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Alejandro rojas Ramírez

Los hermanos rousse

Cicatrices del Erós.


(Cicatrices eróticas)
MC
Año 2006-01-31

Dedicado a la mujer que tanto


amo:
Daniela Domínguez castillo.

El infierno solo es otro de los grandes dolores del


alma
Att: damien sébastien de rousse

Dolores,… dolores que nos hacen sentir la vida


más amarga.
Quizás mas deliciosa para algunos, mortal para
otros.
Att: damien sébastien de rousse
En el siglo 17, en Francia, En un cuarto lleno de
espejos, brillantes para los sentidos, rotos para
el corazón apasionado, yacía la pequeña y dulce
Jézabel nastasia. Una niña de largo pelo negro y
liso, y piel puramente blanca.
Esto sucedió poco tiempo antes del encuentro
de los niños de 9 años con el ángel.

Damien entro al cuarto de la hermana que


amaba con sangre. Su pelo es negro, corto y
echado hacia atrás de modo que queda plano
en su cabeza.

¿Qué ha pasado aquí? –Exclamo damien,


asustado al ver el cuerpo de su hermanita en la
cama de sabanas rojas y negras con cientos de
rosas espinosas de color rojas y negras
desperdigadas por todo el cuarto y su cuerpo.

Mientras damien temía que estuviera muerta,


comenzó a levantar su cuerpo el cual casi
siempre estaba frió como un cadáver
desilusionado.
Damien sostenía a Jézabel en sus brazos y ella
despertó como la luna al anochecer. Al verse
cerca del pecho de damien, lo beso y con esto
aviso que su sangre aun estaba caliente y
fresca.

-¿Que ha pasado mi malévola? –Pregunto


damien sébastien-. Pensé que estabas ahora en
el palacio de las tumbas de la muerte humana.

-Solo estaba descansando mi protector


hermanito –repuso la criaturita negra llamada
Jézabel- intentaba pensar en lo hermosamente
funesto que se debe sentir otra clase de amor
distinto al de los humanos comunes, y luego de
tanto forzar mi mente termine dormida.

-¿Y las rosas? –continuo preguntando el niño.

-mis nuevas aliadas florecientes –respondió la


niña Jézabel un poco triste-, ellas me
proporcionaran gracias a sus espinas las
cicatrices que tanto anhelo para mí y la victima
que deseo por amante. Deseo hacerle sentir a
aquella ordinaria persona, cosas que nunca ha
sentido, un amor solitariamente conocido por
mí, pero que ansió experimentar en el calor de
un débil ser que yo desconozca en su interior.

-Pues ha llegado el hijo de la nueva criada,


-sugirió damien con algo de malicia-. Alguien
sumamente cariñoso, acostumbrado del modo
más tradicional a los sabores amorosos que le
proporciona su familia. Dame la oportunidad de
ver tus artísticos actos eróticos.

-¡O! mi victima del erotismo ha llegado, aquella


que me hará sudar dolor despiadado –exclamo
emocionada la pequeña niña.

Al otro día, damien había seducido al amoroso


niño para que visitara a su oscura hermana.

Cuando llego al cuarto de Jézabel, la niña yacía


colgada en las opacas cortinas, colgaba su piel a
las crudas espinas con rosas rojas que había
colocado sádicamente su hermano en forma de
ramas largas que la sostuvieran a ella en la
cortina. Era un espectáculo impactante…
La cabecita de la inocente niña estaba hacia
abajo, y sus piernitas apuntando hacia arriba,
pues su delicado cuerpito damien lo había
colocado de forma invertida, como lo llamaría
damien: “es un favor que solo a ella concedo”.

El saludable y hasta ahora inocente niño casi se


desmaya al ver a la hermosa niña crucificada de
modo invertido, rodeada y penetrada por todas
esas sarcásticas rosas escarlatas. El infante
llamado kenny, provenía de Inglaterra y había
llegado recientemente con su viuda madre a
Francia a trabajar para los ricos padres de los
hermanitos rousse.
Kenny salio corriendo hacia la desangrada
Jézabel, pues la sangre corría en todo el cuarto
inundándolo levemente.

-¿Qué te paso? –Pregunto angustiadamente


Kenny-. Iré a llamar a mi madre para que te
ayude a bajar de aquí.

-No, lo que necesito son tus labios, -dijo la tierna


e infernal niña-. Ya que te haré caminar primero
en los senderos que ya conoces, pues los
románticos bosques macabros que te aguardan
te intentaran cambiar tu mentalidad a forma
siniestras.

Y con la debilidad de su movimiento, Jézabel


tomo los cachetes del niño y los acerco hacia su
boquita ensangrentada…besándolo de una
forma demoníaca que la tenue luz del sol
trataba de purgar.

-¿Quien te ha hecho esto? –pregunto kenny


preocupado, quien comenzaba a sentir afecto
hacia su depredadora destrozada.

