LA POLTICA Y LA MENTIRA

por Francisco-Manuel Ncher

La poltica el hombre es un animal poltico segn Aristteles es consustancial al hombre porque ste, para evolucionar, para vivir, para sentirse vivo, necesita de los dems. Ha de intercambiar ideas y experiencias para poder encontrar su propio camino. Pero el hombre no es an perfecto. Y, sabindose imperfecto, en virtud de la bsqueda de amor que todos hacemos de la vida, se cree obligado a disimular y hasta a justificar y defender sus defectos y vicios y carencias. Y, cuando ocupa puestos de responsabilidad, esa tendencia, no natural, a mentir, se convierte en una necesidad, al saberse el poltico observado por muchos ms que antes. De ah lo difcil que resulta separar la poltica de al mentira. Y la idea del pueblo llano de que los polticos todos mienten. Y el lgico corolario de que la mentira es consustancial a e inevitable en poltica. Slo un hombre que no mintiera, que no disimulase ni justificase sus defectos y errores y no tuviese ningn rebozo en reconocerlos, podra llegar a ser el poltico en el que todos confan. Pero entonces ya no sera un hombre normal. Sera un sabio. Por eso Platn deca que la sociedad no sera perfecta hasta que estuviese gobernada por sabios. Y, por eso, cuando intent poner su teora en prctica y, por cierto, dos veces en Siracusa, el intento fracas, sencillamente porque los gobernantes designados an no eran sabios en el sentido en que Platn hablaba, es decir, no eran hombres perfectos.

***