Está en la página 1de 4

EL ÌNCOMODO

Yo no me veo, pero sé que existo.

Pregunto ¿Quién soy o en donde estoy?

Tímidamente espero una respuesta.

Y así esperare en el lugar más oculto.

Sé que ronco a veces cuando no duermo.

Si alguien me escucha, sin duda no me auxilia.

Sé que prefieren retirarse de mi lado y maldicen por haberme


escuchado.

No entiendo que es lo que puede suceder.

Es que a veces los estruendos a mí también me asustan.

Porque son muchas las veces que los soplos silban fuertemente.

No crean que yo soy el espejo que así mismo no se ve, y por eso
es que no me escuchan ni me entienden.

No crean que esto, lo hago voluntariamente, si no que me


obligan los impulsos del mal gusto.

No crean tampoco, que soy el fantasma que produzco los


sonidos misteriosos.

Porque no lo soy, y no lo soy.

Lo que si se, es que a veces me aprietan fuertemente.

Pero no solo por esto me pongo colorado, sino que me siento


acomplejado y sin pensar se salta la vergüenza y más aun si
alguien en especial esta a mi lado, por que de inmediato se
retira más que un demonio espantado.

Un olfato suspira lentamente , hasta quedar en el momento casi,


casi privado.

No me culpen a mí por ser tan flojo.

Ni mucho menos me condenen. Por estar un poco mas callado,


porque no es sencillo que me ignoren en este mundo si siempre
estoy en la parte de atrás y de ñapa muy bien acompañado.

… Oculto o escondido siempre estoy.

No entiendo porque me escuchan y se retiran suspirando menos


fuerte, si al fin y al cabo todos tenemos las mismas mañas; y así
sean bellas, lindos, pobres, ricos o adinerados

Todos saben que mi aliento los hace sentir mucho más que
relajados.

Si ve… ahora no me interesa si se retiran y escupen con un gesto


indiferente y asqueroso, o si se alarman y prenden el equipo con
el máximo volumen, o a esto le agregan el contaminante humo
del cigarro.

Por esto mismo pienso y pienso, que son los perfumes los menos
descarados y alcahuetes, cuando todos lo sabemos que sin
escrúpulos los hemos ya soltado.

No entiendo para qué diablos utilizan las costosas e inútiles


fragancias, si al fin y al cabo en medio de las flores, la mierda
sigue siendo mierda y la expulsa el cuerpo no glorioso y mucho
menos humanos que jamás han sido consagrados.
Espero que ahora mismo no se sientan tímidos y menos
avergonzados, ni se asusten cuando este su compañero o
compañera muy bien pegado; ni mucho menos cuando estén
debajo del mismo abrigo, por que al igual se sabe lo que todos
hemos platicado.

¿Ahora si saben quién soy?...

Porque sin querer soy mucho más que mal educado.

Si escucharon que yo no me quedo callado. Sin tener en cuenta


que no tengo un defensor y mucho menos un abogado.

Aunque me digan que yo no sé ni un sieso. Ni por el putas me


quedare asilenciado y no me importa, que digan que es el culo el
mas puerco y el mas mal educado. Ahora mismo hagámosle
silencio al que ni por el diablo se puede quedar callado.

AUTOR: PEDRO ARNULFO DIAZ FIGUEROA

D.R.A

30/12/2010

También podría gustarte