Cuando vio Jesús a su

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madre, y al discípulo a quien

él amaba, que estaba
presente, dijo a su madre:
Mujer, he ahí tu
hijo. 27 Después dijo al
discípulo: He ahí tu madre. Y
desde aquella hora el
discípulo la recibió en su casa.
 «¡Dios mío, Dios
mío!, ¿por qué me
has abandonado?».
- ¡Elí, Elí! ¿lama
sabactani?
Cerca de la hora novena,
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Jesús clamó a gran voz,

diciendo: Elí, Elí, ¿lama
sabactani? Esto es: Dios
mío, Dios mío, ¿por qué
me has desamparado?
MATEO 27:46
 «Tengo sed»
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Después de esto, sabiendo Jesús que
ya todo estaba consumado, dijo, para
que la Escritura se cumpliese: Tengo
sed.
JUAN 19:28
 «Todo está cumplido»
Consummatum est
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Cuando Jesús hubo tomado el vinagre,
dijo: Consumado es. Y habiendo
inclinado la cabeza, entregó el espíritu.
JUAN 19:30

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 ¿cuánto más la sangre de Cristo, el
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cual mediante el Espíritu eterno se

ofreció a sí mismo sin mancha a Dios,
limpiará vuestras conciencias de obras
muertas para que sirváis al Dios vivo
HEBREOS 9:14

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 «Padre, en tus manos
encomiendo mi espíritu». - Pater
in manus tuas commendo
spiritum meum 

Entonces Jesús, clamando a gran

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voz, dijo: Padre, en tus manos

encomiendo mi espíritu. Y habiendo
dicho esto, expiró.
LUCAS 23:46
 Por eso me ama el Padre, porque yo
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pongo mi vida, para volverla a

tomar. 18 Nadie me la quita, sino que
yo de mí mismo la pongo. Tengo
poder para ponerla, y tengo poder
para volverla a tomar. Este
mandamiento recibí de mi Padre.
JUAN 10:17-18