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stan allen / object to field I christopher alexander / sistemas que generan sistemas I maria alba sargatal /
estudio de la gentrificacion I david harvey / el derecho a la ciudad I michael sorkin / variaciones sobre un parque tematico
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anteproyecto

sistemas que generan sistemas


chistopher alexander
[en 3 aspectos de matemática y diseño]

1 . dos líneas se ocultan en la palabra sistema: la idea un sistema como un todo y la idea de un sistema generador

La palabra sistema, como todas las palabras técnicas tomadas del lenguaje corriente, tiene varios sentidos y es imprecisa. Esta
falta de precisión ene una palabra técnica parece a primera vista muy peligrosa; de hecho, ayuda en muchos casos. Aunque vagas,
permiten la creación de nuevas ideas y permite también que esas ideas se amplíen en lugar de limitarlas por definiciones precisas y
prematuras.
La palabra “sistema” es una de ésas. Aún mantiene ocultos muchos sentidos. De esos sentidos posibles se destacan dos: la idea de
un sistema como un todo y la idea de un sistema generador.
Esos dos aspectos aunque aparentemente similares, son lógicamente muy distintos. En el primer caso, la palabra “sistema” se
refiere al aspecto particular holístico de una única cosa. En el segundo. La palabra “sistea” no se refiere en absoluto a una sola
cosa, sino a un conjunto de partes y leyes combinatorias en grado de generar muchas cosas.

2 . un sistema entendido como un todo no es un objeto sino una manera de ver un objeto. Reside en un fenómeno
holístico que solo puede ser entendido como producto de la interaccion entre las partes.

Observemos algunos ejemplos de fenómenos holísticos que deben ser considerados como sistemas.
La crisis económica de 1929 es un ejemplo típico de fenómeno holístico. No podemos entender la crisis económica sino como
resultado de la interacción entre niveles de consumo, inversiones de capital y ahorros: las interacciones pueden ser representadas
por ecuaciones. Si seguimos esas ecuaciones hasta el final, comprobamos que, en algunos casos, conducen siempre a la crisis.
La estabilidad de la llama de una vela es otro ejemplo de fenómeno holístico. ¿porqué conserva aproximadamente el mismo tamaño
y la misma forma mientras se consume?. En este caso las “partes” son corrientes de cera vaporizadas, de oxígeno y gases en
combustión -los procesos de la combustión y vaporización producen interacciones entre esas corrientes- y esas interacciones
muestran en que tamaño y forma se estabilizará aproximadamente la llama.
Otro tipo de comportamiento holístico es la inestabilidad de ciertos objetos muy vulnerables a cambios en una de sus partes:
cuando cambia una parte, cambian también las demás partes. Observamos este fenómeno en el caso de la erosión: la
desforestación priva a la tierra de las raíces que le dan consistencia, de tal modo que el viento y el agua pueden acabar con el resto
de las plantas y convertir esa tierra en un desierto.
Resumamos el contenido de estos ejemplos. Nos encontramos frente a objetos que se comportan de una manera determinada que
sólo podemos entender como producto de una interacción entre partes. A este tipo de comportamiento lo llamamos comportamiento
holístico.
Se podría definir el fondo de todo el concepto de una manera muy sencilla. Las propiedades mas importantes de cualquier objeto
son aquellas que se relacionan con su estabilidad. Es la estabilidad la que otorga a un objeto su carácter esencial. La resistencia de
un arco, el arder uniforme de una llama, el equilibrio ecológico de un bosque, la corriente contínua de un río, la salud de un ser
humano, la seguridad económica de una nación, todos son fenómenos que, de una u otra manera, están relacionados con la
estabilidad. La estabilidad, en cualquiera de sus formas, es una propiedad holística. Solo puede ser entendida como resultado de
una interacción entre partes. Sin embargo el carácter esencial de un objeto, que en realidad se basa en algún tipo de estabilidad,
debe ser entendido como producto de interacciones dentro del todo. Cuando consideramos algo de esa forma, transcribiendo su
carácter en términos holísticos, decimos que es un sistema.

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Para decir que algo es un sistema, debemos poder definir claramente: 1I. El comportamiento hoístico al que se enfoca, 2I. Las
partes del objeto y las interacciones entre las partes, que producen de hecho el comportamiento holístico que hemos definido y 3I.
El modo en que la interacción entre las partes produce el comportamiento holístico que hemos definido.
Si estamos en grado de realizar esas tres operaciones, disponemos de un esquema abstracto de trabajo del comportamiento
holístico en un objeto. En este caso, podemos llamar correctamente sistema al objeto. Si no somos capaces de realizarlas, no
tenemos sistema y no tiene sentido llamar al objeto sistema. La idea de un sistema es sinónima de la idea de un esquema abstracto
de cualquier comportamiento holístico específico. Podemos hablar del sistema económico de un país porque estamos en grado de
elaborar un sistema de ecuaciones que reproducen los fenómenos como crisis o inflaciones. Si no pudiéramos hacerlo no tendría
sentido hablar de sistemas económicos.

No debemos entonces utilizar la palabra sistema para nombrar un objeto. Un sistema es una abstracción. No es un tipo especial de
objeto sino un modo especial de considerar este objeto. Es un modo de llamar la atención sobre cualquier comportamiento holístico
particular, de un objeto determinado, que solo puede ser entendido como producto de una interacción entre partes. Todo lo que
existe en la tierra debe ser considerado como un sistema: un hombre fumando un cigarrillo, una hoja arrastrada por el viento;
asimismo un ladrillo y la humanidad entera. Pero solo pasan a ser sistemas si podemos distinguir en ellos cualquier propiedad
holística especial que no podemos explicar sino en término de interacciones de partes dentro de un todo. Sin una definición
específica de qué comportamiento holístico tratamos, de qué interacciones entre qué partes producen este comportamiento, y cómo
lo hacen, decir que algo es un sistema no es mas que decir: “se trata de algo complicado que no comprendo muy bien”.

Siempre es oportuno recordar que un sistema es una abstracción. Pensemos en una flor como un sistema. Si deseamos
comprender el hecho de que una flor brota, crece y florece tenemos que observar la flor como un sistema. En este caso es la
interacción entre las partes, la que crea el comportamiento del conjunto. Pero la flor tiene otras propiedades que no se tienen en
cuenta al considerarlas como un sistema: si la ofrecemos como regalo, aunque la situación sea muy compleja, la flor no necesita
ser entendida como resultado de interacciones entre sus partes. La idea de un sistema no ayuda mas que a entender tipos de
comportamiento que resultan de interacciones de partes.
Además, aunque llamemos sistema a un objeto al considerarlo como un todo, no significa que lo veamos realmente en su totalidad.
Cuando consideramos una línea aérea desde el punto de vista de los sistemas, podemos centrara nuestra atención sobre sus
horarios por ejemplo. Comprobamos entonces que, como la línea cuenta con un número reducido de aviones, el horario de vuelo
desde Nueva York hasta Chicago, depende del horario de otro vuelo desde Mineápolis hasta Salt Lake City. De este modo, estamos
considerando la línea aérea “como un todo” porque estamos considerando las interacciones entre sus partes aunque no nos
interese en absoluto el último botón que lleva en la camisa el último de los mecánicos. La noción de “todo” se refiere solo al alcance
de la visión no a los detalles: sigue siendo abstracta.

Con frecuencia, se confunde gravemente esta noción en el lenguaje cotidiano. Cuando hablamos del sistema solar, o de un sistema
de alta fidelidad, o de un sistema de líneas aéreas, se utilizan las palabras de tal modo que inducen a creer que sistema es
sinónimo de objeto. Pero el vocablo se utiliza a veces de modo correcto, incluso en el lenguaje común. Por ejemplo, cuando nos
referimos al sistema de Ptolomeo como a un sistema opuesto al de Copérnico, en ambos casos la palabra “sistema” es empleada
correctamente: se refiere a un modo abstracto de observar la interacción entre tierra, planetas, sol y estrellas - no a los objetos en
sí.

La disciplina de la abstracción presenta una dificultad. A veces nos enfrentamos como fenómenos que son claramente productos de
interacciones, (en el movimiento de una bandada de gaviotas por ejemplo) pero las interacciones son tan complejas, que no
podemos verlas con claridad y no conseguimos hacer con éxito este esfuerzo de abstracción. En esos casos, mantenerse con
demasiada rigidez en la idea de que un sistema es un modelo abstracto puede fácilmente conducirnos a imaginar un sistema
demasiado simple e inconsistente que perjudica el auténtico valor intrínseco.
Por lo tanto, debemos aprender una segunda lección. La primera dice: no llamemos nada un sistema hasta que podamos identificar
el sistema abstracto del que estamos hablando. La segunda continúa:; aprendamos la primera lección, pero no nos dejemos
embobar por abstracciones demasiado fáciles.

Cuando nos encontramos frente a algo complejo, empezamos muchas veces con la única impresión o “sensación” de que funciona
como un sistema. Llevados de esta impresión, procuramos extraer con cuidado precisamente aquel comportamiento holístico que
parece esencial, así como aquellas interacciones que producen el comportamiento. Este es un proceso activo. Empieza por una
impresión, una sensación. Solo mas tarde se convierte en razonamiento. Se empieza por un aspecto de la vida tan intrincado que
se tiene la impresión de que debe tratarse de un sistema aunque no se esté en grado de definirlo. Solo después, una vez que se ha
podido sentir claramente, se procura fijar el sistema, definiendo el comportamiento holístico que está en discusión

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3. un sistema generador no es la visión de una cosa única. Es un conjunto de partes con normas que regulan el modo en
que esas partes pueden combinarse.

Encontramos aquí otra utilización de la palabra sistema. En el lenguaje corriente se usa con frecuencia la palabra sistema para
definir “la manera de hacer algo”: estos son los sistemas de apuestas, el sistema de Montessori, y el sistema democrático, por
ejemplo.
Cada uno de esos sistemas es, en realidad, un sistema de normas. Un sistema de apuestas nos india como debemos apostar, el
sistema Montessori establece las normas que los niños y los maestros han de seguir en las escuelas, el sistema democrático de un
gobierno establece ciertas reglas sobre la naturaleza de la representación , la elección de los representantes y el modo de llevar a
cabo las elecciones. En todos esos casos, se crean normas para generar cosas.

Podemos generalizar la noción de sistema generativo. Este sistema consistirá generalmente en un conjunto de partes (o elementos)
mas unas reglas con las que se combinarán para formas “cosas” admisibles. En este sentido, los sistemas formales de matemáticas
son sistemas. Las partes son los números, variables, y los signos como (=) y (+). Las reglas determinan los modos de combinar
esas partes para formar expresiones, a partir de otras expresiones, modos de formar verdaderas proposiciones a partir de
expresiones y modos de formar verdaderas proposiciones a partir de otras verdaderas proposiciones. La combinación de partes,
que se generan con este sistema, son las verdaderas proposiciones “o teoremas” de las matemáticas. Cualquier combinación de
partes que no se forme según las reglas, no tiene sentido o es falsa.
En este sentido, un sistema generador puede comprender un conjunto de partes y de reglas muy simples. Asi, el sistema de
triángulos, que pueden combinarse para formar un cuadrado, es un sistema generador. Sus reglas generan todos los modos de
combinar esos triángulos para formar un cuadrado. Es típico de un sistema el que sus reglas excluyan muchas de las
combinaciones de las partes. Por esto, aunque esos triángulos pueden combinarse de infinitas maneras, la mayor parte de esas
maneras se excluyen precisamente porque el perímetro exterior no es un cuadrado, y esto cabe fuera de la previsión.
El sistema del lenguaje es otro ejemplo de sistema generador. El lenguaje tiene leyes a distintos niveles. A un nivel las letras son las
partes, y hay leyes que regulan el modo en que esas letras se combinan para formar palabras. En inglés por ejemplo, no hay
palabras que empiecen con “rx”. Las leyes de fonología lo prohíben. A otro nivel las palabras son en sí mismas partes y hay leyes
que regulan los tipos de proposiciones que pueden formarse a partir de palabras.

4. casi cada “sistema como un todo” se genera por un sistema generador. Si queremos hacer cosas que funcionen como
“todos” tendremos que inventar sistemas generadores que las creen.

Hay una relación entre los dos conceptos de sistema que hemos definido. Casi todo objeto cuyo comportamiento depende de un
“sistema como un todo”, interior al objeto, es creado el mismo por un sistema generador.
Tomemos como ejemplo un caso simple: un sistema de alta fidelidad. La pureza de su funcionamiento solo puede ser entendida
como producto del efecto combinado de todos los demás componentes distintos que trabajan conjuntamente. El mismo sistema de
alta fidelidad también se genera por un sistema generador: el conjunto de todas las partes existentes en el mercado, las leyes que
regulan las conexiones eléctricas, y la impedancia que establecen las corrientes entre esas partes.
El caso de los animales es mas complicado. Una gaviota que toma tierra debe ser considerada como un sistema: también debe
serlo casi todo lo que hacen las gaviotas además de tomar tierra. Esa gaviota es, a la vez, el producto de un sistema generador: el
sistema genético. Un animal es algo que debe ser considerado holísticamente y, a la vez, generado por un sistema generador.

La relación entre sistemas holísticos y sistemas generadores es fácil de entender. Si un objeto posee alguna propiedad holística,
producto de una interacción entre partes, es evidente que esas partes determinadas y esas interacciones determinadas solo
pasarán a existir si las partes mantienen relaciones muy estrechas entre sí. Por lo tanto, el objeto debe generarse mediante algún
proceso que combine partes según ciertas coacciones, elegidas para aseguarar la interacción correcta de esas partes, cuando
funciona el sistema. Eso es exactamente un sistema generador.

El sistema generador no necesita ser conciente, ni tampoco siempre explícito. A veces, los procesos que crean los sistemas
generadores se integran con el objeto que se ha formado. Así, la llama de la vela se genera por procesos químicos que son los
mismos que mantienen después el equilibrio del sistema y producen la interacción de las partes, cuando consideramos la llama
como una sistema holístico.
Es cierto que casi cada “sistema como un todo” se genera por un sistema generador. Este axioma encierra una lección para los
diseñadores. El hombre como diseñador está relacionado con el diseño y la construcción de objetos que funcionan como todos. La
mayor parte del as propiedades que necesita, por ejemplo, una ciudad para mantenerse viva son propiedades holísticas.

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Nuestro axioma significa lo siguiente: para asegurar las propiedades de sistema holístico de los edificios y de las ciudades debemos
inventar sistemas generadores cuyas partes y leyes crearán las propiedades de sistema holístico necesarias para su propio ajuste.

La mayor parte de los diseñadores se consideran como diseñadores de objetos, pero si seguimos el argumento que acabamos de
desarrollar, llegamos a una conclusión muy distinta. Para crear objetos con propiedades complejas, debemos inventar sistemas
generadores que generarán objetos, con la propiedades holísticas necesarias. El diseñador pasa a ser un diseñador de sistemas
generadores -cada uno de ellos capaz de generar muchos objetos- y no un diseñador de objetos individuales

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variaciones sobre un
michael sorkin
parque temático
[introducción]

Con la presciencia precisa de un auténtico "maestro del universo", Walter Wrinston ha declarado recientemente que "los números
de teléfono que empiezan con 800 y la tarjeta de plástico han convertido el tiempo y el espacio en algo obsoleto". Wrinston lo debe
saber bien. En tanto que antiguo cargo de Citicorp (sugerente nombre), es un auténtico Barón Haussmann de la era eléctrónica,
surcando los boulevares del capital por entre la rugosa matriz de la economía global.

Esta comparación no debería ser desdeñada: la advertencia de Wrinston plantea cuestiones fundamentales acerca de la vida
urbana. Los ordenadores, las tarjetas de crédito, los teléfonos, los fax, además de otras herramientas complementarias
instantáneas y artificiales, están destripando rápidamente las políticas de la proximidad, que son el auténtico cimiento de la ciudad.
Efectivamente, en los últimos años hemos asistido a la emergencia de un tipo de ciudad completamente nueva, una ciudad sin un
lugar asociado a ella.

Esta ciudad ageográfica está en una fase especialmente avanzada en Estados Unidos. Podemos verla en los grupos de rascacielos
que se elevan desde los campos vallados próximos a las utopistas interestatales; en los enormes centros comerciales, instalados
por las cadenas nacionales de grandes almacenes, y rodeados de enjambres de automóviles; en los hoteles con grandes
vestíbulos herméticamente sellados y clonados de costa a costa; en las uniformes e "históricas" aglomeraciones de gente
acomodada, y en los festival markets (centros comerciales y de ocio), en las disgregadas e interminables extensiones de nuevos
suburbios, sin centro urbano; y en la maraña de antenas formada por cien millones de tejados, desde Secaucus hasta Simi Valley,
en las nubes de antenas parabólicas orientadas hacia un mismo punto geosincrónico, todas ellas mamando a Arsenio y al A-Team
procedentes del espacio.

En realidad, la infraestructura de esta ciudad es como la de la televisión. El acontecimiento televisivo más importante es el corte, la
elisión entre bits de emisión, el paso sin interrupción de una telenovela a un docudrama, o a unas palabras de nuestro patrocinador.
En la televisión, el "diseño" consiste simplemente en borrar las diferencias que existen entre estos bits, en designar el mismo valos
a todos los elementos de la red, con el fin de que cualquiera de las infinitas combinaciones producidas por la transmisión diaria
pueda tener un "sentido". La nueva ciudad resultante elimina las peculiaridades genuinas a favor de un campo urbano continuo,
una red conceptual de alcance infinito. Es un proceso de eliminación que resulta muy visible. En los años cincuenta y sesenta, se
disparó la alarma sobre la "dispersión urbana" y la "megalópolis", es decir, la expansión de una zona de urbanización ininterrumpida
por toda costa noreste americana: una ciudad convertida en región. Más recientemente, la atención se ha centrado en la explosión
de las llamadas "ciudades suburbanas" en las periferias de las metrópolis existentes. En este territorio, vasto y virtualmente
indiferenciado -que se extiende desde los condados de Fairfax y Virginia hasta los de Orange y California-, las viviendas, las
oficinas, las fábricas y los centros comerciales flotan en un medio culturizador, en un "reino de no-lugares urbanos" que ofrece las
funciones desnudas de la ciudad, al tiempo que renuncia a la mezcla formal, social y vital, aunque no suficientemente disciplinada,
que hace que una ciudad esté viva.

Ahora bien, la ciudad que se describe en este libro no es sólo un fenómeno de extensión. Su crecimiento ya no es meramente físico
-es decir, un problema de densidad exagerada, o próxima a la metástasis- . La nueva ciudad ocupa también un vasto espacio
conceptual impensable hasta ahora. Esta Cyburbia invisible, tan bien evocada por Wriston, va tomando forma como algo necesario,
que brota como súbitos champiñones en la trama promiscua del capital. Lo que en esta ciudad se hecha de menos no son
determinados edificios ni lugares en especial; sino los espacios intermedios, las conexiones que dan sentido a las formas.

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La historia de las ciudades siempre se ha basado en los modos como se yuxtaponen sus elementos y e las estructuras artísticas y
normativas que gobiernan las amalgamas urbanas. Ambos problemas plantean qué cosas deben ir juntas y qué productos deben ir
juntos, es decir los fundamentos de la morfología urbana. Las ciudades tradicionales los han resuelto estableciendo vínculos con
unos lugares centrales. En el ágora, en el castillo, en la plaza o en el centro urbano, la idea de una ciudad hecha a base de centros
representa, como mínimo, la idea de una ciudad espacial, cuyo orden está en función de la proximidad. A lo largo de la historia, esta
ciudad física ha cartografiado las relaciones sociales con enorme claridad, incorporando a sus formas y a sus lugares una vasta
información acerca de su estatus y su orden. Sean los "barrios bajos" de una pequeña ciudad, los campos comunales de Nueva
Inglaterra o el barómetro de los valores inmobiliarios visible en la silueta de Manhattan, el orden social siempre se ha podido
interpretar a través de la forma urbana. En cambio, en la nueva ciudad de las mezclas, la legibilidad de dicho orden ha sido
dramáticamente manipulada, y ha menudo completamente oscurecida. Aquí todo parece ir con todo. Las jerarquías tanto se
refuerzan como disimulan, como se fijan y se desubican. El valor sigue estando en función del lugar, pero la mano invisible ha
aprendido una nueva geometría. Al mismo tiempo que el teléfono y el módem han convertido la calle en algo irrelevante, destacan
otras dimensiones. La "calle Mayor" es ahora el espacio entre aeropuertos. Los cables de fibra óptica que unen las terminales de
fax de las distintas oficinas de las multinacionales son una invisible madeja mundial de relaciones económicas. Liberada de sus
centros y de sus límites por los adelantos de las comunicaciones y de la movilidad, así como por un nuevo orden mundial hecho a
medida de un único modelo de ciudadanía consumidora, la nueva ciudad amenaza con ser de una uniformidad inimaginable,
aunque multiplique las opciones ilusorias que ofrece la televisión.

Esta ciudad tiene tres características especialmente relevantes. La primera es la pérdida de todas las relaciones estables con la
geografía local, física y cultural, es decir, se reduce todo vínculo con el espacio específico. El capital globalizado, los medios
electrónicos de producción y la cultura de masas uniforme detestan la diferenciación intima e indisciplinada propia de las ciudades
tradicionales. La nueva ciudad sustituye las anomalías y encantos de estos lugares por una especificidad universal, un urbanismo
genérico que se modula tan sólo por medio de la superposición ornamental. Lo local puede ser reconocido eficazmente por la
prescencia del croque-monsieur en el Mc Donald´s del Boul´Miche o del Cajun Martini en la sala de espera del aeropuerto de Nueva
Orléans (donde te invitan a que te lleves el vaso). Estos "lugares" son completamente ageográficos: pueden ser insertados tanto en
el territorio abierto como en el corazón de la ciudad. Los hoteles de grandes vestíbulos encerrados en sí mismos son tan idóneos
para plantar en ellos un césped monótono como lo es cultivas los centros urbanos abandonados. Cuando sus componentes han
quedado reducidos a unas unidades mínimas que se repiten, el espacio queda desprovisto de sus peculiaridades. Obsesionada por
los puntos de producción y de venta, la nueva ciudad es poco más que un enjambre de bits urbanos que echa por la borda la visión
física de la totalidad, sacrificando la idea de la ciudad como el lugar para la comunidad y las relaciones humanas.

La segunda característica de la nueva ciudad es sus obsesión por la "seguridad", con un creciente grado de manipulación y
vigilancia sobre sus ciudadanos, y la proliferación de nuevas formas de segregación. Los métodos que se emplean son tanto
tecnológicos como físicos. Los primeros utilizan tecnologías policiales invasivas -versiones domesticadas del "campo de batalla
electrónico"-, así como un número cada vez mayor de conexiones diarias con la red informática, que va de los encuentros con el
cajero automático al entorno ampliamente regulado del lugar de trabajo electrónico. Los medios físicos también son múltiples:
suburbios paralelos de clase media que crecen en las periferias de los viejos centros que ahora abandonan y dejan para los pobres;
enclaves comunitarios para los ricos; procesos de aburguesamiento; envolventes de ámbito mundial que cobijan al viajero (o la
viajera) de negocios cuando se encuentran en el mismo aeropuerto, en el mismo hotel o en el mismo edificio de oficinas, desde
Denver hasta Dubai; una filigrana de sistemas de circulación, tanto elevados como subterráneos, impuestos en Minneápolis o en
Edmonton, con el fin de permitir que los compradores y los oficinistas puedan circular a través del amenazador territorio urbano con
una seguridad climática regulada. Esta tendencia hacia una nueva forma de segregación urbana parece ubicua: en toda América, la
planificación urbana ha renunciado a su papel histórico como integradora de comunidades, y propicia un desarrollo selectivo que
enfatiza las diferencias.

