete, 3532 señores Saavedra y Zegers, y sus coadjutores, señores Varas y 3533 Sotomayor, conservaron las suyas. 3534 3535 El ministro chileno en La Paz, señor Pedro Nolasco Videla, visitó 3536 al ministro de Hacienda de Bolivia, señor Manuel Ignacio 3537 Salvatierra, y le pidió la derogatoria de la ley de 10 de febrero. 3538 El mencionado Secretario de Estado, que desde un principio vio 3539 los inconvenientes que acarrearía el impuesto y no era partidario 3540 de su imposición, prometió que se dejaría en suspenso hasta 3541 encontrar una solución a la reclamación planteada. El 2 de julio 3542 (1878), el señor Videla oficializó su gestión mediante una nota 3543 dirigida al canciller. En ella recordó cómo el Consejo de Estado 3544 declaró "ilegal e improcedente" el impuesto de tres centavos que 3545 se quiso cobrar a la compañía en 1875 por el mismo concepto de 3546 exportación de salitre. Dijo también que la ley de 10 de febrero 3547 ponía en tela de juicio el tratado de 1874, y llevaba la cuestión 3548 "a un terreno delicado y resbaladizo; que la compañía, al ver 3549 vulnerados sus derechos, podría verse obligada a suspender sus 3550 trabajos dejando a millares de pobladores y operarios en la 3551 ociosidad, lo que posiblemente acarrearía una sublevación que ni 3552 el Gobierno de Chile ni el de Bolivia podrían mirar con 3553 indiferencia". 3554 3555 Como las autoridades bolivianas no exigieron el pago del 3556 impuesto, el Gobierno de Chile creyó que quedaba tácitamente 3557 derogado y no insistió en sus planteamientos. Por su parte, el 3558 Gobierno de Bolivia dejó sin respuesta la nota del señor Videla. 3559 3560 Surgió, además, otra circunstancia (ignorada por la historia), 3561 que hizo pensar que las relaciones boliviano-chilenas iban a 3562 entrar en una era de estrecha colaboración. El señor Aniceto 3563 Arce, vinculado con capitalistas chilenos en su empresa minera 3564 de Huanchaca y convencido de que el atraso de la república 3565 tenía por principal causa la falta de vías de comunicación, 3566 propuso al Presidente Hilarión Daza unir la costa con el altiplano 3567 por medio de una línea férrea, re-actualizando, con mejor 3568 criterio y método, los proyectos que se iniciaron durante el 3569 gobierno del General Agustín Morales y terminaron en un 3570 fracaso. Ofreció que su empresa minera pondría los fondos 3571 necesarios para el estudio inicial del trazo más conveniente, 3572 adelantando el pago de sus impuestos fiscales. 3573 3574 El General Daza vio en este plan la solución ideal a las 3575 dificultades que el gobierno del Perú estaba poniendo al 3576 comercio de importación boliviano por Arica y Moliendo. Con un 3577 ferrocarril desde un puerto propio, Bolivia no tendría que 3578 depender de la buena voluntad peruana para los 3579 abastecimientos de ultramar. Aceptó que el señor Arce viajase a 3580 Chile en busca de capitales y declaró que el impuesto de los 10 3581 centavos no sería cobrado, para evitar contratiempos a la 3582 importante misión. Invitó a un banquete en honor del señor Arce 3583 y del señor Belisario Peró (Gerente de Huanchaca, que iba a 3584 acompañar a aquél en su viaje). En los brindis deseó a ambos el 3585 mejor de los éxitos en el patriótico empeño que iban a iniciar. 3586 Era agosto de 1878. 3587 El impuesto quedó olvidado. En octubre, mientras los señores 3588 Arce y Peró seguían en Santiago buscando dinero para el 3589 ferrocarril y eran agasajados por el Presidente Aníbal Pinto y 3590 personalidades de la banca y la industria, el ministro de Chile en 3591 La Paz, ofreció un banquete al General Daza. En los discursos, 3592 todos los oradores bolivianos, entre ellos los ministros Lanza, 3593 Reyes Ortiz y Jofré, el Arzobispo y los políticos Antonio Quijarro 3594 y José Rosendo Gutiérrez, abundaron en expresiones de amistad 3595 para con Chile. Los principales chilenos, el anfitrión, el Secretario 3596 de la Legación señor Valdez Vergara y el senador Lorenzo Claro, 3597 respondieron con elogios a Bolivia y votos por su creciente 3598 prosperidad. 3599 3600 La luna de miel se interrumpió súbitamente. En esos días 3601 ocurrían en Antofagasta los incidentes provocados por la 3602 cobranza del impuesto para el alumbrado (Capítulo XXII de esta 3603 serie). El nuevo Ministro de Hacienda, señor Eulogio Doria 3604 Medina, que se encontraba en el litoral estudiando sus 3605 necesidades económicas, constató los enormes daños sufridos 3606 por los puertos bolivianos en el sismo de mayo del año anterior. 3607 Con la "quiebra en la contribución indígena (principal soporte del 3608 presupuesto nacional), de los diezmos y otros ramos" no se 3609 contaba con recursos para reparaciones y otras necesidades del 3610 Estado. El gobierno decidió hacer efectivo el impuesto de los 10 3611 centavos a las exportaciones de salitre y cobrarlo con carácter 3612 retroactivo, es decir, desde la promulgación de la respectiva ley, 3613 nueve meses antes. El triunfo obtenido por el municipio de 3614 Antofagasta al conseguir el pago del impuesto para el alumbrado 3615 mostraba que si se actuaba con firmeza se obtenía lo 3616 perseguido. 3617 3618 El Ministro de Guerra, General Manuel Othón Jofré, cuyo hijo 3619 trabajaba como abogado de la empresa salitrera, escribió a éste 3620 avisándole de las intenciones del Ejecutivo. El joven retransmitió 3621 la información a sus empleadores. La noticia voló a Valparaíso y 3622 Santiago. 3623 3624 El Gobierno de Chile resolvió oponerse terminantemente al cobro 3625 de la contribución enfrentando la firmeza boliviana con mayor 3626 firmeza chilena. El canciller Fierro, en fecha 8 de noviembre 3627 (1878), escribió a su agente en La Paz: "Este ministerio ha 3628 recibido informes confidenciales de que el Gobierno de Bolivia 3629 persiste en establecer definitivamente el impuesto sancionado 3630 por ley de febrero del corriente año... Ello importaría un ataque 3631 directo al tratado que existe entre las dos repúblicas... Se hace 3632 necesario para evitar graves conflictos, que usted se dirija al 3633 Ministro de Relaciones Exteriores dándole lectura de la presente 3634 nota y dejándole copia de ella si fuera conveniente... Pida al 3635 (Gobierno) de Bolivia la suspensión definitiva de toda 3636 contribución posterior a la vigencia del tratado (de 1874)... 3637 La negativa del Gobierno de Bolivia a una exigencia tan justa 3638 como demostrada colocaría al de Chile en el caso de declarar 3639 nulo el tratado de límites que nos liga con ese país y las 3640 consecuencias de esta declaración dolorosa, pero absolutamente 3641 justificada y necesaria, serían de la exclusiva responsabilidad de 3642 la parte que hubiese dejado de dar cumplimiento a lo pactado". 3643 3644 El señor Pedro Nolasco Videla leyó y dejó copia de dicha 3645 comunicación al canciller Martín Lanza. El duelo quedaba 3646 planteado. El conflicto sobre el impuesto de los 10 centavos 3647 renacía con características de mayor gravedad. 3648 3649 El sueño de don Aniceto Arce sobre la confraternidad boliviano- 3650 chilena y un ferrocarril que uniese la costa con el altiplano iba a 3651 convertirse a corto plazo en la pesadilla de una guerra. 3652 3653 3654 XXVI 3655 PUGNA DIPLOMÁTICA CON UN BUQUE DE GUERRA DE POR 3656 MEDIO 3657 3658 Antes de recibir la nota de su Cancillería, de 8 de noviembre 3659 (1878), el representante chileno en La Paz tuvo ya una 3660 conferencia con los ministros de Relaciones Exteriores y de 3661 Hacienda para pedirles la suspensión de las gabelas que se 3662 estaban cobrando a la "Compañía de Salitres y Ferrocarril de 3663 Antofagasta". Cuando le llegó la citada comunicación volvió a 3664 entrevistarlos para reiterar sus planteamientos, dejándoles copia 3665 de la terminante nota de su gobierno. El efecto fue 3666 contraproducente. La amenaza de que el cobro del impuesto a 3667 las exportaciones de salitre obligaría al gobierno de Santiago a 3668 declarar nulo el Tratado de Límites de 1874, en vez de 3669 amedrentar, exacerbó al Presidente Daza y sus colaboradores. 3670 3671 El 14 de diciembre, el Ministro de Hacienda, señor Serapio Reyes 3672 Ortiz, escribió al Prefecto de Antofagasta diciéndole que "el 3673 presidente de la República, oyendo al Consejo de Ministros, le 3674 ordenaba decirle que haga efectivo el tributo desde la 3675 promulgación de la ley". Al siguiente día, el canciller, señor 3676 Martín Lanza, informó de tal decisión al representante chileno. 3677 Contestó de inmediato Videla expresando que ella "destruía 3678 todas las expectativas de una discusión tranquila y conciliatoria y 3679 cerraba el paso a toda discusión". Terminaba la comunicación en 3680 estos términos: "En presencia del oficio de VE, fechado hoy, 3681 cumplo con el solemne y doloroso deber de declarar, en nombre 3682 de mi gobierno, que la ejecución de la ley que grava con un 3683 impuesto a la Compañía de Salitres y Ferrocarril de Antofagasta 3684 importa la ruptura del Tratado de Límites de 6 de agosto de 3685 1874 y que las consecuencias de esta declaración serán de la 3686 exclusiva responsabilidad del Gobierno de Bolivia 3687 3688 El Gobierno de Chile movilizó al blindado "Blanco Encalada", a la 3689 bahía de Antofagasta, y el Canciller Alejandro Fierro ordenó a su 3690 agente en La Paz: "Santiago, 3 de enero de 1879... El Gobierno 3691 de Bolivia ha podido creer que la contribución no es contraria al 3692 tratado de 1874; el de Chile mantiene una opinión contraria. De 3693 aquí fluye natural y lógicamente la necesidad de una discusión 3694 tranquila y amigable para arribar a un acuerdo común; y si ello 3695 no fuera posible, habría llegado la oportunidad de entregar el 3696 punto controvertido al fallo de una potencia amiga... Mi gobierno 3697 acepta cualquiera de estos arbitrios, pero lo que no puede 3698 aceptar de manera alguna es que el Gobierno de Bolivia, 3699 haciéndose justicia a sí misma, resuelva el punto discutido por 3700 las vías de hecho... En consecuencia, usted hará saber a ese 3701 gobierno que el de Chile se encuentra dispuesto a continuar la 3702 discusión y a constituir el arbitraje, en la expresa inteligencia de 3703 que se impartirán inmediatamente las órdenes necesarias para 3704 suspender la ley de febrero de 1878. Pedirá usted una respuesta 3705 terminante, dentro de un término breve y perentorio. Si la 3706 respuesta del gobierno boliviano fuese favorable, como es de 3707 esperarlo, usted continuará en su puesto para reabrir la 3708 discusión o iniciar gestiones conducentes a la constitución del 3709 arbitraje... Si por el contrario, el Gobierno de Bolivia persistiese 3710 en llevar a efecto la ley de 14 de febrero último, usted pedirá 3711 sus pasaportes, declarando que la conducta de ese gobierno 3712 hace del todo inútil e infructuosa la presencia de nuestra 3713 Legación en esa república; y que mi gobierno hace pesar 3714 exclusivamente sobre el gobierno de La Paz las consecuencias de 3715 esta medida, que hemos procurado evitar por todos los medios 3716 posibles. El Gobierno de Chile considera también conveniente 3717 que usted exprese, antes de retirarse, al de Bolivia, que su 3718 negativa reiterada a suspender la ejecución de la ley de 14 de 3719 febrero de 1878, importaría la anulación del tratado de 1874, y 3720 que, en consecuencia, renacerían para Chile todos los derechos 3721 que legítimamente hacía valer antes del tratado de 1866. Por la 3722 misma razón, Chile, llegada esta desagradable emergencia, que 3723 él no ha provocado y que no ha podido evitar, ejercerá todos 3724 aquellos actos que estime necesarios para la defensa de sus 3725 derechos". 3726 3727 Chile, con tales instrucciones y un blindado frente a un puerto 3728 boliviano, estaba imitando la diplomacia apoyada con cañones 3729 que habían puesto de moda las grandes potencias de ese siglo. 3730 Era la diplomacia del fuerte sobre el débil. Una diplomacia 3731 imperialista. Chile se daba el lujo de adoptarla, pese a su 3732 pequeñez y pobreza, aprovechando de que Bolivia era más 3733 pobre y no tenía un solo barco con que defenderse. 3734 3735 A esta altura de las circunstancias el gobierno de Santiago 3736 estaba ya dispuesto a emplear la fuerza si el de La Paz no 3737 aceptaba sus requerimientos. Una nota del canciller Fierro, a su 3738 agente consular en Antofagasta, del mismo 3 de enero, dijo: "Si 3739 contra nuestras fundadas expectativas el Gobierno de Bolivia 3740 persistiera en la violación del tratado de 1874, habrá llegado la 3741 oportunidad de acudir a nuestras naves para exigir que los 3742 derechos de Chile sean debidamente respetados". 3743 3744 El señor Pedro Nolasco Videla no creyó prudente cumplir 3745 estrictamente las órdenes de su cancillería. En vez de ello, el 20 3746 de enero, se dirigió al Ministerio de Relaciones Exteriores 3747 boliviano en términos muy conciliatorios, manifestando que su 3748 gobierno estaba dispuesto a continuar conversaciones para 3749 llegar a un entendimiento o a constituir un arbitraje, pero a 3750 condición de que Bolivia previamente, restituyese la situación al 3751 estado en que estaba antes de impartirse la orden de cobranza 3752 del impuesto de los 10 centavos. 3753 3754 El Ministro Martín Lanza contestó pidiendo explicaciones sobre la 3755 presencia en aguas de Antofagasta del buque de guerra y 3756 declarando que "ante semejante presión no podía el Gobierno de 3757 Bolivia seguir tratando el asunto de manera pacífica". Replicó 3758 Videla con el sofisma de que la presencia del "Blanco Encalada" 3759 en Antofagasta no tenía la significación que le daba el gobierno 3760 boliviano ya que las naves de las armada chilena se 3761 estacionaban periódicamente en ese puerto y en el de Mejillones 3762 y que fue gracias a esa circunstancia que el mismo buque pudo 3763 auxiliar a las poblaciones que sufrieron las consecuencias del 3764 maremoto del 9 de mayo de 1877. 3765 3766 Al dirigir la comunicación del 20 de enero el señor Videla no 3767 estaba actuando de acuerdo con los propósitos que dominaban 3768 en el gobierno de su país. Directores de la compañía de salitres 3769 al comprobar el empecinamiento boliviano en cobrar el impuesto 3770 de los 10 centavos, veían que Bolivia estaba brindando una 3771 preciosa oportunidad para que Chile se adueñase del litoral 3772 hasta el grado 23, colocando al salitre del Salar de Carmen y Las 3773 Salinas, y de paso a la plata de Caracoles, bajo su bandera y 3774 jurisdicción. Varios de los colaboradores del Presidente Aníbal 3775 Pinto estaban ya inclinados hacia una política de esa naturaleza. 3776 3777 El vicepresidente de la compañía, señor Miguel Saldías, desde 3778 Santiago, en carta al señor Agustín Edwards Ross, que se 3779 encontraba en Valparaíso, le dijo: "En las instrucciones a Videla 3780 (de 3 de enero), se le indica que para arribar al embargo es 3781 necesario antes agotar las negociaciones, ganando tiempo de 3782 esta manera para que en el curso de ella podamos asegurarnos 3783 si nos conviene celebrar algún arreglo o se nos ocurre algún 3784 medio de afianzar de una manera sólida para el futuro nuestra 3785 tranquilidad y nuestros derechos. Esto es lo principal a que 3786 hemos arribado ahora. Pormenores los conversaremos". 3787 3788 El gerente de la empresa, Jorge Hicks, escribió desde 3789 Antofagasta a uno de los miembros del directorio: "Aquí hay un 3790 deseo muy grande de tomar el lugar... ". En otra carta había 3791 dicho días antes a otro directivo: "La situación no puede ser más 3792 seria y nosotros nadamos o nos hundimos con Chile. Toda la 3793 cuestión será sometida pronto al arbitraje u ocurrirá un conflicto. 3794 En el momento presente podríamos tomar el lugar fácilmente. 3795 Más tarde los bolivianos podrán mandar tropas y hacer el asunto 3796 más costoso". 3797 3798 3799 XXVII 3800 LA MANIOBRA LEGULEYESCA 3801 3802 Cuando la Asamblea Nacional boliviana estableció la ley que 3803 imponía un impuesto de 10 centavos por quintal a las 3804 exportaciones de salitre, el Prefecto de Antofagasta era el señor 3805 Narciso de la Riva. Renunció a su puesto en junio de 1878 y el 3806 Presidente Hilarión Daza lo substituyó por el Coronel Severino 3807 Zapata. 3808 3809 La nueva autoridad, tan pronto recibió las instrucciones del 3810 Ministerio de Hacienda de cobrar el tributo y en vista de las 3811 negativas del gerente de la empresa salitrera chilena para 3812 pagarlo, inició un juicio coactivo disponiendo el 11 de enero de 3813 1879: "En nombre de la ley, el ciudadano Severino Zapata, 3814 Prefecto y Superintendente de Hacienda y Minas del 3815 Departamento, ordena y manda que el diligenciero de hacienda, 3816 José Félix Valda, apremie y conduzca a la cárcel pública a Jorge 3817 Hicks, Gerente y Representante de la "Compañía de Salitres y 3818 Ferrocarril de Antofagasta", deudor al fisco de la cantidad de 3819 90.848 bolivianos y 13 centavos. Así mismo, trabará embargo de 3820 los bienes de dicha compañía, suficientes a cubrir la cantidad 3821 adeudada, depositándolos en poder de persona abonada y fiable 3822 por derecho. Requiere a todos los depositarios de la fuerza 3823 pública presten los auxilios necesarios para la ejecución de este 3824 mandamiento". El monto de noventa mil y pico representaba la 3825 cantidad acumulada desde que se dictó la ley, casi un año antes. 3826 3827 Valda trabó embargo de un terreno, nueve casas y dos depósitos 3828 de salitre. Contrariamente a lo que afirman varias publicaciones 3829 recientes, confundiendo con lo que ocurrió en la cobranza del 3830 impuesto para el alumbrado, no pudo aprehender a Hicks, 3831 porque se encontraba en el Salar del Carmen. 3832 3833 Desde allí se dio modos de llegar a bordo del blindado "Blanco 3834 Encalada" y pidió libertad provisional con garantía del señor 3835 Napoleón Peró. El Prefecto, previo dictamen favorable del Fiscal 3836 de Distrito, se la concedió. Volvió a sus actividades y formuló la 3837 siguiente protesta ante el Notario Calixto Paz: "Antofagasta, 14 3838 de enero de 1879. No pudiendo consentir ni por un solo 3839 momento el atentado legal que trata de vulnerar los intereses de 3840 mis representados, protesto en nombre y en representación de 3841 la compañía, enérgicamente, y como en derecho me sea 3842 permitido, contra el embargo, y forma legal en que se ha 3843 efectuado y contra todas las órdenes y procedimientos de las 3844 autoridades que han intervenido en él" 3845 3846 El Prefecto escribió al Ministro de Relaciones Exteriores: "Ayer se 3847 ha trabado embargo de los bienes de la compañía capaces de 3848 cubrir la cantidad de 90.848.13, que es la que se debe, pero 3849 creo fundamentalmente que no podrá pasarse adelante, porque 3850 intereses tan crecidos no pueden rematarse como exige la 3851 ley...".» El remate de los bienes embargados era el siguiente 3852 paso según las reglas de los juicios coactivos. 3853 3854 Contestó el Ministro Lanza: "El Jefe del Estado, después de 3855 madura deliberación, me encarga decirle que sin ceder un ápice 3856 en la perentoria obligación que tiene usted de cumplir las 3857 leyes... lleve a efecto todos los trámites del juicio coactivo... En 3858 cuanto a que sea difícil el remate de los bienes embargados por 3859 falta de postores a su valor ingente, nada más racional y justo 3860 que en cumplimiento de las disposiciones del caso se prosiga el 3861 juicio hasta obtener la adjudicación de dichos bienes en favor del 3862 fisco, previas las respectivas rebajas y formalidades". 3863 3864 Mientras el Prefecto cumplía lo que se le ordenaba y fijaba el 14 3865 de febrero de 1879 (aniversario de la promulgación de la ley del 3866 impuesto) como fecha para el remate de los bienes embargados, 3867 en La Paz, surgió una idea que pareció salvadora para soslayar la 3868 intervención del gobierno de Santiago y reducir el problema a lo 3869 que debió ser desde un principio: un conflicto privativo entre el 3870 Ejecutivo y la compañía de Salitres. 3871 3872 Tuvo su origen en un artículo de un periódico de Antofagasta en 3873 el que un autor anónimo expresó la opinión de que la protesta 3874 notarial del gerente Hicks contra la aplicación de la ley del 3875 impuesto invalidaba la transacción de 1873 al hacerle faltar el 3876 consentimiento de una de las partes. El opúsculo fue como una 3877 revelación para los cuatro ministros del Presidente Daza, que 3878 eran abogados, incluyendo el General Manuel Othón Jofré. 3879 Consultaron a otros juristas y la opinión dominante fue 3880 favorable. Se raciocinó de esta manera: La Asamblea Nacional 3881 en uso de un legítimo derecho estableció que para ser válida la 3882 concesión de yacimientos salitrosos a la compañía chilena, ésta 3883 debía pagar un impuesto de 10 centavos por cada quintal de 3884 nitrato de sodio que exportase. Al protestar el gerente Hicks 3885 contra el cobro de esa gabela tácitamente ha anulado la 3886 concesión otorgada. No siendo válida la concesión la compañía 3887 no tiene nada que hacer en Bolivia y debe abandonar el país. No 3888 habiendo compañía no hay a quien cobrar el impuesto y éste 3889 queda anulado. No habiendo impuesto, el Gobierno de Chile no 3890 tiene por qué acusar al de Bolivia de violación del tratado de 3891 1874 y tendrá que retirar su intervención. Si la compañía se 3892 siente perjudicada en sus intereses podrá recurrir ala Corte 3893 Suprema de Justicia de Sucre en un juicio contencioso 3894 administrativo. 3895 3896 Para asegurar que el Gobierno de Chile no asumiría otra actitud 3897 que la que se esperaba, es decir, apartarse de una cuestión que 3898 se iba a volver típica y claramente del régimen legal interno de 3899 Bolivia, en la que estaría completamente fuera de lugar una 3900 intervención extranjera, se consultó al senador chileno Lorenzo 3901 Claro, residente en Bolivia con intereses bancarios y mineros 3902 desde años antes y muy vinculado en la cúpula gubernamental y 3903 la sociedad paceña. El senador afirmó que el presidente Aníbal 3904 Pinto y sus colaboradores, por ser hombres de paz y de derecho 3905 no podrían sino sentirse muy felices de que se les brindase una 3906 oportunidad para zafarse de una posición que no les agradaba 3907 en lo más mínimo, en la que estaban comprometiendo a su 3908 patria, por ayudar a una empresa privada, en una cuestión que 3909 podía degenerar en confrontación internacional bélica. 3910 3911 Para el caso de que las seguridades que daba don Lorenzo no 3912 llegaran a cumplirse, el Ejecutivo boliviano encontró otro factor 3913 que le dio plena seguridad de que el Gobierno de Chile, si no se 3914 retiraba del problema y llegaba a hacer alguna demostración de 3915 fuerza en Antofagasta a favor de la compañía, llevaría todas las 3916 de perder. Un funcionario de la cancillería sacó a luz el Tratado 3917 de Alianza Defensiva suscrito con el Perú seis años antes y que 3918 todos habían olvidado. Hizo notar que seguía vigente pues no 3919 tenía término de duración y ninguna de las dos partes 3920 contratantes había declarado su caducidad. Con él todo estaba 3921 garantizado. Si Chile tocaba suelo boliviano con un solo soldado 3922 se produciría el casus foederis previsto en el pacto y el Perú 3923 tendría que ponerse codo a codo con Bolivia. Entonces, la 3924 marina peruana por el mar y el ejército boliviano por tierra 3925 expulsarían ignominiosamente al araucano invasor hasta detrás 3926 del Paposo. Bolivia recuperaría el pleno dominio de todo su 3927 litoral. El pingüe negocio del salitre se haría por administración 3928 directa del gobierno o se lo arrendaría como el del Toco al buen 3929 amigo de allende el Titicaca. 3930 3931 El Ministro de Hacienda, señor Eulogio Doria Medina, redactó el 3932 decreto. Se promulgó el 1° de febrero (1879), con la firma del 3933 Presidente y los cuatro integrantes de su gabinete. Su parte 3934 resolutiva, a continuación de varios considerandos, decía así: 3935 "Queda rescindida y sin efecto la convención de 27 de noviembre 3936 de 1873. En su mérito, suspéndense los efectos de la ley de 14 3937 de febrero de 1874. El ministro del ramo dictará las órdenes 3938 convenientes para la reivindicación de las salitreras detentadas 3939 por la compañía". 3940 3941 3942 XXVIII 3943 RUPTURA DE LAS RELACIONES DIPLOMATICAS 3944 3945 El Ministro de Relaciones Exteriores de Bolivia, señor Martín 3946 Lanza Saravia (hijo del famoso guerrillero de la independencia: 3947 José Miguel García de Lanza), no compartía totalmente el 3948 optimismo del presidente Hilarión Daza y de sus colegas del 3949 gabinete, señores Eulogio Doria Medina, Serapio Reyes Ortiz y 3950 Manuel Othón Jofré, respecto a que con el decreto de rescisión 3951 del contrato de la "Compañía de Salitres y Ferrocarril de 3952 Antofagasta" se había dado un jaque mate a la empresa como al 3953 gobierno de Chile. 3954 3955 Para el caso de que la reacción chilena fuera la contraria de la 3956 que daba por segura el senador Lorenzo Claro, creyó prudente 3957 dejar entreabierta la puerta del arbitraje, del arbitraje 3958 inicialmente propuesto por Bolivia meses atrás y luego planteado 3959 reiteradamente por Chile. 3960 3961 Don Martín, al cumplir con el deber protocolar de hacer conocer 3962 al representante diplomático de Chile el texto del Decreto 3963 Supremo de 1? de febrero que suspendía los derechos de la 3964 entidad salitrera en el país, le dijo en el acápite final de su nota: 3965 "Esperando por lo tanto que, con la expresada resolución, se 3966 restablecerán por completo la armonía y buena inteligencia entre 3967 el Gobierno de Chile y el de Bolivia y expresando, además, a 3968 Vuestra Señoría, que en caso de suscitarse un nuevo incidente, 3969 que no lo espero, mi gobierno estará siempre dispuesto a 3970 apoyarse, en caso necesario, en el recurso arbitral consignado 3971 en el artículo segundo del tratado de 1875". 3972 3973 El tratado de 25 de julio de 1875, complementario del de límites 3974 Baptista-Walker Martínez, rezaba en su artículo segundo: "Todas 3975 las cuestiones a que diere lugar la inteligencia y aplicación del 3976 tratado de 6 de agosto de 1874, deberán someterse al 3977 arbitraje". 3978 3979 Tan pronto como el Presidente Daza se enteró del texto de la 3980 comunicación dirigida por el canciller Lanza, lo llamó a su 3981 despacho, y con la torpeza que le era habitual en sus frecuentes 3982 accesos de cólera, lo increpó por su debilidad y cobardía. No 3983 cabían ya arbitrajes y otras lindezas por el estilo cuando se había 3984 resuelto obrar con energía contra los chilenos y se contaba con 3985 la alianza, de los peruanos. El señor Lanza, por toda respuesta, 3986 formuló renuncia a su cargo ese mismo momento. El mandatario 3987 se la aceptó ipso facto. 3988 3989 El doctor Serapio Reyes Ortiz fue movido del ministerio de 3990 Justicia al de Relaciones Exteriores y se llamó al erudito 3991 cochabambino, señor Julio Méndez, a tomar la cartera vacante. 3992 Tenía fama de ser amigo del Perú. 3993 3994 El agente chileno, sin saber aun la renuncia del señor Lanza y 3995 sus motivos, manifestó en comunicación a Santiago: "Por los 3996 cinco anexos a la presente se enterará usted del imprevisto 3997 desenlace que se pretende dar al conflicto. Conforme a sus 3998 instrucciones podría yo pedir mis pasaportes en vista del decreto 3999 de rescisión del contrato de la compañía salitrera, pero como en 4000 la nota con la que se me ha remitido copia del mismo se pone en 4001 mi conocimiento que este gobierno está dispuesto a someter al 4002 fallo de un árbitro toda nueva dificultad que surja, creo más 4003 prudente poner los hechos en conocimiento de usted y esperar 4004 sus nuevas instrucciones. Creo preferible evitar un rompimiento 4005 e intentar todos los recursos honorables que a este fin pueden 4006 llevarnos. Acabo de conferenciar privadamente con el Ministro de 4007 Hacienda, que es la persona más caracterizada del gabinete, y 4008 espero poder llegar a una solución satisfactoria". 4009 4010 A los dos días, el señor Videla tuvo que cambiar de actitud. 4011 Escribió nuevamente a su cancillería: "Los acontecimientos que 4012 en este país se desarrollan con motivo del conflicto originado por 4013 la cuestión del salitre, son cada día más graves y manifiestan 4014 que este gobierno busca y provoca un rompimiento con Chile. La 4015 ultima nota del Ministro de Relaciones Exteriores, que en copia 4016 he remitido a usted hace dos días, ha producido la salida del 4017 señor Lanza del ministerio, el reemplazo de éste por el señor 4018 Reyes Ortiz y el nombramiento del señor Julio Méndez, declarado 4019 enemigo de Chile, para la cartera de Justicia, Culto e Instrucción 4020 Publica. El gobierno tomó a mal la oferta de arbitraje hecha por 4021 el señor Lanza en la parte final de su nota y esto es lo que ha 4022 ocasionado la crisis ministerial. 4023 4024 Sabedor de estas cosas, he dirigido al Ministro de Relaciones 4025 Exteriores la nota cuya copia remito a usted. Espero casi con 4026 certidumbre una respuesta negativa. De consiguiente, es muy 4027 probable que el lunes 10 del presente haya pedido mis 4028 pasaportes. A ultima hora se anuncia que mañana parte en 4029 dirección a Chile el señor Reyes Ortiz. Como nada tendría que 4030 hacer en nuestro país este caballero, me inclino a creer que se 4031 marcha a Lima y que sólo para ocultar el verdadero objeto de su 4032 viaje hace propalar rumores falsos sobre él. A fin de ganar 4033 tiempo mando la presente por un extraordinario". 4034 4035 El señor Videla estaba en lo cierto. El señor Reyes Ortiz se 4036 trasladaba al Perú. Iba a pedir al gobierno del señor Mariano 4037 Ignacio Prado el cumplimiento del tratado de alianza si Chile 4038 hacía una demostración de fuerza en el litoral boliviano. Una vez 4039 conseguido esto, debía pasar a Antofagasta a fin de organizar un 4040 contingente que impidiese levantamientos de la población 4041 chilena por la expulsión de la compañía de salitres. Salió de La 4042 Paz el 9 de febrero. El 10, en Chichilaya, a orillas del lago 4043 Titicaca, recibió copia legalizada de la nota-ultimátum del señor 4044 Videla. Apresuró su marcha. En Puno tomó un tren 4045 extraordinario rumbo a Moliendo. 4046 4047 El Encargado de Negocios de Chile tenía ya en su poder 4048 instrucciones de su gobierno, fechadas el 3 de enero, para exigir 4049 del de Bolivia una respuesta "terminante y categórica dentro de 4050 un plazo perentorio" sobre si aceptaba continuar conversaciones 4051 o un arbitraje, pero suspendiendo, previamente, el cobro del 4052 impuesto de los 10 centavos. Si la respuesta era negativa, debía 4053 pedir sus pasaportes, cerrar la Legación y abandonar Bolivia 4054 declarando roto el tratado de 1874. 4055 4056 Cumpliendo tales órdenes, el señor Pedro Nolasco Videla se 4057 dirigió al Ministro de Relaciones Exteriores, el 8 de febrero, 4058 diciendo en su nota que el decreto de 1° de ese mes significaba 4059 que el gobierno boliviano "abandonaba la gestión diplomática y 4060 por un camino inusitado llegaba a decidir por sí solo la cuestión 4061 a su favor". La compañía no podía ser despojada de las salitreras 4062 de las que estaba en quieta y tranquila posesión desde hacía 4063 cinco años. Uno de los párrafos finales decía así: "Me apresuro a 4064 rogar a Vuestra Excelencia que se sirva declararme 4065 definitivamente en una contestación franca y categórica, si el 4066 gobierno de Vuestra Excelencia acepta o no el arbitraje 4067 establecido en el pacto de 1875, suspendiendo previamente toda 4068 innovación hecha en el litoral con respecto a la cuestión en que 4069 nos ocupamos. En atención a los inmensos perjuicios que 4070 diariamente reciben las industrias y el comercio en aquel 4071 departamento y en obsequio a la tranquilidad publica seriamente 4072 amenazada, me permito también pedir a Vuestra Excelencia que 4073 se digne darme dicha contestación en el perentorio término de 4074 48 horas". 4075 4076 El reemplazante de don Serapio Reyes Ortiz en la cancillería, don 4077 Eulogio Doria Medina, de acuerdo con el Presidente Daza, dejó 4078 pasar las 48 horas y 24 horas más. El 12 de febrero contestó al 4079 señor Videla, diciéndole que la presencia de un barco de guerra 4080 frente a Antofagasta, era mirado por las "personas de mayor 4081 calma y animados de espíritu de conciliación"... "como un acto 4082 hostil y manifiestamente depresivo", y que tenía órdenes de su 4083 gobierno para decirle que "cumplía al decoro nacional no 4084 continuar la negociación pendiente mientras el mencionado 4085 buque no se alejase del litoral de la republica". 4086 4087 El pedido del retiro del "Blanco Encalada" lo hacía el canciller 4088 boliviano en la misma fecha en que otros dos barcos zarpaban 4089 de un puerto chileno conduciendo un contingente que tenía la 4090 misión de tomar posesión de Antofagasta, Mejillones y 4091 Caracoles. 4092 4093 Decía también la nota del señor Doria Medina: "Tócame 4094 asimismo manifestar a Vuestra Señoría la impresión 4095 desagradable que ha causado a mi gobierno el oficio de esa 4096 Legación del 8 del actual, en la que cumpliendo sin duda 4097 instrucciones superiores, pero saliendo de los usos y prácticas 4098 diplomáticas y más que todo de la moderación y carácter 4099 benévolo y cortés que le son propios, se sirve Vuestra Señoría 4100 exigir contestación categórica en el perentorio término de 48 4101 horas. Tal exigencia, que me abstengo de calificar, podría inducir 4102 a mi gobierno a juzgar que el de Vuestra Señoría no está 4103 dispuesto a seguir la política de paz, de conciliación, de 4104 fraternidad que debe reinar entre los Estados de este continente. 4105 El oficio del Excelentísimo señor Fierro, de noviembre, por el que 4106 ex-abrupto notifica a Bolivia la ruptura del tratado del 74 y sobra 4107 cuya inconveniencia ha fallado ya la opinión publica de América, 4108 es altamente depresivo al decoro y dignidad de Bolivia, como lo 4109 es la irregular intimación de Vuestra Señoría hecha con 4110 conocimiento pleno del cambio del personal en el Ministerio de 4111 Relaciones Exteriores y cuando no podía ocultarse a Vuestra 4112 Señoría que el gobierno se encontraba en situación de prestar 4113 atención inmediata al referido oficio". 4114 4115 Lástima que el señor Doria Medina creyese conveniente incluir la 4116 referencia ridícula de cambio de personal en la cancillería como 4117 una razón para que no se diese "atención inmediata" al 4118 ultimátum de Videla. Las circunstancias eran demasiado 4119 trascendentales. Por otra parte, el Gobierno de Bolivia tenía 4120 perfecto derecho para responder al Encargado de Negocios de 4121 Chile cuando mejor le viniese en gana. No tenía necesidad de 4122 buscar justificativo alguno para su atraso. 4123 4124 El señor Videla devolvió la nota del señor Doria Medina diciendo 4125 que lo hacía "porque contenía cargos demasiado graves y 4126 absolutamente infundados contra la conducta del Gobierno de 4127 Chile y el proceder de la Legación a su cargo". 4128 Pidió sus pasaportes. Los recibió al día siguiente, pero se quedó 4129 tranquilamente en La Paz. Apadrinó el matrimonio del secretario 4130 de su misión, Francisco Valdez Vergara, con la señorita Ángela 4131 Bustamante, hija del poeta Ricardo Bustamante. Por cables de 4132 su gobierno sabía que parte del litoral boliviano estaba ya 4133 ocupado por tropas de su país. 4134 4135 Recién el 23 de febrero, Domingo de Carnaval, se embarcó en 4136 Chichilaya. La diplomacia cedía el campo a la fuerza. 4137 4138 4139 XXIX 4140 LA "REIVINDICACION" DE ANTOFAGASTA 4141 4142 Hacerse dueño del litoral boliviano en la parte que contenía las 4143 riquezas del guano de Mejillones, la plata de Caracoles y el 4144 salitre del Salar del Carmen y Las Salinas, es decir, desde el 4145 paralelo del grado 24 (establecido corno límite boliviano-chileno 4146 en los tratados de 1866 y 1874), hasta el paralelo del grado 23, 4147 fue tentación que maduró en Chile con influencias cada vez más 4148 poderosas. No sólo eran los residentes chilenos en ese territorio 4149 agrupados en sociedades como "Patria" (opúsculo XXI de esta 4150 serie) quienes la fomentaban, sino personajes de la "Compañía 4151 de Salitres y Ferrocarril de Antofagasta" como el gerente Jorge 4152 Hicks y los directores Francisco Puelma y Miguel Saldías, 4153 empresarios mineros con intereses en Caracoles, miembros del 4154 gabinete, que tenían acciones en la empresa como los señores 4155 Belisario Pratts y Julio Zegers (ministros de Gobierno y de 4156 Justicia, respectivamente), y otros políticos de influencia. 4157 4158 Era una gran tentación para el natural temperamento codicioso 4159 de los chilenos que los bolivianos demostrasen muy poco o 4160 ningún interés por esas riquezas y que la casi totalidad de sus 4161 explotadores fuesen extranjeros (chilenos en su mayoría). El 4162 Ministro de Chile en La Paz, durante la etapa final del gobierno 4163 de Melgarejo, Ramón Sotomayor Valdez, dijo en un informe a 4164 Santiago que el descubrimiento de la ingente riqueza argentífera 4165 de Caracoles, que causaba verdadera fiebre en Chile, se veía en 4166 Bolivia sin interés, hablándose de él como si hubiera ocurrido en 4167 la Siberia rusa. 4168 4169 Las presiones acabaron por vencer los escrúpulos que podía 4170 tener el gobierno de La Moneda. En reunión del Presidente de la 4171 Republica con sus ministros y los miembros del Consejo de 4172 Estado, realizada el 16 de enero de 1879, el señor Domingo 4173 Santa María, cuya opinión tenía el peso de su prestigio político e 4174 intelectual y de ser el presunto candidato del partido Nacional 4175 para suceder a don Aníbal Pinto como Jefe de Estado, opinó que 4176 después de insistirse una vez más ante el Gobierno de Bolivia 4177 para que se suspendiese el impuesto de los 10 centavos a las 4178 exportaciones de salitre y se constituyese un arbitraje, debían 4179 declararse rotos todos los pactos ajustados y considerarse la 4180 situación como estaba antes de la suscripción del tratado de 4181 1874, de manera que se volviese a ejercer soberanía en el 4182 territorio que antes se disputaba a Bolivia y que fue cedido por 4183 ese pacto. Personajes como Rafael Sotomayor, Francisco de 4184 Paula Taforó, Santos Lira y José Victorino Lastarria apoyaron tal 4185 planteamiento. Lo hicieron también, aunque de manera menos 4186 decidida, el General Pedro Godoy, y el señor José Salamanca. 4187 4188 Cuando llegó el aviso del representante chileno en La Paz de que 4189 se había dictado un decreto que cancelaba los derechos de la 4190 compañía de salitres en Bolivia, el Presidente Aníbal Pinto, que 4191 se encontraba en Valparaíso por ser la estación del verano, llamó 4192 a reunión a sus ministros de Relaciones Exteriores (Alejandro 4193 Fierro), Guerra (Cornelio Saavedra) y Gobierno (Belisario Pratts). 4194 Días antes el señor Pratts había escrito a su colega Saavedra: 4195 "Hoy me dirijo a Pinto diciéndole que debemos impedir el debate 4196 y ocupar si es necesario Antofagasta. No ceda usted por nada. 4197 Sería una vergüenza". El mandatario preguntó a sus 4198 colaboradores si aun cabía un último intento de conciliación. Los 4199 tres respondieron con una andanada de razonamientos en 4200 contra. La dignidad nacional estaba comprometida. La inercia en 4201 que parecía sumido el gobierno estaba provocando críticas en la 4202 opinión pública. 4203 4204 Los chilenos radicados en Caracoles y Antofagasta podían 4205 sublevarse creando situaciones muy delicadas. Era probable que 4206 ocurriesen manifestaciones populares en Santiago, similares a 4207 las que tuvieron lugar pocos meses antes a raíz del conflicto con 4208 la Argentina, causando mala impresión y perjudicando el Partido 4209 Nacional en las próximas elecciones parlamentarias. La población 4210 chilena en Antofagasta, al ser despojada de sus medios de vida, 4211 se levantaría en masa contra las autoridades bolivianas creando 4212 un problema muy complicado. La ocupación de Antofagasta no 4213 sería sino la consecuencia lógica de la anulación del tratado de 4214 1874 provocada por Bolivia. 4215 4216 El señor Pinto cedió. El Ministro de Guerra impartió órdenes de 4217 que los barcos "Cochrane" y "O'Higgins" condujesen un 4218 contingente encargado de tomar posesión de Antofagasta, 4219 Mejillones y Caracoles. El Ministro de Relaciones Exteriores 4220 telegrafió a su agente en La Paz: "La rescisión que es un nuevo 4221 agravio, decididse la ocupación de Antofagasta. Retírese 4222 inmediatamente". 4223 4224 El 14 de febrero (1879) Antofagasta amaneció con un gran 4225 nerviosismo en la población. Era el día fijado para el remate de 4226 los bienes de la Compañía de Salitres. Se había comentado antes 4227 que el Cónsul del Perú iba a ser el principal postor. No se conocía 4228 aún el decreto de rescisión del contrato. No lo conocía ni el 4229 Prefecto, Coronel Severino Zapata, debido a las dificultades y 4230 demoras con que viajaba el correo desde La Paz al puerto. Dicha 4231 autoridad seguía actuando con las instrucciones anteriores, de 4232 implementar el cobro del impuesto de los 10 centavos mediante 4233 el remate de los bienes embargados. 4234 4235 A las 7 de la mañana hicieron aparición en lontananza las 4236 siluetas del "Cochrane" y el "O'Higgins". El "Blanco Encalada" 4237 saludó a sus compañeros con salvas de artillería. La población 4238 chilena se agitó en el muelle, la plaza y las calles con gran 4239 algarabía. La enseña de los rectángulos azul, blanco y rojo se 4240 enarboló en numerosas viviendas. 4241 A las 8 se desprendió del "Cochrane" un bote que condujo a 4242 tierra al capitán José M. Borgoño y a una escolta. El oficial buscó 4243 al cónsul de su país y en su compañía se dirigió a la Prefectura 4244 donde entregó un mensaje de su comandante: "Considerando el 4245 gobierno de Chile roto por parte de Bolivia el tratado de 1874, 4246 me ordena tomar posesión con las fuerzas a mi mando del 4247 territorio comprendido hasta el grado 23". Contestó el Coronel 4248 Zapata por el mismo conducto: "No tengo fuerzas con que 4249 contrarrestar a tres vapores blindados de Chile, pero no 4250 abandonaré este puerto sino cuando se consuma la invasión". 4251 4252 A las 8 y 30 desembarcaron 200 soldados armados, con sus 4253 oficiales. La población chilena los recibió con aplausos y otras 4254 manifestaciones de júbilo. Grupos de exaltados recorrieron las 4255 calles. Uno de ellos penetró en la Prefectura e injurió de palabra 4256 al Coronel Zapata y a quienes lo acompañaban. Extrajo la 4257 bandera boliviana izada en el local y la hizo pedazos. Arrancó el 4258 escudo de armas y lo arrojó a media calle. Una mujer zapateó 4259 sobre él una cueca que ella misma coreó, acompañada con el 4260 palmoteo de sus compatriotas. En el local de la policía, cuyos 34 4261 gendarmes tomaron el camino de Cobija, la hija de uno de ellos. 4262 Genoveva Ríos, ocultó la bandera de esta repartición 4263 envolviéndola alrededor de su cuerpo, debajo de su ropa, 4264 salvándola de que fuera ultrajada. La conservó entre sus bienes, 4265 como una reliquia, durante 25 años. En 1904, siendo ya mujer 4266 madura, la entregó al Cónsul de Bolivia en Iquique recibiendo 4267 como compensación 25 bolivianos. Se conserva hoy en la Capital 4268 de la Republica a cargo de la "Sociedad Geográfica e Histórica de 4269 Sucre". 4270 4271 El Prefecto, otras autoridades y algunas familias estuvieron 4272 refugiadas en el Consulado del Perú hasta el día 16, en que se 4273 embarcaron en el vapor "Amazona" de la compañía comercial 4274 inglesa, rumbo a Cobija, algunos, y a Arica otros. El 14, los 4275 comisarios de policía Valverde, Polo y Valdivia fueron agredidos 4276 por el populacho. En el Salar del Carmen fueron muertas dos 4277 personas. 