¿QUÉ SON LAS ESTACIONES DE TRABAJO 

?
Las estaciones de trabajo, también conocidas como workstations, consisten en equipos de alto
rendimiento que se emplean en cualquier trabajo con necesidades específicas.
Suelen formar parte de una red donde se almacenan y comparten un sinfín de archivos y
carpetas con información relacionada con el trabajo de una empresa.
Se suelen utilizar en los sectores de ingeniería, medicina, arquitectura, finanzas, audiovisual,
etc.
 ¿PARA QUE SIRVE UNA WORKSTATION?

1.Tienen monitores muy grandes que mejoran la visualización de gráficos 

2.Disponen de un procesador bastante potente para operar con datos complejos 

3.Cuentan con discos duros que almacenan grandes cantidades de información

¿ES LO MISMO QUE UN ORDENADOR?

En absoluto. Aunque puedan parecer similares, ambos presentan una serie de

características claras que los diferencian:

— Las estaciones de trabajo poseen una capacidad de memoria y procesamiento mayor, a

diferencia de un ordenador de escritorio.

— En función del uso que se le da a la estación de trabajo, estas presentan

algunas características avanzadas, poco comunes en los ordenadores convencionales.
Suelen contar con componentes ampliados para audio, vídeo o almacenamiento. Por lo
tanto, tienen un precio superior al resto de equipos informáticos.
¿CUÁLES SON LAS FUNCIONES DE UNA
ESTACIÓN DE TRABAJO?

•Almacena datos y tiene capacidad de procesamiento muy alta, así como otras

funcionalidades necesarias para llevar a cabo tareas de un área específica.

•Permite que cada miembro del equipo pueda participar en un mismo proyecto
desde las estaciones que se conecten a una red de trabajo.

•Al ser máquinas fiables y personalizadas según actividad, permiten el ahorro

de tiempo en tareas diarias, aprovechando sus potentes recursos gráficos y
potencia de cálculo.
 4 TIPOS DE ESTACIONES DE TRABAJO
1. Supercomputadoras. Perfectas para investigaciones científicas debido a su destreza para
cálculos complejos.

2. Mainframes. De gran potencia y grandes dimensiones. Facilitan el procesamiento de

grandes cantidades de datos. Por lo tanto, son muy útiles para empresas que manejan
múltiples transacciones, como los bancos.

3. Minicomputadoras. Se usan como terminales conectadas a un servidor. Tienen la

capacidad de procesar varias tareas a la vez. Como consecuencia, las industrias las solicitan.

4. Microcomputadoras. Su capacidad de procesamiento es menor que la de una

minicomputadora. Por eso, suelen usarse por persona y adaptarse al tipo de trabajo de cada
usuario.