Finalmente, este nuevo reino es una ciudad de simulaciones, una ciudad-televisión: la ciudad como parque temático. Donde mejor
se puede verificar este aspecto es en su arquitectura; en esos edificios que basan su autoridad en unas imágenes sacadas de la
historia, de un pasado falsamente recuperado que sustituye a un presente exigente y vigilado. En la mayoría de las ciudades
americanas, lo "histórico" se ha convertido en el único valor oficial y en fuente de complicidades. Como resultado, el interés por la
conservación de los restos físicos de la ciudad histórica ha sustituido al interés por las ecologías humanas que la producen y la
habitan. En la actualidad, el diseño urbano consiste casi exclusivamente en la..... producción, con la consiguiente creación de
disfraces urbanos. Tanto en la mejor encarnación, la sucedánea calle Mayor de Disneylandia, como en la falsa festividad histórica
de un mercado de la Rouse Company, o en la arquitectura aburguesada de la resucitada Lower East Side, este sofisticado
dispositivo apenas puede mantener algún vínculo con un tipo de vida urbana que está en proceso de extinción.

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En esto consiste la renovación urbana, con sus siniestras tergiversaciones: la arquitectura de la decepción que, con su alegre
familiaridad, se queja constantemente de la realidad más fundamental. La arquitectura de esta ciudad es casi pura semiótica,
puesto que juega con el tráfico de significados: son edificios para un parque temático. Tanto si representa una historicidad genérica
como si representa una modernidad también genérica, el diseño de esta arquitectura se basa en el mismo cálculo que utiliza la
publicidad: la idea de la imaginería pura, que prescinde de las necesidades reales y de las tradiciones de quienes la habitan.
Bienvenidos a Cyburbia.

Este libro no pretende teorizar sobre esta nueva ciudad, sino describirla. Los lugares que aquí se estudian tienen un carácter
representativo. No sólo tipifican la evolución del urbanismo norteamericano, sino que pueden constituir modelos válidos para el
desarrollo urbano en todo el mundo. Así pues, el marco de referencia es limitado: el libro no trata de Soweto, del South Bronx o de
Dhaka, ni tampoco directamente de Urbino, de París o de Savannah, esos agradables centros de la urbanidad tradicional. Y sin
embargo, sí tiene que ver con ellos. El peligro de la nueva ciudad está en su antítesis: como reza la famosa frase de Victor Hugo,
"esto va a destruir lo otro". Sencillamente, la nueva ciudad tiene capacidad no sólo para superar los escenarios tradicionales de la
urbanidad, sino también para apropiarse de ellos, para relegarlos al papel de meras intersecciones de una red global, donde el
tiempo y el espacio han quedado efectivamente obsoletos.

Un refrán medieval dice: "El aire de la ciudad hace libre a la gente". Los preventivos ensayos recogidos en este volumen describen
un viento malsano que está soplando en nuestras ciudades, una atmósfera que tiene el potencial suficiente para alterar
irreparablemente el carácter de las ciudades en tanto que espacios primordiales de la democracia y del ocio. Los espacios más
familiares de las ciudades tradicionales, es decir, las calles y las plazas, los patios y los parques, son los grandes escenarios del
civismo, de lo visible y de lo accesible: son los agentes de nuestra cohesión. Al describir la ciudad que se presenta como alternativa,
este libro reclama un retorno a una urbanidad más auténtica, a una ciudad basada en la proximidad física y en la libertad de
movimientos, si realmente pensamos que la ciudad es la mejor expresión de nuestro deseo de una vida en colectividad. A medida
que disminuye el espacio va disminuyendo también el grado de intimidad. La ciudad privatizada de los bits es una mentira que
simula sus conexiones, que elimina la capacidad de los ciudadanos para actuar, tanto solos como conjuntamente.

Este es el significado del parque temático: un lugar que lo incorpora todo, la ageografía, la vigilancia y el control, las simulaciones
sin fin. Con sus formas artificiosamente embusteras, el parque temático ofrece una visión alegre y civilizada del placer que suplanta
al reino de la democracia pública, y lo hace de un modo atractivo, con el aguijón de su descarnada y turbulenta urbanidad, de los
pobres, del crimen, de la suciedad, del trabajo. En los espacios "públicos" de los parques temáticos o de los centros comerciales el
propio discurso queda restringido: en Disneylandia no hay manifestaciones. El esfuerzo por recuperar la ciudad es la lucha de la
democracia misma.

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estudio de la gentrificación
maria alba sargatal bataller
[revista bibliográfica de geografía y ciencias sociales - universidad de barcelona - nº 228, 3 de mayo de 2000]

Con este trabajo se pretende ofrecer una visión general del fenómeno urbano conocido como gentrificación, así como presentar las
líneas generales que han seguido los estudios sobre el tema desde su origen hasta la actualidad, con el fin de obtener un marco
teórico de estudio para su posterior aplicación en la ciudad de Barcelona.

Aparición y evolución del concepto


El fenómeno fundamentalmente urbano conocido como gentrificación consiste en una serie de mejoras físicas o materiales y
cambios inmateriales -económicos, sociales y culturales- que tienen lugar en algunos centros urbanos viejos, los cuales
experimentan una apreciable elevación de su estatus.
Este proceso se ha venido desarrollando en los países industrializados básicamente a lo largo de la etapa llamada post-industrial o
postmoderna, iniciada con el declive del modelo socioeconómico industrial tradicional, a partir de los años 1970. Se caracteriza
normalmente por la ocupación de los centros de las ciudades por una parte de la clase media, de elevados ingresos, que desplazan
a los habitantes de clase baja, de menores ingresos, que vivían en el centro urbano.
El desplazamiento va acompañado de inversiones y mejoras tanto en las viviendas, que son renovadas o rehabilitadas, como en
toda el área afectada: comercios, equipamientos y servicios. Esto implica, pues, cambios en el mercado del suelo y de la vivienda,
de modo que desempeñan un papel decisivo los agentes del suelo: los propietarios, los promotores, los gobiernos -locales,
estatales-, las entidades financieras, así como también los ocupantes -en régimen de propiedad o de alquiler-,. En conjunto, el
fenómeno suele conllevar una mayor estima de las áreas renovadas e incluso una recuperación del valor simbólico de los centros
urbanos. De hecho, tal como ha señalado J. Van Weesep (1994) actualmente se considera la gentrificación como la expresión
espacial de un cambio social profundo.
La primera referencia al término gentrification se atribuye a R. Glass (1964), que en su estudio sobre Londres en 1964 utilizó esta
expresión comparando el proceso con un viejo hábito propio de la gentry, la clase media-alta inglesa, de las áreas rurales: solían
mantener una vivienda en la ciudad además de su residencia en el campo, hecho parecido al que se observaba en Londres en los
años 60. Las primeras descripciones que utilizaron el término de gentrification destacaban fundamentalmente la revalorización que
experimentaban ciertos barrios (Van Weesep, 1994).
En el presente artículo se ha utilizado la adaptación al español del término inglés gentrification, acuñado en Londres y usado en la
mayoría de estudios sobre el tema, frente a otros términos como brownstoning -empleado en Nueva York-, whitepainting -propio de
Toronto- (Pacione, 1990) o aristocratización, vocablo utilizado por J.E. Hardoy (1992) entre otros.
Actualmente el estudio del tema constituye un importante foco de debate para la investigación en geografía, ya que se trata de un
proceso fundamental en la reestructuración metropolitana contemporánea. Mientras que la suburbanización y el declive
socioeconómico de los centros urbanos fueron temas básicos a estudiar en los años 1950 y 1960, desde los 1970 en adelante se
redujo e incluso cambió la tendencia a la pérdida de población de clase media en los centros de las ciudades. En este sentido, la
gentrificación supone un reto a las teorías tradicionales sobre localización residencial y estructura social urbana: Burgess y Hoyt
sostenían que las clases más pudientes emigran del centro hacia la periferia, y que raramente volvían a las áreas centrales
previamente abandonadas. Del mismo modo Alonso afirmaba en su teoría sobre el mercado del suelo urbano que la preferencia por
la disponibilidad de espacio y las bajas densidades son elementos mucho más valorados que la accesibilidad al centro urbano. En
definitiva, la aparición y desarrollo del proceso pone en tela de juicio los modelos sobre el cambio urbano residencial basados en
etapas sucesivas, que consideran la suburbanización llevada a cabo por las clases medias como la fase final de la progresión
desde la ciudad pre-industrial a la industrial (Hamnett, 1991).

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Además de la manifestación urbana del fenómeno, más recientemente se ha identificado un proceso similar en áreas rurales; a
medida que las actividades tradicionales del campo pierden intensidad, algunas zonas se van convirtiendo en sede de nuevas
actividades económicas, básicamente destinadas al ocio, y en sede de segundas residencias. Spain (1993) afirma que los
problemas de la gentrificación rural son similares a los de la gentrificación urbana, en el sentido de que los nuevos habitantes tienen
mayores facilidades de acceso a los servicios que los antiguos; M. Philips (1993) también propone un estudio comparativo entre el
proceso en el mundo rural y en el urbano, en su trabajo sobre Gower (Reino Unido); Friedberger (1996) analizó el fenómeno en
Texas. Sin embargo, hasta este momento el número de estudios sobre el tema es muy inferior a los dedicados a la versión urbana
del fenómeno. El presente artículo solamente se ocupará de la gentrificación urbana.
Desde su origen, el estudio de la gentrificación ha sido objeto de debate y discusión, tanto en relación a la delimitación del concepto
como al enfoque metodológico de su análisis. A medida que se ha profundizado en su estudio el concepto se ha ido perfilando, a la
par que se han identificado múltiples manifestaciones del proceso derivadas de las características que adquiere en cada contexto
urbano, según las vicisitudes históricas de los barrios afectados; la gentrificación está profundamente enraizada en la dinámica
social y económica de las ciudades, y está determinada en gran parte por el contexto local: los barrios, los agentes y actores
urbanos, las funciones dominantes de la ciudad y la política gubernamental local.
La mayoría de descripciones y análisis publicados a lo largo de los últimos quince años muestran que se trata de un proceso
altamente diversificado: puede seguir varias trayectorias, puede transformar totalmente o parcialmente un área, está protagonizado
por un amplio listado de agentes y actores, y sus causas y consecuencias son complejas y difíciles de determinar con claridad. Por
todo ello la gentrificación ha sido calificada por muchos autores como un "concepto caótico" (Van Weesep, 1994).
La misma naturaleza del fenómeno ha sido y sigue siendo objeto de controversia. De ella nos ocuparemos en el siguiente apartado.
Sin embargo, hay que mencionar las aportaciones de diversos autores que han contribuido a acotar el concepto y a profundizar en
sus características.
En este sentido es interesante la visión sistematizada, amplia y crítica de M. Pacione (1990), quien establece criterios de
delimitación del concepto: sostiene que para que exista gentrificación ha de existir movilidad espacial de habitantes y ha de afectar
a áreas que no sean de alto estatus en el momento de reinvertir en ellas. El mismo autor expone un ejemplo clásico del proceso,
esquematizado en tres pasos sucesivos en el tiempo: a)un barrio céntrico ocupado por clases medias experimenta pérdida de
residentes a medida que estos van formando familias y sus ingresos van en aumento; b) el barrio va siendo ocupado por población
cada vez de menores ingresos, que viven en alquiler; se experimenta un deterioro físico, ya que los ocupantes no pueden cubrir los
costes de mantenimiento de los edificios; los propietarios no invierten en la mejora de las viviendas de sus inquilinos; hay
sobreocupación y se subdividen las viviendas para ser alquiladas; c) las clases medias vuelven a interesarse por vivir en el centro;
se reinvierte en el barrio, se desplaza a los antiguos ocupantes y se experimenta revitalización socioeconómica.
También el citado Van Weesep (1994), que ha estudiado el fenómeno en los Países Bajos, destaca como elemento característico
del proceso, al igual que M. Pacione, el desplazamiento de los grupos populares; afirma que se trata del efecto más notorio de la
gentrificación.
En este sentido, cabe mencionar el caso de la renovación urbana de París, en los años 70; la ejecución del gran programa de
renovación afectó distintas áreas degradadas de la ciudad. M. Castells analizó el proceso (Castells, 1974) y manifestó que las
dimensiones de la renovación eran mayores cuanto mayor era la proporción de clases sociales inferiores que albergaba el área en
cuestión, en cambio no existía una relación tan directa entre el grado de deterioro físico de las viviendas y la importancia de la
operación rehabilitadora. Las áreas más afectadas fueron, pues, las que albergaban trabajadores inmigrados y distintas
comunidades étnicas. En ciertas zonas que presentaban posibilidades para la construcción de viviendas de alto nivel, próximas a
los barrios de negocios en expansión, se crearon las condiciones básicas para una operación de lo que M. Castells califica de
"reconquista urbana", con el fin de obtener un cambio físico, social, funcional y simbólico de la ocupación del suelo. Ante la
amenaza de expulsión, ante el miedo a la privación del derecho a la vivienda o al alojamiento en viviendas provisionales, se
organizó un proceso de lucha contra el programa de renovación. Las movilizaciones revistieron distintas formas, desde reacciones
más o menos espontáneas por parte de los mismos afectados hasta manifestaciones organizadas, de carácter reivindicativo y
político. El resultado de aquellas movilizaciones, sin embargo, no constituyó un éxito, fundamentalmente a causa de la poca solidez
organizativa.
El desplazamiento puede tener lugar bajo distintas formas: a través de la rehabilitación de las viviendas ocupadas por grupos
populares, reclasificadas como residencias de alto nivel; el abandono involuntario del barrio por parte de habitantes con ingresos
limitados (familias numerosas, ancianos, etc.), que no pueden pagar los crecientes impuestos sobre la propiedad, fruto de la política
gubernamental local; la imposibilidad por parte de jóvenes emancipados, originarios del barrio, de pagar una vivienda en este; la
emigración de residentes por la desaparición de instituciones sociales, económicas, religiosas e incluso por la pérdida de amistades
en el barrio.
Este aspecto constituye actualmente uno de los grandes temas de debate en relación con la gentrificación, y es valorado de distinto
modo por los autores: Van Weesep, por ejemplo, afirma que algunos barrios funcionan durante mucho tiempo como áreas mixtas,

09
donde convive gente de distinto nivel socioeconómico; en cambio otros se transforman rápida y completamente, de modo que
cambia del todo la estructura socioeconómica del área. Ante la cuestión de si son preferibles los barrios homogéneos o
heterogéneos socioculturalmente, opina que a pesar de los beneficios que puedan obtener los grupos populares al convivir con
grupos de mayor estatus, como compartir los mismos servicios y equipamientos o tener la posibilidad de trabajar en servicios
destinados al consumo de la población de mayores ingresos, es más beneficioso el desplazamiento a los suburbios por parte de las
clases populares que permanecer en el centro. Así se evitan posibles conflictos sociales derivados del contraste socioeconómico en
una misma área; además, en los suburbios existen mayores oportunidades de encontrar vivienda, ya que el espacio es mayor. Tales
argumentos poseen un matiz segregacionista y no propician la integración ni la diversidad en un mismo espacio urbano.
Esta visión, por el contrario, no es compartida por otros autores. Así, M. Pacione señala que paradójicamente, la economía de
mercado que ha castigado a los desfavorecidos a través de la desinversión, confinándolos en los centros más o menos degradados
de las ciudades industriales por su escaso poder adquisitivo, está castigando al mismo grupo en las ciudades post-industriales a
través de la sobreinversión en los centros urbanos. Efectivamente, el proceso de gentrificación limita las posibilidades de encontrar
vivienda para las clases inferiores en tales áreas y favorece su desplazamiento, sea voluntario o forzoso.
Otras consecuencias del proceso, además del desplazamiento, se perciben en el mercado de la vivienda: aumenta
significativamente el precio de la propiedad renovada y no renovada en la zona, se reducen las tasas de ocupación de la vivienda
(el número de habitantes por vivienda) y la densidad de población del barrio o área afectada, se transforma progresivamente la
modalidad de ocupación en alquiler por la de ocupación en propiedad, poseída por grupos de rentas más altas que van cambiando
la estructura económica y física de tales áreas..
En cuanto al papel de los agentes del suelo, además de destacar el enorme peso del sector privado - entidades financieras,
promotores de la propiedad-, la mayoría de autores y estudios otorgan un papel importante e incluso a veces decisivo al sector
público, es decir, los gobiernos estatales, regionales o locales, que facilitan o promueven directamente la gentrificación, con el fin de
renovar los centros de las ciudades.
Se ha hablado del distinto grado de intervención del Estado a un lado y otro del Atlántico: en Europa interviene más que en
Norteamérica, donde el mercado libre marca más las pautas. Se toman como referencia estas dos grandes áreas geográficas por el
hecho de que en ellas se dan la mayoría de casos de gentrificación. Esta diferencia se debe al mayor intervencionismo del Estado
en la tradición política europea. Esta diferencia de intensidad de la intervención estatal no determina, sin embargo, diferentes tipos
de gentrificación, ya que puede haber más diferencias entre ciudades europeas que entre éstas y las norteamericanas (Van
Weesep, 1994; Carpenter y Lees, 1995).
En el caso de Barcelona, en España, el gobierno municipal constituye el principal impulsor del fenómeno en el barrio del Raval
antiguo arrabal de la ciudad-, básicamente a través del reclamo cultural. En 1989 se puso en marcha el Proyecto Ciutat Vella, en el
marco de la gran transformación urbana que tuvo lugar en la ciudad de Barcelona con motivo de la celebración de los Juegos
Olímpicos de 1992. El proyecto pretendía ser integral: no sólo se basaba en actuaciones urbanísticas, sino que también abordaba
con profundidad los aspectos sociales y económicos. Se insistió en el hecho de que el barrio del Raval, con una elevada densidad
de población y una enorme degradación del espacio físico, no tenía que constituir un simple reclamo cultural de carácter museístico,
sin vida propia; en lugar de ello había de mantener su función residencial aunque mejorando las condiciones de vida y de vivienda-,
compatibilizando esta función con la terciarización, y también había que mantenerlo conectado a la ciudad. Una de las líneas de
actuación fue el llamado eje cultural, vertebrado a partir de la nueva ubicación de diversas instituciones y organismos culturales y de
la potenciación de las ya existentes: universidades, centros culturales, museos, el Liceu, etc. Dos de los centros proyectados, sobre
los cuales se depositaron grandes esperanzas como focos de dinamización del barrio del Raval, fueron el Centre de Cultura
Contemporània de Barcelona y el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona MACBA. De ambas instalaciones se esperaba no
sólo dinamización cultural sino también atracción de inversiones en su entorno, particularmente en el mercado de la vivienda
(Ajuntament de Barcelona, 1989 y 1991). Observando los cambios urbanísticos experimentados por el área en cuestión durante los
últimos años, el objetivo parece que se está cumpliendo, al menos en parte. Pero queda por debatir si esa opción fue la más
adecuada o si hubiera sido mejor dedicar la inversión a crear equipamientos para los vecinos del barrio.
Los mecanismos de intervención estatal son diversos: promoción de los barrios o zonas susceptibles de experimentar gentrificación
-por ejemplo calificándolos como "históricos"-, oferta de beneficios fiscales para la rehabilitación, inversión de fondos públicos en la
mejora de los servicios públicos en las áreas seleccionadas, intervenciones dirigidas a los propietarios para rehabilitar o vender su
propiedad, rezonificación y recalificación del suelo, etc.
Estudios recientes muestran que en muchos países la gentrificación refleja cómo el papel del gobierno se está redefiniendo, en
relación con las tendencias generales de desregularización y privatización de muchas áreas que tradicionalmente han permanecido
bajo la tutela gubernamental. Por lo tanto, este fenómeno muestra las consecuencias espaciales de cambios sociales complejos.

