Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
Vamos al tema...
---------------------
Esho Funi: la inseparabilidad
de la vida y el ambiente
---------------------
Los seres humanos estamos inmersos en un medio ambiente rico con miríadas
de formas de vida vegetal y animal, separados del cual no podemos
sobrevivir. Debido a que dependemos del agua, el aire, la vida vegetal y
animal que nos rodea, nuestro medio ambiente merece, verdaderamente, el
nombre de “madre naturaleza” –porque da vida y nutre a los seres humanos.
Además, nuestros cuerpos mismos están compuestos de los mismos elementos
que se encuentran en nuestro medio ambiente -el componente líquido de
nuestro cuerpo, por ejemplo, es similar a la composición del agua de mar.
Que dependamos de nuestro medio ambiente y nos parezcamos mucho a él, hace
del principio budista de la unidad de la vida y su medio ambiente una
cuestión de sentido común. Pero la visión budista va más allá de una simple
conexión técnica; ella reconoce un hilo que vincula a las entidades
vivientes con su medio ambiente. Este hilo es el verdadero aspecto de todos
los fenómenos, la Ley Mística, que puede ser entendida como la vida misma
del universo en sí.
Mientras la ciencia reconoce que la vida surge del medio ambiente y es una
extensión de éste, el Budismo vierte luz sobre el por qué es esto así. Se
debe a que el medio ambiente mismo está “vivo” -porque el universo rebosa
del potencial de la vida.
La “unidad” a la que nos hemos estado refiriendo deriva del término chino
que literalmente significa “dos pero no dos”. En un nivel, la persona y su
medio ambiente son entidades distintas y separadas. Naturalmente, es
importante reconocer y apreciar esta distinción. No obstante, vistos desde
la perspectiva de la entidad esencial, o lo que el Sutra del Loto refiere
como el verdadero aspecto de todos los fenómenos, son uno y lo mismo.
--------