(CondAca Woven Low
Jean Piaget 5 eer
El
nacuniento
‘Existen, en efecto, en el desarrollo mental, eleme
de la y otros invariantes. De donde derivan los mslentendidos ie
psicolégico, algunos de los cuales desembocan en Is atribucién, de
: li : aacetessoperores a os etadios inferiores y los demés x In putve-
rizacién estadios y de operaciones. Conviene, por consi-
inteligencia cane Seca a‘ ver el preformisino de i peicologiaintleccrlista
oa stesis de las heterogeneidades menteles. La solucién de esta
en el nifio ve en Is dst cre is
ariantes. De la misma mane-
= Pp. 14 ~ 18. tm que las grandes funciones del ser viviente son idénticas en codos
los argaaismos, pero crsesponden « rgenoy my ierentes de on
1, Los sevansanra: * ra : grupo a otro, de igual ‘entre el nifio y el adulto aeistimos a une
Ee ane cen ane Frescgn continua de estructuras vaiadas, annque las grandes funci-
nes del pensamiento permanezcen constantes.
Ahora bien, estos fancionamientos invariantes entran en ‘el marco
de Ine dos funciones biolbgicas m&s generales: In organizacién y la
vacién.
‘Buequemos una mayor precisién, desde un punto de vista com-
pletamente formal. El otgenismo es un ciclo de procesos ffsico-quimi-16 EL NAGIMIENTO DE LA INTELIGENCIA
respondien-
cel esquema de la organiza
a en reacciones quimi-
ancias x que transfor-
rmaré en sustencias b que entrarén a formar parte de su estructura),
sea en transformaciones fisices cualesquieta, sea finalment
particular, en comportamientos sensoriomotores (cuando un
movimientos corporsles ¢ combinados con unos movimientos exte-
riores x concluyen en un resultado b que entra a su vez en el ciclo
de organizacién). La relacién que une los elementos organizados
4,6, fos elementos del medio
Si denominames acomo
‘idas por el medio (
consecuencia que Ja
EL PROBLEMA BIOLGGICO "7
(que s¢ con
mente para asimilatles
como las otras se adap-
‘encontrarse adaptado a una realidad més que si existe uns perfecta
sacomodacién, n esta realidad nada acude ya e modificar
A la inverss, no obstante, no hay adapta-
hha impuesto unas actitudes motrices o men-
vo oa Ia del plano orginico, y todas
bles. Pero siempre y en todas Jes par
nado més que cuando desemboca en un si
‘cuando hay equilibrio entre la acomodacién y
Ello nos conduce a In funcién de organiz
tlided fancionl 9 iterdependencis
organizacin y In adaptacién, Por lo que se refiere a las relaciones
2 ewer18 BL NACHMTENTO DE LA INTBLIGENCTA
J todo, que definen a la organizaci
intelectual es siempt
das. ‘Todo. acto de inteligencia supone. un
ificaciones solidarias, En cons
jempo, [a causa
ete.— corresponden
—el espacio y
10 modo que
terJOSE ANTONIO CASTORINA *
PSICOLOGIA
GENETICA
ASPECTOS METODOLOGICOS FE
YMPLICANCIAS ‘PEDAGOGICAS
ALICIA LENZI + SUSANA
RIA KAUFMAN * GLADYS PALAU
= Fp. 73 = 76.
wey
73
4. LA ILUSION DEL NERO ASOCIAL
do la tesis ¢
molégica de universales cos
existencia de
jén, continuos con los g}
y en el sentido de que las nociones de base,
las invariantes nocionales como la materia, el volu-
men, Ia longitad, etc., se elaboran en todos los indi-
viduos y en un orden secuencial constante.
‘También es cierto que se considers que los estudios
interculturales, en el marco do las leyes de In cons-
truceién cognéscitiva, podrian permitir diferenciar lo
que en el desarrollo era comin a todos los sistemas
culturales y por ello atribuibles a los instrumentos del
sujeto, y lo que era particular a causa de la interven
cién de condiciones socio-culturales.
Los estudios mostraban que en la mayorfa de las
culturas se constituian nociones basicas comunes, a
velocidades diferentes, y siguiendo, basicamente, una
misma secuencia. Sin embargo, hay..resultados que
podrian considerarse como contracjemplos. Asi, segin
Seagrim,? ciertas tribus de Austria que viven en su
medio cultural original no Megan a formar la conser-
vacién de la materia, mientras que para otras gctivi-
dades hay evidencia de razonamiento operatorio. Lo
que es: interesante a nuestro propésito reside en el
hecho de que esta organizacién social no tiene pro-
piedad personal, ni acopio de comida, y cuando dis-
fribuyen el producto de la caza lo hacen de acuerdo
a regias que no involucran una compensacién cuan-
titativa. El concepto de cantidad de materia basade
ia atribucién de cantidades, compensado ‘el “mis”
y el “menos”, entre el mimero de fragmentos y su
tamafio, por ejemplo, no se ha elaborado. Por su par
te, Dasen* encontré que entre pueblos némades y
cazadores, como los esquimeles y otras tribus austra-4 Jos ANTONIO CASTORINA
lianas, Ia estructuracién de invariantes espaciales son
mis precoces que la conservacién de la materia.
