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< ea B Zz < si ra S| a ms <3 a cupula PLANTAS EN MACETA‘ El cultivo en maceta de plantas como la trompeta del juicio, la margarita de verano o la yuca constituye una de las actividades més atractivas de la jardiner‘a. Sin embargo, los cuidados que requieren este tipo de plantas no siempre son sencillos. Este libro informa de manera concisa y clara acerca de las, medidas que deben aplicarse para disfrutar de los cultivos en maceta, atendiendo a los nuevos conocimientos y experienci dentro de este campo. En una seccién descriptiva con abundantes ilustraciones, se presentan las plantas para maceta més habituales, acompafiadas también de otras menos frecuentes. Unas tablas resumen ayudan a elegir el emplazamiento correcto tanto en verano como en invierno. Por tiltimo, se explican las posibilidades de los "jardines moviles”, desde los bancales de hortalizas en maceta hasta la construcci6n de un miniestanque en la terraza de su hogar. smn 4329-19 | lll oFraseset91960. ‘Nose pemi repeat pc de hn il aga in ‘ecard be med en er Senet pina snr pn Asesoramicnto: Lluis Abad, éenico especialista en jardinerfa Disefo de cubicr: Viera Viano ‘Tito orginal: DburuiveKiheplancen. Ansoubl nd Pflege “Traduecion: label Romero (© 1990/1995 by Falken-Verlag GmbH, 65527 Niedernhausea/Ts. (© Grupo Editorial Ceae, S.A, 1997 Pra la presente version y edicinen lengua castellana Libros Cipalaes marca registra por Grupo Editorial Cac, S.A. ISBN; 84-529-1960-8 Depesto legal: B.43.883-1996 Indie, S.L- ‘mpresoen Fspata- Printed in Spin Grupo Editorial Ceae, S.A. Peri, 164 - 08020 Barcelona Bofloge is) «+ lalla eae Plantas con aire exético . . El argo camino hasta nuestro jardin ‘Nuestro cima como ‘ Plantasenmaceta . . . . . Losrecipientes. . . 1 e+ Las terra y los sustratos - 5 Elabonado yel ego. + Lapoday el cambio de maceta . « Proteccién durante el inviemo . « Laubicacién enelexterior . . aristosy enfermedades . 10 10 2 15 7 15” Tabla de condiciones idéneas 9 20 Elcultivo en maceta en toda su variedad Loideal el jardin deinviemo . Plantas tropicals en elsuelo . . ‘Lamaceta como parterre de flores Los cactusy otrssuculentas. . Los frtales as plantas de baya Un jerdin de hortalizas « lantastrepadoras en maceta | ‘La maceta como jardin acustico . Arboles plantas duraderos . . Plantas de maceta de la A la Z Indice 104 108 CCidar lax plantas de macetay saber ara estos seresvvosprocedents de paises exstcos es una de las actividades mds sugerentes de a jardineri, sobre todo para los aficionados los ejemplaresverdade- mente raros. Tiempo ars lo ms dif era con seguir esas plantas, mientras que hoy, ya se suelen encontrar con ficlidad en los estableimientos es- pecalizaos. As a persona que consult bibliog Sa sobre este tema, se dar cuenta de que casi todos Jos ejemplates exis rier un lugar fresco y Juminoso durante I esacién fea, Pero la intensa dedicacin a las plantas de macets a dado logar a ‘nuevos conocimientos y expeiencas, ye ha de- rmostrado que muchas de ells pueden vivir en sitios poco huminosos, que, en cierta crcunstancis,in- ‘eso admiten el cae dela vivenda, siempre, caro ‘ts, que se tomen algunas medidas indspensables ‘en su cuidado, Asimismo es necesario saber qué lar ares resulta ms idneo ara pasar el veran, hay ‘qe conocer ss necesdades en cuanto a humedad y nutrients, y considerar ls particulardades de cier~ ‘as familias o variedades espectficas. Sin conoxi- mientos de ningin tipo, nadie puede adentrarse en la materia y sto vale para cualquier persona que se dedique alas planas. Por eso el objetivo de este li bro es propotcianarle al afcionedo consejos pric- tieos en propia mano, ofrecerle soluciones a sus problemas y con ello faitale las claves para el cui- dado