Scribd Logo
Cargar

¡Te damos la bienvenida a Scribd!

  • Contratos Forzosos - Luis Diez-Picazo PDF

    Cargado por

    Carlos Pastor Maravi
    129 vistas18 páginas

    Título original

    contratos forzosos - luis diez-picazo.pdf

    Derechos de autor

    © © All Rights Reserved

    Formatos disponibles

    PDF o lea en línea desde Scribd

    ¿Le pareció útil este documento?

    ¿Este contenido es inapropiado?

    Denunciar este documento

    Copyright:

    © All Rights Reserved
    Descargue como PDF o lea en línea desde Scribd
    Marcar por contenido inapropiado
    129 vistas18 páginas

    Contratos Forzosos - Luis Diez-Picazo PDF

    Cargado por

    Carlos Pastor Maravi

    Copyright:

    © All Rights Reserved
    Descargue como PDF o lea en línea desde Scribd
    Marcar por contenido inapropiado
    de 18
    Anvacio de Derech= crovl Tors 1K. foacitolo XT , —— free - Moras MACHUNY 1G9s6 | seve \ , = Bs- W8 Los llamados contratos forzosos LUIS DIEZ-PICAZO ¥ PONCE DE LEON Ayudonte de Derecho Civil Suaseio; 1. Introduecién—IL. Crisis de la autonomia: contrato dictado Ht, La observacién del fenémeno—IV. El problema y {us posibies soluciones: 9) Rectificacin de conceptos—#) Creacién de nue y contrato forzoso. vas figuras.—V. Distine da—VI. Modalidades di entre acto de constitucién y relacién constitut- acto de constitucién.—VII. Constitueién_volunta- 1 negocio juridico.—VIII. Constitucién forzosa: concepto—IX, Clasi- feacion de la constitucidn forzusa: a) Constitucién unilateral y bilateralmente forzosa.-b) Constitucién directa ¢ indirecta.~c) Constitucién legal, adminis: trativa y judicial. X. Caracteristicas generales de 1a constitucién forzosa: @) La imposicién como acto juridico.—b) La imposicién como acto vinew- tante.—c) La imposicién como acto estatal—d) La imposicién como acto heteré- —f) La excepeionalidad de nterés piiblico y el interés privado en la imposicién. nomo.—) La imposicién como acto involuntar Ja imposicién.—g) -INTRODUCCION Uno de los problemas que con mayor intensidad y hondura preocupa a la ciencia jutfdica contempordnea es el de Ja inter: Poneign del Estado en el derecho patrimonial. Esta intervencién Yel Estado, provocada por wna. serie de causas, tan conocidas ue parece inoportuna su repeticidn, da lugar a una serie de fe- némenos, de actos, de situaciones juridicas de sorprendente no- Vedad. Basta pensar, pata comprobarlo, en alguna de ellas: em- presas piiblicas, empresas de economia mixta (1), contratos auto- Frados, contratos reglamentados o dictados, contratos forzo- sos (2), régimen de tasas, de cupos, etc. Estas figuras juridicas (i) El tema de las empresas estatale mitten tradicional del Derecho. Mercantil ha sido agudamente analizado por Bupeicurss La crisis actuat del Derecho Mercantil, Patronato de la Universi- GET de Deustor Bilbao, 1954, Sobre el tema de la empresa piblica puede verse fambién Gindy Texa, Las empresas piblicas, en «Estudios de Derecho Mercan- nin, pag. 319, Madrid, 1935. a) ‘Sobre el tema general de os contratos forzosos, etc. aparte dela bibJografia que adelante se cite, w Josseraxo : Le contrat Girigh Dallor Hebdomadaire, 1933, Chron, pag. or: Les dernidres stapes dtu dirigieme contractucl: le contrat forcé et te contrat legal, Digeste, 1040, Chron. pig. 13 Considerazion’ sul contratto regolato, Archivio giuridico, julo i931; Motrron: Zur Theorie des Vertragszwang, Yering Jabrbiicher, fomo 73) 1024; Monri.. [2 contrat imposé, en Te droit privé francaise 2 y Ja forma en que trastorna a dog- 86 Luts Diez-Picazo y Ponce de Leén nuevas resultan extravagantes en el marco de] Derech entendiendo por tal el de los Cédigo civiles ; ; lo ela ner! que no caben, porque no encajan, porque desbordan Jos moldes conceptuales que Ja ciencia juridica, élasica también, habia ela- orado, Los moldes