Está en la página 1de 3

VI

Tonterías

Pablo y Marianela salieron al campo, precedidos de Choto, que iba y volvía gozoso y saltón,
moviendo la cola y repartiendo por igual sus caricias entre su amo y el lazarillo de su amo.
- Nela -dijo Pablo-, hoy está el día muy hermoso. El aire que corre es suave y fresco, y el sol
calienta sin quemar. ¿A dónde vamos?
- Echaremos por estos prados adelante -replicó la Nela, metiendo su mano en una de las
faltriqueras de la americana del mancebo-. ¿A ver qué me has traído hoy?
-Busca bien y encontrarás algo -dijo Pablo riendo.
- ¡Ah, Madre de Dios! Chocolate crudo... ¡y poco que me gusta el chocolate crudo!... nueces...
una cosa envuelta en un papel... ¿qué es? ¡Ah! ¡Madre de Dios!, un dulce... ¡Dios Divino!, ¡pues
a fe que me gusta poco el dulce! ¡Qué rico está! En mi casa no se ven nunca estas comidas
ricas, Pablo. Nosotros no gastamos lujo en el comer. Verdad que no lo gastamos tampoco en el
vestir. Total, no lo gastamos en nada.
- ¿A dónde vamos hoy? -repitió el ciego.
-A donde quieras, niño de mi corazón -repuso la Nela, comiéndose el dulce y arrojando el
papel que lo envolvía-. Pide por esa boca, rey del mundo.

Los negros ojuelos de la Nela brillaban de contento, y su cara de avecilla graciosa y vivaracha
multiplicaba sus medios de expresión, moviéndose sin cesar. Mirándola se creía ver un
relampagueo de reflejos temblorosos, como los que produce la luz sobre la superficie del agua
agitada. Aquella débil criatura, en la cual parecía que el alma estaba como prensada y
constreñida dentro de un cuerpo miserable, se ensanchaba y crecía maravillosamente al
hallarse sola con su amo y amigo. Junto a él tenía espontaneidad, agudeza, sensibilidad, gracia,
donosura, fantasía. Al separarse, parece que se cerraban sobre ella las negras puertas de una
prisión.

Marianela
Benito Pérez Galdós

Argumento
Marianela, la niña huérfana, vive excluida de la sociedad y es tratada como un animal
por la familia con la que vive. Pasa la mayor parte del tiempo con Pablo Penáguilas,
quien no la juzga por su apariencia, ya que es ciego. De ahí nace una conexión muy
íntima entre ambos personajes.
Teodoro Golfín, médico de mundo que llega a las minas para visitar a su hermano, se
ofrece para intentar devolver la vista a Pablo.
La familia afgana que se ha hartado de que su vida
discurra en una litera
Un matrimonio con tres hijos refugiados desde hace ocho meses en España
ha pedido volver, cansado de las condiciones en las que viven sin
vislumbrar un futuro que no llega. A otros refugiados les ocurre lo mismo

Khodabakhsh Amini y Anjila Hamidi, junto a sus hijos, el martes en Los Alcázares (Murcia).
ALFONSO DURÁN

MARÍA MARTÍN
Los Alcázares (Murcia) - 08 ENE 2023 - 05:40 CET

Anjila Hamidi escapó de Afganistán con 33 años y embarazada de seis meses. Era abril
de 2022, habían pasado ya ocho meses desde que los talibanes habían tomado el poder
y obligado a huir a decenas de miles de personas, especialmente mujeres y
colaboradores de países extranjeros. Ella y su marido, los dos fiscales, estaban incluidos
en la lista negra del nuevo régimen. Vendieron todo lo que tenían de valor y atravesaron
la frontera de Irán en su coche. Ya no había marcha atrás. El 20 de junio, el matrimonio
y sus dos hijos de dos y siete años aterrizaron en Barajas gracias a un salvoconducto que
les facilitó la embajada española. Anjila sabía que lo que tenía por delante no iba a ser
fácil, pero nunca se imaginó que las condiciones de su acogida en España iban a
empujarla, ocho meses después, a pedir formalmente que les devuelvan a su país.

Durante este tiempo en España ha nacido el pequeño Kasra, pero la familia está muy
lejos de celebrar su nueva vida. Los cinco viven en precario, sin hablar español, sin un
euro en el bolsillo, sin colegio para los niños… Pasaron los primeros cuatro meses en un
hostal a las afueras de Madrid convertido en centro de acogida de emergencia y cuando,
por fin, los trasladaron de allí en noviembre, fue para acabar en otra habitación sin baño
en un albergue en Los Alcázares (Murcia). En contra de lo que marca la propia norma
del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Anjila y los suyos han
pasado, entre un albergue y otro, más de medio año en una fase de acogida de
emergencia, cuando esta etapa no debería sobrepasar un mes. Su historia no refleja la
realidad de todo el sistema de recepción de refugiados, pero sí destapa fallos, retrasos y
carencias recurrentes.
Comentario de texto lingüístico

1º ¿Qué son los textos narrativos?, ¿qué tipo de narración sería, literaria o no literaria?

2º ¿Qué tres elementos definen al texto narrativo?, ¿quién es el narrador?, ¿qué tipo de
narrador aparece en el texto?

3º ¿Qué es la acción?, ¿qué hechos acontecen en el fragmento?, ¿en qué orden se exponen?

4º ¿Qué son los personajes?, ¿qué personajes/personas aparecen en este texto?

5º ¿Cómo se suele organizar el contenido de un texto narrativo? ¿a qué parte de la narración


dirías que pertenece el fragmento?

6º Localiza y comenta de forma razonada dos ejemplos de modalidades textuales que se


empleen en el fragmento de Marianela.

7º Comenta los rasgos lingüísticos propios del texto narrativo que se observen el fragmento.
(Verbos, marcadores textuales, estilo directo/ indirecto)

8º Comenta todo lo que sepas sobre la renovación del léxico de la lengua. Busca las palabras
destacadas en negrita en el diccionario y explica si se trata de arcaísmos o neologismos.

9º Analiza sintácticamente las oraciones subrayadas.

También podría gustarte