idéneo de sus plantas de maceta. Como siem- pre en el trato con sees vivos, el conocmiento no pede sus al amor yl ddicacins y ademas la propia experiencia es el mejor maestro. A pesar de {que pongamos en ello todo nuestro esmero y es- fuerzo no se descartan posbles percances. Ahors bien, si una planta realmente no florece 0 mar- chia, noes motivo para dar de nuestras aptitudes paral jardineria. Con las plantas de macetasiem- pre hay que pensar precsamente que muchas veces so propo exotsmo, esto es, la diferencia entre lo «que encuentran en su habitat y lo que les podemos ‘roporciona en elo, es la causa de las difieulta- des que pueden surgi. Por eso, nuestra ayuda les resulta imprescindible para sobrevivvi de acuerdo con sus exigencasy su fisiologfa vegetal en un en- ‘tomo host Yeste libro quiere mostrar los requis 1s fundamentals par lograto ‘Helmut Jantra ‘Neuried-Altenbeim Baden) Desde siempre se ha entendido por plantas ex6= ticas de maceta un grupo muy determinado que no se distingue por sus caracteristicas botinicas co- ‘munes, sino que se identifica ‘nicamente por ser autéerono de regiones eildas. Estas plantas pro- ceden de zonas climiticas tropicales 0 subtropica- les, lo cual significa que en invierno deben prote- gerse del fro en las zonas donde las heladas sean frecuentes; slo en lugares con inviernos verdade- ramente suaves pueden sobrevivir bien sin més atenciones en este sentido. En una gran mayoria cde casos se trata de arbustos, algunos de ellos se milenosos, asi como de ciertas plantas herbiceas, por ejemplo las pertenecienees a la familia de las Si exponemos el concepto de plantas de maceta con cierta amplitud de mia, sin duda, resulta ‘una gama enormemente colorist y variada, Asi- mismo, habria que partir de que este concepto barca todas las plantas que pueden cultivarse en recipientes. Un ejemplo de ello serian las plantas vivaces de ls zonas templadas, ademés de flores de verano, verduras, hierbas arométicas,frumas ichas otras més. Todas las flores multicolo- res de nuestras jardineras se incluyen también en esta categoria, asf como ls planta de interior de gran tamafio que pueden pasar el verano al aire libre. La expresidn moderne «jardin mévil»responde plenamente a esta idea que abarca todo lo que no «rece fijo en el suelo. No obstante, en primer lugar y fundamen talmente vamos 2 bablar de «las auténticas> plan- tas de maccta, ¢s decir, no de las que son resis- tents al rio, sino de la Aurion a la Yuen, de las hhuéspedes de nuestros jardines, baleones y terra- as, de aquellas que sélo florecen cada verano y pueden crecer porque las preservamos de as hela- das del invierno. Pero zeomo consiguieron llegar hasta aqui, zquién les allané el camino y cuindo ‘empezs tod 6 Varia de cori om as plowtas de mace, El largo camino hasta nuestro jardin ‘Muchos silos antes de Criso ya nos encontrs- mos con el eulkiva en recipient, por ejemplo, en el antiguo Impero egipcio yen los jardines persis. Can cl tiempo, su influenciase fue extendiendo hasta le- sara los magnticosjardines del renacimiento itli- no. Se sabe que los frutos de ls itrios ya se cono- can en el sur de Europa en el siglo xi, pero slo a Dartr del s.xV1 se introdujeron cada vez mayores cantidades en los invernaderos de los jardinesregios, yyparce de ellos también en los jardines de la burgue- sia y de comerciantes acomodados. En ls sigs s- ‘guientes, los naranjos y los imoneres se conviric- ron en los rboles de moda, yaquel que se preciaba de ser alguien, ezhibia al menos unos cuantos. Lo mismo sucedia con la higuera (Ficur cara), el grana- 40 (Panicngramatum)o el laurel (Lawrasnobili) “Mchas de ls planasforineas que hoy embelle ‘en jardines yterrazasen verano, hasta no hace mu- cho sélo podian impresionarnos en los