cldsicos son inservibles para recoger esta rea- lidad. Esta inservibilidad produce una honda confusién en la propia ciencia del Derecho y en seguida se oyen voces que pre- gonan su decadencia. En una obra reciente, Ripert ha denunciado esta decadencia (3). «Por declinar de: Derecho—dice—no deben entenderse las mahifestaciones de vie‘encia y de fraude que alteran el orden estab‘ecido, cuya repeticién ¢ impiidad no significa otra cosa que Ia insuficiencia del poder politico para mantener el or- deny (q). Bl verdadero declinar del Derecho, se produce cuando as leyes dejan de ser dictadas por la, justicia. Hay una serie de principios juridicos {ntimamente ligados a nuestra civilizacién. El Derecho declina porque las leyes contemporaneas desconocen y niegan estos principios fundamentales (5). La cone'usién parece excesiva,, Existen efectivamente principios cuya vulneracién pro- duce, més que una simple decadencia, la desaparicin del dere- cho y de Ja justicia y su sustitucién por la fuerza y la injusticia. Son Jos llamados principios de derecho natura, consustanciales con 4) orden juridico, porque wel derecho natural es Ta base. del derecho ‘positive, y ha de informar todo el ordenamiento jurk dico del Estado, por ser el reflejo de Ia ley eterna y_correspon- der 2 Ta verdadera naturaleza del hombre» (©), Junto @ estos prin eiplos existen otros que tienen solamente carééter politico y son Ja wexpresién de ta yoluntad reciora del Estado», €1 modo de entender la organizacién de la comunidad, porque ‘no hay incon- feniente en adroit que todo derecho positivo intents organizar la vida social conforme a Ja idea que se estime més adecuada (7). En este timo sentido es cierto que las leyes contemperdneas des- concen los principios jutidicos del sistema. liberal, cbedientes a Zuevas nesesdades 0 & nuewas ideas de vida, La mutacién de &3tos Princpios, por olra parte no tan aguda como se quiere hacer creer, Produce indudablemente cambios en la estructura y en el orlen juridico, da paso a nuevos intentos, a nuevas férmu.as, Por ot aes o exacto hablar de la «decadencia de un derecho» o.de_un modo concreto de entender el derecho. Pero ni ain en este restringido sentido es exacta esa tesis, porque Ta mutacin de los Brincpios no se ha producido, ni han sido sustituidos por otros. aya canfbiado la manera de entender'os o se hayan pro- o Xe sigfle, pag. 116 y siguientes. Etud rte: 7 " ae miques et sociales du droit eivil d'aujour d’hui, Pa (3) Rivert: [Le dectin du droit, Ps i is (4) River, lebra citada pa Vee 2 idem, fig VIO “ASTRO: Derecho civil de Espati a Los Wamados contratos forz0sos 87 duciae hguras excepcionales, que, por el mismo hecho de, serlo, snponen la regla general, el principio, Todas, estas realidades nuevas no son producto de un derecho en deciive, casi antijurf Gicas, como se quiere hacer creer, sino perfectamente juridicas, aunque 2 primera vista extrafias, por lo cual la primera tarea que se impone ¢s explicarlas juridicamente. Otra linea de pensamiento, mucho mas extendida en Ia litera- tura juridica, sin llegar a la angustiosa conciusién que el derecho declina, ha afirmado, quiz con excesiva seguridad, la crisis de Geterminados conceptos 0 instituciones juridicas. ss producto del ‘nisino hecho: de aquella inservibilidad de los conceptos antiguos para las realidades nuevas—el contrato, en particular—. Los con- Feptos tradiciona’es se hallan en crisis 'y es urgente su, reelabora- Gdn, se dice (8). Ocurre, sin embargo, que esta reelaboracién, que tan urgente se estima, no llega a rea‘izarse nunca. Importa, pues, ponerse con decisién frente al problema y extraer de a, por jo menos, un esquema de solucién, Estas lineas no pretenden plantearse toda la honda problema. tica que la repercusién de la inmisién estatal en el mundo del Derecho patrimonial provoca. Nacen