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  • Bonsiepe Artefcto1

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    Gui Bonsiepe, Artefacto y proyecto, part 1

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    fechos ganorales do este obra. pet “lane. aticulo "Arabeto0s del, racionlismo! 16 por prim Yee en a T(enate do. 1909)" 20 le {ovste Actualldades téenleo-tontieas: Arqultoctura,.pubiicads pot el Centro de Informacién Gientfon y Teenles de le Un ‘oreidad dota Habana aniculo "Diceho Incustil: una roalldad ambigua” ha sido 6s nto con” contrato dela UNESCO -paraser Incltldo eh wn Yolumen"edtado por Roberto Segre, Que publicaré la edtorial Siglo : Fy el © Fettrinett Ettore, Milano, 1976 @ De Ia ealeién en castellano. 8 Robie, 22. Mecré20 ISBN: 04770591425 Dapdaito legal: M. 17.126-1075 Printed in Spain. improse on Hepsna mar. “To Marid20 GUI BONSIEPE _ Quere e i ARTEFACTO Y PROYECTO INTRODUCCION Los’ textos recogidos en la presente publicacién en tomo a los problemas del Disefio tratan de ofrecer al lector de lengua espaiiola una éptica si se quiere par- ticularizada de algunos de los aspectos en los que se trabajo en la actualidad, proximos a elaborar to que podriamos enunciar como una Teoria General del Co- nocimiento del Disefio, dentro de ta cultural material de nuestro tiempo. Gui Bonsiepe, disefiador industrial, representa una situacién puente lo suficientemente precisa como para iniciar esta recopilacién en cierto modo ambiciosa. Graduado en la Hochschule fiir Gestaltang-Ulm, ha sido un colaborador activo de este centro impartiendo en- sefianza y dirigiendo como editor la revista de Ulm. ese a [as eriticas formuladas desde tantas intenciones diversas, Ia Escuela Ulm traté de «suporars, on los afios posteriores a Ja segunda guerra mundial y de una Forma muy conereta bajo Ta direccién de Toms Mal- donado, los presupuestos ideoldgicos invocados por la primitiva Bauhaus o las tesis eabstractas y cautelosas» de la fina sensibilidad suiza que representé la época de Max Bill en los origenes de la escuela. Bonsiepe es un intelectual riguroso que ha pasado primero por los departamentos escolares en Ulm y des- pués por algunas universidades norteamericanas ense- iando: Andlisis de Diseiio, Comunicacién Visual, Reté rica Visual, Semiologta, Andlisis de Productos; poste- riormente ha trabajado en el Centro de Investigacion de Disefio Industrial en Buenos Aires, y en 1969 fue enviado como experto de las Naciones Unidas a San- tiago de Chile, donde realizé una serie de trabajos de cooperacién técnica y desarrollo con una labor muy activa dentro del INTEC —Comité de investigaciones tecnolégicas en Chile— hasta los tiltimos dias del Go- bierno de Ia Unidad Popular; trabajando en Ja actua lidad en Buenos Aires. Sirvan estas breves puntualiza- clones para sefialar un esquema biosréfico tangencial y amputado frente a las sugerencias de su pensamiento, Los trabajos aqui resefiados se presentan dentro de una cronologia concreta v reflejan con bastante preci- sidn el recorrido histérico que ha sufrido el disefiador, sus metodologias v los prestrpuestos ideolégicos que lo circundan. Un andlisis cientifico v una critica racional aparecen como constantes en el stanificativo discurso de todos Tos trabaios: «No es probable que una pro- fesién orientada a la tecnologia y a la industria escape a la realidad de Ta ciencia y el racionalismo. Sin em bargo, el proceso critico que desarrolla el trabajo de Bonsiepe no se presenta como finalista o, al sentir de muchos metodélogos. a la moda, como una mixtifica- cin mecanicista. Al disefiador prictico-tesrico que re- presenta Bonsiepe no se le escapan desde éste estos, primeros ensayos el mundo de la Forma... «Ya es tiem- bo de rescatar el concepto cast desprestigiado de Ia Forma, concepto tan dificil de desprender del Disefio. como el de curacién de la medicinay. Metodologia versus Formalismo ha sido (y no de bemos pensar, por los sintomas que atin aparecen, que haya desaparecido el mecanismo tecnocrético que tra- ta de suplantar el vacio acusado por el «desprestigio de la Formas. Con bastante precisién se puede obser- var en estos trabajos el riesgo de metodolotrfa en que 10 — se puede caer si no se define bien su funcién. «El rigor y perfeccién de un método estén en funcién de sus ob- jetivos; sin embargo, los métodos rigidos. de disefio pertenecen a los muscos». Y también en cuanto al uso. «Distinguir entre la necesidad de usar técnicas moder- nas de planteamiento y el simple deseo de aplicarlase, El desarrollo de una tecnologia cngente nos inun- da de familias 0 artefactos que vierlen a inscribirse en nuestra realidad material y