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Tipos de narrador

Objetivos de la presentación
Dar a conocer las características principales del
texto narrativo.

Conocer los tipos de narradores

Disfrutar con la lectura de diferentes textos


que ejemplifican los tipos de narrador.
El género narrativo se caracterizará por el
predominio de la dimensión representativa del
lenguaje, o sea, de la función referencial. Esto, porque
lo más importante de la obra narrativa es poner de
relevancia el mundo representado (acciones –
personajes – espacio).
Emisor
Mensaje Receptor
(narración):

“Cuando yo era un
niño, y habíamos
recién llegado a
Santigo, mi padre
me regaló esta
cámara...”

Contexto:
Chile en
Función
1925
referencial
El género narrativo tiene la particularidad de que describe los
hechos y sucesos en el orden que suceden, relacionándolos con
los lugares y circunstancias de la trama y la acción de los
personajes.
Este género, ubica al lector en el lugar, tiempo y circunstancias
en el que se desarrolla una historia, exponiendo los hechos
conforme suceden, o sea cronológicamente.
Acción, espacio y tiempo: otra característica de la
narración es que desarrolla una serie de acciones en un
tiempo y un espacio determinados.
tiempo

Mensaje
(narración):

“Cuando yo era un
niño, y habíamos
recién llegado a
Santigo, mi padre me
espacio regaló esta cámara...”

Acción
Personajes: dentro de un texto narrativo encontramos
personajes principales (protagonistas del conflicto) y
secundarios. Son construcciones de lenguaje, que
ejecutan o viven las acciones que son relatadas en la
narración.

Don Quijote & Sancho Panza


Estructura de la narración

• presentación de los personajes y el conflicto,


• nudo o desarrollo del problema,
• clímax y desenlace.

Esta estructura es la más habitual, pero hay


relatos que transgreden este orden y disponen de
manera creativa el desarrollo temporal de la
historia.
¿Qué o quién es el narrador?
En una narración, el autor le
“presta” la voz a una entidad
ficticia para que cuente la
historia.

La entidad ficticia es el


NARRADOR.
El narrador:

- Relata los hechos.


- Marca el tono de la narración.
- Ordena los hechos.
- Caracteriza a los personajes.
- Guía el transcurso de la narración.
- Es una entidad distinta al autor:
el narrador NO es el autor de u n
texto.
Según el grado de participación en l a historia

Narrador protagonista:
- Cuenta la historia en 1° persona.
- Forma parte de la narración participando de ésta
como
personaje principal.
- Conoce bien la historia porque participa en ella,
sin embargo, no conoce los sentimientos,
pensamientos ni emociones de los personajes.
“Ahora resulta que nos vamos a veranear a la costa y toda la
casa se vuelve maletas y mi mamá está tan confundida
que se le pierden las llaves a cada rato y nos reta a
nosotros. La Domitila no contesta cuando uno le habla y
todo el mundo arma una pelotera porque se rompe una
llave del lavatorio. Es una lata estar de viaje porque a uno
ni lo dejan salir ni hacer nada y lo echan de todas partes.
Uno se siente preso y claro que uno piensa en los presos y
cuando ve a su canario enjaulado claro que le abre la
puerta y el pobrecito se va. Y mi mamá arma otra pelotera
porque se fue el canario y eso que el canario es de uno”.

Papelucho, Marcela Paz.


Narrador testigo:
- Espectador de la historia principal.
- Personaje que asume la función de narrar.
- A diferencia del narrador protagonista, el narrador
testigo es un personaje secundario.
- Cuenta el conflicto central desde afuera porque
no participa de él, pero forma parte del relato
como personaje.
“Holmes llevaba varias horas sentado en silencio, con su
larga y delgada espalda doblada sobre un recipiente
químico en el que hervía un preparado particularmente
maloliente. Tenía la cabeza caída sobre el pecho y, desde
donde yo lo miraba, parecía un pajarraco larguirucho, con
plumaje gris mate y un copete negro.
- Y bien, Watson – dijo de repente –, ¿de modo que no
piensa usted invertir en valores sudafricanos?
Di un respingo de sorpresa. Aunque estaba acostumbrado a
las asombrosas facultades de Holmes, aquella repentina
intromisión en mis pensamientos más íntimos resultaba
completamente inexplicable”.