con una fina‘idad limitada Se cifien al estudio del Ilamado contrato forzoso (9). Incluso res- pecto a é tampoco intentan llevar a cabo un andlisis exhaustivo, veevesolver sistemAticamente todas las cuestiones que hace surgir, vino colo sefialar un problema y apuntar una solucién cuyas con- Secuencias requieren, sin duda, un estudio més detenido y més reflexivo también. AUTONOMIA: CONTRATO DiCTADO ¥ CONTRATO FORZOSO Th. CRISIS DEL Se ha repetido hasta la saciedad y ha adquirido ya rango de topic: que tradiciona'mente las relaciones privadas de tipo pa- a bra ecrisign jamis ha sido tantas veces empleada, Si nuestra epoes_no es clectivamente tiempo de crisis, tiene fa sensacton o la aprension seererto, Véace, por ejemplo, BARRAYRE, L’evolution et la crise contrat, 1037 Hocamoea, Lo crisis del contrato, «Revista Critica del Derecho Inmobilias'n, Toe, pag, $695 Osorio Morates, Crisis de la dogmética del contrato, «Avua ee ie Nerecho Civils, Tomo V, Fase. 4, 1952, pag. 1175 y siguientes. (a) ajo ‘A expresién scontrato forzoso» se engloban aqui todos aquellos casos en que el acontratos ha sido impueso a Jos contratantes. Para desig- do. jas expresiones «comtrato forzosos y con una person; i de tantea Payson tm, persona determinada (cago de los derechos de tenteo y rete poco se Ve clara la inclusion de este su. Pug Porque en él no hay verdadero contrato forzsso. No es for , sino un elemento de é esariamente. 4) En otros casos, hay una obligacié: mete ; igacién de contratar impuesta a una “i opr cierto que se han multipticado los ca ‘Pre mas acentuada de la aut dad pb San Pe tae Log lamados contratos forzosos a ersonia incluso contra su. voluntad (auténtico contrat forzoso). ¢) Por ultimo, una persona puede verse de pleno derecho implicada en una rélacién contractual sin haber formulado la menor dec:aracién de voluntad, ni aun ob‘igado; hay en tal caso, una «relacién con- tractual de origen legal». Dualde (20) ha realizado una larga enumeracién de los que llama acontratos imperativos» (21): 1.° El depésito necesatio (art, 1.762 del Cédigo civil), en sus dos modalidades de depésito miserable fart, 1.781, 2°) y depésito efectuado en cumpiimento de una obti- 1.781, 1.°). 2.2 La expropiacién forzosa a que alu- He ef articu’o 349 del Cédigo civil, que es una venta necesaria y sus diferentes modalidades (22). 3.° Las servidumbres forzosas de paso (art. 564), de saca de agua y abrevadero (art. 555) y de acueduc- to ‘art. 568). 4.2 La adquisicién forzosa del dominio en los casos de especificacion ‘art, 383), y de accesién de bienes muebles (articu- lo 475, 5.° La venta forzosa de bienes del deudor. 6.° La venta de pienes de menores, 7.2 El régimen de tasas y Ia politica de pre- clos (23). 8." Los arrendamientos forzosos, para los cuales el artfeu- Jo 7 de la L. A. U, impone una prérroga obligatoria, y la L. de ‘A. R. una duracién minima (24). 9.° EI contrato de trabajo (25). 16. El contrato de mandato en todos Jos casos de administraciones pe gacién legal (art. legales. \ ‘En esta enumeracién, un tanto confusa y falta de sistema, se tar Downe, Los imperatives contractuales, eAnuario de Derecho Civile, ‘Tomo II, Fuse, Il, 1049, Wigs. 527 ¥ Ses Tat) La inclusion que hace de! matrimonio entre los contratos imperativos (ob. eit, pag, 528) es menester consideraria como wna pincelada de humor, (Ran en este caso. se ha producido una confusién: al hab‘ar de contrato forzo- sono se hace referencia a Jos casos en que la voluntad por motivos internos ho se determina lbremente—casos para los que vale el antiguo aforismo evo juntas tamen coacta ellam voltintas este—, sino a Tos casos de coaccién ex tera, de smposicion en una palabra, Cir. Monet, loc. cit., pig. 116 ¥ sigs. Savarien, Les metamorphoses, cit. pig. 70. : (23) La. inclusién de expropiacion forzosa (ibidem, pag. 531) tampoce