El enfoque conceptual y el debate metodológico


La discusión académica acerca de la naturaleza del fenómeno ha tenido lugar desde las primeras manifestaciones del proceso
hasta nuestros días. En origen fueron dos las posturas defendidas por los pioneros en el estudio del tema, en principio opuestas

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entre sí. Actualmente se intenta abordar el estudio con una visión más amplia, de modo que se han superado los enfoques
reduccionistas iniciales, bastante basados en relaciones de causa-efecto. Las nuevas visiones consideran los fenómenos que
intervienen en la gentrificación como recíprocos e interactuantes. No se intentan discernir tajantemente las causas y los efectos: se
ha pasado de una metodología de estudio centrada en el por qué a otra centrada en el cómo se desarrolla la gentrificación. En el
mismo sentido cabe señalar que los primeros estudios abordaban el tema de modo genérico; a medida que se ha profundizado en
el conocimiento del fenómeno, a través de los trabajos sobre ciudades concretas, se han ido estableciendo las características
comunes y las peculiaridades locales que adquiere la gentrificación en cada área analizada.
Con una óptica prácticamente excluyente, las teorías formuladas por dos autores ?David Ley y Neil Smith- abrieron el debate y
contribuyeron a arrojar luz sobre la cuestión. Su razonamiento ofreció un panorama amplio que invitó a la reflexión y estimuló
posteriores estudios aplicados a casos concretos, con lo cual se mantuvo candente la discusión. A lo largo de los años 1980, las
teorías iniciales de los dos autores mencionados fueron flexibilizándose, incorporando elementos de la postura defendida por su
oponente en el debate, pero sin cambiar el eje central del pensamiento de cada autor. Cabe mencionar que tanto Ley como Smith
han seguido publicando trabajos durante los años 1980 y 1990.
El geógrafo David Ley, profesor de geografía en la universidad de la Columbia Británica (Canadá), presentó en 1978 el documento
"Inner city resurgence units societal context" en la Conferencia Anual de la Asociación de Geógrafos Americanos celebrada en
Nueva Orleans (Ley, 1978). En este trabajo sentó las bases de su teoría, que fue completando posteriormente; en la bibliografía del
presente artículo ofrecemos las referencias de varias de sus publicaciones. El autor formuló sus postulados fundamentalmente a
partir del estudio del proceso en Vancouver, Canadá.
La teoría de David Ley otorga un papel clave a tres factores: la economía, la política y la cultura; tradicionalmente se conoce como
la teoría basada en la demanda, dentro del marco del post-industrialismo. Según este razonamiento, la gentrificación deriva de
procesos recíprocos de reestructuración económica, sociocultural y demográfica. Un elemento clave a considerar es la
transformación de la mano de obra en la sociedad actual, llamada post-industrial: los puestos de trabajo especializados ocupan un
papel cada vez más relevante, en relación a la introducción de tecnologías modernas, del mismo modo que la sociedad ha pasado
de ser básicamente productora de bienes a ser una importante productora de servicios. Así pues, ha emergido una nueva clase
social con una base económica fuerte, identificada con frecuencia con los llamados trabajadores de cuello blanco o activos del
sector cuaternario (ocupados en la banca, las compañías de seguros, etc.). La demanda de viviendas por parte de este colectivo
está limitada espacialmente, ya que se siente atraído por las posibilidades de la vida urbana y por las ventajas derivadas de vivir en
el centro de las ciudades. Asimismo ha aumentado en las últimas décadas la demanda de viviendas reducidas, en relación con
factores socioculturales como la importancia del papel del individualismo y la irrupción de nuevos estilos de vida que hacen que
parte de las clases medias se traslade a los centros urbanos. Ley destaca también que esta sociedad post-industrial se distingue de
la industrial por el papel activo del gobierno, que contribuye a acelerar el proceso aumentando el precio del suelo y alimentando las
expectativas de los propietarios. Además, la política impregna cualquier discusión o decisión, ya que actualmente los intereses de
los diferentes grupos involucrados se debaten en el marco de la política. El autor no pone énfasis en el papel del mercado del suelo
y de la vivienda ni en la oferta y producción de propiedades y áreas susceptibles de gentrificación: la oferta seguirá a la demanda de
gentrificadores potenciales, cuyo poder económico determinará el desplazamiento de ocupantes con menores ingresos. Hamnett
(1991) señala con certeza que este poder puede constituir un factor tan importante como las pautas culturales de consumo de las
nuevas elites en la configuración del paisaje urbano.
Las críticas a este enfoque han consistido básicamente en destacar que no tiene en cuenta el papel de los agentes del suelo -
gobiernos, promotores, entidades financieras- en la gentrificación, ya que el autor considera que su actuación se deriva de la
demanda de viviendas por parte de los potenciales gentrificadores: según él, primero se daría la demanda, luego intervendrían los
agentes del suelo, lo cual, desde luego, no parece adecuarse a las tendencias dominantes en el proceso, dado el papel activo y
directo que desempeñan los agentes en la producción del espacio urbano; su actuación no puede considerarse como secundaria ni
derivada, sino que es directa y decisiva en la mayoría de casos.
El otro gran enfoque conceptual y metodológico es el propuesto por el también geógrafo Neil Smith, profesor y catedrático de
geografía en la Rutgers University de New Brunswick (New Jersey). La publicación en 1979 de "Toward a theory of gentrification: a
back to the city movement by capital, not people" en el Journal of the American Planning Association (Smith, 1979) fue en parte la
respuesta al primer trabajo de David Ley, de 1978. En el marco de una óptica de tipo marxista, Smith formuló su teoría desde el
punto de vista de la oferta de viviendas y espacios que pueden experimentar gentrificación, no de la demanda por parte de
ocupantes potenciales. Defiende que una teoría sobre el proceso en cuestión ha de contemplar tanto la oferta (la producción) como
la demanda (el consumo), pero otorga prioridad a la oferta en su explicación, de modo que los factores económicos son
preponderantes por encima de los culturales. En el apartado de bibliografía damos las referencias de varias publicaciones del autor.
El punto central de la tesis de Smith es el concepto de rent-gap o diferencia potencial del beneficio obtenible mediante un uso más
lucrativo del suelo. Para el autor, en el siglo XIX la mayoría de ciudades presentaba un gradiente clásico de valor del suelo, mayor
en el centro y menor hacia la periferia. En el marco del capitalismo, la suburbanización de la industria y de la población propias del
siglo XX dieron un vuelco a esta gradación, ya que se devaluó el precio del suelo en los viejos centros urbanos en relación con el

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CBD y con los suburbios. Esta diferencia de valor se intensificó durante las décadas de1960, 1970 y 1980, en que la
suburbanización fue importante. Según palabras del propio Smith, en los centros urbanos operó una barrera económica y física que
impidió la nueva inversión en estos espacios: había que mantener los edificios y los mismos usos del suelo para amortizar el capital
invertido en ellos, con lo cual la nueva urbanización se dio preferiblemente en los suburbios; así se desvalorizó el centro de las
ciudades. Fue precisamente la desinversión que afectó a los centros urbanos, que comportó degradación, el hecho que posibilitó la
posterior reinversión en los mismos: cuando el deterioro de un edificio o de toda una área es suficientemente importante, se llega al
punto en que la diferencia entre el beneficio obtenido de la explotación del suelo y el que se podría obtener potencialmente con un
uso óptimo -a través de la inversión- es tan amplia que hace posible la gentrificación. Por lo tanto, la gentrificación se da cuando
esta diferencia o rent-gap es suficiente como para asegurar un beneficio económico. En este momento, los agentes del suelo
aprovechan la ocasión para ofrecer viviendas rehabilitadas para las clases medias en los centros urbanos. Según este punto de
vista, el proceso se inicia a partir de decisiones y actuaciones colectivas a escala de barrio o de sector dentro de un barrio, de la
mano de los agentes urbanos, y no a partir de las preferencias y decisiones a escala individual..
El autor distingue tres tipos básicos de gentrificación: a) promotores de la vivienda que compran una determinada propiedad, la
rehabilitan y la revenden con ánimo de lucro, b) particulares que compran una propiedad y la rehabilitan con el fin de vivir en ella, c)
propietarios que rehabilitan las viviendas que poseen con el fin de ofrecerlas en alquiler.
El enfoque de Smith se inscribe dentro de la llamada teoría del ciclo de vida de los barrios, según la cual éstos experimentan las
fases de crecimiento, declive y revitalización o renovación potenciales. El ciclo de vida es inherente a la historia de los barrios y se
desarrolla en términos económicos de competencia entre grupos sociales, que conduce a la diferenciación de comunidades, cuya
manifestación material es el distinto precio de las viviendas..
Esta teoría constituye un punto de referencia clave incluso en los estudios más recientes, ya sea para defenderla -aunque no al pie
de la letra-, ya sea para rehusarla. Cabe decir también que a lo largo de los años 80 el propio autor ha elaborado una explicación
del fenómeno de modo más global, sin cambiar su propio enfoque, pero con una visión que enmarca la gentrificación en el contexto
actual: Smith afirma que una vez superado el régimen de producción-consumo de masas, que declinó en los años 70 y 80, se pasó
a un régimen de producción-consumo diferenciados. En este marco la clave está en la diversificación de productos y los mercados
cautivos. Entonces la gentrificación se explica por el deseo de los gentrificadores de distinguirse de otros grupos sociales, es decir,
se trata de una distinción cultural. Las pautas de consumo de este grupo y la propia gentrificación constituyen un rasgo propio de la
clase social que la protagoniza, contribuyendo así a diferenciarla de la clase trabajadora y de las clases superiores. Así, según
Smith, la gentrificación supone una rediferenciación del paisaje cultural, social y económico (Hamnett, 1991).
Las críticas que ha recibido se centran fundamentalmente en el hecho de que no constituye una explicación de la gentrificación,
sino más bien una de sus características, ya que no siempre que se da esta diferencia potencial de beneficio o rent-gap gentrificar
es la mejor opción. Además, Smith no explica el proceso por el cual se forma dicha diferencia: puede que nazca precisamente
porque existe demanda de estas áreas por parte de gentrificadores potenciales.
Otras críticas se basan en estudios realizados, que muestran cómo las actuaciones individuales, las de los gentrificadores, no
siempre van precedidas de la actuación de los agentes del suelo, como Smith defiende. Este es el caso de ciertas áreas de
ciudades como Londres (Hamnett, 1991).
Por otro lado, en diversas ocasiones el planteamiento del autor ha sido aceptado como una parte explicativa del proceso, pero ha
sido revisado: S.C. Bourassa (1993) argumenta que la tesis de Smith no explica los cambios de usos del suelo que se experimentan
en el marco de la gentrificación, ni cómo los barrios afectados por desinversión son percibidos en un determinado momento como
zonas adecuadas para vivir. Recientemente, sin embargo, se ha publicado un artículo (Hammel, 1999) donde se defiende el
concepto de Smith enfrente a la visión de Bourassa: la polémica, pues, está a la orden del día.
La controvesia que siempre ha caracterizado la conceptualización y la aproximación metodológica a la gentrificación -se ha llegado
a afirmar que sólo se han analizado partes ,no el todo- se está suavizando en la actualidad con enfoques conceptuales más
consensuados, que concilian visiones en origen prácticamente excluyentes, tal es el caso del ya citado Hamnett (1991). Las
posturas actuales en general consideran el proceso como resultado de una serie de factores interrelacionados, sin otorgar
protagonismo absoluto a ninguno de ellos, a pesar de que los autores se inclinen por determinados puntos de vista y se centren
más en el estudio de factores y elementos que creen fundamentales para entender la gentrificación. Tal como se ha citado
anteriormente, se tienen en cuenta tanto el actual contexto socioeconómico mundial como el propio contexto urbano de cada ciudad
estudiada, para tratar de establecer generalidades y desarrollos particulares. Las principales líneas y procedimientos metodológicos
de investigación se tratan en el siguiente subapartado.

La evolución de los procedimientos de estudio


Las técnicas y procedimientos empleados por los estudiosos se muestran a lo largo del tiempo cada vez más sistematizados y se
les presta más atención en cuanto que de un mayor rigor dependen unas conclusiones más acertadas. Como antes se ha dicho, los
trabajos de los años 1970 pretendían dilucidar el origen del proceso y describir sus tendencias generales. En la actualidad la

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atención se centra en cómo se desarrolla en cada caso particular. De este modo se han ido delimitando cada vez más las áreas de
estudio; ahora no sólo se enmarca la gentrificación dentro de unos determinados barrios en una ciudad, sino que incluso se
investigan manzanas de casas perfectamente delimitadas, con lo que se gana en profundidad en el estudio. Esto no significa, sin
embargo, que no se realicen análisis más generales a escala de barrio, depende del objetivo que se persiga: obtener información en
detalle o descubrir tendencias más generales.
En general puede afirmarse que para encuadrar los estudios se tiene en cuenta el análisis de la historia de la ciudad y del barrio, la
planificación y el desarrollo urbano (Jauhiainen,1991); se considera el origen del barrio, sus particularidades en relación a la ciudad,
las características de los habitantes en las distintas fases históricas, los espacios públicos, los edificios, etc. Así pues, la
gentrificación adquiere su propio desarrollo y sus características particulares en cada área donde se da, a pesar de que como
concepto parece que existe consenso en cuanto a sus rasgos generales; el debate actual se centra más en los procesos a través de
los que se manifiesta y en las variables a tener en cuenta para su investigación.
Algunos autores han intentado modelizar el estudio del fenómeno. Cabe destacar que, partiendo o no de un modelo, las variables
que se analizan y se relacionan son de distinto signo: social, cultural, económico, político, material (como la tipología y
características de los edificios), de manera que unas veces priman más unas sobre otras, según la visión del autor en relación a la
gentrificación o según se constate una mayor primacía de alguna de ellas en cada caso particular. Citaré dos modelos de estudio
que pueden considerarse como pautas más o menos sistemáticas de análisis, más que modelos en sentido estricto:
Por un lado, P. A. Redfern (1997 a , b) afirma que han de combinarse ciertos factores para que se dé gentrificación: en primer lugar,
es necesario que exista segregación social y residencial. En este sentido, se pueden estudiar las propiedades individuales, pero hay
que tener en cuenta que la gentrificación repercute en toda una área o todo un barrio. Es decir, metodológicamente hay que trabajar
tanto a escala de propiedades individuales como a una escala más general para analizar sus efectos. En segundo lugar, hay que
partir del requisito de que las viviendas y las áreas susceptibles de experimentar gentrificación deben haber sido concebidas en sus
inicios para ser ocupadas por las clases medias, las cuales las han abandonado en algún momento y han pasado a manos de
clases populares. Otro aspecto a considerar es que la fuente básica de financiamiento para rehabilitar las viviendas son préstamos
e hipotecas, más que los ahorros. Finalmente, Redfern otorga un papel importante, aunque no determinante, a las llamadas
tecnologías domésticas, como la introducción de agua corriente y evacuación de aguas residuales, gas y electricidad, o los
electrodomésticos: según el autor, en ello está implicado el progreso técnico. La explicación radica en que a partir de los años 1950
el coste de esas tecnologías descendió hasta el punto de que su incorporación a los edificios ya existentes fue rentable, de modo
que la renovación de una vieja propiedad empezó a ser viable y ya no era mejor derribarla y construir otra nueva. Esta observación
derivó del estudio realizado por Redfern en el barrio londinense de Islington, con residencias victorianas en proceso de
gentrificación. Establecidos los factores, el autor relaciona distintas variables para valorar si es viable iniciar un proceso renovador,
teniendo en cuenta el valor de los servicios domésticos a incorporar, los costes de las mejoras, las tasas de interés del momento,
los posibles beneficios a obtener, así como el desplazamiento de los ocupantes de clases populares por nuevos ocupantes de
mayores ingresos; para Redfern, constituyen características propias de la gentrificación el hecho de que tiene que existir cierta
disparidad entre los ingresos de los dos grupos mencionados -no basta que los unos sean superiores a los otros- y que las mejoras
tienen lugar después del desplazamiento (Redfern, 1997 b). No dice nada, sin embargo, sobre si este desplazamiento es voluntario
o como muchas veces ocurre- forzoso.
Por otro lado, es interesante presentar también el modelo basado en la distinción de estadios o fases evolutivas, elaborado por
Juliet Carpenter y Loretta Lees (Carpenter y Lees, 1995) Las autoras justifican dicho modelo por la naturaleza histórica del proceso
y por su adecuación al análisis comparativo, método que consideran muy apto para estudiar la gentrificación, ya que permite
establecer las características comunes del proceso incluso a escala internacional y distinguir las características propias del contexto
local. En este sentido constatan que a pesar de la similitud visual o superficial de los paisajes que han experimentado gentrificación,
como pueden mostrar las pautas de consumo, su estructura interna y sus códigos culturales aparecen distintos a escala
internacional. Carpenter y Lees proponen en su artículo la realización de estudios mediante la comparación del proceso en ciudades
de diferentes países, tal como hacen ellas en su comparación de tres barrios de Londres, París y Nueva York, sobre todo para
profundizar en la influencia del contexto local. Su modelo de análisis se basa, pues, en el establecimiento de fases y en la
consideración de determinados puntos clave: hay que estudiar el proceso de suburbanización en la ciudad en cuestión, que en
general ha traído consigo desinversión en los centros urbanos. En numerosas ocasiones esta desinversión ha sido potenciada
políticamente, al nivel institucional, a través de la negativa a la concesión de préstamos destinados a la inversión en la propiedad,
que con frecuencia ha sido objeto de abandono en las zonas en cuestión. Finalmente, las autoras consideran muy importante
analizar el punto de inflexión entre la etapa de desinversión y la de inversión, para lo cual hay que tener en cuenta: a) el notorio
papel de los gobiernos y de las instituciones financieras para facilitar el proceso; los gobiernos pueden intervenir directamente a
través de programas de ayuda financiera, o indirectamente calificando determinadas zonas como objeto de protección o
conservación por su valor patrimonial o histórico; b) los inversores, que pueden ser particulares, promotores, el sector público o
compañías comerciales que desean establecerse en el área, cuyo papel creen que es crucial en la gentrificación; c) los paisajes
asociados a la gentrificación, que reflejan en el espacio la forma como han cambiado las pautas de consumo derivadas de la

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globalización de la cultura en el llamado mundo postmoderno: aparecen, por ejemplo, establecimientos comerciales que muestran el
mayor poder adquisitivo y las preferencias de los nuevos habitantes. Carpenter y Lees opinan que se configuran paisajes
exclusivos, caracterizados con frecuencia por la instalación de diversos sistemas de seguridad en los edificios, lo cual es signo de
que los nuevos ocupantes no se sienten del todo seguros; y critican la privatización de espacios públicos que a veces se lleva a
cabo al mismo tiempo que se acometen estos procesos.
En cuanto a las técnicas de análisis desarrolladas básicamente durante la última década, destacan tanto las de tipo cuantitativo
como las de tipo cualitativo: en numerosos estudios se utilizan cuestionarios de carácter extensivo y entrevistas intensivas. El primer
tipo es adecuado para aplicar al estudio del proceso a escala de sistemas urbanos, entre otros posibles usos, con el fin de obtener
datos referentes a las características generales de la gentrificación. Las técnicas de carácter intensivo, en cambio, se emplean para
profundizar en los rasgos propios que adquiere el proceso en cada ciudad o área en particular; tal es el caso de las entrevistas a los
protagonistas de la gentrificación, en especial los mismos gentrificadores. Estos procedimientos han sido empleados por varios
estudiosos, como los de C.A. Mills (1989) o J. Jauhiainen (1990).
La precisión en el estudio se manifiesta en análisis como el que realizó Zuhal Ulusoy (1998) en la ciudad de Pittsburgh; según la
autora, que es catedrática de la Facultad de Arte, Diseño y Arquitectura de la Universidad Bilkent de Ankara, la actividad de
rehabilitación suele ser poco analizada en los estudios sobre el tema, y es tratada como si fuera una actividad homogénea y sin
relación con otros aspectos del cambio. Propone un enfoque de estudio basado en la recogida de datos a escala de las propiedades
individuales, con el fin de superar las limitaciones impuestas por los datos agregados a escala de barrio o de otras divisiones
administrativas, con los que no se perciben las variaciones entre cada caso particular. De este modo analiza la historia de cada
propiedad en términos de cambio de propietarios, de cambios de ocupantes y cambios en las condiciones físicas, de manera que es
posible descubrir pautas similares entre distintas propiedades. El efecto combinado de estos cambios y el orden cronológico en que
tienen lugar constituyen la base de los análisis.
Ulusoy detalla los distintos tipos de datos a tener en cuenta: en cuanto a la actividad de renovación, distingue entre una gradación
que va desde el mantenimiento básico, como la pintura o la limpieza de las fachadas, hasta otra de mayor envergadura, como el
cambio de los suelos o de los techos; para ello hay que consultar fuentes como los registros de permisos de obras; en relación a los
traspasos de propiedad, hay que considerar la modalidad - compra-venta, herencia-, la fecha de venta y su valor; para obtener
estos datos hay que recurrir a los registros de las administraciones locales. En cuanto a los cambios de ocupantes, cree importante
contar con información referente a la permanencia de cada ocupante en una determinada dirección, la frecuencia de cambio de
residentes en cada vivienda, la posible subdivisión de las propiedades, y también considera interesante obtener datos sobre las
características socioeconómicas de los ocupantes sucesivos.
A través del análisis conjunto de los datos se pueden llegar a establecer pautas y regularidades en el marco de la renovación
urbana. La autora establece distintos escenarios de la renovación, que clasifica en cuatro grandes tipos: a) cuando no hay cambio
de propietarios ni de residentes en el momento de la renovación; el propietario es el ocupante y es quien se hace cargo de la
renovación y el objetivo, por lo tanto, no es atraer a un nuevo tipo de ocupante; b) cuando la renovación conduce a un cambio de
ocupación, pero no de propietario: hay nuevos ocupantes en alquiler, o bien se pasa de ocupación el alquiler a ocupación en
propiedad, o el propietario se traslada para alquilar su vivienda habitual; el objetivo es adecuar la propiedad a una nueva clientela;
c)cuando las mejoras se realizan después de que la propiedad haya sido comprada u ocupada por un nuevo propietario; la intención
es adecuar el edificio a las necesidades y gustos de los nuevos propietarios u ocupantes, que pueden ser gentrificadores, según
sus características socioeconómicas y las características del barrio o zona; el último caso que distingue Ulusoy se da cuando la
propiedad es renovada y vendida durante o después de la renovación. Dentro de este caso se incluiría la modalidad de compra-
renovación-venta, realizada básicamente por promotores. En este caso, el fin es obtener un considerable beneficio económico e
incluso especular con él.
Finalmente, Ulusoy señala que, en principio, la actividad de mejora es modesta durante los primeros años de rehabilitación, ya que
los procesos más elaborados y de mayor alcance se dan más tarde, de manera que la renovación comporta cambios cuantitativos y
cualitativos en las áreas donde tiene lugar a lo largo del tiempo.

Nuevas líneas
Cabe destacar que durante la década de los 90 se han iniciado nuevas líneas de investigación que introducen nuevas variables a
las ya mencionadas. Fundamentalmente consisten en analizar la posible influencia del género y del ciclo de vida en el proceso de la
gentrificación, en relación con la clase social. En este sentido, se considera un factor importante la incorporación de la mujer al
mundo laboral, ocupando puestos de trabajo para los que se requiere una formación específica y que están bien remunerados: las
mujeres que tienen que ocuparse de su hogar además de su trabajo profesional prefieren vivir cerca de sus lugares de trabajo, que
suelen estar en el centro urbano, para evitar los desplazamientos. En cuanto al ciclo de vida, se tienen en cuenta las franjas de
edad y la actividad que se desarrolla en cada una de ellas: los adultos en edad activa serían los protagonistas fundamentales de la

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gentrificación. Algunos autores se han interesado especialmente en el tema, como L. Bondi (1991, 1992 y 1999); otras
publicaciones sobre este enfoque, referenciadas al final del artículo, son las de Butler y Hamnett (1994) y Lyons (1996).
La gentrificación se ha abordado desde distintas disciplinas, como la demografía, la sociología, la antropología, la economía, y
especialmente desde la geografía y sus ramas específicas, como los estudios urbanos y la planificación: puede decirse que en
estos últimos campos la gentrificación ha constituido un foco de debate importante desde los años 70 (Redfern, 1997 a).

Las ciudades estudiadas


Tomando como base la publicación Geographical Abstracts- Human Geography (Norwich, 1989), de bibliografía, se han identificado
sesenta y nueve referencias sobre gentrificación, correspondientes a trabajos citados por dicha obra entre enero de 1990 y
diciembre de 1999. De estas referencias, tres corresponden a los artículos mencionados anteriormente sobre gentrificación en el
ámbito rural, mientras que el resto se refiere al mundo urbano.
Hay que tener en cuenta que para que se dé gentrificación, han de concurrir dos tipos de condiciones: en primer lugar, desde el
punto de vista de la oferta, tienen que existir propiedades gentrificables en los centros urbanos, y además el mercado financiero ha
de facilitar el financiamiento a través de hipotecas, ya que parece ser que este es el modo de financiamiento dominante en el
proceso. En segundo lugar, ahora desde el punto de vista de la demanda, hace falta un colectivo de gentrificadores potenciales,
constituido por gente cuyo perfil se ha descrito anteriormente (Hamnett, 1991). Así pues, no todas las ciudades más o menos
importantes reúnen estas condiciones.
Puede decirse que aproximadamente la mitad de los trabajos referenciados por Geographical Abstracts- Human Geography están
dedicados a ciudades europeas y la otra mitad lo está a ciudades norteamericanas. Fuera de estos ámbitos, las publicaciones se
refieren a Adelaide, Melbourne y Sydney, en Australia, a Kyoto, en Japón, a la capital de Corea del Sur, Seúl, a la capital de Israel,
Tel-Aviv; a la caribeña Saint John, en Antigua y Barbuda, y a Ciudad del Cabo, en Sudáfrica.
En Europa, la ciudad más analizada es Londres, que constituye una de las ciudades pioneras como ejemplo de gentrificación a una
escala considerable, con la remodelación de los Docklands (Smith, 1989), un caso que sólo parcialmente encaja en el modelo, ya
que el área no era propiamente un espacio residencial, sino portuario. El segundo lugar en número de estudios lo ocupa París.
Cabe destacar el hecho de que se ha identificado el fenómeno en ciudades de Europa oriental a partir de la caída del comunismo,
como Berlín, Magdeburgo o Budapest, debido a la entrada de la dinámica capitalista en su desarrollo urbano. Teniendo en cuenta
los países, se ha analizado el fenómeno sobre todo en Reino Unido, Francia, Alemania, Países Bajos, Finalandia, Dinamarca y
Hungría.
Las ciudades de América del Norte, tanto de Estados Unidos como de Canadá, constituyen también un foco de atención importante.
Nueva York acapara la mayoría de estudios, pero también se han estudiado ciudades dispersas a lo largo y ancho del país, como
San Francisco, Santa Fe, Nueva Orleans, Atlanta, Pittsburgh, Detroit, Northampton o Philadelphia. En Canadá se ha investigado
sobre todo en Vancouver, Montreal y Toronto.

