Está en la página 1de 3

Las iniciales BRC corresponden a "British Retalil Consortium", uno de

los estándares de seguridad alimentaria más importantes que existen en la


actualidad. Representa una norma enfocada a asegurar la implantación de un
sistema de gestión de la calidad en la industria alimentaria. Pero, más que como
una norma, se define como un sistema de seguridad alimentaria ya que no es de
obligado cumplimiento. Este estándar lo desarrolló la distribución minorista
británica con el fin de garantizar un sistema uniforme de calidad y seguridad ya
que las exigencias legales y de los consumidores cada vez eran, y aún lo son,
más exigentes. Uno de los principales objetivos de la nueva versión ha sido
identificar con más exactitud posibles áreas de mejora en la producción, como la
higiene.

Los creadores de BRC destacan unos aspectos básicos de la norma cuya implantación pretende
mejorar el sistema de gestión de la calidad de las empresas certificadas. Entre ellos, destaca la
aparición de un sistema común de evaluación con la reducción del número de auditorías que ello
conlleva. Se asegura una transparencia a lo largo de toda la cadena de suministro, se constituye
una prueba evidente del cumplimento de la legislación en tema de seguridad alimentaria, con la
certificación de la norma se accede a mercados extranjeros, se facilita el control de cada etapa
durante el proceso de elaboración de productos, un aspecto que supone una diferencia competitiva
entre industrias. En definitiva, permite conciliar la seguridad alimentaria y el control de calidad.

Hasta la fecha estaba en vigor la versión 5 de la norma. Pero el pasado julio de 2011, El British
Retail Consortium (BRC) publicó la nueva versión de la norma BRC-Global Standard for Food
Safety, de obligado cumplimiento desde el 1 de enero de 2012. Para aquellas empresas ya
certificadas con BRC v.5, el certificado emitido tendrá validez hasta la siguiente auditoría. Esta
nueva versión no es muy diferente de la anterior en lo que a planteamiento del sistema de calidad
se refiere. El principal objetivo del cambio es mejorar los sistemas llevados a la práctica, es decir,
se han detallado requisitos y mejorado explicaciones para clarificar el objetivo final. La norma tiene
en todo el mundo más de 14.000 industrias certificadas, con un crecimiento del 21% durante el año
2010. Las cifras indican un nivel de popularidad internacional cada vez mayor.
Diferencias más novedosas
Los principales cambios en los requisitos de la nueva versión son los siguientes:

 Se ha introducido un código de colores en los requisitos de la norma. Esto proporciona una guía
para los auditores en aquellas áreas que se esperan que sean auditadas sin previo aviso.

 Se han fusionado muchos de los requisitos que antes estaban por separado.

 Se han reorganizado requisitos antes expuestos en diferentes apartados y se han juntado en un


mismo apartado.

 En cuanto al apartado del APPCC, los requisitos se basan, de igual manera, en la aceptación del
Codex Alimentarius, los principios no han cambiado. Aquí la excepción son los programas de
requisitos previos que se han introducido para mostrar la relación entre estos y el proceso del
APPCC. Esto requiere que los programas existentes estén documentados.

 La gestión de los riesgos de los productos de contaminación química y física y los métodos para
la detección y extracción de cuerpos extraños siempre ha tenido un peso importante en la norma,
en esta nueva versión los riesgos se han ampliado de forma considerable para garantizar un
enfoque coherente.

 En lo referente al control de plagas, la nueva versión ofrece una mayor claridad en las
expectativas del lugar donde se lleva a cabo el control, hay nuevos requisitos en las encuestas
referente a los productos para el control de plagas.

 Los requisitos para el almacenamiento, envío y transporte se han dividido en dos secciones y se
han añadido más detalles a los controles de los vehículos de transporte.

 Las zonas fuera de las instalaciones de almacenamiento pero dentro de la propiedad de la


empresa deberán incluirse en las auditorías.

 Los alérgenos aún son causa de retiro de productos del mercado. En este aspecto, la norma se
ha revisado para asegurar que las principales causas de retiro se atienden de forma plena.

 La interacción entre los alimentos y los envases que los contiene es también un nuevo requisito.
La nueva versión pide requisitos relativos a los certificados de conformidad para los envases y
obliga al intercambio de información sobre las características del producto y su uso para permitir
que el embalaje sea adecuado.

 En cuanto a formación, los trabajadores temporales deberán estar capacitados y ser conscientes
de las normas de higiene de cada sitio. Por tanto, la nueva norma exige registros de capacitación
del personal llevado a cabo por entidades capacitadas.
 Los requisitos para la higiene personal se han simplificado para que resulten más claros. No está
permitido el uso de joyas, aunque estas sean lisas, ni en las manos ni en las muñecas o brazos
dentro del área de producción.

GARANTIZAR BUENAS
PRÁCTICAS DE PRODUCCIÓN
Antes de iniciar la elaboración de la nueva versión, los responsables de la BRC llevaron a cabo
una amplia consulta a los usuarios de la norma para poder determinar las áreas de mejora. Lo
resultados fueron muy claros, con lo que el objetivo principal del desarrollo de esta nueva versión
está enfocado en ampliar el alcance de la norma, ofrecer opciones para diferenciar el rendimiento
de las diferentes empresas y fomentar una consistencia de las auditorias. Por tanto, los cambios
respecto a la versión anterior se han centrado en la simplificación y clarificación en vez de cambios
a gran escala.

Uno de los puntos fuertes de la nueva versión es exigir la mejora constante de los procedimientos
para optimizar la coherencia en el trabajo. Se pretende con esto documentar todos los
procedimientos para identificar con más exactitud posibles áreas de mejora, entre ellos la
supervisión de la capacitación del personal y prácticas de trabajo, la higiene en la industria y las
condiciones laborales. En general, los cambios se han traducido a una reducción general en el
número de cláusulas, alrededor del 25%, de modo que las que se mantienen expresan la idea más
importante que se quiere destacar y se debe cumplir.

El proceso de certificación ha quedado fortalecido porque asegura que no solo se cumplen temas
identificados en la auditoría, sino que también corrigen la raíz del posible problema y se elabora un
plan de acción enfocado a prevenir la recurrencia.

También podría gustarte