UNA CRUZ QUE DEBE SER CONTEMPLADA Y PREDICADA CON VALENTA

Dice el Seor que su Cruz se debe predicar con energa y con valor, no con
timidez y apocamiento. Dice que la Cruz siempre vence y tiene virtud, porque
la virtud no puede separarse de la Cruz, puesto que la esencia de la virtud es
Jess. Parece que ha llegado el tiempo en que la Cruz se levante muy alto y de
que las miradas se vuelvan a ella y los corazones ah se claven y las rodillas se
doblen ante el Espritu Santo, y el Corazn de Jess sobre una Cruz, ms la
amar y ms se santificar. Cada da descubrir en ella nuevos tesoros y
jams llegar a comprender su valor. (C.C. 10, 8 de junio de 1898).
MEDITACIN..

CANTO..

EL PLAN DEL PADRE EN VISTA A LA SALVACIN DEL HOMBRE

Oye hija, un secreto de mi corazn. Mi Padre me engendr eternamente en s
mismo, pero tambin eternamente me engendr en Mara por obra del Espritu
Santo. Porque ese misterio tuvo su efecto material en el tiempo, pero tuvo su
principio desde que Dios fue Dios, es decir, eternamente. Por este motivo fue
necesaria la encarnacin del verbo, para realizar el ideal del Padre en M, el
ideal de hacer a su Hijo nico, Dios y Hombre para ser por l, honrado y
glorificado. Te deca que para esto fue la encarnacin, para realizar lo que
eternamente mi Padre tena en su mente y en su corazn, es decir, en el centro
de su unidad, que es Amor. (C.C. 56, 271-280, 25 de diciembre de 1930).
MEDITACIN..

CANTO..

UNIDAD Y DIVINIDAD DE DIOS

Mira la Eucarista, en donde Yo estoy, es misterio de unidad; en la Eucarista
estoy en el pan y el vino que se consagran, trocando la substancia del pan y el
vino en M, el centro fecundo en donde reside la Divinidad, y en esa substancia
estn mi Cuerpo y Alma creados, y la Divinidad increada, que est en M
tambin dndome la vitalidad celestial, producida por la divina substancia del
mismo Dios.
Yo no me convierto en substancia, la substancia del pan y del vino son las que
se convierten en M, no tan solo en la substancia de una hostia, sino en la
substancia o partcula de cada hostia y de clices a un tiempo. Pero sabes
por qu no me divido? Porque soy uno indivisible, que multiplicndome no
pierdo mi unidad. (C.C. 60, 390-397, 6 y 8 de abril de 1933).
MEDITACIN..

CANTO..