4278 4279 Las fuerzas chilenas tomaron también posesión de Caracoles y 4280 Mejillones. En un vano esfuerzo de justificar su apropiación de 4281 territorio ajeno, el Gobierno de Santiago circuló a los agentes 4282 diplomáticos extranjeros acreditados ante él, un documento que 4283 comenzaba así: 4284 "El 12 del presente mes, Su Excelencia el Presidente de la 4285 Republica ordenó que fuerzas nacionales se trasladaran al 4286 desierto de Atacama para reivindicar y ocupar en nombre de 4287 Chile los territorios que poseía antes de ajustar con Bolivia los 4288 tratados de 1866 y 1874". Terminaba de esta manera: 4289 "Cincuenta horas más tarde la ley chilena imperaba en aquella 4290 región, colocando bajo su amparo los intereses chilenos y 4291 extranjeros, sin derramar una gota de sangre y en medio del 4292 entusiasmo patriótico de las poblaciones redimidas... La nación 4293 chilena, amiga de la conciliación, anhelosa por mantener la paz y 4294 la unión en América, hizo en su obsequio cuanto fue posible y 4295 digno. Violado un pacto solemne, desoídas sus reclamaciones 4296 amistosas de una manera inusitada en las relaciones 4297 internacionales, convencida de que Bolivia no había dado ni 4298 podía ofrecer en el porvenir garantías eficaces a la colonia 4299 chilena que había creado pueblos en el desierto, se ha visto en el 4300 deber de reivindicar todos los derechos que poseía 4301 tranquilamente antes del pacto de 1866, y sabrá mantenerlos 4302 con la entereza que es propia de sus hijos, cualesquiera que 4303 sean las emergencias que sobrevengan". 4304 4305 Chile, al dar el carácter de reivindicación a su flagrante acto de 4306 expoliación de territorio boliviano, dio una nueva prueba de ser 4307 una nación de muchas habilidades, pero de muy pocos 4308 escrúpulos. 4309 4310 4311 4312 4313 4314 CUARTA PARTE 4315 4316 XXX 4317 PRIMERO EL CARNAVAL, DESPUES LA PATRIA 4318 4319 El general Hilarión Daza, calificado por muchos como un 4320 "caudillo bárbaro" más en nuestra historia, tiene la suerte de 4321 que un grupo de ciudadanos haya salido en su defensa en los 4322 últimos años. Como consecuencia, las acusaciones que se le 4323 hicieron en vida de haber sido el imprudente provocador de la 4324 guerra del Pacífico, de haber ocultado ala nación la noticia del 4325 desembarco de fuerzas chilenas en Antofagasta hasta la ultima 4326 noche del Carnaval y de ser el único responsable de la retirada 4327 de Camarones, siguen en tela de juicio, pendientes de un 4328 veredicto final. 4329 4330 El debate que apasionó a nuestros abuelos ha sido reanudado, 4331 pero con una gran diferencia. Para ellos no había transcurrido 4332 suficiente tiempo a fin de que pudiesen observar los sucesos con 4333 perspectiva e imparcialidad. No tuvieron acceso a los 4334 documentos que hoy están a disposición de los investigadores. 4335 4336 Los defensores actuales del General Daza no apoyan sus 4337 afirmaciones en prueba fehaciente alguna. Salen a la palestra 4338 con el sano deseo de convencerse a sí mismos y de convencer al 4339 mundo entero de que en la pérdida de nuestro litoral en el 4340 océano Pacífico toda la culpa fue de Chile y de que Bolivia fue 4341 una víctima inocente, sin mácula en la actuación de sus 4342 conductores. 4343 4344 La historia, la que realmente merece el título de tal, tiene que 4345 ser esclava de la verdad. Tiene la obligación de exponerla a la 4346 luz pública francamente, en sus grandezas y miserias, en sus 4347 glorias y vergüenzas. Sólo la verdad es constructiva. Una nación 4348 que tiene el valor de reconocer sus propios errores y de medir a 4349 sus figuras publicas con la vara de la justicia, recibirá el 4350 beneficio de la experiencia y sabrá caminar hacia un futuro con 4351 más seguridad e inteligencia. 4352 4353 El General Daza llegó a la primera magistratura de la república 4354 con tres pésimos antecedentes: Según Alcides Arguedas, 4355 traicionó a Melgarejo, que tenía depositada toda su confianza en 4356 él, por 10.000 pesos; fue protagonista de los ultrajes ordenados 4357 por Morales contra el Congreso; después de ser un tiempo el 4358 sostenedor de la legalidad y el civilismo, derrocó a Frías con un 4359 golpe de Estado, interrumpiendo el proceso democrático, sin 4360 esperar el veredicto popular en las elecciones en las que él era 4361 uno de los candidatos. 4362 4363 No se lo puede disculpar de que en enero de 1879, en su 4364 condición de Presidente de la Republica, permitiera y fomentara 4365 que su cumpleaños fuese festejado en La Paz con 8 días de 4366 regocijo público, con despliegues militares, cabalgatas, corridas 4367 de toros y un baile en el Teatro Municipal mientras miles de sus 4368 compatriotas indígenas eran víctimas del paludismo, el hambre y 4369 la muerte en los valles de Cochabamba, Tarija y Chuquisaca. 4370 4371 Que supo que Antofagasta había sido ocupado por tropas 4372 chilenas antes del Carnaval, consta en documentos irrefutables 4373 existentes en los archivos de los Ministerios de Relaciones 4374 Exteriores de Bolivia y el Perú. Ha presentado una relación de los 4375 primeros el distinguido investigador don Juan Siles Guevara, 4376 hace algunas semanas, en su discurso de ingreso a la Academia 4377 Boliviana de Historia, publicado en el diario "Presencia". 4378 4379 He aquí una breve exposición cronológica de las pruebas citadas 4380 por el señor Siles Guevara y otras: 4381 4382 "Desde luego, el viaje del señor Serapio Reyes Ortiz, a Lima, a 4383 pedir al gobierno peruano el cumplimiento del tratado de 4384 alianza, es indicación muy clara de que el General Daza y sus 4385 colaboradores suponían muy posible una acción de fuerza de 4386 parte de Chile. El señor Reyes Ortiz, salió de La Paz el 9 de 4387 febrero. 4388 4389 El 13, el Ministro de Relaciones Exteriores, señor Eulogio Doria 4390 Medina, expresó al representante diplomático del Perú, señor 4391 José Luis Quiñones (según éste informó a su cancillería), que el 4392 gobierno boliviano tenía datos para creer que a esa fecha Chile 4393 había entrado al terreno de los hechos apoderándose de 4394 Antofagasta". 4395 4396 El 15, el Presidente Daza y el señor Doria Medina leyeron un 4397 aviso del Cónsul de Bolivia en Valparaíso (Coronel Juan Granier), 4398 retransmitido por el Cónsul de Bolivia en Tacna (señor Manuel 4399 Granier) que decía: "Gobierno (chileno) ha ordenado a fuerzas 4400 reunidas en Caldera ir a Antofagasta y ocupar litoral". 4401 4402 El 17, los mismos personajes conocieron otro mensaje del cónsul 4403 en Valparaíso que daba cuenta de que el gobierno de La Moneda 4404 "había resuelto la ocupación definitiva de Antofagasta". 4405 4406 El 19, numerosos bolivianos que tuvieron que abandonar 4407 Antofagasta tres días antes debido a la ocupación chilena, 4408 llegaron a Arica en el vapor "Amazonas" y relataron al Cónsul 4409 Manuel Granier los detalles del suceso. El informe que el cónsul 4410 envió a La Paz llegó a manos del Presidente Daza y de su 4411 canciller Doria Medina el sábado 22 y no el martes 25 como 4412 sostienen los defensores del mandatario. El señor Doria Medina 4413 acusó recibo de esa comunicación el domingo 23. 4414 4415 Por eso es que, el mismo sábado 22 (vísperas de Carnaval), el 4416 señor Doria Medina, en entrevista con el señor José Luis 4417 Quiñones, refiriéndose a la precipitación con que el 4418 representante de Chile quería abandonar la sede del gobierno, le 4419 dijo que "provenía de que Antofagasta había sido tomada por 4420 fuerzas chilenas, hecho que él (Pedro Nolasco Videla) no podía 4421 ignorar". 4422 4423 No hay duda, pues, de que el Presidente Daza y sus ministros no 4424 reaccionaron como les correspondía ante la gravísima situación 4425 que Chile planteaba en el litoral y de que cometieron tres actos 4426 de lesa patria: Primero, ocultar la noticia a la población; 4427 segundo, dejar que la republica, con una lanza clavada en uno 4428 de sus costados, se entregase al frenesí del Carnaval; tercero, 4429 dedicarse ellos mismos, por lo menos el Jefe de la Nación, a la 4430 farra. 4431 4432 Los defensores del General Daza, con lulo de detalles, pero sin 4433 apoyo de un solo documento, afirman que el Cónsul en Tacna, al 4434 saber de la llegada de compatriotas a Arica el 19, en el 4435 "Amazonas", fue a entrevistarlos y que con las noticias que 4436 recibió de ellos despachó un informe al gobierno al día siguiente, 4437 mediante el "chasqui" Gregorio Coligue, que arribó al Palacio de 4438 Gobierno a las 11 de la noche del Martes de Carnaval, 25 de 4439 febrero. El cochero Anselmo Salamanca le expresó que el 4440 General Daza había ido a una fiesta en casa de don Carlos Frías, 4441 a donde lo acompañó. En el lugar indicado se les comunicó que 4442 el presidente había pasado a otra fiesta, en la residencia del 4443 Intendente de Policía. Coronel José María Baldivia, donde lo 4444 encontraron, haciéndole entrena del pliego del cónsul Granier. El 4445 General Daza abandonó el festín, se restituyó a su despacho y 4446 comenzó a adoptar las medidas de emergencia que exigía el 4447 desafío chileno. Los defensores del General Daza únicamente 4448 toman en cuenta esa versión e ignoran los documentos de los 4449 archivos de las cancillerías boliviana y peruana. 4450 4451 Pero aun en el caso de que el General Daza hubiera sabido por 4452 primera vez la última noche del Carnaval que Antofagasta estaba 4453 ocupada su conducta no sería disculpable. El peligro chileno se 4454 cernía sobre el litoral desde el 6 de enero en que el blindado 4455 "Blanco Encalada", se instaló ignominiosamente frente a ese 4456 puerto. Los despliegues militares que se realizaron en La Paz en 4457 celebración de su cumpleaños, habrían estado mucho mejor en 4458 el punto donde existía amenaza de una invasión. 4459 4460 Una vez que el Encargado de Negocios de Chile declaró rotas las 4461 relaciones diplomáticas (12 de febrero), cerró su Legación, pidió 4462 sus pasaportes y se dispuso a abandonar Bolivia, el más 4463 ignorante de los gobernantes tenía que haber supuesto que algo 4464 grave iba a ocurrir contra Bolivia. 4465 4466 Por lo demás, la culpabilidad del General Daza no sólo está en lo 4467 que dejó de hacer desde que supo de la ocupación chilena de 4468 Antofagasta en la semana anterior al Carnaval, sino en lo que 4469 dejó de hacer desde que las relaciones con Chile entraron en 4470 conflicto, seis meses antes, con la reclamación del gobierno de 4471 La Moneda a raíz del impuesto de los 10 centavos, con la 4472 declaración de que era violatorio del tratado de 1874. 4473 4474 Nadie puede negar, ni los defensores del General Daza, que la 4475 situación de Bolivia era muy delicada desde la ruptura de 4476 relaciones del 12 de febrero y que a partir de esa fecha era 4477 inminente una incursión chilena en el litoral. Si el General Daza 4478 no hubiera sabido sino el martes 25 que Antofagasta fue 4479 ocupada sin derramamiento de sangre, contrariamente a lo que 4480 creen sus defensores, su indiferencia de los días precedentes 4481 resultaría más criminal. Querría decir que se entregó a la 4482 farándula carnavalera cuando le era lógico temer que sus 4483 compatriotas de la costa podían estar sufriendo los horrores 4484 frecuentes en una invasión extranjera: violación de sus hogares, 4485 esposas e hijas y la muerte. 4486 4487 4488 XXXI 4489 ¡QUE SE RINDA SU ABUELA, CARAJO! 4490 4491 Una vez reintegrado a su despacho en el palacio presidencial a la 4492 media noche del Martes de Carnaval, 25 de febrero, despojado 4493 de la careta y el disfraz, el General Hilarión Daza, dándose 4494 recién por enterado del desembarco de tropas chilenas en 4495 Antofagasta, con ayuda de algunos áulicos redactó un manifiesto 4496 dirigido a la nación. 4497 4498 En él cometió la imprudencia de hacer públicas sus intenciones 4499 estratégicas. Dijo: "Bolivia acepta la guerra sin provocarla. La 4500 ofensiva pertenece al desgarrador de tratados y al detentador 4501 del territorio. Nuestra fuerza es eminentemente defensiva e 4502 inexpugnable. No renunciaremos a ella. Tócales a los chilenos 4503 salvar el desierto, vencer el espacio y retarnos en el asiento de 4504 nuestro poderío. Conciudadanos: Ved ahí trazada nuestra tarea 4505 con el agresor...". 4506 4507 Esto significaba avisar al enemigo que podía quedar en tranquila 4508 posesión de la costa boliviana sin temor a ninguna acción de 4509 rechazo del ejército boliviano, que es lo que correspondía. Era 4510 avisarle que si patriotas como Ladislao Cabrera y Eduardo 4511 Avaroa trataban de detener al enemigo, su coraje no tendría 4512 ningún apoyo desde el interior y podían ser fácilmente 4513 atropellados. 4514 Al día siguiente, el mandatario y sus ministros Eulogio Doria 4515 Medina, Manuel Othón Jofré y Julio Méndez firmaron dos 4516 decretos. Por el primero, declararon "la patria en peligro y en 4517 estado de sitio". Por el segundo, concedieron "amnistía amplia y 4518 sin restricciones a todos los bolivianos que por motivos políticos 4519 estuviesen confinados o fuera del país". 4520 4521 La primera población en enterarse de lo ocurrido en Antofagasta 4522 fue la de Tupiza. Era la única que entonces tenía servicio 4523 telegráfico. El 11 de febrero estrenó la línea que la conectaba 4524 con la red del norte argentino. El 23 le llegó la noticia desde 4525 Buenos Aires. Los vecinos se reunieron de inmediato en la casa 4526 de gobierno y como primera medida resolvieron enviar víveres a 4527 San Cristóbal con un pelotón de rifleros comandados por el 4528 Coronel Segundo Games, a fin de auxiliar a sus compatriotas 4529 que suponían en retirada del litoral, por el camino de Calama. 4530 Los principales promotores fueron el General Narciso Campero y 4531 don Félix Avelino Aramayo. 4532 4533 En La Paz, el 24 de febrero, Miércoles de Ceniza, una 4534 concentración popular recorrió varias calles del centro portando 4535 las banderas boliviana, peruana y argentina que depositó en el 4536 Loreto. El Presidente del Consejo Municipal, señor Daniel Núñez 4537 del Prado, pronunció un discurso e invitó a un comicio. Este tuvo 4538 lugar al día siguiente actuando como primer orador el señor 4539 Antonio Quijarro. Hablaron también los señores Víctor Pérez 4540 (Fiscal del Distrito), Isaac Tamayo (diputado) y Rudecindo 4541 Carvajal. El General Daza pronunció una breve alocución ante el 4542 público congregado en la plaza 16 de julio. Aquí también, a 4543 pedido de la poblada, volvió a usar de la palabra el señor Isaac 4544 Tamayo. La multitud, calculada en unas 2.000 personas, recorrió 4545 nuevamente las calles principales. Al final de la jornada se firmó 4546 una protesta contra Chile declarándose que todos se ponían 4547 "alrededor del gobierno" y solicitaban "una guerra pronta" para 4548 la que ofrecían sus bienes y su vida. 4549 4550 El 28, Daza y sus colaboradores expidieron otro decreto que 4551 ordenó la organización de la Guardia Nacional activa y pasiva. 4552 "La primera con todos los bolivianos solteros y viudos de 16 a 40 4553 años. La segunda con los casados y los mayores de 40". 4554 4555 El 1° de marzo siguieron tres decretos más. Uno cortando toda 4556 comunicación y comercio con Chile, ordenando la salida de 4557 Bolivia de los ciudadanos de ese país en el término de 10 días 4558 desde su notificación personal y el embargo de sus bienes 4559 muebles e inmuebles, excepto su equipaje y menaje particular. 4560 Otro, declarando al ejército en campaña. El tercero, disponiendo 4561 un descuento en los sueldos y pensiones de todos los empleados 4562 públicos, civiles y eclesiásticos, en un 10, 20, 25 y 30 por ciento, 4563 según su monto. 4564 4565 En Oruro, el 27 de febrero, lo más selecto de la ciudadanía se 4566 concentró en el templo de La Merced y aprobó un acta redactada 4567 por los señores Donato Vásquez, José Mier y León y Octavio 4568 Dalence. En ella se ofreció al gobierno, "sin reserva alguna", el 4569 concurso de los esfuerzos personales, los recursos y la sangre de 4570 los orureños para reivindicar el territorio usurpado y la honra 4571 nacional. 4572 4573 En la misma fecha, en Tarija, en vista de las noticias llegadas de 4574 Tupiza, el pueblo marchó por las calles eufórico de patriotismo y 4575 suscribió un documento de adhesión al gobierno y de 4576 ofrecimiento de servicios y personas hasta el sacrificio final. 4577 4578 El 28 le tocó el turno a la ciudad de Cochabamba. Un comicio 4579 reunido en el Colegio Sucre, bajo la presidencia del Obispo Javier 4580 del Granado, encomendó a los señores Mariano Baptista, 4581 Melchor Terrazas y Jorge Oblitas la inmediata redacción de un 4582 manifiesto que fue aprobado por unanimidad en medio de 4583 grandes aclamaciones. Hubo discursos del señor Baptista y don 4584 Nataniel Aguirre. Se realizó un desfile patriótico en cuya cabeza 4585 se portaba el busto del Libertador y los pabellones boliviano y 4586 peruano que fueron depositados en un altar patrio improvisado 4587 en la galería norte de la Plaza 14 de Septiembre. 4588 4589 En Potosí se manifestó un gran fervor cívico. También se realizó 4590 una concentración de la ciudadanía que dio a luz una protesta 4591 anti chilena firmada por los señores Demetrio Calvimontes, 4592 Pedro H. Vargas, Modesto Omiste, Daniel Campos y cientos de 4593 otros patriotas. 4594 4595 Al conocerse el suceso de Antofagasta en Sucre, se produjo 4596 aglomeración de público en la Plaza 25 de Mayo al que 4597 arengaron el Prefecto Ipiña y los señores José Manuel Gutiérrez, 4598 Manuel Aguirre y Samuel Velasco Flor. Un comicio realizado en la 4599 Casa de la Libertad, dirigido por el Presidente de la Corte 4600 Suprema de Justicia, doctor Basilio Cuéllar, emitió un documento 4601 en el que los firmantes se comprometieron a "no escatimar 4602 sacrificio alguno hasta reconquistar la soberanía hollada por el 4603 invasor". 4604 4605 En Santa Cruz y Trinidad hubo manifestaciones similares con 4606 profunda fe bolivianista. Desgraciadamente la prensa no registró 4607 detalles para la historia. 4608 4609 En las capitales de provincias los pueblos a su vez expresaron 4610 sus sentimientos patrióticos: Es digno de mencionarse el caso de 4611 Colquechaca, población que atravesaba por un período de 4612 prosperidad debido al auge de sus minas de plata. Las 4613 actuaciones anti chilenas las encabezó el señor Aniceto Arce. 4614 4615 Haciendo eco a la inquietud nacionalista de todo el interior, las 4616 diminutas guarniciones militares desplazadas de los puertos de 4617 Antofagasta, Mejillones, Cobija y Tocopilla, con sus jefes y 4618 oficiales, algunos empleados públicos y personas particulares se 4619 concentraron en Calama obedeciendo al llamado del abogado, 4620 periodista y político don Ladislao Cabrera, que consideraba que 4621 el honor nacional exigía que alguien se interpusiese en la 4622 marcha triunfal del invasor por el litoral boliviano, por mucho 4623 que el resultado del choque pudiese determinarse de antemano 4624 dado el potencial bélico de los chilenos y el aislamiento y 4625 debilidad de los defensores, por mucho que el reto no pasase de 4626 ser un gesto quijotesco de un puñado de valientes que querían 4627 dejar constancia de que ese era suelo de su patria marcándolo 4628 con su sangre. 4629 4630 El encuentro ocurrió el 23 de marzo. Los detalles son muy 4631 conocidos. El contingente chileno estaba constituido por 544 4632 combatientes de infantería y caballería, con dos cañones de 4633 campaña y una ametralladora. Cabrera tenía a sus órdenes 135 4634 bravos armados con 43 rifles modernos y 30 a fulminante, 12 4635 escopetas de caza, 14 revólveres y 32 lanzas. No obstante la 4636 gran diferencia de fuerzas, el combate duró tres horas. Al final, 4637 don Ladislao Cabrera, constatando que su gente tenía varias 4638 bajas, que la munición estaba agotada y que el enemigo surgía 4639 en su retaguardia, dio la orden de retirada, en dirección a 4640 Chiuchiu, Canchas Blancas y Potosí. 4641 4642 Todos obedecieron el toque de corneta menos uno. Eduardo 4643 Avaroa Hidalgo, que entró a la refriega con 300 proyectiles, 4644 siguió combatiendo desde una zanja. Al principio de la acción 4645 había cruzado el río Loa pasando al campo enemigo con 10 4646 compañeros que murieron o cayeron prisioneros. Siguió allí, 4647 solo, frente a toda una división, del ejército enemigo, como un 4648 león enfurecido que defiende su querencia. 4649 4650 Fue ubicado. El Teniente Carlos Souper, y los soldados de su 4651 compañía lo encontraron mal herido, pero todavía empuñando el 4652 Winchester con actitud desafiante, sucio de tierra, pólvora, sudor 4653 y sangre. 4654 4655 Le intimaron rendición. El contestó con una exclamación que 4656 retumbó como un rugido: —" ¡Que se rinda su abuela, carajo!". 4657 Porque no tenía ya más proyectiles, blandió la frase como una 4658 espada, con la palabrota final como el filo que hendía en la 4659 conciencia de Chile. 4660 4661 4662 XXXII 4663 "VUELE EL EJERCITO" A DEFENDER AL PERU 4664 4665 Según afirma el historiador don Julio Díaz Arguedas, el ejército 4666 de Bolivia en febrero de 1879 contaba con 2.175 elementos de 4667 tropa distribuidos en tres batallones de infantería: "Daza", 4668 "Sucre" e "Illimani", llamados también "Colorados", "Amarillos" y 4669 "Verdes" por el color de la chaqueta de su uniforme; dos 4670 secciones de artillería y como caballería un grupo de húsares y 4671 otro de coraceros. 4672 En absoluta desproporción con tan escasos soldados existían 16 4673 generales, 219 coroneles y tenientes coroneles, 215 mayores, 4674 100 capitanes y 256 tenientes y subtenientes, o sea, 800 4675 militares. 4676 4677 El exceso de jefes y oficiales resultó providencial para dar 4678 comandantes a los numerosos contingentes de voluntarios que 4679 se presentaron en respuesta al llamado del gobierno, a fin de 4680 constituir la Guardia Nacional Activa, y el cuerpo de caballería 4681 denominado "La Legión Boliviana". 4682 4683 De acuerdo con la separación de clases sociales que existía en la 4684 época, los llamados "jóvenes decentes" o juventud de la clase 4685 blanca se alistó en la "Legión Boliviana" con sus propios caballos 4686 y aun con armas de su propiedad quienes poseían rifles. Los de 4687 La Paz y Oruro integraron el batallón "Murillo"; los de 4688 Cochabamba, el "Vanguardia"; los de Sucre, Potosí y Camargo, 4689 el de los "Libres del Sur"; los de Santa Cruz y Trinidad, el 4690 escuadrón "Velasco" y los de Tarija el escuadrón "Méndez". 4691 4692 La juventud mestiza de las ciudades y capitales de provincias 4693 (en su mayoría artesanos, maestros, oficiales y aprendices), 4694 integraron los batallones de infantería. En el departamento de La 4695 Paz el "Victoria", "Illimani 2", "Paucarpata" e "Independencia". 4696 En el departamento de Cochabamba, el "Aroma", "Viedma" y 4697 "Padilla". En Chuquisaca, el "Olañeta". En Oruro el "Dalence". En 4698 los departamentos de Tarija y Potosí, el "Bustillo", "Ayacucho", 4699 "Tarija" y "Chorolque". En Colquechaca, el "Vengadores". 4700 La clase mestiza de Santa Cruz y el Beni no fue llamada bajo 4701 banderas. Tampoco la clase indígena de toda la republica que 4702 vivía marginada de toda actividad nacional aparte de la de 4703 proporcionar siervos para el trabajo de las propiedades rusticas 4704 de los terratenientes. Además, desde cuatro meses antes venía 4705 siendo diezmada por el hambre y la peste que asolaban los 4706 valles centrales. 4707 4708 Las principales ciudades se convirtieron en campamentos 4709 militares. Por las calles circulaban a pie o a caballo gente en 4710 uniforme. Los toques de corneta y músicas marciales se 4711 escuchaban por doquier y a diferentes horas de cada jornada. 4712 Los batallones hacían ejercicios de marchas y despliegues a la 4713 vista del público en el centro urbano y en las afueras. Las 4714 señoras y señoritas confeccionaban estandartes y los bordaban 4715 con hilos de oro. Se oficiaban misas de campaña. Se escuchaban 4716 arengas patrióticas. Todo era entusiasmo y animación. 4717 4718 De acuerdo con el mensaje que dirigió a la nación la noche del 4719 25 de febrero (1879), el Presidente Hilarión Daza tenía la 4720 intención de adoptar una estrategia defensiva, manteniendo 4721 todas las fuerzas en el altiplano, esperando que el ejército 4722 chileno subiese a las alturas e ingresase más al interior de la 4723 republica. Empero, los urgentes llamados del gobierno del Perú, 4724 por medio de don Serapio Reyes Ortiz, lo hicieron cambiar de 4725 criterio. En toda su actuación en la guerra iba a subordinarse a 4726 los propósitos del aliado. Los telegramas dirigidos por el señor 4727 Reyes Ortiz desde Lima le dijeron: "Salga división vía Tacna" (3 4728 de abril); "Chile declaró guerra al Perú. Salga ejército 4729 inmediatamente a Tacna" (5 de abril)"; Vuele ejército" (7 de 4730 abril). 4731 4732 Obedeció. "Voló" hacia la costa peruana con las tropas que 4733 estaban listas en La Paz y Oruro, sin esperar que se le reuniesen 4734 las reclutadas en los otros departamentos. Salió de la sede del 4735 gobierno el 16 de abril y el 30 del mismo mes arribó a Tacna. 4736 Relata el diarista José Vicente Ochoa: "A la una de la tarde, 4737 entre una lluvia de mixtura, entre vítores y otras 4738 manifestaciones de entusiasmo, se presentó el General Hilarión 4739 Daza que con su militar apostura atrajo las simpatías del pueblo 4740 que lo espectada. Iba acompañado de las autoridades tacneñas, 4741 de los consejos departamental y municipal, los jefes de su 4742 Estado Mayor, edecanes y cuatro coraceros de gran talla. Lo 4743 seguía el ejército encabezado por el batallón "Colorados", al que 4744 seguían el "Paucarpata" y "Bolívar" (Primera División); "Sucre", 4745 "Dalence" y la artillería (Segunda División); "Illimani", 4746 "Independencia", "Vengadores" y la escolta (Tercera División). 4747 Entre la primera y la segunda división desfilaron los 300 jinetes 4748 del "Murillo". Todos hacían un total de 7 generales, 124 jefes, 4749 383 oficiales, 15 médicos, 2 capellanes y 5.421 soldados. El 4750 bello sexo desde los balcones arrojaba ramilletes de flores. A las 4751 pocas cuadras de la entrada estaba un elegante arco erigido por 4752 la colonia boliviana. La entrada fue muy lucida. Se notaba en 4753 todos los semblantes la admiración y el respeto que inspiraba 4754 nuestro ejército. Antes de retirarse a sus cuarteles hizo columna 4755 de honor ante un retrato del Presidente del Perú". 4756 4757 Los cochabambinos del "Vanguardia" llegaron a Tacna el 2 de 4758 mayo. Los chuquisaqueños el 9 y 19 del mismo mes. Los demás 4759 cochabambinos el 30 de junio. Los cruceños y benianos el 13 de 4760 octubre. Potosinos y tarijeños quedaron vagando durante meses 4761 en la altipampa a las órdenes del General Narciso Campero y 4762 sólo llegaron a la zona de operaciones a principios del año 4763 siguiente (1880). 4764 4765 En descargo de las responsabilidades del General Daza es justo 4766 anotar que se movilizó con las tropas que tenía listas hacia 4767 Tacna creyendo que el gobierno de Lima pondría a su disposición 4768 parte de su escuadra y que se embarcaría en Moliendo o Arica 4769 con destino al extremo sur del Perú, para de allí avanzar sobre el 4770 litoral boliviano en busca de los chilenos. 4771 4772 Nunca hubo intención del gobierno peruano hacer ese traslado. 4773 Las fuerzas bolivianas tuvieron que permanecer en Tacna, en un 4774 destierro indefinido, que terminó un año más tarde, como 4775 corolario de la derrota del Alto de la Alianza. Sólo una parte de 4776 ellas fue movida al departamento de Tarapacá, pero para luchar, 4777 al lado de las peruanas destacadas anteriormente allí: por la 4778 integridad territorial del país vecino. 4779 4780 Desde Tacna, el General Daza envió el siguiente mensaje al 4781 Presidente del Perú: "Es en el seno de la verdadera 4782 confraternidad que vengo a unirme a usted, para que con 4783 esfuerzos comunes mostremos al mal aconsejado Gobierno de 4784 Chile que en América no es la fuerza el derecho". Contestó el 4785 General Mariano Ignacio Prado: "Precisamente llega vuestra 4786 carta en el momento en que voy a emprender la marcha en 4787 busca de nuestro común enemigo y tócame la dicha de llevaros 4788 personalmente el abrazo cordial que el gobierno y el pueblo 4789 peruano envían a sus hermanos de Bolivia. Estoy seguro como 4790 vos que la santa causa de la justicia es propicia al Dios que rige 4791 el destino de las naciones y que el valor de los ejércitos aliados 4792 reintegrará a Bolivia su territorio usurpado...". 4793 4794 La interminable y aburrida permanencia en Tacna enfrió los 4795 ánimos de los jóvenes guerreros que abandonaron sus hogares 4796 pletóricos de entusiasmo bélico, ansiosos de enfrentar de 4797 inmediato al invasor de su patria, dispuestos a llegar hasta el 4798 sacrificio de sus vidas, si era necesario, siguiendo el heroico 4799 ejemplo de Eduardo Avaroa. 4800 4801 Del diario de Ochoa: "Es posible que tengamos que retornar 4802 todos a Bolivia para hacer la guerra por Calama, es decir, una 4803 campaña propia en territorio propio, pues la estancia en Tacna, 4804 que parece indefinida, no hace sino aniquilar a nuestras tropas y 4805 también los fondos de nuestra caja de guerra. La vida es 4806 carísima en esta ciudad. Se ha triplicado el valor de todo desde 4807 nuestro arribo. Siguen las hablillas de que el único objeto de 4808 habernos hecho venir hasta aquí ha sido para proteger Tacna y 4809 Arica. Es curiosa esta paz en plena guerra. La única señal de que 4810 estamos en campaña son los constantes ejercicios de instrucción 4811 militar que se hacen a todas horas en las calles, plazas y goteras 4812 de la ciudad. Anoche se efectuó un concierto en beneficio de las 4813 ambulancias (Servicio Médico de Cruz Roja). Tomaron parte 4814 caballeros y señoritas de Arica y Tacna. En el primer acto 4815 colaboraron algunos jóvenes del escuadrón "Murillo". En 4816 compañía de algunas señoritas entonaron con toda maestría los 4817 himnos peruano y boliviano". 4818 4819 4820 XXXIII 4821 EL PERU ENFRENTADO CON LA GUERRA 4822 4823 Don Serapio Reyes Ortiz llegó a Lima en la madrugada del 16 de 4824 febrero (1879) con la muy importante misión de obtener del 4825 Perú la ejecución del tratado de alianza suscrito en 1873. Dijo en 4826 un informe: "Después de la ceremonia de presentación de mis 4827 credenciales, en acto privado por la naturaleza secreta de mi 4828 misión, el señor Presidente del Perú expresó, aunque no de 4829 manera oficial, ideas que no eran favorables a la causa de 4830 Bolivia... No nos reconocía el derecho de cobrar el impuesto de 4831 los 10 centavos...". 4832 4833 El Ministro de Relaciones Exteriores fue más explícito. Le declaró 4834 que dicho pacto había caducado debido a que Bolivia celebró su 4835 tratado de límites con Chile en 1874 (Baptista-Walker Martínez) 4836 sin dar aviso al Perú, como era su obligación por una de las 4837 cláusulas de la alianza. "Se negó en absoluto a entrar en 4838 discusiones sobre ella." 4839 4840 Para los ocupantes del Palacio de los Virreyes la aparición del 4841 señor Reyes Ortiz en Lima, reclamando la ayuda peruana a favor 4842 de su patria en la guerra que estaba iniciando Chile con su 4843 apoderamiento del Litoral de Atacama, fue una sorpresa muy 4844 desagradable. El documento que trajo en su maleta y exhibía a 4845 unos y otros tenía para ellos la significación de un cadáver que 4846 debió enterrarse años atrás. 4847 4848 En palabras del Presidente Mariano Ignacio Prado, "el Perú no 4849 tenía armada, no tenia ejército, no tenía dinero, no tenía nada 4850 para una guerra" Era urgente detener el aluvión bélico. Los 4851 representantes peruanos en La Paz y Santiago fueron instruidos 4852 para que buscasen algún arreglo. Se destacó a la capital chilena, 4853 con el mismo objeto, a uno de los hombres más eminentes, don 4854 José Antonio Lavalle, que tenía vinculaciones de amistad con 4855 personajes del gobierno y la sociedad de Chile. Bolivia debía 4856 suprimir sus medidas contra la empresa salitrera y Chile retirar 4857 sus tropas del litoral boliviano. 4858 4859 Al tener noticias de que Chile concentraba toda su escuadra en 4860 Antofagasta y acumulaba allí abundante contingentes armados y 4861 pertrechos bélicos, el gobierno peruano abrió los ojos. Tales 4862 preparativos no podían ser contra Bolivia, país que no tenía un 4863 solo barco y al que se le había arrebatado ya el territorio que 4864 interesaba a su agresor. La escuadra chilena no podía estar 4865 aprestándose sino contra el Perú. La misión del señor Lavalle 4866 adquirió una nueva urgencia: ¡ganar tiempo! Tiempo para que 4867 los buques peruanos, que estaban viejos y en pésimas 4868 condiciones, se reparasen en el astillero del Callao. Tiempo para 4869 enviar tropas al departamento de Tarapacá. Tiempo para 4870 conseguir recursos económicos. ¡Tiempo para que el Perú 4871 pudiese salir de su delicada situación de inferioridad, de su 4872 indefensión! 4873 4874 Chile supo por varios conductos la existencia del tratado de 4875 alianza perú-boliviano el mismo año de su suscripción, 1873. 4876 Perú también lo olvidó, o lo supuso caduco, como ocurrió en 4877 Bolivia y el Perú. Se enteró de que el gobierno de La Paz lo 4878 resucitaba por las cartas que el Presidente Hilarión Daza dirigió 4879 al Prefecto de Antofagasta los primeros días de febrero y que, en 4880 vez de llegar a manos de su destinatario, cayeron en poder de 4881 las fuerzas chilenas que ocupaban ese puerto desde el 14 de ese 4882 mes. Dicha correspondencia contenía frases como éstas: "Tengo 4883 una buena noticia que darte. He fregado a los gringos 4884 decretando la reivindicación de las salitreras y no podrán 4885 quitárnoslas aunque se esfuerce el mundo entero... Espero que 4886 Chile no intervenga en ese asunto empleando la fuerza. Su 4887 conducta con la Argentina revela de manera inequívoca su 4888 debilidad y su impotencia; pero si nos declara la guerra, 4889 podemos contar con el apoyo del Perú, al que exigiremos el 4890 cumplimiento del tratado secreto... El Ministro Reyes Ortiz, 4891 marcha a Lima dentro de dos días a ponerse de acuerdo con el 4892 gobierno de ese país..." 4893 4894 En Chile, los enemigos del Perú, que eran muchos, propalaron a 4895 todos los vientos la noticia de la alianza y atizaron los 4896 sentimientos anti peruanos. Cuando el señor José Antonio 4897 Lavalle llegó a Valparaíso (4 de marzo), una concentración 4898 popular lo esperaba en el muelle, aleccionada en su contra por 4899 un volante que circuló los días anteriores diciendo: "El pueblo de 4900 Chile desea hacer comprender al plenipotenciario peruano que, 4901 ya como mediador oficioso, ya como juez inquisidor, su misión es 4902 ineficaz y odiosa. Con este objeto se convoca al pueblo de 4903 Valparaíso a un meeting para el martes 4, a las 8 de la noche, 4904 en la Plaza de la Independencia, a fin de hacer prácticas estas 4905 consideraciones y adoptar en presencia del enviado peruano una 4906 actitud digna de los hijos de Caupolicán y Lautaro". 4907 4908 El señor Lavalle se dirigió a su hotel por en medio de una 4909 multitud hostil. Esa noche el consulado peruano en el puerto fue 4910 apedreado. En Santiago, el Presidente de la Republica, señor 4911 Aníbal Pinto, y su Ministro de Relaciones Exteriores, señor 4912 Alejandro Fierro lo recibieron con las obligadas cortesías del 4913 protocolo diplomático, pero resolvieron desenmascararlo. El 4914 ministro le dijo: "Me permito consultarle qué hay de un tratado 4915 de alianza secreto que se dice existe entre el Perú y Bolivia. 4916 Godoy (representante chileno en Lima) me escribe ahora que fue 4917 suscrito en 1873, no obstante de que en los seis años anteriores 4918 no dijo nada al respecto. Videla (representante chileno en La 4919 Paz) también se refiere a él últimamente, diciendo que ha sido 4920 encontrado en un armario y que se habla mucho de él en esa 4921 ciudad". 4922 4923 Se ha descrito a los diplomáticos expresando que son "personas 4924 honradas que una nación destaca al exterior para que mientan a 4925 favor de su patria". Nunca esa descripción fue más cabal que en 4926 el caso de don José Antonio. Conocía muy bien el pacto 4927 boliviano-peruano de 1873, pues recibió una copia a su salida de 4928 Lima y asistió a una reunión con el señor Reyes Ortiz, en la que 4929 no se habló de otra cosa. Sin embargo, en su respuesta al señor 4930 Fierro le manifestó que nada sabía de él, que no podía existir 4931 puesto que fue Presidente de la Comisión de Negocios Exteriores 4932 del Senado de su país en las legislaturas de 1873 y siguientes y 4933 nunca lo oyó mencionar. 4934 4935 El gobierno chileno sabía muy bien que el señor Lavalle estaba 4936 mintiendo. No podía delatarlo por las reglas de la cortesía, más 4937 exigió que el Perú se declarase neutral en el conflicto chileno- 4938 boliviano, como condición previa para que se pudiese aceptar su 4939 intervención pacificadora. 4940 4941 Las autoridades de Lima se vieron en mayores apuros. El señor 4942 Lavalle, en su primera comunicación, les había dicho: "El 4943 verdadero objetivo de los preparativos bélicos de Chile es el Perú 4944 y no Bolivia". En la siguiente añadió: "La perspectiva de una 4945 complicación con el Perú aterra a unos, por las terribles 4946 consecuencias que pudiera traerle a Chile. Alienta a otros que, 4947 con la exagerada idea que abrigan de las fuerzas de la nación, 4948 estiman más fecunda en glorias y en provechos una guerra con 4949 el Perú, que una guerra con Bolivia". Por su parte el cónsul 4950 peruano en Valparaíso, señor Luis E. Marques, escribió: "El 4951 anhelo de la guerra con el Perú es vehemente en todos los 4952 círculos sociales de Chile... Cinco años de permanencia en Chile 4953 me han enseñado a conocer el espíritu del país y su política 4954 externa". 4955 4956 El ministerio chileno en Lima, Joaquín Godoy, avisó el 12 de 4957 marzo: "Al Perú le conviene aplazar el momento de tomar una 4958 decisión, porque ella tendrá que ser de intervención armada". 4959 Avisó también que, para seguir ganando tiempo, los gobernantes 4960 peruanos habían convocado al Congreso a reunirse a partir del 4961 24 de abril, más de un mes más tarde, con el pretexto de que 4962 era el Poder Legislativo al que correspondía estudiar la 4963 declaratoria de neutralidad. 4964 4965 Cumpliendo instrucciones de la cancillería de La Moneda, el 4966 señor Godoy, tuvo una entrevista con el Presidente Prado y le 4967 reclamó una definición más pronta. "Diga usted dos palabras, 4968 seré neutral, y todo se arreglará entre Chile y el Perú" —dijo el 4969 diplomático Contestó el mandatario: ¡No puedo, no puedo!, 4970 porque Pardo (su antecesor en la presidencia) me ha dejado 4971 amarrado a Bolivia por un tratado de alianza". 4972 4973 Esta confesión es lo que estaba esperando Chile. El señor La- 4974 valle tuvo que ratificarla. Leyó el texto del tratado de 1873 al 4975 canciller Fierro, pero explicándole que no había sido convenido 4976 en contra de nadie, sino con carácter netamente defensivo. 4977 4978 Con el reconocimiento oficial peruano de la existencia de la 4979 alianza, el gobierno de Santiago obtuvo autorización del 4980 Congreso para declarar la guerra al Perú. La ley en tal sentido se 4981 aprobó el 1° de abril. Causó enorme júbilo en todo Chile. Un 4982 editorial del principal diario, "El Mercurio", comentó: "El General 4983 Prado al enviarnos al señor Lavalle con propuestas de mediación, 4984 mientras que por otro lado maniobraba para hacernos caer en 4985 una alevosa emboscada, ha procedido como digno jefe de un 4986 gobierno que por sus infidencias características, su proverbial 4987 falta de honradez y carencia absoluta de todo decoro, es la 4988 piedra de escándalo de todos los países de Europa y de 4989 América... Es preciso que la venganza sea tan terrible como el 4990 insulto y que los degenerados descendientes de los incas reciban 4991 el castigo que merecen por su traición cobarde, por su envidia 4992 ruin, por sus odios inveterados y gratuitos contra Chile, que 4993 generoso y magnánimo, corrió dos veces a libertarlos del 4994 ignominioso yugo que los oprimía". 4995 4996 4997 XXXIV 4998 TODOS LOS GASTOS DE LA ALIANZA SOBRE BOLIVIA 4999 5000 Desde la llegada del señor Serapio Reyes Ortiz a Lima (16 de 5001 febrero) y hasta finalizar marzo, es decir, durante mes y medio, 5002 el gobierno del General Mariano Ignacio Prado trató de soslayar 5003 su obligación de entrar a la guerra al lado de Bolivia, pese al 5004 flagrante casus foederis existente de acuerdo a los términos del 5005 tratado de alianza de 1873, como era la invasión chilena a 5006 territorio boliviano. 5007 5008 En cambio, las poblaciones del país, particularmente la de la 5009 capital, con ese instinto que muchas veces hace ver a los 5010 pueblos lo que sus gobernantes no atinan a percibir, presentían 5011 que Chile se preparaba a atacar al Perú para completar con el 5012 muy rico fruto de Tarapacá la aventura expansionista que había 5013 iniciado con su apoderamiento de la costa boliviana de Atacama. 5014 Trataron de salir a las calles para expresar su apoyo al vecino del 5015 otro lado del Titicaca y su repudio a los agresores, pero las 5016 autoridades se lo prohibieron. Solamente unos 500 alumnos del 5017 Convictorio Caro-lino de San Carlos, después de concentrarse en 5018 los salones de su plantel y escuchar varios discursos, lograron 5019 marchar hasta donde se encontraba la Legación de Bolivia. Los 5020 señores Serapio Reyes Ortiz y Zoilo Flores (ministro boliviano 5021 residente) salieron a los balcones y los arengaron brevemente. 5022 5023 A decir de don José Antonio Lavalle, casi todos en el Perú 5024 querían la guerra. Los partidarios del General Prado por la 5025 esperanza de que gracias a ella su líder ganase en popularidad y 5026 se consolidase en el poder. Los seguidores del caudillo Nicolás de 5027 Piérola porque le permitiría volver del exilio. Los militares y 5028 marinos por el deseo de tener oportunidades de mostrar su valor 5029 y ganar ascensos. Los negociantes, empresarios e industriales 5030 por las ocasiones que les podría brindar para aumentar sus 5031 fortunas. El resto de los habitantes "por faroleros y por impulso 5032 ajeno". 5033 5034 Con la declaratoria de guerra de Chile del 3 de abril (1879), el 5035 gobierno peruano recién reconoció oficialmente que el pacto con 5036 Bolivia de 1873 seguía vigente y convenía ponerlo en práctica. 5037 5038 El canciller Facundo Infante invitó al señor Reyes Ortiz a discutir 5039 cuales serían las condiciones de participación de uno y otro 5040 aliado. El 15 de ese mes, ambos negociadores suscribieron el 5041 llamado Protocolo de Subsidios". 5042 5043 Contenía las siguientes estipulaciones principales: "Bolivia 5044 contribuirá a la guerra con un ejército de 12.000 hombres y el 5045 Perú con 8.000 y toda su escuadra... La expresada fuerza de 5046 tierra podrá aumentarse posteriormente... Bolivia se obliga a 5047 indemnizar al Perú los gastos que le ocasione la guerra que le ha 5048 declarado el Gobierno de Chile a causa de la alianza con ella: 5049 entendiéndose por tales gastos los de movilización de su ejército 5050 y armada, los de organización, sostenimiento y movilización de 5051 la fuerza extraordinaria de mar y tierra, los de compra de 5052 armamentos y buques para el ejército y la escuadra, así como el 5053 valor de los buques y armamentos que se pierdan". 