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Alianza Universidad Noam Chomsky El conocimiento del lenguaje Su naturaleza, origen y uso Versién espafola de Eduardo Bustos Guadano Alianza Editorial ~ 1982- Capitulo 1 EL CONOCIMIENTO DEL LENGUAJE COMO. OBJETO DE INVESTIGACION El estudio del lenguaje tiene una larga y rica historia, que se extiende a lo largo de milenios. Se ha concebido frecuentemente este estudio como una investigacién sobre la naturaleza del entendimien- to y el pensamiento bajo el supuesto de que «las lenguas son el micjor espejo de Is mente humana» (Leibniz). Una idea eorriente era que «con respecto a su sustancia la gramatica es una y la misma en todas las lenguas, aunque pueda variar en cuanto a sus accidentes» {Roger Bacon). A menudo se pens6 que Ia «sustancia» invariante era Ja mente y sus actos; las lenguas particulares utilizan diferentes me- canismos —algunos ‘de los cuales se encuentran enraizados en la 2z6n humana, otros son arbitrarios y circunstanciales— para la ex- presién del pensamiento, que permanece constante de lengua a len- 1. Uno de los més importantes graméticos racionalistas del siglo dicciocho definié la egeamética general» como una ciencia deductiva referente a «los principivs inmutables y generales de la lengua escrita © hablada» y a sus consecuencias; es «previa a cualquier lengua Porque sus principios «son idénticos a los de la misma razén huma- fa en sus operaciones intelectuales» (Beauzée). Por eso, «la ciencia del lenguaje no se diferencia en absoluto de la ciencia del pensamien- to». La «gramitica particular» no es una «ciencian autentica en cl sentido de esta tradicin racionalista, porque no se basa tnicamente én leyes univesales y necesarias; se ta de un sates 0 tecnica gee evidencia la forma en que las lenguas concretas encarnan los princi- ppios generales de la raz6n humana. John Stuart Mill expres mis El conacimiento del lengusie como objeto de invesigaciin 5 tarde la misma idea rectora: +Los principios y las reglas de la gra- mitica constiuyen los medios mediante los cles se hacen coves ponder las formas lingiiistcas con las formas universales del pensa- miento... La estructura de cualquier oracién es una leccién de l6gi- cae. Otros, en especial durante el periodo Romintico, arguyeron que la naturaleza y el contenido del pensamiento se encuentran de- terminados en parte por los recursos disponibles para su expresin en las lenguas particulares. Estos recursos pueden incluir contribu. ciones del genio individual que afectan al «caricter» de una lengua, enriqueciendo sus medios de expresién y los pensamientos express. dos sin afectar a su «formas, su sistema fonolégico y las reglas de formacidn de palabras y oraciones (Humboldt). Con respecto a la adquisicién de conocimiento, era ampliamente sostenida la idea de que la mente no es tanto algo que es preciso Ienar desde el exterior, como un recipiente, como algo que precisa ser encendido o despertado» (Ralph Cudworth); «el desarrollo del co- nocimiento... [se parece més}... a crecimiento de un fruto; aunque {en cierta medida puedan cooperar las causas externas, son el vigor interno y el caricter del Arbol los que han de llevar los jugos 2 su justa madurez» (ames Harris)! Aplicada al lenguaje, esta coneep- [Setclalmenteplatnica parece sugerir que el eonocimiento de una lengua determinada crece y madura por una via que en parte se encuentra intrinsecamente determinads, con las modificactones que refleje el uso observado, al modo del sistema visual u otros “6rganos» corporales que se desarrollan por vias determinadas por las instrucciones genéticas, bajo los efectos desencadenantes y con- formantes de los Factores ambientales. Con la excepcién del relativismo de los rominticos, estas ideas fueron generalmente consideradas con desaprobacién por el nicleo rector de la investigacién lingiistica a finales del siglo diecinueve y hasta los afios cincuenta. En parte, esta actitud se desarrollé a partir del impacto de un empirismo mas bien estrecho y, luego, de las doctrinas operacionalistas y conductistas. En cierta medida, consti- tuy6 el resultado de las auténticas e impresionantes realizaciones de los estudios historicos y descriptivos, Hevados a cabo dentro de un Ambito més estrecho, en particular el descubrimiento de «leyes co- teeta» que proporcionan explicaciones sobre la historia de las len- {guas y sobre sus interrelaciones. En cierto modo, fue la consecuencia natural de la investigacién de una variedad de lenguas mucho mis gai caine ee ous muchas, abe todo en siglo dc tecdicinueve, véase Chomsky (196), Pars Ta dscusion de alguns interpreracess erréneas de esa obra, véase Bracken (1984). ™ iia 6 Noam Chomsky rica que la conocida por los estudiosos anteriores, lenguas que pa- recian violar muchas de las concepciones supuestamente a priori en Ia tradiciGn de los primeros racionalistas*. ‘Tras un siglo de aban- dono o de descalificaciones generales, han vuelto a surgir, a media dos de los cincuenta, ideas similares 2 las de esta antigua tradicin (en un primer momento, sin que hubiera précticamente conciencia de esos antecedentes histéricos), con el desarrollo de lo que se ha dado en llamar «gramética generativas, volviendo a revivir, una vez mis, una tradicién olvidada durante mucho tiempo >. La gramitica generativa de una lengua particular (donde «gene- rativas ‘s6lo significa diferenciada, con una estructura y propiedades 8 Noam Chomsky especificas 0, como algunos piensan, la realidad es que los seres Ingmanos adquirimos el Fenguaje mediante la mera aplicacién de cier- tos mecanismos generales de aprendizaje, quizas con una mayor efi- Gencia 0 aplicacion que otros organismos? Estas no son cuestiones para especular 0 razonar a prior, sino para una investigacion empi- Fica, y el procedimiento resulta bastante claro, a saber, tratando de responder a las preguntas de (I). Tratamos de determinar cual es cl {stado de conocimiento alcanzado y cules son las propiedades que es preciso atribuir al-estado inicial de la mente/cerebro para Cuenta de ese logro. En la medida en que esas propiedades sean especificas del lenguaje, o bien ‘ndividuslmente consideradas, 0 en Cuanto 2 la forma en que se encuentran organizadas y articuladas, tentonces existira una facultad lingifstica diferenciada. "A veces se menciona la gramatica generativa como si fuera una tcoria mantenida por tal o cual persona, En realidad, no es una teoria nds que en la medida en que lo pueda ser la quimica. La gramtica cs uns disciplina que uno puede escoger estudiar 0 no. Por supuesto, fe puede adoptar un punto de vista de acuerdo con el cual Ia quimica detaparece en cuanto disciplina (quizas todo lo hacen los angeles con esperos) En este sentido, una decision de estudiar quimica entrafia tina postura sobre cuestiones de hecho. De forma parecida se puede Sryumentar que [a gramética generativa no existe, aunque es dificil iimaginar cémo puede hacerse minimamente plausible, esa postura Deniro del estudio de lx geamstica generativa ha habido: muchos cambios y diferencias de opiniones, a menudo recuperacién de ideas {que se habian abandonado y que luego fueron reconstruidas bajo un Frisma diferente. Evidentemente se trata de un fenémeno saludable fue indica que la disciplina esté viva, aunque a menudo se considera qyoneamente que se trata de una deficiencia seria, un indicio de que igo va mal en el enfoque bésico. Repasaré algunos de estos cambios mas adelante ‘A mediados de los cincuenta, se avanzaron ciertas propuestas sobre Ia forma que deberian tener las respuestas 2 las preguntas de (i) y se inicio un programa de investigacién para averiguar Ia ade- Guan de estas propuestas, para perfilarlas y para aplicarlas. Este programa constitay6 una de las ramas que condujeron al desarrollo Ee fas ciencias copnitivas en el sentido actual, compartiendo, con tros enfoques [a ercencia de que ciertos aspectos de la mente/eere- bro se pueden captar de forma util mediante el modelo de los sis- temas computacionales de reglas, que forman y modifican represen taciones y que se utilizan en la interpretacidn y en la accién, Desde Sus inicios {o, con miras mas extensas, podria decirse que desde su steencarnacigns) hace treinta afios, se emprendié el estudio de la El conocimiehto del lenguaje como objeto de investigacion 9 gramitica generativa con un ojo puesto en el objetivo de aleanzar Elgin avance en el estudio de lz naturaleza y los origenes de los Sistemas de conocimiento, creencias y comprensién més amplios, con la esperanza de que estas cuestiones generales pudieran quedar Soe een de sia investgacion detalada del caso particular del lenguaje humano. Desde entonces se ha estado Ilevando a cabo este programa de investigacidn, por caminos diferentes. Ahora me interesa s6lo uno de ellos, junto con los problemas con los que se enfrentd y los pasos {que se dieron para tratar de superarlos. Durante los pasados 5-6 afios Convergieron estos esfuerzos de una forma un tanto inesperada, ob- teniendo una concepcién mas bien diferente de la naturaleza del Tenguaje y de su representacién mental, una concepcién que ofrece respuestas interesantes a una gama de problemas empiricos y que bre otros 2 la investigacién, al tiempo que sugiere un replantea- aan ores Lacicterdevion dems. Ello juifica un innegable senti- miento de cnergia y anticipacién, y también incertidumbre, que re- Guerda al periode en que se inicid el estudio de la gramatica gene~ fativa, hace unos treinta aios. Algunos de los trabajos que ahora se Emprenden son muy diferentes en caricter de lo que previamente ‘era posible, al tiempo que considerablemente superiores en alcance fempirico y podria ser que estuvieran a la mano, 0 por lo menos a fn vista, resultados de una clase muy novedosa. Me gustaria explicar por qué esto es asi comenzando con algunas observaciones sobre los Mer los os logros Tos fracasos de los afos pasados ara evitar cualquier malinterpretacién, diré que no estoy ha- blando de todos los estudios sobre el lenguaje, sino més bien de la gramatica generativa, e incluso en ese caso no intentaré nada pare- Bio a una historia real del desarrollo de la investigaci6n, sino que proporcionaré una imagen un tanto idealizada, que en parte resulta hie clara vista desde ahora de lo que lo fue en su momento. Por iro lado, lo que describo ha representado siempre la posicién mi- noritaria,'y posiblemente Jo sigue siendo, aunque creo que ¢s la Correcta, Varios enfoques diferentes comparten cn la actualidad pro- piedades con el que aqui se discute y pueden traducirse a él en una Considerable medida. No consideraré ahora esta importante cuestiOn y no me esforzaré en enumerar todas las ideas, a menudo en con- THicto, que caen dentro de la tendencia particular que discutiré, lo ique 4 veces se denomina «la teoria del ligamiento y la reaccion+ (LR). ‘Luego, quiero considerar dos importantes cambios conceptuales, el que inauguré el estudio contemporineo de la gramatica generativa yr en segundo lugar, el que ahora se encuentra en marcha, que es » ‘Noam Chomsky mis interno a la teoria y que ofrece algunas perspectivas nuevas sobre problemas tradicionales *. fines espe Las gramiticas tradicionales y estructuralistas no tratar Blemas de (1), las prmeras a causa de su dependencia implica de Ia inanalizada inteligencia del lector y las segundas a causa de la estrechez de sus miras. Los intereses de las graméticas generativa y tradicional son en cierto sentido complementarios: una buena gra- mitica tradicional o pedagégica proporciona una lista completa de ‘excepciones (verbos irre ches, ‘etc.), paradigmas y ejemplos de cons- trucciones regulares, y observaciones, en diferentes niveles de detalle i generaiidad, sobre la forma y el significado. de las expresiones. ero no examina la cuestién de cémo el lector de la gramatica usa esa informacién para obtener el conocimiento que se utiliza para formar e interpretar expresiones nuevas, o la cuestién de la natura- leza o los elementos de ese conocimiento: esencia, las cuestiones de (1). Sin exagerar mucho, se podria describir una gramatica de esta clase como una versin estructurada y organizada de los datos que se le presentan al nifio que aprende una lengua, con un comentario general y a menudo agudas observaciones. En contraste con ella, la ramitica generativa trata ante todo de la inteligencia del lector, los Principios y los procedimientos que Je han Ievado a la obtencidn de tun completo conocimiento de una lengua. Las teorias estructuralis- tas, tanto