Está en la página 1de 5

Secretaría de Comunicación

In
for ma
29 de julio de 2009

Cómo actuar ante la gripe A


Importante
Al encontrarnos ante la fase inicial de la pandemia sin conocerse con gran precisión el comportamiento
futuro del virus, estas consideraciones tienen una carácter orientativo, por lo que habrá que estar atento a
las futuras modificaciones y/o recomendaciones que, a diario, elaboren la Organización Mundial de la Sa-
lud, el Ministerio de Sanidad de España y el Gobierno de Canarias a través de su Consejería de Sanidad.
La Federación de Salud de Intersindical Canaria, mediante sus delegados de prevención, ha establecido
una línea de presión y fiscalización para que la Consejería de Sanidad mejore y amplíe las campañas in-
formativas a los diferentes sectores laborales de la población canaria.

Prevención, identificación y tratamiento

1.- Los síntomas de la gripe A aparecen entre uno y cinco días después de penetrar el virus en el organis-
mo. Además de fiebre alta, tos, congestión nasal, estornudos, dolores musculares y malestar general, hay
personas que también sufren vómitos y diarrea. Ante las primeras sospechas hay que llamar a los servicios
sanitarios.

2.- Los grupos de riesgo que deben vacunarse no están perfilados de forma oficial. Sin embargo, los exper-
tos señalan algunos colectivos más vulnerables: niños, embarazadas y adultos con patologías crónicas (en-
fermedades respiratorias, inmunodepresión...). Aunque los mayores de 60 años se infectan menos, si se
contagian tienen más riesgo de que surjan complicaciones. Trabajadores de servicios públicos escenciales.
Por ahora, personal sanitario y docente)

3.- El contagio se produce no sólo por el aire, lo más frecuente es que sea de forma indirecta, cuando una
persona se toca los ojos, nariz o boca después de haber tocado microgotas que contienen el virus y que han
quedado depositadas en las manos y otras superficies.

4.- Lavarse las manos con agua y jabón de forma frecuente es la principal medida de prevención para evitar
el contagio y la propagación de la pandemia. Sobre todo, después de viajar en transporte público, al regre-
sar a casa, antes y después de comer... Hay otras reglas de oro: no tocarse la boca, nariz ni ojos; taparse la
boca y la nariz con un pañuelo desechable al toser o estornudar y evitar el contacto con afectados de nueva
gripe.

5.- El enfermo debe quedarse siete días en casa y no recibir visitas. Por tanto, no irá a trabajar ni a clase.
Tendrá que estar en una habitación separada y cerrada. Su cuidador deberá utilizar mascarilla recomendada
cuando le atienda y extremar las medidas higiénicas.

6.- No todos los enfermos necesitan antivirales. El médico decidirá en qué casos administrarlos. Para que
sean efectivos deben tomarse en las primeras 48 horas tras aparecer los síntomas. Además, se utili-
zan analgésicos y antitérmicos para aliviar los síntomas. Hay que beber mucho líquido y hacer reposo.
7.- En España y en Canarias se desarrollarán dos campañas de vacunación: una de la gripe común y otra
de la gripe A. Aunque las farmacéuticas no tendrán listo el fármaco del nuevo virus hasta el otoño. El Go-
bierno ya ha encargado 37 millones de vacunas para inmunizar al 40% de la población. Serán dos dosis por
persona.

8.- El Gobierno publicará una guía para que las empresas disminuyan el impacto de la gripe A en sus planti-
llas. Las funciones esenciales siempre estarán cubiertas. Hay que facilitar las medidas higiénicas a los em-
pleados. Y crear un comité de crisis que siga la situación.

9.- Los organismos internacionales no han recomendado el cierre de guarderías, colegios, institutos y uni-
versidades.

10.- No existe ninguna restricción a los viajes. En los aviones hay un protocolo de actuación en el caso de
que se detecte una persona con gripe A entre el pasaje.

TELÉFONOS

El Ministerio de Sanidad ofrece un teléfono de información y atención al ciudadano: 901 400 100.
Canarias: 012.

A través de las páginas web de varios organismos internacionales se pueden obtener más datos sobre la evolución de la en-
fermedad y también consejos para evitar la propagación. Estas son algunas:

- OMS (www.who.int/es, en español).

- CDC americano (www.cdc.gov/spanish, en español).

- Ministerio de Sanidad de España (www.msc.es).

Con la cercanía del otoño, medio mundo se prepara para hacer frente a una probable y rápida propaga-
ción de la nueva gripe, mientras observa cómo el virus H1N1 ha desplazado a la gripe común durante el in-
vierno que vive el hemisferio sur. Un escenario que podría trasladarse a los países europeos. Aunque las
autoridades sanitarias internacionales y nacionales envían mensajes de calma a la población, nunca está de
más conocer lo que quizá llegue en los próximos meses.

Periodo de incubación: Entre uno y cinco días


Desde que el virus H1N1 penetra en el organismo hasta que aparecen los primeros síntomas de la enferme-
dad pueden transcurrir entre uno y cinco días. En el caso de la gripe común el período de incubación es de
veinticuatro a cuarenta y ocho horas.

