La medicina tradicional es también considerada como un sistema complejo
conformado por elementos como conocimientos, tradiciones, prácticas y creencias, los cuales se estructuran organizadamente a través de sus propios agentes conocedores (especialistas terapeutas, parteras, promotores, sobadores). Éstos poseen un método propio de diagnóstico y tratamiento; así como recursos terapéuticos propios, los cuales son reconocidos como las plantas medicinales (Organización Panamericana de la Salud, 2006). Las plantas medicinales han significado a través de la historia una de las principales alternativas en el cuidado de la salud. El Perú, a pesar de ser un país megadiverso, no ha prestado mucha atención al desarrollo de la cadena de valor de las plantas medicinales. Algunos de los mayores desafíos al respecto son el registro adecuado de las plantas, la protección de la biodiversidad, la inversión en investigación, y la garantía de calidad y seguridad situaciones de salud, sea por problemas como costos excesivos, dificultades en el acceso o inobservancia de elementos culturales. Además los usuarios de la medicina convencional han sufrido experiencias no tan buenas al ser tratados como fichas y números de cama