jadines bo- tnicos. Actualmente, los canocimientos sobre ls téenicas de jardineriay el desarrollo de los merci dos, nos permiten el disrute de lo que ances slo es taba al alcance de unos pocos. En realidad, hoy en dia, las plantas exdticas son acesibes a cualquiera ‘que se interse por ells, Une imagen gue rea falr on roe mediterres: Infor del ve. Grands jardin de som come lr de Verlag plnas de mac, Elauge de las plantas de maceta es ya imparable, pesto que ls importadores fueron perspicaces ¥ el mereado de flores fae ereciendo, aunque al prin- iio de forma vacilante con plantas atractivas,y poco a poco con wn surtido mis amplio. Ciera- ‘mente, pasé un tiempo hasta que ls oferta alcanzé Hy come ee; la Data sigue ese aia 1 volumen actual y tambign hasta que las empre- ss exportadoras de plantas encontraron ese hucco nel mercado. La trompeta del juicio (Datura sur ‘lem, por ejemplo, aparecié en Alemania a me- diados de los afios setenta, después de darse a co rnocer por primera ver al gran piblico en una revista de jrdineria. Desde entonces y hasta el dia 4e hoy, esta planta sudamericana sigue cautivando a los aficionados a la ardineria y se sida en la ca Joeza de lista de preferencias en cuanto a plantas de ‘Sin duda, este florecimiento se vio favorecido también por otras circunstancas,y acaso fue po ble sobre todo por un factor: por la amplia gama de productos, cada vez mis extensa, del comercio pecializado que faciltaban la prctia de esta in en la vvienda yen el jardin; por estar prepara dos directamente para el uso, estos productos dlsipaban cualquier duda dl aficionado. Ente ellos encontramnos un sinfin de ierras pre paradas, mezclas de abonos de base y abonos espe y se adentrenenelinviemo eon tn crecinient fort, Por ete motivo lo abonos de larga duracin son poco apropiados para el cut- to en mace de plantas exdtias, sobre too aplia- dos desde el principio o medio verano y par los de lberacin mis lena, ya qu df elelar exin- dl cesar el jo de utente. Asinismo,e empleo exclusivo deabono onnico (por ejemplo, deetiér- ‘ob puede resaltarpeigrso por riesgo de quema- dura en as ices de plantas sensibleso por desjus- tes entre la necesidad de la plana y a pesencia de ruientes en el suelo. La exigua vida de la tera transforma con extrema lenttud estos materiales en snvientesasor bibles, de manera ques plantas su- fren de forma latente por lacarencia de nutrients, lo cual en las grandes consumidoras como las sla cea se tradice en una reducein de la vegetacin. No tenemos nada en contra de la mezca adicional de unos puBados de raspadura de cuerno (preparado La icra de et pune fica om rapa de cur co en fforoy potsi) en el momento de plantar ‘owaspantr, pero es mejor renunciaralabono propio de jardin para las plantas de maceta, ya que munca se puede exchuir del todo la transnsin de orgaismos perjdiciales para la planta. En el jardin, la mayoria de as veces no se aprecian porque ls robustasplan- tas que crecenlibremente en el suelo apenas sever afectadas, mientras que en la maceta las consecuen- ‘as pueden serverdaderamentedesastrosas,y puede suoeder que cuando se encuente la raz del mal, a planta exotica haya pasado yaa mejor vida ‘Machas plantas de maceta extn acostumbradas 2 soportarlargos periods de sexuia ens tierra de or- gen. No obstante, eto no sigifca que debamos pe- dirles lo mismo cea extn en un recipients, ya que no tienen la posibiidad de absorber com ls ries el ‘gua necesaria de las capa profundha del suelo, sino «que exin imitadas alo que encuenren en lair de Jn macets: de hi que el suelo deba manteners siem- pr ligeramente med Ademis, las necesidades de ‘gua son may variables setn la plantas port tomar ‘oa mais exctamente dea indcacone para su cui- dado en cl capitulo «Pla de maces dela