AT E N C I Ó N

S Í N D R O M E D E D O W N
 ¿ Q U É E S L A AT E N C I Ó N ?
• La atención se puede definir como la capacidad de seleccionar y concentrarse en
los estímulos relevantes. Es decir, la atención es el proceso cognitivo que nos
permite orientarnos hacia los estímulos relevantes y procesarlos para responder
en consecuencia.
• La atención tiene capacidad de activar unos procesos cognitivos y de
inhibir otros, dependiendo de las demandas de la situación.
• En el caso de los niños (as) con síndrome de Down, les resulta más
fácil atender en circunstancias conocidas, rutinarias o habituales,
en las cuales reconocen la mayor parte de los indicadores ambientales
presentes. Las situaciones de aprendizaje bien estructuradas y
repetitivas les permiten centrar y mantener la atención con
mayor facilidad.
• La atención sufre modificaciones en diferentes momentos. Por
ejemplo, disminuye cuando comemos de manera abundante. El niño
(a) con síndrome de Down mantiene un grado de atención muy
distinto según el momento del día o el día de la semana. Por lo
general a primera hora del día suelen estar más atentos y es en
esos momentos cuando se deben introducir los aprendizajes más
COMPLEJOS y ya para las últimas horas de la mañana o para la
tarde es recomendable reservar las actividades más fáciles.
 D I S M I N U C I Ó N D E L A AT E N C I Ó N
• Las condiciones externas también influyen en el estado de concentración del niño con
síndrome de Down.
• La atención disminuye en tareas monótonas o repetitivas. En el caso de los niños
con síndrome de Down se produce ese mismo efecto, incluso ampliado por sus mayores
dificultades para centrarse en lo que hacen.
• Bien es cierto que son capaces de mantener con perseverancia su concentración en tareas
mecánicas,. En cuanto a la realización de actividades monótonas, como completar ejercicios
repetitivos, colorear de la misma forma, copiar largos textos, reducirá su capacidad de
motivación y de atención, por lo que es recomendable cambiar de tarea con frecuencia,
cuando se observe que su atención se va reduciendo significativamente.
E N T R E N A M I E N T O D E L A AT E N C I Ó N
• Programar actividades sencillas (traer objetos indicando color, forma, nombre del objeto, etc)
• Favorecer la motivación (colores fuertes, variadas texturas, diferente peso, etc).
• Intercalar actividades con elementos de interés (color, textura, gusto, algún dibujo animado,
etc)
• Al entregar una instrucción se debe:
• Posicionar frente a frente al niño (a).
• Insistir en el contacto visual antes de entregar la instrucción.
• Entregar una instrucción breve, directa, concisa, con palabras sencillas que comprenda.
• Dar una a una las diferentes instrucciones.
• No cambiar la instrucción hasta que el niño (a) realice en su totalidad lo instruido.
PA U TA S PA R A M E J O R A R L A AT E N C I Ó N

• Evitar en lo posible toda fuente de estimulación que no proceda del propio material
de trabajo.
• Estructurar al máximo las situaciones de aprendizaje y presentar la tarea que ha de
realizar de forma muy definida, de manera que sepa en todo momento lo que ha de
hacer y lo que se espera de él o ella.
• La confección de paneles visuales con los horarios del niño (a), en los que quede
claramente especificada la actividad que ha de realizar en cada momento.
• Hacer comprender al niño cuáles son los estímulos importantes.
PA U TA S PA R A M E J O R A R L A AT E N C I Ó N

• Se puede también aumentar la intensidad de los estímulos significativos para

atraer visualmente la atención del niño.
• Facilitarle material altamente estimulante y atractivo.
• La duración de las tareas debe ser corta
• Supervisar con bastante frecuencia el trabajo para orientar al alumno (a) y
centrarlo en la tarea.
• Insertar breves momentos de descanso entre aquellas actividades que exijan una
fuerte concentración.