Bibliografía
A continuación se relacionan por orden alfabético las referencias bibliográficas identificadas a partir de la serie Geographical Abstracts-Human Geography (Norwich,
1989) bajo el epígrafe de gentrification, desde enero de 1990 hasta diciembre de 1999, junto a otras obras que se han utilizado para elaborar el presente artículo.
Hemos consultado algunas de las publicaciones citadas en Geographical Abstracts-Human Geography, a las cuales se ha hecho especial referencia en el texto. En
la siguiente bibliografía figura el código de referencia al final de los trabajos mencionados en la serie.
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17
cuatro
tap
anteproyecto

el derecho a la ciudad
david har vey

Vivimos en una era en la que los ideales de los derechos humanos se han colocado en el centro de la escena tanto política como
éticamente. Se hagastado una gran cantidad de energía en promover su significado para la construcción de un mundo mejor,
aunque la mayoría de los conceptos que circulan no desafían fundamentalmente las lógicas de mercado liberales y neoliberales o
los modos dominantes de legalidad y de acción estatal. Vivimos, después de todo, en un mundo en el que los derechos a la
propiedad privada y el benefició aplastan todas las demás nociones de derechos. Quiero explorar aquí otro tipo de derecho
humano, el derecho a la ciudad.

¿Ha contribuido el impresionante ritmo y escala de urbanización de los últimos cien años al bienestar humano? La ciudad, en
palabras del sociólogo urbano Robert Parker, es el intento más exitoso del ser humano de rehacer el mundo en el que vive de
acuerdo con el deseo más íntimo de su corazón. Pero si la ciudad es el mundo que el ser humano ha creado, es también el mundo
en el que a partir de ahora está condenado a vivir. Así pues, indirectamente y sin un sentido nítido de la naturaleza de su tarea, al
hacer la ciudad, el ser humano se ha rehecho a sí mismo. [1]

La cuestión de qué tipo de ciudad queremos no puede estar divorciada de la que plantea qué tipo de lazos sociales, de relaciones
con la naturaleza, de estilos de vida, de tecnologías y de valores estéticos deseamos. El derecho a la ciudad es mucho más que la
libertad individual de acceder a los recursos urbanos: se trata del derecho a cambiarnos a nosotros mismos cambiando la ciudad.
Es, además, un derecho común antes que individual, ya que esta transformación depende inevitablemente del ejercicio de un poder
colectivo para remodelar los procesos de urbanización. La libertad de hacer y rehacer nuestras ciudades y a nosotros mismos es,
como quiero demostrar, uno de nuestros derechos humanos más precio-sos, pero también uno de los más descuidados.

Desde sus inicios, las ciudades han surgido mediante concentraciones geográficas y sociales de un producto excedente. La
urbanización siempre ha sido, por lo tanto, un fenómeno de clase, ya que los excedentes son extraídos de algún sitio y de alguien,
mientras que el control sobre su utilización habitualmente radica en pocas manos. Esta situación general persiste bajo el
capitalismo, por supuesto; pero dado que la urbanización depende de la movilización del producto excedente, surge una conexión
íntima entre el desarrollo del capitalismo y la urbanización. Los capitalistas tienen que producir un producto excedente a fin de
producir plusvalor; éste a su vez debe reinvertirse para generar más plusvalor. El resultado de la reinversión continuada es la
expansión de la producción de excedente a un tipo de interés compuesto, y de ahí proceden las curvas logísticas (dinero,
producción y población) vinculadas a la historia de la acumulación de capital, que es replicada por la senda de crecimiento de la
urbanización en el capitalismo.

La perpetua necesidad de encontrar sectores rentables para la producción y absorción de capital excedente conforma la política del
capitalismo y enfrenta al capitalista con diversas barreras a la expansión continua y libre de inconvenientes. Si el trabajo es escaso
y los salarios son altos, o bien el trabajo existente tiene que ser disciplinado normalmente los dos métodos más comunes son
provocar un desempleo inducido tecnológicamente o asaltar el poder de la clase obrera organizada–, o bien deben encontrarse
nuevas fuerzas de trabajo mediante la inmigración, la exportación de capital o la proletarización de elementos de la población hasta
ese momento independientes. Los capitalistas deben también descubrir nuevos medios de producción en general y nuevos
recursos naturales en particular, lo cual presiona de modo creciente sobre el entorno natural a la hora de obtener las materias
primas necesarias y absorber los residuos inevitables. Los capitalistas necesitan también descubrir nuevas áreas de extracción de
recursos naturales, tarea que es con frecuencia el objetivo de los esfuerzos imperialistas y neocoloniales.

18
Las leyes coercitivas de la competencia también fuerzan la continua implementación de nuevas tecnologías y formas organizativas,
dado que éstas permiten que los capitalistas venzan a sus competidores que utilizan métodos inferiores. Las innovaciones definen
nuevos deseos y necesidades, reducen el tiempo de rotación del capital y mitigan la fricción de la distancia, lo cual limita el ámbito
geográfico en el que el capitalista puede buscar suministros ampliados de fuerza de trabajo, materias primas y demás insumos
productivos. Si no existe suficiente poder de compra en el mercado, deben encontrarse nuevos mercados mediante la expansión del
comercio exterior, la promoción de nuevos productos y estilos de vida, la creación de nuevos instrumentos crediticios y el gasto
público y privado financiado a través del endeudamiento. Si finalmente la tasa de beneficio es demasiado baja, entonces la
regulación estatal de la «competencia ruinosa», la monopolización (fusiones y adquisiciones) y las exportaciones de capital ofrecen
vías de salida.

Si alguna de las mencionadas barreras no puede ser evitada, los capitalistas no pueden reinvertir rentablemente su producto
excedente, bloqueándose la acumulación de capital y enfrentándolos a la crisis en la que su capital puede devaluarse y en algunos
casos destruirse físicamente. Las mercancías excedentes pueden perder su valor o ser destruidas, mientras que los activos y la
capacidad productivos pueden dejar de utilizarse como tales y quedar ociosos; el dinero mismo puede devaluarse mediante la
inflación, y la fuerza de trabajo, conocer el desempleo masivo. ¿Cómo ha impulsado, pues, la necesidad de eludir estas barreras y
de expandir las áreas de actividad rentable la urbanización capitalista? Sostengo aquí que la urbanización ha desempeñado un
papel particularmente activo, junto con fenómenos como los gastos militares, a la hora de absorber el producto excedente que los
capitalistas producen perpetuamente en su búsqueda de beneficios.

Revoluciones urbanas

Consideremos, en primer lugar, el caso del París del Segundo Imperio. El año de 1848 trajo consigo una de las primeras innegables
crisis de capital excedente y de fuerza de trabajo ociosa a escala europea, que golpeó a París de modo especialmente duro, dando
lugar a una revolución abortada protagonizada por los trabajadores desempleados y por aquellos utópicos burgueses que
consideraban la república social como el antídoto a la avaricia y la desigualdad que habían caracterizado a la Monarquía de Julio.
La burguesía republicana reprimió violentamente a los revolucionarios, pero no logró resolver la crisis, que se zanjó con el ascenso
al poder de Luis Napoleón Bonaparte, quien organizó un golpe de Estado en 1851 proclamándose emperador el año siguiente. Para
sobrevivir políticamente, recurrió a una amplia represión de los movimientos políticos alternativos, mientras que se enfrentó a la
situación económica mediante un vasto programa de inversión en infraestructuras tanto en el interior de Francia como en el exterior,
en donde acometió la construcción de ferrocarriles en toda Europa y en Oriente, apoyando grandes obras como el Canal de Suez.
En el interior, Luis Napoleón consolidó la red de ferrocarriles, construyó puertos y dársenas, y desecó zonas pantanosas, pero sobre
todo acometió la reconfiguración de la infraestructura urbana de París, encargando a Georges Eugène Haussmann las obras
públicas de la ciudad en 1853.

Haussmann comprendió claramente que su misión era contribuir a resolver el problema de la existencia de capital excedente y la
situación de desempleo existente mediante la urbanización. Reconstruir París absorbió enormes cantidades de trabajo y capital
para la época y, suprimiendo las aspiraciones de la fuerza de trabajo parisina, fue un instrumento esencial de estabilización social.
Haussmann se inspiró en los planes utópicos que fourieristas y saint-simonianos habían debatido durante la década de 1840 para
remodelar París, introduciendo, no obstante, una importante diferencia, ya que transformó la escala a la que se imaginó el proceso
urbano. Cuando el arquitecto Jacques Ignace Hittorff le presentó sus planes de un nuevo bulevar, Haussmann se los devolvió
diciéndole: «No es suficientemente ancho […] le has dado una anchura de 40 metros y yo lo quiero de 120 metros». Anexionó los
suburbios y rediseñó barrios enteros como el de Les Halles. Para llevar a cabo estos proyectos, Haussmann precisaba de nuevas
instituciones financieras y nuevos instrumentos de deuda como el Crédit Mobilier y el Crédit Immobilier, que fueron instituidos de
acuerdo con líneas saint-simonianas. Haussmann ayudó, de hecho, a resolver el problema de la utilización del excedente de capital
estableciendo un sistema protokeynesiano de mejoras urbanas en infraestructuras financiadas mediante el endeudamiento.

El sistema funcionó muy bien aproximadamente durante quince años e implicó no sólo la transformación de las infraestructuras
urbanas, sino también la construcción de un nuevo modo de vida y de persona urbana. París se convirtió en «la ciudad de la luz»,
un gran centro de consumo, turismo y placer; los cafés, los grandes almacenes, la industria de
la moda y las grandes exposiciones cambiaron la vida urbana de modo que pudiera absorber enormes excedentes mediante el
consumo. Tras un tiempo, sin embargo, el sistema financiero, sobretensado y especulativo, y las estructuras de crédito colapsaron
en 1868. Haussmann fue despedido; Napoleón III, desesperado, declaró la guerra a la Alemania de Bismarck para perderla,
creándose un vacío en el que se produjo la Comuna de París, uno de los grandes episodios revolucionarios de la historia urbana del
capitalismo, desencadenado en parte por la nostalgia del mundo que Haussmann había destrozado y por el deseo de los
trabajadores de recuperar la ciudad de la que habían sido desposeídos por sus trabajos [2].

19
Saltemos ahora a la década de 1940 en Estados Unidos. La descomunal movilización para atender el esfuerzo de guerra había
resuelto temporalmente el problema del uso del excedente de capital, que había parecido tan intratable durante la década de 1930,
y el desempleo que había traído aparejado, pero todo el mundo temía lo que podría suceder una vez que la guerra concluyese.
Políticamente la situación era peligrosa: el gobierno federal estaba, en efecto, dirigiendo una economía nacionalizada y mantenía
una alianza con la Unión Soviética comunista, mientras que fuertes movimientos sociales con inclinaciones izquierdistas habían
emergido durante la década de 1930. Como en la era de Luis Bonaparte, las clases dominantes de la época consideraban
necesaria una vigorosa dosis de represión política, siendo demasiado familiar la posterior historia de la política del mccarthysmo y
de la Guerra Fría, cuyos primeros signos abundaban ya a principios de la década de 1940. En el frente económico, persistía la
cuestión de cómo podría absorberse el capital excedente.

En 1942, apareció en Architectural Forum una larga evaluación de las iniciativas y trabajos de Haussmann, que documentaba con
detalle lo que éste había hecho, intentaba un análisis de sus errores y buscaba recuperar su reputación como uno de los mayores
urbanistas de todos los tiempos. El artículo no era sino de Robert Moses, quien tras la Segunda Guerra Mundial hizo en Nueva York
lo que Haussmann había hecho en París [3]. Moses cambió la escala de pensamiento sobre el proceso urbano. Mediante un
sistema de autopistas y transformaciones de infraestructuras, suburbanización y la remodelación total no sólo de la ciudad sino del
conjunto de la región metropolitana, contribuyó a resolver el problema de la absorción de capital excedente. Para lograrlo, exploró
las nuevas instituciones financieras y los modelos fiscales que liberarían el crédito necesario para la expansión urbana financiada
mediante el endeudamiento. Cuando este proceso se extendió al conjunto de las mayores áreas metropolitanas estadounidenses
–de nuevo otro cambio de escala–, desempeñó un papel fundamental a la hora de estabilizar el capitalismo global después de
1945, periodo en el que Estados Unidos podía permitirse propulsar la economía global no comunista incurriendo en déficits
comerciales.

La suburbanización de Estados Unidos no fue únicamente cuestión de nuevas infraestructuras. Como en el Segundo Imperio,
implicó una transformación radical de los estilos de vida, la introducción de nuevos productos: de las viviendas a las neveras y los
aires acondicionados, de los dos coches en el garaje a un enorme incremento en el consumo de petróleo. También alteró el paisaje
político, ya que la propiedad subsidiada de una vivienda para la clase media cambió el objeto de atención de la acción comunitaria
hacia la defensa de los valores de la propiedad y las identidades individualizadas, canalizando el voto suburbano hacia el
republicanismo conservador. Se pensaba que era menos probable que los propietarios de una vivienda, aplastados por la deuda,
recurriesen a la huelga. Este proyecto absorbió con éxito el excedente y aseguró la estabilidad social, aunque a costa de vaciar los
centros de los cascos urbanos y generar descontento entre aquéllos, básicamente afroamericanos, a quienes se les negaba el
acceso a la nueva prosperidad.

A finales de la década de 1960, comenzó un tipo diferente de crisis; Moses, como Haussmann, cayó en desgracia y su solución se
consideró inapropiada e inaceptable. Los tradicionalistas se agruparon en torno a Jane Jacobs e intentaron contrarrestar la
modernidad brutal de los proyectos de Moses con una estética de barrio localizado. Pero las áreas suburbanas ya habían sido
construidas y el cambio radical del estilo de vida que traía aparejado había tenido innumerables consecuencias sociales, llevando a
las feministas, por ejemplo, a proclamar esas áreas como el lugar de sus descontentos primordiales. Si la haussmannización
desempeñó un papel en las dinámicas de la Comuna de París, las características descarnadas del modo de vida suburbano
también desempeñaron su parte en los espectaculares acontecimientos que tuvieron lugar en Estados Unidos en 1968. Los
estudiantes blancos de clase media mostraron su descontento desencadenando una fase de revuelta mediante la búsqueda de
alianzas con grupos marginales que reivindicaban los derechos civiles y agrupándose contra el imperialismo estadounidense para
construir otro tipo de mundo, que incluía también otro tipo de experiencia urbana.

En París, la campaña para detener la vía rápida de la margen izquierda y la destrucción de barrios tradicionales por la invasión de
«gigantes de altura» como la Place d’Italie y la torre Montparnasse ayudó a animar las mayores dinámicas del levantamiento de
1968. En este contexto, Henri Lefebvre escribió "La revolution urbaine", que predijo no sólo que la urbanización era central para la
supervivencia del capitalismo y, por lo tanto, susceptible necesariamente de convertirse en objeto crucial de la lucha de clases y de
la lucha política, sino que estaba despareciendo paulatinamente la distinción entre el campo y la ciudad mediante la producción de
espacios integrados a lo largo del territorio nacional, si no más allá del mismo [4]. El derecho a la ciudad tenía que significar el
derecho a dirigir la totalidad del proceso urbano, que estaba dominando cada vez más el campo mediante fenómenos que iban del
agribusiness a la segunda residencia y el turismo rural.

De la mano de la revuelta de 1968 vino la crisis financiera de las instituciones crediticias que, al financiar la deuda, habían
propiciado un boom inmobiliario durante las décadas precedentes. La crisis se intensificó a finales de la de 1960 hasta que el
sistema capitalista colapsó, primero con la explosión de la burbuja del mercado inmobiliario en 1973, a la que siguió la quiebra de la
ciudad de Nueva York en 1975. Como indicó William Tabb, la respuesta a las consecuencias de esta última avanzaron, de hecho, la

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construcción de la respuesta neoliberal a los problemas de perpetuar el poder de clase reanimando la capacidad de absorber los
excedentes que el capitalismo debe producir para sobrevivir [5].

Rodear el globo

Demos otro salto hasta la coyuntura actual. El capitalismo internacional ha conocido una rápida serie de crisis y debacles –Asia
oriental y sudoriental en 1997-1998; Rusia en 1998; Argentina en 2001–, pero hasta tiem-pos recientes había evitado una crisis
global, aun teniendo en cuenta la inestabilidad crónica para disponer del excedente de capital. ¿Cuál fue el papel de la urbanización
para estabilizar esta situación? En Estados Unidos, se acepta la opinión de que el sector de la vivienda fue un importante
estabilizador de la economía, particularmente tras el hundimiento del sector de la alta tecnología a finales de la década de 1990, y
un componente activo de la expansión en los primeros años de la actual. El mercado de la vivienda absorbió directamente una gran
cantidad de capital excedente mediante la construcción de centros urbanos así como de viviendas y espacios de oficina
suburbanos, mientras que la rápida inflación de los precios de los activos de la vivienda –respaldado por una generosa ola de
refinanciación hipotecaria a tipos de interés históricamente bajos estimuló el mercado interior estadounidense de bienes de
consumo y de servicios. La expansión urbana estadounidense contribuyó parcialmente a estabilizar la economía global, en un
momento en que Estados Unidos soportaba enormes déficits comerciales con el resto del mundo, endeudándose aproximadamente
por un monto de 2 millardos de dólares diarios para alimentar su insaciable pauta de consumo así como las guerras de Iraq y
Afganistán.

Pero el proceso urbano ha experimentado otra transformación de escala. Se ha hecho, dicho en una palabra, global. Los booms
inmobiliarios en el Reino Unido y en España, así como en otros muchos países, han ayudado a propulsar una dinámica capitalista
de modos que se asemejan a grandes rasgos a lo que ha sucedido en Estados Unidos. La urbanización de China durante los
últimos veinte años ha sido de un carácter diferente, concentrándose en el desarrollo de su infraestructura, siendo incluso más
importante que el proceso estadounidense. Su ritmo se intensificó enormemente tras una breve recesión en 1997, hasta el punto de
que China ha consumido casi la mitad de la producción mundial de cemento desde 2000. Más de cien ciudades han rebasado el
punto de inflexión del millón de habitantes durante este periodo, y pequeños pueblos como Shenzhen se han convertido en
gigantescas metrópolis de entre 6 y 10 millones de habitantes. Colosales proyectos de infraestructuras, que incluyen presas y
autopistas financiadas de nuevo mediante el endeudamiento, están transformando el paisaje. Las consecuencias para la economía
global y la absorción de capital excedente han sido significativas: Chile crece espectacularmente gracias al alto precio del cobre,
Australia avanza a pasos de gigante e incluso Brasil y Argentina se han recuperado en parte gracias a la fortaleza de la demanda
china de materias primas.

¿Es la urbanización de China, por lo tanto, el estabilizador primario del capitalismo global en la actualidad? La respuesta tiene que
ser un sí matizado, porque China es únicamente el epicentro de un proceso de urbanización que ahora se ha hecho genuinamente
global, en parte por mor de la impresionante integración de los mercados financieros que han utilizado su flexibilidad para financiar
mediante el endeudamiento el desarrollo urbano en todo el mundo. El banco central chino, por ejemplo, se ha mostrado activo en el
mercado hipotecario estadounidense, mientras que Goldman Sachs se ha involucrado intensamente en el vigoroso mercado
inmobiliario de Bombay y el capital de Hong Kong ha invertido en Baltimore. En medio de una marea de migrantes empobrecidos, la
construcción ha crecido de un modo inusitado en Johannesburgo, Taipei y Moscú, así como en las ciudades de los países
capitalistas centrales, como Londres y Los Ángeles. Impresionantes si no criminalmente absurdos resultan los proyectos de
megaurbanización que han emergido en Oriente Próximo en lugares como Dubai y Abu Dhabi, los cuales han absorbido los
excedentes procedentes de la riqueza del petróleo en los modos más obscenos, socialmente injustos y ambientalmente
despilfarradores.

Esta escala global dificulta la comprensión de que lo que está sucediendo es teóricamente similar a las transformaciones que
Haussmann supervisó en París, dado que el boom urbanizador global ha dependido, como sucedió con los que le antecedieron, de
la construcción de nuevas instituciones y dispositivos financieros para organizar el crédito necesario para sostenerlo. Las
innovaciones financieras lanzadas durante la década de 1980 –titularización y serialización de las hipotecas locales para ser
vendidas en todo el mundo y establecimiento de nuevos vehículos para negociar obligaciones de deuda garantizada– han
desempeñado un papel fundamental, siendo sus principales beneficios la dispersión del riesgo y la posibilidad de crear fondos de
ahorro excedente de más fácil acceso para la demanda de vivienda. Estas innovaciones financieras también han reducido los tipos
de interés globales, al tiempo que generaban inmensas fortunas para los intermediarios financieros que trabajaban con esos
prodigios. Pero dispersar el riesgo no significa eliminarlo. Además, el hecho de que éste pueda distribuirse tan ampliamente,
estimula comportamientos locales todavía más arriesgados, porque el pasivo puede transferirse a otra parte. Sin controles
adecuados de evaluación del riesgo, esta ola de financiarización se ha traducido ahora en la doble crisis de las hipotecas subprime

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y del valor de los activos inmobiliarios. El resultado de todo ello se concentró primero en las ciudades estadounidenses, con
implicaciones particularmente serias para los afroamericanos de bajos ingresos ubicados en el centro de las ciudades y los hogares
a cargo de una mujer soltera. Ha afectado también a aquellos que, incapaces de permitirse los elevadísimos precios de la vivienda
en los centros urbanos, especialmente en el sudoeste, fueron obligados a desplazarse a las periferias metropolitanas: aquí
decidieron especular, inicialmente pagando tipos de interés baratos, con viviendas adosadas ya construidas, enfrentándose ahora a
costes de desplazamiento crecientes a medida que aumenta el precio del petróleo y con cuotas hipotecarias cada vez mayores
cuando comienzan a pagar los intereses de acuerdo con los tipos de mercado.