en [a tradicién europea como en la americana, tratan de los procedimientos analiticos para derivar de los datos aspectos de la gramitica, como sucede en las teorias procedimentales de Nikoley Trubetzkoy, Zellig Harris, Bernard Bloch y otros, pero sobre todo en las reas de la fonologia y de la morfologia. Los procedimientos avanzados eran seriamente inadecuados y no se los podia concebir de ningiin modo (ni lo pretendian) como una respuesta a la pregur 12 (li) ni siquiera en los Ambitos més limitados en que se concentr6 la mayor parte del trabajo. Ni tampoco se produjo ningin esfuerzo ara determinar lo que entrafaba ofrecer una explicacién compre- ensiva del conocimiento del hablante/oyente. * Véate Newmeyer (1980) para una pers previo al segundo dsplaramiehto conceptual important; y, para algunos cdme Fon de carscier mis personal, a introduction 3 Chomaky (1973), una versién en {eo modo sbreviada de una revision en 1956 de un manurcrito de 195, ambos si PU Hic io ny Hore y Ligon spar ua dein de fos fandamentos peneraes de muchos trabajos actuals, y Radford (1981) para una ttodyecon Tos trabajo que condujron al segundo de se Chomsky (1981) para traban parte de este de para umemudio nods iva sabre Ia historia de este periodo ramiento conceptual. V ecetcen made gana de ens ae rniemo conceptoal, y van Ricdadjd y Wiliams (1985), Tenor wibepeacwaicn El conocimiento del lenguaje como objeto de investgaci6n a ‘Tan pronto como se abordaron estos problemas 2 fondo, se des- cubrié una amplia gama de nuevos fenémenos, incluso algunos muy simples que habjan pasado inadvertidos, y surgieron diversos pro- blemas que previamente se habian ignorado o se habian malenten- dido completamente. Una creencia corriente hace treinta afios era la de que la adquisicién del lenguaje es un caso de «sobreaprendizaje>, cl lenguaje era considerado como un sistema de habitos, del que se suponia que en gran medida estaba sobredeterminado por los datos disponibies. La produccién y la interpretacion de nuevas formas era juzgada sin més como una cuestién de analogia, que no planteaba problemas de principios °. Si se presta atenciGn a las preguntas de (1) Fesulta répidamente patente que la realidad es justamente la contra- fal lengua planta deforma clara y apuda lo que 2 menudo se ha denominado «el problema de Platn», el problema de «la pobreza del estimulo», de la explicacion de la riqueza, complejidad y espe- cificidad del conocimiento compartido, considerando las limitacio- nes de los datos disponibles. Esta diferencia de percepcion acerca de dénde se encuentra el problema, sobreaprendizaje 0 pobreza de los ddatos, refleja de forma muy clara el efecto del desplazamiento del ‘objeto, desplazamiento que inauguré el estudio de la gramatica gene- rativa. ‘Durante estos afios se han dado multitud de ejemplos para ilus- trar lo que evidentemente es el problema fundamental; el problema de la pobreza de los datos. Un ejemplo familiar es la dependencia estructural de las reglas, el hecho de que, sin instruccién o datos directos, los nifios utilizan sin equivocarse reglas que dependen de Ia estructura y que son computacionalmente complejas, en vez de usar reglas computacionalmente simples que sélo implican el predi- cado “lo ‘més a la izquierda posible» en una secuencia lineal de pa- 7 poms lop cman ne un devin nba WY. Quin we mening alone re ie SA ted ae a nar syringe el ae dcr meng ems ee epee oe antec opiate en si Men seeps ent Fon a oe cen oi ean er (a Bogie os beecatrs ee weap 9B lpr nino ce ele ae Spe de Hoey ees uta (98) com ou abaadono del eam me cia ps ee Pa 7, on. do es 2 Noam Chomsky labras *. Teniendo en cuenta otros ejemplos, sobre los que volvere- ‘mos, considérense las oraciones (2)-(7): I wonder who [the men expected to sce them] @ {Me pregunte quine los hombres que se experaba [the men expected to see them} 8) Mlos hombres esperaban verlosy/ John ate an aple (4) ‘Jobn comia una manzana/ John ate 6) ‘ohn comia/ John is too stubborn to talk to Bill ) HJohn es demasiado terco para hablarle a Bill/ John is too stubborn to talk to ” John es demasiado terco para hablarle/ ‘Tanto (2) como (3) incluyen Ia cliusula que esta entre corchetes, pero sdlo en (2) el pronombre them /los/ puede ser referencialmente dependiente del antecedente the men sos hombres!: en (3) se en- tiende la referencia del pronombre como determinada de alguna for- ima por el contexto situacional o discursivo, pero no en los hombres Se conocen numerasos hechos de esta clase, que eaen dentro de lo que ahora se denomina en general «teoria del ligamiento», pero sin {a experiencia relevante para diferenciar los casos. Estos hechos plan. tean un serio problema que no se supo reconocer en los trabajos anteriores: en algunas de ‘sas opciones. "Ad pues, las preguntas (1) del Capitulo 1 se plantean en princi pio en concordancia €on estas idealizaciones y, n realidad, lo mismo Eycede en otros enfoques lingiisticos, aunque a menudo no se re~ conozca explicitamente este hecho y en ocasiones incluso se niegue. Se ha cuestionado a veces la legitimidad de estas idealizaciones, 7 Dejmos de ado aqui lo qu este termina significa precsamente en linge se oomira enero Yared de ic conjuinan, Mine co aa ie cena que enpicar queef que significa dece que agente Ts mama np sung no han es mia coo ‘itunsunels an amare planes i sma coetion# defn fa lengua como un «compl Se on he (ued miso mao «erent ert dns que precenisoubles, sel. coneeptotécicamente constrndo Seen Ee ese bn trio al en Ia nveiacn ingen, oa de ener ae eof Mon le que denominames clengu. Sobre eta euestion, vase Chomky {iors page 192-19) a Noam Chomsky pero con dudoso fundamento *, De hecho, paresen indispensables. Sifuramente custe una cierta propiedad de fa mente P que permite 2'Enr persona adquir uns lengoa bao las condiciones de una expe= Femcid pura y unlforme y P ‘caracerizada por la GU) funciona se- furamente fj as condones reales dea adquiscx de gus Bor eso sera absurdo.negar estos supuestos, ya que equivaldria a ont gue ia lengua solo se puede aprender en condiciones de rertlad y expenenciay inconsstente, To cual es absurd; 0 que txane la propicdalP, existe una capacidad para aprender la lengua fm el cag puro y uniforie, pero que el aprendizaje real de a lengua fo otra ess capacidad. En este ukimo caso, preguntaiamos por Gué enlte Ps ges guna clase de sOrgano vestgons El enfogue na ale que creo que adoptantacitamente incluso los que lo niegan, Gilde hear eter a propiiad ri del mene Py gs reguntare comno funciona P én fas condiciones mis compkjas de Pr Rvcrsidad linguistca real. Parece evidente que cualquier estudio razonable dela hauraleza, adguisicn y utizacion de la lengua en ies ccumtancas de la vida real hae aceptar estos sUpuestos y 2c- thar luego sobre Ta bate de gna rates prelimi ropiedad Pde la mente. En suma, la iealzaciones que se expli Bhan en las investigaciones mis cuidadosasdifcimente pueden cues- onase aan une propiedad Ge afc ing par tide, propiciad cay existencia no puede pricticamente ponerse en dud y que, con toda seguridad, es un elemento fundamental en la tdguisicin veal de la lengua, NAT hacer explisitas estas ilcalizaciones y realizar nucsras inves tigaciones de acuerdo con ells, en modo alguno menoseabamos el {ato de I eng cm cua prodto sci Por a contra fell imaginar como pueden progresar de forma fructuosa esas in- serigaloner so tokan en conaeracion ly propiedades retes de Je mente que lorma parve de ls adquisicion de a lengua, en particular las propiedades del estas snl de la Facultad linguibuca caracter= zada por la GU. . Tgualmence, obsérvese que el estudio del lengusie y de la GU, llevadova cabo denaro del arco de la psicologia tel individuo, per- rite ls posiblidad de que el estado de conocimiento que se slance ‘pueda ineluit alguna clase de referencia ta naturaena social de la + También 5 ica alpine obccionesipcolncanamentecémicss como Ia scussion de noice de Lingua Roy Hac 1983) de qo aes {eeion hasta que sinibove a Sassure Bloomfield Chomsky) ellen sun concep to fantta de lenge ue Wo hay >, porgue considera que la cerned ingutsiea neal o toahents homoge os soneptos del engusie a lengua. Por eiemplo,consiérese lo que Putnam (1975) ha denomi- nado sdivisin del trabajo lingustco™: En Ialenges ae at nines perl che mins dn cman ind tnvun sentido especial: la persona se Temitis he seen recisar 0 fiat reer ee igus ' ar su referenin Por cemplo, supongae re igen fabe que las yolasy Tos queches son barcos, pero que novead vee de la Yeteencn exaca de solar y wquechos dejo’ Keesea Ins queen ea elect En llc del lengua de son fs enradas de apolar y squeches esarin Specie ie acuerdo con su conocimiento, con ns mndicgon de ee eee dirin los detalles, una idea que se puede precinar en difioney ima, pero sin ir mis ala del esudio-del'smema de cemeensicny Ingitico de un individvo particular De forma saree or eee considera otros apectos sociales dela lengun,sangue cots age silica nega la posbilidad ol valor de ots cles te cade te guises gue incorporan I exructrsy I interac sealer Al Contrario de lo que + veces s¢ piensa m0 se dan see a cote nbs Pcie oon cc me ambién damos por supuesta ota idealzacion: que la propieda de lente desrita por GU ex caracterstea de eee eas 2 todos los seres humanos. Por tao, hacemon abstr ea posible vartacin de lafacultad linguistic em lon sere hanenca $e Buede suponer que, prescndiendo dels patlogs (que comeeaye Potencialmente tn tea importante de hnesiacsa} a enhege aue pueda darse es marginal y puede ignorase ch pablo an pare de las invesupacones ingusteas Una vee ona en oncepciones ciemificas. Bara ln dseusionsubsiguene ber sien aa Puestos mas débiles que la identdad esrcts, pro puere recraie Mantener este supuesto mis riguroso, coma uns been farce ci6n, ya dle atendre, EMO: ‘renin 22. LA LENGUA EXTERIORIZADA Losenk 0s enfoques ciemtficos de la lengua, en el sentido anteriormente uulzado, han desarolad divers nociones tenes de kegea e feemplazar la nocién comin. Del mismo. modo, se ha utilizado el ‘ering «grams de deras format” De seuerdo cone eg co ional, una gramdtca es una destipesn owen ents eons xv, un objeto construido por un ingusts. Atengieee nes ne {Se Ast asociadas alas diferentes nocionesténiear fe Tot eea sal (Gujemes correspondientes de gramitica y de gramatice univer. ™ "Noam Chomsky La lingiistica estructuralista y descriptiva, la psicologia condue- sists} otf diseplinas contempordneas tenden a concebir el len- gual como una colecan de aciones 0 proferencis o formas ln, istics (palabras, oraciones) empatejadas con significados, o como sremd de formas o acontccmientoslinguisticos, En el extracts Talismo saussureano, una lengua (langue) era coneebida como un ‘stema de sonidos y un sistema asociado de conceptos; se dejaba en tina especie de limbo la nocién de oracién, quizas para situarla den- tre del estudio del uso linguistico. Como observamos anteriormente, Segin Bloomfield, la lengua es «ia totalidad de las proferencias que se pueden hacer dentro de una comunidad lingiistiea». La variedad americana de a linguistica deseriptivo-estructuralista, que ademas extuvo muy influida por las ideas de Bloomfield, se dedicé sobre odo al sonido y a la morfologia, aparte de formular diversas pro- puestas, especialmente las de Zelig Harris, sobre cémo se pueden ponstruir unidades mas amplias (sintagmas) mediante principios ana~ liticos a imagen de los introducidos para la fonologia y la morfolo~ gia, Hoy dia muchos investigadores adoptan una posicidn de la fndoie Iueidamente desarrollada por David Lewis, quien define una Jengua como un emparejamiento de oraciones y signficados (conci- Bid os ites com consrustnes cones en trmings je mundos posibles) de un rango infinito, en que la lengua es «uti fizada por una poblacion- cuando se dan cierias regularidades «en ceuanto'a las acclones o las ereencias+ en esa poblacion con respecto S'la lengua, rgularidades fundamentadas en un interés por I comu- ‘Refirimonos a es0s conceptos técnicos como casos de «lengua exeriorizada+ (lengua-E), en el sentido de que lo construido se con ‘ibe de forma independiente de las propiedades de la mente/cerebro. Bajo el mismo rétulo podemos incluir la nocién de lengua como colection (o sistema) de aeciones o conductas de cieta clase. Desde tin punto de vista asi, una gramitica es una coleccién de enunciados ‘deseriptivos referentes a la lengua-E, los acontecimientos lingisticos potencialeso reales (quizas junto con alguna explicacion de su con- * para una dscusin, vase Chomsky (196) y Post (1964). Paral comparacsn dea pumas geneyatvsersformmona con a serge tol ls tansormac SME iitsic Sorderad como un procedimieno analico que Se aca mas al del ae ee SC issceaniton onan ese oitrodseton «Chomsky (9732) 2 Fee o78) Leis presen una de a exponciones mis las de una concpe Jecenonl del Tengo y tambien vn crea de os estos sobre wl lenga SSrenornades eye sentido descrto mais sdclame. Para una dca cic, eas Los concepts del lengusie 7 texto de uso 0 su contenido semintico). En tminos «6 puede considerar la gramatca como una funcion que enumera los Flementos de la lengeacE A’ veces se ha conglersde ners omo una propiedad dela lengua-E, como en laafismacion de Bloom, fel de qd una pamatcasonstine ls dposcion sift de las formas dentro de una lengua» (Bloomfiel, 1933). & peat de ls araeuas el probleme de da cdl ccna de lengua-E y del Eonocimiento individual de a lengua que inluye esta propiedad fundamental no se ha watado diettamnts en ci ca Eepeiones, una cuestion sobre la que volveremos, ™ veal lengua es conccida pues come e obj rea dela inves incon a gramatica es una cin derivada ings libre pa lesconar dana wor Toma gratis sempre queen Ufiguecovreciamente la lengus-E. No st plantean cuestoncs de ver gad fed al margen de eta consdercin, Por sjemplo, Qui 2 argumentado que crece de senido consierar seorrectar una gramatica y no ott, si son extensionalmente equivaentes, sy cara tenizan Ia misma lengua-E, un conjunto de ‘xpresiones, de acuerdo con él (Quine, 1972). Y Lewis pone en duda que exista alguna form: “dar un sendo objetivo af armacion de gue una poblacion P sia ua rama Gen verde ora rami gue goes noi 20860 de lenguacE familiar ene estudio dels sistemas gormales, como en a Conclusion cada: ene cao del lense de 2 anmécay por ciemplo, no exe ning Sid objeto para i ey de gun cnjete de reas ue ner as formals bien En cuanto 4 la GU, én la medida ea qu nk cumtg GU, ida en que se reconozca que se ‘aa de un natalia esta era estar conta por snunciados verdaderos para muchos o para toda las lengua hua. ss, guris por un conjunto de condiciones sascha por ltl A584 ge Sn lengua humans, Alunos parcen neg I pos il del emprers amo por cemplo Marin Jos, gue Panes leau denein ies cbse dg I nga odran der ‘rr oi en frmas predic eimradase, hcendone eo dela tubs humana y dele nocén de Edward Spit de qu cl lengua ad humana que varia sin limites precisables« "Eales lo er geen Saale a nar mg Noam Chomsky afirmaciones refleian un curioso conseniso en la epoca. Aunque di- ficilmente se las puede tomar en un sentido literal, expresaron una tendencia relativista que denigrs el estudio de ia GU. Dicho de for ma mis precisa, no puede ser que el lenguaje humano varie sin un limite precisable, aunque puede ser cierto que sea infinitamente diverson; se trata de una cuestién empirica interesante la de si la GU permite una variedad intinita de lenguas posibles (0 una variedad que ¢s infinita en algo mas que aspectos estructurales triviales, por ejem= jmites sobre el vocabutario), 0 solo tina diversi linta® No obstante, se realizaron contribuciones significativas a la GU. tal como la entendemos en el seno de estas tradiciones. Por ejemplo, Ia teoria de los rasgos distintivos en fonologia, que tanto influyd sobre los estudios estructuralistas en otros campos, postulaba un inventario fijo de «elementos atémicos» con los que se podian cons- truir los sistemas fonoldgicas, con ciertas leyes generals y relaciones de implicacién que regian Ja eleceién. Y, en general, se suponia que nocicres camo lax de tema y comentario, sciem y'predigado, clan aspects universates del lenguaje, que reflejaban el hecho de que una oracién declarativa trata de algo y afirma algo sobre ello, Mas tarde, Joseph Greenberg y otros haa Hlevado a cabo un importante trabajo sobre los universales lingtisticos, Ilepando x obtener muchas gene ralizaciones que requieren una explicacién, por ejemplo, el hecho de Tengoa pesee un orden sujetorobjctoreetbo, tenders a tener postposiciones en ver de preposiciones, ete Asi pues, de acuerdo con estas directrices, podemos desarrollar un cie € engua-E), y un concepto aso ciado de pramatica y de GU, como fundamento para un estudio cientifico del lenguaje. Muchas diferentes ideas especificas caen mas 9 menos dentro de este marco general plo, que, si una 2.3. LA LENGUA INTERIORIZADA Un enfoque mas bien diferente fue el adoptado, por eiemplo, por Otto Jespersen, que mantuvo que existe una cierta enocidn de es tructuras en ta mente del hablante «que esta lo suficientemente de- finida como para guiarle en la construccién de oraciones propias», do en peneeal (por cmp. por Blovifel) coma un telatvsta extrema, mantuvo en Veage Chemeky (1966) pig 90 y fas rferencie ctada para una dcusionadiconsl nnn 7 en particular *expresiones libres» que purden ser nuevas para el hablante y para otras personas”. Refirimonos a esta «nocién de estructura» como a una +lengua interiorizada» (lengua-l). La len- gus-l constituye pues un elemento de la mence de Ta persona que Gomace Ia fengua, que adquiere el que Ia aprende y que-el hablante- oyente utiliza 5i se toma la lengua como la lengua-I, la gramitica serfa entonces tuna teoria de Ia lengue-l, el objeto que se investiga. Y si es cierto que existe una «nocién de estructura» asi, como Jespersen mantenia, entonces se plantean, respecto de la gramatica, cuestiones de verdad i falsedad, como en cualquier teoria cientifica. Esta forma de enfocar las cuestiones lingiisticas es radicalmente diferente de la anterior- mente esbozada y conduce a una concepcin muy diferente de la naturaleza de la investigacién. Volvamos ahora al punto de vista esquematizado en el Capitu- lo 1. Conocer la lengua L es una propiedad de una persona H; una tarea de las ciencias del cerebro es la de determinar qué ha de pasar en el cerebro de Hi para que se dé esa propiedad. Hemos sugerido que ef que H sepa ls lengua L significa que la mente/cerebro de H se encuentra en un determinado estado; més precisamente, en lo que se refiere a la facultad lingiiistica, que un médulo de ese sistema se encuentra en un cierto estado $(L)'°. Por tanto, constituye una ta- rea propia de las cienicas del cerebro descubrir los mecanismos que son ta realizacion fisica del estado S (L). Supéngase que analizamos la nocién «H conoce la lengua L» en términos relacionales, esto es, en términos que suponen una rela- cidn R (saber, poser, o lo que sea) que se da entre H y una unidad abstracta L. Se puede cuestionar este giro; en efecto, hablamos de una persona que conoce la historia de los Estados Unidos sin su- poner que existe una entidad, la historia de los EE.UU., que la persona conoce, 0 conoce en parte. No obstante, supongamos que ese giro es en este caso legitimo. El supuesto resultard justficado * Jespersen (124) initica generanva contemporinea, vease Rey io hr se nociones de Jesperse, comparadas con las dela gro Was (1971); Chomsky (1977), Capito 5 rin angumentar que los sistemas que etamos considerando consiuyen nt de Tn acuta Hinge, cone Ca de na forma mar am dades entradas enol uso y a comprension de enguape pet Jo 1 denomina »competenia comuniatvae las pares del Sistema conceptual humano que estin expecifcamente relacionadas con el lengua Verse Chomsky (19808) ejaré de lado aqut ets cuestiones, y coninuaréultando cl termine sfacltad ingots en el tentido mis vesting dela anterior dacuton, Seinplo, lo que me 8 Noam Chomsky cn Ia medida en que este giro contribuya a progresar en nuestra comprensién de las cuestiones que ante tudy nos ataien, fas cues tiones (1) del Capitulo Ty por ciemplo, exo es lo que sucederia 3 cxisticran principwos signifieauvos que nigieran el eonjunto. de. las entidades postuladas L.. Supngase que vamos mas alla, consideran dlo que cvando hablamoe de [a mente hablamos del cerebro. en un cierto nivel de abstraccion, en el que ereemos, con rarcn 0 sin ela, jue se pueden descubrir propiedades significativas y principios ex. Pleativos, Emtonces los ehunciados seeten de R y.L pertenecen a la teoria de la mente y seré una tarea propia de las ciencias del cerebro ia de explicar qué es lo que en ei cerebro de H (en sv faculead lingiistica) conesiones al conocimiento que H tiene de L, esto es.en virtud de qué se di R (H\L) y es verdadero el enunciade R (HL) Resulta natural concebir L como lengua-l, la «nocidn de estruc. turar de Jespersen, considerando ésta como una entidad abstraida a tat dem ea de Fc oi. ae so crponene de la mente. Asi, que H conozca L es que H tenga una cierta len- gua-I. Los enunciados de Ia gramitica son enunciados de fa teoria de'la mente sobre la lengua-l.y por lo tam enunciados sobre es tructuras del cerebro formulados en un cierto nivel de abstraccion ida sobre mecanismos, Estas estructuras son realidades fepecr fel mundo, con sus propiedades especificas. Los enunciados de una gramatiea @ el enunciado de que R(LLL) son similares 2 los enunciados de una teoria fisica que caracteriza cierta entidad y sus propiedades haciendo abstraceion de cualesquiera cosas que puedan Tesultar set los mecanismos g esas propedades, por em plo, una teoria decimondnica sobre la valencia o las propiedades que Expresa la tabla periodica. Los enunciados sobre fa lengua 1-0 el enunciado de que R(H,L) (para cualesquiera H y L) son verdaderos 0 falsos, de modo parecido 2 como lo son los enuneiados sobre la estructura quimica del benzeno ¢ sobre la valencia del oxigeno, 0 sobre fy pertenencia a [a misina columna de la tabla perisdiea de Ia dlorina y la fluorina, La lengua-l 1. puede ser la uizada por | hablante, pero no Ia lengua- L’, incluso aungue las dos generen Ia pigeon lteetdeteanretioncal(uteiceatobieiod racic Nien ‘cualquier sentido preciso que le demos a esa nocién secundaria; L’ puede no ser siquiera una lengoa-l hursana posible, obtenible mediante la fs cultad lingtisies Emonces fa GU se construye como la tgorfa de las lenguas-1 humanas, un sisterna de las condiciones derivadas de la dot in biolégica bur.ana, que identifica las lenguas-! que son humanamente aces slestemteet ic mace eel Conti ealleaNeR eae I reali Los coneeptos del knguaie » gue RUHLL) puede ser verdadero (para un H normal, en condiciones normales '" Por supuesto, no existe ninguna garantia de que esta forma de abordar los problemas de (1) en el Capitulo 1 sea la correcta. Este enfogue puede resultar directamente desencaminado, incluso aunque consiga logros sustanciales, como una teoria dela valencia, etc. pue- de resultar completamente errada, a pesar de sus éxitos sustancialee en la geimica decimonénica. Siempre es razonable la consideracién de enfoques altermativos, si es que se pueden imaginar, y esto es cierto independientemente de los logros que se aleancen, La situs. ci6n no parece diferente en principio de la que encontramos en otros Ambitos de Ia investigacién empirica. Divectamente sugeriré que, en ciertos aspectos fundamentales, las primeras ideas sobre la lengua-I iban desencaminadas y han de reemplazarse por una concepcién muy diferente, aunque formulada dentro del mismo marco general. Sin embargo, las razones para cllo no se derivan de ninguna incoherencia © ueliidad en el enfoque general, sino mis bien de concaie ees empiticas sobre descripcién y explicacién. 24, EL DESPLAZAMIENTO DE LA LENGUA-E A LA LENGUA-I 2.4.1. Sobre las razones para el desplazamiento En el Capitulo 1, vimos que el estudio de la gramitica generativa desplaz6 el eco de atencidn de la conducta ocenzall eral y sus productos al sistema de conocimiento que subyace al uso y la com- prensin del lenguaje y, con mas profundidad, a la dotacién innata ue hace posible que los humanos obtengan ese conocimiento, El desplazamiento fue del estudio de fa lenguta-E al estudio de la len- gua-I, del estudio de la lengua considerada como un objeto exterio- Hizado al estudio del sistema de conocimiento lingiistico obtenido y tepresentado interiormente en la mente/cerebro. Una gramitica Kenerativa no es un conjunto de enunciados sobre objetos exterio- tizados y construidos de una forma u otra, Antes bien persigue delinear exactamente qué es lo que alguien sabe cuando conoce una lengua, esto es, qué es lo que ha aprendido de acuerdo con los Incicnada de ver estas cueswones, pero en ciery modo die "igginbeshans (19536) a ENOTES: principias innaios. La GL cs une earacterizacidn de esos principios innatos, biologicamente deternrinados, que constitiyen un compo nente de fa mente humana, Is facultad Enpitistica ediante este desplazamienta as enfrentamos por fin con las preguntas (1) dei Capitulo 1, En trabajos anteriores, la respuesta a (1:) era ly de que ef conacimiento de la lengua consiste en el conoci- miento de un cierto sistema ¢ la respuesta a (Hii) la de que este conocimiento tiene st origen en un estado inieial S(O) que trans forma 1a experiencia en un -estad lengua I. La adquisicion de la lengua consiste pues del almacenamiento de reglas o en la modificacién de ese sistema a medida que se procesan nucvos datos. La pregunta (Lili) se divide en dos partes: un «problema de la percepcisns y un «problema de Ia produccion». El problema de la pereepcién se trataria mediante Ja construecién de un analizador (parser) que incorporara las reglas de ls lengua-I junto con otros elementos; una cierta organizacién de la memoria y del acceso a ella (quizés una cierta estructura desen- cadenante determinista con una memoria provisional (buffer) de un cierto tamario; véase Marcus, 1980), ciertas estrategias heuristicas, y cosas asi. Un analizador no’ proyectaria Ins expresiones en sus trucruras en fa forma en ques encuentran asciadat por a lengua Por ejemplo, un analizador no lo conseguiria en el caso de las de- nominadas oraciones-sendera (garden-path sentences) '? 