Cristo y la Misión En la extensión del reino 1 Visión clara
La misión cristiana, según la
"misionología", abarca diversos aspectos, pero a menudo se descuida la "cristología", que reconoce a Cristo como la fuente y el corazón de toda misión. Una visión clara y completa de Jesús es vital para la motivación y dirección de la iglesia (1 Corintios 2:2). 2 La encarnación como modelo
La encarnación de Cristo es el mejor
modelo para la misión:
Jesús se vació de gloria.
Adoptó nuestra naturaleza y se identificó profundamente con la humanidad, sirviendo y amando incluso a los desahuciados (Filipenses 2:5-8). 3 Entrar en la vida del prójimo
La auténtica misión requiere la identificación
sin perder la propia identidad, como muestra el ejemplo de Pablo. Entrar en el mundo intelectual y anímico de otros es esencial, así como llorar con los que lloran y enfrentar el sufrimiento real de las personas, mostrando el amor de Cristo (Romanos 12:15). La cruz Encarnación y sufrimiento El siervo sufriente La misión bíblica, a menudo 13 He aquí que mi siervo será prosperado, descuidada hoy, incluye el será engrandecido y exaltado, y será puesto muy en alto. 14 Como se asombraron de ti sufrimiento y la muerte como muchos, de tal manera fue desfigurado de elementos indispensables, los hombres su parecer, y su hermosura más que la de los hijos de los claramente presentes en la hombres, 15 así asombrará él a muchas Escritura. El siervo sufriente de naciones; los reyes cerrarán ante él la boca, Isaías, precursor de la luz para las porque verán lo que nunca les fue contado, y entenderán lo que jamás habían oído. naciones, ofrece su espalda y rostro antes de asombrar a muchas naciones (Isaías 52:13-15). El grano debe morir Jesús enseñó y demostró que la muerte es la condición para 23 Jesús les respondió diciendo: Ha la fructificación en la misión. llegado la hora para que el Hijo del Al referirse a su propia Hombre sea glorificado. 24 De cierto, de cierto os digo, que si el grano de muerte, estableció que solo a trigo no cae en la tierra y muere, través de ella se extendería el queda solo; pero si muere, lleva evangelio al mundo gentil, mucho fruto. ilustrando que la muerte es la condición para llevar mucho fruto (Juan 12:23-24). Dispuesto a sufrir El apóstol Pablo aplicó este principio a sí mismo, afirmando 10 llevando en el cuerpo siempre por todas partes la muerte de Jesús, para que también que sus sufrimientos benefician la vida de Jesús se manifieste en nuestros a otros, conduciéndolos a la cuerpos. 11 Porque nosotros que vivimos, gloria y la salvación. Aunque siempre estamos entregados a muerte por puede sonar extraño, su causa de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestra carne disposición a sufrir por la mortal. 12 De manera que la muerte actúa en proclamación del evangelio nosotros, y en vosotros la vida. demuestra la relación entre el sufrimiento y el crecimiento de la iglesia (2 Corintios 4:10-12). La resurreción El mandato para la misión Autoridad La resurrección de Cristo precede a la Gran 18 Y Jesús se acercó y Comisión, donde el Señor resucitado otorga autoridad para la misión global. La legitimidad les habló diciendo: de la misión universal de la iglesia se deriva del Toda potestad me es señorío universal de Cristo, establecido con su dada en el cielo y en resurrección (Mateo 28:18). La resurrección no solo valida el mensaje la tierra. cristiano, sino que también comisiona a la iglesia a llevar esa esperanza a todo el mundo, revelando la conexión inseparable entre la victoria sobre la muerte y la responsabilidad misionera. Nos impulsa La resurrección marca un cambio significativo en la naturaleza de la misión. Mientras que en el Antiguo Testamento la expectativa era que las naciones 13 Yo seguía con estas visiones en la acudieran a Jerusalén, en el Nuevo Testamento, tras noche. De repente, vi que salía entre la resurrección, la iglesia es comisionada a salir las nubes uno como un ser humano[a]. Se acercó al Anciano hacia las naciones. La resurrección de Cristo venerable y lo presentaron ante él. 14 representa el comienzo de una nueva era, donde Él, Se le dieron poder, gloria y autoridad; como gobernante supremo, proclama su señorío todos los pueblos, naciones y lenguas entre las naciones. Este enfoque misionero estarán a su servicio. Su dominio no tendrá fin y su reino nunca será centrífugo, busca reunir a las personas alrededor destruido. del mensaje de Cristo. La resurrección, por lo tanto, no solo autoriza la misión, sino que también impulsa la iglesia a un movimiento dinámico que busca juntar y reunir a la humanidad bajo el señorío de Cristo. La exaltación de Cristo El incentivo para la misión Nombre sobre todo nombre 9 Por lo cual Dios también le La exaltación de Jesucristo a la exaltó hasta lo sumo, y le dio un diestra del Padre, indicando su nombre que es sobre todo nombre, 10 para que en el nombre supremo honor, proporciona de Jesús se doble toda rodilla de el más fuerte incentivo los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; 11 y misionero. La elevación sobre toda lengua confiese que todo principado y autoridad Jesucristo es el Señor, para valida su superioridad, gloria de Dios Padre.
