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Barras conductoras: Efectos electrodinámicos en caso

de cortocircuito

Figura 1

Cuando 2 conductores paralelos son recorridos por corriente sufren una


solicitación mecánica de:

● Atracción, si las corrientes van en un mismo sentido.


● Repulsión, si las corrientes van en sentido contrario.

En un juego de barras, de corriente alterna, trifásico tenemos:

Es decir, cada barra se ve sujeta a una solicitación mecánica transversal de


frecuencia doble a la de la red.

Esta solicitación mecánica transversal produce una vibración sobre cada barra,
que en servicio normal, no sólo puede traducirse en un ruido molesto si no que
también, según sean las dimensiones de las barras y la distancia entre apoyos de
las mismas, puede que entren en resonancia mecánica, con efectos destructivos.

El efecto dinámico de atracción-repulsión adquiere la máxima importancia en caso


de cortocircuito, pues al ser proporcional al cuadrado del valor instantáneo de
cresta de la corriente, en el momento inicial del cortocircuito (punta transitoria)
puede llegar a valores tan altos que den lugar a deformación o rotura de las barras
o sus apoyos y a contactos entre barras. Las barras y sus apoyos o soportes
deben poder resistir estas solicitaciones.
Supongamos dos conductores rígidos y paralelos; dispuestos a una distancia d y
montados sobre soportes distanciados una longitud h (figura 1). Si dichos
conductores están recorridos respectivamente por corrientes I1 e I2 de sentido
opuesto, se produce una fuerza de repulsión entre ellos de valor:

F = 2,04 h/d I1 · I2 · 10-2

Siendo expresados:

F: expresado en kp
I1 e I2: valor de cresta en kA
h y d: en igual unidad de longitud para h que para d

En un juego de barras, este esfuerzo es máximo en caso de cortocircuito. Si por


ambas pletinas circula una misma corriente I, entonces I 1 = I2 = Intensidad de
cortocircuito máxima prevista, expresada en valor cresta, y la fórmula anterior se
convierte en:

F = 2,04 I2 · h/d · 10-2

Esta fuerza produce sobre el apoyo-soporte un esfuerzo de cortadura en la


cabeza, un esfuerzo de flexión en el cuerpo y un par F · H en la base.

Las barras y sus soportes deben dimensionarse para el esfuerzo máximo


previsible. Este esfuerzo, en general, es el que se presenta cuando la corriente es
la correspondiente al cortocircuito.

Ejemplo:

Sean unas barras en que h = 100 cm y d = 20 cm, y deben resistir una punta de
corriente de cortocircuito de valor cresta 80 kA.

El esfuerzo mecánico será:


F = 2,04 · 100/20 · 802 · 10-2 = 653 kp

Para una determinación aproximada del esfuerzo F que actúa sobre las barras
puede utilizarse el gráfico de la figura 2. Este gráfico se refiere a barras paralelas
con soportes situados a distancias h = 1 m.

Para distancias h diferentes, la fuerza F varía proporcionalmente.


Figura 2

Barras conductoras: Resonancia mecánica, en caso de


cortocircuito y en servicio normal

Al esfuerzo F considerado en el post “Barras conductoras: Efectos


electrodinámicos en caso de cortocircuito”
link: http://imseingenieria.blogspot.com.es/2017/12/barras-conductoras-
efectos.html, se le denomina esfuerzo dinámico por cuanto es un esfuerzo
mecánico pero, en realidad, es un esfuerzo determinado por el nivel o intensidad
que alcanza la corriente, independientemente de su duración o evolución; es igual
que se trate de corriente continua o alterna. Se trata pues, en realidad de un
esfuerzo estático.

Toda pletina rígida situada entre soportes tiene una frecuencia propia de
oscilación que depende del material de la pletina, de sus dimensiones y de la
separación entre soportes.

Si esta frecuencia coincide con la frecuencia de la red o de algunos de sus


armónicos, la pletina puede entrar en resonancia y llegar a la destrucción de la
canalización.

La frecuencia propia de oscilación de una pletina rígida fijada por sus extremos,
viene dada por la fórmula:

Siendo:

n: Frecuencia propia de oscilación, en períodos por segundo.


E: Módulo de elasticidad, en kg/cm2
g: Peso de la pletina, en kg/cm de largo.
J: Momento portante o de inercia de la sección de la barra, en cm 4.
h: Largo libre de pletina entre soportes, en cm.

Para pletinas rectangulares o paquetes de pletinas:

Siendo:

b: ancho de la barra, en cm.


a: alto de la barra, en cm.
δ : densidad de la barra, g/cm3.

Introduciendo estas expresiones en la ecuación inicial, esta se transforma, para


barras rectangulares, en:
De esta igualdad se deduce:

Para pletinas rectangulares de Cu:

Para pletinas rectangulares de Al:

Ejemplos

Pletina de Cu, de b = 1 cm, a = 10 cm, h = 100 cm

La frecuencia propia de oscilación valdrá:

Valor notablemente por debajo de los 50 Hz de la red. No es de esperar ninguna


resonancia.

La misma pletina pero con soportes situados a h = 85 cm.

Valor cercano a los 50 Hz de la red, son de prever problemas de resonancia.

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