5054 5055 En otras palabras, Bolivia tenía que correr con sus propios 5056 gastos bélicos y, además, costear absolutamente todos los del 5057 Perú. En otras palabras, el Perú iba a defenderse de Chile 5058 cargando a Bolivia el monto total de los desembolsos que hiciese 5059 para tal fin. 5060 5061 Con la acumulación de fuerzas de mar y tierra en Antofagasta 5062 después de haberse apropiado del litoral boliviano y luego con su 5063 declaratoria de guerra al Perú, Chile se quitó la máscara y 5064 mostró al mundo que el enemigo al que realmente quería 5065 enfrentar en una contienda armada era el Perú. Desde el 3 de 5066 abril cambió fundamentalmente la orientación del conflicto. Lo 5067 que inicialmente fuera un abuso de fuerza de Chile sobre el 5068 Litoral boliviano, equivalente al asalto a mano armada de una 5069 porción de territorio que su legítimo dueño tenía desguarnecida, 5070 se convirtió en una conflagración bélica entre dos países que 5071 desde su fundación corno republicas tenían rivalidades de tipo 5072 comercial y naval. 5073 5074 La discordia boliviano-chilena terminó prácticamente con la 5075 ocupación de todo el litoral boliviano, puesto que Bolivia, por si 5076 sola, sin poseer barco alguno y con un desierto de por medio, 5077 estaba imposibilitada de expulsar a un enemigo que podía 5078 servirse de sus barcos para maniobrar a su antojo en esa costa. 5079 5080 Para el Perú el desafío de Chile representaba una cuestión de 5081 vida o muerte. No le cabía otra actitud que defenderse por todos 5082 los medios posibles y, entre ellos, recurrió a la colaboración de 5083 Bolivia. El canciller señor Facundo Infante, al discutir con don 5084 Serapio Reyes Ortiz las cláusulas del Protocolo de Subsidios, no 5085 dijo que su país iba a la guerra en defensa propia. Sostuvo que 5086 lo hacía exclusivamente para ayudar a Bolivia. Lo evidente era lo 5087 contrario. La causa boliviana —reivindicación de su litoral 5088 oceánico—, quedaba postergada al lado de la prioridad de la 5089 causa peruana —salvaguarda de su integridad territorial—. 5090 Primero el Perú tenía qua batir a Chile en el mar a fin de 5091 garantizar su integridad geográfica Sólo después de una victoria 5092 de esa naturaleza podían los aliados pensar en expulsar al 5093 invasor de Atacama. 5094 5095 Don Facundo, para convencer a don Serapio, citó a tratadistas 5096 del Derecho Internacional como Heffner según los cuales "los 5097 gastos de una alianza corresponden a la nación en cuyo 5098 provecho se hace la guerra y son comunes únicamente cuando el 5099 provecho es común". En abril de 1879, Bolivia estaba vencida y 5100 la alianza iba a actuar primordialmente al servicio del Perú. Lo 5101 justo habría sido estipular que cada país corriese con sus propios 5102 pastos. 5103 5104 El señor Reyes Ortiz era considerado uno de los abogados más 5105 hábiles de Bolivia, sino el más hábil. Su colaborador, el señor 5106 Zoilo Flores, era hombre inteligente y de carácter. No obstante 5107 ambos se dejaron convencer por las ladinas argumentaciones del 5108 canciller Infante. ¿Por ingenuidad? Tal vez, más bien, porque 5109 negociaban en una situación de inferioridad de la que ahusó la 5110 diplomacia peruana en la situación de inferioridad de 5111 representantes de una nación que nada podía hacer contra Chile 5112 por si sola. 5113 5114 En sus informes al Congreso y al gobierno se mostraron muy 5115 satisfechos de su actuación. El señor Reyes Ortiz manifestó al 5116 Congreso de 1880: "Las proposiciones introducidas por la 5117 cancillería peruana eran gravosas para los intereses de Bolivia, 5118 pero cuando se trata de vencer grandes dificultades hay que 5119 optar por grandes sacrificios". El señor Zoilo Flores, en nota al 5120 Ministerio de Relaciones Exteriores de La Paz, expresó: "Por una 5121 parte hemos obtenido la realización de la alianza por parte del 5122 Perú, a pesar de sus desfavorabilísimas condiciones políticas y 5123 económicas. Considerando la obligación que pesaba sobre 5124 Bolivia, como nación agredida, de proporcionar a su aliada los 5125 recursos necesarios para hacerla efectiva, bien se comprende 5126 que no han podido dársenos mayores pruebas de simpatía, de 5127 generosidad y de nobleza por parte de nuestro aliado, puesto 5128 que ha respondido a nuestro llamado para la salvación de 5129 nuestra integridad nacional ayudándonos con su escuadra y su 5130 ejército". 5131 5132 La primera noticia de que don Serapio había cumplido su misión 5133 en Lima, según sus propias palabras, hizo que en Bolivia "se 5134 batieran palmas, que el patriotismo enloqueciera de regocijo y 5135 que el nombre del negociador fuese elevado a las nubes". 5136 Empero, cuando se conoció el texto del Protocolo de Subsidios, 5137 la reacción fue completamente desfavorable. Don Pedro José de 5138 Guerra, en su condición de jefe del Consejo de Ministros dejados 5139 por el Presidente Hilarión Daza a cargo del mando de la 5140 republica mientras él se encontraba ausente haciendo la 5141 campaña bélica, manifestó en correspondencia a don Zoilo 5142 Flores: "La Paz, 8 de mayo de 1879. No debe cargarse a. Bolivia, 5143 como ha convenido Reyes, el valor de los buques que se 5144 compren, de los buques que fracasen, el monto de las 5145 donaciones... Todo sobre el pobre. Desde que el Perú ha llamado 5146 a nuestro ejército a defender costas peruanas, todos los gastos 5147 deberían estar a su cargo. Generoso, noble, ha sido Daza en 5148 abandonar Calama o la vía de Oruro por Tarapacá, obedeciendo 5149 al llamado del aliado... Existe aquí en La Paz una gran alarma. 5150 Se cree vendida Bolivia. Así el pequeño entusiasmo que existía 5151 para la guerra contra Chile se apaga aceleradamente... Sólo el 5152 obedecimiento a las órdenes del Presidente del Perú, expresadas 5153 por telegramas multiplicados del señor Reyes Ortiz, han puesto a 5154 nuestro ejército en Tacna en dificilísima situación... Se puede 5155 decir que la imposibilidad de recuperar nuestro litoral por 5156 Calama se debe al obedecimiento deferente del General Daza al 5157 General Prado... Sería bien hacer comprender al gobierno y al 5158 congreso del Perú que no pueden imponer la ley en Bolivia y que 5159 se encuentran muy comprometidos con Chile". 5160 5161 El señor Flores respondió defendiendo el protocolo: 5162 "Supongamos que no hubiera existido el tratado de alianza y 5163 supongamos que el Perú nos hubiera dejado solos en la 5164 contienda, abandonados a nuestras propias fuerzas... ¿No es 5165 cierto que Bolivia hubiera tenido que proporcionarse, a su sola 5166 cuenta, elementos marítimos y armamentos para la guerra? ¿No 5167 es cierto también que la pérdida de esos elementos durante la 5168 contienda o después de ella, habrían pesado exclusivamente 5169 sobre Bolivia? Esta es la doctrina que el señor Reyes Ortiz ha 5170 profesado acerca de la alianza. Esta es la interpretación que ha 5171 dado a su espíritu. Sin el auxilio del Perú, que pone al servicio de 5172 nuestros intereses elementos de que carecemos en absoluto, no 5173 habríamos tenido, ni tendríamos en el futuro, en mi concepto, la 5174 posibilidad de recobrar nuestro litoral. Así lo comprendió sin 5175 duda el gobierno cuando no cesó en su insistencia sobre el señor 5176 Reyes Ortiz para que haga práctica la alianza, sean cuales fueren 5177 las condiciones que le sirvieran de base". 5178 5179 5180 XXXV 5181 LA CONTIENDA EN EL MAR 5182 5183 Una vez planteada la guerra al Perú el Presidente de Chile, señor 5184 Aníbal Pinto, describió las intenciones de su gobierno en estos 5185 términos: "La primera campaña será marítima. Una vez que 5186 hayamos vencido en el océano el campo de batalla será el 5187 mismo territorio de esa republica". 5188 5189 El comandante de la escuadra, Almirante Juan Williams 5190 Rebolledo, recibió órdenes de atacar sorpresivamente a la 5191 escuadra peruana que se estaba alistando en el Callao, al mismo 5192 tiempo que se hacía publica la declaratoria de guerra. El marino 5193 representó tal mandato. Temía a los poderosos cañones de la 5194 fortaleza de ese puerto. Prefirió bloquear Iquique impidiendo los 5195 embarques de salitre a manera de provocación a las naves 5196 enemigas, a fin de que saliesen de su guarida y pudiese 5197 enfrentarlas en alta mar. Como esto no diese resultado y se 5198 criticase en Santiago su inactividad, decidió actuar de acuerdo 5199 con las directivas emanadas del Palacio de La Moneda. 5200 5201 La casualidad hizo que al mismo tiempo que la escuadra chilena 5202 salía de las proximidades de Iquique rumbo al Callao, la 5203 escuadra peruana zarpaba de ese puerto transportando al 5204 Presidente de la República, General Mariano Ignacio Prado, jefes 5205 de alta graduación, tropas, pertrechos bélicos y víveres con 5206 destino a Arica. Los dos convoyes se cruzaron sin avistarse. De 5207 ocurrir lo contrario, habría podido producirse un enfrentamiento 5208 naval decisivo. 5209 El Presidente Prado llegó a Arica el 20 de mayo (1879). El 5210 General Hilarión Daza se trasladó desde Tacna y subió a bordo 5211 del vapor "Oroya" para saludarle. Los dos mandatarios, que se 5212 veían por primera vez, se estrecharon en un abrazo y cambiaron 5213 brindis con copas de champagne. Prado hizo votos porque "la 5214 confraternidad perú-boliviana fuese tan sincera como eterna". 5215 Daza expresó el deseo de que las fuerzas aliadas "alcanzasen el 5216 triunfo y castigasen al invasor". 5217 5218 Al enterarse el General Prado de que el Almirante Williams 5219 Rebolledo se había alejado de Iquique dejando frente a ese 5220 punto solamente dos buques, menores, ordenó que los dos 5221 blindados peruanos: "Independencia" y "Huáscar" fuesen a 5222 hundirlos. 5223 5224 El combate se produjo el 21 de mayo. El "Huáscar" enfrentó a la 5225 corbeta "Esmeralda". El "Independencia" persiguió a la 5226 "Covadonga" que escapaba hacia el sur. En vista de que la mala 5227 puntería de sus noveles artilleros no lograba su objetivo en dos 5228 horas de bombardeo, el comandante del "Huáscar", 5229 Contralmirante Miguel Grau, hizo embestir a su navío contra la 5230 corbeta chilena. En el primer encontronazo, el capitán de la 5231 "Esmeralda", Arturo Prat, saltó a la cubierta del buque peruano 5232 espada en mano, seguido por dos de sus subalternos. Su 5233 gallardo gesto terminó en los pocos segundos cuando un disparo 5234 de fusil de un marino peruano le perforó el cráneo. 5235 5236 El "Huáscar" atropelló dos veces más con su espolón a la 5237 "Esmeralda" logrando echarla a pique. Entretanto, el blindado 5238 "Independencia" seguía persiguiendo a la vieja "Covadonga" 5239 (tomada a los españoles en la guerra de 1865-1866). Opúsculo 5240 VI de esta serie). Una imprudente maniobra del "Independencia" 5241 al querer aproximarse a su presa que iba bordeando la costa, le 5242 fue fatal. Chocó contra un arrecife oculto, rompió su quilla y 5243 quedó varado. Llegó el "Huáscar" en su socorro. Recogió a la 5244 tripulación que incendió su buque para que nada de él sirviese al 5245 enemigo. 5246 Los presidentes Prado y Daza se encontraban juntos en Arica 5247 cuando llegó una lancha con la noticia del triunfo del "Huáscar" 5248 sobre la "Esmeralda" en el combate de Iquique. Hubo regocijo 5249 general. Se retransmitió la noticia a Lima y La Paz. Esa noche, 5250 en circunstancias en que los dos mandatarios discutían la 5251 manera de iniciar la campaña terrestre, arribó otro bote del sur. 5252 Dio cuenta de la tragedia del "Independencia". El alborozo se 5253 trocó en aflicción. 5254 5255 Al comenzar la contienda, Chile contaba con dos blindados 5256 modernos: el "Blanco Encalada" y el "Cochrane", fabricados en 5257 Inglaterra en 1874, con un blindaje de 9 pulgadas. El Perú tenía 5258 dos blindados anticuados: el "Independencia" y el "Huáscar", 5259 también de fabricación inglesa, pero de 10 años antes, en 1864, 5260 con una armadura de hierro de sólo cuatro pulgadas y media. En 5261 otro tipo de naves Chile poseía cuatro corbetas, el Perú dos. 5262 Chile era dueño de dos cañoneras. El Perú de dos monitores. En 5263 barcos de transporte Chile disponía de uno, el Perú de tres. 5264 5265 La definición de la guerra marítima dependía de la actuación de 5266 los blindados. Las otras embarcaciones no podían jugar sino un 5267 rol de auxiliares. Por eso, la pérdida del "Independencia" 5268 representó una catástrofe para el Perú y la alianza. Quedaban en 5269 delicada situación de inferioridad naval frente a Chile. Al Perú 5270 únicamente e quedaba el "Huáscar" como un navío mayor capaz 5271 de nacer algún daño a las unidades de la escuadra rival. Y el 5272 "Huáscar" asumió esa responsabilidad con un coraje 5273 extraordinario. Recorrió las costas dominadas por Chile, 5274 infligiendo cuanto daño le era posible, esquivando la vigilancia 5275 de sus enemigos. Su campaña cautivó la admiración del mundo 5276 entero. 5277 5278 En el Perú y Bolivia se hizo depender la suerte de la guerra del 5279 valor y pericia del Contralmirante Grau y sus hombres. En uno y 5280 otro país se rodeó su persona de una aureola de héroe de 5281 leyenda. Se lo consideró invencible. Todas las esperanzas de 5282 victoria se cifraron en él. 5283 5284 El "Huáscar" hundió a la goleta "Clorinda" y a dos lanchas 5285 delante de Mejillones. En aguas de Antofagasta persiguió a los 5286 barcos "Rímac" e "Itata" y cambió disparos con la "Covadonga". 5287 Bombardeó Antofagasta. Escapó de la persecución del "Blanco 5288 Encalada" y la "Magallanes". Estuvo a punto de echar a pique al 5289 "Matías". En compañía de la "Unión" amagó los puertos chilenos 5290 de Chañaral, Carrizal, Pan de Azúcar, Huasco y Caldera, 5291 destruyendo las pequeñas embarcaciones que encontró en ellos. 5292 Su mayor hazaña fue capturar al "Rímac" y llevarlo a Arica con 5293 toda su tripulación y los 250 oficiales y soldados con sus caballos 5294 del escuadrón de caballería "Cazadores de Yungay". 5295 5296 Un consejo de guerra reunido en Mejillones decidió poner fin a 5297 sus correrías mediante una acción combinada de las principales 5298 unidades de la escuadra chilena. Al saberse que había pasado 5299 otra vez hacia la costa del sur con la "Unión" se le preparó una 5300 emboscada para su regreso. El "Blanco Encalada", la 5301 "Covadonga" y el Matías" ocuparon posiciones en alta mar a la 5302 altura de Antofagasta. El "Cochrane", la "O'Higgins" y el "Loa" se 5303 pusieron al acecho un poco más arriba, delante de Punta 5304 Angamos (península de Mejillones). 5305 5306 El 9 de octubre (1879), el "Huáscar" y la "Unión", en su 5307 recorrido de retorno a Arica, encontraron su paso interceptado 5308 por el "Blanco Encalada" y la "Covadonga". Trataron de zafarse 5309 por un costado, pero surgieron en su ruta el "Cochrane", la 5310 "O'Higgins" y el "Loa". Como la atención de las naves chilenas se 5311 concentrase sobre el "Huáscar", la "Unión" logró escapar. Aquél 5312 quedó solo, rodeado de sus enemigos. 5313 5314 Al comenzar el combate uno de los cañonazos del "Cochrane", 5315 desde 200 metros de distancia, hizo impacto en el puente de 5316 mando del "Huáscar" haciendo volar en pedazos al Almirante 5317 Miguel Grau. Tomó el mando el Capitán Elías Aguirre, que 5318 también cayó muerto. Le sucedió lo mismo a su substituto, el 5319 Teniente Melitón Rodríguez. 5320 Versión del Teniente Pedro Garezón: "Muerto el Almirante Grau, 5321 después el Capitán Aguirre y finalmente el Teniente Rodríguez, 5322 que se sucedieron en el mando, el "Huáscar" quedó sin gobierno 5323 por tercera vez. Las bombas enemigas penetrando por la 5324 bobadilla rompieron los aparejos y cáncamos de caña, lo mismo 5325 que los guardianes de combate y varones de la cadena del 5326 timón. Esas bombas produjeron tres incendios en la cámara del 5327 comandante y de los oficiales destruyéndolas completamente. 5328 Otra bomba penetró en la sección de la máquina, provocando 5329 otro incendio. Los oficiales que quedamos en pie resolvimos 5330 sumergir el buque para evitar que cayese en manos del 5331 enemigo. Se ordenó al maquinista jefe que abriese las válvulas, 5332 lo que se ejecutó al acto. Eran las 10 de la mañana cuando se 5333 suspendieron los fuegos del enemigo. El "Huáscar" principiaba a 5334 hundirse en circunstancias en que llegaron a un costado 5335 embarcaciones chilenas cuya tripulación nos fue imposible 5336 rechazar por haber sido inutilizadas nuestras armas. Los 5337 chilenos, revólver en mano, obligaron a los maquinistas a cerrar 5338 las válvulas cuando se tenía ya cuatro pies de agua en la 5339 sentina. Otros marinos chilenos procedieron a apagar 5340 activamente los incendios" 5341 5342 El "Huáscar" fue llevado a Valparaíso para ser reparado e 5343 incorporado a la escuadra chilena. El entusiasmo que despertó a 5344 su paso por Chañaral, Caldera, Huasco, Coquimbo y, finalmente, 5345 a su llegada a Valparaíso, fue inmenso. Se hizo necesario 5346 organizar trenes especiales para los miles y miles de habitantes 5347 de Santiago que querían conocer el famoso blindado que burló 5348 durante meses a la marina chilena y ahora era su trofeo. 5349 De Grau sólo se encontró un pedazo de uno de sus pies y 5350 algunos de sus dientes incrustados en la pared de madera de lo 5351 que fue su puesto de mando. 5352 5353 La impresión que la pérdida del "Huáscar" causó en el Perú y 5354 Bolivia fue la de una tragedia de la mayor magnitud. Chile era 5355 dueño del mar y podía desembarcar su ejército en los puntos de 5356 la costa peruana que mejor le convinieran. En palabras de don 5357 Mariano Baptista Caserta: "Un soplo de muerte heló los 5358 corazones". 5359 5360 5361 XXXVI 5362 PISAGUA Y GERMANIA 5363 5364 La pérdida de sus dos buques blindados, "Independencia" y 5365 "Huáscar", colocó al Perú en situación muy vulnerable frente a 5366 Chile, con sus costas sin protección naval de importancia. La 5367 defensa de su integridad territorial pasó a depender de sus 5368 propias fuerzas de tierra y de las bolivianas desplazadas en 5369 Iquique, Pisagua y Tacna. 5370 5371 Chile decidió rápidamente su campaña terrestre. El 5372 departamento peruano de Tarapacá, con su gran riqueza 5373 salitrera y acumulaciones de guano, se convirtió en el objetivo 5374 inmediato de sus planes militares y de sus ambiciones 5375 económicas. Su ejército, que al comienzo del conflicto armado 5376 con Bolivia tenía 2.000 hombres, una vez resuelta la guerra 5377 contra el Perú se fue incrementando rápidamente y en pocos 5378 meses llegó a contar con 10.000 soldados en Antofagasta y una 5379 reserva de 8.000 en Santiago y la frontera araucana. 5380 5381 La invasión de Tarapacá se acordó en una reunión celebrada en 5382 Antofagasta el 28 de junio de 1879. Participaron en ella el señor 5383 Domingo Santa María (Ministro de Relaciones Exteriores), el 5384 señor Rafael Sotomayor (representante del Presidente de la 5385 República en el comando militar y virtual director de la guerra), 5386 el señor José Alonso (Auditor del Ejército), el señor José 5387 Francisco Vergara (Secretario General del Comando militar) y el 5388 anciano General Justo Arteaga (Comandante en Jefe). El señor 5389 Santa María fue quien definió las intenciones del gobierno: "La 5390 posesión del departamento de Tarapacá nos haría dueños de 5391 propiedades fiscales, permitiéndonos aprovechar de los guanos y 5392 salitres, aliviando en forma considerable nuestros gastos y 5393 abriendo campo para el espíritu laborioso de nuestros 5394 trabajadores que fueron expulsados de allí... La destrucción del 5395 ejército peruano de Tarapacá influenciaría sobre la moral del 5396 boliviano acantonado en Tacna y podría dar oportunidad a que 5397 su gobierno se acerque al chileno por medio de un arreglo, 5398 puesto que perdida esta oportunidad más tendría que renunciar 5399 para siempre a tener Arica como puerto propio". El señor 5400 Vergara secundó esas opiniones con estas palabras: "Vencido el 5401 ejército que defiende Tarapacá, el Perú recibirá un golpe capital 5402 del que no podrá reponerse, porque habrá perdido el nervio de 5403 sus fuerzas, que son sus veteranos y su tesoro. Las 5404 consecuencias políticas serían también trascendentales. Bolivia 5405 no tendría ya esperanzas de recuperar su litoral, provocándose 5406 en su ánimo el temor de quedarse encerrada para siempre en las 5407 alturas". 5408 5409 A poco, el General Arteaga, resentido por la intromisión civil en 5410 las responsabilidades castrenses, renunció a su cargo. Fue 5411 reemplazado por el General Erasmo Escala. 5412 A los 20 días de la captura del "Huáscar" en el combate de Punta 5413 Angamos, una flotilla compuesta de 14 barcos a vapor y un 5414 buque de vela zarpó de Antofagasta con 10.850 combatientes de 5415 infantería, caballería y artillería, además de zapadores y 5416 pontoneros, con dirección a Pisagua, elegido como primer punto 5417 de desembarco en el departamento de Tarapacá. 5418 5419 Guarnecían dicho puerto 200 peruanos de la gendarmería y la 5420 Guardia Nacional y 799 bolivianos de los batallones "Victoria" e 5421 "Independencia". 5422 5423 El combate comenzó al amanecer del 2 de noviembre (1879) con 5424 un bombardeo a cargo del blindado "Cochrane" y los buques 5425 "O'Higgins", "Magallanes" y "Covadonga", sobre las instalaciones 5426 del puerto. A continuación, más de 40 lanchas se desprendieron 5427 de las unidades navales con las tropas de desembarco. Versión 5428 del Coronel Ezequiel de la Peña, Jefe del Estado Mayor de la 5429 división boliviana: "Los buques chilenos rompieron fuego sobre 5430 los únicos dos cañones de la defensa, silenciándolos. A las 8 y 5431 media, unidades de la escuadra enemiga, aprovechando de la 5432 profundidad de la bahía, se aproximaron más disparando sus 5433 cañones, ametralladoras y fusiles sobre la población y los 5434 puestos ocupados por los defensores. Los valientes del "Victoria" 5435 e "Independencia" y los peruanos cumplieron la consigna que se 5436 les había impartido. Se mantuvieron heroicamente en sus 5437 trincheras improvisadas sin contestar los disparos enemigos 5438 hasta las 10, en que comenzó la operación de desembarco en 44 5439 lanchas repletas de tropas. Fue en ese momento que los 5440 nuestros, que se habían mantenido impertérritos ante el 5441 cañoneo de la escuadra y la fusilería de los marinos, dieron 5442 comienzo a una tenaz resistencia. Se rechazaron varias lanchas 5443 de desembarco, que tuvieron que volver a los buques cargando 5444 muertos y heridos. Los disparos de la escuadra incendiaron las 5445 casas de la población y los depósitos de salitre, provocando 5446 grandes conflagraciones. El intenso humo facilitó las operaciones 5447 de desembarco. Después de 7 horas de lucha, al renovarse el 5448 ataque con fuerzas de reserva, se dio la orden de retirada a las 5449 unidades aliadas, la misma que se efectuó con serenidad y 5450 disciplina, escalándose el acantilado por la línea férrea". 5451 5452 El General Juan Buendía, comandante de las tropas aliadas de 5453 Tarapacá, expresó en un informe al Director Supremo de la 5454 Guerra: "Había llegado a Pisagua la víspera de los sucesos, a 5455 efecto de inspeccionar las fuerzas a las que estaba confiada su 5456 defensa. Al amanecer del día siguiente, cuando aún no había 5457 dado principio a mi tarea, fui avisado de la presencia de la 5458 escuadra enemiga, compuesta de 20 buques. Ordené 5459 inmediatamente las operaciones. Nuestros soldados soportaron 5460 los cañonazos de la escuadra sin hacer un disparo, como se les 5461 había ordenado, hasta el momento en que comenzó el 5462 desembarco. Nuestra defensa constaba de los batallones 5463 "Victoria" e "Independencia" y de algunos guardias nacionales 5464 del Perú. Después de 7 horas de resistencia heroica y de 5465 combate del ejército boliviano y de los nacionales del Perú, 5466 acordamos con el General Villamil retirarnos con nuestras 5467 fuerzas, convencidos de que era inútil continuar la lucha de 900 5468 contra 4.000 que habían desembarcado, sin contar con las 5469 poderosas reservas que esperaban en los buques. Hízose la 5470 retirada con toda disciplina. La conducta bizarra de los jefes, 5471 oficiales y soldados del ejército boliviano y de los nacionales del 5472 Perú ha sido altamente abnegada y las recomendaciones 5473 especiales tendrían que comprender a todos los que se han 5474 batido en mi presencia". 5475 5476 Los atacantes tuvieron 58 muertos y 178 heridos. Las bajas de 5477 los defensores alcanzaron a 200 entre muertos y heridos. 5478 5479 Puesto el pie en Pisagua, el ejército chileno necesitaba hacer una 5480 inmediata penetración al interior a fin de consolidar su situación 5481 y poder continuar la conquista del departamento. Las cosas se le 5482 facilitaron enormemente. El comando del General Buendía 5483 cometió el error de no inutilizar la línea férrea que unía Pisagua 5484 con la Estación Dolores, 73 kilómetros adentro, que tenía 5485 abundante agua, ni las instalaciones de explotación de salitre del 5486 lugar. El señor José Francisco Vergara, que hizo la primera 5487 exploración hacia el interior con un contingente de caballería, 5488 encontró que los aliados "por descuido o negligencia", habían 5489 dejado todo intacto: "Una serie de estanques de hierro llenos de 5490 agua; hermosos como baños de natación; una cantidad de 5491 carros de ferrocarril; una considerable maquinaria para extraer 5492 más aguas de extensas galerías subterráneas, donde se 5493 conservaba agua fresca y clara; y el carbón necesario para hacer 5494 funcionar las bombas un buen tiempo". 5495 5496 Vergara no se contentó con averiguar que la ruta de Pisagua a 5497 Dolores estaba libre de enemigos, que la línea férrea conservaba 5498 en perfectas condiciones su equipo fijo y rodante y que existía 5499 abundante agua para todos sus camaradas de armas. Se internó 5500 más en el desierto con su destacamento en el que figuraban 5501 oficiales como Gonzalo Lara, Juan de Dios Quesada y Carlos 5502 Souper que tomaron parte en el combate de Calama. Al 5503 atardecer del 5 de noviembre avistó jinetes enemigos. Se 5504 trataba de un pelotón de húsares peruanos liderados por el 5505 Comandante José Buenaventura Sepúlveda y el otro de húsares 5506 bolivianos a las órdenes del Capitán Manuel María Soto, que 5507 estaban en la zona en misión de vigilancia. 5508 5509 Vergara y sus escuadrones se lanzaron furiosamente sobre ellos, 5510 disparando sus carabinas al aproximarse y luego sableando a 5511 diestra y siniestra. Peruanos y bolivianos, muy inferiores en 5512 número, se defendieron desesperadamente. Todos, incluyendo 5513 los dos jefes, menos el Teniente boliviano Emilio L. Gómez, que 5514 fue tomado prisionero, perdieron la vida. Sus cuerpos quedaron 5515 sembrados en un amplio sector de la pampa donde se 5516 encontraba el asiento salitrero llamado Germania. 5517 5518 5519 XXXVII 5520 SAN FRANCISCO O DOLORES 5521 5522 El desembarco chileno en Pisagua y su penetración hasta la 5523 estación Dolores, 73 kilómetros adentro del departamento de 5524 Tarapacá, significaba su incrustación en medio de las fuerzas 5525 aliadas. Al norte, en Tacna, estaban las divisiones bolivianas que 5526 comandaba el General Hilarión Daza. Al sur, en Iquique, y sus 5527 alrededores, las divisiones peruanas y bolivianas que obedecían 5528 al General Juan Buendía. 5529 5530 El alto mando aliado (Presidentes Prado y Daza) en vez de ver 5531 en ello un peligro, consideraron que se les presentaba una 5532 situación que podía aprovecharse con ventaja. El General Manuel 5533 Othón Jofré escribió al General Narciso Campero expresando que 5534 la campaña se presentaba ahora muy fácil, que no se 5535 prolongaría ya mucho, pues los chilenos al desembarcar en 5536 Tarapacá habían acortado distancias y ofrecían la oportunidad de 5537 que se los batiera allí mismo. Las fuerzas de Tacna, las de 5538 Iquique y las que el General Campero tenía organizadas en el 5539 departamento de Potosí marcharían en un movimiento 5540 concéntrico sobre el enemigo para expulsarlo de territorio del 5541 Perú. 5542 5543 Cumpliendo instrucciones del Supremo Director de la Guerra, el 5544 General Buendía sacó sus fuerzas de sus acantonamientos e 5545 inició una marcha rumbo al norte, con la intención de reunirlas 5546 con las del General Daza que iban a iniciar su progresión hacia el 5547 sur. El General Campero hizo saber que también "acudiría a la 5548 cita". 5549 5550 El avance de las tropas de Buendía se inició el 16 de noviembre 5551 (1879). Sumaba un total de 9.060 hombres (4.850 peruanos y 5552 4.213 bolivianos). Según comentario del Coronel Belisario 5553 Suárez, Jefe del Estado Mayor, "la marcha se emprendió sin 5554 recurso alguno, con los soldados desabrigados y hambrientos y 5555 muy próximos a quedar descalzos". El 19, después de tres días 5556 de penosísimo andar (que se hacía en las noches para evitar la 5557 canícula), sobre un terreno con agujeros hechos en la 5558 explotación del salitre y cubierto de afilados trozos de caliche, 5559 cuando se creía que se iba a llegar al encuentro con el General 5560 Daza y su gente, se tropezó más bien con el ejército chileno 5561 parapetado en la cumbre del cerro San Francisco a un costado 5562 de la estación Dolores. 5563 5564 El desconcierto del General Buendía y sus inmediatos 5565 colaboradores aumentó al saberse (por oficiales que fueron al 5566 encuentro del General Daza y su contingente) que ya no 5567 llegarían para intervenir en la batalla, pues se habían dado la 5568 vuelta de medio camino, de Camarones, regresando a Tacna. 5569 5570 Se ordenó acampar frente al cerro de San Francisco, a la vista 5571 de los chilenos. Hubo opiniones contrapuestas entre los jefes. Se 5572 impartieron órdenes y contraórdenes. Primero se dijo que se 5573 descansaría hasta el día siguiente. En seguida, que se 5574 preparasen todos para un ataque. Nuevamente que se armasen 5575 pabellones y se entrase en descanso. 5576 5577 Un disparo fortuito de uno de los soldados aliados causó alarma 5578 entre los chilenos que respondieron con un cañonazo de una de 5579 las baterías emplazadas al borde de la cumbre. Los cuatro 5580 regimientos aliados que habían sido colocados como vanguardia, 5581 a los pies del cerro (Zepita y Ayacucho del Perú e Illimani y 5582 Olañeta de Bolivia), tomaron el disparo del cañón como señal 5583 que comenzaba la batalla. Corrieron cerro arriba con ímpetu 5584 incontenible. Lograron llegar a la cima donde hicieron retroceder 5585 a los artilleros enemigos, tomando algunos de sus cañones 5586 Krupp. La infantería chilena fue lanzada en su contra. Los 5587 regimientos Buin, 3° de Línea, Atacama y Valparaíso causaron y 5588 sufrieron muchas bajas. En algunos lugares se luchó cuerpo a 5589 cuerpo. 5590 5591 Los cuatro batallones aliados, al darse cuenta de que eran los 5592 únicos en batalla, que el resto de sus camaradas seguía en la 5593 pampa y que estaban siendo diezmados en medio campo 5594 enemigo, retrocedieron, bajando precipitadamente del San 5595 Francisco acosados por los disparos de sus contrarios. En el 5596 llano, donde desde un principio reinaba una gran confusión, 5597 algunos soldados atrincherados en los huecos de la explotación 5598 del salitre disparaban contra el cerro, sin darse cuenta que sus 5599 tiros, por la curva de la distancia, en vez de llegar a la cumbre, 5600 herían a sus compañeros de bajada. La caballería peruana 5601 abandonó el campo en precipitada fuga. Su ejemplo fue seguido 5602 por el resto de las tropas. Los peruanos se dirigieron hacia el 5603 pueblo de Tarapacá. Los bolivianos por grupos separados e 5604 incluyendo jefes y oficiales, tomaron el camino de su patria. 5605 Cada uno se encaminaba a su ciudad o pueblo de origen. 5606 5607 Para los chilenos todo fue sorpresa en esa jornada. La aparición 5608 del ejército de Buendía, su acampamento a su vista, el súbito 5609 ataque de algunas de sus unidades y la rápida desaparición de 5610 todos. La lógica les indicó que no podía haber sido otra cosa que 5611 un tanteo preliminar seguido de un repliegue táctico para dar la 5612 verdadera batalla al día siguiente. Esperaron en vano con 5613 fuerzas de refuerzo traídas apresuradamente por ferrocarril 5614 desde El Hospicio. 5615 5616 Les demoró caer en cuenta de que los aliados, luego de tan 5617 extrañas demostraciones, les habían dejado el campo libre, que 5618 abandonaban lo que ellos, los chilenos, habían venido a 5619 conquistar como objetivo principal de su esfuerzo bélico, el 5620 departamento de Tarapacá. Inclusive el General Daza y su fuerza 5621 estaban ya de vuelta en Tacna. 5622 5623 Resolvieron atacar a los peruanos en su pasajero campamento 5624 del pueblo de Tarapacá, capital del departamento del mismo 5625 nombre, antes de que continuasen su retirada hasta Arica. 5626 Consideraron que sería suficiente un destacamento de 2.300 5627 hombres dividido en tres columnas. Una de éstas atacaría de 5628 frente (penetrando por la quebrada a cuyo fondo estaba el 5629 villorrio), y las otras dos descolgándose por las colinas de 5630 derecha a izquierda, atrapando y aniquilando a sus adversarios 5631 en una madriguera sin salida. 5632 5633 El combate tuvo lugar el 27 de noviembre. Su resultado fue el 5634 opuesto al que buscaron sus promotores. Al descubrir 5635 casualmente movimiento de tropas enemigas a su izquierda, los 5636 peruanos reaccionaron con admirable rapidez y coraje. En vez de 5637 ser atacados, salieron al encuentro de los chilenos, 5638 sorprendiéndolos en pleno movimiento y derrotándolos 5639 decisivamente en los tres frentes. La sangría fue abundosa. 5640 Entre las balas chilenas figuró el Coronel Eleuterio Ramírez, 5641 vencedor del combate de Calama. 5642 5643 No obstante su victoria, el General Juan Buendía y los restos de 5644 sus tropas (con el batallón Loa boliviano como único remanente 5645 de la fuerza del aliado que estuvo a sus órdenes), tomó el largo 5646 camino hacia Arica por los faldíos de los contrafuertes andinos, 5647 arrastrando consigo a los pobladores del tránsito. El 17 de 5648 diciembre la caravana llegó a su destino. Dijo un testigo 5649 presencial: "Entraron en Arica 3.700 personas, en un estado 5650 miserable, desnudas y descalzas... Parecían cadáveres. De los 5651 soldados la décima parte no tenía fusiles. Jefes y oficiales 5652 montaban mulas y burros, sin monturas, ni riendas. Traían 70 5653 prisioneros chilenos". 5654 5655 Por orden del Presidente Mariano Ignacio Prado el General 5656 Buendía y su Jefe de Estado Mayor, Coronel Belisario Suárez, 5657 fueron despojados de sus espadas y sometidos a prisión, hasta 5658 que un tribunal militar estableciese su inocencia o culpabilidad 5659 en el desastre de San Francisco y el abandono del departamento 5660 de Tarapacá. Acabaron siendo absueltos. Se prefirió que la 5661 opinión pública echase toda la culpa al ejército boliviano. 5662 5663 Un editorial del periódico "El Nacional" de Lima, resumió de esta 5664 manera todo lo que hasta entonces había traído la guerra para el 5665 Perú: "En el corto espacio de 40 días ha ido muy lejos el triste 5666 itinerario de nuestros desastres. Angamos, Pisagua, San 5667 Francisco e Iquique... Pérdida de nuestro poder marítimo, 5668 pérdida de nuestros blindados, pérdida del Contralmirante Grau 5669 y muchos otros dignos marinos, pérdida de la campaña naval, 5670 pérdida de Pisagua, pérdida de su fortificación y artillería, 5671 pérdida de una vía férrea militar de 50 millas; pérdida de 5672 nuestros parques de cañones y otros armamentos; pérdida de 5673 nuestros depósitos de víveres; pérdida de la primera campaña 5674 terrestre; pérdida de Iquique y sus fortificaciones, artillería, 5675 ferrocarril de 56 millas y telégrafos, pérdida de nuestro territorio 5676 hasta el grado 19; pérdida íntegra del departamento de 5677 Tarapacá, pérdida de casi 200.000 habitantes; pérdida de 20 5678 millones de pesos en oficinas salitrales; pérdida de 2.800 millas 5679 cuadradas de terrenos con salitre que daban 28 millones de 5680 libras esterlinas al año. Por todos los poros de nuestro 5681 organismo mana la vergüenza...". 5682 5683 5684 XXXVIII 5685 LA CONTRAMARCHA DE CAMARONES 5686 5687 La mal llamada "retirada" de Camarones ("retirada" en términos 5688 castrenses se efectúa de un campo de batalla) que más 5689 propiamente debe calificarse como "contramarcha" (que según 5690 el diccionario de nuestra lengua es "el retroceso que se hace en 5691 el camino que se lleva"), ha sido uno de los episodios más 5692 extraños de la historia militar del mundo entero. 5693 5694 El General Hilarión Daza, que desde 7 meses antes tenía a parte 5695 de su ejército en una frustrante espera en Tacna (la otra parte 5696 había sido movilizada a reforzar los efectivos peruanos con la 5697 responsabilidad de defender el departamento de Tarapacá), sacó 5698 sus tropas de esa ciudad el 8 de noviembre (1879) por tren a 5699 Arica con el propósito de seguir de allí a pie a reunirse con el 5700 General Juan Buendía que, como se ha narrado en el capítulo 5701 anterior, tenía órdenes de salir de Iquique y sus alrededores con 5702 todas sus divisiones y venir a su encuentro. Reunidos los dos 5703 contingentes, a los que si posible iba a sumarse el que el 5704 General Narciso Campero organizaba en el departamento de 5705 Potosí, el General Daza debía asumir el comando supremo y dar 5706 la batalla que expulsase de territorio peruano a los chilenos que 5707 habían desembarcado en Pisagua y efectuado una penetración 5708 hasta la estación Dolores. 5709 5710 De acuerdo con lo planeado por los presidentes del Perú y 5711 Bolivia, el General Daza debió sacar de Tacna sólo 1.000 5712 combatientes. El hecho de que se presentase en Arica con 2.350 5713 dejando en Tacna nada más que 100 reclutas de la Legión 5714 Boliviana, contrarió vivamente al mandatario peruano, que no 5715 deseaba que Arica y Tacna quedasen desguarnecidas. Los 5716 chilenos, dueños del mar, podían tomar esos puntos fácilmente 5717 si todo el ejército aliado se concentraba en el desierto de 5718 Tarapacá. Pero Daza, según lo expresó a su Secretario General, 5719 no se separaba de ninguno de sus soldados de línea. Iba con 5720 todos o se quedaba. 5721 5722 La salida de Arica se efectuó el 11 de noviembre. De acuerdo 5723 con los principios más elementales de la logística, la marcha 5724 debía hacerse en las noches o en los amaneceres y atardeceres, 5725 es decir, evitándose el azote del sol y el calor del día. Sin 5726 embargo, el General Daza inició su ingreso al desierto a las 9 de 5727 la mañana, no obstante su gran experiencia como conductor de 5728 tropas y los consejos de que no cometiera semejante 5729 imprudencia que le manifestaron el General Mariano Ignacio 5730 Prado y otros jefes peruanos. Como agravante de tan craso error 5731 dejó que los soldados, que durante los tres días de permanencia 5732 en Arica habían bebido vino en exceso, llevasen sus cantimploras 5733 llenas de esa bebida, en vez de agua. 5734 5735 Como consecuencia de la canícula y el alcohol el avance del 5736 primer día no pudo llegar hasta Chaca, lugar programado como 5737 primera etapa. Se tuvo que acampar en medio camino, "donde 5738 no existía recurso alguno". Según José Vicente Ochoa, miembro 5739 de la secretaría del General Daza, "se pasó una noche 5740 angustiosa, porque la falta de agua y víveres hizo estragos". 5741 5742 En la mañana del siguiente día, volvió a caminarse en las horas 5743 soleadas. Se encontró charcos de agua cenagosa. "Muchos 5744 soldados se abalanzaron a beberla succionándola a través de un 5745 pañuelo o el extremo de una toalla. Al poco rato vomitaban 5746 estrepitosamente". A las 12 se llegó al pequeño valle de Chaca 5747 en el que existían algunos recursos. Se repartió agua, carne 5748 fresca, arroz y galletas. También vino que se producía allí 5749 mismo. Comentó Ochoa: "Volvióse a cometer la falla de dejar 5750 que la tropa lo consumiera sin tasa y llenara con él sus 5751 cantimploras. No lo pudieron evitar ni jefes ni oficiales". 5752 5753 La caminata del 13 fue tan desorganizada como las dos 5754 anteriores. "Se sufrió otra vez por el calor y la falta de agua. " 5755 Se produjeron numerosas bajas por efectos del cansancio, la sed 5756 y el hambre". El Coronel Narciso Tablares, encargado del Cuartel 5757 Maestre, denunció más tarde que aunque el Proveedor General 5758 por parte del Perú, señor Pedro Melgar, acumuló 200 odres de 5759 agua para la escala entre Chaca y Camarones, el General Daza 5760 los hizo devolver a Arica con excepción de once, que fue todo lo 5761 que quedó. "Como es natural, fue imposible abastecer con tan 5762 pequeña cantidad a todo el ejército. Muchos soldados murieron 5763 de sed. Esa noche logré conseguir ocho odres más, pero en nada 5764 aliviaron la situación porque los edecanes de Daza, seguramente 5765 con consentimiento de él, repartieron el contenido a sus 5766 caballos". 5767 5768 El 14, al medio día, se llegó a Camarones donde existía un río 5769 con abundante caudal, fruta y otros elementos de boca. 5770 Camarones se suponía la mitad del trayecto hasta el punto en el 5771 que se pensaba encontrar al General Buendía y sus divisiones. 5772 En esa misma fecha, el General Daza telegrafió a Arica, al 5773 Presidente Mariano Ignacio Prado, un mensaje que según el 5774 Coronel Eliodoro Camacho decía más o menos: "Desierto 5775 abruma. Ejército se resiste a continuar. No hay víveres". El 5776 desierto abrumaba porque se marchaba en las horas de sol. El 5777 ejército no había hecho ninguna manifestación para no seguir 5778 avanzando. Víveres existían en cantidad suficiente. 5779 5780 Daza convocó a reunión de los jefes de su ejército para adoptar 5781 las medidas que exigía la situación. Los participantes en el 5782 cónclave han dado versiones dispares sobre la forma como se 5783 desarrolló. Daza, en un manifiesto que escribió años más tarde 5784 en París, aseguró que todos los jefes, sin excepción, fueron 5785 partidarios de volver a Tacna en vista del lastimoso estado de la 5786 tropa. El General Carlos Arguedas, Jefe del Estado Mayor, dijo 5787 que "el General Daza adoptó la decisión en ese sentido el mismo 5788 día de la llegada a Camarones, que él no se opuso por temor a 5789 sus acostumbradas reacciones arbitrarias; que en el Consejo de 5790 Guerra del día siguiente, no dio ninguna opinión porque antes lo 5791 hizo llamar Daza y le previno que si no estaba de acuerdo con el 5792 retorno a Tacna "era mejor que guardara silencio". El Coronel 5793 Eliodoro Camacho declaró que él nunca fue partidario del 5794 regreso, pero sí de que la tropa descansara en Camarones 5795 mientras el General Daza, a quien él se ofrecía a acompañar, 5796 más una escolta, seguía hacia el sur para dar encuentro al 5797 General Buendía, tomar el comando de sus batallones, 5798 establecer la ubicación del enemigo, llamar a los de Camarones 5799 y dar finalmente la batalla con todo el ejército aliado. Camacho 5800 afirmó también que en el Consejo de Guerra el General Daza no 5801 emitió opinión alguna, pero que, con palabras entrecortadas y 5802 movimientos de cabeza, "mostraba su decidido propósito por la 5803 retirada". 5804 5805 El 15, el General Daza recibió la siguiente respuesta del 5806 mandatario peruano: "Habiendo recibido su mensaje de ayer en 5807 el que manifiesta la resistencia del ejército a continuar la 5808 marcha, convoqué anoche a una Junta de Guerra que ha 5809 resuelto se ordene al General Buendía que ataque 5810 inmediatamente. Por consiguiente no sólo es peligrosa sino inútil 5811 la marcha personal de usted al sur". 5812 Continúa la versión de Camacho: "Los más de los jefes rogamos 5813 al General Daza proseguir la marcha. Unos pocos opinaron por la 5814 retirada. El General Daza se limitó a escucharnos. No dio ningún 5815 dictamen ofreciendo únicamente, de un modo impreciso, decirle 5816 al General Prado que telegrafíe a Pozo Almonte para que se 5817 suspenda el ataque ordenado (a Buendía). A poco de retirarme 5818 del alojamiento del General Daza escuché dianas en el 5819 campamento ejecutadas por las bandas de música. Cuando 5820 pregunté el motivo se me avisó que se había dado la orden de la 5821 contramarcha". 