La Oración Devocional...

Una Vida de Intimidad.

Ministerio Pastoral.
Aprendiendo a depender de la Oración.

‘La Oración es para el alma lo que el alimento es

para el Cuerpo’
‘La Oración renueva y transforma nuestro espíritu a
la imagen de Dios’
Aprendiendo a depender de la Oración.

‘La Oración alinea nuestros pensamientos y

emociones con los deseos de Dios’
‘La Oración expande nuestra visión y nos ayuda a
pensar lo que Dios piensa’
Aprendiendo a depender de la Oración.

‘La Oración pone en perspectiva toda la vida y la

eternidad, por tanto es esencial’
La Oración Devocional...
Nos enfocaremos en la Oración Devocional, no en la Oración
de intercesión ni en la Oración como arma espiritual.

La Oración Devocional se centra en nuestro propio

crecimiento interior.

Recuerde que no podemos dar lo que no tenemos...

Jesús nuestro ejemplo:
Jesús oraba en cada momento crucial de su vida.

La Oración marcó su vida y la de sus seguidores. (Lucas 11:1)

En su Bautismo (Lucas 3:21)

Para escoger a los 12 (Lucas 6:12)

Antes de ser entregado (Lucas 22:44)

Durante su muerte (Lucas 23:34)

Durante la Transfiguración (9:28-29)

Jesús nuestro ejemplo:
Para Jesús la Oración era un estilo de vida y una
oportunidad, NO un deber.
La Oración refrescaba su alma, le daba dirección y
poder.
Si la Oración era importante para Jesús, ¿Cuánto más
importante es para nosotros hoy?
Dos principios acerca de la Oración:
1. La Oración es Comunión con el Señor.
Lo más importante es estar en la presencia de Dios, Adán gozaba de
esta comunión con Dios antes de la caída. Ellos andaban juntos por el
huerto al terminar el día hablaban como amigos.

Es fácil reemplazar nuestra relación con Dios, en ocasiones hasta con

el ministerio que se nos ha dado. Llegamos a ser como el hermano
mayor del hijo pródigo, sabemos del Padre pero no lo conocemos...
La Obra que hacemos para Dios es eternamente importante, pero
nunca es más importante que nuestra relación con Él…

En Lucas 10:38-42 vemos un relato que nos enseña esta verdad:

El trabajo de Marta era bueno, pero no era tan importante como estar
con Jesús.

Jesús le dijo a María que había escogido lo mejor al sentarse a sus

pies.

Jesús nos enseña que SER es más importante que HACER.

La relación está siempre antes que el ministerio.

2. La Oración nos ayuda a crecer y a llegar a ser como Dios quiere que
seamos.

La Oración hace que juzguemos nuestro propio corazón. (Jeremías 17:9)

La Oración hace que nos examinemos.

La Oración nos permite ver nuestras relaciones a la luz de la palabra.

(Podemos aprender mucho de nosotros mismos por la manera en que
nos relacionamos con los demás)

La Oración nos enseña a esperar.