existencial como autén- ticas metamercancias; Ja méxima esi las circunstan- cias forman al hombre, entonces las circunstancias de- ben formarse humanamente» para Bonsiepe tiene una clara respuesta: «eliminar de formas irracionales del dominio del hombre sobre e! hombre». Los tradicionales problemas de la libertad crea- dora y los supuestos intuitivos que durante tanto tiem- po han distrafdo el trabajo transformador del hom- bre, aparecen en los ensayos precedentes con una clara decision de eliminar dualidades forzadas; creatividad, inspiracién, genialidad creadora... son partes integra- das en un proceso global bésicamente transformador, La creatividad. utilizando e! pardmetro cientifico, se define «como la capacidad de'resolver problemas con cierto grado de innovaciéns. EI pensamiento de W. Benjamin subyace en algu nos de los presupuestos ideoldgicos cuando Bonsiepe juzga el valor de Ia ciencia y el racionalismo en torno a la creatividad. Los arquitectos, disefiadores institu: ionalizados, no salen muy bien parados al pretender mantener y potenciar bisicamente los factores simbé- licos y parafilos6ficos sobre los empfricos: Segulr man. teniendo la interpretacién de la arquitectura $610 como arte, parece que ele quedan pocas esperanzass, quiz por esta falta de esperanga algunas corrientes del pen- 1" samiento arguitecténico actual propugnen la arquitec- tura como evasién. Convendria puntualizar que la orientacién critica que postula Bonsiepe no esta dirigida hacia un cien- tifismo tecnocrittico, sino a desmitificar cierto emocio- nalismo y personalismo como doctrinas del Disefio. «Es un Sintoma de dogmatismo ciego acientifico el negar la necesidad biolégica de lo estético.» No falta en las acotaciontes de este trabajo una fe ferencia al Bauhaus, el andlisis critico histérico que G. Bonsiope enuncia en torno a esta cireunstancia his- t6rica del mundo del Diseflo, reproduce en algunos de ‘sus pasajes una inconsciente manifestactén del pré- eso acaecido en Ulm; al lado de tanta literatura reté- rica 0 partidista, este trabajo, como Tos escritos de TT, Maldonado («Vanguardia e Razionalités, 1958-1963. 1970, Ed. Bisaudi, 1974), reflejan una actitud critica y tun conocimiento valfoso que quiza pueda desmontar tan indocumentados enfoques como existen en torno 2 este siguificativo hecho cultura, que intento de al- guna manera formular una toma de conciencia critica y social de lo que deberia ser un Disefio Recional, y que su error de mayor magnitud ‘tal vez estuviera fun; damentado en verter una fe tan radical en el propio proceso del disefto. A partir de los afios sescnta las limitadas fronteras que costrefiian el disefio de objetos cambiaron de va- Tor; Ta actual crisis ecoldgicd ha puesto en evidencia la necesidad de una planificacién que acuda a un di seiio de estrategia ambiental. Los métodos denomina- dos contratecnolégicos (technological fix), que en los afios sesenta suponion alternatives carisméticas para dctener el avance destnictor de las programdciones tecnocréticas, hoy se puede comprobar que apenas sit- ven si no es para discursos académicos; los remedios 2 — a vamos comprendiendo que se inscriben en planos de dominio politico, «... Lo que necesitamos urgentemente es una ecologia politica, porque los problemas ecolé- gicos son bisicamente politicos». Indudablemente, la configuracién ambiental-en una sociedad tecnolégica requiere de unas estrategias globales y un anélisis de las ideologias que sustentan estos modelds de compor- tamieno, Hasta el momento ee consirado derecho de todos lanzar productos al mercado incluyendo los componentes que contaminan cl medio ambiente». Bon- siepe reclama, pese a las dificultades que ello com- porta, la creacién de «instituciones de control». «Es un error el suponer que los efectos altamente negativos de tecnologia e industrializacién en nuestro ecosistema pueden, en primer lugar, ser corregidos inventando contratecnologias, porque las dificultades son menos de cardcter tecnolégico que de carécter social y pols ticos, No olvida en otro de sus apartados el valor del proyecto, Ia imaginacién proyectual tiene un amplio campo de accién, su dificultad reside en pesfilar el salto tecnol6gico preciso sin caer en las divagaciones del utopismo clésico o encerrarse en el ampro profe- sionalizado de los modelos aprendidos; es el drama ‘que encierran las facultades y escuelas de Ingenieria, Arquitectura y Diseno que tratan de enfocar proble- ‘nas nuevos con rigidas patentes académicas, no arries findose a introducir mecanismos proyectuales distin- tos... #Por lo general, podemos decir que el rigido pen- samiento determinista de nuestras Facultades de