Estos resultados son sugerentes: gse puede construir
un razonamiento légico sobre pardmetros que care-
cen de significado para el individuo?; en el otro caso,
@l caréeter vital de las actividades espaciales parece
Gar cuenta de la precocidad de su formacién respecto
de otras invariantes.
‘si fueran aceptables los datos anteriores y otros no
relatados aqui, nos veriamos obligados a matizar un
Tanto los universales cognoscitivos postulados por la
teorfa, Podria pensarse que los mecanismos de cons-
fruccién son invariantes, y que también son necesarias
Jas invariantes nocionales para poder pensar el mun-
Go. Pero puede haber cambios en Ja secuencia de
Gesarrollo, y atm ausencia de alguna categoria hasta
hace poco considerada como comiin a todas las cul-
turas. Una estructura de conocimiento puede no gene-
talizarse inmediatamente a todos los contenidos ya
Gue hay distintos grados de familiaridad con los con-
tenidos a estructurar, lo que en este caso parece de~
ponder de una experiencia social. Es decir, que_las
prdcticas sociales diferenciadas, propias de una deter-
Jhinada organizacion social, al atribuir o no signifi-
tado a los objetos puede influir en el proceso cons-
tructivo del conocimiento.
Mas atin, los estudios psicogenéticos en nuestra
propia sociedad industrializada ponen de relieve de-
Palages en la formacién del pensamiento formal que
pueden, en alguna medida, ser atribuidos a factores
Pyciales especificos. Para no citar sino un resultado
entre una -abundante literatura, Uzan? encontré que
flumnos de un mismo grado, adolescentes, pero per:
fenecientes unos a una escuela de disefio industrial
y otros a una escuela de oficios, tenfan un desarrotlo
diferente del pensamiento formal. Los primeros se
Sneontrapan en un nivel estrictamente formal y los
segundes en una etapa intermediaria entre el pensa-
qniento conereto y el formal. En el grupo de mayor
Tendimiento habia mas éxito en taeas de orden més
logico (combinatoria y permutacién), mientras que
entre los segundos, pertenecientes a grupos sociales
ILUSIONES PEDAGOGICAS 75
Hamados “desfavorecidos”, tuvieron sus mejores ren-
dimientos en tareas intelectuales de tipo fisico (prue-
ba de flexibilidad de Jas varillas, por ejemplo). Puede
conjeturarse que hay una orientacién diferenciada de
la actividad intelectual en dependencia del subgrupo
cultural de origen.
Por lo demés, el propio Pinget, ante Ia evidencia
empirica de que muchos adolescentes no accedian al
nivel formal, formulé la hipétesis de que los individuos
Hegan al nivel formal, pero en dominios diferentes,
lo que depende de sus aptitudes y especializacién pro-
fesional (estudios diferentes 0 aprendizajes distintos
segiin oficios). Y, lo que es interesante, no se puede
pasar de un campo de intereses a otro, es decir, que
in mecénico tendrfa dificultades serias para pensar
de modo hipotético - deductive en cuestiones juridi-
cas, y Teciprocamente, a un jurista le sucederia otro
tanto con respecto a cuestiones de mecénica."
Estos resultados atin provisorios, y muchos otros,
van al encuentro de una creencia muy comin segin
la cual en la practica psicopedagégica se trata de un
nifio. “genérico”, que debe transitar por las etapas
del desarrollo intelectual, descontextuado de su per-
tenencia a un mundo social y cultural especifico. Pen-
sando en ese nifio —aunque no siempre declarada-
mente-, los atrasos y desvinciones son considerados,
‘en todos os casos, como indicadores més 0 menos
patolégicos de “inmadurez”.”
Quizs, en algiin sentido, el tomar en cuenta el
caracter condicionado del desarrollo intelectual por
diferencias culturales, Hevaria a plantear interrogan-
tos a la practica psicopedagégica. Podria suceder que
bajo la creencia en un desarrollo descontextuado 0
sometido a las estimulaciones de un “medio” indif
renciado, pase por ser un “déficit” 0 una “inmadure:
Jo que es producto de diferencias culturales. En otras
palabras, el desconocimiento de la heterogeneidad
socio - cultural, de que los nifios de sectores sociales
populares hacen experiencias tan ricas como los otros,
pero con distintas zonas de pertinencia, les haria con-
siderar como “retraso” a lo que es sélo una di i
y les haria negar la originalidad de la actividad cog-76 JOSE ANTONIO CASTORINA
noscitiva de esos nifios. La posibilidad de convertir
tuna diferencia en una desigualdad es una consecuen-
cia de aquel supuesto del. desarrollo. descontextuado.
{su critica deberia conducir a los psicopedagogos a
revisar algunas de sus interpretaciones y a valorar
no sélo los aspectos generales del conocimiento infan-
til, asi como los aspectos fantasmaticos y libidinales,
sino también las pautas culturales y la determinacién
del sector social al que pertenecen sus alumnos y
pacientes.