5822 5823 La orden se cumplió. El 16, después de 48 horas de descanso en 5824 Camarones, jefes, oficiales y soldados emprendieron el camino 5825 de vuelta a Tacna. Lo hicieron en mejores condiciones físicas que 5826 en sentido contrario, más moralmente desalentados, 5827 confundidos, sin poder comprender las razones que 5828 determinaron que su Capitán General, que días antes les 5829 manifestó que iban en pos de gloria, los hacía retroceder 5830 arrastrando una gran vergüenza. Cuando pasaron por el puerto 5831 de Arica fueron insultados por la población peruana. En la ciudad 5832 de Tacna, asimismo, encontraron que las demostraciones de 5833 aprecio y admiración con las que se los despidió la semana 5834 anterior, eran ahora gestos y palabras de hostilidad y desprecio. 5835 El General Daza no estuvo con sus subordinados para compartir 5836 esas duras pruebas. Permaneció en Camarones con el Coronel 5837 Camacho, el Auditor de Guerra, señor Belisario Salinas, 100 5838 jóvenes de la Legión Boliviana y una escolta de coraceros. Con 5839 todos ellos continuó hacia el sur. ¿Con qué intenciones? No podía 5840 ser a tomar la jefatura de las fuerzas de Buendía, pues a esta 5841 altura de las circunstancias tenían que estar cumpliendo la orden 5842 del General Prado de buscar el encuentro con los chilenos. Lo 5843 que aparentemente buscaba Daza, con gran astucia y cálculo, 5844 era diferenciarse de los jefes que llevaron las unidades de vuelta 5845 a Tacna y hacer creer que él, estuvo en desacuerdo con la 5846 contramarcha. 5847 5848 En el lugar denominado Tana se encontró con el coronel peruano 5849 Claure y un reportero de un diario de Lima que le dieron la 5850 noticia de que el día anterior, 19 de noviembre, las divisiones de 5851 Buendía sufrieron un gran desastre en el cerro Franciscano. Daza 5852 y sus acompañantes volvieron a Camarones. Permanecieron allí 5853 dos días más. El 23 estuvieron de vuelta en Tacna. 5854 5855 ¿A qué se puede atribuir todas las extrañas actitudes del General 5856 Hilarión Daza en esos días? ¿Por qué trató de anular físicamente 5857 a su tropa haciéndola caminar, deliberadamente, a las horas de 5858 sol, con las caramañolas llenas de vino en vez de agua, haciendo 5859 devolver la mayor parte del agua acumulada en la etapa entre 5860 Chaca y Camarones, informando falsamente al Presidente Prado 5861 de que no quería seguir adelante y dando la orden de la 5862 contramarcha como si cediese a un "pedido unánime" de sus 5863 inmediatos colaboradores? 5864 5865 Uno no quisiera ser injusto con él. Sin embargo, razones con 5866 fuerza inclinan el criterio del investigador a la creencia de que 5867 acabó sucumbiendo a las constantes tentaciones que desde el 5868 comienzo de la guerra le venía haciendo llegar el Gobierno de 5869 Chile para que abandonase su alianza con el Perú, tentaciones 5870 que en último término, se expresaron en una oferta de dinero. 5871 En mayo de 1879, el Cónsul de Bolivia en Valparaíso escribió al 5872 señor Domingo Santa María, el más influyente miembro del 5873 gobierno chileno y el más activo en buscar la forma de separar a 5874 los aliados, sobre la posibilidad de "entenderse con el General 5875 Daza y conseguir que por dinero y algunas concesiones volviese 5876 la espalda a los peruanos". El mes siguiente, el señor Santa 5877 María recibió una carta de Arica, firmada con el seudónimo de 5878 Eustaquio Sierra, que expresaba que tenía un medio seguro de 5879 reducir al General Daza a los deseos del Gobierno de Chile con 5880 tal que se le dé medio millón de pesos. En diciembre de 1880, 5881 cuando el Coronel Eliodoro Camacho estaba prisionero en Chile, 5882 el señor Santa María le dijo que él arregló con el General Daza el 5883 retiro del ejército boliviano de la alianza "dándole las garantías 5884 necesarias respecto a la firma comercial de donde podía recoger 5885 los fondos con que Chile remuneraba su conducta". 5886 5887 La traición de Daza a la alianza no llegó a consumarse por la 5888 acción de los jefes bolivianos, que a las pocas semanas de la 5889 contramarcha de Camarones y cuando hacía preparativos 5890 secretos para volver a Bolivia con los cuerpos de línea lo 5891 despojaron de sus responsabilidades de Capitán General del 5892 Ejército y de Presidente de la República. 5893 5894 5895 XXXIX 5896 DEFECCIÓN DEL PRESIDENTE PRADO Y DERROCAMIENTO 5897 DEL PRESIDENTE DAZA 5898 5899 La pérdida del departamento peruano de Tarapacá, atribuido al 5900 desastre de San Francisco y a la contramarcha de Camarones, 5901 tuvo consecuencias trascendentales. 5902 La tensión política que provocó en Lima y otras ciudades del 5903 Perú y el temor de una insurrección popular contra su gobierno 5904 indujeron al Presidente Mariano Ignacio Prado a dejar Arica y 5905 volver a la capital, a fin de controlar la situación. La decisión que 5906 tomó dejó muy sorprendidos a todos. Decidió abandonar el Perú 5907 con el pretexto de ir a Europa a obtener créditos y hacer 5908 importantes adquisiciones de pertrechos bélicos. ¿Era una 5909 huida?... ¿Por qué no delegaba plenos poderes a uno de sus 5910 colaboradores (entre los cuales los había muy capaces) y él 5911 permanecía en el puesto del deber? Escribió al General Hilarión 5912 Daza: "Querido compañero y amigo: Hay absoluta necesidad de 5913 procurarnos a todo trance elementos de mar, por lo menos un 5914 poderoso buque que sea capaz de hacer frente a la escuadra 5915 enemiga... Después de pensar con madurez y obedeciendo a un 5916 sentimiento altamente patriótico, he tomado la resolución de 5917 marchar hoy a Europa en demanda de los mencionados 5918 elementos... Mi presencia aquí no es indispensable, al paso que 5919 mi viaje a Europa será, tengo fe, de provechosos resultados... 5920 Las fuerzas del ejército aliado del sur están encomendadas a 5921 usted y a nuestros distinguidos jefes, quienes sabrán responder 5922 a su honra... Sólo pido que se tenga fe en mi patriotismo y 5923 contestaré con hechos. Calculo que el viaje demorará cuatro 5924 meses a lo sumo. Con el tiempo muy estrecho, sólo me resta 5925 saludarle y despedirme". El gobierno quedó en manos del 5926 vicepresidente, el octogenario General Luis de la Puerta. 5927 5928 Según informó el ministro boliviano en Lima, señor Zoilo Flores, 5929 la opinión pública calificó el viaje del General Prado "como una 5930 fuga o deserción" que provocaba "profundo despecho y cólera 5931 hasta en sus más íntimos amigos personales y políticos". 5932 5933 El señor Nicolás de Piérola, que incansablemente venía buscando 5934 el mando supremo de la república de tiempo atrás, aprovechó de 5935 las circunstancias. El 23 de diciembre (1879), sacó a las calles 5936 de Lima la "Guardia Peruana" que él tenía organizada como su 5937 contribución al esfuerzo bélico. En combinación con el batallón 5938 "Ica" en la misma capital y el batallón "Catamarca" en el Callao, 5939 se hizo dueño de la situación y se declaró dictador. 5940 5941 El cambio político en el Perú puso en inminente peligro la 5942 estabilidad del General Hilarión Daza en su puesto de Presidente 5943 de Bolivia. Desde luego, su popularidad había venido 5944 disminuyendo por la clase de vida que llevaba en Tacna, las 5945 arbitrariedades que cometía en el ejército, favoreciendo a los 5946 batallones de línea, particularmente al "Colorados", su desprecio 5947 por los "jóvenes decentes" de la "Legión Boliviana" y el 5948 despotismo con el que trataba a muchos jefes y oficiales. 5949 5950 La contramarcha de Camarones, de la que fue señalado como el 5951 único culpable, acabó con el poco prestigio que aún le quedaba 5952 tanto en Tacna como en el interior de Bolivia y el resto del Perú. 5953 El señor Zoilo Flores le escribió desde Lima: "La contramarcha de 5954 Camarones ha ocasionado una transformación completa en el 5955 concepto que se tenía de usted en este país. Esa contramarcha 5956 ha convertido a usted de una esperanza en una decepción, de 5957 una entidad colosal en un ser vulgar, de un valiente en un 5958 cobarde, de un objeto de envidia en un objeto de desprecio, de 5959 una garantía en la victoria en causa del desastre, y lo que es 5960 más, de un leal en un traidor, de un elemento de gloria nacional 5961 en un instrumento de vilipendio, de humillación, de vergüenza 5962 para la patria". 5963 5964 Daza comprendió que si permanecía en Tacna su caída era 5965 indefectible. El golpe de Estado de Nicolás de Piérola en el Perú 5966 era un antecedente funesto. Comenzó a adoptar medidas 5967 urgentes y secretas para retornar a La Paz con los batallones de 5968 línea, abandonando el resto del disminuido ejército. Disminuido 5969 por la defección de todas las unidades que estuvieron en el 5970 departamento de Tarapacá, después del combate de San 5971 Francisco y por las constantes deserciones en Tacna que él 5972 nunca trató de evitar. 5973 5974 Una vez listo su regreso y aprovechando de su condición de 5975 Supremo Director de la Guerra (que asumió en ausencia del 5976 Presidente Prado y sin que mediara la previa e indispensable 5977 anuencia del nuevo gobierno peruano) trató de hacer creer al 5978 Contralmirante Lizardo Montero, jefe de las fuerzas del Perú en 5979 el sur, que volvía a Bolivia para imponer una nueva estrategia 5980 aliada: los bolivianos atacarían a los chilenos bajando desde el 5981 departamento de Potosí, mientras los peruanos avanzaban desde 5982 Arica hacia Tarapacá. 5983 5984 El Coronel Eliodoro Camacho enterado de los preparativos de 5985 Daza declaró más tarde: "Vi un lúgubre cuadro de catástrofes en 5986 el porvenir. El ejército boliviano desertando del teatro de la 5987 guerra sin haber enfrentado al enemigo. Bolivia engañando a su 5988 hermana y aliada la república peruana, después de haberla 5989 comprometido en la guerra y después de haberla visto perder en 5990 poder del enemigo su más valioso departamento". 5991 5992 Luego de consultar con otros jefes y algunos civiles, como 5993 Belisario Salinas, Abdón Senén Ondarza y José Rosendo 5994 Gutiérrez, Camacho decidió derrocar al Presidente Daza. Se 5995 aprovechó de que el 27 de diciembre (1879) viajó a Arica para 5996 una de sus últimas entrevistas con el Contralmirante Montero. 5997 Se dio orden a los batallones que fuesen a lavar su ropa en el río 5998 Chaplina, distante unos pocos kilómetros de Tacna. Mientras la 5999 ausencia de esas tropas y con el soporte de los integrantes de la 6000 "Legión Boliviana", el batallón "Loa" y el regimiento de artillería, 6001 se tomaron presos a los adictos a Daza, generales Arguedas y 6002 Alcoreza, se ocupó el local del Estado Mayor, se retiraron las 6003 armas y la munición del cuartel del batallón "Colorados" y de las 6004 demás unidades no comprometidas en el golpe. 6005 6006 A su retorno del Chaplina, a las dos de la tarde, los batallones 6007 "Colorados", "Sucre", "Aroma", "Viedma" y "Padilla" fueron 6008 recibidos en la Alameda por el Coronel Camacho y los demás 6009 jefes complotados y fueron informados de que el General Daza 6010 no era más General en Jefe del ejército ni Presidente de la 6011 República por su despotismo, su cobardía al ordenar la 6012 contramarcha de Camarones y sus intenciones de volver a la 6013 patria a enfrentar bolivianos contra bolivianos. 6014 6015 Los batallones reingresaron a sus cuarteles en silencio, sin hacer 6016 demostración alguna a favor o en contra del movimiento 6017 operado, con excepción del "Colorados" cuyos integrantes no 6018 disimularon su despecho y cólera por el derrocamiento de su 6019 ídolo. 6020 6021 El General Daza se encontraba ya en su asiento del tren en el 6022 que iba a volver a Tacna, cuando se le aproximó el coronel 6023 peruano Maclean con un mensaje del Contralmirante Montero 6024 que le daba cuenta de lo sucedido en esa ciudad. Daza buscó 6025 asilo en la residencia del Cónsul de los Estados Unidos por temor 6026 a que los revolucionarios quisiesen atentar contra su vida, a fin 6027 de consolidar su acción revolucionaria. Por medio del 6028 contralmirante pidió que el gobierno del Perú lo ayudase a 6029 recuperar su mandato constitucional. No lo consiguió. Esperó 6030 que los "Colorados" se levantaran a su favor arrastrando a las 6031 otras unidades de línea, pero luego comprendió que les era 6032 imposible por estar desarmados y con sus líderes dados de baja. 6033 Acabó resignándose a su derrota. Llamó a su esposa e hija de La 6034 Paz y con ellas tomó un barco con destino a Francia. 6035 6036 Al comunicar oficialmente al Contralmirante Lizardo Montero el 6037 cambio político encabezado por él, el Coronel Eliodoro Camacho 6038 le expresó lo siguiente: "El ejército boliviano ha desconocido la 6039 autoridad del General Daza y se pone a mis órdenes y yo a las 6040 de Vuestra Señoría, para cumplir nuestro deber en defensa de la 6041 alianza. El ejército boliviano saluda a Vuestra Señoría y en su 6042 persona al heroico y valeroso ejército de su hermana aliada. 6043 Sírvase Vuestra Señoría transmitir este suceso a su Excelencia el 6044 doctor Piérola, ofreciéndole el homenaje de nuestro respeto". 6045 6046 6047 6048 QUINTA PARTE 6049 6050 XL 6051 LA DIVISION ERRANTE 6052 6053 La acción del Coronel Eliodoro Camacho con la colaboración de 6054 otros jefes y algunos civiles en Tacna, el 27 de diciembre de 6055 1879, de despojar al General Hilarión Daza de la jefatura del 6056 ejército boliviano y de la Presidencia de la República, se 6057 sincronizó con un pronunciamiento similar en la ciudad de La 6058 Paz. 6059 6060 Siendo evidentes el descontento general contra el gobierno, 6061 debido al desastroso curso de la guerra para los aliados, y 6062 síntomas de un inminente golpe revolucionario, los propios 6063 miembros del Consejo de Ministros, que tenían a su cargo el 6064 Poder Ejecutivo de la nación, convocaron a una reunión de 6065 notables el 27 de noviembre. En ella se planteó la urgencia de 6066 pedir al General Daza que renunciase a sus responsabilidades de 6067 gobernante y de comandante de las fuerzas armadas. El hombre 6068 fuerte de la junta señor Serapio Reyes Ortiz, llegó a decir en esa 6069 ocasión: "Veo que se viene la revolución sin que se la pueda 6070 evitar...". El cónclave se disolvió sin llegar a ningún acuerdo. 6071 6072 Un mes más tarde, la noche del 27 de diciembre, sin conocer 6073 todavía que en esa misma fecha, unas horas antes, Daza había 6074 sido depuesto en Tacna, el Coronel José Manuel Guachalla, jefe 6075 de la guarnición de La Paz, en connivencia con Severo Matos, 6076 Claudio Velasco, Juan M. López, Luis Sainz, Manuel Vea Murguía 6077 y Fermín Prudencio, hizo ofrecer al Prefecto del Departamento, 6078 Coronel Uladislao Silva, la jefatura de un movimiento que 6079 desconociese la autoridad del General Daza. Silva aceptó. 6080 6081 Los complotados convocaron a un comicio al día siguiente. En la 6082 tumultuosa reunión celebrada en el Loreto, surgieron opiniones 6083 encontradas. Unos se declararon partidarios de la formación de 6084 una junta de gobierno provisional, otros declararon que en La 6085 Paz no se podía tomar decisiones de carácter nacional y sí sólo 6086 de carácter departamental, terceros lanzaron vivas a favor del 6087 Coronel Silva y cuartos hicieron lo propio con el nombre del 6088 político Rudecindo Carvajal. El comicio se disolvió sin haber 6089 arribado a conclusión alguna. 6090 6091 En la noche, Silva y Carvajal, aconsejados por sus coadjutores, 6092 llegaron a una transacción: formar juntos una junta de gobierno 6093 a la que también se invitaría al abogado y periodista orureño 6094 Donato Vásquez. Silva y Carvajal, asesorados por Severo Matos 6095 en la condición de secretario de la junta, hicieron conocer su 6096 decisión al público mediante una proclama. En ella declararon 6097 que el General Hilarión Daza quedaba destituido como 6098 Presidente de la República y jefe del ejército, que se sostenía y 6099 ratificaba la alianza con el Perú y que se nombraba al General 6100 Narciso Campero nuevo comandante de las fuerzas bolivianas. 6101 El desarrollo de los acontecimientos fue muy diferente del 6102 programado por los dos autoproclamados líderes de la nación. 6103 6104 Desde el comienzo de la guerra, el General Campero, 6105 cumpliendo órdenes del Presidente Daza, tenía a sus órdenes en 6106 el departamento de Potosí la Quinta División del ejército, 6107 integrado por los batallones "Ayacucho", "Bustillo", "Chorolque" 6108 y "Tarija" y el escuadrón "Méndez" que se formaron con 6109 voluntarios potosinos y tarijeños. 6110 6111 Desde Cotagaita, donde tenía su cuartel general, la división en 6112 obedecimiento a instrucciones de Daza, marchó hasta San 6113 Cristóbal, en 19 penosísimas jornadas. El propósito era que 6114 fuese aproximándose a la cordillera para transmontarla y 6115 descender al litoral donde operaría en combinación con las 6116 tropas aliadas que estaban en Tarapacá al mando del General 6117 Juan Buendía. San Cristóbal era un asiento minero desprovisto 6118 de recursos. En 15 días de permanencia allí la Quinta División 6119 agotó lo que había llevado consigo. Nuevas directivas del 6120 Capitán General la hicieron abandonar ese lugar y caminar 6121 rumbo a Salinas de García Mendoza con vistas a un nuevo plan 6122 bélico. Buendía, el propio Daza y Campero debían juntar a sus 6123 tropas en un punto del departamento de Tarapacá para expulsar 6124 a los chilenos que habían desembarcado en Pisagua. 6125 6126 El avance hasta Salinas de García Mendoza fue tan penoso como 6127 el que se había hecho hasta San Cristóbal. El intenso frío, la 6128 carencia de ropa adecuada y el hambre provocaron varias 6129 muertes. Hubo hasta suicidios por la intensidad del sufrimiento. 6130 Habiéndose salido de San Cristóbal el 6 de noviembre, se llegó a 6131 Salinas de García Mendoza el 29 del mismo mes. Aquí, el 6132 General Campero se enteró del desastre de San Francisco y de 6133 que era ya inútil su ingreso al departamento de Tarapacá, por 6134 jefes, oficiales y tropa que habían tomado parte en aquella 6135 acción y volvían a Bolivia. 6136 6137 Después de 11 días de permanencia en Salinas de García 6138 Mendoza, Campero hizo levantar campo a sus batallones y los 6139 condujo rumbo a Oruro, con intenciones de controlar la 6140 tranquilidad pública que suponía en peligro por los tropas que 6141 defeccionaron de Tarapacá y estaban ingresando a la república 6142 por diferentes puntos. 6143 6144 Habiendo llegado a orillas del lago Poopó, cerca de Huari 6145 (diciembre 16), recibió orden del General Daza de volver al sur 6146 con la misión de ingresar al litoral y "mantener en continuo 6147 jaque a los chilenos". 6148 6149 ¿Estaba enterado Campero de los trajines que se sucedían esos 6150 días en Tacna y La Paz para derrocar a Daza? Probablemente 6151 que sí, pues desde que tomó el comando de la Quinta División 6152 venía siguiendo con vivo interés el creciente descontento contra 6153 el Capitán General y fomentándolo en conversaciones de 6154 carácter político con sus subordinados que le eran más adictos. 6155 6156 Obedeció a regañadientes el mandato de volver al sur con su 6157 fuerza y en nuevas jornadas de penurias la hizo llegar hasta 6158 Tomave. En Tomave le llegó otra orden de Daza. Debía 6159 retroceder hacia Oruro, cruzar el Desaguadero y la cordillera e ir 6160 a reunirse con él en Tacna. Casi simultáneamente con esa orden 6161 recibió dos noticias sensacionales: la autoridad política y militar 6162 del General Daza había sido desconocida una semana antes por 6163 pronunciamientos efectuados el 27 de diciembre en Tacna y La 6164 Paz; en una reunión de notables en Oruro se lo había 6165 proclamado a él Presidente Provisorio de la República y esa 6166 proclamación venía siendo apoyada en otras ciudades. Esta vez 6167 con el corazón anhelante dispuso marchas forzadas de su 6168 división sobre Oruro. 6169 6170 La entrada de la división Campero en la ciudad de Pagador no 6171 fue marcial. No podía serlo, por mucho que lo intentaron sus 6172 componentes. Estaban en el último extremo de agotamiento. 6173 Desde el 11 de octubre en que salieron de Cotagaita hasta el 19 6174 de enero en que ingresaban en Oruro, habían cruzado y 6175 recruzado sectores del altiplano en el más estéril de los 6176 esfuerzos, castigados por el sol, el frío, heladas, lluvias y 6177 granizadas, mal alimentados y pésimamente vestidos. Habían 6178 llegado a ser hasta el hazmerreír de sus compatriotas y ser 6179 apodados de "División Israelita" por aquello de que vagaban en 6180 un desierto. 6181 6182 Solamente dos fracciones de la Quinta División llegaron a 6183 cumplir misiones bélicas. Lo hicieron mientras el grueso de sus 6184 camaradas deambulaba sin sentido en su retaguardia. 6185 El Coronel Rufino Carrasco, con un contingente de 70 jinetes, en 6186 su mayor parte chicheños, se internó en el litoral boliviano por el 6187 paso de Ascotán. Desalojó a tiros a los pocos chilenos que 6188 guarnecían la población de Chiuchiu y avanzó sobre Calama, 6189 pero se vio obligado a replegarse al tener conocimiento de que el 6190 enemigo se preparaba a coparlo. En el lugar llamado Tambillo, 6191 cayó en una emboscada de la que logró zafarse después de 20 6192 minutos de reñido combate en el que salió vencedor tomando 6193 diez prisioneros y recogiendo un botín de 18 rifles, 17 espadas, 6194 26 animales, monturas, vestuario y alimentos. Finalmente 6195 regresó a Cotagaita por San Pedro de Atacama y Toconao. 6196 6197 El Coronel Lino Morales, con la colaboración de los jefes del 6198 mismo grado Juan Bautista Ayoroa, Salvador Villarpando, 6199 Ezequiel Apodaca y Miguel Estenssoro, condujo a un 6200 destacamento hasta el lugar denominado Canchas Blancas por 6201 donde se temía incursiones chilenas hasta el mineral argentífero 6202 de Huanchaca. La emboscada fue esta vez de bolivianos a 6203 chilenos con un resultado completamente desfavorable a los 6204 segundos que perdieron caballada, armamento, munición y 6205 alimentos y dejaron el campo sembrado con sus muertos. 6206 6207 El Coronel Ezequiel Apodaca comentó la acción de esta manera 6208 en su diario: "Eran las ocho de la noche más o menos. Los 6209 jinetes chilenos que llegaron a la aguada, la única en toda la 6210 región, estaban desmontados. En ese momento se dio la orden 6211 de ataque. Se deslizaron silenciosamente los bolivianos, 6212 mientras los indios ganaban la retaguardia del enemigo para 6213 caer sobre sus provisiones. Los chilenos se dispersaron. Los 6214 nuestros siguieron acometiendo. Las contraseñas expresadas en 6215 quechua y términos chapacos hacían que en la oscuridad no 6216 haya confusión entre los nuestros. Los sanlorenzeños del 6217 escuadrón "Méndez" atacaron a machete y cuchillo limpios. Se 6218 escucharon ayes de dolor cuando las armas blancas se hundían 6219 en vientres y gargantas". 6220 6221 6222 XLI 6223 NARCISO CAMPERO, PRESIDENTE PROVISIONAL 6224 6225 La iniciativa de proclamar Presidente Provisional de la República 6226 al General Narciso Campero Leyes en reemplazo del derrocado 6227 General Hilarión Daza, la tomaron en la ciudad de Oruro, el 1° 6228 de enero de 1880, los señores José Ignacio León, Severo 6229 Fernández Alonso, Rodolfo Soria Galvarro y Emeterio Cano, 6230 secundados por el General Manuel Othón Jofré, que hasta días 6231 antes había sido Ministro de Guerra del Presidente Daza y estaba 6232 organizando nuevos batallones con los jefes, oficiales y soldados 6233 que abandonaron el departamento peruano de Tarapacá, 6234 después del desastre de San Francisco, y con reclutas nuevos. 6235 6236 El General Narciso Campero resultaba en esos momentos una 6237 elección lógica. Tenía el prestigio de su capacidad castrense 6238 (ganada en estudios en Europa) y experiencia en la vida pública 6239 desde los tiempos del dictador José María Linares, sumados al 6240 hecho de ser el comandante de la Quinta División, la única 6241 fuerza organizada que existía en el interior del país en las 6242 angustiosas circunstancias de esos días. Sus antiguas 6243 ambiciones personales de alcanzar el mando supremo había 6244 renacido desde que se diera cuenta que la estrella del General 6245 Hilarión Daza empalidecía rápidamente debido a su 6246 comportamiento en Tacna y la contramarcha de Camarones. 6247 6248 Los elementos jóvenes hubieran preferido al Coronel Eliodoro 6249 Camacho, principal autor del golpe de Estado de Tacna, pero la 6250 natural modestia de su carácter, su grado militar inferior y su 6251 inclinación a las ideas liberales, que veían con temor los políticos 6252 conservadores, perjudicaron su caso. 6253 6254 La proclamación de Oruro a favor de Campero se consolidó al ser 6255 seguida por pronunciamientos similares en Cochabamba, 6256 encabezada por los señores Mariano Baptista, José María 6257 Santivañez, Jorge Oblitas, Federico y Cleómedes Blanco, Juan 6258 Prudencio Velarde y otros, y en Sucre, Tarija, Potosí, y algunas 6259 capitales de provincia. 6260 6261 El Coronel Uladislao Silva y el señor Rudecindo Carvajal, que se 6262 habían autoproclamado integrantes de una Junta de Gobierno en 6263 la ciudad de La Paz (como se ha relatado en el capítulo anterior) 6264 quedaron huérfanos de apoyo y se vieron obligados a abandonar 6265 el precario poder que habían asumido cuando un comicio popular 6266 en el que hablaron los señores Agustín Aspiazu, Félix Reyes 6267 Ortiz, Manuel Granier y otros, expresó su apoyo a lo resuelto en 6268 las demás ciudades. 6269 6270 El General Campero, el mismo día de su ingreso en Oruro (19 de 6271 enero de 1880), hizo pública por bando la siguiente declaración: 6272 "Aceptó la comisión provisional que me confiere la patria y 6273 asumo la Presidencia de Bolivia mientras se reúna la Convención 6274 Nacional cuya convocatoria se expedirá en el plazo de 20 días". 6275 En una proclama añadió: "Mi actual cometido habrá terminado el 6276 día en que la soberana asamblea empiece a ejercer sus augustas 6277 funciones y desde ahora, para entonces, retiro mi nombre, sea 6278 de la elección parlamentaria, sea de las ánforas electorales". 6279 6280 El Coronel Uladislao Silva, a quien el General Campero designó 6281 Inspector General del Ejército para consolarlo de haber sido 6282 frustrado como jefe de la nación, aprovechó de su nueva 6283 posición para soliviantar en Viacha a los batallones "Oruro", 6284 "Murillo 2v" y "Bolívar", apresar al General Casto Arguedas y 6285 marchar sobre La Paz para arrebatar a Campero el puesto al que 6286 creía tener mejor derecho. Lo acompañaron en su rebelión los 6287 coroneles José Manuel Guachalla y Federico Matos, y el hermano 6288 de éste, Severo Matos. 6289 6290 La única guarnición de La Paz la constituía el batallón "Victoria", 6291 comandada por el Coronel Juan Granier. Se apostó en las cuatro 6292 esquinas de la Plaza 16 de julio para defender al régimen de 6293 Campero. La superioridad numérica de las tres unidades de Silva 6294 la puso en fuga y dispersión después de un cambio de disparos 6295 que duró 20 minutos y causó 11 muertos y 20 heridos en ambos 6296 bandos. 6297 6298 El General Campero, se retiró a Obrajes y de allí subió al 6299 Altiplano. De Sicasica llamó a las tropas acantonadas en Oruro 6300 (batallones "Tarija", "Grau" y "Chorolque"). 6301 Silva, dueño de La Paz, emitió un decreto que dijo: "La Paz, 12 6302 de marzo de 1880. Considerando que el ejército, de acuerdo al 6303 sentimiento popular manifestado en el sentimiento de una 6304 dirección más conveniente y activa de la guerra, me ha investido 6305 espontáneamente de la suprema autoridad, asumo el mando 6306 supremo provisorio mientras representantes de los distintos 6307 departamentos de la república concurran a esta ciudad a formar 6308 el gobierno nacional". 6309 6310 El agente diplomático del Perú en La Paz, señor José Luis 6311 Quiñones, informó a su gobierno: "El Coronel Silva me ha 6312 mandado a las 9 p.m. de hoy (marzo 12) una persona de su 6313 confianza para manifestarme los deseos que le animan por 6314 conservar buenas relaciones y la alianza entre el Perú y Bolivia. 6315 El mismo Silva me ha dirigido una carta a las 10 p.m. 6316 ratificándome y diciéndome que el día de mañana tendremos 6317 una conferencia para acordar lo más conveniente al envío de 6318 fuerzas a Puno". "La Paz, 13 de marzo de 1880. La conferencia 6319 ha tenido lugar a las 1 p.m. de hoy y en ella el Coronel Silva me 6320 ha dicho con entera franqueza y mucha cordialidad que ha 6321 aceptado el movimiento operado a su favor porque había llegado 6322 a convencerse de que el General Campero, pudiendo hacer 6323 mucho, no había hecho absolutamente nada en favor de la 6324 guerra contra Chile; que, en consecuencia, su único objeto era 6325 probar con hechos positivos sus vehementes deseos de 6326 estrechar la alianza hasta llegar en el menor tiempo posible a la 6327 unificación de ambas repúblicas y hacer a Chile una guerra 6328 pronta y eficaz, hasta conseguir el triunfo; que sin embargo de 6329 que las fuerzas que le obedecen lo habían proclamado Jefe 6330 Supremo, aún no había asumido definitivamente ese cargo, 6331 esperando que la voluntad popular dé a su gobierno la forma 6332 que quiera, porque desea gobernar con el Pueblo y para el 6333 pueblo; que estaba dispuesto a mandar el 19 de los corrientes 6334 las únicas tres unidades que tiene a sus órdenes, para que vayan 6335 a defender el territorio del Perú... Terminó diciendo que 6336 conservaría al Coronel Camacho al mando del ejército de Bolivia, 6337 que está en Tacna... No pude menos que agradecer al coronel 6338 Silva, a nombre de la alianza y del Perú, sus generosos 6339 propósitos. Me he dirigido al Prefecto de Puno, a fin de que dé 6340 órdenes a los vapores "Yapura" y "Yavari" y a algunas otras 6341 embarcaciones, estén listas en Chichilaya el día 19, para 6342 trasladar a Puno a los 1.200 hombres". 6343 6344 El 18 de marzo salieron de La Paz los batallones "Bustillo" y 6345 "Morillo 2". Al día siguiente debía seguirlos el "Bolívar". En el 6346 camino a El Alto, aleccionados por elementos leales a Campero, 6347 se dispersaron en su totalidad. Silva, Guachalla y los Matos, por 6348 segunda vez, se vieron sin apoyo alguno. Huyeron hacia el 6349 puerto de Chichilaya. El ministro peruano que se encontraba allí 6350 para recibir y hacer embarcar a las tropas ofrecidas por Silva, les 6351 ofreció asilo diplomático en el "Yapura", impidiendo que fueran 6352 apresados y devueltos a La Paz. Con ellos lograron también salir 6353 hasta el Perú los otros jefes de su movimiento: el General 6354 Luciano Alcoreza, el Teniente Coronel Escolástico Pimentel y los 6355 mayores Federico Gambarte, Luis Gutiérrez, Juan Castillo y 6356 Enrique Larrea. 6357 6358 Los jefes acantonados en Tacna condenaron públicamente al 6359 Coronel Uladislao Silva y sus cómplices al enterarse del golpe 6360 contra el General Campero. El Coronel Eliodoro Camacho, en 6361 carta al Coronel Silva, le dijo: "Tacna, 16 de marzo de 1880. No 6362 me atrevo a calificar su acción, porque para ello tendría que 6363 emplear una palabra muy dura, cuyo significado infamante no 6364 quiero aplicar a ningún boliviano, pues jamás he creído que 6365 Bolivia contase entre sus hijos ninguno que atentase contra su 6366 sagrada existencia. 6367 Mientras tanto, señor Coronel, permítame preguntarle, ¿ha 6368 pensado usted la enorme responsabilidad que ha echado sobre 6369 sus hombros?... Ha detenido usted el envío de cuatro batallones 6370 a este cuartel general en el momento en que sabía, por mis 6371 reiterados oficios, lo urgente lo preciso, que era su venida para 6372 hacer frente al enemigo ocupando Moquegua nos ha cortado 6373 recursos del norte, sin los que no puede existir el ejército 6374 peruano que acompaña en este departamento al boliviano. 6375 ¿Cómo se llama, señor coronel, el que promueve la anarquía 6376 interna en los momentos supremos en que su patria se halla 6377 comprometida en una guerra nacional?... ¡Ah!, he roto mi pluma 6378 antes que escribir esa palabra que suele manchar la frente del 6379 hombre con el hierro del eterno oprobio; que no puedo usarla 6380 como calificativo del militar a quien alguna vez llamé 6381 compañero". 6382 6383 6384 XLII 6385 PREPARATIVOS PARA LA GRAN BATALLA 6386 6387 Una vez en posesión del departamento peruano de Tarapacá y 6388 en vista de que los aliados no se consideraban todavía 6389 derrotados, Chile decidió quedarse como dueño perpetuo de ese 6390 territorio como compensación mínima por sus gastos de guerra y 6391 proseguir la campaña llegando, si fuese necesario, hasta la 6392 misma capital del Perú, a fin de imponer una paz de vencedor 6393 absoluto. 6394 6395 Empero, para operar sobre Lima resultaba indispensable liquidar 6396 previamente a las fuerzas aliadas que estaban en Arica y Tacna. 6397 En Arica, los contingentes peruanos que abandonaron Tarapacá. 6398 En Tacna los batallones bolivianos que, desde el derrocamiento 6399 del General Hilarión Daza, obedecían al Coronel Eliodoro 6400 Camacho. 6401 6402 El ejército chileno tenía dos posibilidades para ir al encuentro de 6403 los aliados. La primera, por tierra, avanzando desde Tarapacá y 6404 pasando por Camarones. La segunda, por mar, desembarcando 6405 al norte de Tacna, en el departamento de Moquegua. 6406 6407 Se eligió la segunda alternativa. El 29 de diciembre (1879), se 6408 embarcaron en Pisagua los destacamentos y a los pocos días 6409 desembarcaron en Ilo, sin encontrar resistencia alguna. La 6410 caballería penetró hasta la misma capital del departamento, el 6411 pueblo de Moquegua, donde se cometieron muchos abusos con 6412 la población civil al calor del vino y otras bebidas alcohólicas 6413 producidas en la región que se libaron sin tasa. 6414 6415 El único intento del Perú para oponerse a la ocupación de una 6416 nueva parte de su territorio estuvo a cargo del Coronel Andrés 6417 Gamarra (hijo del Presidente Agustín Gamarra, que invadió 6418 Bolivia dos veces y murió en la batalla de Ingavi). Con tropas 6419 bajo su mando sostuvo un combate con los chilenos el 22 de 6420 marzo (1880) en la cuesta de Los Ángeles. Se vio obligado a 6421 replegarse rápidamente hasta Tolata ante la superioridad 6422 numérica de sus enemigos (4.000 combatientes) que lo semi 6423 rodearon con infantería, caballería y artillería. 6424 6425 Hubo un cambio en la jefatura del ejército chileno. El viejo 6426 General Erasmo Escala fue substituido por el General Manuel 6427 Baquedano, de 60 años, con fama de tonto, pero enérgico, 6428 organizador y una larga hoja de servicio que se iniciaron en la 6429 batalla de Yungay, cuando tenía 17 años y actuó como alférez a 6430 las órdenes de su padre. Acababa de obtener el triunfo de Los 6431 Ángeles. 6432 6433 Los chilenos creían que los aliados irían a buscarlos al 6434 departamento de Moquegua. Su inacción hizo exclamar a. uno 6435 de los ministros del gobierno de Santiago, el señor José Antonio 6436 Gandarillas: "Va a cumplirse un mes de estada en Ilo y todavía 6437 no se hila nada". 6438 6439 En el comando aliado disputaban la estrategia a seguirse dos 6440 opiniones contrapuestas. La del Contralmirante Lizardo Montero, 6441 jefe de los peruanos del sur, que por órdenes terminantes del 6442 dictador Nicolás de Piérola, se negaba a que se abandonasen las 6443 plazas de Tacna y Arica, y la del Coronel Eliodoro Camacho, que 6444 abogaba porque se avanzase hasta el valle de Sama, rico en 6445 recursos, para atraer allí al enemigo y darle la batalla a orillas 6446 del río del mismo nombre. 6447 6448 Los chilenos para llegar hasta Tacna o los aliados para alcanzar 6449 Sama debían cruzar un desierto. Sólo podía hacerlo el ejército 6450 que dispusiese de los elementos necesarios de transporte, más o 6451 menos 1.600 mulas que cargasen con los pertrechos bélicos, los 6452 víveres y el forraje. 6453 Montero contaba con el apoyo de todos los jefes de su misma 6454 nacionalidad. Por su parte, los jefes bolivianos (con excepción 6455 del Coronel Miguel Castro Pinto), secundaban a Camacho. La 6456 división de criterios, expresada en discusiones que por 6457 momentos adquirían un tono agrio y acalorado, ponía en peligro 6458 la solidez de la alianza. 6459 6460 Al enterarse de ello, el Presidente Provisional de Bolivia, General 6461 Narciso Campero, acogiendo una sugerencia del representante 6462 diplomático del Perú en La Paz, señor José Enrique Bustamante y 6463 Salazar, y obedeciendo a uno de los súbitos impulsos que eran 6464 característica de su temperamento, viajó sorpresivamente hasta 6465 Tacna y tomó el comando de todas las fuerzas aliadas. Montero 6466 informó a Piérola: "Di parte a usted de la inesperada llegada del 6467 General Campero. Lo hice reconocer como Supremo Director de 6468 la Guerra y nuestras relaciones oficiales y particulares se 6469 cultivan ' desde ese día de la manera más estrecha y sincera. 6470 Sobre él pesa, pues, toda la responsabilidad respecto a las 6471 operaciones militares, y como la moral es la base fundamental 6472 para el buen éxito de éstas, me concretaré a obedecer 6473 ciegamente las órdenes que me sean comunicadas". 6474 6475 Por la comunicación transcrita se puede colegir el gran alivio que 6476 sintió el Contralmirante Montero al librarse de las 6477 responsabilidades de ser comandante del ejército aliado en la 6478 batalla que, según todas las perspectivas, iba a ser la más 6479 importante de la guerra. Para ello debió influir su carácter y el 6480 hecho de que el dictador Piérola, de quien había sido rival 6481 político años antes, le venía regateando el envío de refuerzos 6482 humanos y materiales que tanto se necesitaban en el sur. 6483 6484 El General Narciso Campero hubiera querido imponer la táctica 6485 aconsejada por el Coronel Camacho, de ir al encuentro de los 6486 chilenos en Sama, pero luego de un intento de marcha con ese 6487 rumbo, se comprobó que no se contaba con medios de 6488 transporte suficientes. Resolvió que el ejército aliado esperase al 6489 enemigo en la meseta de Intiorco, a 8 kilómetros al norte de la 6490 ciudad de Tacna, 'que se bautizó con el nombre de "Alto de la 6491 Alianza". 6492 6493 El ejército boliviano de Tacna aumentó sus efectivos con la 6494 Quinta División o lo que quedaba de ella después de las inútiles 6495 marchas en el altiplano y la dispersión provocada por la 6496 subversión del Coronel Uladislao Silva (Capítulos XL y XLI). Se 6497 trataba de los batallones "Tarija" y "Chorolque" y de los jinetes 6498 del escuadrón "Méndez". No existían ya los batallones "Bustillo" 6499 y "Ayacucho". Los reemplazaba el batallón "Grau", 6500 recientemente formado en Cochabamba. 6501 6502 La espera en el "Alto de la Alianza" se aprovechó con ejercicios 6503 de ataque y defensa. El batallón "Colorados" llamó la atención 6504 por la rapidez y precisión de sus despliegues. Hizo gala de su 6505 habilidad en la formación de "cuadros". Los jefes peruanos se 6506 burlaron de una táctica tan antigua, que hicieran famosa los 6507 infantes ingleses para defenderse de la caballería francesa en la 6508 batalla de Waterloo, 65 años antes. 6509 6510 Mientras tanto, el ejército chileno había recibido todas las mulas 6511 y recursos que necesitaba. La artillería se desembarcó más cerca 6512 de Tacna, en el puerto de Ilo. El 20 de mayo (1880), todas las 6513 unidades se concentraron en Yaras, a orillas del río Sama. El 6514 General Baquedano dispuso una excursión de reconocimiento de 6515 las posiciones aliadas y de lo que sería el campo de batalla. El 6516 22, salió de Yaras con todos los jefes y oficiales de su fuerza, 6517 además de algunos clases y soldados seleccionados, un total de 6518 mil personas montadas. Los soldados de infantería iban en la 6519 grupa de los de caballería. Se llevó también dos piezas de 6520 artillería de campaña. Llegados todos a distancia prudencial del 6521 "Alto de la Alianza", se pusieron a observar las posiciones aliadas 6522 en la meseta de Intiorco y la gran planicie que tenían delante. 6523 Las dos piezas de artillería dispararon a fin de provocar un 6524 cambio de fuegos y medir el alcance de los proyectiles propios y 6525 los del adversario. 6526 6527 En el campamento peruano-boliviano se produjo gran excitación 6528 ante la desafiante presencia chilena. Por un momento se creyó 6529 que ese día iba a comenzar la batalla y se tomaron 6530 apresuradamente medidas de apronte. Mas luego se vio que los 6531 jinetes enemigos, después de acercarse un poco más por los 6532 costados de la derecha y la izquierda, desaparecían por donde 6533 habían venido. De todos modos, desde ese momento se 6534 permaneció en anhelante expectativa. Las manecillas del reloj 6535 del destino estaban próximas a marcar la hora decisiva de la 6536 guerra. 6537 6538 6539 XLIII 6540 LA BATALLA DE TACNA O DEL ALTO DE LA ALIANZA 6541 6542 El "Alto de la Alianza", originalmente meseta de Intiorco, donde 6543 acampó el ejército boliviano-peruano desde el 11 de mayo hasta 6544 el 26 del mismo mes (188), ha dado su nombre, indebidamente, 6545 a la batalla más cruenta de la Guerra del Pacífico. La acción no 6546 se realizó en la meseta misma, sino en el llano o arenal 6547 extendido delante de ella. Por eso, es más propio denominarla 6548 "Batalla de Tacna", pues fue en defensa de la ciudad peruana de 6549 Tacna, ubicada 8 kilómetros detrás, que se produjo la gran 6550 sangría de los dos ejércitos combatientes. 6551 6552 Desde el reconocimiento del campo de batalla efectuado por el 6553 General Manuel Baquedano y toda su oficialidad el 22 de mayo, 6554 el comando del General Narciso Campero esperaba momento a 6555 momento la aparición del ejército enemigo. 6556 6557 El día 25, un grupo de la caballería peruana en misión de 6558 vigilancia, sorprendió a cinco arrieros que en 50 mulas 6559 transportaban odres con agua. Tres de los hombres lograron 6560 escapar, pero los otros dos fueron hechos prisioneros. Llevados 6561 al campamento del Alto de la Alianza, confesaron que el líquido 6562 era para el ejército chileno que estaba saliendo de Yaras y debía 6563 pasar esa noche por Quebrada Honda, a 11 kilómetros de la 6564 meseta de Intiorco, con intenciones de dar la batalla al día 6565 siguiente. Declararon también que la fuerza chilena se componía 6566 de unos 22.000 combatientes. 6567 6568 Esta cifra representaba el doble del efectivo aliado. En la reunión 6569 convocada por el General Campero, uno de los jefes opinó que la 6570 mejor forma de contrarrestar la superioridad numérica del 6571 adversario era sorprenderlo mientras descansaba en Quebrada 6572 Honda. El General Campero y todos los demás acogieron la idea 6573 con el mayor entusiasmo. Se impartieron de inmediato las 6574 órdenes consiguientes. Seis horas más tarde, a las 12 de la 6575 noche, los batallones de la alianza salieron de sus posiciones y 6576 divididos en tres columnas paralelas avanzaron por el arenal. 6577 6578 La oscuridad, agravada por la "camanchaca" o niebla del 6579 desierto, desorientó a los guías. Las unidades de la columna de 6580 la derecha se entremezclaron con las del centro, produciéndose 6581 gran confusión. Campero dispuso el retorno al Alto de la Alianza. 6582 Fogatas encendidas en la meseta sirvieron de faros para guiar el 6583 movimiento retrógrado. La columna de la izquierda, que no pudo 6584 ser encontrada por el oficial que llevaba la orden de 6585 contramarcha, siguió su avance y fue recibida con disparos de 6586 los centinelas chilenos apostados al borde de Quebrada Honda. 6587 Ignorante de la suerte de las otras dos, tuvo que permanecer 6588 quieta y en silencio en el lugar alcanzado. Al amanecer del 26, 6589 dándose cuenta de su soledad en las proximidades del enemigo, 6590 volvió precipitadamente hacia Intiorco, hostigada con disparos 6591 de la artillería chilena. 