Punto crítico de la pandemia: Llegará con el frío


La bajada de las temperaturas y las condiciones meteorológicas del invierno favorecen la propagación de
este tipo de virus. Lo más probable es que se empiece a extender desde noviembre hasta febrero, que sue-
le ser también la época de la gripe común.

Cómo se produce el contagio: Por contacto


El virus H1N1 se transmite de persona a persona cuando alguien que tiene la enfermedad expulsa gotitas
de saliva o secreciones nasales al toser, hablar o estornudar. Estas se desplazan por el aire y pueden entrar
en contacto, o introducirse en la boca o la nariz, de personas cercanas.
También se produce el contagio indirecto, más frecuente, por tocarse los ojos, la nariz o la boca después de
haber tocado las microgotas que han quedado depositadas en manos y otras superficies.
Los enfermos de gripe A transmiten el virus desde un día antes de empezar a manifestar los síntomas hasta
siete días después.

Síntomas: Fiebre alta de repente


Son muy similares a la gripe estacional: fiebre de más de 38º que aparece de repente, tos, congestión y se-
creción nasal, estornudos, dolores musculares y de garganta , escalofríos, fatiga y malestar general. En mu-
chas personas también han aparecido vómitos y diarrea.
A veces se producen infecciones bacterianas al mismo tiempo que se desarrolla la enfermedad o después
de que esta haya pasado, lo que puede dar lugar a neumonías, infecciones de oído o sinusitis.
Si la gripe A se vuelve más agresiva será necesario una atención médica inmediata. Algunos síntomas nos
alertarán de ello: dificultad para respirar, dolor o presión en el pecho o abdomen, mareo repentino, confu-
sión, vómitos constantes, labios de coloración morada o azulosa, signos de deshidratación, convulsiones y
somnolencia.

Ante la primera sospecha: Contactar con los servicios sanitarios


Ante el primer síntoma, el Ministerio de Sanidad recomienda contactar por teléfono con los servicios sa-
nitarios de la Comunidad autónoma. A través de diferentes preguntas evalúan al paciente y su nivel de ries-
go. Algunas regiones han habilitado teléfonos dedicados sólo a la gripe A. Sólo los casos graves deben ir al
hospital. HAY QUE EVITAR COLAPSAR LAS URGENCIAS.

Grupos de riesgo: Aún por definir


Los organismos internacionales todavía no han perfilado el conjunto de colectivos de riesgo que debe-
rán ser vacunados de la gripe A. No obstante, los expertos apuntan ya los grupos más vulnerables: niños,
mujeres embarazadas y adultos con enfermedades crónicas (respiratorias, cardiovasculares, inmunodepre-
sión, diabetes...).
Se considera que la enfermedad puede resultar más agresiva en mayores de 60 años, aunque no son los
que más se infectan, sí son los pacientes con más peligro de presentar complicaciones al contraer el virus.

Duración de la enfermedad: Lo peor, durante cuatro días


Lo habitual es que la gripe evolucione favorablemente en dos o cuatro días a partir de los primeros
síntomas, aunque se puede continuar con tos durante una semana y con la sensación de cansancio durante
varias semanas más.

Medidas preventivas: Lavarse las manos


Si hay un consejo esencial de prevención es lavarse las manos a menudo con agua y jabón, durante un
minuto, y secárselas con papel desechable que habrá que tirar a la basura. Esta medida higiénica resulta
fundamental siempre, pero sobre todo después de toser, estornudar, viajar en transporte público, volver de
la calle, tocar objetos...
También sirven unas toallitas que contengan alcohol.
No hay que tocarse la boca, la nariz o los ojos con las manos. Y tendremos que taparnos boca y nariz al
estornudar o toser con un pañuelo desechable, que luego se tirará a la basura. Y después lavarnos las ma-
nos.
Se recomienda evitar el contacto con enfermos y no frecuentar lugares multitudinarios.
En Estados Unidos, incluso, se aconseja prepararse para la enfermedad: hacer acopio de suministros
para quedarse en casa una semana (alimentos, desinfectantes, pañuelos desechables).