0 en las oraciones que sobrecargan In memoria con pasos de izquierda a de recha, reflejaria las dificultades que se experimentan con las oracio res como (8) (14) del Capitulo 1 y con otras. EL problesa de Ia produccion es mucho mas oscuro; volveremos sobre él La lengua-E, que fue el objeto de estudio en la mayor parte de las gramiticas tradicionales 6 estructuralistas o en la psicologia con ductista, se concibe ahora todo lo mas como un epifenémeno, Su estatus es parecido al de otros objetos derivados como, por ejemplo, el conjunto de los parcados, que también se encuentra determinado por la lengua-T que constituye el sistema de conocimiento alcanzado, Se puede argumentar que el estatus de la lengua-E es considerable- mente mis oscuro que el del conjunto de los pareados, puesto que éste se encuentra determinado de una forma completa por la fen Lav gue wenden aa un anal fl, cua et ejemplo de Thomas Bevet muse tel ie hn fas Peo Cvs el ae elo fibers el que vote paca el pr EUs Conceptos del lenguaye a“ gua-l, mientras que los limites de Ja lengua-E se pueden determinar de una u otra forma, dependiende de decisiones arbitrarias sobre lo que deberian contenet ~ Resumiendo, tenemos pues el siguiente panorama. La facultad Jinguistica es un sistema diferenciado de la mente/cerebro con un estado inicial S(O) comiin a toda la especie (en una primera aproxi- macidn, prescindiendo de la patologia, etc.) y, al parecer, dnico en aspectos esenciales ''. Con una experiencia apropiada, esta facultad pasa del estado S(O) a un lativamente ectable 5(5), que s6lo ‘experimenta una modificacién perifériea (por ejemplo, la adquisicion de nuevos elementos Iéxicos). E] estado alcanzado ‘incorpora una lengua-I (el estado de poser o conocer una lengua-I determinada). La GU es la teoria de S(O); las gramsticas particulares son las teorfas de las diferentes lenguas-I. Las lenguas-I que se pueden obtener a psi de un S(O) fijo y una experiencia cambiante son las lenguas wumanas que son accesibles, donde por «lengua» entendemos pues Jengua-I. El estado estable tiene dos componentes que se pueden distinguir analiticamente, aunque se los pueda unir y emparejar: un componente que es especifico de la lengua en cuestion y la contri- bucion del estado inicial. El primero constituye lo que «se aprendes, si es que es éste el concepto apropiado que es preciso cmplear para dar cuenta de la transicion de ta facutad lingittica desde el estado inicial al de madurez, porque podria no serlo ' ~ Fl sistema de conocimiento obtenido, la lengua-L, asigna un es- tatus a cada hecho fisico relevante, por ejemplo, a cada onda sonors. Algunos son oraciones con un significado determinado (litera, figu: rales ‘© como sea). Algunos son inteligibles, quizés con un signifi- cado determinado, pero estén malformadas por una u otra raz6n (en algunos dialectos «el nifio parece durmiendo», «a quién preguntaste qué dar»; «a quién preguntaste quién dio el libro» en todos). Algu- nos estén bien formados, pero son ininteligibles. A algunos se les asigna una interpretacidn fonética, pero sélo eso; se identifican como posibles oraciones de alpuna lengua, pero no de la propia. Algunos son mero ruido. Existen muchas posibilidades. Diferentes lenguas-I asignaran un estatus diferente dentro de estas u otras categorias. La nocién de lengua-E no ocupa ningin lugar en este panorama. No " Bidenremente tt cuestiones del innatismo y de la propiedad especifca dela especie son distinta Seba slegado que yo mimo ¥ o10% hemos consdcrade canna tony sespeciic de la expeciee coro expresionesssinonimat. (Cartmll, 1984), No fe de ning riempla de una cnfanson ee aunque tise oh buen mimero de ate fon que i reluan ease Chomsky (1980). pays. WL 2 Noam Chomsky existen cuestiones de correccién para las lenguas-E, se caractericen como se caractericen, porque las lenguas-E solo son artefactos. Po. demos definir “lengua-E» de una forma uw otra, o de ninguna, puesto que este concepto no decempesia ningun papel en una teoria del Tenguaie. Se imponia el desplazamiento de la lengua-E a la lengua-l, que revive y modifica trafiiones mucho mas antiguas. El concepto téc- nico de lengua-E. es inseguro en dos aspectoy al menos. En primer lugar, como se acaba de indiear, las lenguas en este sentido no son objetos det mundo real, sino que son constructos artificiales, en al- guna forma arbitrarios y quiz4s no demasiado interesantes. En con traste, el estado estable de conocimiento obtenido y el estado inicial ${O) son elementos reales de mentes/cerebros particulares, aspectos del mundo fisico, en la medida en gue conccbimos los estados y representaciones mentales como codiftcados de alguna forma fisica La lengua-lI se abstrac directamente como un componente del estado obtenido. Las afirmaciones sobre la longua-t, sobre el estad y sobre el estado inicial S(O) son afirmaciones verdaderas 0 falsas sobre algo real y determinado, sobre estados reales de la mente/ce rebro y sus componentes (eon las idcalizaciones ya discutidas). La GU y fas sorias de ag leas, fn gramitcs univers y be part culares estan a la par de las tcorias cientificas pertenecientes a otros Simbios; las teorias de as lenguas-E, sies que se pueden tomar en cuenta, tienen un estatus diferente y mAs oscuro, porque no existe ringin objeto en el mundo real que les corresponda. La lingiiistica, coneebida como el estudio de fa Fengua-l y de S(O) constiye wna arte de la psicologis, en altima instancia de fa biologia, La lingiis fea quedara incorporada a las eiencias naturales en la medida en que se descubran los mecanismos con las propiedades reveladas por estos estudios de una abstraccidn superior; de hecho, hay que esperar que estos estudios constituyan un paso necesario hacia una investigacion seria de esos mecanismos '5. Con otras palabras, no obstante ser un construct, [a lengua-F se encuentra mas aleiada de los mecanismos que fa fengua-i, en un orden superior de ah br. En con! cia, el concepto hace surgir una multitud de problemas nuevos, y Sat fst, ease Mart (1982), Obsersése que fa cuestin de a lpi midad oe fe sna inerpuctacin defy ecacia en general es lo que ests en Chestisn mie hiew ne parecs planteaese nada ncee en primp sn el aso del estudio tlelalengea ty suc ongeres, Sse qusere-coniderar I euestin del realism. f ps : r nl westin te deberta plantear en vnres eaperancas de propeesar en fase slog a hist ton, Veawe Chiencie 11980) jas mised Los comceptos del lengusie ® no resulta evidente que merezca fa pena afrontarlos o tratar de re- solverlos, dada la natursleza artificial del constructo y su aparente inutilidad cn una teoria del lenguaje. F! desplazamiento constituye también justificablemente un des- plazamiento hacia la nocién comin de lengua. Lo cual es menos importante que la tendencia hacia el realismo y también menos claro porque, como se ha observado, todos los enfoques se desvian del concepto comiin en diversos aspectos. Pero parece que, cuando ha- blamos de que una persona sabe una lengua, no queremos decir que conoce un conjunto infinito de oraciones, o de pares sonido-signi- ficado considerados en cuanto a su extensidn, 0 un conjunto de actos © conductas; mas bien queremos decir que la persona sabe lo que hace que el sonido y el significado se relacionen de una forma es- pecifica, lo que hace que «vayan juntos», una particular caracteriza- cin de una funcién quizés. La persona tiene «una nocion de estruc- tora» y conoce la lengua-I en cuanto caracterizada por la gramética del lingitista. Cuando’ decimos que cs una regia i ingles que el objeto sigue ai verbo, distinea de la regla del japonés de que el verbo sigue alos objetos, no estamos afirmando que existe una regla para algin conjunto de oraciones de conductas, sino més bien que es tuna regla perteneciente a un sistema de regias, el inglés, una len- gual. "as reglas de la lengua no son reglas de un conjunto infinito ibe objetos formales o de acciones potenciales, sino que son regias que conforman o constituyen la lengua, como los Articulos de la Constitucién o las reglas del ajedrez (no un conjunto de movimien- tos, sino un juego, un sistema determinado de reglas). Entre las diferentes nociones técnicas que se han desarrollado en el estudio del lenge el concepto de lengual parece mas proximo que otros FI desplazamiento de perspectiva desde el concepto técnico de lengua-t al concepto téenico de lengua-l considerado como objeto de imvestigacidn constituye por tanto un desplazamiento en la direc- cién del realismo en dos aspectos: el estudio de un ebjeto real, en ver de un constructo artificial, y el estudio de lo que realmente queremos decir con una lengua 0 sel conocimiento de la lengua~ en el uso comin (prescindiendo una vez mas de Factores sociopoli- ticos 0 normativo-teleol6gic os). La primera de las consideraciones es la més clara y la mas im- portante. No es de esperar que los conceptos que son apropiados pera In descripcidn y la comprension de un sistema del mundo fisico {esto es, la lengua-t y S(O) incluyan conceptos similares del habla normal, dei mismo modo que los conceptos de masa y energia del fisico ne son los de uso cotidiano, Ademis, se plantean muchas 4 Noam Chom cuestion s sabre Ja wuilizacion de los concepts intuitivos quer tienen una rela para In inceseigacion de In mat de los objetos reales, la lengua-T y S(O). Por ejemplo, supéngase gue an marcann con na caw ey dilerente de mente/cerebro pre luiera y compreniiera fas oraciones del inglés como nosotros pero, cia evidler naturalera como demostearia la investigacion, utilizando elementos y reglas muy diferentes, por ejemplo, sin palabras, siendo los sintagnias memart rados las unidades minimas empleadas, y con un sistema de reglas yuna GU completamente diferentes. ;Diriamos que el marciano habla ta misma fengua? Dentro de qué limites lo diriamos? cues tones parecidas se plamean sobre si un sistema artificial exhibe una cierta forma de inteligencia © comprension. Pueden ser cuestiones razonables si se refieren a los conceptos intuitivos de lengua en el uso coloquial, pero no esti claro que tengan mucha relevancia en fa investigacion de los objetos del mundo real, fa lengua-l y el estado inicial S(O)" UU desplramvento concept de I engua-E a lengua-h de a conducta y sus productos al . que entra en | conducta, resulté escureeido en la historia publicada en parte por factores aceidentales, y los pasajes expositives considerados fuera de contexto dieron lugar a malentendidos ocasionales "”. También con tuibuyeran a ese malentendido algunas decisions. terminolégicas cuestionables. Fn [a bibliografia de la geamstica generativa, se ha utilizado regularmente el término «lengua» para In lengua-E en el sentido de un conjunto de oraviones bien formadas, mis 0 menos de acuerdo con la definicién de lengua de Bloomfield como «totali dad de proferencias». Se ha utilizado el término »gramatica» eon una ambigiiedad sistematica, para referise a lo que aqui hemos denomi- ado =lengua-I» y tambien a fa teoria del lingiista sobre fa lengua-ls Jo mismo vcurtio con el teeming «GUs, introducido mas tarde con In misma sistematica ambiptiedad, referido a S(O) y a la teoria de ueyeanecinal Ia cucatiin general, vase Fre (1983) Soreness, que se repiten entre trabaios pos fee Choomeky (1980), pigs. 123-128, En cuanto a septa he gramibea