Está en la página 1de 1

Querida Mam: S que este da de la madre ser diferente a

todos los anteriores, de hecho, desde hace un tiempo todo


es diferente, todo cambi.
Dicen que el cambio implica crecimiento, a veces forzado,
pero crecimiento a fin de cuentas. La vida se transforma
ms de lo que nos gustara, la vida es movimiento.
Madre como un Gran rbol nos cuidaste entre tus ramas
por tanto tiempo, y luego un da, lleg la hora de volar;
unos ms cerca, otro ms lejos y an otro, que necesitaba
ms velocidad que el resto, hasta las estrellas.
Y t ah, firme, con tus ramas abiertas para nosotros.
No has dado lo mejor de ti, lo agradezco infinitamente.
Agradezco a la vida que fueras tu mi rbol, mi nido, mi
soporte.
Madre, Mujer-rbol si alguna vez dude de tu valor, me
retracto. Me has dicho en ocasiones: T eres valiente!...
Querida si soy lo que soy, es gracias a ti, a tu ejemplo, tu
ejemplo de rbol de pie a pesar de las peores tormentas.
Tu ejemplo de rbol bondadoso y amoroso que me mostr
el camino de bondad y amor hacia otros. Un ejemplo que
seguramente t tambin aprendiste de otro Gran rbol, tu
propia Madre.
Eres una bendicin en mi vida y en la de mis hermanos y as
lo fuiste hasta el final de los da de David y cuando su
estrella lo mand a buscar, mostraste de que madera ests
hecha, de Roble quizs, y a pesar del dolor le regalaste en su
partida tu Bendicin y tu luz.
Yo por mi parte, como rbol-Madre espero entregarle a mis propios hijos, pequeos pjaros aun, ese calor que nos entregaste
y esa seguridad de que lo ms importante en la vida es ser mejores Humanos, tener el Espritu en alto a pesar de las
circunstancias y no rendirse. Ese Madre es el mejor ejemplo que me has dado y es el que espero poder dar.
Te amo, amo cada una de tus ramas, tus hojas, tus races. S que hoy no estamos todos contigo, unos volamos ms cerca,
otros hasta el Infinito, pero tambin s que en tu enorme corazn y en tus ramas abiertas, viviremos por siempre.
Gracias Mam.

También podría gustarte