A.alaZ>, donde se espeeifian ls exigencas deca plan CGbe citar aqui en primer ugar dos esas por las que el rego resute daino. Ambas afectan por ‘gual a todas las plantas de maceta, a saber, el em- pleo de un agua demasiado dura, sa, con un alto contenido en eal, ye exceso de agua. Sin embargo, salvo algunas excepeiones como el Calitemon, el Encaptas y los cisicos, casi vos las plantas de ‘maceta se contentan con agua corrente dura. La ‘aleificacin puede originarse y sobrevenir cuando 1 agua es extremamente dara, el recpiente moy ‘estrecho yla tierra muy compacta de manera que, B alcabo de cierto tiempo el indice de cal deja de ser tolerable para la planta. En este caso, algunos oli- xoelementosimprescndibles para el ciclo vital se «quedan adheridas al suelo por el exceso de cl y no pueden ser absorbidos por las races. De ahi que siempre sea mas seguro emplear agua de livia. Si ‘no dispone de ella, puede ablandar el agua de rego on un saquito de turba, sumergido durante un tiempo en el agua de rego, con lo que ésta tenders 2 aciificase. También sirve de ayuda dejar repo- sarlaregaderaveinticuatro horas para que una par- te de la cal se precipite en el suelo. EL riego demasiado frecvente esl segunda cau- sade qu una plana result dada, pero esto poe- de critare ficilmente. No debemos olvidar que, ‘por norma general, as plantas toler mejor la se- «guia que ef encharcamiento, Si-en alguna ocasi Jes planas permanecen mucho tempo sin agua, tas moeseran su carencia 4 mavés de una paulatina tmarchitezy posterior cada de las hojas, pero si el descuido se repara con rapide y copiosament, los efectos de la falta de agua sesuperan pronto. Enel caso de la erompeta dl uicio, por ejemplo, hay que sceptar que las flores na ver mustis se caigan y «que algunas hojas amarilleen, pues se tata de una cireunstaneia natural y psaera, Elefeco de un encharcamiento es mucho més te- naz. La fala de anigeno provoca que las races em- piecen a pudrise,impiiendo la absorcin de agua y de nutrients. El euadrosintomitico es parecido al producdo por la sequia: Ia planta se marchita, aun- {ue los dafos se manifistan de una forma dstinta a ls que se producen por la filta de rego, ya que la rmarcite es genera, feta tanto als hojas nueras como a as ves y la mayoria de las veces no existe solucién. Conseguir que se regeneresecindola por partescs an slo cos de suerte. Cuando el reipien- te posee un orifco de drenaje en la base yl tera es Poros, este tipo de erores de riego son muy poco frecuentes en verano, So hay que presar un cuida- do especial si inerdtucimos a maceta en un macete- ro. En este caso, se recomienda controlar el reci- pint después del rego yreirar el agua sobrante- ‘Durante el periodo de descansoinvernal lasun- to del riego es mis complieado. En un invernadero ‘que no exté suficientemente iluminado, el resgo de pptrefacién sulesuele er muy alto yprecisamen- te aqui es donde las esporas de los hongos, porta- dores de enfermedades, yacenlatentes. En los ar- 4 {sau a de arbre emerges al mote arenes 24 barat code aa deaf aga (Gaondy of masters elnacnn agua brant. 3 pra ieente wn encbarsiete de ate ey ad inal a ics padre. bustos de hoja caduas, cuya vegeraciOn se inte srumpe en estos meses, lo mds adecuado es mante~ ner el suelo ligeramente himedo, El exibo o crests de gallo (Exybrina crsta-gall) constituye una de ls pocas excepciones, ya que sv periodo de descanso vegetatvo tiene ugar al sali- da dl invierno, Las planassituadas enn Tugar lu- tminoso y caldeado evidentemente deben regarse mis, dado que su proceso vital continga, aunque sea mis lento, Esto vale también para todas las plantas perennes. ara aquellis que se decida mantener al exterior, seri necesario disminuir a frecuencia eintensidad de los riggs en relacin