Sherlock Holmes – Sir Arthur Conan Doyle


Narrador omnisciente:
- No participa en la historia
- A pesar de no participar, conoce todo acerca de l a
historia.
- También se le conoce como el narrador que todo lo
sabe.
- Comenta las actuaciones de los personajes y cuenta
a los lectores.
- Conoce los pensamientos, sentimientos y estados
de ánimo de los personajes.
- Narra en 3° persona.
Estas palabras causaron una impresión terrible entre los animales que
la rodeaban. Algunos pájaros se apresuraron a levantar el vuelo. Una
vieja urraca se acurrucó bien entre sus plumas, mientras
murmuraba: «No tengo más remedio que irme a casa; el frío de la
noche no le sienta bien a mi garganta». Y un canario reunió a todos
sus pequeños, mientras les decía con una vocecita temblorosa:
«¡Vamos, queridos! ¡Es hora de que estéis todos en la cama!» Y así,
con distintos pretextos, todos se fueron de allí, y en unos segundos
Alicia se encontró completamente sola.
-¡Ojalá no hubiera hablado de Dina! -se dijo en tono melancólico-.
¡Aquí abajo, mi gata no parece gustarle a nadie, y sin embargo estoy
bien segura de que es la mejor gata del mundo! ¡Ay, mi Dina, mi
querida Dina! ¡Me pregunto si volveré a verte alguna vez!
Y la pobre Alicia se echó a llorar de nuevo, porque se sentía muy sola y
muy deprimida. Al poco rato, sin embargo, volvió a oír un ruidito de
pisadas a lo lejos y levantó la vista esperanzada, pensando que a lo
mejor el Ratón había cambiado de idea y volvía atrás para terminar
su historia.
Alicia en el país de las maravillas – Lewis Carroll
¿Qué aprendí?
La habitación contigua, en la que K entró más despacio de lo que
hubiera deseado, ofrecía, al menos a primera vista, un aspecto
muy parecido al de la noche anterior. Era la sala de estar de la
señora Grubach. Tal vez esa habitación repleta de muebles,
alfombras, objetos de porcelana y fotografías aparentaba esa
mañana tener un poco más de espacio libre que de costumbre, Narrador
aunque era algo que no se advertía al principio, como el cambio
principal, que consistía en la presencia de un hombre sentado al omnisciente: como su
lado de la ventana con un libro en las manos, del que, al entrar K, nombre lo señala, es
apartó la mirada.
aquel que conoce todo lo
–¡Tendría que haberse quedado en su habitación! ¿Acaso no se lo que sucede y lo que los
ha dicho Franz? personajes sienten y
–Sí, ¿qué quiere usted de mí? –preguntó K, que miró piensan.
alternativamente al nuevo desconocido y a la persona a la que
había llamado Franz, que ahora permanecía en la puerta. A través
de la ventana abierta pudo ver otra vez a la anciana que, con una
auténtica curiosidad senil, permanecía asomada con la firme En general está escrito
resolución de no perderse nada. en tercera persona: él,
–Quiero ver a la señora Grubach –dijo K, hizo un movimiento ella, ellos ellas.
como si quisiera desasirse de los dos hombres, que, sin embargo,
estaban situados lejos de él, y se dispuso a irse.

–No –dijo el hombre de la ventana, arrojó el libro sobre una


mesita y se levantó–. No puede irse, usted está detenido.

–Así parece –dijo K–. ¿Y por qué? –preguntó a continuación.

