esclavos de su estancia había un negrito encargado de pastorear algunos animales. Cierto día, el chico que vivía sufriendo severos castigos del estanciero perdió un animal en el pastoreo. Fue a contarle. Paso una barbaridad , después todo machucado, Fue mandado a buscar el animal perdido. Como estaba anocheciendo prendió una vela, Lo encendió y siguió campeando. Pero nada el día llego y no encontró con el animal. Fue nuevamente castigado apenando morir. El jefe puso el cuerpo del joven sobre un hormiguero.