• Conocido también como san Agustín, es un santo, padre
y doctor de la Iglesia católica. Después de su conversión, fue obispo de Hipona, al norte de África y lideró una serie de luchas contra las herejías de los maniqueos, los donatistas y el pelagianismo. • Retrato más antiguo conocido de San Agustín, en el Palacio De Letrán, Roma. • El “Doctor de la Gracia” fue el máximo pensador del cristianismo del primer milenio y, según Antonio Livi, uno de los más grandes genios de la humanidad. Autor prolífico,dedicó gran parte de su vida a escribir sobre filosofía y teología, siendo Confesiones y La ciudad de Dios sus obras más destacadas. • Manuscrito de La ciudad de Dios, de 1470. BIOGRAFÍA
• San Agustín nació el 13 de noviembre de 354 en Tagaste,
una antigua ciudad en el norte de África sobre la que se asienta la actual localidad argelina de Souk Ahras, situada entonces en Numidia, una de las provincias del Imperio romano. • Agustín murió en Hipona el 28 de agosto de 430 durante que los vándalos de Genserico sometieron la ciudad durante la invasión de la provincia romana de África. • San Agustín y santa Mónica (1846), por Ary Scheffer. CONVERSIÓN AL CRISTIANISMO • Fue en Milán donde se produjo la última etapa antes de la conversión de Agustín al cristianismo. Empezó a asistir las celebraciones litúrgicas del obispo Ambrosio, por medio de estos escritos y predicas se convirtió al cristianismo. • Entonces decidió romper definitivamente con el maniqueísmo. Esta noticia llenó de gozo a su madre, quien se encargó de buscarle un matrimonio acorde con su estado social y dirigirle hacia el bautismo. • Agustín es bautizado por el obispo Ambrosio. DOCTRINA
• Razón y fe :Agustín, predispuesto por la fe materna,
se aproxima al texto bíblico pero es su mente la que no consigue penetrar en su interior. Dicho en otras palabras, la fe no es suficiente para acceder a las profundidades de la revelación de las Escrituras. • A los diecinueve años, se pasó al racionalismo y rechazó la fe en nombre de la razón. Sin embargo, poco a poco fue cambiando de parecer hasta llegar a la conclusión de que razón y fe no están necesariamente en oposición, sino que su relación es de complementariedad. • La fe constituye una condición inicial y necesaria para penetrar en el misterio del cristianismo, pero no una condición final y suficiente. Es necesaria la razón. • Según él, la fe es un modo de pensar asintiendo, y si no existiese el pensamiento, no existiría la fe. Por eso la inteligencia es la recompensa de la fe. La fe y la razón son dos campos que necesitan ser equilibrados y complementados. • El Señor, con sus palabras y acciones, ha exhortado aquellos que ha llamado a la salvación a tener fe en primer lugar. Pero a continuación, hablando del don que debía dar a los creyentes, no dijo: «Esto es la vida eterna: que crean», sino: «Esto es la vida eterna: que te conozcan a ti, único Dios, y a aquel que tú has mandado, Jesucristo». Juan 17:3-”Agustin de Hipona”. CONCEPCIÓN DEL TIEMPO
• San Agustín expresa de manera paradójica la perplejidad
que le genera la noción de tiempo: «¿Qué es el tiempo? Si nadie me lo pregunta, lo sé. Sí debo explicarlo ya no lo sé». • A partir de esta perplejidad, ensaya una segunda reflexión ontológica sobre la naturaleza del tiempo y su relación con la eternidad. • El hecho que el Dios cristiano sea un Dios creador pero no creado se desprende que su naturaleza temporal es radicalmente distinta de la de sus criaturas. De acuerdo con la respuesta que dio a Moisés, Dios se define a sí mismo como: • Y dijo Dios a Moisés: «YO SOY EL QUE SOY», y añadió: «Así dirás a los Israelitas: “YO SOY me ha enviado a ustedes”».
• Éxodo 3:14 LA CIUDAD DE DIOS
• La ciudad de Dios es uno de los libros más
importantes del pensador. Es principalmente una obra teológica pero también de profunda filosofía, basado en refutar las acusaciones paganas de que la Iglesia y el cristianismo.