parece adecuads, El fendmeno solo debe abarcar, a mi juicio, aquellos casos tnuge se cree 0 constituya forzosamente una relacién juridica de naturaleza privada, I.a selacion de enajenacién que surge entre e! expropiado y el Estado jim de derecho piblico, Sélo a los casos de derecho privado puede es uma rel Garscles tratamiento homogéneo. De ahi la importancia de la distincién, (23) Fl régimen de tasas y Ja politica de precios (ibidem, pag. 533) 10 dan ingar a contratos forzosos. Con anterioridad se ha querido sefialar la di ferencia entre toda restriceién de autonomia privada (vid. supra, pig. 5.*), dis fucidn voruntaria o forzosa de wna relacién y determina Gon voluntazia 0 forzosa del contenido de la relacin, El contrato forzoso Contempla el primer término de esta distineidn. E. régimen de tasas, el se gundo; ans que de un contrato forzoso se trata de un contrat voluntario ‘alga, por ahora, la expresién—con precio forzoso. ‘@4) | La observacion ha de ser muy semejante a la realizada en la nota anterior. El contrato de arrendamiento, en el sentido en que Duaioe lo toma, ho es auténticamente forzoso. Se trata de un contrato_ voluntario—yoruntaria mente contraido-con contenido forzoso. Ello no significa negar Ta existencia de yerdaderos arrendamientos forzosos (vid. infra, pg. 11). (25) Son vatederas, igualmente, las observaciones de las dos notas ante riores, tinguiendo emre consti 92 Luts Dies-Picazo y Ponce de Leon enj Pad de ae naturaleza, comprendiendo, jun. contenido forzosamente’ determi qudllas ° Y fe determinado, aquél gue en realidad se constituyen fozosamente, Conviene fea le los supuestos de un: ‘a indo! nuestro actual Derecho na eee positivo pueden constitui 2080 co relaciones juridico-privadas : es a erute i fe te eg ereidimbres— Junto a las servidumbres voluntarias admi- eae igo civil la existencia de servidumbres forzosas, le- gales sean su tenminologia, wimpuestas por la ley, por causa de d ic le los particularesn Estas servidumbres son de tres manetas: 2 “La ley crea directamente fa servidum Ta servid cuyo caso & Puede, en rigor, denominarse legal (26). ee Times ately, 20 CEA dneetatiente la servidumbre, sino que se Taba disponer quer determinadas rcunstancias pode. rear 5 . La servidumb; s E 27). La re en es uténticamente legal seré administativa (3) 22 ued, gb Rey concede a una persona un derecho a exigir la consti ean ge Js Servidunbre y para‘elamente impone a otra persona el ober de crearla (29)- En este caso la servidumbre nacera bien me- dante el elecicio del derecho seguido del eumplimiento voluntari, por parte del deudor de la constitucién, 0 bien, cuando esto tind 1 Por el ejercicio del derecho’ ante los tribunales, siendo. (26) Normalmens cod), Netmaimente ce desominan clegales» tolas jas scrviiumbr Codigo. civil fine como eimpuestas por la leya Cir, Costin, Derecho eel Ga dision), Madr, "950, ‘Tomo. Ih pig. 40, seu alvin et cat dablemente ho ha de’ entenderse que todas. las acrvilumbres legals se impo fan tin solo por declaracion dela ley} algu ponest tainbiéa "una declaracion de vo'untad 0 un procedimiento civil 0. adminstrativa instal pot ¢] ave guiere obteneriass, Bn rigor, solo las primeras, las que, sc impongan por decaracin de la ley, poden denominarse legate: ls el cant de ta ane Ser en Bee ete a areiZ Tal oe caso de ia servidumbre' de seuedusto, a que sel de hacer oad, Sptiemtes del Codigo evil. Et Codigo eh Saseede altace Seenieet EGE el agua por tos prediosintermedios. Pero to ss la pura de chsscin fs fy Sq ta ees aman fe? 90 Sts qyeeeeye, mediante sw acto administrative. Segin el ati. 78 de la Loy de Rtas, comresponde al Gobernador de la provnsia. decrtar y otorgar i sa (eared, scweducto en. los casos en que sea de interés grivadoe aticler aéminisrativo de la Nervvlunbe se. petien de

    También podría gustarte