Titularidad de la acción penal

Se llega a determinar de dos maneras:

a. Por el principio dispositivo: El Código Procesal Penal y la Ley del Ministerio Público establecen que
corresponde al Ministerio Público el ejercicio de la persecución penal y la acción penal y, en consecuencia, a
ésta institución deben presentarse las denuncias o querellas de los hechos delictivos para que los investigue
y, una vez obtenidos los medios probatorios necesarios, debe presentarlas al órgano jurisdiccional pudiendo
el ofendido adherirse a la acción como acusador particular. Sin embargo, debe mencionarse la actuación del
particular afectado para iniciar cualquier juicio por delito de acción privada, según disponen los artículos 474
y siguientes del Código Procesal Penal.

b. Por el principio de oficiosidad o conocimiento de oficio: El Estado debe iniciar el proceso contra el
responsable de la comisión de un hecho delictivo a través del Ministerio Público y la acción penal pública.
Esto también lo puede hacer el órgano jurisdiccional cuando observa la comisión de un delito y procede a
ejecutar la acción penal.

El Código Procesal Penal y la Ley del Ministerio Público destacan la persecución penal contra infractores de
la ley, que investiga, recibió pruebas, presenta la denuncia o querella y persigue la acción penal.

Soluciones al proceso penal: desjudicialización:

La tendencia actual hacia el derecho procesal tiene como objetivo agilizar el proceso, garantizar los derechos
humanos, abolir las penas y aumentar la defensa financiera contra las comisiones criminales. Esta ley se
establece para resolver los casos de manera rápida y sencilla, utilizándose el principio de oralidad procesal
como una alternativa para evitar o anular la labor judicial excesiva de los abogados, el Ministerio Público y
los tribunales afines. El Código Procesal Penal, como lo señala Cezar Barrientos Pellicer, permite formas
procesales para agilizar el sistema judicial en casos previstos para multas penales, que pueden ser
curvilíneas con mecanismos de corta duración que involucran la intervención estatal para proteger a la
sociedad y los derechos individuales.

En consecuencia, formas alternativas de solución de conflictos penales extrajudicialmente, estas son:

a. El criterio de oportunidad, El Ministerio Publico es enfrentado por dificultades penales, ya que el interés
público y la seguridad ciudadana deben ser amenazadas, y el Código Procesal Penal establece el
consentimiento del agravado y autorización judicial para evitar el ejercicio de la acción penal.

b. La mediación, permite que partes de común acuerdo de delitos de instancia particular o privada someter
sus conflictos penales a los centros de conciliación o medición autorizados por la Corte Suprema de Justicia.

c. La conversión, otorgada por la ley al Ministerio Público, transforma la acción pública en acción privada
cuando el delito tiene bajo impacto social y el pego de los daños ocasionados es suficiente y satisfactorio.