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CARTA DE LA FUENTE DEL PARQUE

C on mayor o menor frecuencia todos vamos a los parques de ciudades


y pueblos. En cada parque suele haber al menos una fuente. ¿Has
pensado alguna vez qué diría la fuente de uno de los parques que conoces
si pudiese hablar?

Reflexiona sobre esta cuestión y anota en un esquema tus ideas.


¿Diría que la tratan bien, que los visitantes del parque son respetuosos
con ella, que la cuidan mejor los animales que las personas...?

Imagina que eres la fuente de un parque y escribe una carta a las


personas. Puedes ofrecer información muy variada. Entre otra cosas:

• explicar cómo es la vida de la fuente en los diferentes momentos del día: por la
mañana, por la tarde, por la noche.
• contar de qué manera cambia su vida según las estaciones del año.
• decir quién prefiere que vaya, personas o animales, y por qué.
• describir cómo suelen comportarse diferentes grupos de personas: niños,
jóvenes, adultos, ancianos.
• narrar diferentes cosas que ha visto la fuente a lo largo de su existencia.
• enumerar para qué la usan y para qué le gustaría servir.
• escribir sobre varias cosas de las mencionadas, o algo más que se te ocurra a ti.

Apunta en un esquema las ideas que tú, poniéndote en el lugar de la


fuente, vas a transmitir, y en qué orden. Después, escribe la carta,
teniendo en cuenta que nos lo cuentas a nosotros, los humanos. No olvides
la estructura de la carta:

Lugar y fecha
Saludo
Texto de la carta
Despedida y firma

Cuando hayas terminado, relee tu texto y piensa si otros lectores entenderán


lo que intentas comunicar en él.

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ESQUEMA:
Organiza tus ideas en un esquema. Apunta solamente lo fundamental: de qué habla la
fuente y en qué orden.
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No olvides la estructura de la carta:

Lugar y fecha
Saludo
Texto de la carta
Despedida y firma

REPASO:

Antes de dar por terminado el ejercicio es aconsejable hacer un repaso:


1.- Fíjate en los signos de puntuación que has empleado. ¿Están bien? ¿Debes añadir
o quitar alguno?
2.- Repasa de nuevo y señala las palabras que hayas repetido en varias ocasiones.
¿Se te ocurre algún sinónimo para evitar esas repeticiones? Si es así, sustituye la
palabra repetida por la que has pensado.
3.- ¿Has empleado adecuadamente mayúsculas y minúsculas? ¿Y las tildes? ¿Puedes
corregir algo?
4.- ¿Tu escrito es legible? ¿Has tenido en cuenta el orden, la presentación, la
caligrafía?
¿Entenderemos los lectores la carta de la fuente? Entonces, ¡enhorabuena por tu
trabajo!

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(Escribe aquí la carta)

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