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QUEBRANTANDO LA

MALDICIÓN DE LA
PARENTELA
QUEBRANTANDO LA MALDICIÓN DE LA
PARENTELA
Hay una influencia hereditaria que afecta nuestras vidas: es la
maldición de la parentela. Bíblicamente, lo que hicieron
nuestros padres, abuelos, bisabuelos y tatarabuelos tiene mucho
poder sobre nuestras vidas. Cuando aceptamos a Cristo,
necesitamos renunciar a todo lo negativo que se esté
manifestando en nuestras vidas, que podría ser una maldición
de nuestros abuelos.
QUEBRANTANDO LA MALDICIÓN
DE LA PARENTELA

Gén 12:1 Pero Jehová


había dicho a Abram: Vete
de tu tierra y de tu
parentela, y de la casa de
tu padre, a la tierra que te
mostraré.
QUEBRANTANDO LA MALDICIÓN DE LA PARENTELA
Deu 29:16 Porque vosotros sabéis cómo habitamos en la
tierra de Egipto, y cómo hemos pasado por en medio de las
naciones por las cuales habéis pasado;
Deu 29:17 y habéis visto sus
abominaciones y sus ídolos de madera y
piedra, de plata y oro, que tienen consigo.
Deu 29:18 No sea que haya entre
vosotros varón o mujer, o familia o tribu,
cuyo corazón se aparte hoy de Jehová
nuestro Dios, para ir a servir a los dioses
de esas naciones; no sea que haya en
medio de vosotros raíz que produzca
QUEBRANTANDO LA MALDICIÓN DE LA PARENTELA

Deu 5:7 No tendrás dioses ajenos delante de mí.


Deu 5:8 No harás para ti escultura, ni imagen
alguna de cosa que está arriba en los cielos, ni
abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la
tierra.
Deu 5:9 No te inclinarás a ellas ni las servirás;
porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que
visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta
la tercera y cuarta generación de los que me
aborrecen,
QUEBRANTANDO LA MALDICIÓN DE LA PARENTELA
Éxo 34:5 Y Jehová descendió en la nube, y
estuvo allí con él, proclamando el nombre de
Jehová.
Éxo 34:6 Y pasando Jehová por delante de
él, proclamó: ¡Jehová! ¡Jehová! fuerte,
misericordioso y piadoso; tardo para la ira, y
grande en misericordia y verdad;
Éxo 34:7 que guarda misericordia a millares,
que perdona la iniquidad, la rebelión y el
pecado, y que de ningún modo tendrá por
inocente al malvado; que visita la iniquidad
de los padres sobre los hijos y sobre los hijos
de los hijos, hasta la tercera y cuarta
generación.
USOS Y COSTUMBRES
USOS Y COSTUMBRES
La maldición de la parentela trae como consecuencia, pobreza, divorcio, pérdidas
económicas, enfermedades, familias conflictivas, descuido, dolor y enfermedad. Es
necesario que toda persona rendida a Cristo, renuncie a la maldición de sus
antepasados. Si no lo hace, cualquier maldición del pasado puede manifestarse en el
presente en su vida.
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QUEBRANTANDO LA MALDICIÓN DE LA PARENTELA

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