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personalidad: Grupo C.
Dra. Rosa Orrego – R2 -Psiquiatría.
Trastorno de personalidad
evitativa.
F60.6.
Muestran una extremada sensibilidad al rechazo, lo que puede llevarles a
una vida de aislamiento social.
A pesar de ser tímidas, no son asociales y expresan grandes deseos de
compañía, pero acostumbran a necesitar garantías sólidas de que serán
aceptadas sin crítica alguna.
Es frecuente referinse a ellas como individuos con complejo de inferioridad.
Epidemiología.
Psicoterapia:
El tratamiento psicoterapeútico depende de que el médico consiga una
alianza con los pacientes.
A medida que logra la confianza, debe adoptaar una actitud de
aceptación de los miedos del paciente (e especial, el miedo al rechazo)
El terapeuta incita al paciente a abrirse al mundo y asumir lo que percibe
como grandes riesgos de humillación, rechazo y fracaso.
Debe ser precavido cuando da instrucciones para ejercitar nuevas
habilidades sociales fuera del marco terapeútico; un fracaso puede
reforzar la siempre baja autoestima del paciente
La terapia de grupo puede ayudar a los pacientes a entender las
consecuencias de su sensibilidad al rechazo sobre sí mismos y sobre los
demás.
El entrenamiento asertivo o reafirmación personal es un procedimiento de
terapia conductuista que permite enseñar a los pacientes a expresar sus
necesidades abiertamente y a mejorar su autoestima.
Tratamiento farmacológico:
Se ha usado para el control de la ansiedad y la depresión cuando se
presentan asociadas al trastorno.
En algunos pacientes se han utilizado los antagonistas del receptor B-
adrenérgico, como el atenolol, para tratar la hiperactividad del sistema
nervioso autónomo, que tiende a ser alta, en especial cuando se
enfrentan a situaciones temidas.
Los serotoninérgicos pueden disminuir la sensibilidad al rechazo.
Teoricamente, los fármacos dopaminérgicos podrían favorecer un
comportamiento de búsqueda de novedades, pero el paciente debe
estar preparado psicológicamente para cualquier nueva experiencia que
se pueda derivar de su uso.
Trastorno de personalidad
dependiente.
F60.7
Subordinan sus propias necesidades a las de los demás.
Dejan que otros asuman su responsabilidad en las principales parcelas de
su vida.
Carecen de confianza en sí mismos y pueden sentirse incómodas cuando
están solas durante un período de tiempo que no sea breve.
Se ha denominado pasivo-dependiente.
Freud describió una dimensión oral-dependiente de la personalidad que
se caracterizaba por dependencia, pesimismo, miedo a la sexualidad,
desconfianza en sí mismo, pasividad, sugestionalidad y falta de
perseverancia; su descripción es similar a la categoría de Trastorno de
personalidad dependiente del DSM-5
Epidemiología
1- Psicoterapia.
Prevalencia: 2 – 8 %
Más común en hobres que en mujeres
Se diagnóstica con más frecuencia en niños mayores.
Suele aparecer más en los familiares de primer grado de las personas
afectadas que en la población general.
Pacientes suelen tener una historia previa caracterizada por una disciplina
muy rigurosa.
Diagnóstico
Comportamiento rígido, formal e inflexible.
Su afecto no esta embotado ni aplanado, aunque puede describirse
como restringido.
Carecen de espontaneidad.
Su estado de ánimo suele ser serio.
Pueden mostrarse ansiosos cuando pierden el control de la entrevista.
Sus respuestas a las preguntas son inusualmente detalladas.
Los mecanismos de defensa que utilizan son:
• La racionalización, * La formación reactiva.
• El aislamiento * La anulación.
• La intelectualización
Criterios diagnósticos – DSM- 5.
Personas preocupadas por las normas, las reglas, el orden, la limpieza, los
detalles, y por conseguir la perfección.
Estos rasgos explican la restricción global de su personalidad.
Insisten en que las reglas deben seguirse de manera rígida y son
incapaces de tolerar lo que consideran infracciones, por lo que carecen
de flexibilidad y son intolerantes.
Son capaces de realizar trabajos prolongados, sobre todo si son rutinarios y
no requieren cambios, a los que no pueden adaptarse.
Tienen muy limitadas sus habilidades interpersonales.
Son formales y serias, y a menudo, carecen de sentido del humor.
Se alejan de la gente, son incapaces de comprometerse e insisten en que
los demás se sometan a sus necesidades.
Estan discpuestas a complacer a quienes consideran más poderosos que
ellas, y pueden obedecer sus deseos de forma autoritaria.
Debido a su miedo a cometer errores, son indecisas y reflexionan mucho
tiempo antes de tomar una decisión.
Frecuente que tengan un trabajo estable, que estén casadas, pero tienen
pocos amigos.
Cualquier cosa que amenace con romper la rutina de sus vidas, o lo que
consideran su estabilidad, puede desencadenar una fuerte ansiedad,
estrechamente vinculada a los rituales que imponen a sus vidas y que
intentan imponer a los demás.
Diagnóstico Diferencial
Psicoterapia:
Criterio 3: Asumen que los demás son críticos con ellos y que Ies
desaprobarán. No se implican en actividades grupales a menos que haya
ofrecimientos de protección y apoyo repetidos y generosos. La intimidad
interpersonal es a menudo difícil, pero son capaces de establecer
relaciones íntimas cuando hay una seguridad de aceptación
incondicional. Pueden actuar con moderación, tienen dificultades para
hablar de sí mismos y se guardan sus sentimientos íntimos por temor a estar
expuestos, o a ser ridiculizados o avergonzados .
Criterio 4: Debido a que se preocupan de que se les critique o rechace en
las situaciones sociales, pueden tener un umbral notablemente bajo para
la detección de este tipo de reacciones. Si alguien muestra una ligera
desaprobación, o crítica, pueden sentirse muy lastimados. Ellos tienden a
ser tímidos, callados, inhibidos e "invisibles" a causa del temor de que
cualquier atención pueda ocasionar una situación degradante o de
rechazo. Creen que a nadie le importa lo que ellos dicen, o que Ies
"sentará mal", pueden no hablar nada en absoluto. Reaccionan
enérgicamente a las señales sutiles que son sugestivas de burla o mofa. A
pesar de su deseo de estar activas y que participar en la vida social,
tienen miedo de poner su bienestar en manos de los demás.
Criterio 5: Se inhiben en las situaciones interpersonales nuevas debido a
que se sienten inadecuados y a que tienen una autoestima baja.
Criterio 6: Creen que son socialmente ineptos, personalmente poco
atractivos o inferiores a los demás.
Criterio 7: Son extraordinariamente reacios a tomar riesgos personales o a
participar en cualquier actividad nueva, ya que podría resultar
embarazosa.
Tendencia a exagerar los peligros potenciales de las situaciones
ordinarias, y se someten a un estilo de vida restringido como consecuencia
de su necesidad de certeza y seguridad.