alos factores meteorologicos y al estado vegetativo de la propia plants La poda y el cambio de maceta La poda de cbse ya de elareado tienen los mis- ‘mos objetivos que perseguimos enlapoda de arbus- vos oramentales de jardin: estimalar el nvevo bro- te, Para ello es conveniente retrar los vistagos <ébileso los marchitos, de modo que toda la planta se airee y reciba luz suficiente. Enel caso de la la- sgerstroemia ye granado sobre todo, erecomienda climinar todas as ramasdébiesy reeora regular- ‘mente los brotes largos en inviemno. La foci, la margarita y la Pombo aurcuata erecen mis tupi- das el ao siguiente sal inal del invierno se recor- ‘an tanto los brotes mas déiles como los del aio anterior a un tercio de su longitud. La aelf, por conta, se debe claeary retener en longitud hacia ‘mediados de septiembre, para que durante el invier- ‘so empiecen a creer los brotes que orecerin al ve- ino siguiente. En cuanto a la trompeta del jicio, sta taea se realza preferentemente en primar, ya que florece sobre tallos nuevos que crecerin due ‘ante a siguiente primavera y verano. Ea bs plantas tue inden a un crecimiento desplegadoy poco po- blado se puede estimula Ia ramifeacin mediante el despunte o el pinzado como se dice en la jenga es- pecialzada—de as puntas de os brotes ai ties. Los jardineros versados en las esas 6 saben y con- tnbuyen a mejorar con este método el aspecto de los ejemplares que presentan un crecimiento poco com- pact. Al realizar esta tarea puede ser que se retien también los broes dels res stados n as puntas de los vistages, pero hay que aceptaro asa planta ‘compensa esta pérdida muy pronto através de nue- ‘vos véstagos con botones de flores. Soba decir que ‘Pad ne pleas de ac: pier rin tas eee perf. _y ov maces plantar a coninacin recomend baer 1 ens dept. Ate prepara wna penta de rangi al. ‘ay Lantana de rogue lls margaricasemarilas tambon can pore tom cm 16 Disp prinero ve dpa las principal feos aera, se debe proceder con euidado, eliminando sinica- mente Ia punta tiema de las ramasaislada. Ademas de esta poda algunas plantas de maceta aadmiten la posibilidad de una poda especial de cla- reado pars darles forma, especialmente cuando uno pretende critr por si mismo una planta joven y convertila en un tronguito ato, realmente cos- toso en el mercado. A este grupo pertenecen casi todos los arbusts leiosos de flores. Habra que ci- tar ante todo la margarita pero también las Bou- gece, las fuss, las lntanas, as Phimbago auri- ‘ulaay algunas otras que pueden adoptar Ia forma de tronquito alto con un poco de paciencia. Para ello, hay que limpiar de ramas el vistago mis vigo- oso de una planta joven, eliminar regularmente todas las ramificaciones que salen del allo y final- ‘mente desmocharla en el momento en que ha al canzado la altura deseada, Se consigue una copa tupida cuando se despunta repetidas veces las ‘mas que laforman. Al igual que en otras tareas de mantenimiento, tambien hay pautas establecidas para el cambio de recipiente. Asi, para saber cuindo es necesario tras plantar hay que tener en eventa el tamaio y el exe Cimento de la planta, la envergadura de las races y cl estado del sustrato. No todas las: plantas son ‘como Datura que erece mejor cuanto mis espacio ‘pea. Ya hemos mencionado asimismo que la yuca ‘también puede vivir en una maceta pequefia incly- so cuando el rapido cepellén de las ratces ha desa- Iojado pricticamente toda a tierra, hasta el punto ‘que el dia menos pensado el tiesto puede estallar por la presi. ‘Ex agua plas recomend deena vigaracmete cl enramads de a resets de camila de mac. De ea wana by mad pac on la mca ypc rillmars on tra macs cal eal la forma mcs res sas ries pueden baer recent la pared del recipe monrende aig neta es mae. El cambio de