6592 6593 Los integrantes del ejército chileno recibieron la bendición de su 6594 capellán general con una rodilla en tierra y salieron de su 6595 campamento a los acordes del himno nacional de su patria y la 6596 canción de Yungay. Sumaban un total de 19.000 combatientes. 6597 El dato de los arrieros había sido un tanto exagerado. De todos 6598 modos, eran muy superiores numéricamente al ejército aliado 6599 que sólo tenía 12.000 (6.500 peruanos y 5.500 bolivianos). 6600 6601 Peruanos y bolivianos tuvieron que aprestarse a la lucha sin 6602 haber dormido nada. Solamente algunos jefes, entre ellos el 6603 General Campero, pudieron tomar un brevísimo descanso, 6604 después de la falsa maniobra de la noche. 6605 6606 Los peruanos recibieron un poco de desayuno en sus cocinas. 6607 Los bolivianos ocuparon sus posiciones de combate sin refrigerio 6608 alguno, salvo uno que otro a cuyo lado pudo llegar su esposa o 6609 amante con algo de alimento. 6610 6611 El Subteniente Daniel Ballivián, del batallón "Colorados", recordó 6612 en su diario: "Las bombas de la artillería chilena pasaban 6613 zumbando por encima de nuestras cabezas para sepultarse en la 6614 arena muchos metros detrás. La tropa se lanzaba al suelo al 6615 sentir la llegada de los proyectiles y volvía a levantarse lanzando 6616 vivas burlándose de la mala puntería del enemigo. Las bandas 6617 de música contribuían a mantener el buen humor llenando el 6618 aire con sus dianas y bailecitos". 6619 6620 La artillería aliada estaba ubicada delante de los infantes, al 6621 borde de la meseta que enfrentaba el enemigo. Su misión era 6622 diezmar a los chilenos mientras se aproximaban, para que, en 6623 seguida los batallones de infantería saliesen a su encuentro a 6624 definir la contienda con sus fusiles y bayonetas. 6625 6626 Muy escasas tenían que ser las posibilidades de victoria de 6627 quienes, obedeciendo a órdenes de una estrategia errónea, 6628 abandonaban la ventajosa posesión de la meseta de Intiorco y 6629 salían a pelear en la pampa contra un adversario superior en 6630 número y en potencial de fuego; de quienes habían pasado la 6631 noche en vela, en una marcha y contramarcha absurdas y cuya 6632 mitad tenía el estómago vacío desde el día anterior. 6633 6634 El diálogo de los cañones duró desde las 9 hasta las 11 de la 6635 mañana, con muy pocos efectos en uno y otro campo. La 6636 mayoría de los proyectiles se enterraban en la blanda arena sin 6637 estallar. A las 11, la vanguardia de la Primera División chilena 6638 cambió disparos iniciales con la vanguardia aliada que estaba 6639 delante de la meseta, en el costado izquierdo. Conforme la 6640 Segunda y Tercera divisiones chilenas se fueron aproximando a 6641 sus objetivos, el centro y la derecha de los aliados, el combate 6642 se generalizó con creciente intensidad. 6643 6644 El batallón "Sucre" se cubrió de gloria en el ala izquierda 6645 cargando sobre el enemigo con singular denuedo y haciéndolo 6646 retroceder profundamente. Pero su heroísmo le costó caro. De 6647 los 503 combatientes de la chaqueta amarilla, 205 cayeron 6648 muertos y 178 heridos, ¡el 80 por ciento de su efectivo! 6649 6650 Mediante un contraataque, los chilenos recuperaron el terreno 6651 perdido y semi rodearon al batallón boliviano "Viedma", que 6652 retrocedió desordenadamente, arrastrando consigo al batallón 6653 "Victoria", del Perú. El ala izquierda se sostuvo precariamente 6654 por la reciedumbre con que entraron a la refriega el batallón 6655 peruano "Huáscar" y el boliviano "Tarija". 6656 6657 En el centro los batallones peruanos "Zepita", "Cazadores del 6658 Misti" y "Arica" rivalizaron en bizarría con los bolivianos "Padilla" 6659 y "Chorolque". En ciertos momentos, callaron los fusiles y 6660 actuaron las bayonetas. 6661 6662 La aproximación chilena al ala derecha fue más cautelosa. Los 6663 aliados tenían allí un reducto formado con sacos de arena como 6664 protección para piezas de artillería. La lucha en este sector 6665 también adquirió gran ferocidad. El desangre de ambos 6666 contendientes fue tan abundoso como en el centro y el ala 6667 izquierda. 6668 6669 A la una de la tarde, el Coronel Eliodoro Camacho, que 6670 comandaba el costado izquierdo, hizo pedir al General Campero 6671 que le mandase a los batallones "Colorados" y "Aroma", que 6672 constituían la única reserva, en vista de que los chilenos se 6673 habían aproximado a la meseta y trataban de rebasarla 6674 poniendo en peligro todo el dispositivo aliado. 6675 6676 Los dos batallones de la chaqueta roja, que estaban detrás del 6677 reducto de la artillería en el ala derecha y que durante tres horas 6678 habían esperado ansiosamente que se les diera la orden de 6679 participar en la batalla, cruzaron al trote el campamento del 6680 "Alto de la Alianza" e ingresaron a la planicie por el extremo 6681 izquierdo con ímpetu incontenible. 6682 Los chilenos tuvieron que ceder el campo que habían ganado en 6683 las dos horas precedentes. "Colorados" y "Aromas" llegaron 6684 hasta varias piezas de artillería aproximadas por el enemigo en 6685 ese costado y tomaron posesión de 6 cañones Krupp. El Coronel 6686 Ildefonso Murguía, que comandaba a las dos unidades, ordenó 6687 que se dejasen de lado los trofeos y se prosiguiese la maniobra. 6688 6689 El General Baquedano, a fin de detener la profunda incrustación 6690 enemiga en sus filas, dispuso que fuera contrarrestada por una 6691 carga de los 500 jinetes del Comandante Tomás Yávar. El 6692 batallón "Colorados" al ver aproximarse la furiosa cabalgata 6693 contraria, con pasmosa rapidez y disciplina, obedeciendo a 6694 órdenes de Murguía, formó "cuadros" con frente de lucha a los 6695 cuatro puntos cardinales, para evitar ser copado. Los seis 6696 "cuadros", con una primera línea de tiradores con una rodilla en 6697 tierra y una segunda, inmediatamente detrás, de pie, detuvieron 6698 a los granaderos de Yávar con una infranqueable barrera de 6699 proyectiles. Los jinetes tuvieron que voltear cara y huir. 6700 "Colorados" y "Aromas" volvieron a desplegarse en líneas de 6701 combate y siguieron su avance a paso de vencedores. 6702 6703 Baquedano les opuso las tropas frescas de su Cuarta División. 6704 Los infantes de la chaqueta roja, con sus efectivos diezmados, 6705 su munición a punto de agotarse y sus energías físicas 6706 exhaustas, retrocedieron combatiendo para no caer en poder del 6707 enemigo. Su retroceso coincidió con igual situación en el centro 6708 y costado derecho de los aliados. No se tenía un solo soldado 6709 más de reserva. En el campo chileno el General Baquedano 6710 contaba todavía con 4.000 soldados que no habían participado 6711 en la acción. 6712 6713 A partir de las dos y media de la tarde, los tres sectores del 6714 ejército peruano-boliviano fueron claudicando sucesivamente. 6715 Sus bajas pasaban de 2.000 incluyendo una gran proporción de 6716 jefes y oficiales. No hubo pánico ni desorden. Quienes quedaban 6717 en pie abandonaron el Campo de Marte y el Alto de la Alianza, 6718 junto con su comandante, el General Narciso Campero y su 6719 Estado Mayor, calmosamente, con sus cuerpos desfallecidos y 6720 sus corazones ahítos de amargura y dolor. 6721 6722 6723 XLIV 6724 LA CAÍDA DE TACNA Y ARICA EN PODER DE CHILE 6725 6726 El cuadro que presentaba Tacna con los combatientes peruanos y 6727 bolivianos que acababan de ser derrotados en la batalla del 26 6728 de mayo de 1880 y buscaban en la ciudad un pasajero alivio a 6729 su cansancio y sus heridas, antes de proseguir su retirada para 6730 no caer en manos chilenas, era patético en extremo. 6731 6732 Según testimonio de uno de los participantes, el capitán 6733 argentino Florencio del Mármol (adscrito al ejército boliviano): 6734 "La plaza de armas y la calle Comercio estaban repletas de 6735 soldados, ofíciales y jefes de todos los cuerpos bolivianos y 6736 peruanos, en la mayor confusión, cubiertos de polvo, bañados en 6737 sudor, muchos ensangrentados. Jinetes, infantes y artilleros, 6738 fusiles, espadas y lanzas, todo mezclado. En las aceras se 6739 vendaban heridas, mientras que en las puertas de las casas se 6740 ofrecía agua, refrescos, cerveza. Por todas partes se oía el llanto 6741 de las mujeres tacneñas y sus voces de recriminación a los 6742 bolivianos, a quienes acusaban de ser los únicos culpables del 6743 desastre". 6744 6745 Con esta última actitud, los bolivianos sufrían la más tremenda 6746 de las injusticias. Habían peleado, en defensa de territorio 6747 peruano, como bravos, con tanto coraje con sus aliados, 6748 sufriendo más de dos mil bajas, casi la mitad de todo su 6749 efectivo. Las penetraciones más profundas contra las líneas 6750 enemigas las habían hecho tres de sus batallones: "Sucre", 6751 "Aroma" y "Colorados". Entre sus pérdidas figuraban sus jefes 6752 más queridos: el General Juan José Pérez, el Coronel Eliodoro 6753 Camacho y el Teniente Coronel Felipe Ravelo. 6754 6755 El soldado del batallón "Murillo", Flavio Machicado, relató en otro 6756 testimonio: "A las cuatro de la tarde, Tacna había sufrido una 6757 transformación completa. Las calles estaban vacías. 6758 Herméticamente cerradas todas las puertas y ventanas. Apenas 6759 se veía cruzar uno que otro militar agitado por su retraso y a 6760 alguna que otra infeliz familia que iba en busca de asilo en uno 6761 de los consulados o que huía a los campos inmediatos llevando 6762 niños de corta edad, utensilios de cocina y prendas de ropa". 6763 Tacna esperaba el ingreso del chileno vencedor sobrecogida de 6764 terror. 6765 6766 El General Manuel Baquedano prohibió la entrada a la ciudad del 6767 grueso de su ejército. Lo hizo acampar en las proximidades. 6768 Únicamente autorizó el ingreso de un destacamento escogido de 6769 caballería, pero en el curso de la noche unos 200 infantes 6770 lograron infiltrarse y cometieron toda clase de atropellos. 6771 Amagos de incendio, fractura de puertas y ventanas, violación 6772 de mujeres, victimazación de hombres indefensos y robo de toda 6773 clase de objetos se sucedieron en diferentes sectores. 6774 6775 "El 27 —dice también Machicado—, la ciudad parecía un panteón 6776 por su tristeza. La calle del Prado, la 2 de Mayo, la Caramolle y 6777 las contiguas a ellas, habían sido teatro de los principales 6778 abusos. Se veía soldados chilenos, luciendo el botín conseguido, 6779 con desafiante desparpajo: productos vegetales, enaguas de 6780 mujer, alhajas, utensilios de cocina, etc. Las cantineras 6781 lujosamente ataviadas con los vestidos asaltados, los ostentaban 6782 con singular cinismo...". 6783 6784 El señor Manuel V. Alba, describió en su diario lo que fueron las 6785 primeras etapas del retorno de los combatientes bolivianos a su 6786 patria. "Todos comenzamos a huir del Alto de la Alianza por 6787 distintas rutas. En el trayecto se veía la mayor confusión. 6788 Familias peruanas que abandonaban sus casas llorando, 6789 conduciendo lo que podían en animales y en hombros. Padres de 6790 familia con sus hijas por delante. En la parte de arriba se 6791 observaba multitud de grupos por todos los caminos... Llegamos 6792 a San Francisco de noche. No encontramos sino cuartos vacíos. 6793 Todos los habitantes del lugar habían escapado. Seguimos 6794 avanzando en el mayor silencio. Nadie conversaba. Después de 6795 un largo descanso, seguimos. A las 2 ó 3 de la madrugada, 6796 atormentados por el frío, alcanzamos la altiplanicie de Paica. 6797 Toda la plazuela estaba llena de soldados que sin más abrigo que 6798 sus capotes y otros sin él, dormían profundamente, apretados 6799 los unos contra los otros. Caballos y mulas ambulaban por 6800 doquier. Continuamos adelante. Divisamos una habitación con 6801 luz a la derecha del camino. Nos aproximamos con el Coronel 6802 Lazarte. Bajé del animal y entré. La habitación estaba llena de 6803 humo. Distinguí al Coronel Balza que soplaba tratando de 6804 encender una fogata. A su derecha otros jefes. En un rincón 6805 distinguí una figura con los pies tapados con una manta, sentada 6806 sobre un montón de piedras, con el kepis inclinado sobre los 6807 ojos. Era el General Campero... Hicimos abrir una habitación 6808 contigua y le rogamos que se trasladara allí a descansar... A las 6809 8 de la mañana todos seguimos hacia Yarapalca, donde Campero 6810 quiso reorganizar las fuerzas. Se destacaron comisiones para ir a 6811 reunir a los dispersos. Se pasó nota a las autoridades fronterizas 6812 de Bolivia para que atajaran a los soldados y recogieran su 6813 armamento y municiones. Se repartió maíz, charque y harina a 6814 la tropa... El sábado 29, la gente se inquietó. Todos querían 6815 volver a Bolivia. Se dio la orden de marcha. Un grupo del 6816 batallón "Colorados" iba a la cabeza. El "Grau" cerraba la 6817 retaguardia. El camino estaba sembrado de dispersos. Llegamos 6818 al paso del Tacora. Entramos al suelo patrio muy tristes". 6819 6820 Para concluir su campaña en el sur del Perú, el ejército chileno 6821 necesitaba conquistar Arica. El Coronel Francisco Bolognesi, por 6822 orden del dictador Nicolás de Piérola, en vez de ir con su fuerza 6823 a juntarse al ejército del General Campero, para la batalla de 6824 Tacna, se mantenía en el puerto en actitud defensiva. Piérola 6825 había dispuesto que Tacna y Arica se defendiesen por separado, 6826 no obstante que esto hacía más segura su caída. Quería ganar 6827 tiempo para los preparativos en defensa de la capital de la 6828 república, suprema preocupación de su gobierno. 6829 6830 El General Baquedano hizo bombardear Arica, por mar y tierra el 6831 5 de junio (1880). Creyendo que con ello había demostrado a los 6832 2.000 defensores la fatalidad de su suerte, les mandó un 6833 parlamentario para instarlos a la rendición. La respuesta fue una 6834 rotunda negativa. El 6, repitió el bombardeo y el envío de otro 6835 mensajero. Bolognesi le hizo contestar esta vez: "Tengo deberes 6836 sagrados. Los cumpliré hasta quemar el último cartucho". 6837 Baquedano ordenó al Coronel Pedro Lagos tomar Arica por asalto 6838 con una división. 6839 6840 El puerto estaba artillado y sembrado de minas en varios puntos. 6841 El Morro, un alto promontorio natural, ubicado al borde del radio 6842 urbano, con tres costados casi verticales y uno solo accesible, 6843 tenía cañones de largo alcance, y obras defensivas en la meseta 6844 de su cumbre. En colinas aledañas se tenían las fortificaciones 6845 denominadas "Ciudadela" y "Este". Existían otras tres 6846 fortificaciones en el otro extremo de la ciudad. 6847 6848 Al amanecer del 7 de junio, las tropas de Lagos se lanzaron 6849 violentamente sobre los puestos defensivos, a los que se habían 6850 aproximado sigilosamente durante toda la noche. La rapidez y 6851 audacia de su acción obtuvo como primer éxito la ocupación de 6852 la "Ciudadela". Cuando los chilenos tomaban posesión del lugar, 6853 explotó la mina subterránea, haciendo volar a muchos en 6854 pedazos. Por efecto de este incidente, la belicosidad de los 6855 atacantes se transformó en ferocidad, en un ciego apetito de 6856 venganza. Hasta un historiador chileno, Benjamín Vicuña 6857 Mackenna, reconoce que desde ese momento sus compatriotas 6858 se comportaron "como lobos enfurecidos sobre un arremolinado 6859 rebaño, sin que hubiera fuerza humana que pudiera 6860 contenerlos". 6861 6862 La fortaleza "Este" también cayó en poder de los chilenos, así 6863 como las fortificaciones del otro extremo de la ciudad. Se sacó a 6864 decenas de refugiados en la iglesia y se los fusiló en la plaza. 6865 Los últimos defensores se replegaron sobre el Morro, junto a sus 6866 jefes Francisco Bolognesi, Alfonso Ugarte, Armando Blondel, 6867 Guillermo Moore y el voluntario argentino Roque Saenz Peña 6868 (que más tarde fue presidente de su país). 6869 6870 Los soldados chilenos llegaron hasta la meseta sembrando su 6871 camino de subida de cadáveres enemigos. Sus oficiales, al darse 6872 cuenta de que los pocos sobrevivientes ya no combatían y que la 6873 victoria estaba consolidada, ordenaron suspender los fuegos y 6874 cuchilladas. No fueron obedecidos. Siguió la matanza y cayeron 6875 víctima de ella Bolognesi y sus acompañantes. Saenz Peña salvó 6876 su vida por no ser peruano, más fue brutalmente golpeado y 6877 tomado prisionero. 6878 6879 Alfonso Ugarte, el acaudalado joven tarapaqueño, prefirió 6880 encontrar la muerte por sí mismo. Montado en su caballo, clavó 6881 las espuelas en los flancos del noble bruto y se lanzo con él 6882 desde el Morro al océano, en un gran salto a la inmortalidad, 6883 para ponerse al lado del epónimo Miguel Grau. 6884 6885 6886 XLV 6887 EL VIA CRUCIS DE LOS VENCIDOS 6888 6889 De los bolivianos vencidos en la batalla de Tacna, 800 de los que 6890 estaban en mejores condiciones físicas, llegaron a La Paz, y 600 6891 a Oruro, en los primeros días de junio (1880). 6892 6893 Los agotados y heridos y la mayoría de las rabonas (mujeres que 6894 en esos tiempos acompañaban a los soldados en todos los 6895 azares de sus marchas y campañas), volvieron también al solar 6896 patrio, pero de manera más penosa y sumamente lenta. Al 6897 conocerse esto en La Paz se destacó una comisión de médicos, 6898 enfermeros y sacerdotes a prestarles socorro. Dijo el informe del 6899 jefe de la misión, doctor Manuel B. Mariaca: "Salimos de La Paz 6900 el 4 de junio. Los primeros heridos se encontraron en Coniri. En 6901 Zacara hallamos a 100 soldados de distintos cuerpos y a algunos 6902 oficiales. Había varios enfermos y heridos, siendo los más graves 6903 el sargento Juan Camacho de los "Colorados" y otros dos del 6904 "Loa". Entre Zacara y San Andrés estaban muchos dispersos que 6905 venían en grupos. Su número no bajaba de otros 100. En San 6906 Andrés, igualmente, existía otro campamento de rezagados, con 6907 mayor número de heridos. Desde San Andrés aumentaban los 6908 dispersos y la mayor parte avanzaban enfermos. En Santiago 6909 encontramos' dispersos peruanos en el peor estado de miseria y 6910 desnudez. En Chulluncayani todos enfermos y en lamentable 6911 condición. Muchos no habían comido hacía días. Unos en estado 6912 de inanición, otros de disentería. Estaban desnudos y sin cama. 6913 Parecían pordioseros. Los reunimos en dos habitaciones junto 6914 con las mujeres que los acompañaban. Entre ellos uno tenía la 6915 pierna fracturada y era ayudado por su mujer con la mayor 6916 dificultad. Todo el trayecto de Chulluncayani adelante estaba 6917 cubierto por grupos de soldados bolivianos y peruanos que ya no 6918 podían caminar. Antes de llegar al Mauri salieron a nuestro 6919 encuentro una multitud de hombres y mujeres implorando 6920 caridad. Estaban tan desesperados por el hambre que se 6921 arrebataban entre ellos el pan que recibían. Sus fisonomías 6922 enjutas expresaban los tormentos que habían pasado en el 6923 desierto, sin alimento ni abrigo. El camino seguía lleno de 6924 desgraciados. En Tacora varios dispersos en muy mal estado. Un 6925 soldado del "Aroma" apenas pudo recibir la absolución de uno de 6926 nuestros sacerdotes. Murieron también un soldado llamado José 6927 Zeballos y una mujer". 6928 6929 Llegada la comisión a Tacna, obtuvo autorización de las 6930 autoridades chilenas de ocupación para llevar a Bolivia a los 6931 muchos heridos que se encontraban en la ciudad. El periódico "El 6932 Eco" describió: "El lunes, a la caída del sol, han partido para su 6933 patria. Son 600 almas. Allí van confundidos y entremezclados 6934 con los borricos de la carga hombres, mujeres y niños, sanitarios 6935 con sus blancas casacas de jerga, mutilados y heridos con 6936 casacas rojas, amarillas y verdes y rabonas. Es toda una 6937 procesión de vendas, muletas, báculos y polleras. La caravana 6938 hizo un descanso en Pachia. Más allá estaba la cordillera, la 6939 soledad, el frío, el soroche, las intemperies... ". 6940 6941 En su camino de retorno a Bolivia, el General Narciso Campero, 6942 el 27 de mayo, desde Yarapalca, escribió al Presidente de la 6943 Convención Nacional que se reunía en La Paz: "Señor: El día de 6944 ayer en una meseta situada a dos leguas de Tacna, camino de 6945 Sama, después de reñido y sangriento combate de cuatro horas, 6946 fue deshecho el ejército aliado de mi mando. Hubo momentos en 6947 los que la victoria parecía balancearse, mas, la gran superioridad 6948 del enemigo, en número, calidad de armamentos y demás 6949 elementos bélicos, hizo inútiles todas mis disposiciones y los 6950 esfuerzos de los bravos defensores de la alianza...". 6951 6952 Campero volvía a Bolivia seguro de convertirse en la víctima 6953 propiciatoria de la vindicta pública. Dijo a un amigo: "Ahora las 6954 dos naciones, Bolivia y Perú, se abrumarán mutuamente con 6955 recriminaciones. Se levantarán pasiones mezquinas en contra 6956 mía y no se me hará justicia". 6957 6958 Estaba completamente equivocado. Bolivia y Perú, en vez de 6959 recriminarse, iban a firmar un tratado uniéndose como una sola 6960 nación. La Convención Nacional, en vez de someterlo a un juicio 6961 de responsabilidades, le otorgó el más alto honor al que puede 6962 aspirar un ciudadano. Lo eligió Presidente Constitucional de la 6963 República, confirmándolo por cuatro años en el puesto que había 6964 desempeñado provisionalmente hasta unos días antes. Cuatro 6965 miembros del Poder Legislativo, los señores Fernando Eloy 6966 Guachalla, Pastor Sainz, Emilio Fernández Costas y Melchor 6967 Chavarría, salieron a su encuentro hasta Corocoro y le 6968 entregaron un mensaje del Presidente de la Convención que 6969 decía así: "Señor: La Convención ha oído la lectura de su oficio 6970 de Yarapalca... En un momento de prueba tan supremo, el 6971 pueblo boliviano se muestra digno y resignado ante la desgracia, 6972 sin perder la esperanza de recobrar el territorio perdido con 6973 nuevos y más grandes esfuerzos de patriotismo. Justo para los 6974 defensores de la patria, les conserva su confianza. En cuanto a 6975 la persona de usted, la elección de Presidente de la República, 6976 que ha recaído en ella, después de conocida la noticia del 6977 desastre, y el voto de confianza que acaba de reiterar la 6978 Convención Nacional, son los testimonios más solemnes de que 6979 Bolivia reconoce que ha cumplido con su deber". 6980 6981 No todos encontraron igual generosidad a su vuelta. Los 6982 "Colorados", considerados hoy los héroes máximos de la guerra, 6983 junto con Eduardo Avaroa, fueron víctimas de los temores del 6984 gobierno y el desprecio de sus compatriotas. Se tuvo miedo de 6985 su carácter altanero, de su engreimiento, de su fama de 6986 valientes. Se los disolvió como unidad militar para que se 6987 perdieran en el anonimato de la ciudadanía mediocre y fueran 6988 olvidados. El periódico "La Tribuna" de La Paz dijo día antes de 6989 que se cumpliese el primer mes de la batalla de Tacna en la que 6990 se comportaron como leones: "Viernes, 25 de junio de 1880. 6991 Ayer han sido disueltos los pequeños fragmentos del antiguo e 6992 histórico Batallón Primero que según las palabras notables de un 6993 escritor compatriota, puso, sostuvo y quitó siete gobiernos. Nos 6994 placemos de la oportunidad con que se ha verificado la 6995 dispersión. Cansados estamos de valerosos vencidos en Tacna y 6996 era inconveniente conservar rezagos que han pertenecido a una 6997 escuela tan militarizada, que eran una amenaza o más bien un 6998 peligro público constante, al lado de fuerzas armadas más 6999 nuevas, más pacientes, menos altivas, y que prometen 7000 corresponder con honor al orden y la ley". Y añadió en su 7001 siguiente número: "Una vez que se ha disuelto y desarmado el 7002 grupo del antiguo e histórico batallón "Colorados", esperamos 7003 fundamentalmente que no serán enrolados en los otros cuerpos, 7004 como lo han hecho en otras ocasiones algunos jefes 7005 improvisados...". 7006 7007 Meses después, a reiteradas instancias de su antiguo jefe, el 7008 Coronel Ildefonso Murguía, se reorganizó el batallón de los 7009 famosos veteranos y se los destinó a Sucre. En la capital de la 7010 república, al cumplirse el primer aniversario de la batalla de 7011 Tacna, el 26 de mayo de 1881, quisieron festejar su hazañosa 7012 actuación y para tal efecto reclamaron el pago de los siete días 7013 de socorro que se les debía. Se les negó el dinero. Se sublevaron 7014 y durante cuatro días tuvieron a la ciudad a merced de su 7015 borrachera, hasta que llegó el batallón "Ayacucho" de Potosí y 7016 tomó presos a 46. Los demás escaparon. De los 46, se eligió a 7017 8, considerados los cabecillas. Se los sometió a juicio, se los 7018 condenó a muerte y se los fusiló en la plaza de armas de Potosí. 7019 Sus cadáveres fueron arrojados a una fosa común. 7020 7021 Así fueron los primeros tratos que la patria dio a sus mejores 7022 soldados. Sólo años después, la historia los consagró como 7023 héroes y los pocos que en su vejez volvieron a vestir la casaca 7024 roja y el pantalón blanco merecieron el respeto de sus 7025 conciudadanos. 7026 7027 Ponemos punto final a los tres capítulos de esta serie 7028 relacionados con la batalla de Tacna con la descripción que hizo 7029 de su escenario un periodista chileno que lo visitó a los dos años 7030 de ocurrido el suceso: "Tacna, 20 de mayo de 1882. El campo es 7031 inmenso. En vano querría encontrarse el más pequeño arbusto 7032 en ese desierto majestuoso. El calor que experimentaron los 7033 soldados debió ser terrible. Recorriendo el lugar el aire quema y 7034 el pie se entierra en la arena pesada y caliente. Yacen en él 7035 centenares de soldados. Principiando por el ala derecha del 7036 ejército aliado, se ve todavía el fuerte en el que apoyaba el 7037 extremo de su línea. A su alrededor hay vestigios de una lucha 7038 encarnizada. Dentro del recinto quedan aún soldados bolivianos 7039 que hace mucho tiempo fueron quemados por una avanzada de 7040 carabineros chilenos, pero a pesar de este intento de 7041 incineración, los restos han resistido la acción de las llamas y se 7042 ven miembros ennegrecidos y calcinados a medias. En el centro 7043 hay señales de una hecatombe. Pueden verse mezclados a 7044 chilenos, peruanos y bolivianos, esparcidos por todas partes. 7045 Hay esqueletos con blancura de mármol, al lado de cadáveres 7046 que conservan la piel y otros aún la carne. Algunos casi intactos 7047 en virtud del clima seco y la arena. En el ala izquierda se 7048 presenta un horrible osario de cráneos enteros unos, partidos 7049 otros, confundidos con infinidad de huesos y con cadáveres 7050 todavía vestidos. Las botas del soldado chileno se mezclan con la 7051 ojota del boliviano y el zapato del peruano. Yataganes, 7052 caramañolas, fundas y tahalíes, hacinados en desorden. El olor 7053 es infecto, el cuadro tétrico. La lucha debió ser acá terrible. Aquí 7054 y allá montones de arena como ataúdes desteñidos, encerrando 7055 una compañía o un batallón. Nada interrumpe el silencio, ni la 7056 soledad. Ni un pájaro, ni un perro, ni una hierba, ni un arbusto. 7057 Sólo alguna culebra y la veloz salamanquesa que ha hecho su 7058 nido en algún bolsillo o en los pliegues de un uniforme. Todo el 7059 largo de la línea de batalla de varios kilómetros, está cubierto de 7060 restos de soldados. Encima un cielo siempre azul y un sol 7061 candente". 7062 7063 7064 XLVI 7065 LOS ESTADOS UNIDOS PERU-BOLIVIANOS 7066 7067 La Convención Nacional reunida en el edificio Loreto de la ciudad 7068 de La Paz, a partir del 25 de mayo (1880), después de resolver 7069 el problema político eligiendo Presidente de la República al 7070 General Narciso Campero, se vio dividida en su seno por dos 7071 corrientes encontradas relativas a lo que convenía a Bolivia en 7072 sus relaciones con Chile. 7073 7074 La una encabezada por don Nataniel Aguirre, era partidaria de la 7075 continuación de la guerra. La otra, liderada por don Mariano 7076 Baptista, sostenía que la continuación de la contienda bélica no 7077 acarrearía sino mayores calamidades a la nación y que las 7078 circunstancias hacían irremediable dar paso a la acción 7079 diplomática para llegar a una paz digna con la participación del 7080 Perú. 7081 7082 El propósito de continuar la guerra dominó tanto dentro como 7083 fuera del legislativo. Atraía más partidarios porque se presentaba 7084 a la conciencia pública como lo más honroso, lo más heroico, lo 7085 que daba más satisfacción al patriotismo herido por la ocupación 7086 chilena del litoral de Atacama, 7087 Los partidarios de llegar a un acuerdo con Chile, se basaban en 7088 reflexiones de carácter pragmático. Consideraban indispensable 7089 que previamente se convenciera al Perú a actuar de consuno con 7090 Bolivia en el mismo sentido. La deslealtad con el aliado 7091 repugnaba a todos. 7092 7093 El señor Baptista resumió de este modo el desarrollo del debate 7094 parlamentario: "Una fracción dejó oír su voz de simple brote de 7095 ardimiento patriótico: ¡La guerra a todo trance! Otro sector, 7096 calificado de pacifista, previó, en términos decisivos, desastres 7097 posteriores, ya sobreviniesen del enemigo, ya como guerra civil 7098 de la república hermana. Aconsejó, en consecuencia, el 7099 predominio de la acción diplomática sobre la bélica, sin que se 7100 descuidara la segunda a los efectos de la defensa y como 7101 garantía de la eficacia de las mismas negociaciones. Sugirió que 7102 se pidiese al aliado el mismo procedimiento. La opinión de la 7103 mayoría se decidió por la acción bélica". 7104 7105 Desde el comienzo de la guerra, el gobierno de Santiago venía 7106 haciendo llegar al de La Paz proposiciones que tenían por 7107 objetivo una rectificación de fronteras en las costas del Pacífico 7108 por medio de la cual Bolivia quedase como dueña de los 7109 territorios de Arica, Tacna y aún Moquegua y Chile de los de 7110 Atacama y Tarapacá. La proposición inicial en tal sentido la había 7111 hecho ya Chile en tiempo de Melgarejo. Se la reiteró a los dos 7112 meses de comenzado el conflicto bélico (abril de 1879), por 7113 medio de dos cartas privadas, redactadas por el señor Domingo 7114 Santa María, principal colaborador del presidente chileno Aníbal 7115 Pinto y aprobadas en Consejo de Gabinete, que se las hizo 7116 firmar al ciudadano Justiniano Sotomayor, amigo del presidente 7117 boliviano Hilarión Daza desde que fuera gerente de la empresa 7118 minera de Corocoro. Se la repitió con el envío de bases formales 7119 para una alianza chileno-boliviana, de la que, se hizo portador el 7120 intelectual boliviano Gabriel René-Moreno que residía en la 7121 capital chilena, y se la reforzó con un mensaje verbal para el que 7122 se hizo servir de alcahuete al Ministro de los Estados Unidos en 7123 La Paz, señor Newton Pettis, aprovechándose de que había 7124 hecho un viaje a Santiago en un intento ingenuo y personal de 7125 detener la guerra. 7126 7127 La reacción del Presidente Hilarión Daza, tanto respecto a las 7128 cartas firmadas por Sotomayor, como a las bases que le entregó 7129 René-Moreno y el mensaje que le transmitió Pettis, fue dar 7130 cuenta de todo al Presidente del Perú, General Mariano Ignacio 7131 Prado, como prueba de la inconmovible lealtad boliviana a la 7132 alianza y de los insidiosos medios que estaba poniendo en 7133 práctica Chile para destruirla. 7134 7135 Las bases de las que fue portador Gabriel René-Moreno 7136 contenían estipulaciones como éstas: "Se reanudan las 7137 amistosas relaciones que siempre han existido entre Chile y 7138 Bolivia... En consecuencia, cesa la guerra entre las dos 7139 repúblicas y los ejércitos de ambas se considerarán en adelante 7140 aliados contra el Perú. Como la República de Bolivia ha menester 7141 de una parte del territorio pe-ruano para regularizar el suyo y 7142 proporcionarse una comunicación fácil con el Pacífico... Chile no 7143 embarazará la adquisición de esa parte de territorio, ni se 7144 opondrá a su ocupación definitiva por parte de Bolivia, sino que, 7145 por el contrario, le prestará la más eficaz ayuda". Valga la 7146 aclaración de que el señor René-Moreno no quiso ser portador de 7147 tales proposiciones y actuó como tal sólo cuando recibió orden 7148 perentoria que el Presidente Daza le hizo llegar por medio del 7149 señor Luis Salinas Vega. 7150 7151 La victoria chilena en la batalla de Tacna sobre las mejores 7152 tropas del Perú y Bolivia pudo ser un golpe de gracia a la 7153 alianza. Si ésta sobrevivió fue debido a la actitud boliviana. 7154 7155 El Perú no tenía otra alternativa que seguir la lucha, puesto que 7156 las fuerzas chilenas ocupaban toda la parte sur de su territorio y 7157 se alistaban a penetrar hasta la misma capital de la república. 7158 Bolivia, sin recursos económicos, con su ejército diezmado y con 7159 su armamento reducido a su mínima expresión, también decidió 7160 mantenerse en actitud beligerante y tuvo para con el Perú un 7161 gesto de singular nobleza, de verdadera fraternidad. 7162 7163 No quiso dejarlo solo en su angustiosa situación. Le envió un 7164 plenipotenciario, el señor Melchor Terrazas, para proponer que 7165 ambos países se uniesen en una organización aún más sólida 7166 que la confederación que 40 años antes no pudo formar con 7167 buen éxito el Mariscal Andrés de Santa Cruz. 7168 7169 El dictador del Perú, señor Nicolás de Piérola, no tenía simpatías 7170 por Bolivia desde que el Presidente Daza, algunos años antes le 7171 negó asilo político, obligándolo a buscarlo en Chile. Ahora, como 7172 jefe de su nación, demostraba por ella el más solemne 7173 desprecio. Omitía hasta mencionar su nombre en sus 7174 actuaciones públicas. Su posición se endureció aún más a raíz 7175 del desastre de la batalla de Tacna que abrió a los chilenos las 7176 puertas del camino a Lima, amenazando la estabilidad de su 7177 gobierno. No hizo nada para contrarrestar la muy injusta opinión 7178 de la mayoría de sus compatriotas de que la derrota del 26 de 7179 mayo era culpa exclusiva de los bolivianos. 7180 7181 Su actitud cambió radicalmente cuando don Melchor Terrazas le 7182 presentó sus credenciales y le propuso el pacto de unión federal. 7183 Acogió la idea con mucho entusiasmo. Bolivia en lugar de 7184 pasarse al campo contrario y aceptar el cambio de Atacama por 7185 una costa que le sería más conveniente, quería unir su suerte a 7186 la del Perú, constituyendo con él una sola república. ¡No se podía 7187 pedir más de un aliado! 7188 7189 El 11 de junio de 1880, a las dos semanas de la batalla de 7190 Tacna, don Melchor Terrazas y el canciller peruano, señor Pedro 7191 José Calderón firmaron un protocolo sentando las bases 7192 preliminares de lo que sería la Unión Federal del Perú y Bolivia. 7193 Sus principales cláusulas establecieron lo siguiente: "El Perú y 7194 Bolivia forman una sola nación denominada Estados Unidos 7195 Perú-Bolivianos. El presidente será elegido por votación directa. 7196 Una asamblea constituyente elegirá el lugar que ha de ser la 7197 capital de la Unión". 7198 7199 Mediante un protocolo adicional, don Melchor aceptó que hasta 7200 que se produjese el comicio popular, el Presidente del Perú sería 7201 el Presidente de la Unión y el Presidente de Bolivia el 7202 Vicepresidente. Explicó en una nota que consintió en ello 7203 "porque la modestia y la nobleza correspondían a Bolivia, que 7204 subordinaba toda pretensión al objetivo de conseguir en forma 7205 real y estable los fecundos beneficios de la unión de las dos 7206 naciones. 7207 7208 Tan contento quedó Piérola con los dos protocolos que hizo un 7209 rápido viaje a La Paz y obtuvo mayores seguridades de ayuda 7210 del gobierno del General Narciso Campero para la prosecución 7211 de la acción bélica aliada contra la invasión chilena. 7212 7213 Las ilusiones que se tenían en Bolivia sobre las ventajas de la 7214 federación con el Perú las sintetizó el periódico "El Comercio" de 7215 La Paz con estas palabras: "Una sola nación en las que flamee la 7216 bandera federal desde Tumbes hasta la Quiaca. Una América del 7217 Norte reproducida en la América septentrional. Los Estados 7218 Unidos del Sur ocupando un platillo de la balanza para hacer 7219 equilibrio a los Estados Unidos del Norte". 7220 7221 Pero la romántica concepción no pudo concretarse. Su proyecto 7222 duró el breve tiempo que el señor Piérola pudo mantenerse en el 7223 poder, o sea, hasta la entrada de las tropas chilenas en Lima, 7224 que motivó un cambio radical de las circunstancias políticas y 7225 militares. 7226 7227 Por otra parte, ¿qué viabilidad podía tener? Pese a todas las 7228 buenas intenciones y a los entusiasmos de uno y otro lado, la 7229 unión federal era una concepción sin esperanzas de vida. ¿Cómo 7230 podía Chile, que hizo una guerra cuatro décadas antes para 7231 destruir la confederación de Santa Cruz, permitir la existencia de 7232 una unión federal, cuando estaba victorioso en una segunda 7233 guerra cuyo objetivo político era de romper una simple alianza 7234 defensiva de los mismos estados? 7235 7236 7237 XLVII 7238 CONFERENCIA DE PAZ ANTE ANFITRIONES DE PIEDRA 7239 7240 La ocupación chilena, del litoral boliviano y luego de los 7241 departamentos peruanos de Tarapacá, Tacna y Moquegua, no 7242 despertó más reacción de la conciencia internacional que tibios y 7243 protocolares ofrecimientos de mediación de la Gran Bretaña, 7244 Brasil, Colombia, Ecuador y algunos otros países. No cuajaron 7245 porque los gobiernos comprometidos en la contienda bélica los 7246 aceptaron o rechazaron según sus conveniencias del momento, 7247 sin coincidir en su actitud. 7248 7249 Después de la batalla de Tacna, las intenciones chilenas de llevar 7250 su ejército hasta Lima, alarmaron a la Gran Bretaña de manera 7251 más seria. El comercio inglés, que desde que se fundaron las 7252 repúblicas sudamericanas, tenía la parte del león en sus 7253 mercados, venía sufriendo muchos perjuicios por los bloqueos y 7254 bombardeos chilenos a puertos del Perú. Por otra parte, el Perú, 7255 tenía que responder, temprano o tarde, por los bonos de su 7256 deuda externa comprados en gran cantidad por súbditos 7257 británicos. Cuanto mayor fuese su derrota, y sería completa si 7258 las tropas chilenas llegaban hasta su capital, menores serían sus 7259 posibilidades de solvencia. El Primer Ministro, William E. 7260 Gladstone, propuso a sus colegas de otros países europeos, 7261 cuyos intereses también estaban siendo perjudicados por la 7262 guerra (Alemania, Francia e Italia), buscar un medio de imponer 7263 la paz, inclusive acercando algunas de sus naves a las costas del 7264 Pacífico. 7265 7266 Las comunicaciones cambiadas entre Londres, Berlín, París y 7267 Roma no arribaron a nada concreto, debido a que Alemania se 7268 opuso a todo tipo de intervención, con el pretexto de que su alto 7269 costo no justificaría el resultado que pudiera conseguirse. En el 7270 fondo era simpatía del Canciller Otto Bismark por Chile, que al 7271 apropiarse de Atacama y Tarapacá no había hecho sino imitar lo 7272 que Alemania hizo pocos años antes con Alsacia y Lorena, es 7273 decir, tomar posesión de territorios ajenos en los que sus 7274 nacionales eran elemento preponderante de la población y factor 7275 decisivo en la actividad económica. 7276 7277 Hasta ese momento, de parte de los Estados Unidos, se tuvo una 7278 actitud expectante, con relación al grave conflicto chileno- 7279 peruano-boliviano. En Washington no se veía con desagrado que 7280 el comercio europeo fuese ahuyentado de esa parte de la 7281 América del Sur. El grande vecino del norte podría llenar el vacío 7282 dejado por los europeos tan pronto como se callasen los 7283 cañones. La actividad diplomática de las cortes del Viejo Mundo 7284 sacó de su pasividad al Departamento de Estado. Su jefe, el 7285 señor William M. Evarts, instruyó a sus agentes en La Paz, Lima 7286 y Santiago invitasen a los estados contendientes a enviar 7287 plenipotenciarios a una conferencia de paz a realizarse a bordo 7288 de la corbeta norteamericana "Lackawana" que echaría anclas 7289 delante de Arica. 7290 7291 El Gobierno de Chile aceptó la invitación con la esperanza de 7292 consolidar, bajo el patrocinio de la diplomacia de los Estados 7293 Unidos, los objetivos por los que hacía la guerra: adueñarse de 7294 Atacama de Bolivia y Tarapacá del Perú, ahorrándose la 7295 costosísima campaña militar sobre Lima. El Perú y Bolivia la 7296 aceptaron confiando en que el Gobierno de los Estados Unidos 7297 influenciaría sobre Chile para que haga la paz sin imponer 7298 desmembraciones territoriales como fruto de sus victorias. 7299 7300 Los señores Crisóstomo Carrillo y Mariano Baptista por parte de 7301 Bolivia, Antonio Arenas y Aurelio García por el Perú y Eulogio 7302 Altamirano, José Francisco Vergara y Eusebio Lillo por Chile, se 7303 reunieron a bordo de la corbeta ante los anfitriones Thomas A. 7304 Osborn, Isaac B. Christiancy y Charles Adams, ministros de los 7305 Estados Unidos en Santiago, Lima y La Paz, respectivamente, los 7306 días 22, 25 y 27 de octubre de 1880. 7307 7308 En la sesión inaugural, el chileno Altamirano presentó un 7309 memorando con las condiciones mínimas que su país exigía para 7310 la suscripción de un tratado de paz: "Cesión a Chile de los 7311 territorios del Perú y Bolivia extendidos al sur de la quebrada de 7312 Camarones. Pago a Chile por el Perú y Bolivia, solidariamente, 7313 de la cantidad de 20 millones de pesos. Abrogación del tratado 7314 de alianza peruano-boliviano y dejación sin efecto ni valor 7315 alguno de las gestiones encaminadas a una unión federal de las 7316 dos naciones". 7317 7318 Los delegados peruanos y bolivianos arguyeron 7319 apasionadamente contra toda idea de cambio de fronteras. El 7320 señor Arenas dijo: "Una paz que tuviera por base 7321 desmembraciones territoriales y el renacimiento del caduco 7322 derecho de conquista, sería una paz imposible". El señor Carrillo 7323 sugirió que la dilucidación del problema se confiase a un arbitrio 7324 de los Estados Unidos. El señor Vergara repuso: "La paz la 7325 negociará Chile directamente con sus adversarios, cuando éstos 7326 acepten las condiciones que estimen necesarias a su seguridad, 7327 y no habrá motivo alguno que lo obligue a entregar a otras 7328 manos, por muy honorables y seguras que sean, la decisión de 7329 sus destinos". 7330 7331 Los diplomáticos norteamericanos asumieron una actitud de 7332 silenciosas estatuas de piedra durante el debate de los tres días. 7333 El ejercicio dialéctico de los plenipotenciarios de los países 7334 contendientes no tuvo ningún resultado, aparte del de llevar a 7335 todos al convencimiento de que la guerra debía continuar hasta 7336 sus últimas consecuencias. Cada uno de los participantes volvió 7337 a su sede habitual de trabajo. La "Lackawana", después de su 7338 inútil y breve servicio como escenario de una conferencia 7339 internacional pacificadora que despertó la atención del mundo 7340 entero, se alejó de las aguas de Arica como si estuviera vacía. 7341 Desapareció en el horizonte como un buque fantasma. 7342 7343 El señor José Francisco Vergara, en carta al Presidente de su 7344 país, comentó el ambiente de la conferencia en estos términos: 7345 "Se habló mucho de la civilización y de fraternidad de estas 7346 repúblicas, comunidad de origen, instituciones, costumbres, 7347 religión, etc. Se trajeron a cuenta principios modernos del 7348 derecho público americano, la equidad y cuantos argumentos se 7349 les ocurre a los vencidos para defender una causa que se ve 7350 desesperada. Nosotros nos mantuvimos firmes en nuestras 7351 posiciones, sosteniendo su justicia y necesidad a fin de 7352 consolidar la paz. La situación era un poco penosa para los que 7353 no estamos acostumbrados a ver estas ejecuciones morales, que 7354 tienen sus agonías como las otras, pero apretando un poco el 7355 corazón, recordando las causas de esta guerra y pensando en los 7356 deberes que imponen los intereses del país, toda debilidad 7357 desaparecía y el ánimo se mantenía inflexible. Las discusiones 7358 no han ofrecido ningún incidente notable, a no ser el espíritu de 7359 cultura y moderación que ha reinado en ellas. Nadie habría 7360 sospechado al oír hablar y al ver la cortesía y atención con que 7361 nos hemos tratado que nos reuníamos allí los enviados de tres 7362 pueblos que se hacen guerra mortal". 