Hola, me llamo Rafa y tengo 4 años.

Me encantan
los cuentos y los animales. El otro día, mamá me
regalo un libro sobre animales de todo el mundo.
Ahora sé el nombre de cada uno de ellos.
También tengo dinosaurios de juguete y me gusta
mucho jugar con ellos. Cuando viene a mi casa mi
amigo Luis, yo SI COMPARTO con él, mis
dinosaurios.
Luis colecciona trenes y tiene muchos. El que
más le gusta es uno que era de su papá cuando
estaba chico.
Luis es mi mejor amigo y, cuando voy a su casa, él
me presta toditos sus trenes. Yo me siento
contento y se los cuido.
¿Sabes? Si tu prestas, también te prestan.
En el nido nos enseñan a no arranchar los
juguetes. El otro día, Daniel estaba jugando con
unos carritos, vino Mathias y se los quitó de las
manos.
-Se pide, no se quita– le reclamó Daniel –Además,
yo estaba jugando primero- añadió.
Sí, Daniel, muy bien dicho –dijo la profesora-
Mathias espera tu turno o juega con otra cosa,
pero no le quites a Daniel.
Es lindo jugar juntos y compartir los juguetes…
Pero hay algunas cosas especiales que NO
COMPARTO como mi mantita para dormir o mi
“SEÑOR NUTRIA” de peluche que lo quiero
mucho porque me lo regalo mi hermano grande.
-Luis, ¿tú tienes un juguete preferido, que no
quieres prestar?
-Sí, esta rana de peluche, porque duermo con
ella.
¿Seguro que tú también tienes juguetes
especiales, nooooo?????
Todos tenemos juguetes que queremos
compartir y juguetes que no…
¿y sabes qué? ¡Eso está bien!