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A la lengua espaola, como a todas, la crean sus hablantes. Por eso resulta
imprescindible conocer las relaciones sociohistricas que tuvieron aquellos
antiguos dueos de nuestro idioma con visigodos, rabes, franceses, indios
americanos y anglfonos. La mejor prueba de ese ir y venir por los cruces de
caminos que es la historia de una lengua qued plasmada en parte del vocabulario
actual.
Desarrollo
Como es bien sabido, los orgenes del espaol se remontan al latn, aquella
lengua que hablaban los romanos en lo que en su poca podra considerarse casi
medio mundo.
All por el ao 19 a.C. puede entenderse que termina la conquista romana
de Hispania, con la incorporacin al Imperio de los pueblos norteos ms
rebeldes.
Se entiende que, a partir de ese momento, los habitantes de la antigua Iberia
que as era conocida entre los griegos hablaban una lengua ms o menos
comn a toda la Romania como se conoce a todo el territorio conquistado por los
romanos: el latn clsico.
Con el paso de los siglos, como es natural en todas las lenguas, este latn
oral se fue alejando de la lengua que se hablaba en el Imperio del siglo I d.C.
hasta dar lugar a una variedad comn a toda la Romania: el latn vulgar.
A esta fragmentacin diacrnica en el tiempo cabe aadir una
fragmentacin diatpica en el espacio, tpica de los diversos avatares histricos
que sufrieron los distintos pueblos que se encontraban bajo el yugo romano y que
se acentuara tras la desaparicin de este.
En efecto, del ao 476 d.C. se entiende como cannica la cada del Imperio
Romano de Occidente (el de Oriente dur hasta 1453, que es cuando tuvo lugar la
llegada otomana a Constantinopla, antigua Bizancio, actual Estambul), lo que
conlleva una fragmentacin poltica de sus territorios.
En Hispania entonces toman fuerza diversos pueblos germanos vndalos,
suevos y alanos que haban llegado hacia el 409 d.C. y que pronto son
sustituidos por los visigodos, tambin germanos, que se hacen con el poder de
Toledo hacia el 507 d.C.
estrs, y otras muchas (no siempre intiles) que el lector conoce sin duda muy
bien.