Colegio: instituto profesional y técnico Dr. Arnulfo Arias
Grupo VIIA Y VIIIA Química Por: Olmos Madelayn, Góndola Eduardo, Zepeda Anderson, Pimentel Emely y Canto Williams XI° DC Profesora: Ema Obando 2024 FLÚOR
El flúor es un elemento químico de número atómico 9, situado en el grupo de los
halógenos de la tabla periódica de los elementos formados por moléculas diatómicas. • Funciones del flúor: • Participa en la formación y fortalecimiento de huesos. • Inhibe la desmineralización del esmalte dental. • Interfiere en la formación de la placa bacteriana. • Prevención de caries en los dientes, que se hacen más resistente a los ácidos • Mantenimiento de la estructura ósea. HELIO
• El helio elemento químico de números atómico 2, perteneciente al grupo de
los gases nobles, escaso en la corteza terrestre y muy abundante en el universo, en el aire atmosférico y en algunos yacimientos de gas natural, usado para llenar lámparas incandescentes, globos aerostáticos en laboratorios analíticos entre otros. NEÓN
• El neón es un elemento químico de número atómico 10 y símbolo Ne
localizado en el grupo VIII de la tabla periódica. El neón es miembro de la familia de los gases nobles incoloro, prácticamente inerte, la mayor cantidad se encuentran en el espacio pequeñas cantidades de neón en el gas natural, en los minerales y en los meteoritos. Proporciona un tono rojizo característico a la luz de las lámparas fluorescentes en las que se emplea. CLORO
• El cloro es un elemento químico de número atómico 17 y símbolo CI situado
en el grupo de los halógenos grupo VIIA de la tabla periódica. El cloro existe como un gas amarillo verdoso a temperaturas y presiones ordinarias y es el segundo en reactividad entre los colágenos, después del flúor. • Es un elemento abundante en la naturaleza y se trata de un elemento químico esencial para muchas formas de vida. ARGÓN
• Elemento químico de número atómico 18, perteneciente al grupo de los gases
nobles, abundante en la atmósfera y en las emanaciones volcánicas, y que se usa en el llenado de bombillas y en la industria metalúrgica. (Símbolo Ar). BROMO
• Elemento químico líquido, de número atómico 35, tóxico, de color rojo
parduzco y olor fuerte, escaso en la corteza terrestre, que se encuentra en el mar y en depósitos salinos en forma de bromuros, y actualmente se usa en la fabricación de antidetonantes, fluidos contra incendios, productos farmacéuticos y gases de combate. (Símbolo Br). KRIPTÓN
• El kriptón es un elemento químico de la tabla periódica cuyo símbolo es Kr y
su número atómico es 36. Es un gas noble en cloro e insípido que se encuentra en cantidades mínimas en la atmósfera. YODO
• Es un elemento químico del número atómico 53 situado en el grupo de los
halógenos (grupo 17) de la tabla periódica de los elementos. Su símbolo es I. Es un no metal debido a que no es un buen conductor del calor ni de la electricidad. XENÓN
• El xenón: es un elemento químico noble, número atómico 54 en la tabla
periódica. Es incoloro, inodoro y se encuentra en cantidades traza en la atmósfera terrestre. Se utiliza en lámparas de xenón, dispositivos de fototerapia y en la industria electrónica para producir luz brillante y estable. Además, tiene aplicaciones en la medicina, en la exploración espacial y en la investigación científica. ASTATO
• El ástato: es un elemento químico extremadamente raro y radioactivo, con
número atómico 85 en la tabla periódica. Es el elemento más escaso de la naturaleza, y se encuentra en la Tierra en cantidades minúsculas, principalmente como un subproducto de la desintegración del uranio y el torio. Debido a su rareza y radiactividad, no tiene aplicaciones comerciales significativas, pero se utiliza en investigaciones científicas, particularmente en la radioterapia y en la producción de trazadores radiactivos para estudios médicos. RADÓN
• El radón: es un gas noble altamente radioactivo, con número atómico 86 en
la tabla periódica. Es incoloro, inodoro e insípido, lo que lo hace difícil de detectar sin equipos especializados. Se forma naturalmente a partir de la desintegración del uranio y el torio en rocas, suelos y aguas subterráneas. La exposición prolongada al radón puede aumentar el riesgo de cáncer de pulmón, por lo que es importante realizar pruebas y medidas de mitigación en áreas donde se acumula en niveles peligrosos, como sótanos y espacios subterráneos.