inge- nieria deberia ser reemplazado por un pensamiento probabilistlas. G, Bonsiepe, en los uiltimos trabajos a partir de 1970, patentiza los problemas que plantea Ja ciencia como fuerza productiva en paises que viven las con diciones de permanente injusticia social. EI debatido 13 problema de Ia neutralidad de Ja ciencia, la transfe- rencia de tecnologia y sus factores de dependencia, planificaciéa y politica tecnol6gica, son apartados con- signados con gran lucidez en las consideraciones fina- les del libro... eLa importacién exclusiva de tecnolo- gia empeora el mal que pretende curar, para G, Bon- siepe, la salidad del subdesarrollo estaria en una op- cién a crear innovaciné de por sf». Situacién que lle- varia implicito el tener una idea clara de lo que sig- nifica Proyectar e Investigar... «Si hacer investigacién es ocuparse de problemas para los cuales nadie sabe tuna respuesta», como sefiala Beer, para Bonsiepe hacer disefio significa Jo mismo. «Solamente 1a modalidad de Ia intervencién es otra (intervencidn, entendido en el sentido de una categoria antropoldgica). Los resul tados de la investigacién se manifiestan en conoci- mientos; el modo de operar es analizar, describir, ob- servar, verificar, explicar fendmenos existentes. Los re- sultados del acto de proyectar (proyeccién) 0 del di- sefio se manifiestan en productos, estructuras y siste- ‘mas que antes no existian. La dimensién de critica-polémica en Bonsiepe que- da patente en Ia que realiza al libro de V. Papancck «Design for the real World», desplazando los limites de la critica ret6rica que le sugiere el texto del libro a tuna critica analitica sustentada por su conocimiento del tema. El presente trabajo termina con la exposicién de una experiencia en grupo realizada en el Comité de Tovestigaciones Tecnolégicas (Intec-Corfo) en Santia- go de Chile, donde se aborda desde una plataforma teorica primero y documental después el papel del Di- sefio Industrial, las implicaciones teenologicas y un anilisis del contexto subdesarrollado en los paises pe- riféricos. “ El énfasis por crear una tecnologia propia de nue vo aparece en este trabajo colectivo; es al estado a quien le compite la funcién de: 1, Definir una politica tecnolégica no solamente en términos generales, sino también concretos y fac- tibles. 2, Resolver la base institucional de tecnologia. 3. Establecer criterios pare la seleccién y compra de tecnologia extranjera, . «Entre las herramientas para contrarrestar Ja dependencia tecnolégica se muestra la actividad pro- yectual en general y la actividad del diseho industrial en especial», significativa interpretacién del valor transformador del disefio, una hipétesis fragmentaria si se quiere, de interpretar y utilizar el diseio como un trabajo que se integra en el proceso descolonizador. Los escritos de Gui Bosniepe que presentamos re- sumen con gran precisién un panorama en torno al mundo de los objetos manufacturados (Artefactos), a su ideaci6a y reproduccidn (Proyecto), dentro del am- plio y compiejo entorno de la cultura material de nues- tra época. ‘Su gestién no se reduce a Ia de tn observador nou- tral 0 a cotuportarse como un doctrinario adiestrado, es un pensador que interpreta sus juicios y opiniones en auténtica libertad interior, tratando de orientar sus ipétesis cia una indagncin objetiva,caléciea y yara 1a creacion .. Los grandes suefos del proyectista, como in. novador social que influye en el cambio social a tra- vés del disento de estructuras fisicas, han sido perfora dos por Ia critica sociolégica. Tal vez no sea un mal sintoma que los manifiestos grandilocuentes estén ro 16 ducidos hoy en dia a los museos —sefiala Bonsiepe al final de sus escritos—. Las tareas del dia son més pro- ssaicas, menos espectaculares, pero no por eso social- ‘mente menos validas.» Antonio Fernéndez Alba Madrid, febrero 1975 ~- GUI BONSIEPE DISENO INDUSTRIAL: ARTEFACTO Y PROYECTO / ARABESCOS DEL RACIONALISMO Articulo publicado en Ia revista Uim, de ia Hoch- schule fir Gestaltung Ulm, ndms. 19-20, 1967. Estado presente de la metodologia de disefio. “Méthode. Ne sert @ rien” (1) Fue muy ir6nico George Nelson al definir el disefio industrial come profesién convertida en mito antes de alcanzar madurez. La metodologia del diseio se encuen- fra en una posicién muy similar La mayorla de los disenadores considera las dis- cusiones sobre metodologia cosa frivola y apartada de la préctica real, 0 estuerz0s dosquiciantes de los me- todologistas por dominarlos, cuando ellos fo que quie~ ren es darso a la tarea inmediata, I trabajo de los disehadores es duro, leno de di ficuitedes.

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