tiesto se realiza a a sala del in- vierno o durante la primavera, en el momento en que as plantas empiezan a vegetar. Fla siempre un recipiente ligeramente mis grande para que ppueda rellenar con tierra nueva el espacio libre entre el recipientey el cepellén de las raices. En cl caso de muchos arbustos como la Datura o Ia adelfa e rocomienda ademés desmenurar vigoro- samente el entramado de las raices perimetrales con un cuchilloaflado y grande. De esta forma, ademis de conseguir més espacio en la maceta, a planta recibe un estimulo pars volver a formar ‘nuevas races. La absorcin de agua y de nutrien~ tes también aumenta, actuando favorablemente sobre la vegetacién y el crecimiento, Se puede ‘mezclar unos puBados de raspadura de euerno en cel sustrao; con la fertilizacin se empieza silo en ‘el momento en que aparecen los brotes nuevos, pues es indicio de que ls rafces han agarrado en el nuevo alojamiento, Proteccién durante el invierno Los meses inverales, fos yescasos de Iv, son Ja peor época para toda las plantas de maceta en Jogares algo fros que no puedan ser alojadas en un Pequefio invernadero, Para la mayoria de estas plantas exStices resultan idéneos los lugares pro- tegidos de las heladas,y a vez frescos ylumino- 505. Pero zquién los tiene? Lo que podemas ofre- cerles es casi siempre un paliatvo de emergencia: sotanos, buharillis, garajes, las esaleras de la casa o la sala de estar. Las difcultades empiczan cuando hay que conseguir que mis de uno 0 dos ejemplares superen el invierno, Nuestras posibili- dads de prestales ayuda son limitadas, Prinipal- ‘mente consisten en preservar el cepellén'de la sequia, pero sobre todo del encharcamiento. A menudo tambign hay que area la planta durante algunas horas, incluso en los dias mis ris. Procu- +e no introducir las plantas en su alojamiento in- vernal con la era empapada, ya que en una sala ‘oscuray fra, as races se pudren antes de que el sustrato pueda secarse. La poda de reba que se realiza en oto con- ‘ribuye a ahorrar espacio y evita el riesgo de un ataque de hongos. Uslzar la sala de estar de in- HL aforanat propia de ee icernaders we tw wing vemnadero para algunas plantas como los limone- +, os naranjs, el ensete, las adelfas ola yuea en los lugares muy fri es completamente facile, ‘pero muchas veces no da resultado sobre todo si las plantas son de gran tamaio sino hay luz su- ficiente. Ea un lugar cdlido el crecimiento no se iterrumpe, y como la planta requiere una canti- ad de luz suficiente para su ciclo vital, la claridad ¢s impreseindible. Por lo dems, en una habita- cin célida cabe esperar casi inevtablemente la aparicion de icaros y cochinillas. En general, se Adeberia acortar el periodo de descanso invernal en Ja medida de lo posible. En cambio, en los lugares en que las heladas no sean frecuentes, para la ma- yorla de especies bastard con situarlas en un lugar protegido, bajo una cubierta, 0 al abrigo de los viento frios ‘Mientras son jvenes, la mayoria de las plantas dde maceta resisten el frio més de lo que general- 18 Prblona per lj emf cir plata de mat mente secre. Hay que aia oe, se dispone de ‘un nga roteido en a terraza oun pred que = tenga el viento ya luvia no hay que temer el efecto elas primera helaas noturas. Pero es evidente que el bes; ka Tiboucing, el Ens, el Ppyrasy 1a Bougaincies no deberian exponese esa proe- ba. Las planta que han pasido el invierno en un la- {a fro som menos sensibles que las qu hayan «s- ‘ado en un lugar edo y, en conseeuenca,brotan antes. Dado que los retoios tirmosy verdes apenas resisten los fros postinvernals, no convene de~ jnrlas al sire libre demasiado pronto, Si caste la po- sibilidad, estas plantas deben colocarse a principios

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