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Ontología Del Lenguaje
Ontología Del Lenguaje
Lenguaje
Surgimiento del Lenguaje
Homínidos que vivían en pequeños grupos que eran
recolectores y cazadores ocasionales (bípedos, hembras con
mayor amplitud de caderas)
Machos y hembras estaban unidos por el desarrollo de la
sexualidad permanente
La cría humana permanecía con el grupo más tiempo
El macho participaba en la crianza de los hijos
Se producen acciones recurrentes, lo que da origen a la
coordinación de comportamiento
El operar recursivo del lenguaje da origen a lo “mental”
Lenguaje y Transformación
El alfabeto crea las condiciones a partir de las cuales se
genera un tipo de ser humano: el hombre y la mujer
occidentales
Origina cambios fundamentales: la transformación de la
manera en que las personas piensan sobre ellas mismas y
sobre el mundo
Hay un desplazamiento de un lenguaje de la acción a uno
de las ideas
Se transita de un lenguaje del devenir a un lenguaje del ser:
surge el pensamiento racional, la filosofía, luego el
pensamiento científico y la lógica, y que la razón es la
clave para llegar a conocer el ser de las cosas
Surge la idea de que lo que nos hace humanos es la razón
El ser se concibe como único, inmutable, aparece la noción de
“conocer nuestro verdadero ser”
El lenguaje se concibe sólo como un medio para describir
La prensa escrita permite el desarrollo de la privacidad y la
expansión del amor romántico
Un nuevo panorama histórico
La declaración de gratitud
“Gracias” es una palabra con gran poder generativo: cuando
agradecemos no sólo estamos indicando que se ha cumplido un
compromiso sino que establece un tipo de relación con esa
persona. Al hacerlo nos estamos haciendo cargo del otro y
reconocemos lo que hizo y demostramos nuestro aprecio. No
agradecer genera resentimiento.
La declaración de amor
El decir “te quiero” o no decirlo no es indiferente a la relación que se construye con
el otro. Decirlo forma parte de la creación de un mundo compartido. Aquí la
diferencia la percibe el que escucha esta declaración.
La declaración de perdón
Es lo opuesto a la declaración de gratitud, y la manifestamos cuando no
cumplimos con aquello a que nos hemos comprometido, o cuando nuestras
acciones hacen daño a otros, sin que nos lo propusiéramos. Decir “perdón” es la
forma de asumir responsabilidad sobre eso.
Decir “perdón” no es lo mismo que decir “te pido perdón”. En este último caso,
estamos “pidiendo” algo que depende del otro. Cuando no se nos “pide perdón”,
nos sentimos víctimas de una injusticia y nos volvemos resentidos. Al caer en el
resentimiento una persona se pone en una posición de dependencia con respecto a
quien uno hace responsable, se hace esclavo de quien culpa. Esto socava nuestra
felicidad y, sobre todo, nuestra libertad como personas. Perdonar es un acto
declarativo de liberación personal.
El perdonar se suele relacionar con el olvido, pero olvidar es algo
que no se puede resolver por medio de una declaración porque no
depende enteramente de nuestra voluntad. Una persona no se puede
obligar a olvidar, como no puede hacer que el otro olvide. El
perdón, por el contrario, es una acción que está en nuestras manos.
El perdonarse a sí mismo es otro tipo de relación, donde la persona
asume tanto el papel de víctima como de victimario. El perdón a sí
mismo tiene igual efecto liberador, y hacerlo es una manifestación
de amor a sí mismo y a la vida.
Sobre Promesas, Peticiones y
Ofertas
Las promesas son aquellos actos lingüísticos que nos permiten
coordinar acciones con otro
Implican un compromiso manifiesto mutuo, que es personal y social
a la vez
El acto de hacer una promesa comprende cuatro elementos
fundamentales
Un orador
Un oyente
Una acción a llevar a cabo
Un factor tiempo
Las promesa requiere que al menos dos personas estén
actuando juntas
La promesa implica dos procesos: el de formularla y el
de cumplirla. Este último no es necesariamente
lingüístico
Para que el primer proceso se complete debe haber una
aceptación por parte del oyente
El cumplimiento de una promesa sólo se completa cuando
se cumple con las condiciones de satisfacción
Para llegar al consentimiento mutuo se puede proceder a
través de dos acciones diferentes: las peticiones y las
ofertas
El proceso de hacer una promesa puede iniciarse con una
petición (¿Me puedes acompañar a la biblioteca mañana?), y
de ser aceptada debe ejecutarse por el oyente
Si el proceso de inicia con una oferta (¿Quieres que te
acompañe a la biblioteca mañana?), de ser aceptada debe
ejecutarse por el orador
Las peticiones son movimientos lingüísticos para obtener una
promesa del oyente
La declaración de aceptación a una petición completa la
acción de hacer la promesa
Las preguntas son un tipo de petición, donde la respuesta
incluye la aceptación y la satisfacción con las condiciones de
satisfacción requeridas.
Las ofertas son promesas condicionales que dependen de la
aceptación del oyente.
Las peticiones y las ofertas son movimientos de apertura para
obtener promesas
Hay personas que no piden ni ofrecen en determinados
dominios de sus vidas, otras que sabiendo hacerlo en algunos
dominios no lo hacen en otros, otras que no hacer ofertas, y
otras que creen hacer peticiones u ofertas que no suelen ser
escuchadas como tales
También pueden producirse problemas del lado del oyente de
una petición o una oferta (cuando no se sabe aceptar ofertas o
rechazar pedidos, por ejemplo)
Cuando hacemos una promesa nos comprometemos en dos
dominios: sinceridad y competencia
Cuando falta cualquiera de estos dos factores la confianza se
ve afectada
1. Afirmación
2. Declaración
4. Oferta+ declaración de aceptación
3. Promesa
5. Petición+ declaración de aceptación
LOS JUICIOS: UN CASO ESPECIAL DE
DECLARACIONES