¡¡¡¡¡¡Ponte los guantes y vamos a trabajar!!!!!!!! En la medicina táctica, si estamos en este momento, es porque ya se realizó la primera fase del TCCC o TECC, es decir, el peligro ha sido neutralizado y nos hemos puesto a cubierto, si nuestra vida no corre riesgo estamos listos para ayudar. M. Hemorragias masivas: Se presenta cuando el trauma ocasiona una perdida excesiva de sangre que pone en peligro la vida de la persona. Este es el riesgo más inminente y primero a controlar, porque es la segunda causa de muerte en lugar del accidente y la primera el día después de hospitalización. Dato de interés: Una hemorragia exanguinante necesita tres minutos o menos para matar. Deben ser controladas mediante torniquetes, es el primer mecanismo a usar es, el más rápido y efectivo. En la zona debe ser aplicado entre 5 y 7 cm por encima de la herida. Luego de evacuar se reevalúan los torniquetes, su necesidad, efectividad y si hay que poner otro o retirarlo, este conocimiento solo lo da la preparación. Si lo anterior no tiene éxito, según tu preparación deveras realizar: uso de Vía aérea supraglótica, intubación endotraqueal y como último recurso realice una cricotiroidotomía quirúrgica. Respiración: Luego de controlar las hemorragias o haber verificado que no hay presencia de estas, procedemos a inspeccionar las vías aéreas: Si el paciente está consciente, dejar que tome posición de confort. Si esta inconsciente o no puede acatar ordenes: despejar la boca de chicles, vomito, comida, entre otros. Elevar el mentón para abrir las vías respiratorias. Verificar si necesita el uso de dispositivo nasofaríngeo, colocar y dejar en posición de recuperación . Cuando se presenta problemas respiratorios debido a complicaciones de trauma en la zona torácica, habrá que realizar una descompresión de neumotórax con aguja/catéter en la zona de la lesión o usar parches ventilados, como primera opción. La descompresión puede ser: Descompresión anterior. Descompresión lateral. Descompresión no invasiva. valuación de posible shock hipovolémico, también conocido como shock hemorrágico o en caso caso de necesitar amputación manejar la situación mediante el suministro de: Ácido tranexámico. Sangre fresca. Hemoderivados calientes. Reanimación hipertensiva con coloides o cristaloides calientes. Recuerda: La Sangre perdida se repone con sangre.