La crisis actual, con sus severas repercusiones locales sobre la vida y las infraestructuras urbanas, amenaza también la totalidad de
la arquitectura del sistema financiero global y puede desencadenar, además, una recesión de envergadura. Los paralelos con la
década de 1970 son escalofriantes, incluida la inmediata respuesta con la concesión de dinero fácil por parte de la Reserva Federal
en 2007-2008, que generará casi con toda seguridad fuertes corrientes de inflación incontrolable, si no una situación de
estanflación, en un futuro no muy lejano. Sin embargo, la situación es mucho más compleja en la actualidad, y sigue siendo una
cuestión abierta si China puede compensar una debacle seria de Estados Unidos; incluso parece que en aquel país el ritmo de la
urbanización puede estar ralentizándose [6]. Los sistemas de negociación informatizados que operan prácticamente en tiempo real
siempre amenazan con crear una gran divergencia en el mercado, que ya está produciendo una increíble volatilidad en la
negociación bursátil y que precipitará una crisis masiva que requerirá repensar totalmente cómo funcionan no sólo los mercados
monetarios y financieros, sino también su relación con la urbanización.

Propiedad y pacificación

Como en todas las fases precedentes, esta última radical expansión del proceso urbano ha traído aparejadas increíbles
transformaciones de los estilos de vida. La calidad de la vida urbana se ha convertido en una mercancía, como la ciudad misma, en
un mundo en el que el consumismo, el turismo, las industrias culturales y las basadas en el conocimiento se han convertido en
aspectos esenciales de la economía política urbana. La inclinación posmoderna a estimular la formación de nichos de mercado
–tanto en los hábitos de consumo como en las formas culturales– acecha la experiencia urbana contemporánea con un aura de
libertad de elección, siempre que se disponga de dinero para ello. Grandes centros y superficies comerciales proliferan como lo
hacen los restaurantes de fast food y los mercados de productos artesanales. Asistimos ahora, como señala el sociólogo urbano
Sharon Zukin, a la «pacificación mediante el cappuccino». Incluso la incoherente, blanda y monótona promoción de vivienda
adosada suburbana, que continúa dominando en muchas áreas, recibe ahora su antídoto en la forma de un movimiento en pro de
un «nuevo urbanismo» que oferta la venta de comunidad y estilos de vida de calidad para cumplir todo tipo de sueños urbanos. Éste
es un mundo en el que la ética neoliberal de un intenso individualismo posesivo y su correspondiente retirada política de las formas
de acción colectiva se convierte en el modelo de la socialización humana [7]. La defensa de los valores de la propiedad se convierte
en un interés político tan fundamental que, como señala Mike Davis, las asociaciones de propietarios en el estado de California se
han convertido en bastiones de la reacción política, si no de fascismos fragmentados a escala de barrio [8].

Vivimos cada vez más en áreas urbanas divididas y proclives al conflicto. Durante las últimas tres décadas, el giro neoliberal ha
restaurado el poder de clase en manos de las elites ricas. En México han aparecido 14 milmillonarios desde entonces, y en 2006 el
país se jactaba de que un connacional, Carlos Slim, era el hombre más rico del planeta, al tiempo que las rentas de los pobres se
habían estancado o directamente disminuido. Los resultados se hallan indeleblemente grabados en las formas espaciales de
nuestras ciudades, caracterizadas cada vez más por fragmentos fortificados, comunidades valladas y espacios públicos privatizados
sometidos a constante vigilancia. En el mundo en vías de desarrollo en particular, la ciudad se está dividiendo en diferentes partes
separadas, con la evidente formación de innumerables «micro Estados». Barrios ricos dotados de todo tipo de servicios,
tales como escuelas exclusivas, campos de golf y de tenis, y servicios privados de policía que patrullan el área de modo
permanente, se entrelazan con asentamientos ilegales en los que puede disponerse de agua únicamente en fuentes públicas, no
existe alcantarillado, la electricidad es pirateada por unos pocos privilegiados, las calles se convierten en barrizales cuando llueve, y
donde compartir casa es la norma. Cada fragmento parece vivir y funcionar de modo autónomo, aferrándose tenazmente a lo que
ha sido capaz de conseguir en la lucha diaria por la supervivencia [9].

Bajo estas condiciones, los ideales de identidad urbana, ciudadanía y pertenencia –ya amenazados por la difusión del malestar de
la ética neoliberal– resultan mucho más difíciles de sostener. La redistribución privatizada mediante la actividad criminal amenaza la
seguridad a cada paso, promoviendo demandas populares para que sea suprimida por la policía. Incluso la idea de que la ciudad
podría funcionar como cuerpo político colectivo, un lugar en el que y desde el que los movimientos sociales progresivos podrían
emanar, no parece plausible. Existen, sin embargo, movimientos sociales urbanos que intentan superar el aislamiento y remodelar
la ciudad de acuerdo con una imagen diferente de la promovida por los promotores inmobiliarios respaldados por el capital

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financiero, el capital corporativo y un aparato de Estado cada vez más imbuido por una lógica estrictamente empresarial.

Desposesiones

La absorción de excedente mediante la transformación urbana tiene un aspecto todavía más siniestro, que ha implicado repetidas
explosiones de reestructuración urbana mediante la «destrucción creativa», que tiene casi siempre una dimensión de clase, dado
que son los pobres, los no privilegiados y los marginados del poder político quienes sufren primeo y en
mayor medida las consecuencias de este proceso en el que la violencia es necesaria para construir el nuevo mundo urbano a partir
de las ruinas del viejo. Haussmann desgarró los viejos barrios pobres de París, utilizando el poder de la expropiación en nombre de
la mejora y la renovación cívicas, e implementó deliberadamente la expulsión de buena parte de la clase obrera y de otros
elementos levantiscos presentes en el centro de la ciudad, donde constituían una amenaza al orden público y al poder. Creó una
forma urbana en la que pensaba –incorrectamente, como se demostró en 1871– que, con niveles suficientes de vigilancia y control
militar, podría garantizarse que los movimientos revolucionarios serían domeñados con facilidad. Sin embargo, como Engels señalo
en 1872: En realidad, la burguesía dispone únicamente de un método para resolver el problema de la vivienda de modo vacilante,
es decir, resolverlo de modo que la solución continuamente reproduzca de nuevo el problema. Este método se llama «Haussmann»
[…] No importa qué diferentes puedan ser las razones, el resultado siempre es el mismo; los escandalosos callejones y callejuelas
desaparecen acompañados por las generosas autoalabanzas de la burguesía que explican el tremendo éxito cosechado, pero
reaparecen de nuevo inmediatamente en algún otro sitio […] La misma necesidad económica que los produjo en una primera
ubicación, los reproduce en otro lugar [10].

Llevó más de cien años completar el aburguesamiento del centro de París, con las consecuencias vistas en los recientes
levantamientos y en la ola de violencia que sacudió los suburbios aislados que atrapan a los migrantes marginados y a los
trabajadores y jóvenes desempleados. Lo triste en este caso, por supuesto, es que la situación descrita por Engels se reproduce de
modo recurrente a lo largo de la historia. Robert Moses «empuñó el hacha en el Bronx», según sus propias palabras, cosechando
largos y ruidosos lamentos de los grupos y movimientos vecinales. En el caso de París y Nueva York, una vez que el poder de las
expropiaciones del Estado ha sido objeto de resistencia y contención exitosas, se desencadena una progresión más insidiosa y
cancerosa a través de la disciplina presupuestaria municipal, la especulación inmobiliaria y la zonificación del uso del suelo
de acuerdo con la tasa de beneficio de su «más elevado y mejor uso». Engels comprendió esta secuencia de modo más que
certero: El crecimiento de las grandes ciudades modernas concede al suelo localizado en determinadas áreas, particularmente en
aquellas que se hallan centralmente situadas, un incremento artificial y colosal de su valor. Los edificios erigidos sobre las mismas
deprimen su valor en vez de incrementarlo, porque dejan de estar adaptados a circunstancias que no dejan de modificarse, siendo
entonces derribados y sustituidos por otros, lo cual sucede sobre todo con las viviendas de los trabajadores que se hallan ubicadas
en los centros de las ciudades y cuyas rentas, incluso forzando al máximo su congestión, nunca pueden, o lo hacen muy
lentamente, incrementarse por encima de determinado máximo. Son demolidas y en su lugar se construyen tiendas, almacenes y
edificios públicos [11].

Aunque esta descripción fue escrita en 1872, es aplicable directamente al desarrollo urbano contemporáneo en gran parte de Asia
–Delhi, Seúl, Bombay–, así como a los procesos de gentrificación de Nueva York. En el corazón de la urbanización característica del
capitalismo radica un proceso desplazamiento y lo que yo denomino «acumulación por desposesión» [12]. Se trata de la
contraimagen de la absorción de capital mediante el redesarrollo urbano, que da lugar a numerosos conflictos en torno a la captura
de suelo valioso en manos de las poblaciones de renta baja que han podido vivir en esas ubicaciones durante muchos años.

Considérese el caso de Seúl durante la década de 1990: las empresas de construcción y los promotores inmobiliarios contrataron
escuadras de matones con complexión de luchadores de sumo para invadir los barrios de las colinas de la ciudad, que no sólo
demolieron y destrozaron las viviendas sino también todas las pertenencias de aquellos que habían construido sus propias casas
durante la década de 1950 en terrenos que se habían convertido ahora en suelo de gran valor. Edificios de gran altura, que no
muestran traza alguna de la brutalidad que permitió su construcción, cubren ahora la mayoría de esas colinas. En Bombay,
entretanto, 6 millones de personas oficialmente consideradas como chabolistas se hallan instaladas en terrenos sobre los que no
poseen título legal alguno; todos los mapas de la ciudad dejan estos lugares en blanco. Con la pretensión de convertir Bombay en
un centro financiero global digno de rivalizar con Shanghai, el boom inmobiliario se ha intensificado y el suelo que ocupan estos
habitantes ilegales parece cada vez más valioso. Dharavi, una de las áreas urbanas hiperdegradadas más prominentes de Bombay,
se estima que puede tener un valor de 2 millardos de dólares. La presión para desalojarla –aduciendo razones ambientales y
sociales que ocultan el apoderamiento del suelo– asciende día tras día. Los poderes financieros, respaldados por el Estado,
presionan para que se produzca un desalojo por la fuerza, con la intención de apropiarse violentamente de terrenos en algunos
casos ocupados durante una generación. Se trata de acumulación de capital mediante booms de actividad inmobiliaria, ya que el
suelo se adquiere prácticamente sin ningún coste.

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¿Será compensada la gente que es desplazada? Los afortunados obtendrán algo, pero aunque la Constitución india especifica que
el Estado tiene la obligación de proteger las vidas y el bienestar del conjunto de la población, con independencia de la clase o la
casta, y de garantizar los derechos a la vivienda y el alojamiento, el Tribunal Supremo ha dictado sentencias que reescriben esa
exigencia constitucional. Como los habitantes de esas áreas urbanas hiperdegradadas son ocupantes ilegales y muchos no pueden
demostrar de modo irreprochable una residencia prolongada, no tienen derecho de compensación. Conceder tal derecho, afirma el
Tribunal Supremo, equivaldría a recompensar a los rateros por sus acciones, de modo que los ocupantes ilegales, o bien resisten y
luchan, o bien se trasladan con sus pocas pertenencias para acampar en los márgenes de las autopistas o donde puedan encontrar
un reducido lugar para instalarse [13]. Ejemplos de desposesión pueden encontrarse también en Estados Unidos, aunque éstos
tienden a ser menos brutales y más legalistas: el derecho del Estado al dominio eminente ha sido objeto de abuso a fin de
desplazar a residentes establecidos en viviendas razonables en beneficio de usos del suelo de mayor importancia como grandes
edificios de viviendas y centros comerciales. Cuando tal comportamiento llegó al Tribunal Supremo estadounidense, los jueces
sentenciaron que era constitucional que las autoridades locales se comportasen de ese modo para incrementar la base imponible
de sus impuestos sobre la propiedad [14].

En China, millones de personas están siendo desposeídas de los espacios que han ocupado durante largo tiempo, ascendiendo a 3
millones únicamente en Pekín. Como carecen de derechos de propiedad privada, el Estado puede simplemente desplazarlos por
decreto, ofreciendo un pequeño pago en metálico para ayudarles en su nueva situación, antes de conceder con gran beneficio el
suelo a los promotores. En algunos casos, la gente se ha movido voluntariamente, pero abundan las noticias de casos de gran
resistencia, que son respondidos con una represión brutal por el Partido Comunista. En China abundan los casos de
desplazamientos de población en los márgenes rurales, que ilustran el significado de la idea de Lefebvre, visionariamente articulada
en la década de 1960, de que la distinción entre lo urbano y lo rural se estaba disolviendo en un conjunto de espacios porosos de
desarrollo geográfico desigual bajo el poder hegemónico del capital y del Estado. Esto ha sucedido en India, donde los gobiernos
central y estatal favorecen ahora el establecimiento de Zonas Económicas Especiales, supuestamente para el desarrollo industrial,
aunque la mayoría del suelo se dedica a la urbanización. Esta política ha conducido a enconadas batallas contra los productores
agrícolas, cuyo epítome fue la masacre de Nandigram en Bengala occidental en marzo de 2007, orquestada por el gobierno
marxista del estado. El intento de encontrar terrenos para el Grupo Salim, un conglomerado indonesio, por parte del gobierno del
PCI (marxista) se saldó con el envío de la policía para dispersar a los habitantes del pueblo, de los cuales 14 murieron y docenas
fueron heridos. Los derechos de propiedad en este caso no proporcionaron ninguna protección.

¿Qué opinar, por otro lado, de la propuesta aparentemente progresista de conceder derechos de propiedad privada a las
poblaciones que ocupan ilegalmente, proporcionándoles activos que les permitirían salir de la pobreza? [15]. Un plan de este tipo se
está discutiendo ahora para las favelasde Rio de Janeiro, por ejemplo. El problema es que los pobres, asediados por la inseguridad
de su renta y frecuentes dificultades financieras, puedenser persuadidos fácilmente de vender ese activo por un pago en me-tálico
relativamente bajo. Los ricos habitualmente rechazan renunciar a sus activos de valor sin importar lo elevado que pueda ser el
precio ofrecido por ellos, lo cual explica por qué Moses pudo empuñar el hacha en el Bronx de rentas bajas, pero no en la rica Park
Avenue. El efecto duradero de la privatización de la vivienda social en Gran Bretaña por Margaret Thatcher ha sido crear una
estructura de alquileres y precios en toda el área del Londres metropolitano que impide a los grupos de renta baja o incluso de clase
media el acceso a una vivienda en punto alguno próximo al centro urbano. Apuesto que en quince años, si continúan las tendencias
actuales, la totalidad de las colinas de Rio de Janeiro ocupadas por favelas estarán cubiertas por altos edificios de viviendas con
vistas fabulosas sobre la idílica bahía de la ciudad, mientras que los anteriores habitantes de aquéllas habrán sido filtrados a alguna
remota periferia.

Formular demandas

La urbanización, podemos concluir, ha desempeñado un papel crucial en la absorción de los excedentes de capital, siempre a una
escala geográfica cada vez mayor, pero al precio de un proceso impresionante de destrucción creativa que ha desposeído a las
masas de todo derecho a la ciudad, cualesquiera que sean éstos. El planeta como terreno de construcción choca con el «planeta de
ciudades miseria» [16]. Periódicamente esto acaba en revuelta, como en París en 1871 o en Estados Unidos tras el asesinato de
Martin Luther King en 1968. Si, como parece probable, las dificultades presupuestarias crecen y la hasta ahora exitosa fase
neoliberal, posmoderna y consumista de urbanización capitalista mediante la absorción de excedente llega a su fin y se
desencadena una crisis de mayores dimensiones, entonces se plantea la siguiente pregunta: ¿dónde está nuestro 1968 o, dicho
más llamativamente, nuestra versión de la Comuna? Como sucede con el sistema financiero, la respuesta va a ser mucho más
compleja precisamente porque el proceso urbano presenta ahora un alcance global. Los signos de rebelión se prodigan por doquier:
el malestar en China e India es crónico, las guerras civiles desgarran África, América Latina está en fermento. Cualquiera de estas
revueltas podría ser contagiosa. A diferencia del sistema financiero, sin embargo, los movimientos urbanos y periurbanos de

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oposición, que abundan en todo el mundo, no se hallan estrechamente interrelacionados; de hecho, la mayoría no tienen conexión
entre sí. Si algo los hiciera conectarse entre sí, ¿qué exigirían?

La respuesta a esta última pregunta es realmente simple en teoría: mayor control democrático sobre la producción y utilización del
excedente. Dado que el proceso urbano es un canal esencial de uso del excedente, instituir una gestión democrática sobre su
despliegue urbano constituye el derecho a la ciudad. A lo largo de la historia capitalista, parte del plusvalor ha sido gravado
fiscalmente, y durante las fases socialdemócratas la proporción a disposición del Estado ha crecido de modo significativo. El
proyecto neoliberal de los últimos 30 años ha estado orientado hacia la privatización de ese control. Los datos del conjunto de
países de la OCDE muestran, sin embargo, que la parte gestionada por el Estado del producto bruto se ha mantenido
prácticamente constante desde la década de 1970 ]17]. El mayor logro del asalto neoliberal ha sido, por consiguiente, impedir que la
cuota pública se expandiese como lo hizo durante la década de 1960. El neoliberalismo también ha creado nuevos sistemas de
governance que integran los intereses del Estado y de las empresas, y que, mediante el uso del poder del dinero, han asegurado
que la utilización del excedente a través de la Administración pública favorezca al capital corporativo y a las clases dominantes a la
hora de conformar el proceso urbano. Incrementar la proporción del excedente detentado por el Estado únicamente tendrá un
impacto positivo si éste es sometido de nuevo a control democrático.

Es obvio que el derecho a la ciudad está cayendo cada vez más en manos de intereses privados o cuasi privados. En Nueva York,
por ejemplo, el milmillonario alcalde Michael Bloomberg está remodelando la ciudad en sintonía con los promotores, Wall Street y
los elementos de la clase capitalista transnacional, promoviéndola como una ubicación óptima para las empresas de alta gama y un
destino fantástico para los turistas. Está convirtiendo Manhattan en una inmensa comunidad vallada para los ricos. En Ciudad de
México, Carlos Slim había remodelado las calles del centro para agradar la mirada de los turistas. Pero no sólo se trata de que
individuos ricos ejerzan un poder directo. En la ciudad de New Haven, carente de recursos para la reinversión urbana, está Yale,
una de las universidades más ricas del mundo, que está rediseñando gran parte del te-jido urbano para adaptarlo a sus
necesidades. Johns Hopkins University está haciendo lo propio con la zona oriental de Baltimore, y Colombia University planea
hacer lo mismo respecto a determinadas áreas de Nueva York: ambas iniciativas han desencadenado movimientos vecinales de
resistencia. El derecho a la ciudad, tal como se halla hoy constituido, se encuentra demasiado restringido, en la mayoría de los
casos, a una reducida elite política y económica que se halla en condiciones cada vez más de conformar las ciudades de acuerdo
con sus propios deseos.

Cada mes de enero, la Oficina del Interventor del Estado de Nueva York publica una estimación del total de bonos pagados por Wall
Street durante los anteriores 12 meses. En 2007, un año desastroso para los mercados financieros desde todo punto de vista, esos
bonos ascendieron a 33,2 millardos de dólares, tan sólo un 2 por 100 menos que el año anterior. A
mediados del verano de 2007, la Reserva Federal y el Banco Central Europeo inyectaron miles de millones de dólares en créditos a
corto plazo en el sistema financiero para asegurar su estabilidad, y posteriormente la Fed redujo espectacularmente los tipos de
interés e inyectó enormes cantidades de liquidez cada vez que el índice Dow amenazaba con caer estrepitosamente. Entretanto,
aproximadamente dos millones de personas han perdido o están a punto de perder sus viviendas por la ejecución de sus hipotecas.
Muchos barrios urbanos e incluso comunidades periurbanas en Estados Unidos han sido clausuradas y vandalizadas, destrozadas
por las prácticas prestamistas de las instituciones financieras. Esta población no percibe bonos. En realidad, dado que la ejecución
hipotecaria significa la condonación de la deuda, lo cual es considerado como una renta en Estados Unidos, muchos de los
expulsados se enfrentan a una importante carga tributaria en concepto de impuesto sobre la renta por un dinero que nunca estuvo
en sus manos. Esta asimetría no puede entenderse sino como una contundente y masiva forma de confrontación de clase. Está
desencadenándose un «Katrina financiero», que amenaza, convenientemente para los promotores inmobiliarios, con barrer barrios
enteros de renta baja ubicados en terrenos potencialmente de alto valor situados en el centro de las ciudades, de forma mucho más
eficaz y rápida de lo que sería posible con los expedientes de expropiación forzosa.

Durante el siglo XXI veremos surgir una oposición coherente a estas pautas de comportamiento. Existen ya, por supuesto, una gran
cantidad de diversos movimientos sociales que se concentran en la cuestión urbana, desde India y Brasil hasta China, España,
Argentina y Estados Unidos. En 2001, se insertó un anexo sobre la ciudad en la Constitución brasileña, fruto de la presión ejercida
por los movimientos sociales, que reconocía el derecho colectivo a la ciudad [18]. En Estados Unidos, se ha sugerido que los 700
millardos de dólares destinados a rescatar a las instituciones financieras se entreguen a un Banco para la Reconstrucción que
serviría para evitar las ejecuciones hipotecarias y financiar proyectos para revitalizar los barrios y renovar las infraestructuras
municipales. La crisis urbana que está afectando a millones de personas se pondría por delante de las necesidades de los grandes
inversores y financieros. Desafortunadamente, los movimientos sociales no son lo suficientemente fuertes como para imponer esta
solución, ni han convergido todavía en torno al objetivo singular de obtener un mayor control sobre los usos del excedente y mucho
menos sobre las condiciones de su producción.

25
En este momento de la historia, ésta tiene que ser una lucha global, predominantemente con el capital financiero, ya que ésta es la
escala a la que trabajan en la actualidad los procesos de urbanización. Obviamente, la tarea política de organizar tal confrontación
es difícil, cuando no apabullante. Sin embargo, las oportunidades se multiplican, porque, como demuestra este breve texto, las crisis
estallan recurrentemente en torno a la urbanización tanto local como globalmente, y las metrópolis se han convertido en el punto de
colisión masiva –¿nos atrevemos a llamarlo lucha de clases?– de la acumulación por desposesión impuesta sobre los menos
pudientes y del impulso promotor que pretende colonizar espacio
para los ricos.