–No estamos autorizados a decírselo. Regrese a su habitación y


espere allí.
El proceso (Franz Kafka)
Apenas había dejado la adolescencia me fui a vivir a una
ciudad grande. Su centro —donde todo el mundo se movía
apurado entre casas muy altas— quedaba cerca de un río.
    Yo era acomodador de un teatro; pero fuera de allí lo mismo
corría de un lado para otro; parecía un ratón debajo de
 Narrador muebles viejos. Iba a mis lugares preferidos como si entrara en
protagonista: es agujeros próximos y encontrara conexiones inesperadas.
Además, me daba placer imaginar todo lo que no conocía de
aquel que está aquella ciudad.
dentro de la     Mi turno en el teatro era el último de la tarde. Yo corría a
historia y participa mi camarín, lustraba mis botones dorados y calzaba mi frac
verde sobre chaleco y pantalones grises; enseguida me
de ella como colocaba en el pasillo izquierdo de la platea y alcanzaba a los
personaje caballeros tomándoles el número; pero eran las damas las que
principal, primero seguían mis pasos cuando yo los apagaba en la
alfombra roja. Al detenerme extendía la mano y hacía un
asumiendo la saludo en paso de minué. Siempre esperaba una propina
primera persona sorprendente, y sabía inclinar la cabeza con respeto y
desprecio. No importaba que ellos no sospecharan todo lo
al narrar sus superior que era yo.
propias acciones.     Ahora yo me sentía como un solterón de flor en el ojal que
estuviera de vuelta de muchas cosas; y era feliz viendo damas
en trajes diversos; y confusiones en el instante de encenderse
el escenario y quedar en penumbra la platea. Después yo
corría a contar las propinas, y por último salía a registrar la
ciudad.
   
El acomodador (Felisberto Hernández)
Narrador testigo:
Lo que son las cosas, Mauricio Silva, llamado el Ojo, siempre
es aquel que está intentó escapar de la violencia aun a riesgo de ser considerado
inserto en el relato y un cobarde, pero de la violencia, de la verdadera violencia, no se
puede escapar, al menos no nosotros, los nacidos en
observa los sucesos, Latinoamérica en la década del cincuenta, los que rondábamos
por lo tanto, no los veinte años cuando murió Salvador Allende.
conoce todo acerca El caso del Ojo es paradigmático y ejemplar y tal vez no sea
ocioso volver a recordarlo, sobre todo cuando ya han pasado
de los personajes, tantos años.
sino solamente lo En enero de 1974, cuatro meses después del golpe de Estado, el
Ojo Silva se marchó de Chile. Primero estuvo en Buenos Aires,
que ve. A diferencia luego los malos vientos que soplaban en la vecina república lo
del narrador llevaron a México en donde vivió un par de años y en donde lo
protagonista, el conocí.
No era como la mayoría de los chilenos que por entonces vivían
testigo no cuenta sus en el D.F.: no se vanagloriaba de haber participado en una
propias acciones, resistencia más fantasmal que real, no frecuentaba los círculos
sino las de otro, por de exiliados.
Nos hicimos amigos y solíamos encontrarnos una vez a la
eso, aunque está semana, por lo menos, en el café La Habana, de Bucareli, o en
narrado desde una mi casa de la calle Versalles en donde yo vivía con mi madre y
con mi hermana. Los primeros meses el Ojo Silva sobrevivió a
primera persona, base de tareas esporádicas y precarias, luego consiguió trabajo
utiliza la tercera como fotógrafo de un periódico del D.F. No recuerdo qué
persona para narrar periódico era, tal vez El Sol, si alguna vez existió en México un
periódico de ese nombre, tal vez El Universal; yo hubiera
la historia de la que preferido que fuera El Nacional, cuyo suplemento cultural dirigía
también forma parte. el viejo poeta español Juan Rejano, pero en El Nacional no fue
porque yo trabajé allí y nunca vi al Ojo en la redacción.

El Ojo Silva (Roberto Bolaño)

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