7363 7364 En los días de permanencia en Arica, al margen de la 7365 conferencia, los delegados chilenos reiteraron a los bolivianos las 7366 proposiciones de su gobierno de las que se hizo portador, unos 7367 meses antes, al señor Gabriel René Moreno ante el Presidente 7368 Hilarión Daza. Argumentaron insistentemente sobre las ventajas 7369 que tendría para Bolivia y Chile el unirse contra el Perú para 7370 arrebatar a este país los territorios que quedaban al sur del río 7371 Sama: Tarapacá para Chile y Tacna y Arica para Bolivia". 7372 7373 Los señores Baptista y Carrillo no se dejaron vencer por la 7374 tentación del canto de sirenas de los chilenos. Don Mariano 7375 Baptista declaró que Bolivia no podía prestarse a una maniobra 7376 que significaría una alevosa traición a su aliado en la guerra. Se 7377 declaró partidario de una rectificación de fronteras en las costas 7378 del Pacífico pero siempre que pudiera hacerse "mediante un 7379 arreglo tripartito que fuese reconocido como una necesidad por 7380 los tres países interesados para conservar su equilibrio de 7381 fuerzas y evitar en el futuro complicaciones, antagonismos y 7382 conflictos". 7383 7384 El jefe de la delegación chilena, señor Altamirano, comentando 7385 el resultado de la conferencia y de sus conversaciones privadas 7386 con los bolivianos, dijo: "Dejemos este negocio de la paz, que es 7387 una broma y concentrémonos en la guerra". 7388 7389 Y la guerra la continuó Chile contra el Perú hasta llegar a la 7390 capital de la república, con mayor animosidad que en las 7391 campañas del mar, Tarapacá, Tacna y Arica. 7392 7393 7394 XLVIII 7395 CAÍDA DE LIMA EN PODER DE CHILE 7396 7397 La batalla de Tacna fue una desilusión para los vencedores. Se 7398 formularon acerbas críticas en Santiago por la táctica del ataque 7399 frontal usada por el General Manuel Baquedano. Se dijo que 7400 convirtió a su ejército en "un toro bravo que se lanza ciego, 7401 envuelto en una nube de polvo caliente, contra la punta del 7402 estoque que le presenta el matador". 7403 7404 El diputado José Manuel Balmaceda (más tarde Presidente de 7405 Chile) expresó: "Las jornadas de Tacna y Arica no nos han 7406 conducido al término de la contienda, como algunos lo 7407 esperaban. La paz posible está en Lima. No podemos 7408 permanecer con el arma al brazo, sufriendo todos los 7409 gravámenes de la guerra. Sin recoger ninguna de sus ventajas". 7410 Declaró también que la ocupación de la capital peruana sería la 7411 mejor manera de obligar a Bolivia a suscribir un tratado de paz: 7412 "Sólo cuando vea a su aliado aniquilado, no le quedará otro 7413 recurso que pensar en su propia autonomía y existencia. 7414 Entonces y sólo entonces será el momento decisivo con esa 7415 nación. Cuando vea que es inútil toda resistencia del Perú 7416 creerá, sin rubor, que es absurdo toda postergación de la paz e 7417 irá con ella pensando en su propia situación". 7418 7419 Mientras se hacían los preparativos, el Contralmirante Patricio 7420 Lynch, en septiembre de 1880, llevó un destacamento al norte 7421 de Lima y durante dos meses sembró el terror en Payta, Eten, 7422 Chiclayo y otros pueblos de los departamentos de Libertad y 7423 Lambayeque, cobrando crecidas contribuciones a los propietarios 7424 de las haciendas azucareras, incendiando edificios públicos y 7425 particulares, destruyendo ingenios y líneas férreas y telegráficas. 7426 7427 Para la etapa final de la guerra, el gobierno de Santiago puso 7428 42.000 hombres sobre las armas: 27.000 para la conquista de 7429 Lima, 10.000 en Antofagasta, Tarapacá y la región de Tacna y 7430 Arica, como guarnición contra posibles ataques de Bolivia; y el 7431 resto dentro de la república, manteniendo el orden en las 7432 provincias centrales y la frontera araucana. 7433 7434 El General Baquedano sacó sus tropas de Arica en tres partidas y 7435 las desembarcó, sin encontrar resistencia alguna, en Pisco y 7436 Curayacu, concentrándolas, junto con la artillería, 1.600 mulas, 7437 munición, víveres, forraje y demás pertrechos en el valle de 7438 Lurín, 17 kilómetros al norte de Lima. 7439 7440 El dictador Nicolás de Piérola venía alistando la defensa de la 7441 ciudad meses antes. Llamó bajo banderas a todos los hombres 7442 de 18 a 60 años. Los de 18 a 30 formaban el elemento 7443 combatiente. Los de 31 a 50 la reserva inmediata. Los mayores 7444 de 50 la reserva secundaria y de servicios auxiliares. Los 7445 veteranos de las batallas de San Francisco, Tarapacá y Tacna 7446 seguían dentro de sus mismos batallones, constituyendo el 7447 núcleo más aguerrido. Los reclutas provenían de todas las clases 7448 sociales y los había profesionales, empleados públicos y de la 7449 empresa privada, obreros de fábricas y artesanos de todos los 7450 oficios. Tres mil indios traídos del valle de Jauja aumentaban el 7451 efectivo combatiente a 28.000. Lima era un vasto campamento 7452 militar en el que los enrolados mezclaban sus ocupaciones 7453 habituales con ejercicios castrenses, acudiendo a éstos al 7454 llamado de las campanas de la catedral. Se vivían días de 7455 expectativa, angustia y exaltación patriótica. 7456 7457 Las trincheras se las construyó a 11 kilómetros de la capital, 7458 delante del balneario de Chorrillos las de primera línea, y delante 7459 de Miraflores, las de la segunda. 7460 7461 El 12 de enero de 1881, los chilenos cubrieron la distancia de 7462 Lurín al campo de batalla, sin ser observados. Al amanecer del 7463 13, se lanzaron resuelta y frontalmente contra los defensores de 7464 Chorrillos. Los peruanos no tenían puestos adelantados de 7465 vigilancia y su sorpresa fue completa. Hubo heroica resistencia 7466 en el cerro San Juan bajo el mando del General Miguel Iglesias, 7467 pero hasta las 2 de la tarde toda la línea había claudicado y 7468 2.000 peruanos se rindieron. 7469 7470 Esa noche en Chorrillos, los chilenos asaltaron e incendiaron 7471 viviendas particulares y lugares de expendio de bebidas 7472 alcohólicas, en medio de una orgía de robos y borrachera. Sus 7473 propios jefes y oficiales tuvieron que abandonar sus 7474 alojamientos y buscar refugio en los campos para poner sus 7475 vidas a salvo de los excesos de la frenética soldadesca. Más de 7476 200 chilenos fueron víctimas de las cuchilladas y disparos de sus 7477 camaradas. 7478 7479 La noticia de la caída de Chorrillos y la llegada de trenes llenos 7480 de heridos, hizo cundir el pánico en Lima. Cientos de familias 7481 buscaron asilo en las misiones diplomáticas. Los ministros de la 7482 Gran Bretaña, Francia y El Salvador buscaron contactos con 7483 Baquedano y Piérola para concertar un armisticio. Los 7484 comandantes de los buques de guerra de Gran Bretaña, Francia. 7485 Alemania, Italia y los Estados Unidos, movilizados a aguas del 7486 Callao y Ancón, como medida de protección a los súbditos de 7487 esos países, a iniciativa del almirante inglés Sterling, hicieron 7488 saber al General Baquedano que si se repetían en Lima los 7489 crímenes de Chorrillos, los cañones de las 13 naves extranjeras 7490 hundirían toda la flota chilena. 7491 7492 El armisticio quedó concertado por 24 horas, desde las 12 de la 7493 noche del 14 de enero a medio día del 15. Fusileros peruanos de 7494 la línea defensiva de Miraflores, al ver un grupo de jinetes 7495 enemigos a su frente (se trataba del General Baquedano y su 7496 Estado Mayor, haciendo una visita a los puestos adelantados de 7497 su ejército), no pudieron resistir la tentación de hacerles 7498 disparos. Tal imprudencia provocó la ruptura de la tregua. El 7499 comando chileno ordenó la reanudación de la lucha. Miraflores 7500 sucumbió después de furiosa contienda. Piérola huyó a Tarma. El 7501 camino a Lima quedó abierto y franco Para el invasor. 7502 7503 Los diplomáticos convencieron al Alcalde que ofreciese la 7504 rendición de la ciudad, para evitar que los chilenos ingresasen en 7505 ella a sangre y fuego. Baquedano aceptó una rendición 7506 incondicional y dispuso que sólo ingresaran 3.000 elementos 7507 escogidos. Lo hicieron a las 5 de la tarde del 17 de enero. 7508 Baquedano lo efectuó al día siguiente, instalándose en el Palacio 7509 de Gobierno. 7510 7511 Lima se recogió sobre sí misma para llorar a ocultas el 7512 holocausto de miles de sus hijos y la vergüenza de su 7513 claudicación. Según el historiador chileno Gonzalo Bulnes: "La 7514 sociedad limeña se encerró en sus casas, viendo pasar por entre 7515 los visillos de las ventanas esos uniformes que les recordaba al 7516 deudo muerto, esposo, hijo o amigo. Todo era triste y mustio en 7517 la ciudad. Las damas no salían sino para asistir a misa los 7518 domingos. En los hoteles y restaurantes dominaba la presencia 7519 de los jefes y oficiales chilenos". 7520 7521 Una circular de la cancillería de Santiago a sus agentes en el 7522 exterior expresó: "En Chorrillos y Miraflores consolidamos 7523 nuestra absoluta supremacía marítima y terrestre. La escuadra 7524 peruana ha desaparecido por completo. Los centros organizados 7525 han caído desangrados y sin vida. En la fortaleza del Callao y en 7526 Lima hondea nuestra bandera y el enemigo ha sido reducido a 7527 una impotencia radical y absoluta". 7528 7529 Entre quienes figuraban en Lima sufriendo la hostilidad chilena 7530 se contaba el señor Melchor Terrazas, Ministro Plenipotenciario 7531 de Bolivia. Hubiera querido ponerse a buen recaudo antes de la 7532 batalla, viajando a Arequipa, pero se lo impidió "un fuerte 7533 ataque reumático". En cuanto pudo moverse un poco, solicitó 7534 salvoconducto de las autoridades chilenas. Se lo negaron con la 7535 explicación de que era porque el gobierno que representaba 7536 persistía en su actitud belicosa. En notas que pudo hacer llegar a 7537 La Paz, avisó que estaba obligado a permanecer en su residencia 7538 en la singular condición de "un diplomático bélicamente 7539 embargado". Rogó que se le siguiera enviando sus 7540 emolumentos. Dijo: "Se les acuerda este derecho a todos los 7541 que, como yo, caen por causa de la patria en poder del 7542 enemigo". El Ministro de la Gran Bretaña intercedió por él y pudo 7543 retornar a Bolivia después de cuatro meses de "embargo". 7544 7545 No tuvo la misma suerte su predecesor, el señor Zoilo Flores. 7546 Fue llevado preso a Chile por considerarse que su proceder no 7547 era tan discreto como el de don Melchor, pues andaba muy 7548 mezclado en corrillos anti chilenos. 7549 7550 El General Manuel Baquedano regresó a su patria en marzo de 7551 1881. Se lo recibió como a un héroe, con flores, bandas de 7552 música, calles repletas de público, salvas de artillería, banquetes 7553 y Tedeum. Las fuerzas de ocupación en el Perú quedaron a las 7554 órdenes del General Cornelio Saavedra, que fuera Ministro de 7555 Guerra al comienzo del conflicto bélico. Al poco tiempo, fue 7556 reemplazado por el General Pedro Lagos, recientemente 7557 ascendido. Lagos, a su vez, dejó la responsabilidad después de 7558 unos meses. El Palacio de Francisco Pizarro fue ocupado 7559 entonces por el Contralmirante Patricio Lynch, con poderes 7560 omnímodos sobre la vida y hacienda de los peruanos. 7561 7562 7563 XLIX 7564 LA PAZ SEPARADA DEL PERU 7565 7566 La ocupación chilena de Lima y de la costa sur del Perú fue 7567 sumamente penosa para los habitantes. Parecía obedecer a la 7568 consigna de anularlos física y moralmente. Chile buscaba 7569 someter a su tradicional enemigo a la condición de nación 7570 subalterna, incapacitándola para seguir siendo rival de sus 7571 pretensiones hegemónicas en el Pacífico. 7572 7573 Muchos de los hombres más representativos del Perú fueron 7574 llevados presos a Chile por resistir o no poder pagar las crecidas 7575 contribuciones que les cobró el Contralmirante Patrio Lynch o 7576 simplemente por su altivez a la que se condenó como "un peligro 7577 para la tranquilidad pública". 7578 7579 Los abusos tenían también otro carácter. El Ministro de la Gran 7580 Bretaña informó a su gobierno: "Los chilenos en los primeros 7581 tres meses de su ocupación se han llevado de Lima todo lo que 7582 tenía valor y a lo que se podía echar mano. La Biblioteca Pública 7583 ha sido embarcada. Las Facultades de Minas, de Artes, de 7584 Medicina de la Universidad han sido vaciadas de todo lo que era 7585 transportable. Se han llevado las máquinas del Callao y las 7586 fortificaciones de este puerto han sido voladas". 7587 7588 La coerción chilena se agravó por la resistencia de algunos 7589 caudillos: Nicolás de Piérola en Tarma, el Contralmirante Lizardo 7590 Montero desde Cajamarca, el General Andrés Avelino Cáceres 7591 con su cuartel general en Junín, el General José de la Torre en 7592 Arequipa. Piérola acabó viajando a Europa, pero Montero y 7593 Cáceres siguieron hostilizando a los invasores de su patria. Los 7594 destacamentos enviados a sojuzgarlos sólo pudieron desfogar su 7595 belicosidad contra los indios. Dice el historiador Gonzalo Bulnes: 7596 "Aquellas fueron más que combates, carnicerías en las que los 7597 indígenas murieron a centenares, casi a millares". 7598 7599 Chile propició la formación de un gobierno peruano a cuya 7600 cabeza estuviese un hombre dócil a sus exigencias. Creyó 7601 encontrar a éste en el abogado arequipeño Francisco García 7602 Calderón, a quien 140 limeños de nota proclamaron Presidente 7603 Provisional y una asamblea reunida en Chorrillos ratificó en tal 7604 carácter. Con la anuencia del Contralmirante Lynch se instaló en 7605 el villorrio de Magdalena, próximo a Lima. Lynch le facilitó armas 7606 para una guardia de 400 hombres y algún dinero para sus 7607 gastos. 7608 7609 El gobierno de García Calderón fue reconocido por los Estados 7610 Unidos. El Departamento de Estado creyó que protegiéndolo 7611 ganaría mucha influencia en el Perú, desplazando a la Gran 7612 Bretaña con su comercio. Su representante, el señor Herbert 7613 Hurbut, se presentó como campeón de la integridad territorial 7614 peruana e hizo declaraciones públicas contra las pretensiones 7615 chilenas de apoderarse definitivamente de Tarapacá, y a favor de 7616 una paz con sólo compensaciones pecuniarias. 7617 7618 El apoyo norteamericano animó al señor García Calderón para 7619 actuar con más autoridad e independencia. Se mostró altanero y 7620 exigente frente a Lynch. El gobierno de Santiago ordenó su 7621 apresamiento y traslado a Chile. Se lo llevó con varios de sus 7622 colaboradores. Palabras del chileno Carlos Walker Martínez: "Tan 7623 de repente e inesperadamente se cometió el atropello que las 7624 víctimas no tuvieron tiempo de portar consigo ni lo más 7625 necesario. Ancianos los unos, hombres de negocios los más, 7626 para todos la orden fue feroz. Se los llevó a las provincias del sur 7627 de Chile, Nuble y Arauco, donde grandes fueron sus privaciones 7628 y sufrimientos. Más de uno dejó sus huesos en el destierro". 7629 7630 Antes de perder su autoridad, el señor García Calderón había 7631 nombrado Vicepresidente de la República al Contralmirante 7632 Lizardo Montero. Este, abandonó la zona de Junín donde 7633 mantenía la rebelión anti chilena y se trasladó a Arequipa, 7634 dejando las tropas del norte bajo el mando del General Miguel 7635 Iglesias. Su plan era provocar al enemigo desde Arequipa con 7636 ayuda de las fuerzas bolivianas que le ofreció el General Narciso 7637 Campero, para que Iglesias aprovechase del desplazamiento 7638 chileno hacia el sur libertando a Lima. 7639 7640 Empero, Iglesias desde Cajamarca, influenciado por personajes 7641 de la capital para quienes la ocupación chilena se hacía cada vez 7642 menos soportable, cortó toda vinculación con Montero y declaró 7643 públicamente que había llegado la hora de hacer la paz, dejando 7644 de lado un "falso honor" por cuya culpa el "pabellón enemigo 7645 flameaba indefinidamente sobre las más altas torres del país, 7646 desde Tumbes al Loa". 7647 Hasta el mismo gobierno de Chile estaba cansado con la 7648 ocupación. El Presidente Domingo Santa María expresó en una 7649 carta. "La ocupación sin término ha sido siempre para mí algo 7650 que me espanta, no tanto por el costo, sino por el temor de que 7651 nos peruanicemos... Dados los sucesos tales como se presentan, 7652 creo que sería muy bien para todos que Iglesias organice un 7653 gobierno... Valdría la pena hacerle insinuaciones en ese sentido 7654 y dar pasos que nos lleven a una inteligencia con ese caudillo". 7655 7656 Una asamblea de representantes de los siete departamentos del 7657 norte, convocada por el General Iglesias, lo proclamó 7658 "Presidente Regenerador". El Contralmirante Lynch le permitió 7659 extender su autoridad hasta Trujillo. Le facilitó primero 80 fusiles 7660 y luego 1.500 con munición. Le pasó una mensualidad de 30.000 7661 pesos que poco después aumentó a 80.000. 7662 7663 A pedido de Iglesias, el gobierno de Santiago puso en libertad al 7664 señor José Antonio Lavalle (que se encontraba preso en Chile) 7665 para que actuase como su agente en las conversaciones de paz. 7666 Antes de salir de la capital chilena fue llamado a dos entrevistas 7667 con el Presidente Santa María, quien "le dijo sin ambages que no 7668 podría haber paz sino sobre la base de una cesión incondicional 7669 de Tarapacá y venta de Tacna y Arica por 9 millones de pesos". 7670 Lavalle preguntó si Bolivia podría acreditar comisionados en las 7671 conversaciones. Santa María repuso: "No hay posibilidad para 7672 ello, porque los aliados tienen intereses antagónicos en la 7673 celebración de la paz. La forma y condiciones en que podríamos 7674 celebrarla con uno no podrían ser iguales para el otro. Será 7675 mejor que el Perú, se cuide de sí mismo y nada más". 7676 7677 Una vez en su patria, don José Antonio Lavalle entró en contacto 7678 con el representante chileno, señor Jovino Novoa. Sostuvieron 7679 conferencias en Chorrillos y Ancón el 27 de marzo, 9 y 22 de 7680 abril y 9 de mayo de 1883. El diplomático peruano tuvo que 7681 aceptar todas las exigencias de su contraparte. Lo único que 7682 consiguió fue que la venta de Tacna y Arica se cubriese con las 7683 apariencias de un plebiscito a realizarse en esos mismos 7684 territorios diez años más tarde. Adujo que su nación se resistiría 7685 a aceptar la transferencia en la deshonrosa forma de una 7686 operación de compra-venta. Novoa aceptó seguro de que Tacna 7687 y Arica, bajo dominio de su país, estarían completamente 7688 chilenizados en el lapso de una década y la consulta popular no 7689 sería nada más que una mera fórmula para calmar los 7690 escrúpulos peruanos. ¡Cuánto se estaba equivocando! 7691 7692 El mismo presidente Santa María dijo en una carta: "Pues bien, 7693 si el plebiscito no es más que un rodeo, una invención para 7694 disimular la venta, no hay razón para que se excuse el pago de 7695 la cantidad ofrecida, desde que es seguro que el plebiscito 7696 efectuado dentro de diez años va a dar a Chile los lugares que 7697 hoy disputa al Perú". 7698 7699 Los señores Lavalle y Novoa suscribieron el llamado Tratado de 7700 Ancón, en Lima, el 20 de octubre de 1883. El pacto dio a Chile la 7701 "propiedad perpetua e incondicional del departamento de 7702 Tarapaca" y la posesión de Tacna y Arica hasta que un plebiscito 7703 a realizarse en 1893 determinase a qué soberanía debería 7704 pertenecer. 7705 7706 A los tres días de la firma del documento, el Contralmirante 7707 Patricio Lynch y sus tropas abandonaron Lima después de una 7708 ocupación que había durado dos años y nueve meses. 7709 Según versión de un corresponsal del New York Herald, edición 7710 del 17 de noviembre de dicho año, "antes de retirarse los 7711 chilenos barrieron con el Palacio de Gobierno, la Municipalidad, 7712 los cuarteles y oficinas públicas, llevándose espejos, pinturas, 7713 alfombras, muebles, libros, papeles y otros objetos". 7714 7715 7716 7717 SEXTA PARTE 7718 7719 L 7720 EL TRISTE FIN DE LA ALIANZA: LEALTAD PAGADA CON 7721 INGRATITUD 7722 7723 La política chilena tendiente a separar al Perú y Bolivia se 7724 manifestó también en las negociaciones para llegar a la paz. 7725 7726 A principios de diciembre de 1881, los señores Mariano Baptista, 7727 en representación del Gobierno de Bolivia y Eusebio Lillo, por 7728 Chile, sostuvieron conversaciones en Tacna para explorar las 7729 posibilidades de un acuerdo que terminase su conflicto limítrofe. 7730 El señor Lillo presentó al señor Baptista un documento escrito de 7731 su puño y letra por el que su gobierno ratificaba la proposición 7732 de una "rectificación de fronteras" mediante la cual la cesión a 7733 Chile de Atacama sería compensada a Bolivia con los territorios 7734 de Tacna y Arica, y, si lo deseaba, de otros más, al norte y el 7735 oriente, hasta el lago Titicaca, pertenecientes al Perú, 7736 obligándose Chile a operar militarmente sobre ellos con ayuda 7737 de tropas bolivianas. Chile ofrecía también no cobrar a Bolivia 7738 ninguna compensación de guerra, vincular Antofagasta, 7739 Mejillones o Iquique con el altiplano por medio de un ferrocarril y 7740 dar crédito para otro ferrocarril de Arica a los departamentos 7741 bolivianos del norte. El tratado de paz que estableciese tales 7742 obligaciones no sólo uniría a ambas repúblicas comercialmente 7743 sino, al mismo tiempo, en lo que fuera posible, en sus intereses 7744 políticos, para prestarse apoyo en cualquier emergencia 7745 internacional". 7746 7747 El señor Lillo propuso que, mientras se pudiese concertar el 7748 tratado definitivo de paz, Bolivia y Chile pusiesen fin al estado de 7749 guerra que los enfrentaba mediante un pacto de tregua. 7750 7751 La primera reacción del señor Baptista fue declarar que Bolivia 7752 no podía suscribir ninguna clase de acuerdo sin la participación 7753 del Perú. Repuso Lillo: "Prescinda Bolivia de una vez por todas, 7754 de su aliado. Mire al fin sus propios intereses, sin amarrarse más 7755 tiempo a las diversas formas de putrefacción que está viviendo 7756 su vecino". 7757 7758 El Gobierno del General Narciso Campero ratificó lo manifestado 7759 por su agente. No se podía concertar nada a espaldas del Perú y 7760 mucho menos en su contra. Los interlocutores de Tacna 7761 volvieron a sus bases con las manos vacías. 7762 7763 Bolivia y el Perú alimentaban todavía la esperanza de que los 7764 Estados Unidos presionarían a Chile para hacer la paz sin 7765 imponer desmembración territorial alguna. Se desilusionaron, 7766 reconociendo la cruda realidad, cuando el 11 de febrero de 1882 7767 el Ministro de Relaciones Exteriores de Chile, José Manuel 7768 Balmaceda, y el representante diplomático de los Estados 7769 Unidos, William Henry Trescot, firmaron en Viña del Mar un acta 7770 en la que se dejó establecido que el gobierno de la Casa Blanca 7771 no intervendría en el conflicto del Pacífico sino con buenos oficios 7772 y cuando éstos fuesen solicitados, y que Chile mantenía como 7773 condiciones para llegar a la paz el quedarse dueño de todos los 7774 territorios ubicados al sur de la quebrada de Camarones, 7775 reteniendo además Tacna y Arica en su poder hasta que el Perú 7776 le pagase una indemnización de guerra de 20 millones de pesos 7777 en el plazo máximo de 10 años, quedando ambos territorios 7778 definitivamente bajo su dominio si no se cancelaba el total de la 7779 deuda en ese lapso. 7780 7781 La llamada "Acta de Viña del Mar" convenció a los gobernantes 7782 del Perú y Bolivia que ninguna ayuda podía esperar de los 7783 Estados Unidos y, consecuentemente, de cualquier otra nación, 7784 para que Chile no fuese tan abusivo en sus exigencias como 7785 vencedor de la contienda bélica. 7786 7787 Bolivia vio un escape a tal situación en la iniciativa chilena 7788 propuesta por el señor Lillo al señor Baptista en Tacna, relativa a 7789 la celebración de una tregua que crease el clima apropiado para 7790 ingresar a las discusiones de un tratado de paz. La tregua, se 7791 pensó en Bolivia, podría dar tiempo para el fortalecimiento 7792 moral, económico y militar de la república, poniéndola en mejor 7793 posición y condiciones que le permitan obtener de Chile un 7794 tratamiento justiciero en el pacto definitivo de límites. 7795 7796 Se envió al señor Crisóstomo Carrillo a proponer al gobierno del 7797 Contralmirante Lizardo Montero que los dos aliados buscaran la 7798 tregua conjuntamente (abril de 1882). Don Crisóstomo encontró 7799 un ambiente muy desfavorable en el Perú sobre el particular. El 7800 negociador nombrado para tratar con él le expresó: "La tregua 7801 se vería como un paso adelantado en la cesión de territorios". El 7802 canciller Mariano Álvarez le manifestó por su parte que "una 7803 tregua no sería sino un analgésico aplicado por Chile para 7804 amputar con menos dolor órganos vitales de Perú y Bolivia". 7805 7806 No obstante este desaire, en Bolivia se siguió creyendo que 7807 cualquier camino que se tomase hacia la paz debían tomarlo 7808 juntos los dos aliados. 7809 7810 En la sesión inaugural del Congreso de 1882, el señor Belisario 7811 Salinas, como jefe del Poder Ejecutivo (el General Narciso 7812 Campero había dejado temporalmente esas funciones para 7813 concentrar su atención en la reorganización del ejército) leyó un 7814 mensaje en el que refiriéndose a la cuestión internacional dijo 7815 entre otras cosas: "En la guerra con Chile no ha sido posible 7816 llegar a un resultado capaz de conciliar los intereses de los 7817 aliados con las exigencias del enemigo, por la dureza de sus 7818 condiciones... Bolivia ha respetado la alianza, cumpliendo 7819 religiosamente los deberes que ella le impone. No es un misterio 7820 que Chile tiende a romperla, pretendiendo imponer a Bolivia, 7821 tras la pérdida de su territorio, la de su honra... En hora buena 7822 trate Chile con nosotros, pero sea respetando nuestra honra y 7823 salvando nuestros deberes de aliados". Al finalizar el período 7824 legislativo de ese año el Congreso declaró que "el Ejecutivo 7825 debía seguir buscando la paz (o la tregua), en términos 7826 compatibles con la honra y los intereses de la nación y 7827 cumpliendo sus obligaciones de aliada". 7828 7829 El Ministro de Relaciones Exteriores, señor Antonio Quijarro, 7830 (marzo de 1883), escribió al canciller chileno Luis Aldunate, 7831 proponiéndole una conferencia en la que representantes de los 7832 tres países comprometidos en el conflicto discutiesen las 7833 condiciones de una tregua. El ministro chileno aceptó la 7834 conferencia, pero sólo con Bolivia, oponiéndose 7835 terminantemente a los planteamientos del ministro boliviano a 7836 favor de la intervención del Perú. 7837 7838 Como el señor Quijarro insistiese sobre el particular, el señor 7839 Aldunate le dijo que no comprendía esa su actitud, puesto que el 7840 Gobierno del Perú, en octubre del año anterior, cuando discutía 7841 con un diplomático norteamericano acerca de las bases para un 7842 tratado de paz "jamás hizo la menor alusión ni a los intereses ni 7843 a la situación de Bolivia". En otra carta (agosto de 1883), el 7844 señor Aldunate le dijo también al señor Quijarro que era "de 7845 notoriedad que el General Miguel Iglesias (nuevo gobernante del 7846 Perú), había decidido tratar de la paz con Chile sin la 7847 concurrencia y aún sin una mera noticia a Bolivia". 7848 7849 A los pocos días se recibió en la sede del gobierno boliviano la 7850 noticia de la suscripción del Tratado de Ancón, al que se ha 7851 hecho referencia en el capítulo anterior, por el que el Perú, al 7852 ceder a Chile la propiedad de su departamento de Tarapacá, 7853 incondicionalmente y a perpetuidad, comprometió, tácitamente, 7854 también a favor de Chile la propiedad del departamento 7855 boliviano de Atacama, es decir, todo su litoral oceánico, ubicado 7856 entre la frontera norte chilena y el citado territorio peruano. 7857 7858 Era el triste fin del Tratado de Alianza de 1873, por el que Bolivia 7859 y el Perú entraron juntos a la guerra y al que Bolivia en todo 7860 momento dio devoto cumplimiento. El Perú faltó a su último 7861 deber dentro de él. El artículo 8 establecía que ninguno de los 7862 dos aliados podía "concluir tratados de límites u otros arreglos 7863 territoriales sin consentimiento de la otra parte contratante". 7864 7865 La situación del Perú era desesperada y es comprensible que se 7866 resignase a pagar el muy alto precio de Tarapacá para librarse 7867 de la ominosa y pesada carga de la ocupación chilena. Empero, 7868 la lealtad que Bolivia le guardó durante toda la contienda, 7869 inclusive hasta el extremo de brindarse a correr su misma suerte 7870 fundiéndose en un solo estado federal cuando el ejército chileno 7871 se aprestaba a su campaña sobre Lima, merecía alguna 7872 consideración, por lo menos una explicación de las razones que 7873 obligaban a la firma unilateral del Tratado de Ancón, o siquiera, 7874 dentro de las más elementales reglas de cortesía entre quienes 7875 se llamaban hermanos, que habían sido aliados y eran vecinos y 7876 víctimas de la misma tragedia, un simple aviso. 7877 7878 La ingratitud peruana dolió profundamente en Bolivia. Todas las 7879 pruebas de lealtad a la alianza, la inconmovible resistencia a las 7880 numerosas proposiciones chilenas para arrebatar al Perú los 7881 territorios de Moquegua, Tacna y Arica a fin de que Bolivia 7882 tuviese con ellos una costa mucho más apropiada que la de 7883 Atacama, toda la sangre que el ejército boliviano derramó en 7884 defensa del Perú en Pisagua, San Francisco y la batalla de Tacna, 7885 recibían muy mal pago. 7886 Pero no hubo recriminaciones. Solamente el periódico "La Patria" 7887 de La Paz comentó: "La República del Perú, nuestra hermana, 7888 nuestra aliada, ha aceptado el emparedamiento de Bolivia detrás 7889 de los Andes". 7890 7891 7892 LI 7893 BOLIVIA FORZADA A ACEPTAR UNA TREGUA ASFIXIANTE 7894 7895 Una vez que el Perú sucumbió ante la victoria de su tradicional 7896 enemigo, viéndose obligado a firmar el Tratado de Paz de Ancón, 7897 Bolivia quedó sola frente a Chile. 7898 7899 Las tropas que desocuparon Lima no se retiraron del Perú. Con 7900 beneplácito del Presidente, General Miguel Iglesias, se pusieron 7901 en campaña contra el Contralmirante Lizardo Montero, 7902 establecido en Arequipa. A las pocas semanas, Montero perdió 7903 su autoridad, tanto por acción chilena como por sublevación de 7904 sus propias tropas. Liquidado este problema, el ejército del 7905 Contralmirante Patricio Lynch, permaneció todavía en el sur del 7906 Perú para servir de doble amenaza: 1) Amenaza al Congreso 7907 peruano de que si no ratificaba el Tratado de Ancón volvería a 7908 ocupar Lima; 2) Amenaza al gobierno boliviano de que si no 7909 aceptaba un pacto de tregua en las condiciones que impusiese 7910 Chile, invadiría el altiplano ocupando La Paz y otros centros 7911 vitales de la república. 7912 7913 Para hacer más evidente este segundo objetivo, las fuerzas de 7914 Lynch ocuparon Moliendo, Arequipa y Puno (a orillas del lago 7915 Titicaca), es decir, una línea que constituía una especie de lanza 7916 apuntada contra La Paz, sede del gobierno y principal ciudad de 7917 Bolivia. Chile disponía además de otro medio de presión más 7918 efectivo. Estaban bajo su control los puertos de Moliendo, Arica y 7919 Antofagasta, por donde Bolivia recibía los productos ultramarinos 7920 esenciales para su sobre vivencia. 7921 7922 El Presidente Narciso Campero tomó dos medidas ante tan 7923 graves circunstancias: Al mismo tiempo que destacaba dos 7924 diplomáticos a Santiago, los señores Belisario Salinas y Belisario 7925 Boeto, en busca de un tratado de paz que tuviese como 7926 condición primordial una salida propia y soberana al océano 7927 Pacífico (de preferencia los territorios de Tacna y Arica mediante 7928 una modificación del Tratado de Ancón), adoptó medidas de 7929 carácter militar defensivas. Estas fueron: exigir el pago a la 7930 ciudadanía de un empréstito interno lanzado anteriormente; 7931 pedir la donación de caballos y monturas a quienes los tuviesen; 7932 llamar nuevamente bajo banderas a los licenciados del ejército, 7933 ordenar la organización de una Guardia Activa con los jóvenes, 7934 otra Pasiva con los mayores y una tercera, Urbana, en cada 7935 ciudad, con los extranjeros; disponer el alistamiento de servicios 7936 especiales de transportes, ambulancias y hospitales; pedir a los 7937 sacerdotes que despertasen los sentimientos patrióticos de las 7938 razas indígenas; finalmente, hacer un reconocimiento del 7939 probable campo de batalla a orillas del río Desaguadero. 7940 7941 Al enviar a la capital de Chile una misión diplomática y, al mismo 7942 tiempo, alistar a la nación militarmente, el gobierno del General 7943 Campero adoptaba una política que incluía las dos tendencias 7944 que, desde la instalación del Congreso en mayo de 1880, 7945 pugnaban por imponerse en la conciencia nacional; la una 7946 guerrista y la otra pacifista. 7947 7948 Aunque el esfuerzo económico y anímico de mantener al país en 7949 pie de guerra lo tenía agotado, en el Congreso, en la prensa, en 7950 las reuniones públicas y privadas se siguió discutiendo desde el 7951 desastre de la batalla de Tacna si debía mantenerse la 7952 belicosidad o darse paso a un entendimiento diplomático. La 7953 división entre "guerristas" y "pacifistas" se fue ahondando con el 7954 transcurso del tiempo. 7955 7956 En cada campo se agitaban también otras banderas. Los 7957 guerristas eran decididos amigos del Perú. Los pacifistas 7958 partidarios de una componenda con Chile. Aquellos no objetaban 7959 al militarismo y veían en el General Eliodoro Camacho a su 7960 candidato a la presidencia como sucesor del General Campero. 7961 Estos eran civilistas y odiaban el caudillismo que abortó los 7962 engendros gubernamentales de Belzu, Melgarejo, Morales y 7963 Daza. Los guerristas eran liberales y anticlericales. Los 7964 pacifistas, conservadores ultramontanos. 7965 7966 Los principales guerristas eran Nataniel Aguirre, Belisario 7967 Salinas, Fernando E. Guachalla, Nicolás Acosta, Eliodoro Villazón, 7968 Pastor Sainz. Demetrio Calvimontes. Los principales pacifistas 7969 Mariano Baptista, Belisario Boeto, Aniceto Arce, Gregorio 7970 Pacheco, Manuel Argandoña, Jorge Oblitas, José Rosendo 7971 Gutiérrez, José María Santivañez, Miguel S. Taborga. Los 7972 guerristas tenían a sus adeptos entre la juventud y contaban con 7973 una mayoría en la Cámara de Diputados. Los pacifistas estaban 7974 representados por las gentes de mayor edad y sus líderes 7975 dominaban en el Senado. 7976 7977 La misión diplomática enviada a Santiago la integró el General 7978 Campero con un representante de cada bando. El señor Belisario 7979 Salinas pertenecía a las filas de los guerristas, el señor Belisario 7980 Boeto a la de los pacifistas. 7981 La "Misión de los dos Belisarios" encontró en Santiago un 7982 ambiente poco acogedor. Las medidas de carácter militar 7983 dispuestas en Bolivia las consideró el gobierno de La Moneda 7984 como una flagrante provocación. No le gustó que el segundo 7985 vencido en la guerra se presentase en su capital a pedir un 7986 tratado de paz con la cabeza enhiesta y los puños cerrados. 7987 Había esperado que lo hiciese de rodillas y con la cabeza gacha. 7988 7989 Los señores Salinas y Boeto iniciaron sus tratos con el canciller 7990 chileno el 7 de diciembre de 1883. Pidieron un tratado de paz 7991 que diese a Bolivia la propiedad de los territorios de Tacna y 7992 Arica como imprescindible salida al mar. El señor Luis Aldunate 7993 les respondió que su país no podía disponer de lo que todavía no 7994 era suyo; que lo único que era posible era suscribir un pacto de 7995 tregua que estableciese un modus vivendi hasta que el problema 7996 de Tacna y Arica con el Perú quedase resuelto y se creasen las 7997 condiciones para el tratado de paz. 7998 7999 Como los negociadores bolivianos no tenían autorización para 8000 negociar una tregua, la pidieron a su gobierno. Tardó dos meses 8001 en llegar. En el ínterin las conversaciones quedaron suspendidas. 8002 Se reanudaron a partir del 13 de febrero (1884), con el nuevo 8003 Ministro de Relaciones Exteriores de Chile, señor Aniceto Vergara 8004 Albano (que se hiciera famoso como adulón del tirano Mariano 8005 Melgarejo, 17 años atrás). 8006 8007 Las condiciones para la tregua presentadas por los 8008 representantes bolivianos fueron rechazadas de plano y 8009 substituidas por otras sobre las que el gobierno chileno exigió 8010 una respuesta categórica de aceptación o rechazo. 8011 8012 Los agentes de Campero acordaron que uno de ellos, el señor 8013 Boeto, viajase de inmediato a La Paz para explicar el dilema que 8014 se planteaba y recabar nuevas instrucciones. 8015 El Presidente de Chile, señor Domingo Santa María, que dirigía 8016 las negociaciones, unas veces personalmente y otras por 8017 intermedio de su canciller, se opuso al viaje de Boeto e insistió 8018 en que se le dijese rotundamente si se aceptaban o no las bases 8019 redactadas por su gobierno. 8020 8021 Los señores Salinas y Boeto escribieron angustiados a La Paz: 8022 "Se nos coloca en situación de firmar las condiciones impuestas 8023 o declarar rotas las negociaciones y regresar a Bolivia sin éxito 8024 alguno y sólo como precursores de una invasión que podría 8025 realizarse inmediatamente". 8026 8027 En efecto las tropas chilenas de Arequipa y Puno recibieron 8028 órdenes de "estar listas para cualquier emergencia". Su 8029 comandante, el Coronel Velásquez informó: "Tengo itinerarios 8030 completos sobre caminos, distancias, recursos, puntos 8031 estratégicos y otras importantes circunstancias vía La Paz". 8032 8033 El 3 de abril, los señores Salinas y Boeto expresaron en carta al 8034 General Narciso Campero: "Fuimos invitados a una nueva 8035 conferencia con el Presidente de la República y el Ministro de 8036 Relaciones Exteriores, para examinar un proyecto de protocolo 8037 final. Se nos ha dado plazo hasta mañana para aceptarlo o 8038 rechazarlo. No cabe duda que la invasión a Bolivia se ha hecho 8039 inminente. Nuestros medios de defensa serían demasiado 8040 deficientes para contrarrestar el ataque de un ejército numeroso, 8041 aguerrido, bien armado y mejor preparado. Las calamidades de 8042 una guerra, los estragos de una ocupación violenta de nuestras 8043 ciudades y aldeas y la vergüenza de una posible derrota se han 8044 presentado a nuestras conciencias de una manera abrumadora y 8045 en situación de poder alejar estos peligros hemos resuelto 8046 suscribir la tregua... ". 8047 8048 Con su conciencia abrumada por los temores expuestos, los dos 8049 Belisarios se dirigieron al Palacio de La Moneda al día siguiente y 8050 firmaron el documento redactado por el Gobierno de Chile. 8051 8052 El Pacto de Tregua de 4 de abril de 1884 estableció en sus 8053 cláusulas principales: "La República de Chile y la República de 8054 Bolivia celebran una tregua indefinida, y, en consecuencia, 8055 declaran terminado el estado de guerra. La República de Chile, 8056 durante la vigencia de la tregua continuará gobernando los 8057 territorios comprendidos desde el paralelo 23 hasta la 8058 desembocadura del río Loa (es decir, todo el litoral boliviano). En 8059 adelante, los productos chilenos se internarán en Bolivia libres 8060 de todo derecho aduanero". 8061 8062 El Gobierno del General Narciso Campero, cuyo canciller era el 8063 señor Nataniel Aguirre, aprobó el pacto mediante un decreto en 8064 el que se dejó constancia de que Bolivia no renunciaba a su 8065 derecho de propiedad sobre el litoral que dejaba temporalmente 8066 bajo el dominio de Chile. 8067 8068 8069 LII 8070 EL TRATADO DE PAZ DE 1904 8071 8072 El señor Domingo Santa María, eminente político de Chile, 8073 primero como el más influyente consejero de su predecesor en 8074 la primera magistratura de la nación, señor Aníbal Pinto, luego 8075 como su Ministro de Relaciones Exteriores y, finalmente, como 8076 Presidente de la República, fue siempre un convencido de que su 8077 país debía mantener una estrecha amistad y cooperación 8078 internacional con Bolivia; que Bolivia, puesta al lado de Chile 8079 debía tener un cómodo acceso al océano Pacífico, interponiendo 8080 su soberanía entre las de Chile y el Perú; que la zona costera 8081 que convenía a Bolivia era la de Tacna y Arica, corno reemplazo 8082 de la de Atacama, que debía pertenecer a Chile. Por eso, desde 8083 el comienzo de la guerra, pese a los sucesivos rechazos del 8084 gobierno boliviano, le hizo llegar proposiciones para llegar a esos 8085 resultados. Por eso, por no estar definida aún la situación de 8086 Tacna y Arica, a la espera del plebiscito señalado para 1893, 8087 prefirió que el estado de guerra con Bolivia quedase suspendido 8088 por medio de un Pacto de Tregua que estableciese un modus 8089 vivendi amistoso, aunque de subordinación de Bolivia a Chile, 8090 hasta que se diesen las condiciones apropiadas para un tratado 8091 definitivo de paz. 8092 8093 La política chilena en estos aspectos cambió con los sucesores 8094 del señor Santa María en la jefatura de su nación, comenzando 8095 por el señor José Manuel Balmaceda. No les interesó la amistad 8096 boliviana ni que Tacna y Arica se destinasen a Bolivia. Solamente 8097 en 1895, cuando las relaciones de Chile con la Argentina 8098 volvieron a ponerse muy tensas por los problemas del estrecho 8099 de Magallanes y la Patagonia y uno y otro país buscaron la 8100 amistad de Bolivia, Chile ofreció nuevamente a Bolivia que le 8101 daría Tacna y Arica si el plebiscito (que no se pudo realizar en 8102 1893 y seguía pendiente) le era favorable y, en caso contrario, la 8103 caleta Vitor u otra análoga. El Tratado de Transferencia de 8104 Territorios de 20 de mayo de 1895 que estableció ese 8105 compromiso no llegó a cumplirse por demoras en su 8106 perfeccionamiento debido a desconfianzas del Partido Liberal de 8107 Bolivia que militaba en la oposición y porque pasado el peligro 8108 de un rompimiento chileno-argentino, el gobierno de Santiago 8109 volvió a la posición balmacedista. 8110 8111 En 1901, el gobierno boliviano del Presidente José Manuel Pando 8112 fue notificado brutalmente al respecto con una nota del Ministro 8113 de Chile acreditado en La Paz, señor Abraham Koning. El 8114 documento comenzaba afirmando que el antiguo litoral boliviano 8115 era y sería siempre de Chile. Declaraba que no era posible 8116 ofrecer costa alguna a Bolivia porque el plebiscito convenido con 8117 el Perú para decidir la suerte de Tacna y Arica aún no podía 8118 realizarse. Reiteraba el ofrecimiento de dinero para que Bolivia 8119 pagase las deudas que había contraído por causa de la guerra y 8120 pagar la construcción de un ferrocarril desde un puerto chileno a 8121 una ciudad del altiplano. 8122 8123 Terminaba convirtiéndose en un brulote con frases de este jaez: 8124 "Es un error muy esparcido y que se repite diariamente en la 8125 prensa y en la calle, el opinar que Bolivia tiene derecho de exigir 8126 un puerto en compensación de su litoral. No hay tal cosa, Chile 8127 ha ocupado el litoral y se ha apoderado de él con el mismo título 8128 que Alemania anexó al Imperio la Alsacia y la Lorena, con el 8129 mismo título con el que los Estados Unidos de la América del 8130 Norte han tomado Puerto Rico. Nuestros derechos nacen de la 8131 victoria, la ley suprema de las naciones.