generat se presen estiones de latearia de autématas (por ejem ras tas de un cueeo para Para un comentario Sobre slgunae imerpet feviorer que aq na coment In hsctons publierds, le prim inen un marco eager pr Rane puamieisnccrare tein Hite ager ante, preva dd a pun di Solos antreses de eons eatdiantes) EL tabsio especifeamence linguistiea, como Chromst (19989) no era pablicable por Ix epoca, En ést, las consideraciones sobre In capacidad goneratva dbil (esi es, enractensrabiilad de Tas lenguas-F) sobre los suntan fitas » denis hrllahan poe 8 ausencia, y se insstia en fa lengua, a ‘gue am se ued of termine Fos conceptos del leo S(O). Como 2 lo que se atendia era ala fengua-t, y la lengua-E un construct derivado y en buena medida artificial, nos encontra- mos con la stuacién paraddjica de que en la investigacion dedicada a fa lengua raras veces aparece el cérmino «lengnas. En 1965, Aspectos de la teoria de la sintaxis, por ejemplo, no existe lengua» en el indice, pero hay muchas entradas bajo el rétulo «gra- maticas, que por lo general se refieren a la lengua-l Hubiera sido preferible utilizar el término «lengua» en un sen- tido mas proxime al intuitivo de !2 utilizacién informal, esto es, utilizar el término «lengua» como un término técnico en lugar de apramatica (generativa)» (en el sentido de lengua-I), adoptando al tiempo un término técnico (quiras lengua-E) para lo que se llamaba slengua», Entonces el término «gramitica (generativa)> habria sido uuilizado naturalmente para la teoria del linguista sobre Ia lengua (-1), de acuerdo con las directrices de la discusién anterior. De esta forma se podrian haber evitado muchas confusiones. Sospecho que el de- bate de los pasados aiios sobre supuestos problemas referentes a los conceptos de gramatica y conocimiento podria considerarse de acuer- ‘do con estas elecciones terminolégicas desafortunadas, que reforza- ron comparaciones inapropiadas con las ciencias formales y dieron lugar a fa idea erronea de que el estudio de la gramética plantea cuestiones fils6ficas nuevas, compleias y quizasintratables, en com- paracidn con el estudio de fa lengua-F La inapropiada eleceiin de términos fue en parte un accidente historico, Elestudio de la gramatica generativa se desarrollé a partir de Ia cos ia de dos tradiciones intelectuales: la gramitica tra- dicional y estructuralista y el estudio de los sistemas formales. Aun- ‘que existen precursores importantes, estas corrientes intelectuales no concluyeron en realidad hasta mediados de los anos cincuenta, cuan- Udo se aplicaron ideas adaptadas del estudio de los sistemas formales a los sistemas mucho mas complejos del lenguaje natural, tratando de hacer justicia a su riqueza real y, en los aiios posteriores, a su variedad efectiva, haciendo posible por vez primera en verdad dar an contenido al aforismo de Humboldt de que el lenguaje entraia wT) Gao anfinto de medio Finitos», estando la lenguar! constituida por esos medios finitos. Pero el estudio de los lenguajes formales inducia a confusién en el siguiente aspecto. Cuando estudiamos el lenguaje de la aritmética, por ejemplo, podemos considerarlo como un objeto abstracto «dado: una clase infinita de oraciones escritas en una determinada * Dara mis discusion sobre esta euesisn, wéase Chomsky (19808), am Chomsky notacidn. Algunas expresiones escritas en esta nocién son oraciones bien formads, ours no, ¥; entre Is oraciones bien formadas, lp nas expresan verdades de Ia aritmética, otras no. Una «gramatica dde un sistema de esta clase es sencillamente un conjunte de reglas que especifica de forma exacta lhs oraciones bien formadas. En este caso, no se plantean cuestiones ulteriores sobre una eleccion correcta de la gramatica y no se da verdad ¢ falsedad a la hora de escoger entre gramaticas asi. Lo mismo se puede decir en buena medida de las axtomati en este caso sabemos que ninguna de elias capturari de forma exacta las verdades. Resulta facil entender cémo se puede extracr del estudio de los lenguajes formales Ia idea de que el «lenguajes se encuentra de algiin modo dado como conjunto de sentencias o de pares oraciéin-significado, mientras que Ja gramatica es una caracterizaciin de ese conjunto infinito de ob- jetos y, como por consiguiente se puede pensar, un constructo que se puede scleccionar de una forma y oira dependiendo de la conve niencia o de atros intereses. Se puede entender este desplazamiento, prero va desencaminado y ha engendrado una buena cantidad de dis” cosines ¥ controversias estériles Recuérdese Ia conclusion de Quine, citada anteriormente (pag. 35). de que no tiene sentido considerar una gramitica mas «co rrecta~ que otra, si son extensionalmente equivalentes, y las du das de Lewis sobre que haya alguna forma «de dar un sentido ob- jetivo a ln afirmacin de que una gramitica G es utilizada por una poblacién P, mientras que no lo es [a gramatica G', que genera la misma lengua que Ge. Es completamente eierto que, para cada len- gia-E, sea cual sca la forma que liamos de definik esta nacién, existen muchas gramétieas (esto es, muchas gramaticas, cada una de las cuales es una teoria de una lengua particular que determina esa lengua-F de acuerdo con una cierta convencién adoptada). Pero esto carece de cansecuencias relevantes. Fn ol caso de un sistema fo: mal, por ciemplo la aritmética (que supuestamente es el modelo que’ se piensa). suponemos gue se encuentra «dado» ef conjunto de ths formulas bien formadas en wna determinada notacion, y eleginios Ia egramatica» (las re forenaci6n) a nuestro arbitrio. Pero 1a lengua-E no se encuentra «dada», Lo que se le «da» al niio es una sent finita de datos, sobre cuva hase la mente del niio (que incor- pors S(O}) construve una lengua-f que asigna un estatus a cada ex- presién, v que podemos concebir como generadora de una lengua-E de acuerdo con uns pita convencién estipulada (0 podemos pres cindir de este pis anwrentemente superflao). Lo que se le da al lingitista son seties finiras de datos procedentes de diferentes comu- nidades lingtisticas, que incluyen muchos datos no accesibles para ones alternativas, au os conceptos del lenguaje el que aprende 1a lengua, sobre cuya base el lingiiista intentard des- Gulbis It natraleca de S(O) y las leoguasel particulars que se ob- tienen. La explicacion de Quine, Lewis y otros lo refiere todo al revés: las lenguas-E no estan dadas, sino que son derivadas, mas alejadas de os datos y de ios mecanismos que las lenguas-I y las ramiticas que son las teorias de las lenguas-I; la eleccién de la Fengua-E plintea por tanto una multiud de problemas. nuevos ¥ adicicnales a] margen de los conectados con la gramética y con la Jengua-I. No resulta claro que merezca la pena enirentarse con estos problemas, o uatat de resalverlos, porque el concepto de lengua E, se construya como se contruya, parece carecer de significacion. Es sencillaments errdnea la creencia de que la lengua-E es una nocién muy clara, mientras que la lengua-I o la gramitica plantean proble- mas filos6ficos serios, quizas intratables. Lo cierto es justamente lo ‘opuesto. Existen muchos problemas referentes a las nociones de len ‘0 n0 los que se plantean en estas discusiones. las caracterizaciones acostumbradas de la lengua» como cédigo 0 juego apuntan justamente a la lengua-l, no al constructo artificial que es Ia fengua-E. Un cédigo no es un con- junto de representaciones, sino mas bien un sistema especifico de reglas que asigna representaciones codificadas 0 representaciones de mensajes. Aunque sean extensionalmente equivalentes en las asigna- ciones mensaje cédigo que proporcionan, dos cédigos pueden ser diferentes. Igualmente, un juego no es un conjunto de movimientos, sino antes bien el sistema de reglas que los sustenta. El concepto saussureano de langue, aunque mucho mas limitado en su concep- cidn, se puede interpretar en este sentido como apropiado. Lo mis- mo se puede decir de la definicion de lengua dada por Quine, «un complejo de las disposiciones presentes para la conducta verbal» en Jz medida en que apunta a un estado interno y no a la lengua-E, aungue resuke inaceptable por otras razones: porque dos individuos que hablen [a misma lengua pueden distinguirse radicalmente en cuanto a sus disposiciones para la conducta verbal, y si las disposi- cioncs se caracterizan minos de la probabilidad de respuesta bajo ciertas condiciones, entonces es imposible identificar en esos términos las lenguas y, adcmés, se deja sin responder la pregunta fundamental sobre la utilizacién y la comprensién de oraciones nue- vas. Quizis la concepcién més clara es la de Jespersen, en ténninos dela cnocién de estructura» que guia al hablante «en La construccién de oracienes propia...» de eexpresiones librese mo hemot vist, estas ideas se convirteron en el objero de atencidn en el estudio de ta gramatica generativa, aunque no de for- ma incontrovertida. EL estructuralismo de Saussure fa situado la observacién de Jespersen sobre fas sexpresiones libres» fuera del mbito del estudio de Ia estructura lingiistiea, dela Lange de Saus sure. Bloomfield (1933) mantuva que cuando un hablante proce formas lingistieas que no ha wido, sdecimos que las profiere seg la analogia con torinas que ha oidos, una posicion que mis tard. adoptaron Quine, C.F, Hackett y atros que nt siquiera intentazon resolver el problema, Esta ide2 no es errénea, sino mas bien vaca. 3 menos que se detalle el concepto de analogia de forma que se eS rligteesiceeas ae eee Varlsdne mcrae oe na To son, ua trabajo que requicre un enfogue radicalmente diferente de toda Ta cuestign, Por ejemplo, epor qué ne se comprenden las oraciones (6) ¥ (7) del Capitulo f (pig. 22) de acuerdo con la analogias de (4) y (3) Por qué la oracion (14) no se comprende «de con Ia analogga» de ninguna de hos ejemplos anteriores, sin recibir ninguna intezpretacion? Podemos sustanciar la propuests ex plicando a eanalogiaw en términos de lengua-l, un sistema de reglas ¥ principios que asigna representaciones dle forma y significado 4 lae expresiones lmngisticas, pero no se ha propuesto otra forma de ha wel con esta resin nea en lt prope, res cao que Jn sanalogiae es ante todo y simplemente un concepto inapropinde He estado utilizmdo libremente diferentes nociones del sentido comin en esta explicacion, como conocimiento-, sseguimiento de reglas- ete. Se han suscitado diferentes cuestiones sobre la legit dad de tal utilizacion, Por ahora me limitaré a exponerlas, volviendo sobre ellas en el Capitulo 4, aunque seguiré utilizando los términos Creo que la utiliza zonablemente de acuerdo cone wo comin, pero nal importante se pone en ph. ¥ se podtian introdicir términos técnicas para nuestros propostos. iddrloletel egal fare) etleces celveqine tg En ocasiones se ha sugerido que ef conocimienta del lenguaie deberia concebirse comparendolo eon el conocimiento de Ia ante tica, concebida ésta como una entidad abstracta «platénicas,existen- te de forma independiente de cualesquiera estructuras mentales No se pone en cuesticn que evista Io que hemos denominado una lengua interiorizada (desctita por ko que Thomas Bever ha llamado una psicarramatica») y que descubrirly sea un problema para las ciencias naturales. Lo que se sostiene es que. aparte de las lenguas I particuiares, hay algo més, que podemos llamar lenguas-P= (in eles P, japones-P. ete.) existentes en un cielo platonico junto a la aritmética ¥ (quiris) ia teoria de coniuntos, ».que una persona, de caw Kats (19RE) y ever (1842 eptos det lengtsie ” In que decimos que sabe inglés. pued= ny rener en realidad un com- pleto conocimiento del ingiés-P o incluso puede no conocerlo en absoluto. De forma parecida, la mejor ccoriz de la lengua-l, de lo gue la persona conoce en realidad, puede no ser la mejor teoria de lo que, de scuerdo con ciertas razones, puede escogerse como in- gles. P 2°, Sin embargo, la comparacién con la aritmética es poco convin: cente. En el caso de Ja aritmética, existe al menos una cierta plausi- bilidad en principio para la concepcién platénica, en la medida tue Jas verdades de la aritmética son las que son independientemente Te caalesquera hechos pertenecientes ala psiculogis del individuo, ¥ parece que descubrimos esas verdades de forma parecida a como descubrimos los hechos del mundo fsco, No obstant, en el caso del lenguaje, carece por completo de valor la posicion’correspon- dicnte. No existe fag plausibilidad de principio para la ‘dea de jue, aparte de las verdades de la gramitica referentes a la lengua-l y a las verdades