Dar un paso adelante para unificar estas luchas supone adoptar el derecho a la ciudad como eslogan práctico e ideal político,
porque el mismo plantea la cuestión de quién domina la conexión necesaria entre urbanización y producción y utilización del
excedente. La democratización de ese derecho y la construcción de un amplio movimiento social para hacerlo realidad son
imprescindibles si los desposeídos han de recuperar el control sobre la ciudad del que durante tanto tiempo han estado privados, y
desean instituir nuevos modos de urbanización. Lefebvre tenía razón en insistir en que la revolución tiene que ser urbana, en el más
amplio sentido de este término, o no será.

notas:

1 Robert Park, On Social Control and Collective Behavior, Chicago, 1967.


2 Para un examen exhaustivo, véase David Harvey, Paris, Capital of Modernity, Nueva York, 2003 [ed. cast.: París, capital de la modernidad,
Madrid, Akal, 2008].
3 Robert Moses, «What Happened to Haussmann?», Architectural Forum LXXVII (julio de 1942), pp. 57-66.
4 Henri Lefebvre, The Urban Revolution, Minneapolis, 2003, y Writings on Cities, Oxford, 1996.
5 William Tabb, The Long Default. New York City and the Urban Fiscal Crisis, Nueva York, 1982.
6 Richard Bookstaber, A Demon of Our Own Design. Markets, Hedge Funds and the Perils of Financial Innovation, Hoboken (NJ), 2007.
7 Hilde Nafstad et al., «Ideology and Power. The Influence of Current Neoliberalism in Society»,Journal of Community and Applied Social
Psychology XVII, 4 (julio de 2007), pp. 313-327.
8 Mike Davis, City of Quartz. Excavating the Future in Los Angeles, Londres y Nueva York, 1990 [ed. cast.: Ciudad de cuarzo, Madrid, Lengua de
Trapo, 2003].
9 Marcello Balbo, «Urban Planning and the Fragmented City of Developing Countries», Third World Planning Review XV, 1 (1993), pp. 23-35.
10 Friedrich Engels, The Housing Question, Nueva York, 1935, pp. 74-77.
11 Ibid., p. 23
12 D. Harvey, The New Imperialism, Oxford, 2003, capítulo 4 [ed. cast.: El nuevo imperialismo, Madrid, Akal, 2004].
13 Usha Ramanathan, «Illegality and the Urban Poor», Economic and Political Weekly, 22 de julio de 2006; Rakesh Shukla, «Rights of the Poor. An
Overview of Supreme Court», Economic and Political Weekly, 2 de septiembre de 2006.
14 Kelo versus New London, CT, decidió el 23 de junio de 2005 en el caso 545 US 469 (2005).
15 Gran parte de estas ideas provienen del libro de Hernando de Soto, The Mystery of Capi-tal. Why Capitalism Triumphs in the West and Fails
Everywhere Else, Nueva York, 2000; véase también el análisis crítico de Timothy Mitchell, «The Work of Economics. How a Discipline Makes its
World», Archives Européennes de Sociologie XLVI, 2 (agosto de 2005), pp. 297-320.
16 Mike Davis, Planet of Slums, Londres y Nueva, 2006 [ed. cast.: Planeta de ciudades miseria, Madrid, Foca, 2007].
17 OECD Factbook 2008. Economic, Environmental and Social Statistics, París, 2008, p. 225.
18 Edésio Fernandes, «Constructing the “Right to the City” in Brazil», Social and Legal Studies XVI, 2 (junio de 2007), pp. 201-219.

26
cuatro
tap
anteproyecto

object to field
stan allen

The term 'field conditions' is at once a reassertion of architecture's El término "condición de campo" es al mismo tiempo una reafirmación
contextual assignment and at the same time a proposal to comply with de los cometidos de la arquitectura contextual y una propuesta para
such obligations.1 Field conditions moves from the one toward the poder cumplir su programa.(1)Las condiciones de campo se mueven
many: from individuals to collectives, from objects to fields. The term de la unidad a la multiplicidad, de individuos a colectivos, de objetos a
itself plays on a double meaning. Architects work not only in the office campos. El término en sí mismo juega con un doble significado. Los
or studio (in the laboratory) but in the field: on site, in contact with the arquitectos no sólo trabajan en la oficina o estudio (en el laboratorio),
fabric of architecture. „Field survey", „field office", „verify in field": „field sino también en el campo: en el sitio, en contacto con la fábrica de
conditions" here implies acceptance of the real in all its messiness and arquitectura. "Sondeo de campo", "oficina de campo", "verificar en
unpredictability. It opens architecture to material improvisation on site. campo", "condiciones de campo" implica aceptación de lo real con toda
Field conditions treats constraints as opportunity and moves away from su confusión e imprevisibilidad. Abre la arquitectura a la improvisación
a Modernist ethic - and aesthetics - of transgression. Working with and en el lugar. Las condiciones de campo consideran las restricciones
not against the site, something new is produced by registering the como oportunidades y van más allá de la ética modernista -y estéticas-
complexity of the given. de trasgresión. Al trabajar con y no contra el sitio provoca algo nuevo
al registrar la complejidad de lo dado.
A distinct but related set of meanings begins with an intuition of a shift
from object to field in recent theoretical and visual practices (figs 1 and Un conjunto heterogéneo -pero relacionado- de significados emerge en
2). In its most complex manifestation, this concept refers to recientes prácticas teóricas y visuales (figs. 1 y 2) con la intuición del
mathematical field theory, to non-linear dynamics and computer desplazamiento del objeto al campo. En su manifestación más
simulations of evolutionary change. It parallels a shift in recent compleja, este concepto refiere a la teoría del campo matemático,
technologies from analogue object to digital field (fig 3). It pays close rechazando las dinámicas lineales y las simulaciones de computadora
attention to precedents in visual art, from the abstract painting of Piet de evolución del cambio. Este concepto pone mucha atención en
Mondrian in the 1920s to Minimalist and Post-Minimalist sculpture of precedentes del arte visual, de la pintura abstracta de Mondrian en los
the 60s. Post-war composers, as they moved away from the strictures años '20 a la escultura minimalista y post-minimalista de los '60. Los
of Serialism, employed concepts such as the „clouds" of sound, or in compositores de post-guerra, en la medida que se alejaron de las
the case of Yannis Xenakis, „statistical" music where complex estructuras del serialismo, emplearon conceptos tales como "nubes" de
acoustical events cannot be broken down into their constituent sonido, o en el caso de Yannis Xenakis, música "estadística", donde
elements.2 The infrastructural elements of the modern city, by their acontecimientos acústicos complejos no pueden ser desglosados en
nature linked together in open-ended networks, offer another example los elementos que los constituyen. (2) Los elementos de infraestructura
of field conditions in the urban context. Finally, a complete examination de la ciudad moderna, enlazados por su naturaleza en redes
of the implications of field conditions in architecture would necessarily abiertas/cerradas, ofrecen otro ejemplo de las condiciones de campo
reflect the complex and dynamic behaviours of architecture's users and en el contexto urbano. Finalmente, un examen exhaustivo de las
speculate on new methodologies to model programme and space. implicancias de las condiciones de campo en la arquitectura reflejaría
necesariamente los comportamientos complejos y dinámicos de
quienes la usan y especularía en las nuevas metodologías para
To generalise from these examples, we might suggest that a field modelar programa y espacio.
condition would be any formal or spatial matrix capable of unifying
diverse elements while respecting the identity of each. Field
configurations are loosely bounded aggregates characterised by Para generalizar desde estos ejemplos, deberíamos sugerir que una
porosity and local interconnectivity. The internal regulations of the parts condición de campo sería cualquier matriz formal o espacial con la
are decisive; overall shape and extent are highly fluid. Field conditions capacidad de unificar distintos elementos siempre que respete la
are bottom-up phenomena: defined not by overarching geometrical identidad de cada uno. Las configuraciones de campo son conjuntos
schemas but by intricate local connections. Form matters, but not so ligeramente vinculados caracterizados por su porosidad y conexión
much the forms of things as the forms between things. local. Las regulaciones internas de las partes son decisivas, sobre todo
si su forma tiene alta fluidez. Condiciones de campo es un fenómeno

27
Field conditions cannot claim (nor does it intend to claim) to produce a de abajo hacia arriba: no se define por esquemas geométricos
systematic theory of architectural form or composition. The theoretical dominantes sino por conexiones locales intrincadas. La forma importa,
model proposed here anticipates its own irrelevance in the face of the pero no tanto las formas de las cosas como las formas entre las cosas.
realities of practice. These are working concepts, derived from Las condiciones de campo no pueden reivindicar (ni lo intentan)
experimentation in contact with the real. Field conditions intentionally producir una teoría sistemática de forma o composición arquitectónica.
mixes high theory with low practices. The assumption here is that El modelo teórico propuesto aquí anticipa su propia irrelevancia ante
architectural theory does not arise in a vacuum, but always in a las realidades de la práctica. Estos son conceptos de trabajo,
complex dialogue with practical work. derivados de la experiencia en contacto con la realidad. Las
The article is structured like a catalogue, with one thing after another. condiciones de campo mezclan intencionadamente alta teoría con
Part 1 is broadly concerned with issues of construction - the definition prácticas menores. El supuesto es que la teoría arquitectónica no se
of the field, piece by piece - while Part 2 will treat questions of convierta en algo vacío sino que siempre establezca un diálogo
composition and the urban context. complejo con el trabajo práctico.

part 1 I field conditions : architecture and El artículo está estructurado como un catálogo, con una cosa después
de la otra. La Parte 1 se dedica ampliamente a los temas de
urbanism construcción -la definición del campo, pieza por pieza- mientras que la
Geometric versus algebraic combination Parte 2 analizará temas de composición y de contexto urbano.

The diverse elements of classical architecture are organised into


coherent wholes by means of geometric systems of proportion.
Although ratios can be expressed numerically, the relationships Parte 1 condicion de campo: arquitectura
intended are fundamentally geometric. Alberti's well-known axiom that y urbanismo
"Beauty is the consonance of the parts such that nothing can be added
or taken away" expresses an ideal of organic geometric unity. The Geometría vs. combinación algebraica
conventions of classical architecture dictate not only the proportions of Los diferentes elementos de la arquitectura clásica están organizados
individual elements but also the relationship between individual dentro de totalidades coherentes por medio de sistemas geométricos
elements. Parts form ensembles which in turn form larger wholes. proporcionales. Aunque las proporciones pueden expresarse
Precise rules of axiality, symmetry or formal sequence govern the numéricamente, las relaciones previstas son fundamentalmente
organisation of the whole. Classical architecture displays a wide geométricas. El axioma muy conocido de Alberti: "La belleza es una
variation on these rules, but the principle of hierarchical distribution of armonía de las partes donde nada puede ser agregado o quitado",
parts to whole is constant. Individual elements are maintained in expresa un ideal de unidad orgánica geométrica. Las convenciones de
hierarchical order by extensive3 geometric relationships to preserve la arquitectura clásica se refieren no solamente a las proporciones de
overall unity. los elementos individuales, sino también a las relaciones entre esos
The mosque at Córdoba, Spain, under construction over a span of elementos. Las partes forman conjuntos que a su vez forman
nearly eight centuries, offers an instructive counter example.4 The totalidades mayores. Reglas precisas de axialidad, simetría o
type-form of the mosque had been clearly established: an enclosed secuencia formal gobiernan la organización de la totalidad. La
forecourt flanked by the minaret tower, opening on to a covered space arquitectura clásica despliega sobre esas reglas una gran variación,
for worship (perhaps derived from market structures, or adapted from pero el principio jerárquico de distribución de partes hacia la totalidad
the Roman basilica). The enclosure is loosely oriented toward the es una constante. Los elementos individuales son mantenidos en
quibla, a continuous prayer wall marked by a small niche (mihrab). In orden jerárquico por medio de relaciones geométricas amplias (3) con
the first stage of the Córdoba Mosque the typological precedent was el fin de preservar la unidad.
respected, resulting in a simple structure of ten parallel walls La mezquita de Córdoba (España), que fuera construida durante un
perpendicular to the quibla, supported on columns and pierced by período de casi ocho siglos, nos ofrece un ejemplo contrario (4). El
arches, defining a covered space of equal dimension to the open court. formato de la mezquita ha sido claramente establecido: un patio
The directionality of the arched walls operates in counterpoint to the delantero cerrado, flanqueado por la torre de minarete, que se abre a
framed vistas across the grain of the space. The columns are located un espacio cubierto para el culto (que tal vez derive de estructuras de
at the intersection of these two vectors, forming an undifferentiated but mercados o de la basílica romana). El cerramiento está ligeramente
highly charged field. Complex parallax effects are generated as the orientado hacia la quibla, un muro de oraciones con un pequeño nicho
viewer moves throughout the field. The entire west wall is open to the (mihrab). En una primera etapa de la mezquita la tipología precedente
courtyard, so that once within the precinct of the mosque, there is no fue respetada, lo que resultó en una estructura simple de diez muros
single entrance. The axial, processional space of the Christian church paralelos perpendiculares a la quibla, sostenidos por columnas y
gives way to a non-directional space, a serial order of „one thing after penetrados por arcos, definiendo así un espacio cubierto de
another".5 dimensiones equivalentes al patio abierto. La dirección de los muros
The mosque was subsequently enlarged in four stages (fig 4). con arcadas, oficia como contrapunto del panorama veteado del
Significantly, with each addition, the fabric of the original remained espacio. Las columnas están situadas en la intersección de esos dos
substantially intact. The typological structure was reiterated on a larger vectores, configurando un campo indiferenciado pero muy cargado.
scale, while the local relationships remained fixed. By comparison with Cuando el visitante se mueve a través del campo se generan efectos
Western classical architecture, it is possible to identify contrasting complejos (parallax). El muro oeste está abierto al patio, por lo tanto,
principles of combination: one algebraic, working with numerical units una vez dentro de la mezquita no existe ninguna entrada. El axial, el
combined one after another, and the other geometric, working with espacio procesional de la iglesia cristiana, conduce a un lugar sin
figures (lines, planes, solids) organised in space to form larger dirección, de orden serial, de una cosa atrás de la otra (5).

28
Wholes.6 In Córdoba, for example, independent elements are La mezquita fue ampliada en etapas (fig. 4). Significativamente, luego
combined additively to form an indeterminate whole. The relations of de cada agregado, el molde original permaneció substancialmente
part to part are identical in the first and last versions constructed. The intacto. La tipología de la estructura fue reiterada en una escala más
local syntax is fixed, but there is no overarching geometric scaffolding. amplia mientras las relaciones locales permanecían intactas. Si
Parts are not fragments of wholes, but simply parts. Unlike the idea of comparamos con la arquitectura clásica occidental, es posible
closed unity enforced in Western classical architecture, the structure identificar principios de combinación opuestos: uno algebraico, que
can be added to without substantial morphological transformation. trabaja con unidades numéricas combinadas una detrás de la otra, y
Field configurations are inherently expandable; the possibility of otro geométrico, que trabaja con figuras (líneas, planos, sólidos),
incremental growth is anticipated in the mathematical relations of the organizados en el espacio para formar grandes totalidades. (6) En
parts. It could be argued that there are numerous examples of Western Córdoba, por ejemplo, elementos independientes han sido agregados
classical buildings that have grown incrementally and have been y combinados para configurar una totalidad indeterminada. Las
transformed over time. St Peter's in Rome, for example, has an equally relaciones de parte a parte son idénticas tanto en las primeras como
long history of construction and rebuilding. But there is a significant en las últimas versiones construidas. La sintaxis local está
difference. At St Peter's ,additions are morphological transformations, determinada, pero no hay una geometría dominante y totalizante. Las
elaborating and extending a basic geometric schema. This contrasts partes no son fragmentos una totalidad, sino simplemente partes. A
with the mosque at Córdoba where each stage replicates and diferencia de la idea de unidad cerrada perteneciente a la arquitectura
preserves the previous stage of construction by the addition of clásica occidental, aquí es posible agregar estructura sin una
repeated parts. And at Córdoba, even in later stages when the mosque transformación morfológica sustancial. Las configuraciones de campo
was consecrated as a Christian church, and a Gothic cathedral son expandibles en forma inherente; la posibilidad de crecimiento está
inserted into the continuous and undifferentiated fabric of the mosque, anticipada en las relaciones matemáticas de las partes. Se podría
the existing spatial order resists recentring. As Rafael Moneo has argumentar que en Occidentes existen numerosos ejemplos de
observed: ! „l do not believe that the Córdoba Mosque has been edificios clásicos que han sido transformados a través del tiempo. San
destroyed by all these modifications. Rather, I think that the fact that Pedro en Roma, por ejemplo, tiene una larga historia de construcción y
the mosque continues to be itself in face of all these interventions is a reconstrucción. Pero existe una diferencia significativa. En San Pedro,
tribute to its own integrity."7 los agregados son transformaciones morfológicas que re-elaboran y
To extend briefly the argument to a more recent example, Le amplían un esquema geométrico básico. Esto contrasta con la
Corbusier's Venice Hospital (fig 5) employs a plan syntax of repeated mezquita de Córdoba, donde cada espacio reproduce y preserva el
parts, establishing multiple links at its periphery with the city fabric. The anterior, por medio de la construcción de partes repetidas. En
project develops horizontally, through a logic of accumulation. The Córdoba, aun en su último período, cuando la mezquita fue destinada
basic block, the 'care unit' formed of 28 beds, is repeated throughout. a funcionar como una iglesia cristiana y le fuera incrustada una
Consulting rooms occupy open circulation spaces in the covered space catedral gótica dentro de su continua e indiferenciada estructura, el
between. The rotating placement of blocks establishes connections ordenamiento espacial se resiste a recentrarse. Como ha observado
and pathways from ward to ward, while the displacement of the blocks Rafael Moreno: "No creo que la mezquita de Córdoba haya sido
opens up voids within the horizontal field of the hospital. There is no destruida con esas modificaciones. En cambio, considero que si la
single focus, no unifying geometric schema. As at Córdoba, the overall mezquita continúa siendo ella misma a pesar de todas esas
form is an elaboration of conditions established locally. intervenciones ello es un tributo a su propia integridad" (7)

walking out of cubism Para ampliar brevemente el argumento, el Hospital Venice de Le


Corbusier (fig. 5) emplea una sintaxis de partes reiteradas,
Barnett Newman, it has been said, used a sequence of plane/ line/ estableciendo en su periferia múltiples enlaces con la estructura de la
plane to „walk out of the imperatives of Cubist space and close the ciudad. El proyecto se desarrolla horizontalmente, a través de una
door behind him".8 The story of post-war American painting and lógica de acumulación. El block básico -la unidad de cuidado- que
sculpture is in large part a story of this effort to move beyond the limits contiene 28 camas, se repite en todas partes. Las habitaciones de
of Cubist compositional syntax. Sculptors in particular, working in the consulta ocupan espacios de circulación abierta en el espacio cubierto
shadow of the achievements of Abstract Expressionist painting, felt entre ellas. El emplazamiento rotativo de los blocks determina
that a complex language of faceted planes and figural fragments conexiones y pasajes de sala a sala, mientras que el desplazamiento
inherited from pre-war European artists was inadequate to their de los blocks abre huecos dentro del campo horizontal del hospital. No
ambitions. It was out of this sense of the exhaustion of available hay un único foco ni un esquema geométrico totalizador. Como en
compositional norms that Minimalism emerged in the mid-60s. Robert Córdoba, la totalidad de la forma es el resultado de condiciones
Morris' refusal of composition in favour of process, or Donald Judd's establecidas localmente.
critique of composition by parts, evidenced this effort to produce a new
model for working, a model that might have some of the inevitability
that characterised the painting of the previous few decades. abandonando el cubismo
Se ha dicho que Barnett Newman usaba una secuencia de plano/línea
Minimalist work of the 60s and 70s sought to empty the work of para "escapar de los imperativos del espacio cubista y cerrar la puerta
art of its figurative or decorative character in order to foreground tras de él" (8) La historia de la pintura y escultura norteamericana de la
its architectural condition. The construction of meaning was post-guerra es en gran parte la historia de un esfuerzo para ir más allá
de los límites de la composición y la sintaxis del cubismo. En particular
displaced from the object itself to the spatial field between the los escultores, trabajando bajo la sombra de los logros de la pintura
viewer and the object: a fluid zone of perceptual interference, expresionista abstracta, sintieron que un lenguaje complejo de planos
populated by moving bodies. Such artists as Carl Andre, Dan facetados y fragmentos figurativos, heredado de los artistas europeos