El enfermo en casa: Siete días de reposo


Además de extremar las medidas higiénicas anteriores, la persona que contraiga el virus H1N1 debe ais-
larse en su hogar durante una semana y no recibir visitas. Por tanto, no irá a trabajar ni a clases. Si se ve
obligado a salir, por ejemplo para ir al médico, debe utilizar mascarilla, al igual que cuando comparta las zo-
nas comunes de la casa. Tendrá que estar en una habitación separada y cerrada. Y si es posible usar un
baño aparte, que será desinfectado todos los días.
Hay que mantener desinfectadas las superficies de muebles, baños, cocinas... y ventilar diariamente las zo-
nas comunes. La ropa de cama, toallas y utensilios de comida del enfermo no es preciso que se laven por
separado, pero nadie debe usarlos si no se lavan primero con el detergente o lavavajillas habitual. Quien se
ocupe de la colada, debe evitar ponerla encima de su cuerpo para no contaminarse. Se pueden adquirir toa-
llas de papel o asignar una toalla de tela a cada miembro de la familia.
Los que viven con un enfermo deben preguntar al médico si es necesario seguir algún tipo de tratamien-
to. Son convenientes otras normas: no colocarse frente al afectado ni a menos de un metro de distancia de
él. Utilice mascarilla cuando esté cerca y cuando salga de casa. Una vez usada hay que tirarla a la basura y
lavarse las manos. Cuando lleve a un bebé enfermo en sus brazos, la barbilla del niño tiene que mirar hacia
el hombro para evitar que le tosa directamente a la cara.
Tratamiento: Antivirales
No todos los enfermos de gripe A necesitan antivirales. Por el contrario, la mayoría no precisa estos fár-
macos. El médico deberá decidir en qué casos se administran.
El tratamiento contra la gripe A está dirigido a reducir los síntomas y la infección. Se utilizan dos principios
activos: oseltamivir (Tamiflu) y zanamivir (Relenza), que se deben administrar en las primeras 48 horas.
Existen otros medicamentos que sirven para aliviar el malestar general: analgésicos y antitérmicos como pa-
racetamol e ibuprofeno. Hay médicos que también prescriben descongestionantes nasales y antitusivos con-
tra la tos.
Los procesos gripales pueden ir acompañados de infecciones bacterianas. Por lo tanto, algunas perso-
nas necesitarán tomar además antibióticos. Hay que sospechar cuando la enfermedad es más grave o pro-
longada o parece mejorar pero luego empeora.
El CDC americano recomienda no administrar aspirina (ácido acetilsalicílico) a los niños y adolescentes
porque puede causarles una enfermedad rara pero grave llamada síndrome de Reye.
Aparte de los fármacos, hay que beber mucho líquido para evitar la deshidratación (zumos con vitamina
C, bebidas energéticas, agua, caldos) y hacer reposo. Y un principio fundamental: NO TOMAR MEDICA-
MENTOS SIN PRESCRIPCIÓN MÉDICA.

Colegios: Seguirán abiertos


Por ahora, los organismos internacionales no recomiendan el cierre de guarderías, colegios, institutos y
universidades. Unas directrices que sigue nuestro Gobierno.

Empresas: Reducir el impacto


El Ministerio de Sanidad presentará en los próximos días una guía para que las empresas prevean cómo
minimizar el impacto de la gripe A en su plantilla. No obstante, ya hay informes con algunas recomendacio-
nes. Las funciones esenciales siempre quedarán cubiertas, bien formando trabajadores en tareas que no
desempeñan a diario, bien ofreciendo apoyo familiar a los empleados imprescindibles, por ejemplo, para cui-
dar de sus hijos.
Algunos consejos son muy prácticos: nunca puede faltar jabón en los baños, instalar productos con base
de alcohol en zonas de paso, proporcionar toallitas desinfectantes para que los empleados puedan adecen-
tar las superficies de sus elementos de trabajo y que no falten papeleras (con tapa mejor).
Un comité de crisis seguirá la situación y adoptará decisiones como mandar a casa de forma preventiva a
los profesionales expuestos al virus o distribuir las mesas de la oficina a un metro de distancia. Los emplea-
dos estarán informados sobre qué hacer: por ejemplo, no compartir artículos de oficina. Reuniones y viajes
pueden reducirse o sustituirse con videoconferencias o teletrabajo.

Vacunas: Llegarán en otoño


El Ministerio de Sanidad llevará a cabo dos campañas de vacunación: una para la gripe común y otra
para la gripe A. No se descarta que algunas personas tengan que vacunarse de ambos virus.
Aún está por ultimar el calendario (puede ser que se adelante) y los grupos de riesgo que deberán ser in-
munizados contra la gripe estacional. Pero todo parece indicar que será como otros años: durante el otoño.
Sin embargo, existen más incógnitas sobre la vacuna de la nueva gripe. Por un lado, las farmacéuticas
creen que estará disponible en otoño, pero no conocen la fecha exacta. Por otra parte, los organismos inter-
nacionales no han definido aún a qué colectivos vulnerables deberán ser administradas.
El gobierno español ha adquirido 37 millones de vacunas para cubrir al 40% de la población. Se deben
administrar dos dosis por persona.

Transporte aéreo: Viajes sin restricciones


Los organismos internacionales no han impuesto ninguna restricción a los viajes. No obstante, la Asocia-
ción Internacional de Transporte Aéreo (IATA) ha establecido una guía de actuación a bordo de las aerona-
ves si se detecta algún caso de gripe A entre los pasajeros. Desde aislar al enfermo (y su equipaje de mano)
hasta qué hacer una vez que se llegue al destino.

Alimentación: No hay peligro con el cerdo


Ni la carne de cerdo ni sus derivados pueden transmitir el virus H1N1, siempre que se hayan manipulado
y cocinado de manera adecuada. Tampoco el agua potable presenta riesgos.

También podría gustarte