de la GU referentes a S(O), exista un ambito adi- cional de hechos sobre la lengua-P, independiente de cualesquiera estados psicolégicos de los individuos. Un platénico podria argu- mentar que, aunque conociéramos todo sobre la mente/cerebro, no tendriamos aun una base para determinar las verdades de Ja aritmé- tica o de la teoria de conjuntos, pero no existe la mas minima razén para suponer que haya verdades acerca del lenguaje que se nos es- caparian, Por supuesto, se pueden construir entidades abstractas a voluntad, y podemos decidie denominar algunas de ellas como «in- © «japonés+ y definir la -lingusticas como el estudio de esos objetos abstractos y, por lo tanto, situarla al margen de las ciencias naturales, que tratan de entidades como la lengua- y S(O), de lz gramatica y de Ja gramatica universal en el sentido de la anterior discusion, Pero no parece haber motivos suficientes para ello, ‘Una concepcién en cierto sentido parecida es la avanzada por Soames (1934). Distingue entre dos disciplinas, la psicologia y la Sc septs esto los datas eiulados como relevantes para identifier una ie- {Cole [lengua ealente epresenodis en a mene erebro d oe hablantes el si espa sam noes pura imerrtr os dats Paro rae enta puteid. eda elect I biologi paoniasreerete, por Gem, Meal avy dohomna sa propiedad sence de on coraren (que eaana bombs) “elec coves as feyesHcas ue he hacen ate (ue propiedad no esen} ener mer ei ea eg fen ia sta Sina dee repr tent dl lengua platonic (se expectigue “sestiques sen Kate, mediate el ands de sauce concepto dd obo Sacto gee lenge nat “ Noam Chomsky lingiistca, cada una de las cuales esté definida por ciertas «Cuestio- nes Primordiales», diferentes en las dos disciplinas. El estudio de la lengua-l y de S(G), tal como se han deseriva, es parte de la pace logia. Sin embargo, «si cl objetivo de uno es dar respuesta a las Cuestiones Primordiales de la linguistica, hari abstraccion de los datos psicolingiisticos que no son constitutives de las lengusse (y, de modo parecido, de los datos neuropsicol6gieos, ete). Lag suse, tiones Primordialess de la lingtistica incluyen por ejemplo las cues: tiones «zen qué se parecen el inglés y el italiano?» =ede qué lorma ha cambiado el inglés lo largo de su historia?s, y chesttves care lares. Se considera que los conceptos de inglés ¢ italino son sul temente claros, en el nivel pretedrico, para dar contenido a estas cuestiones, un supuesto muy dudoso por las razones ya discutdhes ¥, con toda seguridad, un supuesto que no se hace en la investiga. cin lingGistica real. Una vez mas, no se pone aqui en cuestion la legitimidad de la investigacién sobre la lengua-I y S(O); en lugar de ello, se plantea el problema de si ese estudio cae dentro de lo que deci. diremos denominar slingtistica» y si, como Soames sugiere, consti tuye suna concepcidn de la lingtistica tedricamente correcta, empic ficamemte significativa~ que se restringe a si misma aun clewo doy. bito estipulado de datos, a los hechos que son «constitutivos de la lengua Puede observarse que las propuestas terminologicas que Soames avanza son un tanto excéntricas. Por decir lo menos, parece extrao definir la «lingifsticas de forma que excluya a la mayoria de sus practicantes, por ejemplo, a Roman Jakobson y a Edward Sapir, que Seguramente no estarian de acuerdo en que lo que Soames considera como datos extralingiisticos sea irrclevante para las cuestiones de la lingiistiea tal como la coneebian ellos, incluyendo lac -Cuestiones Primordiales», y que adujeron, para sustentar susanslisis, datos de una clase que Soames sinia al margen de los wconstitutivos de ia lengua. Pero, al margen de la terminologia, la cuestion real que se plantea es la de’si existe alguna razén para establecer una discipline de la giisticas que se limite a si misma, mediante azones priort, 4 ciertos datos particulares y que construya un concepto de slenguar que pueda studi dent de Tos margenes de esta eleccion de atos relevances. Para aclarar lo que se encuentra en juego, supéngase que dos gramiticas propuestss, G(1) 7 G(2) difieren en la eleccion de los Fasgos fonoldgieos postulados: G(1) postula el sistema F(1) y G2) el sistema F(2), Supengase que G(1) y G(2) no se pueden distinguir con respecto la base de datos consistente en lo que Soames estipula que son hechos «lingtisticamente relevantes», Supongase que eXpe- m rimentos de percepcién, como los que Sapir llevé a cabo en su obra clisica u otsos mas sofisticados, dan resultados que se pueden ex- plicar en términos de los rasgos de F(1) pero no x F(2). Imaginese ademas que estudios sobre fa afasia y el lenguaje infantil demuestran que el desarrollo y el fracaso lingiiistico pueden explicarse con di- rectrices jakobsonianas en términos de F(t) pero no de F(2), y que la eleccin de F(1), pero no de F(2), proporciona una explicacién de la produccién y el reconocimiento del habla, también a la manera de Jakobson. Soames esté de acuerdo en que existe un campo de investigacidn, Hamémosle «lingitistica-C(ognitiva)», que utilizarfa es- tos datos pata seleccionar G(1) en vez de G(2) como teoria de la lengua representada en las mentes/cerebros de los miembros de esa comunidad ingiistica. Pero propone que existe otra disciplina, Hla- imémosle -Inguistica-Abstracta)s que ignora estos datos conti- dera G(1) y G(2) como igualmente justificadas por los datos empi- ricos areleventes»; de hecho, un practicante de la lingiistica-A €s- cogeria GQ} antes que G(1) si fuera «mis simple», de acuerdo con ciertos criterios generales. Sin duda alguna Sapir y Jakobson, entre otros muchos, habrian seguido en un caso asi el camino de la lin- guistica-C, seleccionando G(1) como la gramética y aplicando esta conclusién al estudio de las «Cuestiones Primordiales» referentes a la evolucién historica de fas lenguas y demas * Los que cteen que, junto a la lingiistica-C, cuyo estatus no se pone en cuestion, merece la pena desarrollar la dis PrlinguistcaeA, que no solo eiiere de I lingitstics fn la forma en que ésta ha sido practicada por las mis importantes figuras en este campo, sino que también es radicalmente diferente de cualquier cosa conocida en las ciencias, son los que tienen que probarlo: en reali- dad, resultaria raro restringir ta iologia eit quimica, de alguna forma a priort, a cuestiones y conceptos definidos de tal modo que delimitaran de antemano la categoria de los datos relevantes. Por lo menos en las ciencias, las disciphinas son concebidas como cuestiones de conveniencia, no como formas de trocear la naturaleza por sus articulaciones o como la elaboracién de ciertos concepts fijos, y sus limites se desplazan 0 desaparecen a medida que avanzan el conoci- miento y la comprensiGn *. A este respecto, el estudio del lenguaje, Los concepins del lenguaie 2 Para una discus recene de la cuetin en conexin com la ings hiss rien, sate Ligoos (979) Katz insist er que dsciphinas como ls quia, labologiay demi tienen ites inberentes, conceptualmentedevrminados. En realidad costes que ta it traion nose puede poner end, porque fo conraioconsuia una folma de sm “ances epeino bien ordenado de is dscplinas aeadomsess eh 52 Noam Chomsky tal como se ha concebide en la anterior discusidn, es como el de la quimica, la biologia, Ia fisiea solar o la teoria de la vision humana No especularé sobre st se puede probar lo que pretenden los abo gados de Ia linguistica-A, pero no obstante observaté que, incluso si se puede, ello careceria de consecuencias con respecto a la lepiti, inidad o al caréeter de la tarea que estamos discutiendo, como aclara Soames Obsérvese que la cuestion no es la legitimidad de la abstraccién Es perfectamente correcto el desarrollo de la mecinica racional, una rama de la matemitica que se abstrae a partir de la fisica y que tata los planetas como puntos de masa que obedecen ciertas leyes, 0 el desarrollo de tearias que consideran aspectos de las lenguas-1 ha- ciendo abstraccién de su realizacién fisica o de otras propiedades; ‘como antes observamas, éta es en realidad la prictica habitual, Pero cllo no fuerza a uno a creer gue el objeto de la mecdnica racional sea una entidad en un ciclo platénico, ni tampoco hay razones es- peciales para suponerlo en el caso del lenguaje ? 2.4.2. La base empirica del estudio de Ja lengua-1 Fn la practica real, fa lingifstica, en cuanto disciplina, se carac teriza de acuerdo con ciertas clases de datos que, por el momento, son ficilmente accesibles e informativos, en buena medida los juicios de los hablantes nativos. De hecho, cada uno de estos juicios cons. tituye el resultado de un experimento, pobremente disefado, pero rico en Ia evidencia que proporciona. En la prictica, tendemos a inet at an pect sam omar on opin © defectuosos por otras tavanes. Asi, Kat argumena cantes Hilsty hot se deseubriera que fos mades =patose som robots controlados desde ances no Serian Rates. pou el sptcado de seat /guoy It planes ngles-P es sania feng: ets septa siendo verdad ine luso sun ‘ve se determina qe. ena lengua de todas fe hablnts del ng, ne esnen seats igae/ de acuerdo con ol ansicc de Putnam, que onside que Tor gots pone ‘even ala misma clase natural (un concepte centiie) que los eemplaes arenes {Ur argumento se ajusa de modo tivial respect anges Py tal come Kao, cps sue propiedades Pere Putnam estaba propomiendo una toa teerene se eageas mn es rn comin ern aie gle ae Ka fine, Katy no presenta ninguna rain par eer que exe objet plaice serece «! nombre de singess mis que cualguict otro objeto abstracto igualmente egies ‘que incorporara los supuestor de Putnam, Los arpumentes fon scrpre de eating, Katz tambien presenta una exposicion de ls historia dels gramfucs generates de los documentos que ca que es gravemente inact, como a menudo ests evdenie inclavo de acuerdo con criterion internox. Vease tambien Chomsky. (1981) pine TS Loe conceptos del lenguaie 3 actuar bajo el supuesto o la pretension de que esos juicios del in- formante nos proporcionan «datos dircctos» sobre la estructura de Ia Tengua-I pero, por supuesto, no se trata mas que de una hipotesis, de trabajo preliminar e inexacta, y ningun practicante experto tiene a su disposicién una panoplia de técnicas que le ayuden a compensar los errores introducidos. En general, los juicios del informante no reflejan directamente la estructura de la lengua; los juicios de acep- tabilidad, por ejemplo, pueden no proporcionarnos datos directos sobre el estitus gramatical, a causa de la intrusién de muchos otros factores. LLo mismo se puede decir de otros juicios referentes a la forma y al significado. Estas afirmaciones no son, 0 no deberian ser, sino truismes * aos ret : deh e En principio, los datos referentes al caracter de la lengua-lI y del estado incial podrian proceder de fuentes muy diferentes, parr de los juicios referentes a la forma y ef significado de las expresiones: os experimentos de percepcidn, el estudio de la adguisicin y del déficit 0 de lenguas inventadas en parte, como el criollo 2, 0 del uso literario, o del cambio lingiistico, de la neurologia, de la bioquimi- ca, ete. Una de las mayores contribuciones del tiltimo Roman Ja- kobson fue lz de destacar este hecho, como principio y en Ia préc- tica, en su propio trabajo. Como en el caso de cualquier investigacion sobre un aspecto del mundo fisico, no existen formas de delimitar en principio las clases de datos que pueden resultar relevantes. Tal como se practica habitualmente, el estudio de la estructura lingiis- tica podria desaparecer finalmente como disciplina, a medida que fueran disponibles nuevas clases de datos, pudiéndose distinguir solo en la medida en que su objeto es una facultad particular de la mente, ee tados de madurez. que puede alcanzar. Ciertamente los juicios de los hablantes nativos siempre propor- cionarin datos relevantes para el estudio de la lengua, como los juicios de percepcién siempre proporcionarin datos relevantes para el estudio de Ja visién humana, aunque a uno le gustaria que tales datos perdieran el estatus privilegiado de ser Gnicos. Si una teoria de la lengua no consigue dar cuenta de tales juicios, sera errénea sin Cl que no se trata de una teoria de a podemos saber de ante- % Para una discusién de algunos malentendidos corrientes sobre esta cvestion y vray relacionadas, véase Newmeyer (1983). * Sobre Ia relevancia de este material, véase Bickerton (1984) y las referencias ci- tados,y la discusin en el mismo ejemplar dela revista, o Noam Chomsky mano cusn informativas resultaran las diferentes clases