-No te preocupes por mí –dijo Jézabel con una


expresión de placer-. Yo he decidido por
voluntad propia estar aquí, de esta cruel forma,
mi hermana ha creado esta bestia de rosas,
para que me devorara entre las futuras
cicatrices que puede provocar, y quiero que tú
seas mi pareja en este viaje hacia el dolor que
he estado llevando sola, pues a mi amado
hermanito, solo le interesan los placeres
sádicos, el posee las garras que destrozan la
carne y que lo hacen vibrar de excitación.
Mientras que yo soy lo contrario, anhelo el dolor
para mi misma, y damien convenientemente se
ha encargado de construir poco a poco la
corona de sufrimiento que yo tanto gozo tener.
Acompáñame mi nuevo viajero.

Los ojos de Jézabel brillaban en su negrura, el


niño encantado por Jézabel, lo único que pudo
hacer fue abrasarla, y con ello al lecho de rosas
que había formado damien en la cortina. Sus
sentidos vieron el dolor por primera vez de
forma tan intensa.

-Tu piel fue rota por la espinas, en actos de


amor y compasión hacia mi –dijo Jézabel
mientras lo abrasaba con una mirada cruel-.
Pero las causas por las que lo hiciste serán
reemplazadas por mi masoquismo.
Bienvenido a tu nueva vida, mi pasión por ti es
distinta a la que siento por mi hermano, pues él
y yo nos complementamos, somos un único
ataúd que abarca todo tipo de sensaciones
infernales. Contigo… contigo será distinto. Tú
serás mi acompañante en la mitad del ataúd
que me corresponde, tú serás quien arregle mi
cadáver en mis caminos funestos.

Dicho esto, kenny noto que las rosas


comenzaban a tragárselo a él y a acércalo cada
vez más a su amante Jézabel, y noto que uno de
los bracitos de la niña comenzó a dislocarse y a
colgar como si el hueso de su brazo se hubiera
salido de su lugar, era espantoso verla así, y
noto que su rostro parecía el de alguien sin vida,
pues sus ojos apuntaban hacia abajo y su cara
daba un miedo cadavérico. Por unos segundos
kenny entro en algo parecido a un estado de
inconciencia de la realidad exterior, en el que
parecía estar en un cementerio, con el cielo
nublado y las nubes desplazándose a
velocidades muy rápidas, atemorizantes rayos
destruían lapidas y hacían explotar cadáveres
que sacaban desde sus tumbas con la misma
explosión.
Al frente apareció de repente Jézabel con un
vestido blanco y algo transparente, cuervos
comenzaban a arrancar y tragar la carne de la
blanca y suave piel de la niña Jézabel. Kenny
estaba tan asustado que solo logro dar un grito
que sonó como el de un monstruo sin que él lo
quisiera. Su mente se puso en negro, y solo veía
unas letras hechas con rosas marchitas, que
decían “Limpia Mi Cadáver Eternamente”.
Luego de ello apareció colgado en la cortina
llena de rosas que lastimaban su carne y lo
sostenían. Por unos momentos vio que Jézabel
permanecía lejos de él pues ya no estaba en la
cortina junto con él proporcionándole aquel
enfermizo y falso amor que la niña odiaba tanto.

Vio por unos segundos que ella se convertía en


una muñeca sucia y con la cabeza despegada a
un lado, con agujas insertadas en el algodón
que componían su cuerpo. Luego de eso,
recupero del todo la conciencia, y oyó las
siguientes palabras de la despiadada y
romántica Jézabel:

Mis ojos no lloran agua deshidratada por ti,


sufren por haber sentido por algunos segundos
tu miserable amor, el peor de los dolores que ni
siquiera yo, una masoquista de dolores
perversos podría soportar.
Ahora has de quedarte en esas cortinas por
siempre, donde nadie lograra verte, solo yo…
habrás de limpiar mis tristezas con los restos de
tu alma, y jamás volverás a ser un humano
normal…por que serás mi mayordomo en aquel
mundo en donde me viste entrar. Serás mi
sirviente de dolores.

La niña llorando, se acerco a kenny y le


suministro un beso que contenía desgracias, sus
lagrimas se volvieron cenizas liquidas…
El cuerpo de kenny quedo deformado, pues
ahora tenia su brazo dislocado y el resto de los
miembros de su cuerpo habían sido devorados
inexplicablemente. Con sus últimos momentos
antes de dormir su sueño lúgubre, kenny logro
notar que Jézabel permanecía ahora con su
cuerpo intacto, sin heridas ni sangre, y su brazo
no estaba ya dislocado.

Jézabel se acostó en su cama, y damien llego y


se acostó en los pequeños pechos de su
hermanita mientras la abrazaba fuertemente, ya
que quería quitarle la respiración por unos
momentos.

¿Que paso con la escoria que te traje? –


pregunto damien con sus ojos llenos de placer al
sentir como sufría su hermanita, tanto
interiormente como física.

Ha logrado dejarme una cicatriz profunda –


respondió agitadamente la niña, quien no podía
respirar bien por el abrazo cruel de su hermano
sádico, mientras ella sentía una mezcla de
placer masoquista y tristeza romántica-. Una
huella erótica que ni las rosas lograron
hacerme, una cicatriz en mis sentimientos…fin.
Solo los humanos logran soportar tan grandes
dolores como el amor terrenal, pasiones que ni
los mas grandes masoquistas del mundo desean
experimentar…mi asesino ha sido el amor
humano, y mi redención vuelve con los brazos
de él.
Att: Jézabel nastasia de rousse.

Sellado en el penumbroso siglo 21 del 2006-01-


31

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