TRATAMIENTO DE LAS DISPLASIAS DEL CUELLO UTERINO

CERVICAL

Es una alteración de las células, puede ser de la forma, de la

organización, también porque aparezcan los núcleos más grandes o
se reproduzcan en exceso, se la podría denominar también tumor
benigno.

Se distinguen tres estadios: leve, moderada y severa, dependiendo de

la cantidad de células alteradas que aparezcan, puede transformarse
en maligna y regresar a su estado original.

Para detectarlos es necesario hacer la técnica de frotis de rastreo

llamada papanicolau, en el servicio de ginecología.

En la displasia leve se puede usar unos tampones (se hace con

algodón en rama forrado por una gasa estéril que debe sobresalir de
la vagina para poder sacarlo) colocados contra el cuello durante toda
la noche, se mojarán en esta mezcla:

-60 gramos de aceite de almendras dulces

-20 gramos de aceite de germen de trigo

-10 gramos de aceite esencial de tuya

-10 gramos de aceite esencial de ciprés

Además es importante evitar el alcohol, el tabaco y otras drogas.

Tomar, en forma de tintura madre o decocción, la corteza del arraclán

(rhamnus frangula), en decocción se tomarán dos cucharaditas de
café en 150 gramos de agua, beberlo por la noche; en tintura madre
20 gotas tres veces al día.

Complementar el tratamiento con el ajo: crudo, en tintura madre o en

perlas.

El tratamiento ha de hacerse durante meses, interrumpiéndolo sólo

cuando venga la regla.

Para todos los problemas de la pelvis va muy bien el realizar un baño

de asiento con agua fría durante algunos minutos, por la mañana y en
un ambiente caldeado, durante dos o tres minutos, ya que activa
fuertemente la circulación de la zona y descongestiona del calor los
órganos internos.

En cuanto a la alimentación, será sin azúcar, excitantes (te, café),

queso, ni harina blanca, se hará con verduras crudas, legumbres,
frutas crudas, cereales integrales y algo de queso fresco.