- Que el litoral es rico y 8132 que vale muchos millones, eso ya lo sabíamos. Lo guardamos 8133 porque vale; que si nada valiera, no habría interés en su 8134 conservación". 8135 8136 Lo que correspondía a una comunicación de esa naturaleza era 8137 devolverla a su autor por abusiva e impropia en las relaciones de 8138 dos repúblicas, integrantes de la familia internacional americana. 8139 Empero, el gobierno del General Pando no obró así. Tenía para 8140 ello dos razones. La primera, la situación subordinada en que 8141 Bolivia se encontraba con respecto a Chile en virtud del Pacto de 8142 Tregua. Chile tenía asida a Bolivia por la garganta al mantener 8143 ocupados los puertos de Antofagasta y Arica, por los que recibía 8144 su abastecimiento de productos ultramarinos, con las respectivas 8145 aduanas bajo control chileno. 8146 8147 La segunda razón era la nueva mentalidad que dominaba a los 8148 conductores del país. Su creencia en la importancia de los 8149 ferrocarriles como factores decisivos para el progreso de una 8150 nación. Bolivia apenas contaba con el ferrocarril de Antofagasta 8151 a Oruro. Si quería unirse a las otras en el avance del progreso 8152 debía tener más vías férreas. 8153 8154 Esa mentalidad ferrocarrilera hizo creer a los líderes del 8155 dominante Partido Liberal que los ferrocarriles podían ser más 8156 importantes que un puerto propio para el desarrollo de la 8157 república. Los liberales, que antes de subir al gobierno clamaron 8158 apasionadamente durante años que el único camino del honor y 8159 la conveniencia para Bolivia era el de luchar a cualquier costo 8160 por la reivindicación de su litoral, una vez dueños del poder se 8161 mostraron dispuestos a renunciar a todo pedazo de costa a 8162 cambio de una red de ferrocarriles que vinculase las principales 8163 ciudades y centros de producción. En 1900, iniciaron la 8164 construcción del ferrocarril de La Paz a Guaqui. En 1902, 8165 contrataron con el gobierno de la Argentina la prolongación de la 8166 red ferroviaria de ese país hasta Tupiza. En 1903, por el Tratado 8167 de Petrópolis suscrito con el Brasil, renunciaron al territorio del 8168 Acre por dos millones y medio de libras esterlinas a ser 8169 invertidos en vías férreas y aproximación de una línea brasileña 8170 a la frontera boliviana frente a Guayaramerín. 8171 8172 En su respuesta al señor Koning, después de dos meses, el 8173 canciller boliviano, señor Eliodoro Villazón, dijo que "hay un 8174 derecho natural que, por encima de todas las conveniencias, 8175 asegura a toda nación por lo menos una pequeña costa", que 8176 "contra ese derecho Chile pretendía adjudicarse la costa 8177 perteneciente a Bolivia, excluyéndola del océano, condenándola 8178 a un aislamiento excepcional en América"; y que "esa sola 8179 consideración ya sería bastante para que las proposiciones de su 8180 nota no fueran equitativas". No obstante estas reflexiones, el 8181 gobierno del General Pando continuó negociando con el señor 8182 Koning y le dio a entender que renunciaría a sus reclamaciones 8183 sobre un puerto a cambio de una suma de dinero que le 8184 permitiese seguir con su plan de construcción de ferrocarriles. 8185 8186 Consecuente con esta idea, el General Pando pidió a su amigo 8187 Félix Avelino Aramayo que a su paso por Santiago, en su viaje a 8188 reasumir las funciones de plenipotenciario en Londres, 8189 auscultase si los ocupantes del Palacio de La Moneda estarían 8190 dispuestos a dar dos millones de libras esterlinas destinados a la 8191 construcción de ferrocarriles como compensación por el litoral 8192 boliviano. El señor Aramayo encontró ambiente muy favorable al 8193 respecto, siempre que el dinero fuese usado bajo control chileno, 8194 a fin de que no se desviase para la compra de armamentos con 8195 propósitos revanchistas. 8196 8197 La negociación iniciada confidencialmente por el señor Aramayo 8198 la prosiguió en forma oficial el señor Alberto Gutiérrez, en el 8199 carácter de plenipotenciario del gobierno del señor Ismael 8200 Montes, sucesor constitucional del General Pando. 8201 8202 El canciller chileno, señor Emilio Bello Codecido, y el señor 8203 Gutiérrez, sin mayores contratiempos que fallidos intentos de 8204 oposición peruana, llegaron a la concertación del Tratado de Paz 8205 y Amistad de 20 de octubre de 1904, con las siguientes 8206 estipulaciones principales: "Restablécense las relaciones de paz 8207 y amistad entre la República de Bolivia y la República de Chile, 8208 terminando, en consecuencia, el régimen establecido en el Pacto 8209 de Tregua. Por el presente tratado quedan reconocidos del 8210 dominio absoluto y perpetuo de Chile los territorios ocupados 8211 por éste en virtud del Pacto de Tregua. Con el fin de estrechar 8212 las relaciones políticas y comerciales de ambas repúblicas, las 8213 Altas Partes Contratantes convienen en unir el puerto de Arica 8214 con el Alto de La Paz, por un ferrocarril cuya construcción 8215 contratará a su costa el Gobierno de Chile. Chile contrae el 8216 compromiso de pagar las obligaciones en que pudiera incurrir 8217 Bolivia por garantías hasta de cinco por ciento sobre los capitales 8218 que se inviertan en los siguientes ferrocarriles, cuya construcción 8219 podrá emprenderse dentro del plazo de 30 años: Uyuni a Potosí, 8220 Oruro a La Paz, Oruro por Cochabamba a Santa Cruz, de La Paz 8221 a la región del Beni, y de Potosí por Sucre y Lagunillas a Santa 8222 Cruz. El Gobierno de Chile se obliga a entregar al Gobierno de 8223 Bolivia la cantidad de 300.000 libras esterlinas. La República de 8224 Chile reconoce a favor de Bolivia y a perpetuidad, el más amplio 8225 y libre derecho de tránsito comercial por su territorio y puertos 8226 del Pacífico". 8227 8228 El señor Bello Codecido ha reconocido en un libro cual fue una 8229 de las ocultas intenciones de su país al suscribir el tratado: ' 8230 Bolivia pasaba a ser aliada de Chile en la solución del problema 8231 con el Perú (por hacerse de Arica punto de partida del ferrocarril 8232 a La Paz) y los grandes intereses que se radicaban para uno y 8233 otro país en Tacna y Arica vinculaban ese territorio 8234 indiscutiblemente y para siempre al dominio de Chile". 8235 8236 El Presidente Ismael Montes, en su mensaje al Congreso de 8237 1906 declaró: "En 1904 se encontraba la república en condición 8238 semejante a la de un país semi soberano, desde que por 8239 consecuencia de los desastres de la guerra del Pacífico no podía 8240 legislar sobre sus aduanas, ni gozar con amplitud del derecho de 8241 libre tránsito, ni proteger ni defender sus industrias. Para romper 8242 la tregua, que nos imponía la sofocación... no hemos sufrido la 8243 obsesión de una política ridículamente sentimental, ni escuchado 8244 los consejos del egoísmo y la cobardía... Por eso no nos han 8245 sobrecogido los kilómetros de territorios ya perdidos 8246 definitivamente para Bolivia en el dominio de los hechos, desde 8247 el momento que fue ratificado el tratado chileno-peruano de 8248 Ancón, ya que después de ese fáctum ni la política ni la 8249 administración permitían a Chile establecer una solución de 8250 continuidad en sus conquistas. 8251 8252 Para aceptar el tratado y suscribirlo hemos deliberado con 8253 tranquilidad y hemos visto que la tregua nos sofocaba 8254 lentamente; que la guerra por la guerra misma, sin la más 8255 remota posibilidad de victoria, es una locura imperdonable, y 8256 que si los individuos tienen el derecho de suicidarse, no le es 8257 dado a ningún mandatario, por absoluto que se juzgue, el 8258 inmolar su patria. Ajustamos el tratado... porque en el hecho no 8259 había nada que ceder, desde que nuestros bienes concurrían ya 8260 de algún tiempo a formar la fortuna del vencedor, porque 8261 languidecíamos penosamente sin rentas, sin industria y sin 8262 esperanza... El gobierno cree, pues, haber cumplido su deber, un 8263 deber doloroso y sin gloria". 8264 8265 8266 LIII 8267 CULMINACIÓN DEL DRAMA BOLIVIANO: ENCIERRO CON 8268 DOBLE CENTINELA 8269 8270 Los líderes del Partido Liberal que concertaron el Tratado de Paz 8271 con Chile, a fin de librar a Bolivia de las opresivas condiciones en 8272 que vivía bajo el régimen establecido por el Pacto de Tregua, 8273 firmado 20 años antes, y que creyeron que los ferrocarriles 8274 podían sustituir con ventaja a un puerto propio, no tardaron en 8275 darse cuenta de su error. 8276 8277 Desde luego, el Tratado de 20 de octubre de 1904, al ser 8278 presentado al Congreso para su ratificación, fue combatido 8279 acremente por muchos legisladores. Se lo aprobó gracias a la 8280 disciplina del partido gobernante por una mayoría de 12 votos. 8281 Mereció 42 votos a favor y 30 en contra. Personajes potosinos, 8282 interpretando el sentir de muchos de sus compatriotas lo 8283 calificaron como el "Tratado más desastroso para la patria, el 8284 más lesivo a su soberanía, el más humillante, porque no era más 8285 que una venta simulada a vil precio, que Chile pagaba con una 8286 miserable parte de los ingentes ingresos que le producía el 8287 mismo territorio que compraba". 8288 8289 El propio Partido Liberal reaccionó contra su política de 1904 a 8290 los seis años, en 1910, durante el régimen del Presidente 8291 Eliodoro Villazón. El Ministro de Relaciones Exteriores, señor 8292 Daniel Sánchez Bustamante, al saber que Perú y Chile volvían a 8293 discutir respecto a la realización del plebiscito que debía decidir 8294 el futuro de Tacna y Arica, escribió al canciller de uno y otro 8295 país: "Chile y el Perú, siguiendo el dictamen de muchos de sus 8296 hombres públicos, deberían dejar de ser colindantes, 8297 estableciendo la soberanía territorial de Bolivia en una zona 8298 intermedia sobre la costa del Pacífico... Bolivia no puede vivir 8299 aislada del mar. Ahora y siempre, en la medida de sus fuerzas, 8300 hará cuanto le sea posible para llegar a poseer por lo menos un 8301 puerto cómodo sobre ese océano". La gestión no dio ningún 8302 resultado. 8303 8304 Tres años más tarde, en 1913, cuando el señor Ismael Montes 8305 volvía de Europa a asumir por segunda vez la Presidencia 8306 Constitucional de la República, a su paso por Santiago reunió en 8307 su hotel a varios senadores y diputados chilenos y les explicó la 8308 indispensable necesidad que Bolivia tenía de un puerto propio. 8309 Su empeño no dio tampoco resultado alguno. 8310 8311 Las románticas prédicas del Presidente de los Estados Unidos, al 8312 finalizar la Primera Guerra Mundial, para que se estableciese un 8313 nuevo orden internacional en el que reinase la paz y la justicia 8314 bajo la égida de una Sociedad de Naciones, despertó nuevas 8315 esperanzas en Bolivia. El mandatario norteamericano había dicho 8316 en el Senado de su país que "debía garantizarse a todo pueblo 8317 una salida directa a las grandes vías marítimas" y que "ninguna 8318 nación debía estar privada de los caminos del mar". 8319 8320 Don Ismael Montes, esta vez de vuelta en su puesto de Ministro 8321 de Bolivia en París, cumpliendo instrucciones de su sucesor en la 8322 Presidencia de la República, señor José Gutiérrez Guerra, y de su 8323 Ministro de Relaciones Exteriores, señor Alberto Gutiérrez, en 8324 comunicación de 14 de enero de 1919 pidió al gobierno de 8325 Francia, país que junto con Inglaterra eran los principales 8326 promotores de la Sociedad de las Naciones, que al crearse este 8327 organismo dictase una sentencia que incorporase los territorios 8328 de Tacna y Arica a Bolivia por no desempeñar "ningún rol 8329 esencial en la actividad económica del Perú o Chile" y ser, en 8330 cambio, para Bolivia, "llave de su comercio y de su seguridad". 8331 8332 La revolución de 12 de julio del año siguiente, que derrocó al 8333 señor Gutiérrez Guerra y puso fin a la hegemonía que durante 8334 dos décadas había detentado el Partido Liberal, cambió también 8335 la orientación de la política internacional. El nuevo partido 8336 gobernante, el Partido Republicano, envió una delegación 8337 (integrada por Félix Avelino Aramayo, Franz Tamayo y Florián 8338 Zambrana) a Ginebra, a pedir a la recién nacida Sociedad de 8339 Naciones dictaminase la revisión del Tratado de Paz de 1904, a 8340 fin de que Bolivia reivindicase todo el litoral que poseía antes de 8341 la guerra del Pacífico. La entidad ginebrina se excusó de 8342 considerar el asunto haciendo notar que había sido presentado 8343 cuando estaba vencido el plazo establecido para la inscripción de 8344 temas de discusión en la agenda de su Primera Asamblea. 8345 Bolivia acreditó otra delegación al año siguiente, ante la 8346 Segunda Asamblea (Carlos Víctor Aramayo y Demetrio Canelas) 8347 y reiteró su demanda. En esta oportunidad, la Sociedad la 8348 desestimó basándose en un informe de una comisión de tres 8349 juristas que dijeron que "la Sociedad de las Naciones no podía 8350 modificar por sí ningún tratado, ya que esto era competencia 8351 exclusiva de los Estados contratantes". 8352 8353 En vista de manifestaciones de la delegación chilena en Ginebra 8354 de que el problema podría resolverse mediante conversaciones 8355 directas, el gobierno boliviano envió a Santiago, primero al señor 8356 Macario Pinilla (1922) y luego al señor Ricardo Jaimes Freyre 8357 (1923). Uno y otro fueron notificados, tanto por el Presidente de 8358 la República, señor Arturo Alessandri, como su canciller, que el 8359 Tratado de Paz de 1904 era no revisable e irreversible. 8360 8361 En tanto Bolivia se afanaba en buscar alguna salida a su 8362 desventajosa posición mediterránea, Chile y Perú no llegaban a 8363 ponerse de acuerdo sobre la forma de realizar el plebiscito 8364 establecido en el Tratado de Ancón, destinado a definir el futuro 8365 de Tacna y Arica. Suspendieron sus relaciones diplomáticas en 8366 1910. Cada país quería llegar a la consulta popular seguro de 8367 que le sería favorable. 8368 El Gobierno de los Estados Unidos ofreció su mediación a partir 8369 de 1922, pero sus esfuerzos resultaron vanos. Los comicios no 8370 pudieron realizarse ni bajo la supervigilancia de dos generales de 8371 esa nación. 8372 8373 El Secretario de Estado, Frank B. Kellog, quiso cortar el nudo 8374 gordiano del problema y sorprendió a todos proponiendo en un 8375 documento dirigido a los gobiernos de La Paz, Lima y Santiago 8376 (enero 20, 1926) que Tacna y Arica pasasen a ser propiedad de 8377 Bolivia a cambio de una "adecuada compensación" en dinero que 8378 esta república pagaría a las de Perú y Chile. Naturalmente que 8379 Bolivia aceptó la idea de inmediato. Chile declaró que "la 8380 proposición iba más allá de las concesiones que estaba dispuesto 8381 a hacer". El Perú expresó que "no podía aceptar la cesión 8382 propuesta, a nadie, ni por venta ni de otro modo". 8383 8384 La proposición Kellog no tuvo más efecto que el de hacer 8385 comprender a los gobiernos de Lima y Santiago que si no 8386 llegaban a un acuerdo la opinión internacional favorecería cada 8387 vez con más fuerza el interés que Bolivia tenía en esos 8388 territorios. 8389 8390 La posibilidad de que Tacna y Arica pudiesen pertenecer un día a 8391 Bolivia era particularmente desagradable para el canciller chileno 8392 Conrado Ríos Gallardo, que sentía una gratuita antipatía por la 8393 nación del altiplano. Con anuencia del Presidente de la 8394 República, General Carlos Ibáñez, reanudó relaciones 8395 diplomáticas con el gobierno peruano del dictador Augusto B. 8396 Leguía. El embajador chileno destacado a Lima, señor Emilio 8397 Figueroa Larraín, propuso la división salomónica de los territorios 8398 en disputa: Arica para Chile y Tacna para el Perú. Después de 8399 algún regateo de parte peruana, se llegó a un acuerdo sobre esa 8400 base. Se lo cubrió con la apariencia de un fallo arbitral del 8401 Gobierno de los Estados Unidos porque Leguía no quiso aparecer 8402 ante su pueblo como autor directo de la entrega definitiva de 8403 Arica a Chile. 8404 8405 Fue así como, mediante el Tratado de Amistad y Límites de 3 de 8406 junio de 1929, la provincia de Arica (15.341 Km.2) pasó a ser 8407 propiedad de Chile y la provincia de Tacna (8.678 Km.2 más 980 8408 de Tarata, entregados antes) fue devuelta a la soberanía del 8409 Perú.A proposición del canciller Conrado Ríos Gallardo, aceptada 8410 con entusiasmo por el dictador Augusto B. Leguía, en la misma 8411 fecha se firmó un Protocolo Complementario por el que Chile y el 8412 Perú se comprometieron a "no ceder a una tercera potencia la 8413 totalidad o parte de esos territorios, sin previo acuerdo entre 8414 ellos". 8415 8416 El protocolo en cuestión no podía tener otro propósito que 8417 consolidar el encierro mediterráneo de Bolivia con doble 8418 centinela. Por él, Chile se libraba de que Bolivia le exigiese el 8419 cumplimento de la oferta, tantas veces repetida desde el 8420 comienzo de la guerra del Pacífico, de que podría ser dueña de 8421 Arica. 8422 8423 Los Ibáñez, Leguía y Gallardo, que con los documentos de 3 de 8424 junio de 1929 creyeron poner un sello de paz definitiva en las 8425 costas del Pacífico, se equivocaron rotundamente. El puerto de 8426 Arica, geográficamente boliviano, históricamente peruano y fruto 8427 bélico para Chile, en cuya plaza principal debía levantarse un 8428 monumento en el que Eduardo Avaroa, Miguel Grau y Arturo Prat 8429 se den un abrazo, simbolizando una auténtica hermandad de sus 8430 naciones, es por obra y gracia del maquiavélico protocolo un 8431 inquietante foco de convergencia de intereses antagónicos. Por 8432 culpa de él, la guerra del Pacífico ha sido una guerra sin paz, aún 8433 después de transcurridos cien años de haberse callado los 8434 cañones. 8435 8436 (Este artículo pone punto final a la serie con la que al autor 8437 quiso contribuir a la recordación y esclarecimiento de los 8438 antecedentes, desarrollo y corolario diplomático de la Guerra del 8439 Pacífico, al cumplirse 100 años del enclaustramiento geográfico 8440 de Bolivia). 8441 8442 8443 8444 8445 APENDICE 8446 MILITARES Y "CUCALONES" CHILENOS 8447 8448 Uno de los aspectos que menos se conocen sobre la Guerra del 8449 Pacífico, por lo menos en Bolivia, es el referente a las constantes 8450 desavenencias que se produjeron entre los gobernantes de Chile 8451 y los jefes de la Marina y el Ejército de ese país. 8452 8453 El profesor de Historia de la California State University de los 8454 Estados Unidos de Norteamérica, William F. Sater, ha publicado 8455 un libro titulado "Chile and the War of the Pacific" en el que 8456 presta especial atención a ese problema. El profesor Sater vivió 8457 cerca de 20 años en Santiago acumulando información para su 8458 obra. 8459 8460 Las dificultades que el presidente chileno, Aníbal Pinto, tuvo con 8461 los sucesivos comandantes del Ejército (generales Justo Arteaga, 8462 Erasmo Escala y Manuel Baquedano) y con los jefes de la Marina 8463 (almirantes Williams Rebolledo y Galvarino Riveros), recuerda lo 8464 que sucedió, aunque con muy diferentes resultados, al 8465 presidente de Bolivia, Daniel Salamanca, durante la Guerra del 8466 Chaco con los conductores del ejército en campaña (generales 8467 Carlos Quintanilla, Hans Kundt y Enrique Peñaranda). 8468 8469 El señor Salamanca nunca logró imponer su autoridad sobre 8470 dichos jefes, temeroso de que se produjese una reacción que 8471 tuviese por consecuencias la caída de su gobierno y la pérdida 8472 del Chaco. No pudo dejar en el seno del Comando Superior a su 8473 colaborador político, el doctor Joaquín Espada, para que sirviese 8474 de coordinador de las relaciones entre los conductores civiles y 8475 militares de la campaña. Cuando, después de más de dos años 8476 de guerra, se decidió por fin a cambiar al personal superior del 8477 alto mando, no obtuvo otro resultado que la verificación de uno 8478 de sus temores: fue despojado del mando supremo de la nación 8479 por los jefes que no se resignaron a perder sus puestos. 8480 8481 En la Guerra del Pacífico, en el lado chileno, el presidente Aníbal 8482 Pinto y sus colaboradores del Partido Liberal pudieron establecer 8483 su autoridad sobre el exclusivismo con el que los jefes de las 8484 fuerzas armadas querían manejar la contienda bélica, pero no 8485 sin que se produjeran tensiones y desavenencias. 8486 8487 El mandatario chileno contó con algo muy importante, que le 8488 faltó al doctor Salamanca, la tradición de supremacía civil en la 8489 vida política de su país. Contrariamente a lo ocurrido en la 8490 historia chilena, lo tradicional en Bolivia ha sido el militarismo, 8491 que con el manido pretexto de "salvar a la patria", abusando de 8492 la fuerza de las armas, desplaza, arrincona y amedrenta al 8493 civilismo toda vez que la ambición personal impulsa a ello al 8494 caudillo de mayor popularidad entre sus camaradas. 8495 8496 Al ocurrir la Guerra del Pacífico, los políticos civiles de Chile 8497 gozaban de franca hegemonía en la vida pública. Gracias a eso, 8498 se atrevieron y pudieron cambiar a los conductores de la Marina 8499 y el Ejército las veces que así lo juzgaron conveniente para el 8500 mejor resultado de las campañas navales y terrestres. Y aún 8501 mas, pese a la oposición de los altos jefes, colocaron al lado de 8502 ellos, en el seno de los comandos supremos, a personajes civiles 8503 premunidos de amplia autoridad, convirtiéndolos en los virtuales 8504 conductores de las operaciones bélicas, los señores Rafael 8505 Sotomayor y José Francisco Vergara. 8506 8507 La opinión pública siguió de cerca la rivalidad entre los políticos 8508 liberales y los militares. El humor chileno apodó "cucalones" a 8509 los civiles metidos a estrategas, ya sea a los que estaban 8510 actuando en los comandos en campaña o a los que alardeaban 8511 de sus conocimientos castrenses en las calles, plazas o cafés. El 8512 apodo de "cucalón" se tomó del apellido del desgraciado 8513 periodista peruano, Antonio Cucalón, que viajaba en el 8514 acorazado "Huáscar" y se cayó al mar, ahogándose. 8515 8516 Al comienzo de la guerra, el presidente Pinto urgió al almirante 8517 Juan Williams Rebolledo, héroe de la guerra contra España en 8518 1865, que atacase y si posible destruyese a la flota peruana en 8519 su base del Callao. Williams Rebolledo desobedeció, por temor a 8520 los poderosos cañones de la fortaleza de ese puerto. Prefirió 8521 bloquear Iquique, por donde se exportaba el salitre de Tarapacá, 8522 principal fuente de recursos del gobierno de Lima, confiado en 8523 que los barcos enemigos vendrían a buscarlo allí. El señor Rafael 8524 Sotomayor, que estaba en el comando de Williams, se dio cuenta 8525 de sus muchas fallas. Desde luego, no se entendía con el 8526 comandante del Ejército, general Erasmo Escala, que le pedía 8527 mayor apoyo logístico para poder hacer la campaña de conquista 8528 del departamento peruano de Tarapacá. Sin obtener autorización 8529 previa del gobierno, volvió con su flota a Antofagasta. Las 8530 correrías del almirante peruano Miguel Grau con su "Huáscar" 8531 por toda la costa chilena, sin que Williams pudiera hacer nada en 8532 su contra, desacreditaron más al marino chileno. Además, se 8533 comentaba que bebía con exceso y que padecía de sífilis y de 8534 una aguda hipocondría. Renunció a su puesto en agosto de 8535 1879, en cuanto supo que el gobierno había resuelto retirarlo de 8536 su mando. 8537 8538 No fue fácil elegir a su sucesor., Los marinos chilenos de mayor 8539 graduación tenían fama de alcohólicos e incompetentes. El 8540 gobierno de La Moneda se decidió por el capitán Galvarino 8541 Riveros. Sus relaciones con los señores Sotomayor y Vergara 8542 nunca pudieron ser francas y cordiales. Tuvo la suerte de que 8543 bajo su mando Chile definiese a su favor la guerra naval en la 8544 batalla de Angamos, en la que se capturó al temible "Huáscar" y 8545 murió su heroico comandante. 8546 8547 Las relaciones del gobierno de Santiago con los comandantes del 8548 Ejército no fueron mejores que con los de la Marina. Como uno 8549 de los generales de Bolivia al iniciarse la guerra de 1932, que 8550 declaró que expulsaría a los paraguayos del Chaco a fuetazos, el 8551 general chileno Justo Arteaga Cuevas, de 74 años, anunció que 8552 obtendría una "decisiva y fácil" victoria sobre bolivianos y 8553 peruanos. Pero antes de iniciar hostilidades, pidió más armas, 8554 más municiones y más recursos sanitarios. El gobierno no tardó 8555 en darse cuenta de que no estaba a la altura de sus 8556 responsabilidades. Mostraba señales de senilidad. Poseía una 8557 memoria muy débil. Carecía de inteligencia, audacia y actividad 8558 para dirigir una campaña larga. No faltó quien dijese al 8559 Presidente de la República que el Comandante en Jefe que había 8560 elegido estaba loco. Las primeras semanas de la guerra se 8561 instaló en Antofagasta y su oposición a moverse de ese puerto 8562 se atribuyó a su excesiva edad y a su ineptitud. El señor José 8563 Francisco Vergara, enviado por el gobierno para asesorarlo, 8564 escribió describiéndolo como "un hombre viejo, en completa 8565 decadencia, con una inteligencia que nunca había tenido buena 8566 fama". 8567 8568 El ministro Domingo Santa María se trasladó a Antofagasta con 8569 el propósito de convencer al general que era tiempo de que 8570 buscase un enfrentamiento con el enemigo en el departamento 8571 peruano de Tarapacá. Arteaga ofreció hacerlo, pero no llegó a 8572 cumplir su promesa. Más bien, renunció a su cargo en julio de 8573 1879, liberando al gobierno de Santiago de su intención de 8574 destituirlo, cosa que le habría traído complicaciones políticas por 8575 la influencia que uno de sus hijos, Domingo Arteaga, tenía en el 8576 Poder Legislativo como diputado, yen la opinión pública como 8577 editor del diario "Los Tiempos". 8578 8579 Como reemplazante de Arteaga, el gobierno designó 8580 Comandante en Jefe del Ejército en Campaña al general Erasmo 8581 Escala, católico pechoño, que obligaba a los miembros de su 8582 Estado Mayor y a las tropas a oír frecuentes misas. Por ejemplo, 8583 después de la batalla de San Francisco, en vez de hacer 8584 perseguir de inmediato a las fuerzas bolivianas y peruanas 8585 derrotadas, ordenó que su tropa asistiese a una misa de acción 8586 de gracias, con la que dio tiempo para que los bolivianos 8587 huyesen hasta su patria y los peruanos se hiciesen fuertes en la 8588 localidad de Tarapacá, donde días después infligieron una terrible 8589 sangría a los chilenos. Se lo consideraba demasiado susceptible, 8590 irascible y hasta violento, con salud declinante, obsesionado con 8591 la atención de detalles sin importancia, que distraían la mayor 8592 parte de su tiempo. En los consejos de guerra, seguía la opinión 8593 de la última persona que había tomado la palabra. Su confesor 8594 tenía dominante influencia sobre él, lo mismo que el coronel 8595 colombiano Zubiría, adscrito a su comando. Entró en conflicto 8596 con el jefe de su Estado Mayor, el coronel Pedro Lagos, y 8597 solamente se comunicaba con él por escrito, aunque ambos 8598 estuviesen en el mismo campamento. El señor José Francisco 8599 Vergara recibió la misión de asesorarlo, como había tratado de 8600 hacer con el general Arteaga. El ministro Santa María le 8601 recomendó a su correligionario político: "No te separes de su 8602 lado. Tienes que ser el alma de su alma". 8603 8604 El general Escala tenía el apoyo del Partido Conservador, que lo 8605 veía como su candidato para las elecciones presidenciales de 8606 1881. Su caída tuvo por origen una de sus frecuentes 8607 desinteligencias con sus colaboradores inmediatos. El coronel 8608 Francisco Bar-celó ordenó que se diesen cien azotes a un 8609 soldado a quien se le escapó un disparo de fusil en 8610 circunstancias peligrosas. Escala anuló el castigo y relevó a 8611 Barceló de su comando. El coronel Pedro Lagos, jefe de su 8612 Estado Mayor, apoyó a Barceló. En represalia, el general Escala 8613 prohibió que Lagos pudiese hacer uso del telégrafo sin expresa 8614 autorización suya. 8615 8616 Lagos renunció, acusando a Escala de haber autorizado el 8617 saqueo de Moliendo, que dio mala fama al ejército chileno. 8618 Intervino el señor Rafael Sotomayor ordenando que Lagos se 8619 trasladase a Santiago para salir de la jurisdicción militar de 8620 Escala. Este se enfureció y telegrafió su renuncia al gobierno, 8621 confiado en que no sería aceptada por el gran apoyo que tenía 8622 del Partido Conservador. En seguida, recapacitó e hizo otro 8623 telegrama retirando su renuncia y pidiendo permiso para viajar 8624 él también a Santiago, a explicar los antecedentes de su 8625 entredicho con el coronel Lagos. Mientras estaba en alta mar, el 8626 gobierno aceptó su renuncia y cuando el general llegó a la 8627 capital tuvo la gran sorpresa de enterarse que ya no era más 8628 comandante en jefe del Ejército. Sus partidarios lo defendieron 8629 diciendo que el gobierno destituía a los generales victoriosos 8630 "como si fueran inútiles piezas de mobiliario", con la intención de 8631 que ningún militar emergiese de la guerra como héroe y pusiese 8632 en peligro la hegemonía política de los civiles. Un periodista llegó 8633 a comparar al general Escala con Jesucristo. 8634 8635 El gobierno demoró una semana en elegir al sucesor del general 8636 Erasmo Escala, decidiéndose finalmente por el general Manuel 8637 Baquedano, que comenzó sus funciones ordenando un 8638 desembarco en Ilo, la toma de Moquegua y alcanzando su 8639 primera victoria al desalojar a los peruanos de la meseta de Los 8640 Ángeles. Siguió en busca del ejército peruano-boliviano, 8641 parapetado a 11 kilómetros delante de la ciudad de Tacna, en el 8642 Alto de la Alianza. El señor José Francisco Vergara, que además 8643 de asesor civil del alto mando chileno, había asumido el 8644 comando de la caballería, aconsejó que en vez de atacar 8645 frontalmente al enemigo, como se proponía el general en jefe, la 8646 fuerza bajo su mando diese un rodeo para salir a la retaguardia 8647 enemiga y cortar el camino entre Tacna y el Alto de la Alianza, 8648 privando así a bolivianos y peruanos de su base de 8649 aprovisionamiento de agua, convirtiéndolos en una presa más 8650 fácil, sin posibilidades de escape. Baquedano mantuvo su 8651 decisión inicial y lanzó a sus fuerzas, incluyendo la caballería de 8652 Vergara, a una ofensiva frontal. 8653 8654 Los chilenos ganaron la batalla, pero con un excesivo costo en 8655 sangre y vidas. Un treinta por ciento de los participantes cayeron 8656 heridos o muertos. Por esta razón, el resultado de la batalla de 8657 Tacna o del Alto de la Alianza no satisfizo a la opinión pública 8658 chilena. Un diario expresó que en vez de festejarse el supuesto 8659 triunfo con "un baile de la victoria", debía recordárselo con "un 8660 baile de la muerte". 8661 8662 Errázuriz, editor de "La Patria", comparó a Baquedano con un 8663 carnicero que sacrificó inútilmente la vida de miles de sus 8664 soldados, terminando su artículo con esta frase: "El General en 8665 Jefe ha actuado con los métodos de los médicos del siglo 17: 8666 sangrías para toda clase de enfermedades". 8667 8668 Ante ataques frontales tan despiadados, el general Baquedano 8669 no encontró otra alternativa que renunciar a su candidatura a la 8670 Presidencia de la República. Los liberales y antimilitaristas 8671 volvieron a ganar las elecciones de 1881 con su candidato el 8672 señor Domingo Santa María y otra vez las de 1886, con don José 8673 Manuel Balmaceda. 8674 8675 Los defensores de Baquedano sostuvieron que con los ataques 8676 frontales Baquedano no había hecho otra cosa que cumplir 8677 órdenes expresas emanadas del Palacio de La Moneda. El 8678 gobierno negó tal afirmación y el ministro Santa María se refirió 8679 al "brutal ataque frontal" con el cual Chile sacrificó inútilmente a 8680 sus soldados, pues no evitó que el enemigo escapase, dispuesto 8681 a continuar la guerra. Otros críticos pidieron la renuncia de 8682 Baquedano. El militar se defendió burlándose de "la estrategia 8683 de la pluma y el tintero", que era "muy fácil, muy barata y sin 8684 peligros". 8685 8686 En la campaña contra Lima, el señor José Francisco Vergara, 8687 promovido a Ministro de Guerra en Campaña, volvió a opinar a 8688 favor de una estrategia de flanqueo, en oposición a las 8689 intenciones del general Baquedano, que quería lanzar a sus 8690 fuerzas en forma directa contra los peruanos atrincherados 8691 delante de Chorrillos y Miraflores. El militar mantuvo su decisión 8692 declarando: "Donde hay lucha sólo mando yo". Los chilenos 8693 ganaron las batallas de Chorrillos y Miraflores y ocuparon Lima, 8694 pero, otra vez, a un excesivo costo en sangre. 8695 8696 El Partido Conservador invitó al general Baquedano a ser su 8697 candidato para la elección presidencial de 1881. Comentó el 8698 político liberal Eulogio Altamirano: "Pobre general, los 8699 conservadores no le están haciendo ningún favor. Hubiera podido 8700 volver a la patria a recibir aplauso unánime, pero ahora lo van a 8701 convertir en víctima de los insultos de una mitad de la 8702 población". Así fue. Baquedano volvió a Santiago y fue piedra de 8703 choque de las corrientes civilista y militarista que se enfrentaron 8704 en el Chile de la inmediata posguerra. Sus enemigos dijeron que 8705 pudo haber sido un buen soldado en la contienda bélica, pero 8706 que eso no lo calificaba para conducir al país en tiempo de paz. 8707 En la prensa opuesta a su candidatura presidencial se dijo que 8708 no merecía ser cabeza de la nación quien había enlutado a más 8709 de 5.000 familias chilenas, que convertiría a Chile en un cuartel, 8710 substituyendo la ley por sus caprichos, infectando el país con el 8711 cáncer del militarismo que hacía tanto daño al Perú y a Bolivia, 8712 que sería el caballo de batalla de la claque conservadora- 8713 ultramontana, de la milicia negra y del partido de la sotana, el 8714 inaugurador de una nueva era de intolerancia, representante de 8715 la aristocracia pelucona, candidato de las espadas y las sotanas, 8716 un globo inflado por los curas. Refiriéndose a su tartamudeo, el 8717 periódico "El Corvo" llegó a decir que la habilidad de hablar era 8718 lo único que distinguía al hombre de los animales. Isidoro 8719 8720 8721 CHILENOS CON COMPLEJO DE CULPABILIDAD 8722 8723 Al leer los diarios pasados tratando de ponerme al día en lo 8724 ocurrido en la patria durante una larga ausencia, he encontrado 8725 el texto de la carta dirigida por el Cónsul de Bolivia en Santiago, 8726 señor Jorge Siles Salinas, al director de "El Mercurio" rectificando 8727 un artículo publicado en el mismo periódico por el señor Jorge 8728 Garfias Villarreal, presidente del Instituto Histórico de Chile, en 8729 el que sostiene que la Audiencia de Charcas nunca llegó hasta la 8730 costa del océano Pacífico. 8731 8732 Los ciudadanos chilenos con relación al problema de la 8733 mediterraneidad de Bolivia pueden clasificarse en cuatro 8734 categorías: 8735 1) Los pocos honestos, que reconocen que Bolivia tiene derecho 8736 a recuperar una salida territorial soberana hasta el océano 8737 Pacífico. 8738 2) Los que nos niegan tal derecho sosteniendo que como colonia 8739 española nunca tuvimos acceso al mar. 8740 3) Los partidarios de una geopolítica de injusticia, a quienes no 8741 interesan antecedentes históricos y creen que a Chile le conviene 8742 tener a Bolivia aprisionada en los Andes. 8743 4) La gran mayoría de los indiferentes a los que importa un 8744 bledo la desgraciada suerte de una nación vecina. 8745 5) 8746 Ya no hay chilenos con la franqueza brutal de Abraham Koning, 8747 que confesó que Chile se adueñó de territorio boliviano porque 8748 valía. 8749 8750 De las cuatro categorías, los de la primera son dignos de nuestra 8751 simpatía. Los segundos son mejores que los de la tercera y la 8752 cuarta, porque, por lo menos, demuestran tener cierto 8753 sentimiento de culpabilidad y buscar la manera de acallar 8754 remordimientos de conciencia queriendo engañarse a sí mismos 8755 y engañar a otros con un solemne infundio. Porque sólo como 8756 intento de librarse de un complejo de culpabilidad puede 8757 explicarse la actitud de quienes afirman que la Audiencia de 8758 Charcas (cuyo territorio heredó Bolivia) no llegaba hasta el 8759 océano. 8760 8761 Tan peregrina afirmación ha sido refutada contundentemente por 8762 otros autores bolivianos y ahora me entero que volvió a hacerlo 8763 con Jorge Siles Salinas. En mis recientes investigaciones en el 8764 archivo general de Indias de Sevilla, encontré varios documentos 8765 que abonan abundantemente lo expuesto por aquellos 8766 compatriotas y son más pruebas irrefutables de que el partido o 8767 provincia de Atacama, con su extensa costa sobre el océano 8768 Pacífico, durante todo el período colonial hispano, formó parte 8769 del territorio de la Audiencia de Charcas y en ningún momento 8770 de la Gobernación de Chile. 8771 8772 En su oportunidad, hice llegar a nuestro Ministerio de Relaciones 8773 Exteriores el texto completo de tales documentos, por 8774 intermedio de la Embajada de Bolivia en Madrid. Por razones de 8775 espacio, en el presente opúsculo sólo puedo mencionarlos 8776 sucintamente: 8777 8778 En el legajo Charcas número 133, figura una carta del cura de 8779 Atacama, Álvaro Suárez de Loyola, al Arzobispo de Chuquisaca, 8780 de 8 de octubre de 1613, defendiendo al párroco del puerto de 8781 Cobija de acusaciones que en su contra ha hecho el corregidor 8782 de la provincia. 8783 8784 En el legajo Charcas número 24, hay una carta del oidor de la 8785 Audiencia de Charcas, Juan de la Peña Salazar, dirigida al Rey, 8786 con fecha 22 de marzo de 1683, informándole de la poca 8787 atención que reciben los indios de Cobija en el suministro de los 8788 santos sacramentos y avisando que se ha recomendado al 8789 Arzobispo de Chuquisaca que corrija ese descuido. 8790 8791 En el legajo Charcas número 417, está la respuesta del Rey al 8792 oidor Peña Salazar, aprobando la gestión que hizo ante el 8793 Arzobispo de Chuquisaca para que se atienda mejor las 8794 necesidades religiosas de los habitantes de Cobija. 8795 8796 En el legajo Charcas número 420, se guarda una comunicación 8797 del Rey a los oficiales de la Real Audiencia de la Plata 8798 (Chuquisaca), avisándoles haber nombrado a don Isidro Pérez 8799 Erasso, Corregidor de la provincia de Atacama, por 5 años. 8800 8801 En el legajo Charcas número 164, se encuentra un documento 8802 interno del Consejo Supremo de Indias, que dice textualmente: 8803 "El Corregimiento de Atacama, es uno de los que proveía el 8804 Virrey en la Jurisdicción de Charcas y Su Majestad nombró a don 8805 Isidro Pérez de Erasso. En 29 de octubre de 1705 se nombra a 8806 don Juan Fernández Salazar". 8807 8808 En el legajo Charcas número 165, una de las páginas es una 8809 carta al Rey de don Rodrigo Ginel y Alcantarilla, de 7 de enero 8810 de 1709, pidiendo el puesto de Corregidor de Atacama, "del 8811 Reino del Perú, jurisdicción de Charcas". 8812 8813 En el legajo Charcas número 166, se ve un documento interno 8814 del Consejo Supremo de Indias que reza textualmente: "Sevilla, 8815 a 8 de septiembre de 1731 años. Su Majestad ha hecho merced 8816 a Don Pedro de Navarro, en atención a sus servicios y al que ha 8817 hecho de 2.000 pesos de a 10 reales de plata cada uno, del 8818 corregimiento de Atacama, provincia de Charcas". 8819 8820 En el mismo legajo Charcas número 166, figura este decreto del 8821 Consejo Supremo de Indias: "Sevilla, a 9 de agosto de 1732. Su 8822 Majestad ha hecho merced a don Silvestre Fernández de 8823 Baldivieso y Arbizu del corregimiento de Atacama, provincia de 8824 Charcas. Ejecútese como Su Majestad manda". 8825 8826 En el legajo Charcas número 474, está un informe elevado al 8827 Rey por los oficiales reales de la Villa Imperial de Potosí, en 8828 fecha 7 de noviembre de 1765, dando los nombres de las 8829 personas que tienen a su cargo los corregimientos de Santa Cruz 8830 de la Sierra, Cochabamba, Porco, Potosí, Mizque, Yamparaez, 8831 Tomina, Pilaya y Paspaya o Cinti, Chichas, Tarija, Lipes y 8832 Atacama. 8833 8834 En el legajo Charcas número 482, se halla una Orden General 8835 del Rey, fechada en Madrid el 3 de diciembre de 1769, que dice 8836 así "Presidente y Oidores de mi Real Audiencia de la ciudad de 8837 La Plata, en la provincia de los Charcas. A don Francisco de 8838 Argumaniz he hecho merced del corregimiento de Atacama, en 8839 jurisdicción de esa audiencia, para que entre a servirlo por 5 8840 años". 8841 8842 En el legajo Charcas número 484, una de las páginas es un 8843 informe del arzobispo de Chuquisaca, Pedro Miguel de 8844 Argandoña, de 12 de abril de 1769, en el que da cuenta al Rey 8845 del número de curatos que tiene cada subdivisión eclesiástica de 8846 su diócesis: 16 curatos la provincia de Chayanta, 13 de la de 8847 Cochabamba, 17 la de Carangas, 5 de la de Sicasica, 10 la de 8848 Paria, 3 la de Pacajes, 7 la de Chichas, 6 la de Pilaya, 9 de 8849 Tomina, 3 la de Lipes y 2 la de Atacama. De Atacama dice que 8850 tiene una parroquia en San Pedro y otra en Chiuchiu. 8851 8852 En el legajo Charcas número 425, figura un auto administrativo 8853 de la audiencia de Charcas, de 2 de septiembre de 1774, 8854 recomendando a todos los corregidores que están bajo su 8855 jurisdicción que establezcan escuelas "para la educación y 8856 crianza de niños y niñas indios". El Corregidor de Atacama, 8857 Francisco de Argumaniz, acusa recibo y dice que ha mandado 8858 "se guarde, cumpla y ejecute" dicho auto en los tres pueblos que 8859 están dentro de su corregimiento. 8860 8861 Al dividirse los virreinatos de Lima y Buenos Aires en 8862 intendencias (1776) y denominarse partidos a las antiguas 8863 Provincias, el Partido de Atacama con su costa formó parte de la 8864 Intendencia de Potosí. 8865 8866 En el legajo Charcas número 434, está un oficio dirigido por el 8867 Gobernador Intendente de Potosí, Francisco de Paula Sanz, al 8868 secretario de Estado a cargo de los Asuntos de las Indias, 8869 fechado el 16 de octubre de 1789, en el que le avisa que ha 8870 recibido noticias del puerto de Cobija sobre movimiento de 8871 embarcaciones inglesas en la costa y de la entrada de una 8872 embarcación extranjera al puerto de Tocopilla, con bandera 8873 blanca, cuyos tripulantes desembarcaron y robaron a los indios 8874 los pocos avíos de pescar que guardaban en sus ranchos. 8875 Menciona las medidas que está tomando para contrarrestar el 8876 peligro de los piratas y recuerda que antes "cuando el reino 8877 estaba dividido en provincias que hoy se llaman partidos, a la de 8878 Atacama, la única con costa y puertos, los auxilios le prestaban 8879 las provincias de Lipes y Chichas, como las más próximas". 8880 8881 En vista del peligro de incursiones de barcos extranjeros en las 8882 costas de la Intendencia de Potosí, el asesor letrado del 8883 Intendente Paula Sanz, el prolífico abogado Pedro Vicente 8884 Cañete, preparó un "Plan de defensa y resguardo del puerto de 8885 Magdalena de Cobija del partido de Atacama, provincia de 8886 Potosí". 8887 8888 8889 ARICA PROBLEMA Y ARICA SOLUCION 8890 8891 ¿Por qué si éramos dueños de una costa de 560 kilómetros de 8892 los 8.000 que Sudamérica tiene sobre el Océano Pacífico, ahora 8893 vivimos encerrados dentro del continente? ¿Por qué no podemos 8894 recuperar ni una mínima parte de esa costa para mejorar 8895 nuestra condición mediterránea, a fin de poder luchar por 8896 nuestro progreso en condiciones similares a las de otras 8897 naciones ribereñas del mismo océano? 