de datos con respecto ala facultal linguistics y 4 sus monifesacionee,& podrin ‘mos anticipar que un rango mis amplio de datos y una comprension mas profunda de ellos nos permitiria idemtificar en qué aspectos los iuicios de los informantes son stiles © no fiables y por qué, y com. pensar los errores introducidos por el sapuesto de trabajo prelimi, nar, que ¢s indispensable, hoy por hoy, ¥ que nos pravee de info macién rica y significativa 5 importante tener presente que el estudio de fa propia lengua puede proporcionar datos cruciales referentes 2 la estructura deal, Runa otra, si seguimos aceptando el plausible supuesto de que la capacidad de adquirie el lengusje, el abjew de la GU, es conven s toda ta especie. Esta conclusion se encuentra implicita en el progra ma de investigacién anteriormente eshorado. Un estudio del inglés es un estudio de Ia realizacién del estado inicial S(O) bajo condicio nes parcuares Por tanto, conlleva supuestos referees a S(O), que se han de hacer explicitos. Pero S(O) es canstante, luego el japonés ha de ser una instanciacidn del mismo estado inicial bro diferentes condiciones. La investigacion sobre el japonés puede demastrar que ls supuestos referentes a S(O) que te derivan del estudio del ingles eran incorrectos; estos supuestos pueden dar respuestas ertoneas para cl pons y, despues de corregilos sabre ext base, podemos vernon obligados a modificar la gramitica postulada para el inglés, Como evidemtemente fos datos del ponte son pertivenves para Ia correc cién de una teoria del S(O}, pueden tener un peso indirecto, pero muy importante, sobre la eleccisn de la gramética que trate de ca. racterizar la lengua-1 abtenida por el hablante del inglés, Esta es una prictica habitual en el estudio de fa gramatica generativa. Solo por esta razdn resulta completamente errénco suponer que no existen fundamentos para escoger entre «pramsticas extensionalmente equi valentes para una lengua determinadas (véanse paps, 35, 45-47): por ciemplo, una de ellos puede requerie una teria del S(O} que sea patentementeinaecuna para alga lenges « acuerdo con los supuestos sumamente relativistas de ciertas variedades de Ia Hingtiticn descrptiva, que mantienen que cada Te ua ha de ser estudiada en sus propios términos, este programa de investigacién puede parecer absurdo o ilegitimo, aunque se podria hacer notar que este punto de vista, al menos’ en parte, em una idcologia que no se observaba en Ia prictica, $i lo que nos interesa es descubri ls propiedadesreles det estado iniial de Tr facut linguistica y de sus realizaciones particulares como lenguas-I poten tines 0 reales, mos de abandon Is ideologia, y hemos de cons derar que una tearia de una lengua se encuentra sujeta a cambios on Los conceptos del lengusie 58 concordancia con la base de datos referentes a otras lenguas (con la mediacién de una teoria de la GU), 0 datos de otras clases. Hemos observado que es una tarea de las ciencias del cerebro explorar las propiedades y los principios descubiertos por el estudio de la mente. Dicho de forma més correcta, es reciproca la interde- pendencia de las ciencias del cerebro y el estudio de la mente. La teoria de Ja mente trata de determinar las propiedades del estado inicial S(O) y de cada estado obtenible S(L) de la facultad lingiistiea, las ciencias del cerebro wratan de descubrir los mecanismos cere brales que son reaizaciones fisicas de esos estados. Existe una tarea comin: descubrir la caracterizacién correcta de la facultad lingiistica en sus estados inicial y final, descubrir la verdad acerca de la fa- cultad lingiistica, Esta tarea se desempeiia en diferentes niveles: una caracterizacién abstracta en teoria de la mente y una investigacién sobre los mecanismos cerebrales en las ciencias del cerebro. En prin- cipio, los descubrimientos sobre el cerebro han de influir sobre la teoria de fa mente y, al mismo tiempo, af estudio abstracto de los estados de la facultad lingiiistica ha de formular las propiedades que ha de explicar la teoria del cerebro y, con toda probabilidad, resulta indispensable en la busqueda de esos mecanismos, En la medida en que se puedan establecer esas conexiones, el estudio de la mente, en particular de la lengua-I, quedara inmerso en el seno de las ciencias naturales. Por el momento se conoce tan poco sobre los aspectos relevantes del cerebro que ni sguera podemos especulr sobre Jo que puedan ser esas conexiones. Sin embargo, podemos imaginar cémo pueden citablecerse ex principio, aunque el objetivo final se encuemtre uy lejos. Supongimos que el estudio de la lengua-I establece ciertos principios generales de la tcoria del ligamiento (binding theory) que explican hechos como os discutidos en el Capitulo 1. Entonces una tarca de las ciencias del cerebro seria la de determinar qué mecanis- mos son los responsables del hecho de que se den esos principios. Supongase que tenemos dos gramaticas, dos teorias sobre el estado de conocimienso alcanzado por una persona particular, y suponga- mos ademas que esas teorias son sextensionalmente equivalentese, en el sentido de que determinan la misma lengua-E, sea cual sea el sentido que demos a esa nocién derivada. En principio podria suce- der que una de estas gramaticas incorporara propiedades y pri ficilmente explicables en términos de mecanismos cerebrales, mien- tras que la otra no. De forma parecida, dos teorias de la GU que sean equivalentes, en el sentido de que especifican exactamente el tmismo ‘conjunto de lenguas-L obtenibles, se podrian distinguir en términos de propiedades del cerebro. Por ejemplo, una puede con- Noam Chomsky tener ciertos principios y posibilidades de variacién que se pueden explicar Facilmente en términos de mecanismos cerebrales,y la otra no. Es bastante facil imaginar casos de esta clase. Supéngase que la tcoria I contiene los principios P(1)...P(a) y que la teoria Il contione los principios (Q(1)..Q(n}, y que las dos teorias son légicamente equivalentes: los principios de cada una se pueden deducit de los brincipios de la otra de tal forma que cualquier descripcidn de con: ducta o de conducta potencial en términos de una de las teorias oe puede reformular en términos de la otra. Podria suceder que las tiencias del cerebro mostraran que cada P(i) se corresponde on un complejo determinado de mecanismos neuronales, mientras que no ¢xiste [a misma explicacién para los Q(i): algin dao cerebral, por clemplo, podria modificar selectivamente los P(i), pero no los Qi). Em este caso, los hechos referentes al cerebro seleccionarian teoriss de Ja mente que serian empiricamente indistinguibles en otros té, minos. Aungie en el estado actual de mucstiee concemiones muy remotos los resultados de esta clase, son posibles. Asi conce, bila, I relacisn entre el cerebro y fa mente constituye un problema de las ciencias naturales 2.4.3. Algunas consecuencias del desplazamiento del objeto En resumen, podemos concebir el conocimiento que una persona tiene de una lengua particular como un estado de In mente’ que se encarna en una cierta disposicién de mecanismos fisicos, Realisamos la abstraccion de la lengua-1 como «lo que es conocido» por una persona en ese estado de conocimiento. Este sistema fimitor ta len ual, es To que el lingtista generativo trata de caracterizar, Si digo que este sistema tiene tales ¥ cuales propiedades, lo que afitmo es verdadero 0 falso. Fn suma, propongo una explicacidn teorica de las propiedades de ciertos mecamismos, una explicacion que se presenta en un cierto nivel de abstraccicin, en el que creemos que se pueden expresar las propiedades significativas de estos mecanismos y se pue- den elucidar los principios que rigen estos mecanismos y sus fun ciones. De alguna forma, este estudio se parece a lo que Gunther Stent ha denominado shermenéuti a la 3U es cl estudio de un aspecto de la dotacién biolbgica, anilogo al estudio de los principios innatos que determinan mie anes de tener un sistema visual propio de la especie humana y no el de los insec. € interpreta la experiencia visual (Stent, 1981), De forma sim Los conceptos del lenguaie 7 tos. Fl concepto técnico «conocimiento de !a lengua-I» se aproxima razonablemente a lo que informalmente se llama sconocimiento del Jenguaje», sise abstraen diversos aspectos de la nocién comiin, como Jos discutidos con anterioridad, aunque esta consideraci6n es secun. daria por las razones que ya se han mencionsdo, Como se observé antes, el desplazamiento del enfoque hacia una interpretacin mentalista del estudio del lengusje consatuyé un fac tor en el desarrollo de las ciencias cognitivas contemporineas, y supaso un paso hacia la incorporacion del estudio del lepguaie s lo ciencias naturales, porque ayuda a allanar ei camino a una investi- gacidn sobre los mecanismos que tienen las propiedades exhibidas Por el estudio de las reglas y las representaciones. Este desplaza- miento también tuvo como consecuentcia una reclasificacion de mu chas de las cuestiones tradicionales en el estudio del lenguaje. Sur- gieron muchos problemas nuevos e incitantes, y una cierta cantidad de problemas familiares se disolvieron cuando se consideraron bajo esta perspectiva Considérese el estudio de la estructura fonica, el objeto de aten- cion primario en la lingiistica estructural y descriptiva, Si se consi- dera la lengua-E. como el objeto de la investigacién, el problema es decubrir los elementos, las propiedades y la disposicién en que se subdivide el flujo del habla: los fonemas y los rasgos, considerados como segmentos de la forma de una onda actistica o de una serie de movimientos articulatorios. Buena parte de la teoria fonoldgica es. twvo constituida por los procedimientos analiticos para llevar 2 cabo esta tarea, Sin embargo, si nos centramos en la lengua-I, el problema es mis bien diferente: el de encontrar las representaciones mentales que subyacen a la produccién y ala percepcién del habla, y las reglas jue relacionzn esas representaciones con los acontecimientos fisicos Urfhabla: El problema consste en encontrar tos que explique mejor una gran variedad de hechos, sin esperar que existan proce- dimientos analiticos para realizar este trabajo, del mismo modo que 1o existen en otros campos. Por ejemplo, considérense los términos que se enumeran a con- tinuacién, donde la columna les [a ortografia convencional, fall la representacion fonologica aparentemente correcta y la Ill las repre- sentaciones fonéticas aproximadas en un dialecto del inglés, siendo {2} una vocal corta y [A] una vocal larga (es irrelevante en este punto su caracter fenético exacto),{é] la contrapartida nasalizada de [eh y D una vibracién de la lengua como en la {r] vibrante. se Noam Chomeky 1 u ur bet bet bet bent bent bat bend bend bend knot nat nat nod nad nAd write rayt rayt ride rayd rAyd writer rayete rayDr rider raydtr rAyDe Podemos suponer que las representaciones fonéticas de la colum: na II corresponden a acontecimientos efectivos del habla en virtud de principios universales de interpretacion que conservan esencial- mente la linealidad, esto es, la secuencia de simbolos fonéticos co tresponde a Ia secnencia de sonidos (como se sabe, la cuestién no ¢s asi de simple}. Las representaciones fonolégicas de la segunda cohumma, no las fonicas de Ia tercera, se carresponde con Is forma en que intuitivamente «oimos» esas palabras. Aunque el analisis fo- niético muestra que best y bene se diferencian solamente en la nasa lizacién de Ia vocal intermedia y que cada una de ella tiene tres segmentos fonéticos, a diferencia de la palabra de cuatro segmentos bend, esto no se corresponde con la percepeién intuitivas escucha- mos knot y nod como si se diferenciaran solo en un rasgo, sonori- zando la consonante final, pero no la vocal y la consonante (como, por ejemplo, en knot versus Ned). Las representaciones de writer ¥ rider que percibimos intuitivamente, y que claramente estin relacio- nadas con la estructura léxica y sintactica, son las que se indican en Ih segunda columna (con + en lugar de la separacién entre el cle- mento léxico y ef afijo de agente), no en la tercera, aunque ésta Gltima expresa el hecho fonético de que las palabras se diferencian silo en Ia cualidad de las vocales. Fjemplos como éstos plantearon fuertes dificultades a.un enfoque de la fonologia que trataba de de terminar las unidades fonologicas mediante procedimientos analit 60s aplicables a acontecimientos reales del habla. La cuestién es la del estatus de las represcntaciones de la columna Il, que siempre fueron consideradas coms «correctas» en un cierto sentido, aunque sus clementos no se corresponden punto por punto con los sonid reales del habla, las subdivisiones de ejemplares reales de la lengua-E Si se desplaza el foco de atencidn a Is lengua-l, los problemas se disuelven ripidamente. Lay representaciones de la columna Il son eseacialmente las representaciones mentales del léxico, que tienen Los conceptos del lenguaje sie ver con la sintaxis y la seméntica. Las representaciones fonéticas ¥ Ja columna HI se derivan de ellas mediante reglas sencillas, de gran generalidad en su mayoria: las vocales asumen una cualidad articilar ante las consonantes sonoras y sordas, y se nasalizan ante is consonantes nasales, la consonante nasal cae ante una dental sor- day (en este dialecto) la pausa dental se convierte en [D] medial en este contexto tGnico. Aplicando estas reglas derivamos las formas fonéticas (III) de las representaciones léxico-fonologicas (II). Estas eprezraciones wales deren deh oslo Teel bla toe di procedimientas analiticos de segmentacidn, clasificacién 0 extraccién de rasgos fisicos, sino que se establecen y justifican como parte de la teorta que mejor explica, en ltima instancia, la relaciOn general entre el sonido y el significado de la lengua-I. Otras reglas sinticticas y semédnticas se aplican a las representaciones de (II) en las expre- Ziones en que aparecen. La lengua-l, que incorpora las reglas que forman las representaciones (II) y las reglas que las relacionan con (Ill), es adqurida por el nif mediante fa aplicacion de les prine!