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Flavin, Robert Morris or Donald Judd sought to go beyond formal or de la pre-guerra, era inadecuado para lograr sus objetivos. Normas de
compositional variation, to engage the space of the gallery and the composición como el minimalismo surgido a mitad de la década de los
body of the viewer. In written statements, both Judd and Morris '60 fueron resultado del agotamiento de las normas disponibles hasta
express their scepticism toward European (that is, Cubist) entonces. El rechazo de Robert Morris hacia la composición
compositional norms and place their work instead in the context of favoreciendo el proceso, o la crítica de Donald Judd hacia la
recent American examples: „European art since Cubism has been a composición por partes evidencian un esfuerzo por producir un modelo
history of permutating relationships around the general premise that nuevo de trabajo, un modelo que podría contener algo de la
relationships should remain critical. American art has developed by inevitabilidad que caracterizó la pintura de unas décadas anteriores.
uncovering successive premises for making itself.'9 Both single out Los trabajos minimalistas de los '60 y '70 buscaron vaciar el trabajo
Jackson Pollock for his decisive contribution. Judd notes that 'Most artístico de su carácter figurativo o decorativo, prevaleciendo su
sculpture is made part by part, by addition, composed ..." For Judd, condición arquitectónica. La construcción de significado fue
what is required is consolidation: „In the new work the shape, image, desplazada del objeto en sí mismo hacia el campo espacial entre el
color and surface are single and not partial and scattered. There aren't observador y el objeto: una zona fluida de interferencia de
any neutral or moderate areas or parts, any connections or transitional percepciones, poblada de cuerpos que se mueven. Tales artistas,
areas."10 The aspirations of Minimalist work are therefore toward como Carl Andre, Dan Flavin, Robert Morris o Donald Judd decidieron
unitary forms, direct use of industrial materials and simple ir más allá de la variación formal o de composición, para comprometer
combinations: a „pre-executive" clarity of intellectual and material el espacio de la galería y el cuerpo del observador. En declaraciones
terms. Minimalism's decisive tectonic shift activated the viewing space escritas, tanto Judd como Morris expresan su excepticismo acerca de
and reasserted the work of art's condition as „specific object". las normas de composición europeas (cubistas) y ubican sus trabajos
Yet if Minimalism represents a significant advance over pre-war en el contexto de ejemplos recientes de EEUU: "Desde el cubismo, el
compositional principles, it remains indebted to certain essentialising arte europeo ha sido una historia de relaciones cambiantes alrededor
models in its reductive formal language and use of materials. Its de la premisa general de que esas relaciones permanecerán exactas.
objects are clearly delimited and solidly constructed. (Donald Judd's El arte norteamericano se ha desarrollado a través de sucesivas y
later architectural constructions confirm this essential tectonic abiertas premisas de hacerse a sí mismo". (9) Para Judd, lo que se
conservatism.) Minimalism develops in sequences, but rarely in fields. requiere es consolidarse: "En el nuevo trabajo, la forma, la imagen, el
It is for this reason that the work of artists usually designated „Post- color y la superficie son únicos, no son parciales ni dispersos. No hay
Minimal" is of particular interest here.11 In contrast to Andre or Judd, áreas o partes neutrales o moderadas, ni conexiones o áreas de
the work of such artists as Bruce Nauman, Linda Benglis, Keith transición". (10) Las aspiraciones del trabajo minimalista conducen
Sonnier, Alan Saret, Eva Hesse or Barry Le Va is materially diverse hacia formas unitarias, el uso directo de materiales industriales y
and improper. Words, movement, technology, fluid and perishable combinaciones simples: una claridad "pre-ejecutiva" de los términos
materials, representations of the body - all of these „extrinsic" contents materiales e intelectuales. El decisivo cambio minimalista tectónico
that Minimalism had repressed - return in modified form. Post- activó el espacio del observador y reactivó la condición del trabajo
Minimalism is marked by hesitation and ontological doubt where the artístico como un "objeto específico".
Minimalists are definitive; it is painterly and informal where the Aun significando un avance sobre los principios de composición de la
Minimalists are restrained; it remains committed to tangible things and pre-guerra, en su lenguaje formal reductivo y en el uso de materiales,
visibility where the Minimalists are concerned with underlying el minimalismo está en deuda con ciertos modelos básicos. Sus
structures and ideas. These works, from the wire constructions of Alan objetos son delimitados claramente y construidos sólidamente. (Las
Saret, to the pourings of Linda Benglis, to the 'non-sites' of Robert construcciones arquitectónicas posteriores de Donald Judd confirman
Smithson introduce chance and contingency into the work of art. They ese conservadurismo tectónico básico). El minimalismo se desarrolla
shift even more radically the perception of the work, from discrete en secuencias, pero raramente en campos. Es por esta razón que aquí
object to a record of the process of its making, in the field. adquiere particular interés el trabajo de artistas generalmente
The artist who moves most decisively in the direction of what I am mencionados "Post-Minimal". (11) Contrastando con Andre o Judd, el
calling field conditions is Barry Le Va (fig 6). Partly trained as an trabajo de artistas como Bruce Nauman, Linda Benglis, Keith Sonnier,
architect, Le Va is acutely aware of the spatial field implicated by the Alan Saret, Eva Hesse o Barry Le Va es materialmente diverso e
sculptural work. Beginning in the mid-60s, he began making pieces, impropio. Palabras, movimiento, tecnología, materiales fluidos y
some planned in advance, others incorporating random process, that perecederos, representaciones del cuerpo -todos esos contenidos
thoroughly dissolve the idea of „sculpture" as a delimited entity, an "extrínsecos" que el minimalismo había reprimido- regresan
object distinct from the field it occupies. He called these works formalmente modificados. El Post-minimalismo está definido por la
distributions: „... whether random or orderly a distribution is defined as indecisión y la duda ontológica mientras los minimalistas se preocupan
relationships of points and configurations to each other or por las ideas y las estructuras subyacentes. Estos trabajos, desde las
concomitantly „sequences of events".12 As with the other construcciones de alambre de Alan Saret, los vertidos de Linda
examples described above, local relationships are more Benglis, o los "no-sitios" de Robert Smithson, introducen la casualidad
important than overall form. The generation of form through y la contingencia en el trabajo artístico. Ellos desplazaron, aun más
'sequences of events' is somewhat related to the generative radicalmente, la percepción del trabajo desde el objeto discreto hacia
el registro del proceso de su realización, en el campo.
rules for flock behaviour or algebraic combination. Le Va signals
a key compositional principle emerging out of Post-Minimalism, Quien se mueve más decisivamente en la dirección de lo que llamo
one that is linked to previous examples: the displacement of condición de campo es Barry Le Va (fig. 6). Parcialmente formado
como arquitecto, Le Va es claramente conciente del campo espacial
control to a series of intricate local rules for combination, or as
implicado por la escultura. A mediados de los '60 comenzó a realizar
„sequences of events" and not as an overall formal piezas, algunas planeadas anticipadamente y en otras incorporando
configuration. And in the case of Post-Minimalism, this is often procesos aleatorios, que minuciosamente disuelven la idea de

30
And in the case of Post-Minimalism, this is often related to material “escultura" como una entidad delimitada, un objeto diferenciado del
choices. When working with materials such as wire mesh (Alan Saret), campo que ocupa. LLamó a esos trabajos distribuciones: "... tanto
poured latex (Linda Benglis) or blown flour (Le Va), the artist simply aleatoria u ordenadamente, una distribución es definida como las
cannot exercise a precise formal control over the material. Instead, the relaciones de puntos y configuraciones entre cada uno o
artist establishes the conditions within which the material will be concomitantemente, secuencias de eventos". (12) Tal como los
deployed, and then proceeds to direct its flows. In the case of Le Va's ejemplos anteriores, las relaciones locales son más importantes que la
felt pieces, it is a matter of relating fold to fold, line to line. In later forma del todo. La generación de forma a través de "secuencias de
works from the 60s, the materials themselves become so ephemeral eventos" está un tanto relacionada con las reglas creativas para el
as to function as a delicate registration of process and change. comportamiento de grupo (flock behaviour) o con la lógica de
combinaciones algebraicas. Le Va señala un principio de composición
clave que emerge del post-minimalismo, que a su vez está asociado a
field constructions ejemplos previos: el desplazamiento del control hacia una serie de
The common element in these two examples - one from within the reglas locales de combinaciones intrincadas o como "secuencias de
culture of architecture, and one from outside - is a shift in emphasis: eventos", y no como una configuración formal única., que en el caso
from abstract formal description towards a close attention to the del post-minimalismo, generalmente está relacionado con la elección
operations of making. Questions of meaning are secondary. In the de materiales. Al trabajar con materiales tales como un enredo de
case of the Córdoba Mosque, the architects gave only rudimentary alambres (Alan Saret), vertido de latex (Linda Benglis) o harina (blown
consideration to the exterior form (dictated by and large by the flour) (Le Va), el artista no puede ejercer un control formal preciso
constraints of site), but paid close attention to the measure and interval sobre el material. En su lugar, establece las condiciones donde el
of the individual elements. Similarly, a contemporary architect such as material será desplegado y entonces procede a dirigir sus flujos. En el
Renzo Piano works from the individual joint outwards (fig 7). For Piano, caso de las piezas de fieltro de Le Va, es necesario relacionar pliegue
the joint is not an occasion to articulate the intersection of two a pliegue, línea a línea. En trabajos posteriores a los '60 los materiales
materials (as is the case, for example, with Carlo Scarpa), but is se convierten en algo tan efímero como para funcionar como un
instead a locus of an intensive design energy that proceeds outwards delicado registro del proceso y del cambio.
to condition the form of the whole.
What is proposed here is not simply a return to the mystification of campo de construcción
construction and the phenomenology of materials. Rather, it is an
attempt to go beyond the conventional opposition of construction and El elemento común en estos dos ejemplos -uno desde la cultura de la
form-making. By looking for a precise and repeatable link between the arquitectura y otro desde fuera- es el desplazamiento del énfasis: de la
operations of construction and the overall form produced by the descripción abstracta formal hacia una cerrada atención sobre las
aggregation of those parts, it becomes possible to begin to bridge the operaciones de la producción. Las preguntas sobre el significado son
gap between building and form-making. In Studies in Tectonic Culture, secundarias. En el caso de la mezquita de Córdoba, los arquitectos
Kenneth Frampton has pointed to the split between „the solamente proporcionaron consideraciones rudimentarias acerca de la
representational scene and the ontological construct", expressing a forma exterior (determinada por las restricciones del sitio), pero
clear preference for the latter.13 What is proposed here follows dedicaron mucha atención a las medidas e intervalos de elementos
Frampton in its refusal of representation. The field is a material individuales. De la misma forma, un arquitecto contemporáneo como
condition, not a discursive practice. But I also want to suggest that a Renzo Piano trabaja desde el empalme individual hacia afuera. (Fig. 7)
return to the ontology of construction - solidly grounded in conventional Para Piano, el conjunto no es una ocasión para articular la intersección
tectonics - is not the only alternative to a scenographic or semiotic de dos materiales (como es el caso, por ejemplo, de Carlo Scarpa)
architecture. By remaining attentive to the detailed conditions that pero es en cambio un lugar geométrico (locus) de intensa energía que
determine the connection of one part to another, by understanding continúa fuera para condicionar la forma de la totalidad.
construction as a 'sequence of events', it becomes possible to imagine Lo que se propone aquí no es simplemente un regreso a la
an architecture that can respond fluidly and sensitively to local mistificación de la construcción y la fenomenología de los materiales.
difference while maintaining overall stability. Más bien es un intento de ir más allá de la oposición convencional
entre la construcción y la forma de producción. Buscando un enlace
preciso y respetable entre las operaciones de construcción y la
part 2 I distributions and combinations : totalidad de la forma que resulta del agregado de tales partes, resulta
posible comenzar a tender un puente sobre la brecha existente entre
towards a logistics of context
edificar y la forma de fabricación (form-making). En estudios sobre la
distributions cultura tectónica, Kenneth Frampton ha puntualizado sobre la
separación entre “la escena representada y la construcción
Field conditions' is opposed to conventional Modernist modes of ontológica”, manifestando una clara preferencia por lo último. (13). Lo
composition as much as it is to classical rules of composition. My que se propone aquí sigue a Frampton en su rechazo de
thesis here is that in Modernist composition by fragments - montage representación. El campo es una condición material, no una práctica
strategies that work to make connections between separate elements discursiva. Pero también deseo sugerir que un retorno a la ontología
brought together at the site of composition - the classical assumption de la construcción basada sólidamente en tectonicas convencionales-
that composition is concerned with the arrangement of, and no es la única alternartiva de una arquitectura semiótica. Al
connections among, those parts persists. As Robert Morris has put it, permanecer atentos a las condiciones de los detalles se determina la
'European art since Cubism has been a history of permutating conexión de una parte con otra, al entender la construcción como una
relationships around the general premise that relationships should “secuencia de eventos” es posible imaginar una arquitectura que
remain critical'14 While painting and sculpture have gone beyond pueda responder fluida y sensiblemente a las diferencias locales al
Cubism, architecture, I would argue, is by and large still operating with mismo tiempo que mantiene la estabilidad de la totalidad.

31
Compositional principles borrowed from Cubism. The organisational parte 2 distribuciones y combinaciones:
principles proposed here suggest the new definitions of 'parts', and
alternative ways of conceiving the question of relationships among hacia una logística de contexto
those parts. What is required is a rethinking of some of the most distribuciones
familiar elements of architectural composition. Field conditions is not a
claim for novelty, but rather an argument for the recuperation of an Las condiciones de campo se oponen a las formas de composición del
existing territory. modernismo convencional, sobre todo si se refieren a reglas clásicas
de composición. Mi tesis aquí es que en la composición modernista por
The american city: open field fragmentos -estrategias de montaje que funcionan para hacer
The rectilinear grid is one of architecture's oldest and most persistent conexiones entre elementos separados- y la suposición clásica de que
organising devices. From the outset, the grid supports a double la composición se relaciona con la disposición y las conexiones entre
valence: at once a simple and pragmatic means to partition territory or esas partes, persiste. Como manifestó Robert Morris, “Desde el
standardise elements and at the same time an emblem of universal cubismo el arte europeo ha sido una historia de relaciones cambiantes
geometries, with potential metaphysical or cosmological overtones. alrededor de la premisa general de que esas relaciones
Hence the Jeffersonian grid, projected unconditionally over the open permanecerían como fundamentales”. (14) Mientras la escultura y la
territories of the western United States (fig 8) is at once a symbol of pintura ha ido más allá del cubismo, yo argumentaría que la
democratic equality and an expedient means to manage vast arquitectura aun opera con principios de composición tomados del
quantities of territory; an attempt to impose measure on the cubismo. Los principios de organización propuestos aquí sugieren una
immeasurable. But as Colin Rowe has remarked in a different context, nueva definición de las “partes” y caminos alternativos para concebir el
in America, the pragmatic tends to win out over the universal. tema de las relaciones entre esas partes. Lo que se requiere es
Paraphrasing Rowe, we note that in this context, the grid is 'convincing repensar alguno de los elementos más familiares de la composición
as fact rather than as idea'.15 arquitectónica. Las condiciones de campo buscan la novedad, son más
bien un alegato para la recuperación de un territorio existente.
The earliest examples of gridded planning in the New World were
Jesuit colonies, defensive enclaves organised hierarchically around the la ciudad americana: campo abierto
cathedral square in imitation of Spanish models. In sharp contrast to La cuadrícula rectilínea es uno de los dispositivos arquitectónicos
these self-enclosed units, and equally distant from the figural concepts organizadores más antiguos y persistentes. Desde el comienzo la
of eighteenth-century town planning in Europe, the American cities of cuadrícula sostiene una doble valencia: de una forma simple y
the Midwest and the West are local intrications and perturbations to the pragmática significa la división del territorio o elementos
extended Jeffersonian grid (fig 9). The town is an elaboration of the standarizados, y al mismo tiempo un emblema geométrico universal
order applied to the farmland surrounding it. The grid is given as a con potencial de insinuaciones metafísicas o cosmológicas. Por lo
convenient starting point, not as an overarching ideal. Over time, the tanto, la cuadrícula Jeffersoniana, proyectada incondicionalmente
accumulation of small variations establishes a counter principle to the sobre los amplios territorios del oeste de Estados Unidos (fig. 8) es al
universal geometry of the grid. In these American cities, pragmatics mismo tiempo un símbolo de equidad democrática y un medio simple
unpacks the ideality of the grid, in the same way as the unthinkable para manejar grandes cantidades de territorio, un intento de imponer
extent of the grid itself nullifies its status as an ideal object. These medidas a lo inmedible. Pero, como en otro contexto ha señalado
cities are prototypical field conditions. Local variations of topography or Colin Rowe, en América el pragmatismo tiende a ganar sobre lo
history are smoothly accommodated within the overall order; borders universal. Parafraseando a Rowe, agregamos que en este contexto la
are loosely defined and porous. They are connected with one another cuadrícula es “convincente como un hecho mas que como una idea”.
in larger networks. Organisation and structure display almost infinite (15)
variety within patterns that are publicly legible and institutionally
manageable. Variation and repetition - individual and collective - Los ejemplos más tempranos de planificación en cuadrícula en el
nuevo mundo fueron las colonias jesuitas, enclaves defensivos
are held in delicate balance.
organizados jerárquicamente alrededor de la plaza de la catedral,
imitando el modelo español. Contrastando con esas unidades auto
encerradas, e igualmente distantes de los conceptos de planificación
thick surfaces: moirés, mats de ciudades en la Europa del siglo dieciocho, las ciudades de Estados
All grids are fields, but not all fields are grids. One of the Potentials of Unidos del Medio Oeste y del Oeste son localidades intrincadas y
the field is to redefine the relation between figure and field. Legal and perturbadoras de la cuadrícula Jeffersoniana. (Fig. 9) La ciudad es un
social theorist Roberto Mangabeira Unger has identified the traditional ordenamiento aplicado a las tierras de granjas que las rodean. La
attributes of religious expression in the architecture of iconoclastic cuadrícula es considerada un inicio conveniente, no un ideal general.
societies (that is to say, where explicit figuration is prohibited) 'The Con el tiempo, la acumulación de pequeñas variaciones determina un
basic architectural devices of this expression were and are: blankness, contra-principio frente a la geometría universal de la cuadrícula. En
vastness and pointing - pointing to a world outside this world...'16 The estas ciudades americanas el pragmatismo se desembaraza de la
conjunction, within this short catalogue, of concepts which might recall cuadrícula y al mismo tiempo la incompresible importancia de la
Modernist values of abstraction ('blankness') and even suggest a misma anula su estatus de objeto ideal. Estas ciudades son
universal, undifferentiated grid ('vastness') with the more figural prototípicas de las condiciones de campo. Las variaciones locales de
concept of 'pointing' implies something more complex than a simple la topografía o de su historia son ubicadas dentro del ordenamiento
opposition between the figurative and the abstract, between field and totalizador, las fronteras son porosas y debilmente definidas. Están
figure. conectadas entre sí en grandes redes. La organización y la estructura
However, if we think of the figure not as a demarcated object but as an despliegan una variedad casi infinita entre modelos que son
effect emerging from the field itself - as moments of intensity, as peaks públicamente legibles y manejables institucionalmente. La variación y
or valleys within a continuous field - then it might be possible to la repetición individual y colectiva- se mantienen en un balance
delicado.

32
imagine these two concepts as allied. While recognising a certain superficies espesas: moirés, mats
dependence on radical Modernist compositional models (Mondrian, for
Todas las cuadrículas son campos, pero no todos los campos son
example), it seems important to differentiate this proposition from
cuadrículas. Una de las potencialidades del campo es la redefinición
conventional Modernist compositional strategies. What is intended
de la relación entre figura y campo.
here is close attention to the production of difference at the local scale,
even while maintaining a relative indifference to the form of the whole. El teórico legal y social Roberto Mangabeira Unger ha identificado
Authentic and productive social differences, it is suggested, thrive at atributos tradicionales de expresión religiosa en la arquitectura de
the local level, and not in the form of large-scale semiotic messages. sociedades iconoclastas.: “Los dispositivos arquitectónicos básicos de
Hence the study of these field combinations would be a study of esta expresión fueron y son el vacío (blankness), la vastedad y el
models that work in the zone between figure and abstraction, models señalamiento señalamiento a un mundo externo a este mundo…” (16)
that refigure the conventional opposition between figure and Este conjunto de conceptos podrían recordar los valores de
abstraction, or systems of organisation capable of producing vortexes, abstracción del modernismo (vacío/ blankness) y aún sugerir un
peaks and protuberances out of individual elements that are damero universal e indiferenciado (vastedad) pero con el concepto
themselves regular or repetitive. más figurativo de “pointing” o señalamiento, implica algo más complejo
que una simple oposición entre lo figurativo y lo abstraco, entre campo
A moiré is a figural effect produced by the superposition of two regular
y figura.
fields (fig 10). Unexpected effects, exhibiting complex and apparently
irregular behaviours result from the combination of elements that are in Sin embargo, si pensamos en la figura no como un objeto demarcado
and of themselves repetitive and regular. But moiré effects are not sino como un efecto que emerge del mismo campo como momentos
random. They shift abruptly in scale, and repeat according to complex de intensidad, como picos o valles en un llano- entonces sería posible
mathematical rules. Moiré effects are often used to measure hidden imaginar a esos dos conceptos como aliados. Mientras se reconoce
stresses in continuous fields, or to map complex figural forms. In either una cierta dependencia en los modelos compuestos del modernismo
case there is an uncanny coexistence of a regular field and emergent radical (Mondrian, por ejemplo), parece importante diferenciar esta
figure. propuesta de las estrategias de composición del modernismo
convencional. Lo que se intenta aquí es prestar atención a la
In the architectural or urban context, the example of moiré effects begs
producción de diferencia a escala local, aunque se mantenga una
the question of the surface. The field is a horizontal phenomenon -
indiferencia relativa a la forma de la totalidad. Diferencias sociales
even a graphic one - and all of the examples described so far function
auténticas y productivas, se sugiere, son exitosas a nivel local y no en
in the plan dimension. Instead of refusing this characteristic, I would
la forma de mensajes semióticos de gran escala. Por lo tanto, el
suggest examining it more closely. Although certain post-modern cities
estudio de estas combinaciones de campo sería un estudio de
(Tokyo for example) might be characterised as fully three-dimensional
modelos que funcionan en la zona entre la figura y la abstracción,
fields, the prototypical cities of the late twentieth century are
modelos que refiguran la oposición convencional entre figura y
characterised by horizontal extension. What these field combinations
abstracción, o sistemas de organización capaces de producir
seems to promise in this context is a thickening and intensification of
torbellinos, picos y protuberancias fuera de los elementos individuales
experience at specified moments within the extended field of the city.
que son en sí mismos regulares y repetitivos.
The monuments of the past, including the skyscraper - a Modernist
monument to efficient production - stood out from the fabric of the city Un moiré es un efecto figurativo producido por la superposición de dos
as a privileged vertical moment. The new institutions of the city will campos regulares (fig. 10). Efectos inesperados, exhibición compleja y
perhaps occur at moments of intensity, linked to the wider network of comportamientos aparentemente irregulares son el resultado de
the urban field, and marked not by demarcating lines but by thickened combinaciones de elementos repetitivos y regulares. Pero los efectos
surfaces. moiré no son aleatorios. Surgen abruptamente en escala, y se repiten
de acuerdo a reglas matemáticas complejas. Los efectos moiré son
usados a menudo para medir presiones ocultas en campos continuos,
digital fields o para conectar formas (figural) complejas. En cualquier caso, existe
Analogue technologies of reproduction work through imprints, traces or una coexistencia misteriosa de un campo regular y una figura
transfers. The image may shift in scale or value (as in a negative), but emergente.
its iconic form is maintained throughout. Internal hierarchies are En el contexto arquitectónico o urbano, el ejemplo de los efectos del
preserved. A significant shift occurs when an image is converted to moiré nos lleva al asunto de la superficie. El campo es un fenómeno
digital information. A notational schema intervenes. 'Digital electronic horizontal aun el gráfico- y todos los ejemplos descritos funcionan en la
technology atomizes and abstractly schematizes the analogic quality of dimensión del plano. En lugar de rehusar esta característica, yo
the photographic and cinematic into discrete pixels and bits of sugeriría examinar esto más cuidadosamente. Aunque ciertas
information that are transmitted serially, each bit discontinuous, ciudades post-modernas (Tokio, por ejemplo) podrían caracterizarse
discontiguous, and absolute - each bit „being in itself" even as it is part como campos tri-dimensionales, las ciudades prototípicas de finales
of a System."17 A field of immaterial ciphers is substituted for the del siglo XX se caracterizan por su ampliación horizontal. Lo que esas
material traces of the object. Hierarchies are distributed; 'value' is combinaciones de campos parecen prometer en ese contexto es una
evened out. These ciphers differ one from the other only as place- densidad e intensificación de experiencias en momentos particulares
holders in a code. At the beginning of this century, Viktor Shklosky dentro del campo ampliado de la ciudad. Los monumentos del pasado,
anticipated the radical levelling effect of the notational sign: 'Playful or incluyendo los rascacielos monumento modernista a la producción
tragic, universal or particular works of art, the oppositions of one world eficiente- se destacan de la estructura de la ciudad como un
to another or of a cat to a stone are all equal among themselves."18 momento vertical privilegiado. Las nuevas instituciones de la ciudad
This evening out of value has implications for the traditional concept of tal vez surjan en momentos de intensidad, vinculadas a la red más
figure/ field. In the digital image 'background' information must be as amplia del campo urbano y no delimitadas por líneas demarcatorias
densely coded as the foreground image. Blank space is not empty sino por superficies espesas.