conforme a Filipenses 2:9-11.
Que todos reconozcan El celo por la gloria de Cristo, expresado en el deseo de que "toda rodilla" se doble ante Él, Porque escrito está: integra el culto y el testimonio de Vivo yo, dice el Señor, que ante la iglesia. Este celo debería mí se doblará toda rodilla, motivar la misión cristiana, no Y toda lengua confesará a Dios. solo por obediencia a la Gran Comisión sino por amor y deseo Filipenses 2.10 de que todos reconozcan a Jesús como Señor. El gran misionador El Espíritu Santo, identificado como el “Gran Misionador", es esencial para la evangelización global. Su papel como impulsor divino trasciende las diferencias en enfoques y métodos misioneros. La conferencia de Edimburgo en 1910 subraya que la obra misionera debe ser inaugurada, dirigida y sustentada por el Espíritu Santo, quien dio impulso a la iglesia Cristianos primitiva desde el día de Pentecostés. Otras religiones Glorificar a Jesús El Manifiesto de Manila (1989) destaca que toda evangelización depende del Espíritu Santo, quien unge, confirma, convence y capacita. Su principal preocupación es glorificar a Jesucristo, y la guerra espiritual implica la dependencia de la Palabra y el Espíritu, con la oración como herramienta esencial. La conversión genuina, un encuentro de poderes, muestra la autoridad de Jesucristo sobre las tinieblas y la muerte. Maranata La urgencia de la misión Cumplir con urgencia La parusía de Jesús, su retorno prometido, está estrechamente vinculada a la misión de la iglesia. La ascensión marcó la primera etapa, seguida por Pentecostés y la misión global. La iglesia tiene un tiempo limitado para cumplir su responsabilidad, llenando la brecha entre la ascensión y la parusía con el testimonio mundial.
"Le habéis visto irse. Le veréis volver."
(Hechos 1:11) Habrá un juicio La urgencia de la misión se fundamenta en la relación entre la parusía y el juicio. La iglesia vive, trabaja y testifica en anticipación consciente de la venida y juicio de Cristo. El reconocimiento y recompensa en el tribunal de Cristo son aspectos importantes. La Escritura insta a vivir con la conciencia de que el tiempo es corto y la tarea es urgente.
"Es necesario que nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo..."
(2 Corintios 5:10) Cumplir con urgencia La base cristológica de la misión encuentra su inspiración en diversos aspectos de la carrera salvífica de Cristo. Desde su encarnación hasta su parusía, Jesucristo proporciona el modelo, el costo, el mandato, la motivación, el poder y la urgencia para la misión. Reconocer a Jesucristo como la esencia absoluta para la tarea es esencial para la evangelización del mundo.
"Porque el Hijo del Hombre ha de venir en
la gloria de su Padre con sus ángeles, y entonces pagará a cada uno conforme a sus obras." (Mateo 16:27) La imagen que tenemos sobre Cristo y la Misión En la extensión del reino