8898 8899 ¿Ha sido y es por una fatalidad? ¿O más bien por errores de 8900 algunos de los personajes que tuvieron a su cargo la conducción 8901 de las relaciones internacionales de nuestra patria? 8902 8903 Nuestras relaciones con la República de Chile hacen una historia 8904 que hiere los sentimientos patrióticos de todo boliviano. Pero es 8905 más doloroso todavía, comprobar que en lo lamentable de esa 8906 historia no sólo está la codicia territorial de Chile, motivada por 8907 la pobreza de su territorio original, que impulsó a este país a 8908 adueñarse por la fuerza de las armas de ricos territorios de sus 8909 vecinos norteños, sino, también, en las fallas que en las 8910 relaciones con un vecino tan peligroso cometieron algunos de los 8911 gobiernos de los países víctimas, facilitando con esos errores tal 8912 acción depredadora. 8913 Arica es el puerto que por su ubicación más próxima sirvió de 8914 puerta de salida a la Audiencia de Charcas, durante los siglos del 8915 coloniaje español, para las exportaciones de plata e 8916 importaciones de azogue y otros productos requeridos por las 8917 poblaciones del Alto Perú. Fue un equívoco de la organización 8918 colonial que Arica, que no servía al Bajo Perú, dependiera de las 8919 autoridades de Lima y no de las de Chuquisaca. Este equívoco 8920 debió y pudo corregirse al fundarse las repúblicas peruana y 8921 boliviana. Así trató de hacerlo el Presidente de Bolivia, Antonio 8922 José de Sucre. 8923 8924 Simón Bolívar se equivocó al no aceptar las reiteradas gestiones 8925 del personaje que él había puesto a la cabeza de la flamante 8926 nación boliviana, apoyadas por los mismos pobladores de Tacna 8927 y Arica. Sucre le dirigió tres cartas a Bolívar, como a Presidente 8928 del Perú, en enero, febrero y marzo de 1826, desde Chuquisaca 8929 a Lima, explicándole que Cobija, único puerto que entonces tenía 8930 Bolivia, estaba demasiado alejado de los centros urbanos y poco 8931 les servía. Le dijo en la primera carta: "Arica es un puerto que 8932 sólo da introducciones a Bolivia". Le dijo en la segunda: "Espero 8933 que usted tomará en el asunto de la incorporación de Arica a 8934 Bolivia todo el interés que nos prometemos, puesto que no 8935 perjudicará al Perú". Le dijo en la tercera: "Si el Perú se niega a 8936 dar Arica, supongo que usted habrá trabajado en su adquisición. 8937 Creo que dando indemnizaciones al Perú, no habrá dificultades 8938 puesto que los habitantes de Arica la desean, porque es de su 8939 interés y no perjudica al Perú". En efecto, los habitantes de 8940 Tacna y Arica, representados por sus elementos más conspicuos, 8941 suscribieron un acta en tal sentido y se dirigieron a Bolívar 8942 diciéndole que "reclamaban imperiosamente" separarse de la 8943 capital del Perú y unirse a la capital de Bolivia. 8944 8945 Pero Bolívar era partidario de que el Perú y Bolivia formasen una 8946 sola nación. Por eso, antes, también se opuso a la existencia del 8947 Alto Perú como república independiente y solamente aceptó su 8948 existencia cuando era un hecho consumado y se halagó su 8949 vanidad bautizando a la recién nacida república con su apellido. 8950 8951 El general Andrés Santa Cruz, como sucesor de Simón Bolívar en 8952 la jefatura del gobierno del Perú, se opuso a que Arica 8953 perteneciese a Bolivia al negar su consentimiento a un tratado 8954 negociado por un diplomático peruano, Ignacio Ortiz de Zeballos, 8955 en Chuquisaca, mediante el cual el puerto de Arica pasaba a ser 8956 propiedad boliviana a cambio de los territorios de Copacabana y 8957 Apolobamba, más cinco millones de pesos. Santa Cruz, 8958 mostrándose entonces más peruano que boliviano, declaró en 8959 una carta, en diciembre de 1826: "Ningún poder ejecutivo puede 8960 desmembrar el territorio cuya integridad he jurado sostener y 8961 esto sería para mí mucho más comprometido que para otro 8962 alguno. 8963 No lo haré, pues, porque no debo, porque no puedo y porque no 8964 quiero abusar de la confianza que el Perú ha depositado en mi 8965 buena fe". 8966 8967 Andrés Santa Cruz, que fue Jefe del Gobierno del Perú por 8968 imposición de Bolívar y que creyó que en ese país estaba su 8969 porvenir político, fue mañosamente despojado del mando por los 8970 peruanos por ser bolivariano y boliviano y alejado del país con 8971 un cargo diplomático en Chile. Cuando un año después fue 8972 elegido Presidente de Bolivia en una Asamblea Constituyente y 8973 por voluntad de sus compatriotas expresada en actas populares, 8974 comprendió donde estaban sus verdaderas raíces y a que lado 8975 debía inclinarse sus sentimientos de mayor adhesión patriótica. 8976 8977 También comprendió cuanta necesidad tenía Bolivia del puerto 8978 de Arica. Quiso conseguirlo en negociaciones con el Presidente 8979 del Perú, general Agustín Gamarra, en un encuentro que ambos 8980 mandatarios tuvieron a orillas del río Desaguadero, en diciembre 8981 de 1830. Fue desairado por su homólogo en forma descortés. Un 8982 diario peruano de la época comentó que "la entrevista concluyó 8983 poco menos que a palos a causa de la insolente pretensión de la 8984 provincia de Arica que Santa Cruz quería como base de una 8985 alianza". 8986 8987 El general Santa Cruz, al empeñarse en dar vida a la 8988 Confederación Perú-Boliviana no sólo buscaba la creación de una 8989 entidad política capaz de jugar un rol importante en el equilibrio 8990 de fuerzas en América, sino dar al altiplano boliviano y a los 8991 valles una salida propia al océano Pacífico. Su Ministro de 8992 Relaciones Exteriores, Casimiro Olañeta, hizo conocer la 8993 siguiente decisión al general peruano Domingo Nieto, en agosto 8994 de 1838: "La provincia de Tacna y el puerto de Arica 8995 pertenecerán en adelante a la República Boliviana con 8996 consentimiento de los cuerpos nacionales peruanos del Norte y 8997 del Sur, como indemnización de los sacrificios de Bolivia por la 8998 pacificación del Perú y como garantía de la paz inalterable de 8999 ambos pueblos". Con la muerte de la Confederación seis meses 9000 más tarde en la batalla de Yungay, murió asimismo esa 9001 determinación. 9002 9003 El subsiguiente mandatario boliviano, general José Ballivián, 9004 quiso, a su vez, anexar Arica a Bolivia, pero no pudo conseguirlo 9005 ni con presión militar, ni por medios diplomáticos. 9006 9007 El guano de aves marinas existente en la costa boliviana del 9008 departamento de Atacama, despertó la innata inclinación que ha 9009 tenido Chile a lo largo de su historia a apropiarse de riquezas 9010 ajenas que compensen la pobreza natural de su suelo propio. 9011 Declaró que el desierto de Atacama le pertenecía y ocupó la 9012 península de Mejillones, rica en aquel producto. Una asamblea 9013 extraordinaria convocada por el gobierno boliviano del general 9014 José María Achá autorizó que se declarase la guerra al 9015 depredador si no se conseguía por medios diplomáticos que 9016 abandonase Mejillones. Don Tomás Frías, enviado como 9017 negociador, declaró en Santiago: "Bolivia no ha renunciado 9018 nunca a sus derechos posesorios en el litoral en disputa, ni 9019 abandonado ninguno de los medios que la ley internacional le 9020 concede para conseguir esos derechos, ya en el estado de paz, 9021 ya en el de guerra... ". Le contestó el canciller chileno: "Mientras 9022 se halle pendiente la cuestión de límites, nada puede enervar el 9023 ejercicio de los actos propios de la soberanía y del imperio de 9024 Chile en el territorio que posee". 9025 9026 Cerrado con estas palabras el camino de la diplomacia, no le 9027 cabía a Bolivia otra alternativa que la de la guerra en 9028 cumplimiento del mandato de la Asamblea Extraordinaria de 9029 1863. Pero se sintió incapacitada para recurrir a ella, según 9030 palabras del canciller Rafael Bustillo, "por impotencia marítima". 9031 9032 A continuación, Bolivia tuvo la desgracia de tener como 9033 Presidente de la República al general Mariano Melgarejo, un 9034 general que nunca debió pasar del grado sargento. De los jefes 9035 de Estado que han cometido fallas en las relaciones con Chile, es 9036 el que tiene mayor responsabilidad. Estuvo en sus manos 9037 arreglar la cuestión de límites con ese país en condiciones 9038 favorables y las desperdició estúpidamente por alardear de 9039 generoso panamericanismo. 9040 9041 España entró en conflicto con el Perú a raíz de abusos cometidos 9042 en esta república contra emigrantes vascos. Como represalia y a 9043 título de reivindicación de sus derechos de metrópoli sobre una 9044 colonia, España envió una expedición naval que ocupó las islas 9045 Chincha, que contenían la mayor riqueza guanera del Perú. Chile 9046 y el Ecuador se pusieron del lado del Perú desafiando a España. 9047 9048 No obstante que seguía en pie en Bolivia la autorización de hacer 9049 la guerra a Chile por la ocupación de Mejillones, Melgarejo, en 9050 uno de sus arranques de generosidad, también sumó a Bolivia a 9051 la alianza perú-chileno-ecuatoriana. Este gesto conmovió a la 9052 opinión pública de Santiago, donde en señal de regocijo se 9053 echaron a vuelo las campanas de todas las iglesias. El gobierno 9054 de La Moneda envió a La Paz un comisionado especial para que 9055 expresara la profunda gratitud chilena. El comisionado, 9056 cumpliendo las instrucciones superiores que tenía, declaró que a 9057 cambio de la alianza boliviana, Chile ofrecía arreglar la cuestión 9058 de límites de Atacama en las condiciones que Bolivia eligiese. 9059 Era la gran oportunidad para que Bolivia reivindicase sus 9060 derechos territoriales hasta el río Paposo, obteniendo que el país 9061 vecino abandonase el territorio que detentaba hasta Mejillones. 9062 Nunca antes Bolivia había tenido la oportunidad semejante para 9063 solucionar favorablemente su problema fronterizo con Chile, ni la 9064 tendría nunca más hasta el día de hoy. 9065 9066 Se llevó la generosidad hasta extremos de estupidez. Se aplazó 9067 la consideración del ofrecimiento chileno por decisión del 9068 gobierno Melgarejo hasta después de que terminase el conflicto 9069 armado con España que se disputaba navalmente en el océano 9070 Pacífico Sur. Cuando esto ocurrió, pocos meses después, con el 9071 retorno de las naves españolas hasta su patria, el presidente 9072 Melgarejo, agradecidísimo por el grado de general que le había 9073 concedido el gobierno de Santiago, quiso hacer alarde de todavía 9074 más generosidad. El y su Ministro de Relaciones Exteriores, 9075 Casimiro Corral, pidieron al comisionado chileno que fuese él y 9076 no la cancillería boliviana quien fijase los términos del arreglo 9077 fronterizo. Y el comisionado chileno, Vergara Albano, lo hizo 9078 proponiendo que la línea fronteriza se estableciese 9079 salomónicamente en la mitad de lo que uno y otro país 9080 declaraban ser territorio de su propiedad, o sea, que como Chile 9081 se declaraba dueño hasta el grado 23 y Bolivia hasta el 25 de la 9082 línea ecuatorial, se fijase la frontera en el centro de ambos 9083 grados, en el grado 24, pero con la condición de que el 9084 rendimiento económico de guano y minerales existentes entre 9085 los grados 23 y 25 se dividiese por igual entre ambos países. 9086 Bolivia aceptó la medianería, que fue semillero de frecuentes 9087 desinteligencias, pero que Melgarejo ponderó diciendo que 9088 establecía una relación tan íntima entre las dos naciones como la 9089 de dos hermanos que viven compartiendo de un mismo pan. El 9090 pan se agrió con el descubrimiento de plata en Caracoles, zona 9091 que Bolivia creía que se encontraba al norte del grado 23 y Chile 9092 afirmaba que se hallaba en el territorio sujeto a la medianería. 9093 En pocos años, se hicieron 15.000 peticiones mineras en 9094 Caracoles, con una invasión de más de 6.000 chilenos y unos 9095 pocos bolivianos y de otras nacionalidades. 9096 9097 El general Agustín Morales, sucesor de Melgarejo en el mando de 9098 la república al triunfar en uno más de los varios intentos de 9099 derrocamiento que se hicieron contra el déspota, mediante su 9100 Ministro de Relaciones Exteriores obtuvo del Congreso de 1872 9101 la autorización de suscribir con el Perú un "tratado de alianza 9102 defensiva contra toda agresión extraña". Este paso estuvo 9103 motivado por evidencias de que Chile alimentaba cada vez más 9104 intenciones de apropiación de lo ajeno, concretamente de los 9105 territorios bolivianos de Atacama y de los peruanos adyacentes 9106 de Tarapacá, ambos ricos en guano y sobre todo en salitre, un 9107 producto, este segundo, que estaba en gran demanda para la 9108 fertilización de las cansadas tierras agrícolas de Europa. 9109 9110 En el caso de Bolivia, la apetencia chilena por Atacama se 9111 ratificó con el apoyo en dinero, barcos y armas que el gobierno 9112 de Santiago prestó a la expedición filibustera del general Quintín 9113 Quevedo, quien habría ofrecido a Chile entregarle el 9114 departamento de Atacama si llegaba a la presidencia de Bolivia. 9115 La expedición Quevedo fracasó, pero el tratado de alianza perú- 9116 boliviano suscrito en Lima en 1873, en vez de frenar el 9117 expansionismo chileno, le sirvió al gobierno de Santiago de 9118 pretexto para lanzarse a la conquista de los dos territorios 9119 salitrosos que tanto apetecía con la guerra del Pacífico. 9120 9121 Si en el problema concreto de nuestras relaciones con Chile, fue 9122 una gran desgracia para Bolivia la presidencia de Mariano 9123 Melgarejo, no lo fue menos la del general Hilarión Daza. Su 9124 conducción del país en la trágica emergencia de la guerra con 9125 Chile fue lamentable por varios conceptos. No sólo por llevar al 9126 ejército boliviano a un veraneo de varios meses en Tacna, sino 9127 también por hacerlo retroceder de Camarones cuando marchaba 9128 a enfrentar al enemigo en conjunción con un ejército peruano 9129 que estaba ya en el departamento de Tarapacá. Debe 9130 reconocerse a su favor que supo actuar con lealtad al Perú al 9131 rechazar reiteradas proposiciones del gobierno chileno para que 9132 Bolivia rompiese su alianza con el Perú a cambio de recibir ayuda 9133 de Chile para adueñarse de los territorios de Tacna y Arica. 9134 9135 El siguiente Jefe del Estado boliviano, general Narciso Campero, 9136 mantuvo la lealtad con el Perú, que este país correspondió muy 9137 mal al hacer la paz con Chile por separado, cediéndole a 9138 perpetuidad el departamento de Tarapacá y comprometiendo con 9139 ello la soberanía de nuestro país sobre el departamento aledaño 9140 de Atacama. 9141 9142 En 1884, Bolivia, por imperio de las circunstancias, se vio en la 9143 ineludible necesidad de suscribir con Chile un Pacto de Tregua, 9144 por el enorme esfuerzo económico y anímico que le estaba 9145 costando el mantenerse en pie de guerra, y porque no le 9146 convenía suscribir un tratado de paz hasta que Chile y el Perú 9147 definiesen entre si la situación de Tacna y Arica, que Chile 9148 ofrecía ceder a Bolivia. 9149 9150 Los dos plenipotenciarios que firmaron en Santiago el Pacto de 9151 Tregua, Belisario Salinas y Belisario Boeto, explicaron al 9152 presidente Campero, en una carta, por qué se vieron en la 9153 forzada posición de estampar sus firmas en el documento, 9154 usando estos términos: "Nos asiste la convicción de que nuestro 9155 país aislado, solo y sin recursos, como está hoy día, sus medios 9156 de defensa serían demasiado deficientes para contrarrestar el 9157 ataque de un ejército numeroso, aguerrido, bien armado y mejor 9158 preparado. Las calamidades de una guerra, los estragos de una 9159 ocupación violenta de nuestras ciudades y aldeas y la vergüenza 9160 de una posible derrota, se han presentado a nuestras 9161 conciencias de una manera abrumadora". En efecto, la amenaza 9162 de una invasión al departamento de La Paz la representaba un 9163 ejército chileno desplegado en forma amenazante desde 9164 Mollendo y Arequipa hasta Puno. 9165 9166 El gobierno del señor Gregorio Pacheco se valió de la amistad 9167 que el industrial minero Aniceto Arce tenía con personalidades 9168 chilenas pidiéndole que se trasladase a Santiago a proponer la 9169 suscripción de un Tratado de Paz por el cual Bolivia cediese a 9170 Chile el departamento de Atacama a cambio de quedar dueña de 9171 Tacna y Arica. El presidente de Chile, Domingo Santa María, 9172 acepté en principio un arreglo de esa naturaleza y quiso comprar 9173 Tacna y Arica al Perú, ofreciendo diez millones de pesos. El 9174 gobierno de Lima no aceptó la proposición y prefirió esperar que 9175 la propiedad de Tacna y Arica se decidiese en el plebiscito 9176 establecido en el Tratado de Paz o Tratado de Ancón, que estaba 9177 tropezando con dificultades para su realización. 9178 9179 El señor Domingo Santa María, primero como Ministro de 9180 Relaciones Exteriores de Chile en los años de la guerra del 9181 Pacífico y ahora como Presidente de la República había sido y era 9182 un convencido de que Bolivia no podía ni debía ser privada de 9183 una salida al mar, entre otras consideraciones porque Bolivia con 9184 un buen puerto se fortalecería y progresaría, resultando un 9185 mejor mercado para los productos chilenos y, en segundo lugar, 9186 porque la mejor manera de asegurar la posesión chilena de la 9187 muy rica provincia de Tarapacá contra una futura acción peruana 9188 de reconquista, era colocar de por medio la soberanía boliviana 9189 en Tacna y Arica. 9190 9191 La política chilena al respecto cambió radicalmente con el nuevo 9192 Presidente de la República. Para el señor José Manuel 9193 Balmaceda, Tacna y Arica no debían servir de anzuelo destinado 9194 a pescar una dudosa amistad boliviana, sino de puntos 9195 avanzados del territorio chileno en el Norte, que sirviesen de 9196 baluarte contra propósitos revanchistas del Perú. 9197 9198 Los señores Aniceto Arce y Mariano Baptista, que siguieron al 9199 señor Gregorio Pacheco como mandatarios de Bolivia, cada uno 9200 durante su gestión y pese al cambio de orientación en la política 9201 chilena con respecto a nuestro país, trataron de buscar una 9202 salida al mar. Arce consiguió únicamente la construcción de un 9203 ferrocarril desde el puerto de Antofagasta hasta Oruro. Durante 9204 el período presidencial del señor Baptista, surgieron en Chile 9205 temores por la creciente prosperidad económica que estaba 9206 alcanzando la República Argentina gracias a sus riquezas 9207 agrícola y ganadera. Chile veía otro peligro en la estrecha 9208 vinculación comercial que se había establecido entre Bolivia y 9209 Argentina durante los años de la Guerra del Pacífico y se 9210 mantenía en la posguerra. El escritor chileno borrego Lugo 9211 comentó en un artículo de prensa: "Chile quiso en 1895 romper 9212 los lazos que pudieran atar a Bolivia con la República Argentina y 9213 ligarla estrechamente a los intereses y los sentimientos 9214 chilenos". Con esta intención, el gobierno de Santiago ofreció al 9215 de Bolivia la suscripción de tres tratados, uno de Paz y Amistad, 9216 otro de Comercio y un tercero de Transferencia de Territorios. El 9217 más importante era este último. Establecía a la letra: "Si a 9218 consecuencia del plebiscito que haya de tener lugar de 9219 conformidad al Tratado de Ancón o en virtud de arreglos directos 9220 adquiriese la República de Chile dominio y soberanía permanente 9221 sobre los territorios de Tacna y Arica, se obliga a transferirlos a 9222 la República de Bolivia en la misma forma y en la misma 9223 extensión que los adquiera". Otro artículo disponía que si Chile 9224 no podía obtener Tacna y Arica., se comprometía "ceder a Bolivia 9225 la caleta Vítor hasta la quebrada de Camarones u otra análoga, 9226 además de cinco millones de pesos". 9227 En el Congreso boliviano de entonces, existía una marcada 9228 división entre los conservadores que estaban en el gobierno y los 9229 liberales que les hacían una oposición muy activa. Los liberales 9230 formularon objeciones contra los tres tratados suscritos con 9231 Chile, aduciendo que este país los había pactado separadamente 9232 para quedarse legalmente con el territorio de Atacama en virtud 9233 del Tratado de Paz y Amistad, pero sin intención de cumplir el de 9234 Transferencia de Territorios. El presidente Baptista hizo todo lo 9235 posible para conseguir la aprobación de los tres pactos, que el 9236 gobierno chileno, mediante su representante diplomático en 9237 Bolivia, declaró por escrito que constituían un todo único e 9238 indivisible. Hasta sacó un artículo de prensa, sin su nombre, 9239 pero que por su estilo indicaba claramente quien era su autor. En 9240 él les dijo a sus enemigos políticos refiriéndose al Tratado de 9241 Transferencia de Territorios: "Cuando repetimos que por 9242 estipulación principal, subordinadora de todas las demás, puesta 9243 como eje, como el alma de las soluciones, que Tacna y Arica 9244 serán de Bolivia, con seguridad moral, salvado el derecho 9245 peruano; cuando os decimos todo eso, agotáis todos los dicterios 9246 para insultarnos y os convulsionáis de furor, de furor fingido 9247 porque sois llanamente o farsantes o malignos; no tenéis ni el 9248 mérito equívoco de los fanáticos. Desquite, desquite pedís, 9249 retóricos sin conciencia, en el año 1895, con vuestra acción 9250 revolucionaria, con vuestra morbosa propensión a la sangre 9251 vertida en guerra civil, no por vuestra mano, porque sois 9252 cobardes, sino por la de algún sargento comprado". 9253 9254 Ninguno de los tres tratados fue aprobado porque subsistían las 9255 dificultades para la realización del plebiscito que debía definir la 9256 suerte de Tacna y Arica. También por oposición del Perú y porque 9257 se consideró que la caleta Vítor era inapropiada para la 9258 construcción de un puerto. 9259 9260 Bolivia ingresó al siglo XX con cambios trascendentales. 9261 Mediante una guerra civil, los liberales se apoderaron del mando 9262 de fa república y trasladaron la sede del gobierno de la Capital 9263 de la República a La Paz. En lo económico, la plata, por sus bajas 9264 cotizaciones en el mercado mundial, dejó de ser el sostén de la 9265 economía nacional, cediendo esta función al estaño que era 9266 requerido cada vez más por industrias norteamericanas y 9267 europeas con cotizaciones muy ventajosas para los productores. 9268 9269 Al fracasar los tratados de 1895, Chile cambió su política con 9270 Bolivia, en virtud de arreglos en sus relaciones con sus otros dos 9271 vecinos. Con el Perú firmó un protocolo, en abril de 1898, 9272 estableciendo nuevas reglas para la realización del plebiscito 9273 sobre Tacna y Arica. En febrero del año siguiente, los 9274 presidentes de Chile y la Argentina se abrazaron en el estrecho 9275 de Magallanes y comprometieron a sus respectivos países a vivir 9276 por siempre en completa paz y armonía. 9277 9278 Era presidente de Bolivia el general José Manuel Pando, 9279 vencedor de la guerra civil entre paceños y chuquisaqueños, con 9280 quien se inició la hegemonía del Partido Liberal en la nación, 9281 hegemonía que iba a durar 20 años. Chile decidió acabar con las 9282 pretensiones bolivianas de convertirse en dueña de Tacna y 9283 Arica. Su representante diplomático en La Paz, Abraham Koning, 9284 dirigió una larga nota a la cancillería boliviana que contenía 9285 frases como estas: "Hace muchos años que mi país desea 9286 convertir el Pacto de Tregua en Tratado de Paz, arreglar de una 9287 vez por todas sus diferencias con Bolivia... Es un error muy 9288 esparcido y que se repite diariamente en la prensa y en la calle, 9289 el opinar que Bolivia tiene derecho de exigir un puerto en 9290 compensación de su litoral. No hay tal cosa. Chile ha ocupado el 9291 litoral y se ha apoderado de él con el mismo título con que 9292 Alemania anexó al imperio la Alsacia y la Lorena, con el mismo 9293 título con que los Estados Unidos de la América del Norte han 9294 tomado Puerto Rico. Nuestros derechos nacen de la victoria, la 9295 ley suprema de las naciones". 9296 9297 El canciller boliviano, Eliodoro Villazón, contestó mesuradamente 9298 la insolente comunicación chilena refutando todas sus 9299 afirmaciones, pero él y el presidente Pando cambiaron la política 9300 de los gobiernos precedentes con respecto a Chile. Dieron a 9301 entender al ministro Koning que Bolivia renunciaría a su 9302 demanda de un puerto en el océano Pacífico si recibiera una 9303 compensación económica que fuese suficiente para la 9304 construcción de ferrocarriles que uniesen al país con la costa y 9305 vinculasen entre sí a sus principales ciudades. Por medio de un 9306 agente confidencial, señor Félix Avelino Aramayo, hicieron 9307 conocer al presidente de Chile que Bolivia se contentaría con dos 9308 millones de libras esterlinas. 9309 9310 El siguiente gobierno boliviano, presidido por el señor Ismael 9311 Montes, concretó la idea enviando a Santiago un 9312 plenipotenciario, señor Alberto Gutiérrez, quien el 20 de abril de 9313 1904 firmó con el canciller chileno Emilio Bello Codecido el 9314 Tratado de Paz y Amistad que rige hasta hoy las relaciones 9315 boliviano-chilenas. En él, Bolivia reconoció como de dominio 9316 absoluto de Chile los territorios del litoral boliviano que ocupaba 9317 desde 20 años antes en virtud del Pacto de Tregua. A cambio de 9318 ese reconocimiento, el Gobierno de Chile se comprometió a 9319 construir un ferrocarril desde Arica al Alto de La Paz y entregó la 9320 suma de 300 mil libras esterlinas. Bolivia renunció a su litoral 9321 dominado por una mentalidad ferrocarrilera, creyendo que los 9322 ferrocarriles le traerían más seguro progreso y prosperidad que 9323 sus puertos en el Pacífico. El señor Joaquín Lemoine expresó el 9324 sentir de muchos en un comentario periodístico en el que dijo: 9325 "Somos por falta de rieles un Estado neurasténico y tuberculoso 9326 en plena primavera de la vida. No veo otra solución para mi país 9327 que robustecerlo con la musculatura de hierro". 9328 9329 A los seis años de la suscripción del Tratado de Paz y Amistad, el 9330 gobierno de entonces volvió a pensar en Tacna y Arica. En 1910, 9331 el canciller boliviano Daniel Sánchez Bustamante del gobierno 9332 liberal del señor Eliodoro Villazón, dirigió a los representantes 9333 diplomáticos de Chile y el Perú acreditados en La Paz un 9334 memorando en el que les manifestó que Tacna y Arica, cuya 9335 suerte aún no estaba decidida, deberían pertenecer a Bolivia. Y 9336 añadió: "Estos territorios sólo tienen importancia efectiva, por su 9337 dependencia geográfica y comercial, para Bolivia... Bolivia no 9338 puede vivir aislada del mar. Ahora y siempre, en la medida de 9339 sus fuerzas, hará cuanto le sea posible para llegar a poseer por 9340 lo menos un puerto cómodo sobre el Pacífico". Según comentario 9341 del mismo canciller Bustamante, su memorando "cayó como una 9342 bomba" en la cancillería chilena. Se estimó que importaba algo 9343 así como una declaratoria de guerra y a través de amargos 9344 reproches, se dijo que no era tiempo de ocuparse de su 9345 contenido. El Perú, simplemente, no lo tomó en cuenta. 9346 9347 Don Ismael Montes, de regreso de haber sido Ministro de Bolivia 9348 en Francia, a su paso por Santiago, se reunió con personalidades 9349 chilenas y les pidió ayuda para que Bolivia pudiese adquirir 9350 soberanía sobre Arica. No encontró ninguna reacción favorable 9351 de parte de sus interlocutores. 9352 Cuando se organizó la Liga de las Naciones inmediatamente 9353 después de la Primera Guerra Mundial, como entidad encargada 9354 de solucionar todos los problemas internacionales del mundo, el 9355 gobierno republicano del señor Baptista Saavedra envió una 9356 delegación a la sede de Ginebra, a pedir la revisión del Tratado 9357 de Paz con Chile de 1904. La entidad ginebrina rechazó la 9358 petición boliviana con el pretexto de que había sido presentada 9359 fuera del término reglamentario y volvió a rechazarla el año 9360 siguiente porque "la Asamblea no podía modificar por sí misma 9361 ningún tratado, por ser esta competencia exclusiva de los 9362 Estados contratantes". 9363 9364 El Secretario de Estado del gobierno de los Estados Unidos de 9365 Norte América, señor Frank B. Kellog, propuso en enero de 9366 1926, mediante un memorando, que Chile y el Perú, que no 9367 podían ponerse aún de acuerdo para la realización del plebiscito 9368 sobre Tacna y Arica, cediesen estos territorios a Bolivia a cambio 9369 de una compensación económica que podrían dividirse 9370 equitativamente. El Perú contestó que no podía aceptar la cesión 9371 de Tacna y Arica a nadie, ni por compra, ni de otro modo, porque 9372 el Perú, que venía defendiendo sus derechos sobre esos 9373 territorios más de 40 años, no quería convertirlos en mercancía 9374 sujeta a precio, por grande que este fuera". En Chile tampoco se 9375 aceptó la propuesta Kellog y la prensa la desacreditó 9376 calificándola como un intento de los Estados Unidos para 9377 congraciarse con Bolivia con fines de penetración imperialista en 9378 el corazón de la América del Sur. 9379 9380 Los años siguientes, hubo un acercamiento entre los gobiernos 9381 de Chile y el Perú, que culminó con la división de los territorios 9382 de Tacna y Arica, mediante un simulado arbitraje del gobierno de 9383 Washington. Chile se quedó con la provincia de Arica (15.300 9384 Km2) y el Perú con la provincia de Tacna (9.600 Km2). Ese 3 de 9385 junio de 1929, en Lima, a continuación de la firma del 9386 documento de la repartija de Tacna y Arca, los plenipotenciarios 9387 chilenos y peruanos suscribieron un Protocolo Complementario 9388 del Tratado de Paz y Límites, por el que quedó establecido que ni 9389 Chile ni el Perú podrían ceder a un tercer país la totalidad o 9390 parte de la provincia que quedaba bajo su soberanía sin que 9391 previamente ambos se pusiesen de acuerdo al respecto. O sea, 9392 que se comprometieron a que ninguno de ellos, por separado, 9393 podrían abrir la puerta del encierro en que quedaba Bolivia en el 9394 centro de Sudamérica. Ese protocolo se concertó a iniciativa del 9395 gobierno chileno del general Carlos Ibáñez del Campo, cuyo 9396 canciller, Conrado Ríos Gallardo, fue en toda su vida pública un 9397 gratuito enemigo de Bolivia. La mañosa intención de Chile con 9398 ese protocolo no pudo ser otra que la de poner de por medio la 9399 segura oposición peruana, para librarse del compromiso, tantas 9400 veces repetido en ocasiones anteriores, de ceder Arica a Bolivia 9401 si algún día quedaba bajo su soberanía. 9402 9403 Bolivia obtuvo un triunfo en Chile cuando el embajador de 9404 nuestro país, señor Alberto Ostria Gutiérrez, logró obtener del 9405 canciller chileno Horacio Walker Larraín, en junio de 1950, un 9406 cambio de notas reversales por las cuales el gobierno de 9407 Santiago se comprometió "a entrar formalmente en una 9408 negociación directa destinada a buscar la fórmula que pueda 9409 hacer posible dar a Bolivia una salida propia y soberana al 9410 océano Pacífico y a Chile obtener compensaciones que no tengan 9411 carácter territorial". Este compromiso chileno se frustró al 9412 revelarse por un artículo de la revista Ercilla y por declaraciones 9413 del presidente Gabriel González Videla cual era el antojo chileno 9414 al aceptar ese compromiso, antojo de las aguas de los lagos 9415 bolivianos del altiplano para irrigación y generación de energía 9416 eléctrica en beneficio del norte de su país. Voces bolivianas que 9417 incluían la de don Franz Tamayo alzaron el grito al cielo en 9418 contra de tal antojo. El embajador Ostria Gutiérrez declaró 9419 públicamente que absolutamente nada se había convenido 9420 acerca de los lagos bolivianos en su negociación con el canciller 9421 Walker Larraín. 9422 9423 En febrero de 1955, en Arca, se produjo un encuentro entre el 9424 Presidente de Bolivia, señor Víctor Paz Estenssoro y el Presidente 9425 de Chile, general Carlos Ibáñez del Campo que ejercía el mando 9426 de su país por segunda vez. En ese primer encuentro de 9427 presidentes de Bolivia y Chile, el mandatario boliviano faltó al 9428 deber patriótico que le imponía el acontecimiento al haber 9429 aceptado la imposición chilena de que no haría mención alguna 9430 del problema de nuestra prisión geográfica. En concordancia con 9431 esa actitud, su Ministro de Relaciones Exteriores, señor Walter 9432 Guevara Arce, declaró públicamente en Arica que Bolivia no 9433 tenía ningún problema pendiente con Chile. 9434 9435 Cuando el presidente Ibáñez del Campo pagó la visita a Arica 9436 llegando hasta La Paz pocos meses después, el gobierno de 9437 Víctor Paz Estenssoro aceptó que en esa ocasión tampoco se 9438 hablaría de nuestro reclamo marítimo. Y para colmo, cuando los 9439 dos jefes de Estado, Víctor Paz Estenssoro y Carlos Ibáñez del 9440 Campo, bajaban a la ciudad de La Paz desde El Alto, en el mismo 9441 automóvil, al escuchar el chileno que gentes apostadas a los 9442 bordes del camino gritaban: "¡Queremos mar para Bolivia! ", 9443 tuvo el descaro de decirle su acompañante con torpe ironía: "¡Y 9444 para qué quieren mar si no tienen puerto!", sin provocar ni la 9445 mas mínima reacción del mandatario boliviano. El chileno 9446 Enrique Berstein, que formaba parte de la comitiva del general 9447 Ibáñez del Campo, en su libro "Recuerdos de un diplomático", 9448 editado en Santiago en 1984, se refiere a la hiriente y mordaz 9449 frase del militarote diciendo: "Supe de ello por el comandante 9450 Soto Aguilar, edecán del presidente, que también iba en el 9451 vehículo. El propio general me confirmó su veracidad". La 9452 anécdota, que ponía en ridículo a los bolivianos, fue muy 9453 festejada en Chile. 9454 9455 El abrazo que se dieron en Charaña los dictadores de Bolivia y 9456 Chile, generales Hugo Bánzer y Augusto Pinochet, tuvo por 9457 consecuencias la reanudación de las relaciones diplomáticas 9458 suspendidas desde 13 años antes, a raíz del abusivo desvío 9459 chileno de las aguas del río internacional Lauca; la aceptación 9460 chilena de dar a Bolivia una salida al mar por un corredor al 9461 norte de Arica, pero a cambio de un trueque de territorios, 9462 metro por metro, incluyendo lo que Chile cediese como aguas 9463 territoriales; la aceptación del gobierno de Bánzer con el apoyo 9464 del Comando de las Fuerzas Armadas, el Colegio de Abogados de 9465 La Paz, la Sociedad de Ingenieros de Bolivia y Falange Socialista 9466 Boliviana; y otra vez las voces bolivianas de protesta,, en este 9467 caso contra la pretensión chilena de querer adueñarse de más 9468 territorio boliviano. Esas voces forzaron al presidente Bánzer a 9469 retroceder sobre sus pasos, rechazar la proposición del trueque 9470 y volver a suspender las relaciones diplomáticas. 9471 9472 La favorable resolución obtenida por Bolivia en la Novena 9473 Asamblea General de la Organización de Estados Americanos, 9474 reunida en La Paz en octubre de 1979, en sentido de que "es de 9475 interés hemisférico permanente encontrar una solución 9476 equitativa por la cual Bolivia obtenga acceso soberano y útil al 9477 océano Pacífico" fue perjudicada criminalmente con el golpe de 9478 Estado perpetrado por el coronel Alberto Natuch Busch y 9479 personajes civiles del Movimiento Nacionalista Revolucionario, la 9480 misma madrugada en la que se aprobaba esa importante 9481 declaración llamada a despertar la conciencia continental a favor 9482 de nuestra reivindicación marítima. 9483 9484 Es historia conocida por lo reciente la de la visita a la capital 9485 chilena del presidente Gonzalo Sánchez de Lozada para asistir a 9486 un encuentro internacional de Jefes de Estado. Es mi opinión 9487 personal, muy modesta por cierto, que el señor Sánchez de 9488 Lozada cometió un grave pecado de omisión al no hacer mención 9489 alguna en Santiago, como el de Víctor Paz Estenssoro en Arica, 9490 del gran problema que aqueja a nuestro país por el 9491 enclaustramiento geográfico que nos ha impuesto Chile. Es 9492 cierto que no hacía una visita oficial a Chile y que era simple 9493 huésped de su gobierno al igual que otros mandatarios 9494 americanos. Creo que la popularidad que ganó en la opinión 9495 pública chilena no fue por su cordialidad y sentido del humor, 9496 sino, precisamente, porque no dijo nada sobre el derecho 9497 boliviano a reivindicar una salida soberana al océano, como 9498 seguramente temían los chilenos. Esa popularidad ha podido 9499 servirle a él, personalmente, como a político, pero no ayudó en 9500 lo más mínimo a nuestra causa marítima. Cuando tuvo la prensa 9501 oral y escrita y los canales de televisión atentos a sus gestos y 9502 palabras, pudo y debió aprovechar para decir por lo menos algo 9503 a la población de Chile sobre cuan justificada, cuan necesaria, 9504 cuan angustiosa es nuestra necesidad de una salida al mar. Muy 9505 bien pudo en Santiago, con cortesía y diplomacia, con la 9506 "prudencia y audacia" que él mismo nos ha recomendado para 9507 nuestros tratos con Chile, decir alguna de las frases que leyó en 9508 su discurso del 23 de marzo último, en La Paz, cuando se 9509 conmemoraba la heroica inmolación de Eduardo Avaroa en 9510 Calama, como por ejemplo aquella de que "un país sin mar es 9511 un país cercenado en su esencia". 9512 9513 Después de esta triste historia de pérdida de nuestro litoral, de 9514 fracasos, errores y frustraciones para obtener Arica como puerto 9515 boliviano o por lo menos un corredor en su borde norte, ¿qué 9516 otro camino podemos buscar para dar satisfacción a nuestro 9517 gran anhelo, a nuestra imperiosa necesidad de tener 9518 nuevamente salida al mar?, 9519 9520 Repito lo que expresé hace algún tiempo en un artículo de 9521 prensa: 9522 Lo que venimos haciendo ante organismos internacionales, 9523 llámense OEA, ONU, Pacto Andino, Países No Alineados, es una 9524 especie de masturbación con la que, de tiempo en tiempo, el 9525 gobierno de turno descarga las presiones que acumula el ansia 9526 popular da retornar al mar y no resulta sino en desperdicio de 9527 energías que no da fruto alguno. 9528 9529 Por muy bien intencionadas y redactadas que sean las 9530 resoluciones o recomendaciones de los organismos 9531 internacionales, jamás doblegarán la intransigencia de Chile si 9532 este país no alimenta dentro de su propia conciencia el deseo de 9533 un equitativo entendimiento con Bolivia. Las resoluciones que se 9534 pueden obtener de organismos internacionales a favor de un 9535 retorno de Bolivia a la costa del océano Pacífico, sólo tienen un 9536 valor muy relativo como elementos de presión moral, y por eso 9537 debería reservarse su obtención como complementarias de lo 9538 que se vaya logrando conseguir con gestiones directas de 9539 ablandamiento en la misma capital chilena. 9540 9541 Ahora bien, las veces que hemos ido directamente a Santiago a 9542 pedirle al gobierno de Chile comprensión para que nos deje 9543 volver a orillas del Pacífico mediante un acuerdo de mutuas 9544 conveniencias, tampoco hemos alcanzado otra cosa que amargas 9545 frustraciones. Debemos recoger las enseñanzas de la historia. 9546 Chile ha demostrado indiferencia o desprecio por Bolivia excepto 9547 cuando ha sabido que estaba ligada con un pacto de vinculación 9548 con el Perú. Una de las constantes de la política internacional 9549 chilena, para asegurar su supervivencia dentro de su flaco 9550 territorio, ha sido mantener desunidos a sus vecinos que antes 9551 integraron el poderoso Virreinato de Lima. Por eso fue hasta una 9552 guerra para destruir la Confederación Perú-Boliviana y por eso se 9553 lanzó a una segunda guerra para separar a quienes se habían 9554 vinculado con el Tratado de Alianza Defensiva de 1873. Por eso 9555 con el Protocolo Complementario de 1929 logró convertir al Perú 9556 en su cómplice, corno segundo carcelero, de nuestro encierro 9557 andino. 9558 9559 Aliémonos otra vez con el Perú como la última alternativa que 9560 nos deja el propio Chile para buscar nuestro retorno al Pacífico. 9561 Pero aliémonos no con un tratado secreto, sino con un pacto 9562 abierto, franco, público, que sea conocido en su texto íntegro y 9563 sus buenas intenciones por el mismo Chile y todas las demás 9564 naciones del orbe. 9565 9566 ¿Alianza para qué? Desde luego, no para conseguir un corredor 9567 al norte de Arica, pues es sabido que él sería inadecuado para 9568 satisfacer nuestras necesidades de comunicación territorial 9569 soberana con el mundo exterior. 9570 9571 Basta citar lo que dijo el ex-Asesor Hidrográfico de la 9572 Organización de las Naciones Unidas, señor José González Arce, 9573 en un artículo de prensa en el diario "Presencia", el 2 de marzo 9574 de 1976: "Resulta irónico que el Gobierno de Chile se hubiera 9575 prestado a proponer a Bolivia (en la negociación Bánzer - 9576 Pinochet) la transferencia de un zócalo de mar muy estrecho y 9577 deficiente, inadecuado para poderse construir en él un puerto 9578 mayor, menos para dragar un cauce fluvial marítimo amplio y 9579 profundo con destino a un sistema de muelles, dársena y demás 9580 servicios de cabotaje mercante de todo calado y tonelaje". 9581 9582 Aliémonos con el Perú en una alianza diplomática para ejercer 9583 una acción conjunta en Santiago, con gestiones 9584 complementarias ante organismos internacionales, hasta 9585 obtener convencer a Chile que está en su propia conveniencia y 9586 en el de la paz y armonía entre los tres países vecinos y 9587 hermanos que el puerto de Arica se internacionalice, pero se 9588 internacionalice, y esto es lo más importante, con acceso 9589 territorial boliviano y peruano hasta el mismo puerto. Lo que 9590 hace posible la aceptación del Perú al respecto es precisamente 9591 una idea peruana, expresada cuando terció en la negociación de 9592 los gobiernos Bánzer y Pinochet, cuando propuso el 9593 "establecimiento de una administración portuaria trinacional en 9594 el puerto de Arica". 9595 9596 La geografía hace de Arica el puerto natural de Bolivia y lo ha 9597 sido desde su establecimiento hace más de 400 años, fue 9598 históricamente peruano por una falla administrativa de la 9599 burocracia colonial española y desde 1880 es trofeo bélico de 9600 Chile. Por eso, es lugar de convergencia de intereses 9601 antagónicos y, por lo tanto, potencial foco de turbación de las 9602 relaciones entre los tres países. Con su internacionalización se 9603 sellaría definitivamente la paz y verdadera hermandad entre 9604 ellos. En su plaza principal o en la cumbre de su morro podría 9605 levantarse un monumento en el que los héroes máximos de 9606 Bolivia, Chile y Perú en la guerra del Pacífico, Eduardo Avaroa, 9607 Arturo Prat y Miguel Grau, se den un abrazo, simbolizando igual 9608 actitud de sus naciones. 9609 9610 El político de mayor relieve en la historia peruana de este siglo, 9611 Víctor Haya de la Torre, se declaró partidario de la 9612 internacionalización de Arica. Lo mismo han hecho distinguidos 9613 estudiosos bolivianos. 9614 9615 El puerto de Arica internacionalizado podría ser el núcleo inicial 9616 del área de paz, integración y desarrollo que propugna el doctor 9617 Ricardo Anaya en su libro "Arica Trinacional", para el territorio 9618 comprendido entre los grados 17 y 19 de latitud Sur. 9619 9620 Terminaré diciendo mías las palabras de un chileno, Alejandro 9621 Echágüez, publicadas en el más importante órgano de prensa de 9622 Chile, "El Mercurio", en julio de 1974, que el doctor Ricardo 9623 Anaya cita en su mencionado libro: "La solución de una Arica 9624 Tripartita pasaría a la historia como el fruto espectacular de una 9625 honrosa y visionaria política sin precedentes en la historia 9626 universal".