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space; there is empty space throughout the field. If classical campos digitales
composition sought to maintain clear relations of figure on ground,
Tecnologías análogas de reproducción funcionan a través de
which modern composition perturbed by the introduction of a
impresiones, huellas o calcos. La imagen puede cambiar de escala o
complicated play of figure against figure, with digital technologies we
valor (como en un negativo), pero su forma icónica se mantiene.
now have to come to terms with the implications of a field-to-field
Interviene un sistema de anotación. “La tecnología electrónica digital
relation. A shift of scale is involved and a necessary revision of
atomiza y esquematiza en forma abstracta la cualidad analógica de lo
compositional parameters implied. It might be noted that the universal
fotográfico y cinemático en discretos pixeles y bits de información que
Turing machine - the conceptual basis of the modern digital computer -
se trasmiten en forma seriada, cada bit discontinuo, discontiguo y
performs complicated relational functions by means of serially
absoluto; cada bit es en sí mismo aunque sea parte de un Sistema”
repeated operations of addition. Paradoxically, it is only when the
(17) Un campo de cifras inmateriales es substituido por los trazos
individual operations are simplified as far as possible that the
materiales del objeto. Las jerarquías se distribuyen: el valor es
incredible speed of the modern computer is achieved.
nivelado. Esas cifras sólo difieren unas de otras por ocupar un lugar en
un código. En los comienzos del siglo, Víctor Shklosky anticipó el
flocks, schools, swarms, crowds radical efecto nivelador de los signos de anotación: “Juguetonas o
trágicas, obras de arte universales o particulares, las oposiciones de
In the late 1980s, artificial life theorist Craig Reynolds created a un mundo con otro, o las de un gato con una piedra son iguales entre
computer program to simulate the flocking behaviour of birds. As ellas.” (18).
described by Mitchel Waldrop in Complexity: The Emerging Science at
the Edge of Order and Chaos, Reynolds placed a large number of Esta falta de valor tiene implicancias para el concepto tradicional de
autonomous, birdlike agents, which he called 'boids', into an on-screen figura/campo. En la imagen digital la información de background debe
environment. The boids were programmed to follow three simple rules ser tan densamente codificada como la imagen representada. Un
of behaviour: first, to maintain a minimum distance from other objects espacio en blanco no es un espacio vacío, es un espacio vacío en el
in the environment (other boids, as well as obstacles); second, to campo. Si la composición clásica buscó mantener relaciones claras de
match velocities with other boids in the neighbourhood; third, to move la figura en el suelo -la que fue perturbada por la composición
toward the perceived centre of mass of boids in its neighbourhood. As moderna al introducir un juego complicado de figura contra figura- con
Waldrop notes: What is striking about these rules is that none of them la tecnología digital ahora tenemos que aceptar términos con las
said „Form a flock" ... the rules were entirely local, referring only to implicancias de una relación campo/campo. Está involucrado un
what an individual boid could do and see in its own vicinity. If a flock cambio de escala e implica una necesaria revisión de parámetros
was going to form at all, it would have to do from the bottom up, as an composicionales. Debería saberse que la Turing universal la base
emergent phenomenon. And yet flocks did form, every time."19 conceptual de la computadora digital moderna- desarrolla complicadas
funciones de relación por medio de operaciones de sumas seriales
The flock is clearly a field phenomenon, defined by precise and simple repetidas. Paradójicamente, solamente cuando las operativas
local conditions, and relatively indifferent to overall form and extent (fig individuales se simplifican tanto como sea posible, se logra alcanzar
11).20 Because the rules are defined locally, obstructions are not la increíble velocidad de la computadora moderna.
catastrophic to the whole. Variations and obstacles in the environment
are accommodated by fluid adjustment. A small flock and a large flock
display fundamentally the same structure. Over many iterations, bandadas, colegios, enjambres, muchedumbres
patterns emerge. Without repeating exactly, flock behaviour tends
toward roughly similar configurations, not as a fixed type, but as the Al final de los '80, el teórico de vida artificial Craig Reynolds creó un
cumulative result of localised behaviour patterns. programa de computación para simular el comportamiento de las
bandadas de pájaros. Como describe Mitchel Waldrop en “Complexity:
Crowds present a different dynamic, motivated by more complex The Emerging Science at the Edge of Order and Chaos”, Reynolds
desires, interacting in less predictable patterns (fig 12). Elias Canetti in colocó como agentes, en un medioambiente, a un gran número de
Crowds and Power has proposed a broader taxonomy: open and pájaros autónomos virtuales, a los que llamó “boids”, Los boids fueron
closed crowds; rhythmic and stagnating crowds; the slow crowd and programados para seguir tres reglas simples de comportamiento:
the quick crowd. He examines the varieties of the crowd, from the primero mantener “cierta” distancia” de otros objetos del ambiente
religious throng formed by pilgrims to the mass of participants in (tanto de otros boids como de obstáculos); segundo, igualar
spectacle, even extending his thoughts to the flowing of rivers, the velocidades con otros boids vecinos; tercero, moverse hacia el centro
piling up of crops and the density of the forest. According to Canetti, percibido de la bandada de boids . Como señala Waldrop: lo llamativo
the crowd has four primary attributes: the crowd always wants to grow; de estas reglas es que ninguna de ellas indica “formen una bandada”...
within a crowd there is equality; the crowd loves density; the crowd , las reglas eran totalmente locales, solamente referidas a lo que un
needs a direction.21 The relation to Reynolds' rules outlined above is boid individual podía hacer y ver en su propia vecindad. Si se va a
oblique, but visible. Canetti, however, is not interested in prediction or formar una bandada, tendría que hacerse desde abajo hacia arriba,
verification. His sources are literary, historical and personal. Moreover, como un fenómeno emergente. Y sin embargo las bandadas se
he is always aware that the crowd can be liberating as well as formaron, todo el tiempo.
confining, angry and destructive as well as joyous.
La bandada es claramente un fenómeno de campo, definida por
Composer Yannis Xenakis conceived his early work Metastasis as the condiciones locales simples y precisas, y relativamente indiferente a
acoustical equivalent to the phenomenon of the crowd. Specifically, he toda forma y extensión. (fig. 11) (20) Porque las reglas están definidas
was looking for a compositional technique adequate to powerful localmente, las obstrucciones no son catastróficas para la totalidad.
personal memories: Athens - an anti-Nazi demonstration - hundreds of Las variaciones y los obstáculos en el medioambiente se acomodan
thousands of people chanting a slogan which reproduces itself like a por medio de un ajuste fluido. Una bandada pequeña y una grande
gigantic rhythm. Then combat with the enemy. The rhythm bursts into despliegan fundamentalmente la misma estructura. Sobre todas las
an enormous chaos of sharp sounds; the whistling of bullets; the repeticiones emerge el patrón. Sin repetirse exactamente, el

34
crackling of machine-guns. The sounds begin to disperse. Slowly Comportamiento de la bandada tiende toscamente hacia
silence falls back on the town, taken uniquely from an aural point of configuraciones similares, no de un tipo determinado sino como un
view and detached from any other aspect these sounds events rnade resultado acumulativo de patrones de comportamiento localizados.
out of a large number of individual sounds are not separately Las muchedumbres presentan una dinámica diferente, motivada por
perceivable, but reunite them again and a new sound is formed which anhelos más complejos, que interactúan en un patrón menos
may be perceived in its entirety. It is the same case with the song of predecible. (fig.12). Elías Canetti, en “Crowds and Power” ha
the cicadas or the sound of the hail or rain, the crashing of waves on propuesto una taxonomía más amplia: muchedumbres abiertas y
the cliffs, the hiss of waves on the shingle.22 cerradas; muchedumbres rítmicas y estancadas; la muchedumbre
In attempting to reproduce these global 'acoustical events', Xenakis lenta y la rápida. Examina la variedad de muchedumbres, desde el
drew upon his own considerable graphic imagination, and his training gentío religioso formado por peregrinos a la masa de participantes en
in descriptive geometry to invert conventional procedures of espectáculos, ampliando aun más sus pensamientos hacia el fluir de
composition. That is to say, he began with a graphic notation los ríos, los montones de cosechas y la densidad de los bosques. De
describing the desired effect of 'fields' or 'clouds' of sound, and only acuerdo a Canetti, la muchedumbre tiene cuatro atributos primarios: la
later reduced these graphics to conventional musical notation. Working muchedumbre siempre quiere crecer; dentro de ella existe equidad,
as he was with material that was beyond the order of magnitude of the ama la densidad y necesita una dirección. (21) La relación con las
available compositional techniques, he had to invent new procedures reglas de Reynolds es oblicua, pero visible. Sin embargo Canetti no
in order to choreograph the 'characteristic distribution of vast numbers está interesado en predicciones o verificaciones. Sus fuentes son
of events'.23 Crowds and swarms operate at the edge of control. Aside literarias, históricas y personales. Mas que nada, siempre está
from the suggestive formal possibilities, I wish to suggest with these conciente que la muchedumbre puede ser tanto liberadora como
two examples that architecture could profitably shift its attention from limitante; enojada y destructiva como alegre.
its traditional top-down forms of control and begin to investigate the El compositor Yannis Xenakis concibió su trabajo “Metastasis” como el
possibilities of a more fluid, bottom-up approach. Field conditions equivalente acústico del fenómeno de la muchedumbre. Buscaba
offers a tentative opening in architecture to address the dynamics of específicamente una técnica de composición adecuada a memorias
use, behaviour of crowds and the complex geometries of masses in personales fuertes:
motion.
Atenas una demostración anti nazi- cientos de miles de personas
entonando un slogan que se reproduce a sí mismo como un ritmo
a logistics of context gigantesco. El ritmo estalla dentro de un enorme caos de sonidos
agudos; el silbido de las balas; el sonido de las ametralladoras. Los
One of modern architecture's most evident failings has been its
sonidos comienzan a dispersarse. Lentamente el silencio vuelve a la
inability to address adequately the complexities of urban context.
ciudad, tomado únicamente desde un punto de vista oral y
Recent debates have alternated between an effort to cover over the
desprendido de cualquier otro aspecto, esos eventos sonoros
difference between old and new (the contextualism of Leon Krier or the
formados por un gran número de sonidos individuales no son
so-called 'New Urbanists'), and a forceful rejection of context
percibidos separadamente, pero reúnanlos nuevamente y se formará
(deconstruction, and related stylistic manifestations). The potential of a
un sonido nuevo que podrá ser percibido en su integridad. Es el
well-developed theory of field conditions is to find a way out of this
mismo caso del canto de las cigarras o el sonido del granizo o la
polarised debate, acknowledging the distinct capabilities of new
lluvia, el golpe de las olas en los riscos, el silbido de las olas en los
construction, and at the same time recognising a valid desire for
guijarros. (22).
diversity and coherence in the city.
Al intentar reproducir estos “eventos acústicos” globales, Xenakis
How to engage all the complexity and indeterminacy of the city through
recurrió a su propia imaginación gráfica y a su experiencia en la
the methodologies of a discipline so committed to control, separation
geometría descriptiva para invertir los procedimientos convencionales
and unitary thinking? This is the dilemma of the architect working in the
de la composición. O sea que comenzó con una escritura gráfica
city today. Architecture and planning, historically aligned with technical
describiendo el efecto deseado de “campos” o “nubes” de sonido y
rationality and committed to the production of legible functional
solamente más tarde convirtió esas gráficas a la escritura musical
relationships, have had tremendous difficulty thinking their roles apart
convencional. Al estar trabajando con material que estaba más allá de
from the exercise of control. This is all the more true today when the
la magnitud de las técnicas de composición disponibles, tuvo que
real power of architecture has been eroded everywhere by a swollen
inventar procedimientos nuevos para realizar la coreografía de “la
bureaucratic apparatus. Architecture and planning, in a desperate
característica de la distribución de amplia cantidad de eventos” (23)
attempt to survive, have simply opposed their idea of order to chaos:
Multitudes y enjambres funcionan en el borde del control. Además de
planning versus uncontrolled growth. But this is a kind of zero-sum
las sugestivas posibilidades formales, con estos dos ejemplos deseo
thinking, in which architecture can only be diminished in the measure
sugerir que la arquitectura podría cambiar provechosamente su
to which it relinquishes control over the uncontrollable. We thrive in
atención desde sus formas tradicionales de control arriba-abajo (top-
cities precisely because they are places of the unexpected, products of
down) y comenzar a investigar las posibilidades de una aproximación
a complex order emerging over time.
más fluida abajo-arriba (bottom-up). Las condiciones de campo ofrecen
Logistics of context suggests the need to recognise the limits of una posibilidad de apertura en la arquitectura dirigida a las dinámicas
architecture's ability to order the city, and at the same time, to learn del uso, comportamiento de multitudes y la complejidad de las
from the complex self-regulating orders already present in the city. geometrías de masas en movimiento.
Attention is shifted to systems of service and supply, a logic of flow and
vectors. This implies close attention to existing conditions, carefully
defined rules for intensive linkages at the local scale, and a relatively una logística de contexto
indifferent attitude toward the overall configuration. Logistics of context Una de las fallas más evidentes de la arquitectura moderna ha sido su
is a loosely defined working framework. It suggests a network of incapacidad para vincularse adecuadamente con las complejidades del

35
relations capable of accommodating difference, yet robust enough to contexto urbano. Los debates recientes han alternado entre un
incorporate change without destroying its internal coherence, esfuerzo para informarse sobre la diferencia entre viejo y nuevo (el
Permeable boundaries, flexible internal relationships, multiple contextualismo de Leon Krier o los así llamados “Nuevos Urbanistas”),
pathways and fluid hierarchies are the formal properties of such y un fuerte rechazo del contexto (deconstrucción y manifestaciones de
systems. estilo relacionadas). El potencial de una teoría bien desarrollada de
Above all it is necessary to recognise the complex interplay of condiciones de campo es encontrar un camino de salida para este
indeterminacy and order at work in the city. 'This place, on its surface, debate polarizado, reconociendo las distintas capacidades de la nueva
seems to be a collage. In reality, its depth is ubiquitous. A piling up of construcción y un deseo válido de diversidad y coherencia en la
heterogeneous places,' writes Michel de Certeau. These 'heterologies' ciudad. ¿Cómo involucrar toda la complejidad e indefinición de la
are not arbitrary and uncontrolled, but rather 'managed by subtle and ciudad con las metodologías de una disciplina tan comprometida con el
compensatory equilibria that silently guarantee complementarities'.24 pensamiento unitario de control y separación? Ese es el dilema del
Even a very simple model of urban growth, ignoring large-scale trabajo del arquitecto en la ciudad de hoy. Arquitectura y planificación,
accidents of history or geography, but incorporating fine-grained alineadas históricamente con la racionalidad técnica y comprometidas
difference in the form of multiple variables and non-linear feedback, con la realización de relaciones funcionales legibles, han tenido
demonstrates how the interplay between laws and chance produces tremendas dificultades para pensar sus roles separadamente del
complex, but roughly predictable configurations of a non-hierarchical ejercicio del control. Esto es más claro hoy, cuando el real poder de la
nature (fig 13). Field conditions and logistics of context reassert the arquitectura ha sido socavado en todos lados por un aparato
potential of the whole, not bounded and complete (hierarchically burocrático abotargado. La arquitectura y la planificación, en un
ordered and closed), but capable of permutation: open to time and only desesperado intento de sobrevivir, simplemente han opuesto sus ideas
provisionally stable. They recognise that the whole of the city is not de orden y caos: planificación contra crecimiento incontrolado. Pero
given all at once. Consisting of multiplicities and collectivities, its parts esto es una especie de pensamiento cero-suma, donde el urbanismo
and pieces are remnants of lost orders or fragments of never-realised puede ser repensado sólo en la medida en que renuncie a controlar lo
totalities. Architecture needs to learn to manage this complexity, which, incontrolable. Crecemos en las ciudades porque precisamente hay
paradoxically, it can only do by giving up some measure of control. lugares inesperados, producto de un orden complejo que surge en el
Logistics of context proposes a provisional and experimental approach tiempo.
to this task. La logística del contexto sugiere la necesidad de reconocer los límites
de la arquitectura en su habilidad para ordenar la ciudad, y al mismo
tiempo aprender del complejo ordenamiento auto regulado ya presente
en la ciudad. La atención es conducida a los sistemas de servicios y
abastecimiento, una lógica de flujos y vectores. Esto implica una
atenta observación de las condiciones existentes, reglas definidas
cuidadosamente para establecer vínculos fuertes a escala local, y una
actitud relativamente indiferente hacia la configuración total. La
logística de contexto es un marco de trabajo definido
aproximadamente. Sugiere una red de relaciones con capacidad de
acomodar la diferencia, suficientemente fuerte como para incorporar el
cambio sin destruir su coherencia interna. Límites permeables,
relaciones internas flexibles, múltiples senderos y jerarquías fluidas
son las propiedades formales de tales sistemas. Sobre todo es
necesario reconocer el complejo juego interno de indefinición y orden
que funcionan en la ciudad. “Este lugar, en su superficie parece ser un
collage. En realidad, su profundidad es ubicua. Un amontonamiento
de lugares heterogéneos”, escribe Michel de Certeau. Esas
heterogeneidades no son arbitrarias ni incontrolables, sin más bien
“manejadas a través de un equilibrio sutil y compensatorio que
garantiza silenciosamente la “complementariedad” (24). Aun un modelo
muy simple de crecimiento urbano, que ignore una gran escala de
accidentes históricos o geográficos pero que incorpore diferencias más
detalladas en la forma de múltiples variables y no una información
lineal, demuestra como el juego interno entre leyes y azar produce
complejas pero predecibles configuraciones de naturaleza no
jerárquica (fig. 13). Las condiciones de campo y la logística de
contexto reafirman el potencial del todo, no atado ni completo
(jerárquicamente ordenado y cerrado), pero sí capaz de cambiar:
abierto al tiempo y estable solamente en forma provisoria. Reconocen
que la totalidad de la ciudad no se ofrece inmediatamente. Al consistir
en multiplicidades y colectividades, sus partes y piezas son vestigios
de ordenamientos pasados o fragmentos de totalidades nunca
realizadas. La arquitectura necesita aprender a manejarse en esa
complejidad, lo que paradójicamente solamente se puede realizar
abandonando alguna medida de control. La logística de contexto
propone una aproximación provisoria y experimental a esta tarea.

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Notes
1 I first introduced the term 'field conditions', and a version of the conceptual structure outlined here, in the context of a studio taught at Columbia University in spring
1995. As the articles collected here demonstrate, I am not alone in my interest in the techniques and phenomena associated with the field. Jeff Kipnis and Sanford
Kwinter should be mentioned. Here is Kwinter, for example, writing in 1986: 'This notion of „the field" expresses the complete immanence of forces and events while
supplanting the old concept of space identified with the Cartesian substratum and ether theory ... The field describes a space of propagation, of effects. It contains no
matter or material points, rather functions, vectors and speeds. It describes local relations of difference within fields of celerity, transmission or of careering points, in a
word, what Minkowski called the word' ('La Città Nuova: Modernity and Continuity', Zone 1/2 (1986), pp88-89.
2 Xenakis. who has already an intimate connection to architecture, uses language and concepts very close to those utilised here, as described by Nouritza Matossian
in her biography of Xeriakis: 'A concept from physics served as a useful cognitive scheme for characterising the experience; the notion of the field, a region of space
subject to electric, magnetic or gravitational forces, Just as the magnetic forces create patterns in a field of iron filings, so fields of sound might be created by varying
the qualities and directions of the forces, ie dynamics, frequency, duration.' Nouritza Matossian, Xenakis, Kahn and Averill (London). P59.
3 'One of the essential characteristics of the realm of multiplicity is that each element ceaselessly varies and alters its distance in relation to the others ... These
variable distances are not extensive quantites divisible by each other; rather each is indivisible, or „relatively indivisible", in other words, they are not divisible above or
below a certain threshold, they cannot increase or diminish without changing their nature [my emphasis].' Gilles Deleuze and Felix Guattari, A Thousand Plateaus,
University of Minnesota Press (Minneapolis, MN), 1988, pp30-31.
4 The following discussion is adapted from Rafael Moneo: 'La vida de los edificios', Arquitecture 256 (Sept-Oct 1985), pp27-36.
5 This well-known phrase is taken from Donald Judd's discussion of the paintings of Frank Stella. The order is not rationalistic and underlying but is simply order, like
that of continuity, one thing after another.' ('Specific Objects', Arts Yearbook. 1968; republished in Donald Judd, Complete Writings, 1959-1975, Nova Scotia Collage of
Art and Design (Halifax, NS), p184.
6 The term 'algebra' derives from the Arabic al-jebr ('the reunion of broken parts'), and is defined as 'the branch of mathematics that uses the positive and negative
numbers, letters, and other systematized symbols to express and analyse the relationship between concepts of quantity in terms of formulas, equations etc;
generalized arithmetic'. 'Geometry' on the other hand is a word of Greek origin and is defined as the branch of mathematics that deaIs with points. lines and solids and
examines their properties, measurements and mutual relations in space. Word origins and definitions taken from Webster's New World Dictionary, World Publishing
(Cleveland, OH), 1966.
7 Moneo, 'La vida de los edificios', p35.
8 Cited by Rosalind Kraus in 'Richard Serra: Sculpture Redrawn', Artforum, May 1972.
9 Robert Morris, 'Anti Form', Artforum, April 1968, p34.
10 Judd, Complete Writings, p183.
11 In fact much of the work developed at nearly the same time. Posat here implies a certain degree of dependence and opposition rather than chronological
sequence. Note, for example, the absence of women in the ranks of the Minimalists; Post-Minimalism would be unthinkable without the contributions of Benglis or
Hesse. A certain fluidity in these categories is a required; Robert Morris, for example, is often grouped with the Post-Minimalists. See Robert Pincus-Witten,
'Introduction to Post-Minimalism' (1977) in Postminimalism to Maximalism: American Art, 1966-1986, University of Michigan Research Press' (Ann Arbor, MI), 1987.
12 Jene Livingston, 'Barry Le Va: Distributional Sculpture', Artforum, November 1968.
13 MIT Press (Cambridge, MA), 1995.
14 Morris,'Anti Form', p34.
15 Colin Rowe, 'Chicago Frame', In The Mathematics of the Ideal Villa and Other Essays, MIT Press (Cambridge, MA), 1976. P99.
16 Roberto Mangabeira Unger, 'The Better Futures of Architecture', Anyone, 1991, p36. It is, of course, Jeff Kipnis who first called attention to the suggestiveness of
Unger's formulation; see'Towards a New Architecture', AD Profile 102: Folding in Architecture, pp41-49.
17 Vivian Sobchak, 'The Scene of the Screen: Towards a Phenomenology of Cinematic and Electronic Presence', Post-Script 10 (1990). P56.
18 Cited by Manfredo Tafuri in 'The Dialectics of the Avant-Garde: Piranesi and Eisenstein', Oppositions 11 (Winter 1977), p79.
19 M Mitchel Waldrop, Complexity: The Emerging Science at the Edge of Order and Chaos. Simon and Schuster (New York), 1992), pp240-41.
20 Linde Roy has studied swarm behaviour and its architectural implications in greater depth. See her upcoming article in ANY.
21 Elias Canetti, Crowds and Power, Farrar, Straus and Giroux (New York), 1984, p29.
22 Matossian, Xenakis, cited from an interview, p58.
23 Ibid, pp58-59.
24 Michel de Certeau, 'lndeterminate', in The Practice of Everyday Life, University of California Press (Berkeley, CA), 1984, p201.
25 This discussion of the Christaller model is taken from Ilya Prigogine and Isabella Stengers. Order out of Chaos: Man's New Dialogue with Nature, Bantam Books
(New York), 1984, p 197ff.

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