- pios incorporados en el estado inicial S(O) 2 hechos que se le pre- Sentan; para el gramitico, el problema esti en descubrir esos prin- Cipios y mostrar cOmo conducen a la eleccién de las representaciones (ID) (suponiendo que sean las correctas) *, El fracaso de los procedi- mientos taxonémicos carece de importancia, porque no existen ra- Zones para creer gue esos procedimientos desemperien un papel en In adquisicion de fx lengua’ que figuren como parte de la GU. ‘Chino ustran estos ejemplos sumamente sencillos, incluso ea el nivel de la estructura de los sonidos, las representaciones mentales pueden scr relativamente abstractas, es decir, sin estar relacionadas de forma simple con especimenes reales de la conducta lingiistica {de hecho, esto es cierto incluso de las representaciones fonéticas, como mostraria un anélisis mas detallado). A medida que nos mo- vemos 2 otros niveles de la investigacin de la lengua-l, nos encon- ramos con mis datos de que las representaciones mentales son abs- iactas en este sentido, Los sistemas de reglas y de principios que las forman y las modifican son muy simples y naturales, aunque interaccionan entre si hasta obtener estructuras de una complejidad considerable y para determinar sus propiedades de una forma muy precisa. En sumta, fa facultad lingiifstica parece consistir en lo esen- Gal en un sistema computatorio que es rico y fuertemente limitado tn cuanto a su estructuta y rigido en sus operaciones esenciales, nada similar 2 un complejo de disposiciones © un sistema de hibitos 0 > Para una discusin, véase Chomeky (19896, 1981): y Chomsky, Huybregts y an Riemsdih 1982), ~~ 6 Noam Chomsky analogias. Esta conclusién parece razonablemente bien justificada y de un contenido considerable: no se conoce ninguna alternativa gue siquiera proporcione un avance de tratamiento de los problemas rea- les del lenguaje, y el debate que es empiricamente significativo tiene ugar en bueria medida dentro de este marco de supuestos. No abstante lo cual, habria que indicar que la conclusién es de todas formas mas bien sorprendente. Podria no ser de esperar que tun sistema bioldgico complejo, como [a facultad lingiiistica, hubiera evolucionado de esta forma y, si realmente lo ha hecho, no carece de significacién el descubrimiento. EJ alcance del desplazamiento hacia una interpretacién mentalista © conceptualista, hacia fa lengua interiorizada y no a la exteriorizada, es mayor de lo que a veces se supone. De forma explicita, inclaye el estudio de Ia sintaxis, de la fonologia y de la morfologia, Creo gue también incluye buena parte de lo que, de forma engafiosa, se denomina ela semantica de la lengua natural» —digo «de (ee gaiosae porque pienso que mucho de lo que se hace no es semantica en absaluto, si por «seminticas entendemos cl estudio de la relacion entre el lenguaje y cl mundo, en particular el estudio de la verdad y la referencia. En sw lugar, trata con ciertos niveles postulados de representacién mental, que incluyen representaciones de forma léxi- ay intictiea y otras denominadas smodeloss 0 seuadros~ 0 «re- presentaciones discursivas» «situaciones» u otras cosas parccidas, Pero la elacion de estos ultimos sistemas con cl mundo de objtos con propiedades y relaciones, o con el mundo tal como se cree que ce, aimenudo es intrineada y remota, mucho més de lo que se podria creer a partir de ejemplos sencillos. Por ejemplo, no se puede des- cribir la relacién como «inclusion» o asociacién de elemento a cle- mento. Por ejemplo, considérense los principios de la referencia prono- minal, que han sido centrales en estas investigaciones cuasisemant: cas. Si digo «Juan piensa que él es inteligenten, él puede referit a Jaan, pero no si digo: «El piensa que Juan es inteligente» *”, Pode thos dar cuenta de tales hethos mediante una teoria de las configu- raciones estructrales en las que un pronombre puede adguitir su “referencias a partir de un nombre asociado que fa liga. Sin embar- go, los mismos princpios se aplican oraciones como «el hombre de la calle piensa que él es inteligente», »él piensa que el hombre de Ia calle es inteligente» o «Juan Pérez. piensa que él es inteligente>, La euestion 6s mis compleia, Véase Evans (1980) y Higginbotham (19833) Peto podemos dear de lado aqui Ia necesaria precision de es nocianes, Los comceptos del lenguaje ot donde se introduce «Juan Pérez» como una designaciéa del hombre de la calle. Pero nadie supone que exista una entidad, el hombre de In eale (0 Juin Pérez), 2 a que el pronombre se puede referir en. un caso, pero no en otro. Si digo «Juan le echd una mirada, pero ésta fue demasiado breve como para permitir una identificacién posi var, ésta puede referirse a la mirada que Juan ech6; pero el prict Camente sinénim «Juan fe mide no se puede extender de esta for- ma con la misma interpretacin, aunque nadie crea que existen mi radas que una persona puede echar, a la que se refiera el pronombre ésta en la primera oracidn. O considérese un ejemplo tan sumamente debatido como «todo el que tiene un burro le pega», problemstico poraue el pronombre le no parece estar, desde un punto de vista formal, dentro del alcance del sintagma nominal cuantificado wn bu- 170, que lo liga. Se puede incentar enfocar el anilisis de las oraciones, de esta clase mediante la construccién de una representacién que tenga la propiedad de que, para cualquier par (hombre, burro), si tener satisface el par, entonces también lo hace pegar. Luego, diria- mos lo mismo sobre «todo el que tiene una oportunidad la desper- dicias, sin comprometernos uo obstante con la ereencia de que, entre las cosas que existen en el mundo, estin las oportunidades. Incluso si nos restringimos al contexto «hay...», dificilmente podemos supo- ner que hay entidades en el mundo, o en el mundo. iil counts ceetcsa que es, que se corresponden con los términos que aparecen en él (hay miradss que hacen dao y otras que causan placers, shay posibilidades que es demasiado arriesgado explotars, «hay oportu- nidades que no hay que dejar pasars, etc.) Se pueden imaginar ejemplos mucho més extremos. Aunque se ha hablado mucho sobre el estatus de los objetos de ficcién 0 los abstractos, de hecho el problema es mucho més profundo. Se puede hhablar de sreferencias y de «correferencia» con algin sentido si se jostula un dominio de objetos mentales asociados con las entidades Formales del lenguaje mediante una relacidn con muchas de las pro- piedades de la referencia, pero todo esto es interno a la teoria de las Tepresentaciones mentales; es una forma de sintaxis. No parece tener sentido poblar el mundo extramental con las entidades correspon- dientes, mi que de ello se sigan consencuencias empiricas © aumento en la capacidad explicativa. En la medida en que esto ¢s cierto, el estudio de la relacién de las estructuras sinticticas con modelos, scuadros- y demis habria de considerarse como pura sintaxis, el estudio de las diferentes representaciones mentales, que habria que complementat con una teoria de la relacién de estos objetos mentales, con el mundo 0 con el mundo tal como se concibe o cree ser. La postulacién de esas representaciones mentales no es inocua, sino que 0 Nosm Chornshy se ha de justificar mediante argumentos empiricos, como en el caso de las representaciones fonologicas 0 de otras representaciones sin ticticas, Por eso, el desplazamiento hacia una teoria computatoria de la mente abarca una parte sustancial de lo que se ha denominado ssemnticas, una conclusién que solo se ve fortalecida si considera- mos mas abiertamente los enfoques «conceptualistas» de estas cues- tiones. Para ello, hemos de tratar entonces Ia lengua-I y el estado inicial de la facultad lingilistica, las gramaticas y la GU del lingiista. Como tuna hipdtesis empirica preliminar, podemos considerar que la len- gua-l es un sistema de reglas de alguna clase, una realizacién espe- cifica de las opciones que permite la GU, fijada por la experiencia que se presente. EI sistema de reglas asigna a cada expresién una estructura, que podemos considerar como un conjunto de represen- taciones, una en cada nivel lingiistico, donde un nivel lingiistico es un sistema particular de representacion mental Esta estructura ha de proporcionar cualquier informaciéa que sobre una expresién sea ac oF ——————_— esa informacién se derive de la facultad lingiistica; sus representa- ciones han de especificar exactamente en qué contribuye la facultad Tingiistica a la determinacién de la forma en que se produce, utiliza y comprende la expresion. Un nivel lingiistico es ua sistema que consiste en un conjunto de elementos minimos (primitivos), una operacin de concatenacién que forma cadenas de primitivos, con tanto aparato matematico como sea necesario para construir los objetos formales apropiados a partir de esos elementos, las relaciones relevantes en las que se encuentren y una clase de objetos formales designados (marcadores) que se asig- nan a las expresiones en cuanto representadas en ese nivel. El sistema de reglas expresa las relaciones entre los diferentes niveles de Ja Jen- gua en cuestion y determina los elementos y propiedades en cada nivel. Por ejemplo, en el nivel de la estructura sintagmética, los pri- mitivos son los elementos minimos que entran a formar parte de la descripeion sintéctica Juan, carrer, preténto indefinido, N, V, Q.etc.), Ia eelacion bisica es ess (Juan es un N, Juan coms es una O, etc ), y los marcadores sintagmiticos consistirin en ciertos objetos formales construidos a partir de los primitivos que expresan completamente la relacién es-un. El marcador sintagmatico de la cadena Juan corrié indicara que toda la cadena es una O (oracion), que Juan en un N (nombre) y un SN (sintagma nominal) y que corrio es un V (verbo) yun SV (sintagma verbal); més adelante apareceran ciemplos. La teorfa de'Is estructura fingiifstica (GU) tendré a su cargo la Los conceptos del lenguaie 6 tarea de especificar estos conceptos de forma precisa ”*, La teoria ha dde proporcionar gramaticas para las lenguas-I que, en principio, pue- dan ser obtenidas por una mente/cerebro humana, ante la experiencia apropiada®, y ha de restringirse ademas de tal modo que ‘ecermine exactamente a lengua-I, dada la clase de datos que bastan para la adquisicién de la lengua. Volveremos seguidamente sobre estas cues- tiones, Para un primer iment, véase Chomsky (1975), que data de 195556 ™ Up tego mis ere vers el de quel GU eae exact en 225-1 obrenblesen condiciones normaes Sin embargo, no resula obvi gue ls GU Sstsfaga ess condiciones, Las lengua obtenibles son fs que caen dentro dele teter sec dey deerminasg po GU y ow sites humanaes aprenden Condiciones sobre a aprenibiidad podiian excl cetas grams permsdss por in GU. Obsersacones parcilas stan tambien al ands parsing) Pars Is fond mention de es cuetiones, sate Wexler} Calicover (1980) Berwick 7 Wiee ierg (198),

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